La castaña observaba la escena con enorme curiosidad; allí, delante de ella, estaba Erwin encogido en su asiento, mirando como su teléfono sonaba con insistencia… Pero este no lo había tomado para poder contestar la terca llamada, solo estaba alejado de ese infernal objeto.
Una vez que este dejo de sonar, vio como el otro se relajaba.
_ ¿Puedo saber que está pasando?_ pregunto interesada, dejando una carpeta de volumen considerable sobre el escritorio del mayor.
_… Y-Yo…_ Hanji le miro perpleja; era la primera vez que el rubio estaba tan nervioso en su vida_... Y-Yo… He cometido un pecado capital_
_ ¿Pecado capital?_ dijo divertida, acercándose a este para ver lo notoriamente estresado que estaba, mientras miraba el aparato negro. La mujer miro el mismo objeto, viendo como este tenía una notificación en su pantalla_ No creo que sea tan gra-…_ sus palabras se atoraron, tragando en seco al ver lo que este presentaba; en la pantalla parecía una imagen de el enano sobre el nombre de este, y en unas palabras llamativas, aparecía que el dueño el teléfono tenía cinco llamadas perdidas del Ackerman_... Esto es serio…_ admitió seria, mirando al rubio_ ¿Qué hiciste?_ pregunto realmente preocupada, viendo como el mayor mordía una de sus uñas, pero sin quebrarla.
_ Yo… Le pedí a Levi que acompañara a Nanaba a su clase de gimnasia…_ le respondió, viendo como esta le miraba insistente.
_ ¿Y el acepto?_ pregunto intranquila, viendo como el otro asentía_ ¿Y cuál es el problema? Solo debe verla y-_
_ Es Jueves de Integración, Hanji_ le confeso nervioso, mirándola con pena_ Y-Yo… Me olvide y… Él fue sin saberlo_
Nuevamente, el teléfono hizo sobresaltar al rubio, notando como la sexta llamada del azabache se hacía presente.
_ Erwin…_ la castaña le miro con un aura oscura_... Que los dioses se apiaden de tu alma_
_ Oxigenado de mierda_ gruño realmente molesto, apretando el teléfono en sus manos mientras sentía la típica voz que le indicaba que el teléfono al que intentaba marcar estaba apagado o fuera de servicio, ofreciéndole dejar un mensaje de voz. Corto la llamada y vio su vestimenta por el espejo del baño; una camiseta blanca junto a unos shorts negros, ambos ajustándose a su cuerpo agradablemente. Unos golpes en la puerta lo alertaron de inmediato.
_ ¿Señor Levi?_ la voz dulce del mocoso le hizo tranquilizarse_ ¿Esta bien? ¿La ropa le queda bien?_ el castaño se alejó de la puerta al ver que esta se abría, dejando ver al azabache con la ropa puesta_ Oh, se ve bien_ le alago amable, dándole la espalda y encaminándose hacia el grupo de gente que estaba parada, tanto niños como adultos. Sintió que su mano era jalada hacia atrás, mirando algo confuso al hombre más bajo que le había tirado un poco para llamar su atención.
_ Espera un segundo, mocoso_ los ojos aguamarina vieron como el entrecejo del mayor se fruncía en molestia_ Es la primera vez que entro aquí, no tengo la más remota idea de lo que va a suceder_ soltó la mano el más alto al ver con atención al chico.
El mocoso, a pesar de ser menor, le superaba por varios centímetros de altura. Su figura era esbelta, torso suavemente marcado cubierto por una camiseta de mangas de tirantes negra, dejando ver brazos largos con textura suave. Sus piernas eran largas y torneadas, siendo atrapadas por una malla que marcaba cada curva y musculo de estas, dándole un verdadero espectáculo al de mirada grisácea.
Ese chico tenía lo suyo.
_ No se preocupe_ le intento tranquilizar de forma amable_ Para los niños, será su típica rutina de entrenamiento_ le aclaro, señalando distintos dispositivos de ejercicio de la disciplina_ Los adultos, pueden intentar usar los dispositivos, bajo nuestra supervisión claro esta_ dijo señalando al rubio de cabellera larga que ya había comenzado con la clase, ayudado a varios adultos que lograban algunas de la disciplinas_ Pero solo será por media clase, en la otra mitad, tendrán una clase de yoga como agradecimiento; sabemos que varios de ustedes poseen estresantes horas de trabajo, y por lo menos intentaremos sacar parte de esa tensión mediante ella_ le explico de forma amable, tomándolo del brazo con suma confianza, llevándolo hacia el grupo que le esperaban.
Varios de la muchedumbre reconocieron al bajo hombre, mirando con terror como este era arrastrado por el joven entrenador sin que este mostrara una sola mueca de molestia.
_ Señor Levi_ le llamo la rubia que vio cómo su profesor le traía del brazo_ ¿Va a entrenar conmigo?_ pregunto consuma inocencia.
El aludido le miro incomodo, volteando a ver al castaño que le miraba intensamente, tratando de incentivarlo a intentarlo. Este suspiro rendido.
_ No tengo de otra_ respondió desganado, haciendo que el más alto le dé un par de golpecitos en la espalda, demostrando su alegría ante su decisión.
_ ¡Buena decisión Señor Levi!_ le alago el chico, soltándolo y caminando hacia el frente del grupo_ ¡Comencemos!_
Sus posaderas cayeron cómodamente sobre el suelo acolchado, soltando un suspiro luego de peinar sus húmedos cabellos hacia atrás. Había demostrado no estar tan mal en su forma física para solo salir a correr algunos días a la semana. Solo había demostrado ser bueno con sus brazos, demostrándolo con un par de cuerdas que habían colgadas del techo, con dos aros al final de estas. Solo se dedicó a hacer flexiones de brazos con estos, subiendo y bajando su cuerpo con la fuerza que le proporcionaban estos. El castaño lo había ida a revisar un par de veces, levantando su pulgar y guiñándole un ojo, demostrando que no lo estaba haciendo tan mal.
Por suerte habían varias pesas y maquinaria de ejercicios diferentes en ese lugar; ya que no pensaba hacer ninguna de las cosas que sus ojos le ofrecían.
Los mocosos parecían simios sobre esas estructuras para gimnasia artística, y la más dotada parecía ser la mocosa rubia que debía cuidar. Demostraba tener movimientos gráciles y exactos, no solo en los obstáculos, sino también sobre el suelo; haciendo una coreografía con movimientos acrobáticos y gimnásticos, de forma fluida.
Ahora entendía porque Erwin intentaba ir todas las veces que podía para acompañar a la mocosa de su cuñada; realmente lo hacía bien, demostrando flexión y elasticidad en su cuerpo.
_ Muy bien chicos_ les llamo el castaño a los niños, que le miraron con real entusiasmo_ Descansen unos minutos, luego volverán y seguirán con el entrenamiento_ les indico de forma amable, haciendo que todos los menores caminaran hacia un lugar apartado y se sentaran a descansar_ Y ustedes_ ahora dedicándose a los adultos_ Todos a una distancia prudente uno de los otro, luego de cinco minutos, comenzaremos con la yoga _
El mayor ni se movió de su lugar, dejo que todos los otros se acomodaran en su entorno. Sintió algo frio sobre su mejilla, mirando con el entrecejo fruncido hacia el emisor de esa sensación, a pesar de ser agradable por el reciente ejercicio. Observo como el castaño le tendía una botella de agua, regalándole una sonrisa.
_ Lo hizo muy bien para ser su primer día aquí, Señor Levi _ le alago, agachándose a su altura.
_ Corro algunas veces, algo diferente a eso no me matara_ observo como el otro entrenador repartía botellas de agua a todos los adultos, terminando con una persona una filas más atrás de él_ Realmente… Consienten a sus clientes_
_ Todos son importantes aquí_ le respondió amable, mirando a los niños que jugaban entre ellos o simplemente se quedaban sentados en sus lugares_ Todos tienen el potencial que deseen, solo deben confiar en sí mismos… Y por eso, nos gusta tratarlos de la mejor manera posible_ dijo divertido, levantándose de su lugar y dirigiéndose hacia el rubio, comenzando a charlar con este.
Levi miro al castaño con tranquilidad, tomando de la gélida agua que este le había dado.
Debía admitir que ese castaño le llamaba la atención.
Cuando este caminaba, podía notar como los músculos de sus piernas se hacían presentes, demostrando tener unas curvas bien marcadas, pero sin exagerar ni parecer desagradable. Al igual que con sus brazos, que cuando le vio levantando a uno de los niños con sus brazos, sus músculos se hicieron notar de inmediato.
No se dio cuenta cuando todos ya estaban en posición, dejándolo únicamente a él en el suelo; sin mucho entusiasmo, se levantó.
_ Muy bien gente_ les llamo la atención el castaño, colocándose delante de todos los adultos_ Oh, estoy viendo rostros nuevos_ dijo cordial posando su mirada en el azabache y en varios adultos más_ Voy a presentarme, aunque ya me conozcan_ dijo risueño, posando elegantemente pero sin ser engreído_ Mi nombre es Eren Jaeger y soy profesor de Gimnasia Artística, Yoga y en ocasiones, de Natación_
_ “Este tipo hace de todo”_ se dijo mentalmente afilando su mirada para mirar al de mirada aguamarina con atención.
_ Comencé a los doce con esta disciplina, la igual que piano y violín; destacándome por tener un cuerpo… Demasiado elástico_ lo dijo con un toque de gracia, haciendo reír a varios en la sala_ Me disciplinaron en gimnasia, tanto masculina como femenina, por mi elasticidad; y gracias a eso, pude crear una clase unisex para niños y adolescentes, pudiendo entrenarlos tanto en el potro con arcos_ señalo el menciono instrumento, mostrando un aparato con lomo elevado, que sobre el que están ensamblados dos arcos transversales_ O la barra de equilibrio_ señalo ahora una barra bastante larga y no tan delgada a un metro aproximadamente de altura, donde antes habían visto a las niñas tratando de mantener el equilibrio y hacer movimientos de danza y acrobáticos_ Claro que tenemos conciencia de su corta edad, por lo que no les exigimos tanto; medida que avancen, las dificultades serán mayores, pero siempre nos tendrán a nosotros para seguirles el paso_ finalizo con una sonrisa, haciendo que algunos cuchicheos comenzaran_ ¿Tienen alguna duda?_
_ ¿Has participado en ligas internacionales?_ se aventuró uno, haciendo que el chico se riera un poco.
_ Por ahora, he llegado a las nacionales; pero no he llegado tan lejos_ el azabache noto como el chico sonreía nervioso_ No estoy listo para semejante responsabilidad, aunque lo haga por disfrutar el deporte y diversión, las ligas internacionales están a un nivel demasiado superior para mí_ la mirada grisácea se estrechó al notar cierto toque entristecido en esa declaración.
_ “Lo debió haber intentado…”_ noto como el chico suspiraba y se volvía más serio_”… Pero le rechazaron”_
_ ¿Están listos?_ pregunto más alegre el joven, haciendo que todos asintieran_ Bien, vamos a comenzar_ el castaño junto sus pies estrechamente_ Comenzaremos con posiciones sencillas, y luego, intentaremos algo más complicado, ¿está bien?_ noto como todos le miraban atentos_ Unan sus piernas tanto como puedan_ Levi se sorprendió al escuchar la voz del chico, esta parecía haberse vuelto tan neutral y suave que rozaba lo celestial, observando como Eren estaba con sus hermosos pozos cerrados_ Unamos nuestras manos sobre nuestro pecho… Y cerremos nuestros ojos…_ les pidió. El Ackerman miro atento a su alrededor; todos parecían estar en sincronía con la voz del mocoso, siguiéndola, como si esta fuera la mejor cosa que les pudiera haber sucedido… Y no estaba tan lejos de esa realidad. Levi solo suspiro, y siguió las instrucciones, quedando con sus piernas y manos unidas_ Inspiremos muy hondo, inflemos nuestro pecho, y dejemos que nuestros pies se eleven suavemente ante esto_ el peli-negro solo podía seguir esa melodiosa voz, notando como había quedado de puntillas mientras retenía suavemente el aire en sus pulmones; increíblemente, sentía el cambio de energía sobre él, abrumándolo ante esto_ Y ahora, exhalemos_ pidió dulce el joven_ Dejando que nuestros pies… Regresen a tierra_ como lo supuso, siguió sus intuiciones, sintiéndose relajado_ Volvamos a hacerlo, está bien… Inhalen_ su cuerpo se movió autómata, inhalando tanto como pudo mientras sus pies se volvían a elevar_ Y… Exhalen_ volvió a tierra_ Esta postura, la montaña, nos da estabilidad interior y nos conecta con la tierra… Tomen conciencia de cada parte de tu cuerpo, cómo estás parado firmemente sobre la tierra y cómo esta te da solidez y vitalidad…_
Solo tenía oídos para esa voz entre la oscuridad de sus parpados, y sorprendentemente; ya no sentía su entrecejo fruncido… Este estaba completamente liso. Repitieron el procedimiento unas diez veces más aproximadamente, hasta que el menor les pidió que abrieran sus ojos suavemente.
Por un momento, solo se imaginó al castaño instruyéndolo y a él obedeciéndolo.
_ Cambiemos_ les indico con suavidad, mostrando como levantaba uno de sus pies, el izquierdo para ser exacto, y colocaba la planta de este en la parte interna de su muslo derecho_ Mantengamos el equilibrio con uno de nuestros pies… La postura del Árbol será nuestro desafío_ Levi inspiro hondo antes de imitarle, moviéndose con cuidado y viendo como formaba un triángulo entre la flexión de su pierna y su muslo. Por un segundo, perdió el equilibrio, moviéndose un poco antes de recobrarlo_ No se preocupe, Seños Levi_ se sobresaltó levemente al ver que esas gemas le miraban profundamente, con un brillo nuevo, uno de total tranquilidad_ Logara mantenerse cuando logre relajarse totalmente, no debe preocuparse_ la sonrisa del castaño le hizo logro su cometido; relajarle totalmente_ Y ahora… Alcemos nuestros brazos al cielo y unamos nuestras palmas cobre nuestra cabeza_ obedeció, notando como su cuerpo se estiraba totalmente, escuchando un par de sus vertebras tronar luego de lograr la postura_ Pueden entrelazar los dedos si desean, pero este no es nuestro objetivo… Y mantengan… La mirada fija… En frente_ el choque inevitable de plomo y esmeralda se logró, haciendo que se conectara de forma espiritual_ Y repitamos… Inhalen…_ sus pulmones se llenaros lentamente, sin perder de vista esos pozos atrayentes_... Y… Exhalen…_
Siguieron con la clase sin problemas, ni siquiera notaron cuando los niños habían comenzado con sus prácticas nuevamente; el ruido estaba totalmente distante… Solo tenían atención en el joven profesor de yoga que ahora les indicaba algo nuevo, pero sobre el suelo.
Y Levi lo había notado; si ese mocoso les pedía que se arrojaran desde la altura de un puente, lograría su cometido. Esa armoniosa melodía era tan profunda y dulce que lo había tomado totalmente desprevenido, haciendo que su interés por el mocoso incrementara.
Él nunca se había sentido realmente interesado en alguien, ni siquiera en lo carnal, donde había compartido algunas veces con un par de novias que había tenido, pero eso realmente no le había interesado en su totalidad, ya que su interés por estar al pendiente de otro ser humano era casi nula. Pero siquiera eso competía con lo que sucedía ahora. No solo era el cuerpo del mocoso, sino también su forma espiritual lo que ahora llamaba su atención; y ahora dudaba más que nunca de su sexualidad por culpa del engendro de ojos hermosos.
Ya habían logrado dos posturas más en pie, y ahora iban en la tercera en el suelo.
Su cuerpo le agradecía al idiota del oxigenado por haberlo traído a ese lugar, aunque claro que nunca se lo diría en voz alta.
Y había notado algo más… Ese mocoso tenía el cuerpo de un jodido gato.
Lograba doblar su cuerpo de forma grácil y asombrosa, demostrando no mentir en la denominación que le había dado. Levi vio con asombro como en una de las posiciones, exactamente en la llamada Torcedura Espina, el chico había cruzado en una forma extraña las piernas mientras giraba su torso de una forma casi irreal. Obviamente, él les había dicho que la hicieran de otra forma más fácil, llamándole la Media torcedura Espinal, pero él les demostraría cuál era su forma completa.
Ahora estaban en una posición un tanto… Comprometedora. Sus pies y manos estaban en el suelo, brazos y piernas totalmente estirados mientras que sus caderas estaban alzadas al aire, mientras su rostro estaba mirando sacia sus pies. Podía sentir sus músculos estirarse a un punto casi doloroso y la sangre alojarse en su cabeza, sintiendo todo su rostro caliente por eso.
_ Abran los dedos de su manos_ les indico el castaño, imitando la posición que debían hacer_ Si no pueden lograr la postura, no hay problema; la próxima será más fácil que esta_
_ Menos mal_ soltó de repente un adulto que se sentaba en su lugar observando al chico_ Así vas a matarnos muchacho, no todos tenemos tu edad ¿lo sabias?_ soltó, haciendo que varios se rieran por el divertido comentario.
_ Señor Pixis, no desconcentre a los demás_ le rogo el oji-esmeralda observando dese su posición al hombre calvo, pero no le reto. Ya que incluso al chico le divirtió el comentario_ Esta bien, paremos_ decidió el chico, haciendo que la mayoría suspiraran y se sentaran en el acolchado suelo de forma cansada_ Solo será una posición más y podrán retirarse, ¿está bien?_ todos asintieron.
Eren se acostó boca abajo, indicando que le acompañaran el esa posición.
_ La Cobra_ menciono de forma suave y tentadora, erizando la piel del azabache; ¿Acaso había cambiado drásticamente el tono de voz?... Había sonado… ¿Seductor quizás?_ Piernas juntas… Brazos flexionados… Con las manos a la altura de los hombros…_ nuevamente, la manipulante voz del joven logro que todos obedecieran, incluso el azabache que había quedado cara a cara con el castaño, a varios metros de distancia_ Levantemos las piernas, manteniendo los pies en el suelo… Nos apoyaremos con nuestros brazos_ logrando la posición, noto como sus brazos temblaron levemente, ya que sostenía todo su peso en estos_ Hombros relajados… Levanten la barbilla… Miremos parte del cielo…_ murmuro aterciopeladamente, logrando que todos le hicieran caso. Levi levanto su barbilla, sintiendo como un par de vértebras cervicales crujían ante eso; su cuello ahora estaba mucho más relajado que antes.
Sintió un escalofrío placentero recorrerlo de repente, bajando su mirada al sentirse observado. Noto esos enormes y llamativos ojos aguamarina observarlo penetrantemente, logrado que un pequeño jadeo escapara de sus labios al levantar un poco más su cuerpo para verlo mejor. Su espalda encorvada parecía la de un felino desperezándose luego de una siesta, mientras que su rostro terso y su piel ligeramente trigueña le daban el toque ideal; era realmente la musa perfecta.
El contacto se perdió luego de treinta segundos que le parecieron eternos.
_ Eso es todo_ mención el castaño, sentándose en flor de loto frente a los adultos con una hermosa sonrisa en su rostro_ Pueden ir por los niños ahora. Espero poder verles mañana cuando traigan a los niños nuevamente, y espero ansiosamente el próximo Jueves de Integración_ los adultos se despidieron del castaño con una efusiva sonrisa y se dirigieron junto al rubio para buscar a sus respectivos niños.
El azabache se levantó del suelo, estirándose un poco antes de que la niña rubia de corto cabello corriera a su lado.
_ Lo hizo muy bien Señor Levi_ le alago con una sonrisa la pequeña_ Lo estuve observando mucho_
_ ¿Ah sí?_ murmuro tranquilo revolviéndole la herbaras doradas a la menor.
_Claro que si_ se integró una tercera voz, haciendo que los dos voltearas hacia el castaño que se había acercado_ Por un momento pensé que se pararía y se iría, pero siguió en la clase hasta el final… Y para ser su primera clase, su desempeño fue fantástico_ los halagos del más alto inflaron el ego del Ackerman, haciendo que una media sonrisa apareciera en su rostro_ Note mucha tensión en usted, y escuche varias veces sus huesos tronar con el cambio de postura_ el azabache abrió los ojos ligeramente sorprendido; Jaeger estuvo al pendiente del todo el tiempo_ Debería visitar a un masajista o venir más seguido a Yoga Señor Levi, al igual que disminuir la horas de trabajo y eliminar las malas posturas de dormir y sentarse. Esas pequeñas cosas lograran en un futuro la comodidad que necesita_ Levi entreabrió su boca atónito, al igual que el rubio profesor que escucho la atrevida confesión de su amigo, esperando algún tipo de insulto por parte del mayor, pero este se quedó pensativo.
_ Lo… Estaré pensando_ le respondió el francés, sacando una hermosa sonrisa del castaño.
_ Fue un gusto Señor Levi_ le extendió la mano y este de inmediato correspondió_ Y no se preocupe por la ropa, puede conservarla_
_ Gracias, Eren_ dijo de forma profunda, tratando de intimidar un poco al menor; pero solo logro que las mejillas del profesor se tiñeran levemente de un tono carmín_ Hasta pronto_
_ Claro, Levi_ respondió, observando como el azabache y la rubia dejaban el lugar a paso lento.
_ ¿Estas lista?_ le pregunto de forma amable, haciendo que la niña observara sus cosas.
_ Creo que falta mi abrigo_ admitió, notando como su pequeña gabardina no se encontraba en ningún lado.
Levi se fijó en sus cosas, y era cierto; su abrigo también faltaba, debieron haberlos olvidado en el interior del lugar.
_ Quédate aquí, yo iré por las cosas_ le dijo tranquilo, dejándola en el salón de espera del local para ir por las cosas.
Se había dado cuenta que su entrecejo había desaparecido desde que habían comenzado con la yoga, al igual que la tensión y los dolores en hombros y espalda por el trabajo y el mal humor. Y también creyó que la influencia del alemán había ayudado notoriamente.
Se perdió un poco en los pasillos, intentando volver por sus pasos, pero fue casi inútil. El lugar era enorme, y Nanaba conocía el lugar mejor que él. Debió haberle pedido a la mocosa que le acompañara, pero realmente pensó que no sería tan difícil.
Y luego de varios minutos, dio con el lugar, sintiendo un silencio sepulcral en el interior del enorme salón. Abrió la puerta despacio, notando que si había gente en el interior. Se adentró de forma lenta y busco con la mirada a las personas que habían allí, encontrándose con el rubio llamado Armin, metido entre un pequeño grupo de gente de no más de diez personas. Conecto la mirada con el rubio más bajo, que lo miro sorprendido. Antes de que pudiera decir algo, el chico salió corriendo en su dirección y prácticamente lo empujó hacia afuera, cerrando la puerta y dejando a ambos afuera.
_ S-Señor Ackerman, ¿Q-Que hace aquí?_ el nerviosismo del chico era palpable a simple vista; no solo estaba sorprendido por haberlo visto, sino que también acababa de empujar al hombre más aterrador que haya visto, pero este no parecía enfadado ahora.
_ Me olvide del abrigo de la niña y el mío aquí, y vine a buscarlo_ contesto con simpleza, tratando de ingresar al lugar, pero Armin se lo negó con su cuerpo_ ¿Me vas a dejar entrar?_ cuestiono con leve molestia, frunciendo levemente su entrecejo.
_ A-Ahora no…_ la respuesta descoloca al más bajo.
_ ¿Qué? ¿Y por qué-?_
_ Eren_ interrumpió el rubio, dejando más confundido al azabache_ Él está por-_ y un ruido le hizo callar, girándose y viendo por el vidrio polarizado que había en la puerta, viendo que el castaño salía del baño con una ropa distinta. Ambos se quedaron quietos, viendo como el oji-esmeralda buscaba a su amigo y le llamaba por su nombre, pero este no quería ingresar. Vieron como este se cansó de llamarlo y haciea una seña, haciendo que una chica de cabellos castaños se dirigiera a un pequeño estéreo, dejándose escuchar una música instrumental donde predominaban los violines.
_ ¿Qué está pasando?_ murmuro el azabache observando como el alemán se acercaba a un pequeño balde que había en el suelo y esparcía lo que parecía ser talco sobre su manos_ ¿Qué va a hacer?_
_ Él va a entrenar un poco antes de irse a su casa_ le respondió el rubio, notando como su amigo se dirigía al grupo de gente, estrechando sus manos con un rubio de corto cabello y cuerpo fornido, dirigiéndose hacia uno de los instrumentos de gimnasia_ Quiere perfeccionar su técnica… con la Barra fija_
Levi afilo su mirada, viendo como Eren se dirigía hacia una enorme barra de dos metros y medio de largo y casi tres metros de altura, se sorprendió.
¿Qué se supone que tenía que hacerle mocoso en esa cosa?
No tardó mucho en descubrirlo. El rubio tomo de la cadera al oji-esmeralda, impulsándolo hacia arriba y ayudándolo a tomar entre sus manos la barra, que se dobló de manera peligrosa. El robusto hombre se alejó, siendo agradecido por el castaño, y comenzando a mecerse sobre esta. En menos de dos segundos, el chico estaba girando sobre la larga barra, mientras esta se movía con dirección al mocoso, que daba giros de trecientos ochenta grados, sin soltarla no un segundo.
Vio con asombro como el cuerpo de Jaeger comenzaba a tensar los músculos, mientras su impulso al bajar era mayor. El chico, al subir, soltó una de sus manos, girando en su propio eje cuando alcanzo el punto máximo de altura, y al empezar a bajar, volvió a tomarla con ambas manos, volviendo a girar alrededor de la barra. Se asombró, pero lo siguiente lo dejo aún más sorprendido. Su impulso era cada vez mayor, notándose en su rostro el esfuerzo que estaba haciendo, y el posible dolor de sus manos con el roce de la barra, a pesar de usar guantes. Y antes de subir, el chico soltó ambos manos.
Por un momento, el mismo se movió hacia adelante, como si Eren estuviera justo adelante y quisiera estirar sus manos para atrapar al chico que parecía que sus manos habían resbalado dela barra, y el chico iba a caer sobre él, aunque estuviera acolchado, suelo. Pero no.
Eren se abrió literalmente, dejando las piernas abiertas de forma asombrosa y los brazos un poco menos, como un felino cuando iba a impactar parada en el suelo. Pero el anterior impulso solo hizo que su cuerpo se moviera hacia atrás, y antes de caer, sus manos tomaron nuevamente la barra, haciéndole girar sobre esta con más velocidad.
¿Era posible tener tanta confianza para hacer ese tipo de cosas?
El mocoso debía estar realmente determinado y concentrado, sin olvidar la enorme confianza que aplicaba a sus habilidades.
Lo vio hacer varias cosas más, cada vez más arriesgadas y rápidas. Hasta que finalmente, se soltó, en pleno giro, comenzando a rotar sobre su propio eje unas cinco veces antes de caer al suelo de pie. Apenas se tambaleo, pero al lograr estabilidad, elevo sus brazos al aire.
Lo había logrado.
El enorme rubio le embistió de repente, gritando efusivamente, haciendo que el castaño se riera. El grupo de gente no se quedó atrás, todos ya se habían abalanzado contra el castaño, abrazándolo de forma alegre y victoriosa. Armin también festejo, dando un salto de alegría, siendo observado de reojo por el azabache.
Al parecer, esa gran barra era el enemigo natural del muchacho.
Unos sollozos provenientes de su acompañante le hicieron observarlo confundido.
_ E-Eren…_ sollozo, tratando de detener su llanto_... E-Eren perdió a una de las personas m-más importantes para el… E-En un evento nacional, hace ya muchos años_ Levi le miro con atención_ En su último giro… Sus manos resbalaron y c-cayó literalmente de cabeza, quebrándose el cuello y muriendo en el acto… Eren estaba allí, junto al entrenador, que era el p-padre de su amigo_ sus ojos se abrieron, girando a ver al castaño, que abrazaba fuertemente a la chica peli-negra que había confrontado al entrar al lugar, llorando desconsoladamente. No creyó ver el rostro de ese ángel quebrarse de esa manera, ya que el había demostrado ser un joven alegre y tranquilo, libre de algún tipo de pasado tan doloroso como ahora mostraba.
Soltó una media sonrisa, se dio la vuelta, y emprendió camino hacia la salida del lugar, haciendo que el rubio se sobresaltara.
_ E-Espere_ le detuvo el chico, sin tocarlo, solo con su voz_ ¿N-No se ira con su abrigo? E-Eren terminara en unos minutos y usted podrá-_
_ No_ dijo tranquilo_ Erwin o Mike podrán venir a buscarlos mañana, no es un buen momento para entrar allí_ opino certero, siguiendo su camino.
El camino de regreso fue más fácil de lo que creyó, encontrando a la niña adormilada, sentada en una de las sillas del lugar.
_ ¿Pudo encontrarlas Señor Levi?_ pregunto somnolienta la rubia, restregando sus manos en sus ojos para tratar de quitar el sueño.
_ No te preocupes, le diré a Mike que mañana podrán recoger los abrigos_ le tendió la mano a la niña y ella la tomo débilmente por culpa del cansancio. Caminaron hacia el auto y el azabache le ayudo con el cinturón nuevamente, y luego de poner en marcha el auto, un pensamiento amable cruzo por su cabeza; después de todo, la niña había sido la responsable de que su día se volviera más agradable que de costumbre_ Nanaba_ le llamo, haciendo que la rubia le mirara con atención_ ¿Quieres ir a comer a algún sitio que te guste?_
_ ¿Y si la rapto?_
_ Erwin, no exageres_ le reprendió la castaña, viendo como el rubio se estaba desesperando. Levi y Nanaba debieron haber llegado hace más de una hora, pero no había rastro de ambos. El Ackerman había apagado su celular, y Armin les aseguro que ellos ya habían salido del lugar, luego de que Hanji tuviera que llamar al local por insistencia del rubio.
_ No puedo evitarlo, no debí haberle pedido a Levi que cuidara a Nanaba, sabía que algo malo sucedería_ se quejó el mayor, caminando por toda la sala de su casa. Mike aun no había llegado, pero este podría llegar en cualquier momento; y Erwin era el único culpable de la desaparición de su hermana, ya que este le había pedido al Ackerman que le acompañara a su clase de gimnasia.
_ Debes calmarte, estoy segura de que Levi no le ha hecho nada_ le aseguro, sirviéndole el quinto te de manzanilla para intentar tranquilizarlo; pero estos parecían tener el efecto contrario en el rubio_ De cualquier modo, creo que Levi se descargara en ti, no en la niña_
_ No me importa, solo con que Nanaba esté bien, yo-_ se detuvo de inmediato al sentir un sonido en frente de su casa, un auto que reconocía lo suficientemente bien para tranquilizarlo levemente. Se mantuvo quieto con el corazón en su garganta, luego de sentir las puertas del mismo cerrarse, y unos pasos en el pasillo exterior. La puerta se abrió.
Se levantó de golpe del sillón, asustando a la castaña que casi deja caer el té de las manos, viéndolo casi correr hacia la puerta principal de la casa. Un quejido ahogado salió de sus labios al ver al azabache con la rubia en brazos, mientras esta dormitaba sobre su hombro, aferrada a la camiseta del más bajo.
No sabía que había sido más chocante; el hecho de que una “mocoso” este en los brazos de Levi, o que este tuviera el rostro tan sereno que parecía haber perdido años de edad ante la falta de su entrecejo fruncido.
_ L-Levi_ balbuceo el rubio, sin saber qué hacer, moviendo sus brazos como si se estuviera ahogando.
_ Erwin, solo cállate y dime donde está el cuarto de Nanaba_ susurro, dejando aún más atónito al rubio. El azabache giro sus ojos con fastidio, y busco solo el cuarto de la rubia, encontrándolo en poco tiempo y dejándola sobre la cama. Apenas esta toco el mullido lecho, se encogió, por lo que el mayor aprovecho y le tapo con una manta; no sin antes sacarle los zapatos. Revolvió un poco sus rubias hebras y salió de allí, sintiéndose raro por lo que acababa de hacer.
_ “Realmente debo estar afectado de la cabeza como para haber hecho esto”_
Apenas salió de la habitación, el rubio lo estaba encarando junto a la castaña, que ante el balbuceo de Erwin, fue hacia allí con verdadera preocupación.
_ ¿Enanin?_ pregunto cohibida, recibiendo un silenciamiento silbante del azabache. Levi los empujo hacia la sala, arrojándose a uno de los sillones sin cuidado.
_ Erwin_ le llamo el moreno, este se sobresaltó_ Yo-_
_ L-Levi, perdóname_ se disculpó, confundiendo al oji-gris_ Y-Yo… No recordé que hoy era Jueves de Integración, realmente lo olvide; de haberlo sabido, no te hubiera mandado_
_Erwin, esta-_
_ No, espera_ le detuvo el otro_ Realmente lo siento, sabía que no te gustaban los niños, y no quería que te molestaras aún más. Ya era demasiado que cuidaras a Nanaba por mi culpa, no quería que te sintieras incomodo allí. Puedo darte los días libres que pediste, tu solo dime cuantos quieres y así será. Tu sabes que-_
_ Oi, Erwin_ el callo el otro, deteniendo el atropellado dialogo del rubio que le miro apenado_ Esta bien, no pasa nada_
_..._
_..._
_... Espera… ¿Qué?_ esta era la castaña, mirando atónita que el moreno no había fruncido el entrecejo ni una sola vez, ¿y ahora no se molestaba porque Erwin lo había dejado con un grupo de gente, sabiendo que este era un ermitaño? Ese no podía ser Levi Ackerman.
_ Si, Hanji, no pasa nada_ por un momento, la chica pensó que sus lentes iban a quebrarse de la impresión. ¿No la había insultado? Ese no era Levi, debía ser un alíen o algo así.
Sintieron la puerta abrirse de repente, entrando el aclamado hermano de la rubia, haciendo que el de mirada índigo se desplomara sobre el sillón.
El efecto del excesivo té tranquilizando le había golpeado radicalmente al ver que nada malo había sucedido.
_ ¿Erwin?_ le llamo con preocupación el más alto, dejando sus cosas en la entrada y acercándose a su pareja, viéndolo totalmente dormido sobre el sofá_ ¿Se desmayó?_ le pregunto a la castaña, tocando la mejilla del rubio que no reaccionaba a su toque.
_ Oh, no, solo… Está cansado_ respondió algo nervioso la mujer, desordenando su cabellera castaña con nerviosismo.
El mayor suspiro y tomo en brazos a su pareja, desapareciendo por un pasillo y volviendo momentos después.
El choque entre plomo y miel no se hizo esperar.
_ Erwin me dijo que acompañaste a Nanaba_ hablo el veterinario, quedando de frente con el más bajo, extrañándose por la falta de algún gesto amargo en ese rostro de porcelana_ ¿Te causo problemas?_
_ No, es una niña respetuosa y tranquila_ respondió sereno, apoyando todo su peso en una pierna_ No causo ningún tipo de problemas_
_ Ya veo_ murmuro en un suspiro, sentándose en el sofá para frotarse la frente con cansancio_ Gracias por acompañarla, Levi_ le agradeció, notando como este la miraba tranquilo… Peligrosamente tranquilo.
_ La lleve a cenar y ya está durmiendo, no sabía dónde estaba su pijama así que no la cambie, solo le quite los zapatos y la arrope_ la confesión hizo que una fuerte corriente surcara toda la espina dorsal de la castaña, mientras que los ojos ámbar se abrían con incredulidad.
¿Acaso habían escuchado mal?
_ ¿Q-Que dijiste?_ pregunto incrédula la mujer, acercándose lentamente al moreno.
_ Comió saludable, me encargue de eso_ dijo con simpleza, haciendo que un grito ahogado saliera de la chica.
Hanji no lo aguanto, de un salto de levanto y de dos zancadas ya estaba en frente del más bajo, tomándolo de las mejillas y haciendo movimientos circulares con sus manos, logrando que las mejillas se apretaran y los labios se fruncieran en una mueca graciosa. Vio una pequeña arruga formarse en el entrecejo del Ackerman, creyendo que este iba a enojarse y volvería a la normalidad, pero su esperanza se perdió al ver que el entrecejo se volvió a alisar y los ojos afilados se notaron cansados… Rendidos.
Levi Ackerman se había rendido ante Hanji Zoe.
_ ¡¿Quién demonios es este sujeto que hiciste con Lev?! ¡Tu… Alienígena enano! ¡Roba identidades! ¡¿Qué hiciste con el enano gruñ-?!_ la boca de Zoe fue tapada de inmediato por la mano del moreno para acallar el griterío que estaba haciendo.
_ “Zieda la boha” (Cierra la boca)_ le espeto, aun teniendo las mejillas apretadas por las manos de la chica_ “Ha nina ezta dudmiendo”(La niña esa durmiendo)_ al hombre más alto se le escapo un bufido divertido ante las palabras de Levi dichas de esa forma.
La mujer, espantada, soltó el rostro de su supuesto amigo y se escondió detrás del enorme cuerpo de Mike, que veía como el moreno se masajeaba las torturadas mejillas.
_ Demonios_ bufo rendido el de mirada plomo mirando al más grande que le miraba con interés.
_ Perdona las molestias con Nanaba… Y Hanji_ se disculpó masajeando su tenso cuello, gracias al estrés de su trabajo_ No sé cómo agradecerte_
_ No importa_ le respondió tranquilo, peinando sus cabellos hacia atrás_ Fue agradable estar en ese lugar y-_ sus ojos se abrieron desmesuradamente, llamando la atención del más alto.
_ ¿Levi?_ le llamo curioso, viendo una mueca aparecer en los labios del más bajo, dándole a la castaña un extraño escalofrió en su espina dorsal.
_ No, ¿sabes qué? Si podrías agradecerme_ el otro le incito a continuar, ya que el otro parecía haberse llenado de interés_ Pero hablemos afuera, tengo algo que pedirte_