Por la noche, cuando Ryou y los demás se fueron a dormir, Yugi decide llamar a su amigo a eso de las 12:37 am, Ryou no podía dormir, el mensaje que le había lo inquietó mucho, ¿ahora de quién se tratará la amenaza?, Ryou se encontraba en la sala viendo algún programa bastante superficial, cuando de repente sonó el teléfono. Extrañado por la hora se decide a contestar.
-¿Moshi, Moshi?-Contestó con un ánimo muy bajo.
-¿Ryou?, me alegra que contestes, ¿por qué no contestas el teléfono celular?- Ryou sin darse cuenta, Bakura había salido de la habitación, y estaba escuchando todo.
-Hola Yugi, bueno perdí mi teléfono por ahí y bueno, es una lástima porque de ahí me hablarían mis padres, después de todo…-Se oyó un tono de llamada entrante-Espera Yugi, creo que tengo otra Llamada- presionó de nuevo los botones del teléfono y contestó- ¿Moshi Moshi?...
-Buenas noches, lamento la molestia jovencita, ¿ahí vive el joven Akefia?.-Ryou contestó dudoso con una gotita en la cabeza por lo de jovencita… pero afirmándole, Bakura decidió no interrumpir la llamada y prefirió escuchar.
-Sí así es, ¿de parte de quién?... hizo un gesto fruñido.
-Habla la señora Parker, la madre de Ryou, se comunicó con el señor Parker para avisarnos sobre la situación de nuestro hijo…
-¿Mamá?-Ryou se exaltó y se le llenaron los ojos de lágrimas.
-¿Ryou? ¿mi pequeño? Hay hijito, no te ha cambiado mucho la voz, pensé que era una chica con la voz entrecortada, ¿qué haces despierto?
-Nada mamá, es que no podía conciliar el sueño, de hecho hablaba con Yugi ¿te acuerdas?
-Ahh sí el otro muchacho, espero que esté bien. Hay hijo, no sé qué te ha pasado durante todo este tiempo, tu padre no ha querido saber nada de ti, ni me ha permitido llamarte, ya sabes cómo es.. Dime, ¿cómo has estado? ¿Qué ha sido de ti? ¿Sigues estudiando?...
-Sí mamá-se limpió los ojos con la manga de la pijama- Pues ha sido una historia muy loca, pero aquí te va-Ryou contó desde el día que conoció a Akefia y Bakura, omitiendo ciertas partes, lo amables que habían sido ambos, contándole maravillas a su madre de la vida que ha tenido con ellos.
-Me alegro que estés bien Ryou, tu padre te mandó una carta hace tiempo ¿no?, sobre ir a verte, bueno pues creo que te visitaremos mañana…
-¿qué? ¿Pero qué? No no no no es posible mamá, el vuelo se hace muchísimas horas de Inglaterra a Japón… y hay planes de por medio.
-Lo sabemos hijo, pero mañana es aniversario de Amane, y bueno, creo que la sorpresa se arruinó..
-Por qué lo dices mamá.
-Es que ya estamos en Japón, Tu padre fue a buscarte al departamento pero estaba prácticamente vacío, preguntamos al hombre que te rentaba y nos explicó sobre el Joven Akefia.
-¿ahh si?- Tragó duro…-¿y qué más?
-Conseguimos su número y bueno, ahora estamos hablando por teléfono, ¿no es increíble?
-Bastante, oye, ¿papá está dormido?
-No, está trabajando en su computadora en la sala del hotel en donde nos quedamos. Parece muy ocupado ahora, pero mañana quiere verte, ¿sabes Ryou?, desde que te emancipaste, nada ha sido lo mismo, cariño, y ahora eso de hacer la ofrenda a Amane parece ser muy importante ahora. Por favor no nos niegues ahora…
-¿cómo podrá mamá?.... Bakura estaba muy intrigado con la conversación que tenía Ryou al teléfono y más porque Ryou contestaba entre susurros.
-Ay hijo, bueno pues mañana si puedes te veremos en el hotel, es el hotel Blue eyes, nos vemos a las 11:00 am.
-Sí mamá, seré muy puntual, no te preocupes…
-Hasta mañana mi queridito, que no se te olvide el obsequio para Amane. Ya ve a dormir hijo, descansa. Adiós.-La madre de Ryou colgó primero el teléfono. Luego cambió rápido la línes, se olvidó que Yugi estaba en la llamada de espera, si no hubiese tardado menos.
-Hola??, Yugi, sigues ahí..
-Sí Ryou pero tengo que apurarme si no Yami se dará cuenta y me dará una paliza, ¿por qué tardaste tanto?
-Mi madre llamó y mañana la veré…
-¿Y tu padre?..
-trabajando, pero es otro tema, bueno para qué llamaste Yugi.
-Bueno, Mali y yo en unos días iremos por ahí, a una región de Kyoto, dicen que hay unas aguas termales nuevas, a parte habrá un festival, lo llaman el festival Aoi Matsuri, será hermoso… nos escaparemos un fin de semana para ver el festival y estar relajándonos solo nosotros tres… ¿qué te parece?
-Bueno ¿Yami y Marik saben sobre ese plan?...
-Sí pero no saben que irás tú, si es que quieres venir…
-Me encantaría, y si solo es un fin de semana claro, no creo que pase de ahí..
-Excelente, Bueno Ryou, te dejo porque creo que Yami se levantó, ya escuché sus pasos.. Descansa y espero verte el fin de semana en la estación dominó a las 8 de la mañana. –Yugi colgó el teléfono y Ryou se separó del suyo mirándolo muy extraño, lo colgó en su lugar y miró el televisor unos minutos más hasta que sus ojos se entrecerraban y bostezó. La televisión no duró ni cinco minutos prendida cuando pasó eso. Cuando Ryou se levantó del sofá, se topó con Bakura.
-Ba.. Ba…. ¿Cuánto tiempo llevas parado ahí?
-Desde que contestaste el teléfono…-Se cruzó de brazos y su mirada fija, alteró a Ryou.
-No es que no podía dormir y… llamaron y… espera, ¿qué escuchaste?
-Mmje., más bien qué no escuche… sé que verás a tu madre mañana y que hablabas con Mutou Yugi ¿qué es lo que te encantaría hacer el fin de semana?-Ryou abrió grandes los ojos y tragó duro.-¿te pusiste muy nervioso?
-Claro que no, ¿Qué te hace creer eso Bakura?
-No terminaste de decir mi nombre cuando me viste y empezaste a temblar…-Bakura pasó sus manos a su cintura, sacó un poco el pecho y ladeo la cabeza para demostrar superioridad.
-EHH sí, me asustaste, es todo, amm ¿buenas noches?...-Bakura detuvo a Ryou con un solo brazo, Ryou apretó los ojos pensando que Bakura le haría algo, encogió los hombros y apretó los puños. Bakura notó el miedo que Ryou expresó, rodó los ojos, y lo atrajo cerca de su cara, lo besó en la frente y lentamente se alejó de Ryou, volvió a entrar a la habitación con Akefia.
Ryou se sonrojó y se quedó parado ahí un rato más, Bakura al recostarse, acomodó su almohada y Akefia se despertó, y se acercó a Bakura para darle un beso en la mejilla y quedarse abrazado a él durante el resto de la noche.
Ryou al meterse a la cama imaginó mil formas en las que podía acercarse a Bakura, sentía la necesidad de hacerlo, pero no tenía ni idea de qué haría.
Dieron las 9 de la mañana y Ryou apenas despertaba, se levantó y se metió a duchar, no sabía qué pasaría con sus padres, se sentía nervioso y más por lo que le diría su padre. Al salir del baño buscó su mejor ropa y con ella, el obsequio de Amane. Tomó un jugo con un poco de fruta al desayunar, acomodó las cosas de Diamante que le gustaba desordenar y dejar por doquier, realmente parecía más perro que gato. Ryou miró el reloj de la sala y marcaban las 10:45, tenía 15 minutos para llegar, n se preocupaba mucho de la hora, el hotel quedaba muy cerca del departamento, entonces se encaminaría hacia allá.
En cuanto Ryou salió, Bakura y Akefia se habían despertado a penas. Habían dormido mucho tiempo, pero las ganas para levantarse no eran muchas. Akefia, se sentía muy prendido esa mañana, había amanecido con una excitación enorme. Se estiró un poco y miró al techo. En seguida miró a Bakura y sintiendo la mirada, lo miró también, Akefia le sonrió y Bakura rodando los ojos sabía lo que significaba eso, Akefia se puso más pícaro y jaló a Bakura por las sábanas. Y lo empezó a besar, Bakura se sentía eufórico, y los besos que Akefia le daba lo encendían más, Bakura se puso encima de Akefia, y se animó a llevarlo más lejos.
Akefia introdujo su lengua en la boca de Bakura y Bakura rosaba su lengua con la del moreno, los labios y lengua de Akefia recorrieron el cuello del albino, luego su mano desnudaba lentamente a Bakura, su miembro libre de todo obstáculo de tela resaltaba con los mimos que Akefia le daba. Así estimulándolo y endureciéndolo, eso a Akefia era lo que más le excitaba, rápido, se quita sus prendas y se metían más a la ropa de la cama cubriéndose los dos, Bakura bastante estimulado, juega con los pectorales de Akefia, sus pezones se levantaban lentamente y un sonrojo concentrado se produce en sus mejillas, Bakura lo podía ver muy bien, y eso le gustaba, bajó entonces por la mitad de su pecho y después al estómago así hasta llegar al vientre, regresó con suaves besos hasta el cuello, Akefia tomó el torso de Bakura y cambian de posición, ahora Akefia estaría arriba. Sus besos eran largos, sus caricias, eran literalmente escalofriantes, la piel de Bakura estaba como la de una gallina, un electrizante escalofrío le recorrió por la espina dorsal.
Akefia se acomodó entre las piernas de Bakura y lamía sus muslos, jugó con la lengua y la punta del miembro de Bakura, Bakura jadeó fuerte, Akefia metió todo el miembro por la garganta y succionó con una velocidad en la que Bakura soltaba gemidos y jadeos potentes. Mas después de un rato, Bakura preparó su esfínter, abriendo más las piernas y con la mano separaba sus nalgas Akefia tomó su miembro y lo apuntó directamente a donde Bakura le indicó, sonrojados, Bakura sentía las envestidas de Akefia, su movimiento de caderas era extremadamente sensual y cada vez más excitante, Bakura tomó una de sus almohadas y la puso sobre su boca. Akefia se recargó en Bakura y la velocidad aumentó, Akefia ya empezó a jadear; recargó una de sus manos sobre la cabecera de la cama y su movimiento parecía ya tener un ritmo en el que ambos podían sentir placer…..
………………..
Ryou estaba en el lobby del hotel Blue Eyes, caminó a la recepción y pidió a la recepcionista que le diera información sobre dos huéspedes, los Parker. La recepcionista amable le indicó en qué habitación se estaban quedando. Ryou estaba muy nervioso y más por lo que había pasado con sus padres después de haber ganado la emancipación.
Little Flash Back
Ryou había recibido los papeles de emancipación y en cuanto su padre, el arqueólogo, se enteró de esto lo encerró en su despacho y le dijo lo último que le diría en ese entonces.
-Así que, ya no dependerás de mí, me parece perfecto, nos iremos a Inglaterra y tú no vienes con nosotros, no quiero que nos vuelvas a buscar, si es que llegas a necesitar algo, porque legalmente ya no soy tu tutor, me has causado muchos disgustos y decepciones Ryou, pero esto ya ha pasado todo, siempre me has quedado muy mal, ojalá hubiera sido que Amane estuviera viva. Gracias, por quitarme 17 años, y te agradezco también que ya no tenga que ver tu rostro…
Ryou miró el suelo toda la conversación sin decir nada, en cuanto salió del despacho tomó sus cosas y se marchó. Su padre nunca supo cómo Ryou había salido de su casa y parece que no le importó hasta el día que le mandó esa carta.
Cuando Ryou salió de su casa, se había quedado unos días en un pequeño asilo de vagos en lo que conseguía trabajo, cuando ya no podía quedarse en el asilo, se dispuso a pasar por cada rincón de la ciudad solicitando empleo, todo el mundo lo rechazó por ser aún un menor de edad y sin permiso autorizado, aunque él explicaba que era un emancipado. Cansado y muy decepcionado, llegó curiosamente hasta Kuriboh’s Coffee donde todavía solicitaban personal. Ryou le explicó al gerente del lugar su situación, así conoció a Seto Kaiba quien con algunas condiciones le dio trabajo y el salario de turno completo aunque trabajaba medio tiempo por la escuela…
Fin….
Continuará………………