Despertó varias horas después en lo que identificó era su cuarto, se sintió aliviado al estar en su suave cama tranquilidad que le duró poco, recordó aquel desagradable acontecimiento mientras asimilaba la información obtenida, escuchó unos pasos afuera de la habitación y cuando la puerta se abrió, una voz conocida lo reconfortó instantáneamente
-Por fin despiertas-el peliplata tenía un pequeño parche en la mejilla izquierda, seguramente por las heridas en la lucha anterior
-Kakashi-suspiró cansado- mucha información para un día
-Me imagino, gracias a Kami por tu mal presentimiento-decía mientras sonreía
-De algo sirvió obligarlos a llevar esos intercomunicadores ¿no?
-Ahora agradezco que lo hicieras aunque era muy incómodo poder escuchar tu voz chillona todo el tiempo, aun me duele el oído-se burló mientras se sentaba aun lado de la cama
-Tenía la corazonada que hoy sacaría a relucir las verdaderas intenciones de ese desgraciado-su rostro mostraba tristeza
-Ya sabíamos que algo ocultaba, pero ni modo… Naruto sobre lo de tus padres-intentaba animarlo un poco
-No te preocupes, ya sabíamos que alguien los habían asesinado… solo que nunca me perdonaré haber estado tan cerca del culpable y no darme cuenta-mientras miraba el techo de su habitación en su mente podía ver el rostro sonriente de sus padres cuando lo veían jugar cuando era pequeño
-En verdad no dejó ni una huella que lo culpara
-Kakashi… Sasuke como está-temía la respuesta ya que el que más sufrió fue el azabache
-Lo llamaré enseguida para que conversemos un poco-el peliplata sacó su celular y con un simple “sube” dio todo por entendido, casi inmediatamente un pelinegro entraba por la puerta manteniendo su rostro impasible
-Por fin despiertas dobe, ya me estaba preocupando-decía mientras se sentaba a un lado en la cama, su voz era monótona ni siquiera los insultos sonaban como tales
-Ni que fuera tan débil teme-el rubio se acomodaba para sentarse de la mejor manera posible ayudado por Kakashi, un momento de silencio adornó el lugar-Que fue lo que pasó, no lo tengo muy en claro-el rubio tenía mucha curiosidad por saber los detalles
-Solo nos bastó escuchar un poco de conversación-dijo el azabache mientras con una mano acomodaba su cabello, le molestaba recordar la asquerosa voz de Danzo
-Sasuke no se iba a quedar quieto, lo mataban los celos-se burlaba Kakashi cambiando el ambiente tenso, mientras el rubio se reía y el ojinegro chasqueaba la lengua
-Además esos tipos nos atacaron un momento después de que ustedes entraran en la habitación, aunque deshacerse de ellos fue fácil-hablaba calmadamente el azabache
-A otro perro con ese hueso, solo me basta ver los vendajes de tu mano y la herida de tu ceja para darme una idea-no era tan tonto para no darse cuenta que Danzo tenía su estrategia planeada con anterioridad-y tu Kakashi pensé que eras más fuerte pero por la manera en que caminas también te fue difícil
-Estaban bien preparados, eran asesinos profesionales, si la habitación no hubiese sido a prueba de ruidos tú mismo hubieras escuchado los huesos romperse de esos tipos
-Jajaja, en verdad se divirtieron-el rubio jamás perdía su buen humor-¿en cuanto a Danzo?
-está vivo aún-el peliplata se levantó dirigiéndose a la ventana-no dejé que Sasuke lo matara-suspiró-ya está reservado para otra persona
-No me digas que le contaste a Jiraiya-se exaltó el blondo mirando un asentimiento del peliplata-¡demonios!
-Es mejor que él lo haga, el maldito no merece que nos manchemos con su sangre-el azabache mostraba una mirada llena de rabia-sería como darle gusto al Diablo
-Lo sé pero aun así… Jiraiya estaba retirado, no quisiera que se involucrara en esto, además la muerte de mis padres le afectó mucho también-conocía a Jiraiya desde niño y según sabía era como un padre para Minato
-Su amistad era muy grande-la melancolía era notoria en el peliplata, simplemente suspiraba-yo también participaré en el castigo, después de todo Minato era mi mejor amigo y siempre traté de mantenerlo lejos de este sucio mundo-a pesar de la diferencia de edades Kakashi y Minato se llevaban muy bien
-Me preocupa cómo demonios voy a solucionar el desastre que causó Danzo-el rubio sostenía su cabeza con ambas manos, el dolor y la ira no lo dejaban pensar con claridad
-Nos reuniremos con el segundo al mando-hablaba el azabache mientras levemente acariciaba los rubios cabellos para reconfortar un poco al otro-trataremos de buscar una buena solución
-No será fácil-habló frustrado el rubio-seguro ya saben que tenemos a Danzo y lo que pretendemos hacerle
-Tranquilo Naruto-el peliplata lo miró muy serio-Danzo no se librará de la tortura, además para esa organización no es conveniente tenernos como enemigos
-Haremos cualquier cosa para evitar que haya un confrontamiento-el azabache sabía que si no lograban solucionar el problema sería inevitable presenciar un derramamiento de sangre-negociaremos de la mejor manera
-Tú no te preocupes, Naruto-el peliplata brindó una sonrisa reconfortante para el de ojos azules-Jiraiya, Sasuke y yo nos ocuparemos de Danzo y todo lo demás, ahora tu solo concéntrate en tus hijos y las empresas-con un suspiro y un asentimiento el blondo dio por terminado ese asunto
-Hazlo sufrir-habló el blondo mientras un par de lágrimas traicioneras se le escapaban, lo único que hizo Sasuke fue abrazarlo mientras el peliplata los dejaba solos por el momento
-Olvidémonos de este tema-susurraba el ojinegro- nunca se volverá a mencionar-el silencio los acompañó mientras soltaban todo el dolor que tenían, el rubio se abrazó fuerte al azabache cuando empezó a sentir su hombro húmedo dando a entender que Sasuke también lloraba ante la memoria de sus padres, si ese simple acontecimiento nunca hubiese ocurrido o mejor aún sin la existencia de Danzo ellos tal vez gozarían de una vida plena, pero nada lograría cambiar el pasado
Cuando la tormenta se acabó un enorme y maravilloso día se mostraba en todo su esplendor
Como se prometió, se logró evitar un desastre, varias negociaciones se dieron, discusiones, peleas, al final acordaron la paz y el único muerto fue aquel que fue el causante de las innumerables agonías y desastres, Danzo no solo había destrozado la vida Namikaze-Uchiha sino también la de sus propios allegados, la captura del maldito dio paso para que la red de mentiras cayera poco a poco, al final todos concordaron una alianza nueva y duradera
Las tumbas de sus padres fueron adornadas con flores de todo color, cada uno pidió permiso para estar con la persona que más amaba, sintiendo que era lo menos que podían hacer, seguros de que donde quiera que sus padres se encontraran los apoyarían en su decisión, lloraron en silencio ante sus tumbas agradeciendo todo el amor que les brindaron en los cortos años de niñez que disfrutaron juntos
La reconciliación estaba dada, el par de amantes simplemente decidieron vivir juntos, después de una charla pequeña decidieron dar el gran paso, aunque no tan grande ya que el par de azabaches pasaban mucho tiempo en la mansión, simplemente fue cosa de traer lo que faltaba de sus pertenencias para ubicarse en la habitación correspondiente, eso fue fácil lo difícil fue explicar al pequeño Sora el porqué de la mudanza, aunque tras una pequeña plática aceptó emocionado vivir en la mansión con su propia habitación, aún más difícil fue lograr que el azabache se estableciera en una habitación separada de la del rubio ya que aún era pronto para que los pequeños en casa entendieran el tipo de relación que ellos llevaban
-¿Te gusta ser el hermano mayor?-preguntaba un curioso rubio mientras veía como Sora jugaba con Haru, a la vez que la pequeña sonreía divertida
-Me encanta-decía emocionado el pequeño ojiverde
-Debes cuidar muy bien de ellos tres -el azabache también estaba presente mientras tomaba las manitas de los pequeños Yukio y Shin
-Parecemos una gran familia, incluso nos parecemos mucho-decía inocentemente mientras los mayores se miraban con complicidad
-Y qué te parece si Naruto se vuelve tu otro papá-mencionó despreocupadamente el ojinoche mientras Naruto se sobresaltaba ante tan inesperada frase, el menor solo les miró un poco confundido
-Sería un poco extraño-señaló el menor mirando a Naruto, que sintió una punzada ante la respuesta, nunca pensó ser rechazado de esa forma-mis amigos solo tienen un oto-san
-No tienes que ser igual a ellos, las familias siempre son diferentes-el azabache percibió la melancolía del blondo e intentó remediar un poco la situación, “tal vez fue muy pronto” pensaba-a veces los niños solo tiene una mamá o solo un papá, a veces solo tienen abuelos o tíos siempre son diferentes
-Es verdad, mi amiga solo tiene a su abuelita-decía mientras razonaba un poco-entonces me encantaría si Naruto es mi otro papá
-Tener dos papás siempre será mejor que tener uno-el azabache acariciaba la cabeza de su hijo quien sonreía
-Me gusta mucho Naru-chan-amplió su sonrisa mientras levantaba sus bracitos para enfatizar sus palabras
-Creo que debo ponerme celoso-decía el azabache sonriendo de lado-¿no lo crees Naruto?- el mencionado se mantenía muy callado desde el inicio de la plática, sus palabras murieron al ver el rostro del blondo, al que se le escapaba una pequeña lágrima traicionera, el niño lo miraba atento
-Me alegra escuchar eso-decía disimulando su estado de ánimo y sonriéndole al pequeño-me disculpan un momento… iré al baño-dijo mientras se levantaba rápidamente de donde se encontraba jugando anteriormente y se apresuraba a salir de la habitación
-Quédate y cuídalos bien, Sora-colocó a los pequeños en sus cunas y salió detrás del blondo, cuando cerró la puerta buscó inmediatamente al otro encontrándolo en el baño de la puerta contigua, tal fue su sorpresa al ver al Naruto en un mar de lágrimas mientras trataba de controlarse, lo abrazó por la espalda sorprendiendo al blondo quien inmediatamente se giró pero no le dio tiempo a reclamar y simplemente lo abrazó
-¿que sucede?-habló pausadamente mientras escuchaba que el rubio regulaba su respiración
-eres… idiota…como puedes decirle… eso a un niño… tan de repente-se limpiaba las lágrimas que aún brotaban de sus ojos mientras se separaba del otro
-lo siento… solo creí que era el momento-al ver a su adoración en tal estado se arrepintió de sus actos impulsivos
-Teme… sabes lo mucho… que me hubiese dolido si me… rechazaba-dijo mientras volvía a su estado original aún con pequeños sollozos
-Pero no lo hizo-se dedicó a limpiar las lagrimillas que aún brotaban de esos ojos azules que adoraba
-Eres cruel… de verdad-siempre dudó de como platicar con Sora, el miedo de que el pequeño lo odiara siempre estuvo latente en él
-El jamás te rechazaría, él en verdad te quiere desde que te conoció-Sora en verdad fue cautivado por el rubio desde la primera vez, el pequeño siempre sonreía cuando hablaba del Naruto
-¡Pero esto es diferente!
-No es diferente, hemos estado comportándonos como una familia desde el principio
-Pero aún es muy pequeño para asimilar este tipo de cosas-al fin sus lágrimas cesaron aunque sus ojos rojizos evidenciaban su estado anterior-ya viste… me rechazó en un principio, ¿sabes cómo me dolió eso?
-Solo fue una confusión-dijo mientras suspiraba y le ofrecía su pañuelo-todo salió bien
-Creo que tienes razón-habló el blondo tratando de sonreír
-¿Hice algo malo?-preguntó de pronto una vocecita en la puerta asustando a los mayores que lo miraron sorprendidos
-¿Por qué lo dices?-su padre lo levantó en brazos mientras el pequeño miraba a Naruto
-Naruto estaba llorando-dijo con tristeza-¿yo lo hice llorar?
-Cl-claro que no-decía el rubio tratando de disimular, no estaba preparado para enfrentar la situación, no después de llorar, su voz aún sonaba quebrada
-Entonces fue oto-san-se enfadó el pequeño mirando acusadoramente a su padre mientras Naruto soltaba una pequeña risita
-No es eso Sora-chan, solo que cuando me aceptaste como tu otro padre me puse muy feliz-decía mientras le quitaba al pequeño de los brazos del azabache mayor-estaba llorando de felicidad
-¿Estás feliz?-el pequeño que se sentía culpable por las lágrimas del rubio ahora estaba contento también
-Mucho-decía mientras le regalaba una linda sonrisa
-Por cierto, ¿con quién dejaste a los pequeños?-preguntó Sasuke un poco dudoso, Naruto se asustó al escucharlo
-Están con Ino-ambos mayores se relajaron un poco
-Regresemos con ellos-habló en azabache, el rubio bajó al pequeño que enseguida salió corriendo a la habitación de sus hermanitos, Naruto iba a salir también pero sintió como tiraban de él, Sasuke le dio un beso tierno mientras lo veía directamente-ahora empieza nuestra nueva familia feliz-otro beso y un rubio sonrojado bastaron para finalizar con todas las dudas existentes
Ellos perdieron a sus padres a muy temprana edad, pero lucharon por seguir adelante, a pesar de los errores que pudieron cometer simplemente estaban destinados a terminar juntos, su amor se formó desde niños y ahora disfrutaban de una nueva y enorme familia, cuidarían de ella con ahínco sin temor a la recriminación de la sociedad, ya que en ellos existía algo más poderoso que las dudas, ellos tenían amor, el más sincero y fuerte que alguien se podía imaginar, nada podía ser más perfecto
O tal vez si….
VARIOS AÑOS DESPUÉS
-¿Qué haces dobe?-le decía un azabache al rubio que junto a una puerta entreabierta miraba con interés el interior de la habitación
-Shhhh…-el blondo lo miraba sorprendido pero con la mano lo llamaba para que también observara y susurrando muy bajo le informó-solo mira
Adentro de la habitación estaba una pequeña rubia de nombre Haru portadora de los genes Namikaze lo cual hacía que su apariencia fuera idéntica a la de su padre Naruto, tenía 6 años de edad y mostraba un carácter alegre y decidido, a su lado un azabache de 12 años con carácter tranquilo portador de los genes Uchiha fiel copia de su padre aunque con una personalidad más dulce y amable, los dos estaban concentrados en alguna tarea desconocida por los adultos
-Que tiene… son solo Sora y Haru-decía Sasuke sin entender lo interesante de la situación, el rubio solo le tapó la boca y siguieron espiando en silencio
La rubia mostraba mucho interés en lo que el mayor estaba haciendo, ambos sentados en el piso
-Ya está-decía Sora mientras levantaba un osito de peluche y se lo entregaba a la pequeña
-Wow, en verdad lo reparaste-decía la pequeña de ojos azules mientras abrazaba al osito mostrando una sonrisa angelical
-No hice mucho, solo cosí su brazo-el jovencito mostraba desinterés en lo que acababa de hacer por su hermana menor
-En verdad eres genial… gracias Sora-nichan-la rubia se levantaba mostrando un lindo vestido color naranja
-De nada-decía el ojiverde acariciando la cabeza de la pequeña-solo sé más cuidadosa y no lo rompas de nuevo-la sonrisa que mostraba el jovencito era dulce y muy cálida
-Está decidido-dijo la pequeña de pronto con un leve sonrojo y mostrando mucha decisión
-¿Eh?... ¿qué decidiste?-preguntó confundido al ver a la pequeña
-Cuando crezca me casaré con Sora-nichan-hablaba feliz mientras daba un pequeño brinquito levantando su osito de peluche
-P-pero que dices-el mencionado se sonrojo ante tales inocentes palabras
-Porque ni-chan es un chico genial y muy inteligente, así que me casaré contigo
-Me alagas pero-trataba de desviar el tema-… oto-san me matará si se entera-bromeo el jovencito
-No te preocupes yo lo convenceré-dijo la pequeña- lo haré ahora mismo-
-E-espera Haru-chan-la pequeña se dirigía decidida a la puerta-no te lo tomes tan enserio-el joven trataba de excusarse con su hermanita mientras que al mismo tiempo un rubio jalaba a su amante para salir de ahí y esconderse en una habitación cercana
Detrás de la puerta se escuchaba los pasitos de la pequeña en el corredor mientras su hermano mayor la perseguía tratando de que abandonara esa loca idea, el rubio se reía bajito ante tal escena
-Sabes que no permitiré eso-habló de repente el azabache-mi pequeña Haru nunca se casará
-Eres muy celoso-se burló el rubio-aunque lo que dijo Haru no es mala idea
-¿Como que no?, son hermanos… entiendes-en verdad estaba enojado, era muy celoso con su única hija y si por él fuera nunca la dejaría salir de casa para que nadie la mirara con segundas intenciones
-No lo son, sabes bien que Sora y Shin son tus hijos mientras Haru y Yukio son los míos
-Aunque Sora sea mi hijo nunca permitiré eso-hablaba un gruñón azabache
-Piénsalo bien-el rubio estaba feliz- si ellos se unen nuestros genes también y el sueño de nuestros padres estará cumplido
-En eso tienes razón pero…-
-Nada de peros, si ellos algún día deciden casarse yo los apoyare-el rubio mostraba determinación ante esa idea
-Y yo me pondré en contra-el ojinegro simplemente no aceptaría
-Déjalos ser felices
-Jamás
-Vamos a discutir por eso ahora… faltan muchos años para eso-suspiraba el rubio
-Solo te importan los sueños de nuestros padres-decía el azabache acercándose al rubio
-Es mi sueño también-decía dándole la espalda para poder salir de la habitación pero el azabache cerró la puerta antes de que lo lograra
-Pues entonces… porque no nos unimos nosotros-susurraba el azabache en el oído del rubio logrando que este se estremeciera
-Eres un pervertido-decía avergonzado, aunque no era tan mala idea
-Es porque tengo a un lindo rubio que me enciende-decía mientras besaba la mejilla de su amante
-Teme, cambias fácilmente de tema
-¿Entonces no quieres?
-No dije eso
- vamos al cuarto-el azabache lo jaló pero el otro paró en seco
-Los niños están en casa y no pasan de ser las tres de la tarde, teme-jamás se acostumbraría a los actos desvergonzados que él otro quería obligarlo hacer
- ¿me dejarás con la calentura?
-Vamos a la casa afuera de la ciudad-claro que no perdería la oportunidad de tener sexo con su amante, simplemente no quería ser descubierto por nadie y menos por los pequeños
-La vieja casa, me parece perfecto-una sonrisa de lado adornaba el perfecto rostro del azabache
-Hoy seré el de arriba-dijo el rubio mientras salía de la mansión
-Ni lo pienses
-¿Entonces que juego haremos para decidir?
-No sé, lo pensamos en el camino-hablaba despreocupado mientras caminaba
-Sea cual sea… ganaré-dictaminó el rubio mientras pedía un auto a uno de sus empleados
-Ya se-decía el azabache mientras se acercaba a su motocicleta-quien llega primero, gana
-Acepto-el rubio entonces decidió conducir otra motocicleta también
-Ten cuidado no quiero que te lastimes antes de que yo te…
-CÁLLATE… jamás me ganarás-a veces el azabache no medía sus palabras y lo hacía enfurecer
-Respeta las leyes de tránsito-su burlaba el ojinegro-no conduzcas como maniático
-Ok, entonces… VÁMONOS
Empezaba otra riña entre los amantes y finalizaba otra historia o tal vez era el comienzo de otra
Dos adultos disfrutando de un amor intenso y dos pequeños empezando un amor sincero, lleno de líos, una vida llena de emociones
FIN