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SOY UN JUGUETE DEL DESTINO por shiki1221

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Notas del capitulo:

este capitulo al igual que los otros q he escrito tiene varios aportes importantes de mi beta sasukeeechan. MUCHAS GRACIAS POR TU AYUDA. tuve problemas con este cap y ella los resolvio. 

CAP 13: DISTANCIA

 

La pelea entre Sasuke y Naruto había tenido lugar hacía ya una semana, pero aquello fue de total desconocimiento para cualquier persona, ya que en la escuela siempre actuaron indiferentes el uno con el otro. Cualquier persona que los viera, sería incapaz de pensar que entre ellos existió alguna vez una de las más bellas amistades.

Yondaime se la pasaba rodeado de admiradores, siempre en compañía de la supermodelo Sakura Haruno, que había empezado a asistir al instituto Tsukiyomi al mismo tiempo que él. (N/A: no me pareció importante el nombre del instituto antes, pero por si querían saberlo aquí está). Ellos sólo se veían durante el almuerzo y las horas libres ya que no compartían la misma clase.

La hermosa pelirrosa era la chica más popular, todos los chicos la codiciaban y las chicas la envidiaban por poseer una gran belleza, una figura esbelta, piel blanca y unos ojos color jade. Era siempre acompañada por sus grandes amigas, Ino y Shion Yamanaka, aunque más que amigas eran su sequito. La adulaban por cualquier comentario que hiciese, aun si era de desprecio por ellas, y cumplían cualquier capricho de Haruno. Todo, con el único fin, de acercarse más a la popular y a cierto rubio de sonrisa arrebatadora con cuerpo de infarto.

Mientras Sasuke se la pasaba con su propio grupo, se guardó todo el dolor por lo ocurrido el domingo en lo más profundo de su ser, lo ocultaba bajo siete llaves en su alma para que nadie lo notara. Pero no era suficiente, él tenía personas que lo querían demasiado como para no darse cuenta de que algo pasaba. Minato y Kushina se asustaron por un momento pensando que el hecho de vivir con ellos era la causa de dicho cambio, sin embargo, el azabache se apresuró a aclararles que el asunto no tenía que ver con ellos.

Sin mencionar, ni por casualidad, que se debía a una discusión con su mejor amigo, les hizo creer que toda la culpa era de la indiferencia de Naruto hacia él. Otra vez, no era del todo mentira, ahora como yondaime el rubio era insensible a lo que él pudiese hacer o decir y eso era lo que dolía. No sabía cómo hacer que el otro se dé cuenta de su error. Cada día sentía que se alejaba más y más de aquel chico que conoció en su infancia, por el cual tenía un profundo sentimiento, cuyo nombre aún desconocía.

Hinata era una de las más preocupadas por el menor de los Uchiha, pues ésta temía que se estuviese deprimiendo al no poder acercarse a su amigo. Ellos tuvieron la suerte de estar todos juntos en la misma clase, el grupo completo de amigos que tenía Uchiha lo acompañaba. Eso era algo que la joven Hyuga agradecía todos los días a kami-sama, ya que Sasuke seguía igual de irresponsable con las clases; en los exámenes le iba bien, pero sólo porque corría con la suerte de que nadie se fijara en que jamás prestaba atención. Sus viejas mañas seguían presentes: se dedicaba a escribir, dibujar o incluso dormir. Todas esas actividades, fueron minuciosamente estudiadas por los ojos de Naruto, desde el primer día en que lo volvió a ver. Claramente, con absoluto disimulo, para que nadie viera la atención que siempre le dirigía.

Precisamente se encontraban en medio de una aburridísima clase de historia, en la que todos intentaban batallar contra Morfeo, para no caer en el sueño que se les hacía tan llamativo cuando hablaba de las eras prehistóricas. Si es que era más fácil mirar “la tierra antes del tiempo”, (N/A: película infantil sobre dinosaurios) y problema resuelto. Sólo existía una persona totalmente abandonada al sueño y ese era el azabache, que estaba muy incómodo en su asiento, pero, ¿qué más daba? ya se había acostumbrado desde la secundaria. Pero su némesis hizo acto de presencia: una bolita de papel de Hinata. Un pequeño, pero certero golpe, que lo despertó. Tenía como siempre un mensaje que decía:

 

No te duermas Sasuke esto es importante, vendrá en el examen

 

Bufó con molestia, ya que siempre que intentaba dormir, de quien debía cuidarse no era del sensei, sino de ella. No estaba de ánimos para nada desde su discusión con Uzumaki, en lugar de dormir ocupaba su tiempo dándole vueltas al asunto, encontrándose de cara en una encrucijada de la que no encontraba solución: la nueva faceta de quien alguna vez fue su amigo más cercano. Pero le contestó a su amiga como siempre hacía.

 

Hina-chan estoy con mucho sueño déjame dormir un rato onegai”

 

Ella se limitó a meditar unos minutos su siguiente respuesta, como siempre, lo que intentaba evitar era que se metiera en problemas.

 

“¿Algo te tiene preocupado sasu-chan?”

 

El rubio se sentía intranquilo por la cercanía que al parecer tenía esa chica con Uchiha, se le hacía vagamente familiar, pero no lograba recordar con precisión de quien se trataba. Su mente tampoco hizo esfuerzo en pensar si era una vieja conocida o no, más bien fijaba sus pensamientos en las miradas que le dirigía a “su mejor amigo”. Se habían peleado, eso estaba claro, que dejara de importarle si alguien se le acercara con malas intenciones, eso sí que no, estaba totalmente fuera de discusión.

Veía las diferentes muecas que hacía el de ojos ónix al recibir o enviar una bolita de papel. Notó molestia ante la primera que recibió, algo de tristeza al responder la segunda, una mueca de absoluto terror ante la tercera y una sonrisa vengativa, de esas maliciosas que ponía cuando se salía con la suya cuando contestó a esa que al parecer le aterraba. ¿Qué era de lo que estaban hablando para que hiciera esos gestos? Lo que más desconcertaba al rubio, era ver lo bien que aquella chica conocía al pelinegro. Sabía que aparte de él, el único capaz de diferenciar cada gesto del menor era Itachi. Comenzaba a temer que otras personas como esa chica estuvieran tan cerca de Sasuke como para reconocer esos mínimos cambios en su cara de póker.  

 

No que va, estoy perfectamente sólo que me aburro

 

Era lo que contestó Sasuke a su amiga tratando de no preocuparla, cuando recibió la segunda notita. Pero la de ojos perla no era cualquiera y no se rendiría fácilmente, si algo le sucedía a su primer y mejor amigo, ella quería que contara con ella, de la misma manera en que ella confiaba en él cada vez que algo había sucedido. Le mandó una tercera nota con una clara amenaza a la integridad del azabache.

 

Si no me lo cuentas por las buenas está bien te dejaré tranquilo. Tal vez en lugar de hablar podamos ver un maratón junjou romantica y kuroshitsuji ¿qué te parece?”

 

El terror de pasar por esa situación hizo que el azabache recordara como es que había sido su primera vez viendo yaoi.

 

Flash back

 

Estaban Suigetsu, Karin, Juugo, Hinata y Sasuke reunidos en la casa del peliblanco, todos estaban felices ya que ese fin de semana habían acordado llevar películas para ver entre todos. El plan de ellos era pasar toda la noche viendo las selecciones de los otros. El menor de los Uchiha y el peliblanco sonreían por las películas que escogieron.

Chicas, les aseguro que con esta película van a gritar toda la noche. comentó de lo más contento el de dientes filosos.

Ja eso no es nada comparado con la mía, que es la mejor película de terror jamás hecha, tendrán pesadillas el resto de sus vidas. —dijo feliz el pelinegro.

 

Unas cuantas horas después...

 

¡¡AAAAAAAAHHHHHHHHHHHHH!!

 

Se había cumplido lo prometido aquella noche estaba plagada de gritos, sin embargo, no eran de las chicas sino de...

 

 ¡¿QUÉ CARAJO LES PASA A ESOS TIPOS?! LO ACABA DE VIOLAR Y DESPUÉS DICE QUE LO AMA. gritó Suigetsu.

ESTA TOTALMENTE ENFERMO ¿CÓMO LE PUEDE GUSTAR QUE SE LA METAN POR EL CULO? —afirmó escandalizado el azabache.

Oh vamos chicos como pueden gritar por dos simples ovas. dijo Hinata de lo más tranquila.

¡Increíble! ¡No sabía que te gustara el yaoi como a mí! abrazó la pelirroja a Hyuga descubriendo algo más en común entre ellas.

Es que me gusta mucho “okane ga nai” Ayase es tan violable. —había babas cayendo de la boca de Karin y Hinata ante aquel pensamiento.

¡USTEDES ESTAN LOCAS! ¡LOCAS! ¿ME OYERON? gritó Suigetsu.

¡NO PODRÉ VOLVER A DORMIR! dijo Sasuke.

Pues se lo merecen los dos por intentar asustarnos. comentó poniendo las manos en la cadera la de lentes— Hablando de eso… se ven bien juntos.

Recién caían en cuenta, el peliblanco y Uchiha, que por el terror de lo que acababan de ver se habían abrazado. Inmediatamente se separaron con un gesto de miedo. Y Juugo no dijo nada, por el simple motivo de estar en shock. Esa noche hubo muchos gritos, protestas e imágenes que se grabaron en su memoria.

Para “empeorar” la suerte del pobre chico de ojos noche, al día siguiente cuando volvió a su casa se encontró con una escena similar a la de los ovas. Pero esta era en vivo y en directo, con un cambio de escenario, Deidara estaba recostado sobre la mesa de piernas abiertas mientras un Itachi de lo más excitado lo penetraba sin contemplaciones. Los gemidos de placer del rubio eran de los más sonoros y Sasuke presenció un nuevo uso para la mesa donde normalmente comía. Era definitivo, no volvería a comer allí, en mucho tiempo.

 

Fin de flash back

 

El recuerdo traumático trajo consigo la ventaja que el tanto necesitaba para escapar del interrogatorio de su amiga. Luego de encontrar aquel punto débil, sólo quedaba utilizarlo, de manera veloz escribió lo siguiente:

 

Si me dejas dormir, no me desharé de toda tu colección de yaoi. Te recuerdo que me pediste que te lo guarde para que tu familia no lo vea”

 

La chica sólo suspiro resignada y le hizo señas con las manos a su amigo, éste entendió muy bien la amenaza que le seguía al “permiso”. Aclarado el asunto se dedicó nuevamente a dormir su merecida siesta. Pronto llegó la hora del almuerzo, bueno pronto para Uchiha que sentía que su siesta fue muy corta y fue una eternidad para los que se quedaron despiertos toda la clase que al fin pudieran ir a almorzar.

Como siempre, yondaime fue a almorzar con la pelirrosa y las dos rubias, aunque pronto fueron rodeados por los admiradores que se dedicaban a verlos todo el tiempo. El grupo de Sasuke fue debajo de un árbol en el extremo opuesto al que se encontraba el cantante. Aquel lugar llenaba de paz al Uchiha, pero siempre fue consciente, de que no era por la ubicación si no por estar con sus amigos.

Pronto realizaron un juego al azar para decidir quién iría a comprar los almuerzos para todos. En esta ocasión salió perdiendo Hinata. Ella no sólo compraría los almuerzos para ellos sino también las bebidas, que sólo aumentaba el trabajo para la de ojos perla. Sin embargo, lo aceptó felizmente ya que ellos siempre se turnaban, no tenían a nadie como sirviente, a menos que perdiera alguna apuesta, pero esa era otra historia. Luego de comprar onigiris y emparedados para todos sólo le faltaban las bebidas, que lastimosamente le tocaban en el segundo piso.

Al ver que no regresaba, el pelinegro decidió ir a ayudarla con las cosas que encargaron, llegó hasta la máquina de bebidas, pero no había rastro de la chica. Uchiha no se preocupó, pensando que tal vez ya se había ido, lo mejor entonces sería alcanzarla.

En el camino se cruzó con su “mejor amigo”. El rubio les había dicho a sus acompañantes que iría al baño, aunque sentía algo así como curiosidad por saber porque después que esa chica se fuera hacia los baños el ojinegro la siguió poco después. ¿Qué se traían esos dos yendo a un lugar tan “solitario”? Aun no comprendía su relación, y quería averiguar cuál era exactamente.

Caminaron desafiantes el uno hacia el otro, Naruto siguiendo con su excusa de ir al baño y Sasuke con su propia excusa de alcanzar a Hinata para alejarse lo más pronto posible del rubio. Ninguno sabía que decir, pero deseaban hablar el uno con el otro, aclarar lo que paso, el rubio anhelaba disculparse y volver a pasar tiempo con Uchiha y éste a su vez deseaba que le contara que fue lo que le sucedió para que desconfiara de esa manera de las personas. Le recordaba a sí mismo cuando murieron sus padres y todos le dieron la espalda, así que supuso que algo muy grave paso.

Pese a lo que querían hacer, se mantuvieron en silencio, ¿la razón? Dos rubias cabeza hueca que estaban cerca de las escaleras observando lo que hacían. Fueron enviadas por Sakura, que se había percatado de que el rubio iba en la misma dirección que, según ella, el desagradable azabache. Teniendo en cuenta la promesa que hicieron, Sasuke comenzó a avanzar hacia las escaleras, dispuesto a irse de allí y volver con sus amigos. Pero algo nuevamente lo detuvo.

—Sasu-chan aquí estabas, vamos, yo ya llevé todos los almuerzos no hace falta que me ayudes. —comentó con una sonrisa cálida Hyuga.

—Bueno, ya voy. —dijo Sasuke algo desanimado ya que su oportunidad de aclarar las cosas se perdió.

Naruto observaba de manera pervertida a la pelinegra, viéndola más de cerca y con esa sonrisa en la boca era muy hermosa, y le parecía una buena opción divertirse un rato, como había hecho con otras tantas durante su gira. Esa mirada solo fue percibida por las rubias ya que Sasuke le había dado la espalda al ojiazul, para caminar hacia ella.

Ino y Shion sentían gran indignación, ¿cómo es que esa maldita “cieguita”, como le solían decir, llamó la atención de gran yondaime? Y a ellas ni siquiera las miro, sólo lo hacía cuando Sakura hablaba de ellas, pero hasta para eso parecía que le daba flojera. Aprovechando que Hinata se dio la vuelta lista para bajar por las escaleras, ellas “disimuladamente” decidieron causarle un pequeño accidente, ambas le pusieron el pie provocando que la pobre chica de ojos perla, inevitablemente, cayera de las escaleras.

 

POV DE NARUTO

 

—¡HINATA! —oí como claramente grita el teme antes de correr hacia la chica.

Lo demás parece suceder en cámara lenta, Sasuke salta de las escaleras y en un movimiento más propio de las películas que de la vida real, la abraza en medio de la caída y la voltea justo antes de tocar el suelo. Siento un intenso dolor al verlo rebotar por las escaleras hasta llegar al final de estas. A eso encima, le debo sumar la rabia que se apodera de mí, al ver como el teme sigue agarrado al cuerpo de aquella mujer. Ella ha caído sobre el teme, aparentemente sin ningún daño. Maldita torpe, por su culpa él está herido ¿qué acaso no puede mirar por donde va? Ahora veo porque le dicen la cieguita.

—Hina-chan ¿estás bien? ¿No estás heri…? —es todo lo que dice antes de, lo que yo quiero creer, solo fue un desmayo.

—¡Sasu-chan! ¡Sasu-chan! —¿que no puede hacer otra cosa que no sea llorar?

Me acercó lo más rápido que puedo, esto no me gusta veo algo de sangre cerca de la cabeza de Sasuke. Más le conviene a esta chica que el bastardo esté bien, si le pasa algo que se cuide porque me cobraré esta. Me acerco para levantarlo y llevarlo a la enfermería y ella ¿qué hace? Sólo solloza como si fuera la víctima del accidente, me comienza a caer mal.

Tomó entre mis brazos de manera delicada a Sasuke, me lo lleve al estilo nupcial, en este momento es la mejor manera que se ocurre para llevarlo. Evito correr, para no moverlo más de la cuenta, pero tampoco camino despacio, porque quiero llegar lo antes posible, hago la famosa “caminata rápida”. Al ver la puerta de la enfermería, no puedo hacer menos que darle una buena patada y abrirla de par en par. La enfermera recuperada de la sorpresa de mi llegada, se acercó a Sasuke lo revisó y vendó su cabeza todo bajo mi supervisión. Al poco tiempo me dijo que tenía suerte que el golpe no era grave y que sólo necesitaría descansar y tomar algunos analgésicos para el dolor. Suspiré aliviado y apenas note la presencia de esa chica que causo el estado de Sasuke.

—Anno... etto gracias por ayudar a Sasuke-kun. —me dijo tartamudeando y sonrojadaꟷ Pensé que nos habías olvidado, Naruto-kun.

Del teme jamás me olvidaría, pero de ti sí que no me acuerdo, es lo que pienso. No voy a decírselo en voz alta, primero que me diga de donde “nos conocemos”.

—Por supuesto que no los he olvidado ttebayo. —le dije con una falsa sonrisa.

—Jeje… cre-creo qu-que de-de sasu-chan no te olvidarías fácilmente pe… pero se-seguro que de mí no sabes nada. —en eso tiene razón.

—Discúlpame, pero no soy bueno con los nombres y caras. —trato de sonar divertido mientras mantengo mi falsa sonrisa.

—Y-yo etto... soy Hi-Hinata Hyuga, he sido compañera con ustedes dos en pri-primaria. —me suena a que seguramente es otra de las que nos ignoraba. Eso sólo hace que quiera averiguar tus intenciones con el teme.

—En ese caso te dejaré la dirección de mi apartamento, para que me vayas a ver y puedas contarme con mucha más calma como se encuentra el teme. Soy una persona muy ocupada y no puedo quedarme hasta que despierte, pero me harías un gran favor al hacerlo. —dije sinceramente me preocupa, pero aprovecho para darle una mirada seductora mientras beso su mano. Este truco funciona siempre con cualquier chica y ella no es la excepción.

Tras dejarlo en claro que debe ser un absoluto secreto su visita, me alejo perdido en mis pensamientos ¿Hace cuánto esta con Sasuke? ¿Qué siente él por ella? ¿Por qué casi literalmente se mata por protegerla? ¿Ella qué busca en él? Lo mejor será que le pida ayuda a Sakura-chan, estoy peleado con el teme así que no puedo preguntárselo directamente, pero con ayuda de mi gran amiga veré que esa que te acompaña no sea una interesada. Si todo sale como pienso podré divertirme un rato con su cuerpo, y de paso alejarla de Sasuke, él jamás la perdonará, si entre ellos hay algún tipo de relación. No puedo permitir que alguien como ella se acerque tanto al corazón de MI amigo.

 

FIN DEL POV DE NARUTO

 

Fue el último pensamiento que tuvo antes de perderse en los pasillos de la escuela, a la espera de noticias del teme, a través de la ilusa pelinegra. En la enfermería el menor de los Uchiha abría con lentitud y dolor los ojos para encontrarse con una Hinata de lo más preocupada y a la vez feliz.

—Sasu-chan estas despierto, que alegría. —gritó antes de abrazarlo.

—¿Y tú estás bien hina? —preguntó por si no había logrado protegerla.

—¿Cómo me puedes preguntar eso? El que resultó herido fuiste tú. —respondió molesta por la falta de instinto de auto preservación-si no hubiese sido por Naruto-kun quién sabe… —fue interrumpida por el de ojos noche.

—¿El dobe qué tiene que ver? —preguntó desconcertado, pero con un cierto calorcito de esperanza.

—Él es quien te trajo cargando hasta aquí, estaba muy preocupado. Hasta me dio la dirección de su hogar para que vaya a contarle como estas.

Esto lleno de un cálido sentimiento el pecho de Sasuke, el hecho de saberse importante para su amigo, pero a su vez esa sensación subió hasta sus mejillas tiñéndolas de carmín. Sintió una alegría que intento disimular sin mucho éxito, ya que crecía la esperanza de recuperar al Naruto que perdió. Algo que no pasó desapercibido por Hyuga, quien tomo la decisión de al fin aclarar sus sentimientos, pero para ello, se los dejaría claros primero a su amigo.

—Sasuke-kun sabes que yo hace mucho estoy enamorada de Naruto-kun. Y ahora que me ha dado su dirección pienso aprovechar como excusa irle a contar sobre tu salud para declararme. —finalizó con la misma seguridad.

—¿Por qué me lo cuentas? No necesitas mi permiso ni nada parecido. —comentó un poco dolido sin razón aparente.

—Es que yo sé que también estás enamorado de Naruto-kun y antes de que lo niegues como siempre, déjame decirte que sólo te engañas a ti mismo. Pero yo te quiero mucho, eres mi amigo y no quiero que esto traicione tus sentimientos, por eso quiero saber si me apoyaras en mi decisión. —afirmó con preocupación de que el azabache se sienta traicionado o se arruine su amistad.

—Hina-chan tú sabes qué el dobe es solo un amigo. —intentó tranquilizarla con una sonrisa que demostraba tristeza.

—Por favor sasu-chan, eres mi amigo y si me pides que no le confiese mis sentimientos lo haré, porque tu amistad es muy valiosa para mí. Gracias a ti ahora también soy amiga de Juugo, Suigetsu y Karin, eso es algo que jamás hubiese imaginado antes de conocerte. Por eso y por todo lo que has hecho por mi te dejaré la decisión de esto.

Hyuga era sincera con sus palabras, ella sería capaz de renunciar a la oportunidad de tener una relación con el rubio, si su amigo así se lo pedía. Era la única forma en la que sentía que podía devolverle un poco de todo lo que él había hecho por ella en esos tres años. La elección era de Sasuke: ¿aceptar que su amiga tenía razón y amaba a su amigo o seguir como siempre y simplemente apoyarla en su declaración?

 

 

 

 

 

CONTINUARÁ……   

 

 

 

                 


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