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SOY UN JUGUETE DEL DESTINO por shiki1221

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Notas del capitulo:

OHAYO MINNA-SAN como dije aki les traigo el siguiente cap del fic. muchisimas gracias a kienes comentaron:

love sasunaru, naaaaattt , nee chan, anonimo, c.c.b, umaru-chan y naruf

en serio me alegran el dia ver los reviews q me dejan n_n para kienes recien sepan de mi como autora o como algunos dijeron comienzan a leer fics, yo he escrito otros 7 fics aparte de este asi q si le interesa lean y dejenme su opinion en el fic q les agrade.

las canciones q yo pongo en los caps aunq originalmente esten en ingles o japones siempre pongo la traduccion para q se entienda porq  la elegi, ya q en algunos fics q yo he leido las letras no estaban en español  y yo no entendia muy bien el por q de esas canciones y me tomaba mucho tiempo buscar la traduccion XD.

CAP 23: POPULARES VS MARGINADOS

 

 

El primer día de clases fue uno de los más memorables para muchos de los alumnos, en especial para los ingresantes que estaban más que satisfechos de haber escogido el instituto Tsukiyomi, el cual les ofrecía buenos maestros, planes de estudio adecuados para seguir carreras exitosas… ¿A quién engañaban? Lo que de verdad les gustó fue ver a tantos chicos y chicas guapos, ya que, si bien ser ricos era importante, la mayoría lo era, y eso quitaba parte del encanto de tener una buena posición económica al no tener a quien presumirle. No era frecuente que se restregaran en la cara las riquezas de sus familias, debido a que siempre debían hacerlo de manera discreta, para no afectar los futuros negocios de sus familias. Lo que hacía especial al colegio era tener a algunos famosos estudiando en el mismo lugar que ellos.

Sin embargo, era más importante este día para Uchiha y su amiga de ojos perla, ya que durante el verano se habían propuesto cambiar en apariencia y por fin revelar sus verdaderas personalidades. Por lo general no deseaban llamar la atención, preferían mantener un perfil bajo que no destacara por nada en especial, por lo que escondían sus habilidades y talentos del resto de sus compañeros, pero eso se acabó. Todos verían que tan buenos eran en todo lo que hacían y ¿qué mejor regalo les pudo haber entregado el karma que poniéndolos a todos juntos? Les estaban dando una manera de llevar a cabo sus planes, y estando en el mismo salón que los presumidos, les resultaría más fácil dejarles en claro que a ellos no podrían rebajarlos nunca más. Esta era una oportunidad de oro que no desperdiciarían por nada, este año nada sería como antes.

Todos estaban expectantes de ver lo que sucedería en el salón más cotizado de todos, para la desgracia de muchos, todo el alumnado no seleccionado en el salón de famosos, no podrían ver lo que sucedería entre todos ellos. Los “afortunados”, como fueron apodados por los excluidos, estaban emocionados de ver que pasaría. Nadie era tan ciego como para no ver las miradas que se lanzaban los más llamativos alumnos del instituto.

La manera de caminar de los populares era bastante acelerada, querían ser los primeros en llegar al salón asignado, de alguna manera sentían que eso los hacía ser mejor que sus “enemigos”. Naruto pretendía llegar antes que el cantante pelirrojo, necesitaba hacerlo antes que el mapache para poder elegir un lugar que lo dejara cerca de Sasuke. Pero el rubio no era el único que deseaba sentarse cerca del Uchiha; las gemelas Yamanaka también deseaban hacerlo. Para ellas pese a que el pelinegro sea pobre, no le quitaba el hecho de ser increíblemente guapo, una noche apasionada con él sería de lo mejor. Y como bono extra, alguna de ellas le estaría quitando el “novio” a la inútil Hyuga si seducían al Uchiha, obviamente luego de llevarlo a la cama lo botarían o lo tendrían como un amante ocasional. Dependiendo de qué tan bueno sea en el sexo, así dejarían bien en claro que la de ojos color perla no podría superarlas en belleza jamás.

Los demás como Gaara, Sasuke y su grupo de amigos no le prestaron atención al lugar donde se sentarían. ¿Qué importaban los lugares si lo divertido sería dejar en ridículo a los presumidos? Aunque aún no supieran exactamente cómo lo harían, les gustaba la idea de verlos coléricos y poder sacarles un par de canas verdes. Ahh pero no lo harían por medio de bromas, que aunque pesadas y subidas de tono, no dejaban de ser muestras de actitudes infantiles. Ellos lucharían como en la guerra fría: de manera silenciosa y letal.

Cada vez que intentaran hacerles algo, se defenderían de una manera tan madura y eficiente pero cruel y terminante, que nadie se les acercaría a no ser que supieran dos cosas: en primera, artes marciales, en caso de querer utilizar la violencia, y en segunda tener un gran conocimiento de diversas cosas si es que deseaban decir algo en contra de las creencias de ellos.

La distribución del salón no fue la gran cosa, y fue el maestro del mismo el que asignó de manera aleatoria los asientos correspondientes, por lo cual todos quedaron separados de quien querían por “vecino” de asiento. A algunos les gustó, pero a los más importantes que estaban centrados únicamente en llegar primeros por obtener un lugar estratégico, les resultó frustrante.

El maestro encargado de dichas ubicaciones fue Iruka Umino, él se presentó ante todos los alumnos, siendo reconocido por varios de ellos, quienes se sorprendieron de su presencia allí. El sensei por su parte reconoció a unos cuantos, como por ejemplo a Naruto, Karin, Juugo y Suigetsu. Luego de la presentación, tomo su rol como maestro y aclaró que con él estudiarían construcción ética-cívica y derechos ciudadanos.

—Bien chicos, yo seré su sensei en esta materia, mi nombre es Umino Iruka y para iniciar tomaremos el tema de lo que es moral. Verán, hace algún tiempo salió una noticia que da mucho para pensar, en un país de Europa se arrestó a un hombre por dar limosna. Según las autoridades lo hicieron porque el dar dinero a quien no tiene ingresos sólo alienta a los vagos. (N/A: esta noticia es real). Por eso para comenzar a entrar en el tema de la moral y la ética, hoy haremos un pequeño debate acerca de si es o no correcto darle ayuda económica a los más desafortunados. Recuerden que sus posturas deberán ser bien fundamentadas. —aclaró con la sonrisa comprensiva que siempre tenía.

La modelo vio una gran oportunidad para demostrar que por mucho que cambiarán por fuera, Uchiha y sus amigos, eran un montón de pobretones que no tenían donde caerse muertos, a excepción de shukaku obviamente. Como bien decía el dicho “por más que la mona se vista de seda, mona queda”. La sonrisa macabra en la cara de la de ojos jade fue imperceptible para casi todos, menos para ciertos ojos perla que ya estaban correspondiendo a esa sonrisa con otra igual de siniestra, pese a no ser vista por la pelirrosa.

—¿Algún voluntario para exponer primero su argumento? No importa si el primero es a favor o en contra. —dijo el sensei de la cicatriz.

—Yo quisiera ser la primera Umino-sensei. —se ofreció Haruno de la manera más “inocente”, según ella, para contestar.

—De acuerdo, dinos: ¿Que sería lo moralmente correcto? ¿Dar o no la limosna que se nos pide? —Umino tenía un mal presentimiento respecto a lo que pudiera decir aquella chica, que no dejaba de mirar con odio a otro alumno de pelo negro.

—Pienso que es incorrecto dar dinero a alguien que no lo tiene simplemente porque lo está pidiendo, es su culpa haber nacido pobre, no veo la razón por la cual ayudar a alguien sin dinero. —dijo con aires de superioridad, siendo secundada por la mayoría del alumnado.

—Alguien tiene algún argumento en contra de lo dicho por la señorita Haruno. —dijo prácticamente entre dientes Umino, por la rabia que le provocaba que alguien hablara de esa manera de los menos afortunados.

—Yo quisiera dar mi argumento sensei. —levantó la mano Hyuga pidiendo permiso de hablar. Al recibir un asentimiento del sensei, ella prosiguió con la batalla silenciosa que dejo pendiente en la entrada— Lo que dices es muy arbitrario y de poco sentido común. Dices que no hay que darle dinero a quien lo pide por necesidad, que es el caso de varias personas sin recursos, pero eso es aplicable a los que nacieron ricos. —dijo mirando a varios que la observaban con odio— ¿Qué han hecho ellos para merecer dinero? Todo lo que tienen les es dado por su familia, por sus padres quienes, si trabajaron para conseguir lo que tienen, aunque en casos de familias con varias generaciones trabajando en una empresa o negocio familiar el esfuerzo es cada vez menor, ya que sólo heredan lo que hicieron sus antecesores. Entonces están incluso peor que la persona en situación de calle, porque presumen de dinero que no ganaron. —terminó de decir sonriente al ver los gestos de indignación de la mayoría del alumnado.

—Pero al menos tienen el dinero y eso es más importante y digno, que tener que estar en la calle viviendo de la lástima de las personas, esas personas no tienen valores. Tener dinero es más mejor. —se metió una de las Yamanaka muy enojada. (N/A: lo que dice Ino está mal gramaticalmente, pero lo hice a propósito)

—Ese dinero no vale nada, al igual que las cosas que presumen tener los niñitos ricos, porque fueron recibidas de la nada, no conllevan ningún esfuerzo por lo tanto no representan nada más que la “suerte” que tienen, la cual no es muy diferente de la “lástima”. —argumentó Karin metiéndose también.

—Además, hablas de valores, esa gente “de la calle”, como suelen decirle, han visto lo peor del mundo. Hay niños que quedaron huérfanos sin hacerle daño a nadie y como hay ciertas personas, —recalcó Hinata mirando directo a los ojos a la rubia— muy mezquinas y egoístas no les ayudan. Entonces, ¿por qué debo considerar a ese niño un vago que no merece ayuda? Yo sé que el dinero que le dé de limosna, para él significa posiblemente la única comida que probara en días. En cambio, los niñitos de papi, ¿qué hacen con el dinero que piden? Lo gastan en sus diversiones y cosas sin valor para presumir.

—Bueno, pero ser pobre es denigrante. Ellos nacieron pobres y eso es asqueroso. —dijo colérica la pelirrosa.

—Suena mucho mejor ser pobre de dinero que ser una pobre arrastrada que se casa con gente millonaria sólo por tener dinero. —le respondió con una sonrisa de suficiencia muy Uchiha la de cabellera negra— Eso es ser simplemente una prostituta cara.

—¿Me estás diciendo vendida? —exclamó en un grito la de ojos jade.

—Yo no dije eso, pero si te lo tomas así, por algo será. —le aclaró Hyuga.

—No entiendo por qué alguien pagaría mucho por una zorra fea. —comentó inocentemente Sai.

—No le digas zorra fea a Sakura-chan. —defendió el rubio.

—Yo no dije que alguien pagara por ella, yo dije por zorras y feas. Si asumiste que lo dije por la tabla de planchar, eso significa que hasta tú sabes que es una zorra fea. —eso dejo mal parado al Uzumaki, ya que cayó en cuenta que él mismo dio a entender que su amiga era lo que ellos afirmaban.

—A ver chicos creo que se están desviando del tema. Si alguien tiene alguna opinión respecto al tema por favor levante la mano. —dijo el sensei mirando decepcionado a la mayoría por su forma tan superficial de pensar, hasta que vio como una mano se alzaba tímidamente— ¿Cómo te llamas y a quién apoyas? —esperanzado el profesor de encontrar más personas valiosas en ese colegio.

—Buenos días, me llamo Kimiko y apoyo a Hinata (N/A: me ahorro la descripción de Kimiko porque es la misma de mi fic “el valor de un te amo”. Si la extrañaban denle las gracias a mi beta por ponerla). Mi familia, como todos saben es una de las más antiguas y poderosas de Konoha, pero a diferencia de muchas que se abren paso en la vida destruyendo y explotando a otros, a mí me educaron con muchos valores y desde siempre me han dicho mis padres, que los pobres no eligieron nacer sin privilegios. Además, que es de gente ignorante pensar que porque son pobres tienen menos valor, por el contrario, gracias a ellos el mundo está en pie; ellos trabajan la tierra, nuestras empresas, casas y hasta nos educan, ya que desde que nacemos una niñera o nana como quieran decirles, son las que nos ayudan y están la mayor cantidad del tiempo con nosotros. Así que nosotros somos de los que si nos piden una limosna no se las damos, porque eso no los va a sacar de la pobreza, en vez de eso les ofrecemos un trabajo digno con un sueldo que sea merecido al cargo que desempeñaran, para que vivan dignamente. Así que lo siento Sakura, pero tu forma de pensar es asquerosa y me repugna que una persona como tu tenga lujos que no mereces y que sólo va a servir para fomentar vicios y no vas a ser de ningún aporte para la sociedad.

—Gracias Kimiko por tu forma de pensar y agradezco que tu familia sea una de las pocas que intentan que el mundo sea cada día mejor. Última pregunta y esta es general: ¿Quiénes apoyan a Sakura? Levanten la mano quien. —sólo vio ocho manos alzadas por lo tanto veintiún alumnos estaban con Hinata.

Para la buena suerte de muchos, (quienes estaban avergonzados de su forma de pensar sobre la pobreza) pudieron darse cuenta que ellos no querían ser como Sakura y sintieron un gran alivio cuando escucharon tocar el timbre del receso. Todos salieron del salón rápidamente, listos para almorzar algo con sus amigos o buscar a sus conocidos de otros salones y contarles lo que presenciaron durante la clase. El grupo de los populares salió más que molestos por lo que sucedió, no podía ser que los que quedaron mal parados fuesen ellos. Se suponía que ellos eran los que humillaban a los demás, no al revés, sin embargo, los “marginados” lograron dejarlos como idiotas.

El grupo en el que tanto pensaban los populares, se dirigió a su lugar de siempre a almorzar, con excepción del azabache que se dirigió al salón de maestros para buscar al Umino. A nombre de la curiosidad propia y de sus compañeros por saber de la razón de la presencia de su sensei de primaria allí, Uchiha fue para saber que sucedía. Hayo a su antiguo sensei de primaria en el salón de maestros tomando café en solitario, esa era una buena oportunidad para aclarar dudas.

—Hola Iruka-sensei hace tiempo que no nos vemos. —dijo el de ojos negros.

—Esto… disculpa, pero ¿quién eres? —preguntó confundido, debido a que el chico se le hacía familiar (y no por haberlo visto en su salón de clases hace un rato), pero no sabía exactamente de donde lo podía conocer.

—Que cruel de su parte olvidarse de mí, pero supongo que tengo algo de culpa por mi apariencia. —le dijo con una media sonrisa inconfundible.

—¿Sasuke? ¿Mi pequeño Sasuke-kun? —preguntó el sensei, quien tenía lágrimas en los ojos de la emoción de poder reencontrarse con uno de sus niños después de tanto de no verlo— ¿Cuánto ha pasado desde que no te veo? ¿Un año o dos? —preguntó abrazando al azabache.

—Ha sido sólo un año y medio sensei, lamento no haber estado yendo al orfanato, pero he tenido ciertas complicaciones. —se disculpó apenado de no poder visitarlo con más frecuencia como solía hacerlo antes.

—No te preocupes Sasu me he enterado de tu situación, ya que hace un tiempo que me llegó una citación del Juzgado de menores, para declarar en el juicio por tu custodia. —le sonrió conciliador el mayor.

—Pero ahora dígame, ¿qué hace enseñando en el instituto si su vocación es enseñar a los niños pequeños? —interrogó interesado Sasuke.

—No quisiera agobiarte con mis problemas apenas nos reencontramos, pero... —el castaño soltó un largo suspiro.

—¿Pero? —animó Uchiha sabiendo que si su sensei estaba ahí era por algo— Cuénteme que es lo que le sucede sensei, Karin, Juugo y Suigetsu también están interesados, ya que hace mucho que no van por el orfanato así que tampoco me han comentado nada. —declaró la verdad, los de taka no iban al orfanato desde que consiguieron la beca y pudieron conseguir pequeños trabajos de medio tiempo que les daba el suficiente ingreso económico para mantenerse por sí mismos.

—Verás Sasuke-kun, el orfanato tiene problemas económicos, han llegado muchos niños y no tenemos el espacio físico suficiente ni los recursos para atenderlos a todos. Por eso tomé este trabajo para conseguir todo el dinero posible, porque no han estado llegando personas interesadas en adoptar, así que la mayoría se queda por tiempo indefinido y como dije, siguen llegando más. —la voz del Umino sonaba muy afligida y preocupada por la situación.

—Entiendo, hablaré con nii-san para que... —pero antes de terminar la frase, Uchiha fue interrumpido por su sensei.

—No, Sasuke-kun yo si me enteré de los problemas por los que están pasando ambos, no puedo hacerlos cargar con algo que es de mi responsabilidad como director.

—Pero nosotros le debemos mucho a usted y a su orfanato, nosotros podríamos…

—No. —determinó tajante el mayor— Por ahora preocúpate por ti mismo, yo sé que Itachi-kun hace su mejor esfuerzo por tenerte a su lado, no puedo dejar que le pidas ayuda.

—El juicio por mí custodia será pronto y una vez que terminé lo ayudaremos quiera o no ¿entendido? —dijo con una sonrisa el de ojos noche a lo que el otro sólo pudo devolverle la sonrisa, sabiendo que no lo haría cambiar de opinión.

—Bien, ve a disfrutar de tu receso con tus amigos. —le dijo Umino, feliz de verlo de nuevo y con la misma amabilidad que siempre ocultaba.

—Sí, Iruka-sensei. —se despidió para emprender la caminata hasta donde se suponía que lo estarían esperando sus amigos reunidos.

Por el camino el azabache no podía sacarse de la cabeza lo que le comentó su sensei, en verdad hace demasiado tiempo que no se veían y se estaba perdiendo en su mente en busca de una solución. Este podría ser el momento en el que tal vez podría devolverle algo de la ayuda que le brindó a él y su hermano cuando más lo necesitaron. En verdad quería ayudarlo, pero no sabía cómo hacerlo; darles dinero no resolvería nada, ya que éste se terminaría, pero los niños seguirían allí. Necesitaba una manera de hacer que más chicos fuesen adoptados, no sólo por el beneficio que suponía en el aspecto económico, sino que el sueño dorado de esos niños era tener una familia, ya sea de nuevo porque la perdieron trágicamente o para conocer lo que es el calor hogareño, por haber sido abandonados antes de saber lo que era tener un hogar.

Caminaba por los pasillos del instituto en los que siempre acostumbraba andar durante el año anterior, cuando cruzó en frente del baño de hombres, y como si fuese un deja vú, fue jalado por un par de fuertes brazos como el primer día de clases en el instituto Tsukiyomi.

—Hola teme, necesitamos hablar. —ordenó enojado el rubio.

—Tú y yo no tenemos nada de qué hablar yondaime. —dijo igual de molesto Uchiha, recalcando el seudónimo de su ex mejor amigo, él estaba muy ocupado pensando cómo ayudar al orfanato para que lo interrumpan.

—Claro que tenemos mucho de qué hablar teme. —le dijo el rubio en un tono autoritario— Debes alejarte de shukaku, él es peligroso para ti.

—Tú no eres quién para decirme con quien puedo o no estar. Además, no hables así de Gaara, él es mi amigo y no permitiré que lo insultes. —replicó molesto el de ojos noche.

—Te lo digo por tu bien teme, ese sujeto sólo busca acostarse contigo. —dijo molesto el de ojos azules— Sólo te follará como a una muñeca inflable y te dejará tirado cuando ya no le sirvas.

—¿Cómo tú lo hiciste con Hina-chan? —cuestionó con el sarcasmo marcado en la voz.

—Ese es un asunto aparte, además esa era una zorra cualquie… —el rubio iba a decir palabras con desprecio, pero no alcanzo a terminar la frase antes de que Uchiha lo golpeara en la mejilla.

—No te permitiré que hables así de mi mejor amiga. —afirmó el pelinegro viendo como le rompió el labio del fuerte golpe.

—¿Te molesta la verdad teme? Ella sólo es otra interesada en sacar todo lo que pueda de ti, al igual que el resto de las personas. Tú y yo sabemos que soy la única persona que no se aprovecharía de ti. —respondió Uzumaki con intención de devolverle el golpe, fallando al ser detenido con facilidad por el menor. Quien lo sostuvo por la muñeca y le torció el brazo al de ojos claros por detrás de la espalda, quedando sus rostros peligrosamente cerca.

—Escúchame bien yondaime, yo no soy un pobre inocente. Sé muy bien quienes son las personas en las que puedo confiar y quiénes no. —susurró cerca del oído del rubio, aligerando la fuerza del agarre, soltando finalmente su brazo luego de aquella frase.

—Por supuesto que eres muy inocente y estúpido, no sabes nada de lo que yo sé de shukaku, ni de las cosas que él es capaz de hacer. —exclamó molesto Naruto mientras se sobaba la muñeca, tratando de aliviar el dolor que le produjo el agarre del Uchiha.

—Tú eres sólo un pobre fracasado que humilla a los que están a tu alrededor simplemente para desquitar la frustración que sientes por haber sido un “marginado”. —dijo con calma Uchiha— Ni siquiera te importó humillarme a mí que era tu mejor amigo.

—Aún eres mi mejor amigo Sasuke-teme, lo que hice estuvo mal y yo en verdad lo lamento ttebayo. —le dijo Uzumaki sinceramente apenado por lo que había sucedido, y esa honestidad fue claramente notada por Sasuke.

 

Quise olvidarte, pero ya era tarde, amor

Lágrimas no dan perdón

Si me quedo más tal vez me lastimarás

¿Cómo confiaré en ti?

Sólo buscas la ocasión de pedirme mi perdón.

Te amé con todo mi corazón. Creí en ti más de una vez

 

—Te juro que me arrepiento de haberte lastimado, pero es que no deberías estar junto a esos buenos para nada. —el tono cambio de afligido y arrepentido a uno despectivo hacia los amigos de Sasuke.

—Ellos pueden superarte en cualquier cosa dobe, no hables mal de las personas sin conocerlas. —la tranquilidad que tuvo el pelinegro cuando su “amigo” se disculpó, se disipó de inmediato.

—Sólo digo la verdad. —se defendió tercamente el cantante— A mí lo único que me interesa es que volvamos a estar como antes, ya te lo dije lo demás no importa.

—Te dije que jamás te perdonaría lo que me hiciste, y cumpliré mi palabra como Uchiha. —afirmó con su característica superioridad el de ojos noche.

—Bien, si así lo quieres. —le devolvió la sonrisa de suficiencia el rubio mostrando una expresión gélida— Te demostraré que mi grupo de amigos y yo somos muy superiores a ti y a ese montón de arrastrados. Y cuando lo haga serás tú el que me venga a suplicar que por favor vuelva a ser tu amigo.

 

Ver la realidad me entristeció. No me duró ser feliz

Piensas solo en ti. Duele ver la realidad.

Es el final ni me intentes buscar

Aunque yo te amé tengo que reconocer, que no me supiste amar

Quieres mi perdón, pero lo debes ganar

 

—Sabes que podríamos haber vuelto a serlo si no insistieras en que renuncie a las personas que me importan. —el tono y gesto nostálgico de Sasuke fueron captados por el otro.

—Yo sólo quiero que no sufras, ni tengas que pasar por el dolor que yo pasé. —Uzumaki apretaba los puños ante los recuerdos que lo invadían.

—No me has contado que te sucedió en Kirigakure para que cambiarás como lo has hecho. ¿Qué fue tan terrible de tu estadía allí? —cuestionó con interés el menor.

—No es algo que necesites saber. —determinó cortante el de ojos azules.

—Bien, pero mantendré mi palabra, verás cómo es que mis amigos son mucho mejores que los tuyos e incluso mejores que tú. —respondió el azabache molesto por la falta de información sobre aquel maldito viaje.

—Pues lo veremos pronto sasu-teme. —la sonrisa burlona estaba estampada en su cara de kitsune, aunque por dentro sintiera tristeza por no haberse reconciliado, pero mantenía la esperanza que luego de superar a los demás Uchiha abriera los ojos. Lucharía contra lo que sea por tenerlo a su lado, de eso estaba totalmente seguro.

 

No sé si pueda olvidar. Tienes que demostrar lo que por mí sientes

Te amé. También creí en tu amor

Nada dolió más que el perderte. Ver que solo me hacías sufrir

Por fin me abrió los ojos. Puedes marcharte

Mi temor ya se esfumó. Es el final ni me intentes buscar.

 

Con esas últimas frases intercambiadas entre ambos, abandonaron en silencio el baño para volver con sus grupos. Lástima que no alcanzaron a convivir mucho con los demás, ya que de inmediato sonó la campana anunciando que debían entrar a clases y ¿cuál era mejor clase para después de comer? La de educación física. ¡Ah! pero para mayor alegría de los alumnos, la clase era dada por nada más ni nada menos que por Gai-sensei, alguien demasiado “inspirado”, tal vez era la palabra para describir a este extraño sensei que deseaba dejarlos secos de sus fluídos corporales. Sus rutinas en esa clase eran legendarias por los motivos menos queridos. Para quienes no lo conocían, pronto sabrían por qué muchos buscaban desesperadamente una forma de saltarse esta materia si el sensei era Gai.

—Hola, ¿qué onda? ¿Qué cuentan todos? —gritó apareciendo de la nada un sujeto vestido con mallas verdes, el cabello negro cortado como un tazón y para hacer su apariencia aún más llamativa enormes cejas, eso más el hecho de estar poniéndose en una postura sumamente rara, que al parecer pretendía ser… ¿sexy? ¿Genial? Quién sabe. (N/A: esta fue su presentación en el cap 22 de Naruto, lo que dijo lo saque de su dialogo en español latino). Yo soy la hermosa y sensual bestia verde de Konoha, Maito Gai y soy reconocido por todos como el más genial de todos los tiempos. Hoy mis pequeños aprendices tendrán el honor de explotar la llama de su juventud conmigo. —exclamó muy emocionado con el pulgar arriba y una sonrisa que mostraba todos sus dientes.

El pensamiento general de todos los alumnos fue que ese sensei había escapado de algún manicomio y se dedicaba a matar a los alumnos de manera lenta y tortuosa por medio de una exhaustiva clase de educación física, que los haría transpirar más que estando veintitrés horas en un baño sauna. Sin embargo, sólo una persona se atrevería a expresar su más sincera opinión, aun en riesgo de algún castigo o peor aún de suspender la materia…

—Usted debe tener serios traumas infantiles ¿verdad? —dijo Sai con su típica sonrisa falsa— No hay manera de que alguien lo considere sensual, a menos claro que este muy ebrio o desesperado. Tal vez ese sea su plan, agotarnos tanto físicamente que ya no pensemos bien y creamos esas idioteces que nos está diciendo desde que llegó.

—¿Cómo puedes decir eso? Tú el paliducho de sonrisa de maniquí. —lo señaló dramáticamente con su dedo— Para tu información yo era muy popular, incluso tengo un archirrival eterno y él sabe que algún día lo encontraré y me desquitaré por haber dejado a medias nuestros legendarios duelos. Los cuales por cierto hasta ahora van 49-50 a favor suyo. —exclamó con una mano acariciando su barbilla en gesto pensativo.

—Seguro que ese último reto fue tener el pene más grande que el suyo sensei. —la cara del maestro era un poema, pero no por las razones que todos creían— Los esteroides hacen crecer los músculos, pero le encogen el pene.

—¿Cómo te enteraste de que competimos por saber quién tenía el pene más grande? (N/A: esta competencia entre Gai y Kakashi fue real está en un cap de relleno de naruto shippuden en el que mencionan que compararon el tamaño de sus miembros cuando eran niños). —la cara de los alumnos no tenía precio tampoco— Y lo peor de todo es que ese maldito la tenía más grande que yo, la mía era apenas del tamaño de una bellota. —exclamó el cejotas sensei con ríos de lágrimas de cocodrilo en los ojos.

—Me lo imaginaba, pero no esperaba que lo admitiera tan fácil. —nuevamente esa sonrisa perturbadora de parte de Sai, quien pronto se vio siendo agarrado con mucha fuerza por los hombros.

—Tú, tú seguramente eres un espía, que te estás haciendo pasar por un alumno para obtener información. —le dijo el sensei muy seriamente.

—¿Qué dice? —preguntó algo nervioso ya no tan sonriente.

—Sí él te mandó para averiguar todo sobre mí para poder finalmente vencerme en nuestra milenaria batalla. —con una expresión llena de seriedad el mayor.

—¿No que él iba ganando? —preguntó algo desconcertado Sai.

—Eso no importa ahora haremos algunos ejercicios básicos de calentamiento, los pondré en parejas para que puedan realizar mejor los ejercicios. —ese cambio radical de tema sólo alentaba a los estudiantes a pensar que efectivamente le faltaban algunos tornillos al sensei.

Todos los alumnos estaban a la expectativa de quien sería la persona que les tocaría como pareja, la cual, aunque fuese sólo para los ejercicios, les permitiría realizar acercamientos físicos “estrictamente” necesarios. De manera que no estarían atentando contra sus propias vidas si tocaban “accidentalmente” a ciertos alumnos a los que tenían en la mira. Sin embargo, todo dependía de lo que eligiera el sensei.

 

 

 

 

CONTINUARÁ….

 

 

 

 

Notas finales:

como siempre espero sus reviews y ak les dejo la cancion q use en este cap. 

 

Ending de saint tail “junshin” (canta sasuke)

https://www.youtube.com/watch?v=ZqAEW4-3sKo

 

una pregunta para los q tienen tiempo de hacerme saber lo q les gusta. 'les molestaria el crossover? es q necesito a 2 personajes secundarios y no soy buena inventando uno nuevo, ademas de q los personajes dentro de la serie de naruto no cumplen con lo q kiero de ellos.

si hay muchos en contra reeditare el cap q incluye el crossover. 

en fin hasta la proxima janne n_n


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