Era una mañana ajetreada en el palacio de Pacto De Sangre, los consejeros del Rey le daban las minutas de lo acontecido ayer por la noche con el príncipe y el Rey de Gran Shimarron, el soberano Shibuya, tenía sus manos entre lazadas apoyando su barbilla a estas pensando detenidamente, mientras seguía escuchando la indignación y exaltación de sus más leales y nobles consejeros.
Gwendal
--- Debemos anular el matrimonio, una ofensa de esta naturaleza no puede ser concebida de ninguna manera----
Gunter
--- Es verdad su majestad, nuestro príncipe ha tenido que pasar por el momento más traumático y vergonzoso de toda su vida, es injusto le siga atado a un ser inmundo como este---
Conrad
--- Mi señor, se bien que es difícil la situación por la que atraviesa nuestra nación, pero… ese asqueroso hombre lastimo a Yuuri, no podemos dejar esto así como así---
Los hombres seguían hablando, mientras el Rey seguía sin decir ni media palabra, cuando en eso entraba al despacho el monarca de Shimarron Mayor, todos lo voltearon a ver con indignación y odio, el Rey Shibuya simplemente le ofreció asiento extendiendo su mano para que este pasare y tomara posesión del asiento frente al monarca.
Saralegui
--- Vengo a avisarle que dentro de un par de horas me iré---
Gunter
--- Já, ya se está tardando---
Gwendal
--- Gunter, por favor ahora no. ---
Gunter
--- ¡¡ Pero…!!---
Gwendal
--- Por favor, no es el momento.---
El peli lila es replicado por su esposo, al notar que sus comentarios estaban de más, y querían saber que era lo que ese sujeto tenía planeado para el futuro príncipe y para Shin Makoku, después de todo aún seguía siendo el marido de Yuuri supuestamente.
Saralegui
--- Solo he venido a avisarle de mi decisión, espero no tenga alguna objeción---
Soma
--- Entiendo… ----
Saralegui
--- Yuuri vendrá conmigo ---
Conrad, Gwendal y Gunter
--- ¡¡ESO ES IMPOSOBLE!!---
Soma
--- Me parece que es lo correcto---
Conrad, Gwendal y Gunter
----¡¡¡¿¿Qué??!!!----
Soma
--- Saralegui es el marido de Yuuri, él puede disponer de su consorte como mejor le plazca, en cuanto al incidente de anoche, ellos ya son maridos y deberán resolver sus diferencias entre ellos, es común que para Yuuri su primera experiencia en la intimidad haya sido tortuosa pero, es solo eso, como consorte real de Saralegui deberá aplicarse a su actual situación y tomar el papel que le corresponde, yo no puedo interferir entre decisiones de alcoba de un par de esposos.---
Conrad
--- ¡¡¡ ¿¡Pero su majestad!?!!!----
Soma
--- Si esto se hubiera suscitado en otro escenario, ten por seguro que yo mismo tomaría cartas en el asunto, pero el Rey Saralegui estaba en todo su derecho como esposo de Yuuri de tomarlo para sí, además de que es un requisito para consolidar la unión entre naciones, lamento que Yuuri tuviera que pasar por algo así en su primera noche pero… entiendo a la perfección el lado del Rey de Gran Shimarron, así que, por favor Sara, cuide de mi hijo y procure no ser tan violento la próxima vez---
Saralegui
--- Agradezco lo haya tomado de esta manera, no esperaba menos de usted, en cuanto a ustedes, Yuuri es mi esposo y yo sabré ganarme su corazón, por lo que no deben preocuparse más por mi relación con mi esposo.----
Conrad
--- Esto no es justo para Yuuri, no puede llevárselo, él no lo aceptara---
En eso las puertas del despacho se abren y una bella dama de ojos castaño intenso casi rojos camina enfurecida hasta donde Soma y frente a todos le da una gran y sonora bofetada en un mar de lágrimas.
Miko
---¡¡¡COBARDE!!! ¡¡¡ERES UN MALDITO COBARDE!!!---
Soma solo gira el rostro a un lado sin responder nada, tanto Saralegui, así como los demás en el despacho del Maou se han quedado sorprendidos por la intromisión de la reina al despacho y aún más al ver como la bella monarca le ha dado soberana bofetada al rey de Shin Makoku, Miko da media vuelta y mira con total y absoluto desprecio a Saralegui, camina hasta donde Conrad y en un movimiento rápido desenvaina la espada de este, y la apunta a la garganta de Saralegui.
Miko
--- ¡¡CANALLA!! MALDITO CANALLA, ¿COMO TE ATREVISTE A FORZAR A MI HIJO DE ESA MANERA TAN RUIN Y DESPRECIABLE? ESPERO ESTE EN PAZ CON SUS DIOSES, PUES HOY LO ENVIARE AL INFIERNO----
Miko, se abalanza a donde Saralegui este de un movimiento rápido esquiva la estocada que iba directo a la yugular del peli rubio platino, todos se quedaron sorprendidos, Conrad y Gwendal detienen a la mujer de cometer una locura, Saralegui, decide salir del despacho no sin antes decir:-
Saralegui
--- Lamento que las cosas se salieran de contexto en cuanto a mi esposo, pero así es como son las cosas ahora, y por lo pronto Yuuri deberá acostumbrarse a su nueva vida a mi lado, lamento que este acontecimiento sea tan terrible para ustedes pero… la decisión ya está más que tomada y Yuuri es mi esposo; por lo que el vendrá conmigo, así como seguirá cumpliendo con sus demás obligaciones y funciones de Consorte.----
Conrad
---- ¡¡Usted no puede obligarlo!! -----
Saralegui
---- ¡Claro que puedo es mi esposo! Y yo hare con él lo que yo quiera---
Conrad
--- ¡¡CLARO QUE NO!! EL NO…---
Gwendal
---- ¡¡CONRADO!!---
Gwendal interrumpió a Weller antes de que cometiera un grave error y revelara la verdadera situación de Shibuya y Wolfram, Conrad sentía el coraje y la impotencia al mismo tiempo y antes de volver a crear una situación difícil decide salir del despacho del Maou azotando la puerta tras él, está furioso no quiere ver que su ahijado se vaya con ese hombre tan ruin y despiadado, en eso ve como venía Yuuri de la mano junto A Wolfram quienes hablaban muy animados, Weller no puede permitir que ese par sean separados, aún recuerda la primera vez que les descubrió juntos, una sonrisa se dibuja en sus labios y una tristeza se asomaba en sus ojos, ¿Cómo sería separar a ese par cuando siempre han estado juntos? ¿Cómo podrían vivir la vida, uno separado del otro, cuando no podían estar ni medio día sin saber dónde estaba su otra mitad? Yuuri y Wolfram miraban a ambos lados del pasillo como buscando quien podría descubrirles y al no ver a nadie del reino de Shimarron, Yuuri tomaba del talle a Bielefeld y le besaba con gran amor y ternura, mientras el oji esmeralda se abrazaba a su cuello y se sonreían al besarse y se dedicaban palabritas dulces.
El sol se les filtraba entre sus ojos haciéndoles brillar y destellar, con ese ámbar en la mirada de Shibuya y aquel dorado en las esmeraldas de Bielefeld, era como magia, y un aura dorada les cubría, su felicidad parecía perpetua, mas ¿Cómo serlo si detrás de aquellas puertas, el destino cruel planeaba su separación? Conrad no puede soportar ver como aquel par se deberá separar, sale del pasillo para poner su mente en claro y pensar de qué manera poder ayudar a este par.
Caminaba por los jardines de palacio y no había ni un solo rincón donde no recordara un momento junto aquel par, por ser el hermano mayor de Wolfram y el padrino de Shibuya siempre ha estado cercas de ambos y fue testigo de cada momento especial entre ellos sin que se dieran cuenta, siempre los ha cuidado a la distancia y siempre ha vigilado por cada momento de felicidad de su par mas amado, sus niños favoritos, sus pequeños adorados, un lugar en especial le llama al ir caminando aquel lugar especial donde Shibuya y Wolfram bautizaron como “el paraíso” era su pedacito de cielo en un reino de demonios, siempre Yuuri decía que ese lugar estaba incompleto hasta que llego Wolfram a completarlo.
FLASH BACK.
Yuuri
--- Ven, ven por aquí, por aquí---
Wolfram
--- ¿¡Ya puedo abrir los ojos!?---
Yuuri
--- No, no, todavía no, ya casi, un poco mas ¿Si?---
Wolfram
--- ¡Pero Yuuri, así me vienes diciendo desde hace mucho! ----
Yuuri
--- Solo un poco más, un poquito más ¿sí?---
Yuuri llevaba a Wolfram con sus bellas esmeraldas cerradas, hasta una verja con una enredadera colgada en sus barrotes Yuuri abre con cuidado aquella puesta cubierta de hierba, tomando de las manos a Wolfram, el rubio seguía sin abrir sus ojos, era tan lindo para Shibuya el ver a ese rubio tan obediente y sumiso a su voluntad, no había cualquier locura que no se le ocurriera al oji negro que no hicieran juntos ese par, como subir a la tercera torre del castillo por la parte exterior para desde allí contemplar todo el palacio mientras Gunter se desmayaba del susto al ver a ese par escalar las bardas y ventanales hasta llegar a la cúpula y después cuando bajan de unos cuantos saltos solo sujetados de las manos mientras se morían de la risa al ver a Gwendal como trata de revivir a su esposo quien parece entregar su alma al Shinou después de aquel gran susto.
Aquella otra ocasión cuando Yuuri obligo a Wolfram a que se vistiera de gato por toda la semana, portando gallardamente su uniforme y llevando en su cabeza una diadema con orejas de gato y un cinto donde se colgaba una cola grande y esponjosa, en tono tan rubio como su cabello con la punta blanca.
Todos en palacio no podían evitar ver tan adorable a aquel chiquillo quien en todo momento pareciera estuviera haciendo un gran sacrificio y no votar hasta el más allá esas orejas, pareciera que algo lo imposibilitaba, cada que el rubio estaba harto de traer aquel disfraz y estaba por botarle, solo bastaba una mirada de ese par de ónix, con esa mirada tan triste para que el oji verde se detuviera y estuvo así toda aquella semana.
Wolfram era su muy querido amigo, su cómplice de travesuras, no había momento en que no estuvieran haciendo una, ese día era especial para Yuuri y quería compartirlo con Wolf, llevaban siendo amigos ya 10 años, Shibuya creyó que ya era tiempo de mostrarle un secreto, el más grande de todos y que sabía solo podía compartirlo con el rubio, un secreto solo para los dos.
Yuuri llega al centro del lugar y cierra con cuidado aquella reja, regresa a donde Wolfram quien está sentado en el pasto donde lo dejara Shibuya, aquel niño sentado a medias de ese lugar con la luz del sol iluminando toda su silueta, aquel dorado de sus rizos mezclándose con el destello de la luz solar, el sonido del viento pasando por entre las hojas de los árboles y el sutil movimiento de los risos del oji esmeralda al soplo del viento, una dulce fragancia a flores silvestres y como a lo lejos se escuchaba el correr del agua, Yuuri decía haber completado su Paraíso, una vez lo tuvo completo y esa pieza se perdió, se fue dejándolo solo, pero ahora, ahora volvía una pieza nueva, aun mejor que la anterior decía, pues ahora lo tendría para él, y nadie podría robárselo.
Yuuri
--- Ya puedes abrir los ojitos---
Wolfram al escuchar la melodiosa voz del príncipe Shibuya va abriendo sus ojitos, lo primero que contempla es a el oji negro con aquella enorme sonrisa enmarcando su cara, y alrededor suyo el destello de la luz del sol del mediodía.
Yuuri
--- Bienvenido a mi paraíso, desde ahora nuestro paraíso, este será nuestro secreto, nuestro escondite, nadie en todo el palacio sabe de este lugar e septo tu y yo… dime, ¿te gusta?---
Wolfram
---¡¡Yuuri…!! Esto es, precioso… ¿Cómo puede existir un lugar así en un reino como este?----
Yuuri
----Este será nuestro secreto, todo lo que aquí pase será solo de los dos, aquí no existen etiquetas ni nada de esa tontería de títulos de realeza, solo seremos los dos, tu y yo, nada más. ---
Wolfram se ponía en pie y caminaba maravillado de aquel lugar, parecía como le decía textualmente Shibuya, el paraíso, miraba las flores multicolor, los árboles frutales, el cantar de las aves y a lo lejos se podía ver un lago de aguas cristalinas que al revote de la luz reflejaban un verde tan intenso como sus ojos, Wolfram caminaba extasiado viendo aquella belleza, aquel esplendor, su pecho estaba acelerado, era como estar en un sueño, Yuuri contemplaba a aquel Mazoku de dorados rizos caminar descubriendo todo y maravillándose por todo, de repente gira de regreso a donde Yuuri y le extiende la mano, Yuuri corre a su encuentro más que feliz, a su paraíso solo le faltaba un Ángel con quien compartirle, y ahora le tenía, le tenía para siempre.
Wolfram
--- ¡¡Esta muy bonito!! Gracias Yuuri, es precioso---
Yuuri
--- Sip, es hermoso y solo contigo quería compartirlo, solo tú y alguien más sabe de este sitio, bueno sabia de este sitio---
Wolfram
---- ¿A qué te refieres con eso?---
Yuuri
--- Hace muchos años, antes de que tú llegaras, antes de que mama se enfermara de tristeza, yo… yo venía muy seguido con alguien muy especial....
Wolfram
---- ¿Con quién?----
Yuuri
--- Se llamaba Susana Julia, era mi hermana mayor, ella me enseño este sitio, ella dijo que era como el cielo en tierra de demonios y que solo puros de corazón podían entrar, yo le creía puesto que ella era tan hermosa como un Ángel y era tan bondadosa de un corazón indestructible, o al menos eso crea, pues ella murió del corazón cuando yo apenas tenía 8----
Wolfram
---- Lo siento mucho Yuuri, yo no debí… de verdad lo lamento, enserio que no quería…---
Yuuri
--- Mi paraíso se quedó vacío por mucho tiempo, después que ella se fue, ya no había ángeles a quien contemplar, ni con quien reír, ni con quien jugar, solo estaba yo, un niño Mazoku en un paraíso incompleto, incompleto hasta ahora---
Wolfram
--- Yuuri… ¿Qué estas tratando de decir?---
Yuuri
--- Ahora otra vez está completo mi cielo, ahora puedo decir que tengo de regreso mi paraíso, pues te tengo aquí conmigo---
Yuuri le regalaba una sonrisa mientras hablaba con Bielefeld esta sentía que el corazón se le salía del pecho ¿acaso el príncipe se le estaba declarando?
Wolfram
--- Yu…Yuuri tu estas diciendo que…----
Yuuri
--- ^__^ Que eres tan bonito como un angelito y que ahora ya nada le falta a este paraíso Hehehehe----
Wolfram
---¿¿ Que soy tan bonito como un angelito?? ¿Quieres decir que solo por eso me trajiste aquí? <<< Idiota y yo que pensé que… estúpido, estúpido enclenque>>> Ya me voy…---
Yuuri
--- No, no, por favor si acabamos de llegar, además desde hoy este será nuestro lugar especial, cualquier cosa que hagamos aquí solo será para los dos, te prometo que te la pasaras muy bien, eres la única persona que quiero que conozca mi secreto, por favor Wolf, no te vayas ----
Wolfram da un pesado suspiro y detiene su andar después de todo es su mejor amigo y el solo se hizo falsas esperanza se decía a sí mismo, pues ¿Qué se podía esperar de crio de apenas 24 años (12 años humanos)? El por ser el mayor teniendo 28 (14 ) era obviamente el mayor y quien debía actuar mas maduramente, puesto que Shibuya seguía siendo un criajo, que aún no le evolucionaba el cerebro decía.
Wolfram
--- Esta bien enclenque, ¿Qué quieres que juguemos?---
Yuuri
--- ¡¡¡No me llames así!!! ¿Mmmm… que te parece si jugamos al escondite? -----
Wolfram
--- Bueno, yo cuento y tú te escondes ---
Yuuri
--- Sip, pero si no me hayas en menos de 30 minutos pierdes y deberás pagar con un castigo que yo te ponga---
Wolfram
--- ¿Cómo? ¿Y cómo por que debes de castigarme?---
Yuuri
--- Porque si, además yo pongo las reglas hehehee, si no cumples con el castigo que te ponga habrá una sanción también---
Wolfram
--- Vale, vale, ya entendí está bien te encontrare mocoso <<< ¿Por qué tengo que hacer estas cosas? Yo ya no soy un niño, y debería de darse cuenta de esto Yuuri, ahhh… es por demás, él es tan despistado que nunca se daría cuenta de nada, y por otra parte este es el último año que estaremos juntos, pues debo ingresar al colegio militar, así que le daré gusto, y jugare con el todo lo que quiera>>>> 14, 15, 16, 17, 18, 19, Y 20!! ¡¡¡Listo o no haya voy!!!---
Wolfram tenía un alto rango como soldado de búsqueda y rescate, pues su hermano mayor Gwendal en el tiempo que ha estado en palacio lo ha mandado a con las tropas a hacer recorridos de reconocimiento y búsqueda, por lo que el seguir el rastro de Yuuri seria sencillo, se decía, aun y a pesar de que no conocía el lugar no le resulto difícil seguir el rastro del príncipe y encontró rápido las huellas de sus botas, Wolfram se sentía seguro de ganar esta ronda cuando se topa con un detalle interesante, Shibuya se había retirado las botas a la orilla del lago, desde la rama de un árbol Yuuri veía a Wolfram, se tapaba la boca para no reír a carcajadas, pues el ver la expresión de su amigo al ver que había fallado era única, Wolfram se cruzaba de brazos y colocando una mano en el mentón se puso a pensar, el panorama desde aquella ubicación donde se encontraba Shibuya era excepcional y le permitía ver todo con plenitud y el contemplar al rubio así era maravilloso, para Shibuya Wolfram era algo como irreal, pues este chico era mayor a él y tenía un carácter fuerte más a su lado parecía un manso gatito, con el cual podía jugar a su beneplácito y el rubio no se molestaría, Yuuri quería que Wolfram estuviera a su lado por siempre, era su muy querido amigo, tan querido que no sabría qué hacer si un día no lo tuviera a su lado, Wolfram después de meditar un rato y como si este ya supiera donde estaba Shibuya dirige esa mirada gatuna asía aquel árbol frondoso, es como si le estuviera viendo, cosa que no es así, es solo que Wolfram tenía esa expresión de determinación y confianza cuando tenía la corazonada de saber dónde estaba aquello que buscaba.
Yuuri sintió el peso de la mirada penetrante de Bielefeld y estuvo a casi nada de caer de la rama más se sostuvo del tronco, esto hizo que las ramas de aquel frondoso maple se movieran y cayeran al piso algunas hojas, dando con esto una clara ubicación de su posición Bielefeld no lo duda ni un instante y llega hasta la base del árbol voltea asía arriba y allí estaba cuan gato montés trepado en la rama el oji negro.
Wolfram
--- ¡¡Te he encontrado!! Ahora baja ya mismo---
Yuuri
--- ¡¡NÓ!! Eso fue trampa, no se vale, no se vale, otra vez---
Wolfram
--- ¿¡Me estás diciendo tramposo!? Baja de una buena vez enclenque bueno para nada---
Yuuri
---¡¡No soy un enclenque!! Y no me bajo, no me bajo y has le como quieras---
Wolfram
--- ¿¡Con que si eh!?---
Bielefeld se retira un par de pasos del árbol y dando un giro sobre su propio eje da una tremenda patada a el tronco del maple, haciendo cimbrar todo el árbol, las ondas expansivas que se formaron recorriendo el árbol hasta llegar hasta la rama donde Shibuya estaba sacudiéndole por completo y haciendo que este perdiera el equilibrio haciéndole caer.
Wolfram
---- 3… 2… ¡¡Te tengo maldito debilucho!!---
Wolfram sabía que Yuuri no tendría la fuerza para sostenerse después de aquel sacudión y caería, sabiendo asía donde caería el pelinegro, Bielefeld extendió los brazos y cerrando los ojitos hizo una cuenta regresiva y justo en el último digito el príncipe caía en sus brazos.
Wolfram
---¡¡ Ahora sí, maldito enclenque!! Prepárate por que te voy a llevar a que conozcas a tus ancestros—
Yuuri
--- ¡¡No, no, no, espérate, espérate, suéltame, suéltame!!---
Wolfram
--- Ni creas, debilucho de pacotilla ----
Yuuri
---- Perdón, perdón, no lo dije enserio, solo no quería perder tan rápido, si me sueltas te daré un premio---
Wolfram
--- ¡¡Já!! ¿¡¡¡Tratando de sobornar a un orgulloso soldado Mazoku!!!?---
Yuuri
--- Esto… pues veras, no es como crees, Wolfy…----
Wolfram
---- Esto amerita una rigurosa sanción de cosquillas sin piedad---
Yuuri
--- ¡¡No, cosquillas no, por favor Wolfy, no!!! Hahahahahahahaha… Ya… hahahahahahaha… ya…. Hahahahahahha para, hahahahahaha Hahahahaha vas hacer que me haga pipi, hahahaha ya hahahahahaha no me hagas reír hahahahahahahahaha…. Hahahahahahahaha, por favor ahahahahahahahahahaha----
Wolfram después de haber atrapado a Shibuya y después de aquella peña conversación arremetió contra el pelinegro tumbándolo al pasto y haciéndole cosquillas por todo el cuerpo, subiendo sobre este, quien se retorcía a carcajadas bajo su ser.
Más las cosas no serían siempre a favor del oji verde, Shibuya aunque pareciera un enclenque no siempre resultaba ser así y en un momento la situación dio un giro inesperado para el rubio, pues Shibuya se defendió aplicando la misma táctica, Wolfram era mucho más sensible que Yuuri por lo que este no pudo controlar más su riza y acabo tendido en el pasto con el pelinegro arremetiendo contra del, sacando de su garganta sonoras risotadas, mientras intentaba quitarse de encima al príncipe.
Yuuri
--- ¿Ahora quién es el enclenque?----
Wolfram
--- Hahahahahahahahaha Yu…Yu… yuhuhuhuhuhhuhuhuhahahahahahahahahha Yuu… ri, hahahahahahahahahahaah ya no aguanto hohohohohohoho… hahahahahahahaha ya… ya…. Para hahahahahahahahahahahahaha…tu…tu… tu ganas…. Ahahahahahahahahahahahahahahahaha----
Yuuri y Wolfram seguían riendo, Yuuri reía al ver a su amigo con aquel ataque de risa y Wolfram aún no podía controlar sus carcajadas, mas algo mucho más interesante esta por pasar, Pues Shibuya estaba encima de Bielefeld y al estar rosando su piel, su febril cuerpo empezaba a despertar a nuevas sensaciones, aún desconocidas por aquel par, Yuuri sin proponérselo al querer retirar un poco su ser de encima de Bielefeld, se rosaron sus intimidades, generando nuevas sensaciones que al parecer serian de lo más disfrutables para ese par, al hacer Yuuri aquel movimiento de caderas involuntario sobre la pelvis de Bielefeld, tanto el rubio como el peli negro se sintieron muy bien, tanto que logró sacar un gemido del oji verde, sorprendiendo con este sonido a Shibuya y haciendo le sentir muy bien y a la vez curioso de saber que era esas nuevas sensaciones y por qué Wolf reacciono así.
Wolfram
---- Ahhh… Y-Yu… Yuuri, baja te, baja te dé una vez----
Yuuri
--- ¿¡Eh!? Ah sí, sí, me bajare solo deja que…----
Wolfram
--- Ahhh… no… no, te muevas así… ¡¡solo bájate!!----
Yuuri
--- Pero… si se sintió bien, muy bien, además nunca te había escuchado hacer ese sonido. Quiero escucharte otra vez ----
Wolfram
--- N-No seas irrespetuoso moco…ahhh….ahhmm Yu…Yuuri, deja de hacer eso…ahhhmmm—
Las mejillas de Bielefeld se empezaron a tornar rojas al seguir recibiendo de Shibuya aquel rose de caderas, frotando uno encima del otro su hombría que empezaba a despertar, Wolfram se tapó la cara y se mordía el labio inferior al seguir sintiendo por parte de Yuuri aquellos roses, Yuuri por su parte se empezaba a sentir acalorado y una terrible necesidad por querer tocar aquella zona del oji verde que empezaba alzarse al igual que la suya, quería sentir aquella parte, piel con piel, sentía que sus prendas estorbarían, por lo que pretendía retirárselas cuando.
Wolfram
----¡¡¡Espera Yuuri!!! ¿¿Qué demonios estás haciendo??---
Yuuri
--- Me estorba… me estorba estas prendas, necesito quitarme esto---
Wolfram
---¡¡NÓ!!...No, no hagas eso… ahhh….ahhh… deja de restregarte encima de mi… ahhh… ahhgg… esto no, ¡¡no está bien Yuuri!!----
Yuuri
--- Solo… solo un poquito más, ¿sí? Se siente muy bien, ahhh… muy bien ----
Wolfram
---- No seas idiota, quítate---
Wolfram aparta de su ser a Shibuya, por ser el, el mayor de los dos, ya sabía que era lo que estaba pasando en ese momento y sabía que no debían dejarse llevar por estas sensaciones, Wolfram tumba de encima suyo a Shibuya y lo hace caer de posaderas, el oji negro le mira con unos ojos que nunca antes le había hecho, esa mirada nunca antes la había visto, Shibuya estaba cayendo bajo el influjo de aquel deseo que apenas empezaba a experimentar, la excitación y las nuevas sensaciones que experimentaban, Wolfram traga en seco y camia un par de pasos alejándose de Shibuya, mas tanto como el oji negro su entrepierna estaba más que despierta, sentía mucha vergüenza de tener que estar así en ese estado tan precario, enfrente de su mejor amigo y que este estuviera en las mismas, mas Yuuri es inexperto, pero no por esto menos atrevido, el oji negro se pone de rodillas y empieza a desabrocharse su pantalón, pues la punzante erección que tenía ya no toleraba más de las prendas íntimas.
Yuuri
--- ¡¡Ahh!! Wolf, ¿Por qué, porque esta así?----
Wolfram
-----¡¡¡¿¿Pero que estás haciendo??!!! Idiota, ¿Qué no sabes nada de tu cuerpo?----
Yuuri
---- Es que… el estar así me estaba lastimando, mis ropas me lastimaban, pero ahora no… ¿no sé qué hacer? ¿Tu, sabes qué debo hacer para que regrese a su normalidad?---
Wolfram
--- ¡¡Eres un pervertido!!----
Yuuri
--- Ayúdame Wolf, ¿que se supone que debo hacer?---
Realmente Yuuri desconocía como podía bajar esa erección, era la primera vez que se sentía excitado, y solo podía pensar en aliviar su imperiosa necesidad que parecía crecer y crecer, mientras que Wolfram estaba tan avergonzado, al ver la erección de Shibuya y la carita de súplica que hacia el moreno junto con esa mirada entre nublada por la excitación y el deseo, eso hacía que su entrepierna se pusiera aún más dura, se acerca a el moreno y l mira fijamente, traga otra vez en seco y se rasca un poco su cabeza con desesperación mientras pensaba como salir de esa situación tan embarazosa.
Wolfram
--- Yuuri, escúchame bien, esto… esto debes de aprender a controlarlo, cada que te pase debes suspirar hondo y tratar de serenarte antes de que te pongas así, pero como ahora esto es imposible, yo te… te enseñare a como alivies esta necesidad---
Yuuri
--- ¿Cómo Wolfram? Necesito saber qué hacer, siento que esto está por explotar----
Wolfram
--- está bien, no explotara, Ahora solo fíjate muy bien lo que voy hacer, y tú lo harás en ti---
Wolfram se desabrochaba sus prendas dejando expuesto también su hombría, Yuuri abre con sorpresa sus ojos al ver que Wolf estaba tanto o más excitado que él, en el rostro del rubio un carmín enmarcaba sus mejillas, y aquel ceño fruncido lo hacía verse endemoniadamente bien, haciendo que Shibuya se sintiera más necesitado por liberar a su cuerpo de esa extraña sensación.
Wolfram
--- Yuuri, has lo mimo que yo hare, y… ahhh… así podrás sentirte mejor….ahhh….ahhnnmmmm---
Wolfram se tomaba su falo para que le viera Yuuri y empezaba a masturbarse frente al más pequeño, quien al ver como Wolf disfrutaba de esa acción no lo dudo e imito los mismos movimientos de Bielefeld en su propio cuerpo, Yuuri se sentía más que bien, empezaba a experimentar sus primeros momentos de éxtasis, mas su curiosidad era grande y quería saber que se sentiría tocar la erección de Wolf, si se sentiría igual a la suya, si tocando a Bielefeld este se sentiría mejor, ya que él, quería sentir las manos de Wolf tocando su cuerpo, sin dudarlo mucho detiene su auto felación y se acercaba un poco más a Wolf, quien estaba con sus ojitos cerrados de rodillas con su mano auto satisfaciéndose; cuando siente como otra mano más cálida que la suya y de una textura más suave le aprisionaba en un puño su miembro, retirando así de este su propia mano, Bielefeld abre los ojos con sorpresa al ver que Yuuri empezaba a estimularle, cuando siente como con la otra manos libre le guiaba a su erecto pene.
Yuuri
---- Quiero… quiero que tu…. Que tú me toques, porque yo quiero tocarte Wolfram, tócame, tócame más, así… ahhh….si….así Wolf, no… no… no te detengas ahhh….ahhhh----
Wolfram
---- Ohh… Yuuri… ahhh…. ahhh…. ahhh, hazlo más fuerte, apriétame más, ahhh… ahhh…. ahhh. Si, Así. Ahhh… ahhh… sigue Yuuri, sigue ahhh… ahhh… ahhh….----
Yuuri y Wolfram se daban placer uno al otro, era su primera experiencia sexual entre ellos y lo estaban pasando muy bien, después de un rato de estar estimulándose mutuamente alcanzaron el orgasmo uno en manos del otro, expulsando aquellos fluidos blanquecinos, produciendo una gran satisfacción en ambos, Wolfram se recuesta en el pasto tratando de acompasar sus respiraciones y los latidos de su corazón, mientras que Yuuri jadeaba y trataba de recuperar el aliento sentado en el pasto contemplando como Wolf estaba perlado en sudor.
Wolfram
--- Esto… esto no debe de repetirse Yuuri, esto no está bien----
Yuuri
--- ¿Por qué? si a mí me gustó mucho, quiero volverlo hacer---
Wolfram
--- No digas tonterías Yuuri, tú eres el príncipe de Shin Makoku y yo solo soy un soldado, no debemos cruzar esa línea, además… esto no está bien----
Yuuri
---- ¿Wolf… y si esto lo mantenemos en secreto? Así, sin que nadie más lo sepa, ¿me dejarías volverte a tocar y me volverías a tocar?----
Wolfram
---- Que tonterías estas diciendo Yuuri, no está bien lo que estamos haciendo----
Yuuri
--- por favor, te prometo que nadie más lo sabrá, ¿sí? Déjame seguir te tocado---
Wolfram
--- ¡¿Qué no entiendes?! Entre nosotros no debe pasar nada de esto, solo debemos ser amigos esto no se volverá a repetir---
Wolfram se levantó del pasto ajusto sus ropas y estaba por irse cuando escucha un sollozo por parte de Yuuri, eso lo hace detenerse en seco, no quiere voltear a ver, sabe que se encontrara con la cara llorosa de Yuuri y eso le partiría el corazón, mas debe consolar a Shibuya, desde que se conocieron jamás se ha podido resistir a su carita de sufrimiento cuando está apunto del llanto, por lo que escucharlo sollozar le parte el alma, da media vuelta y ve aquel pelinegro con sus ojillos llenos en lágrimas, con el semblante más que triste mirando para un lado, con sus manitas echas puño queriéndose aguantar las ganas de llorar, mas no pidiendo pues sus lágrimas escurrían de sus ojos sin querer.
Wolfram no puede permitirse que Yuuri llore por su culpa, se próxima a él y lo abraza envolviéndolo entre sus brazos y reconfortando al azabache.
Wolfram
--- Está bien, está bien, será nuestro secreto, pero ya no llores, dejare que me toques todo lo que quieras, pero ya deja de llorar----
Yuuri
---- No quiero obligarte hacer algo que no quieras---
Wolfram
---- Tonto enclenque, ¿Quién te ha dicho que no quiero?----
Yuuri
--- Wolf… ahhh…. ahhh… espera… ahhh….ahhhhmmmm….ahhhhmmmm----
Wolfram
---- Este…ahh… este será nuestro secreto Yuuri, así pase el tiempo seremos cómplices en esto… solo no dejes que nadie más te toque…----
Yuuri
---- Ahhh….ahhhh….Wolf…ahhh…ahhhhhmmmm…. solo tú, solo tú me tocara ahhh….ahhhh….ahhhh… será nuestro secreto Wolfy…ahhh…---
Wolfram volvía a estimular a Yuuri llevándolo otra vez al éxtasis, el oji negro por su parte también tocaba al rubio mientras se aferraba a su espalda con desesperación.
Yuuri sentía un gran placer estando así con Wolfram y el verle con su boca entre abierta le dieron ganas de saber a qué sabrían esos labios tan apetitosos, se acerca a este y posa sus labios en los de Bielefeld, este se sorprende pero al calor de la excitación se deja llevar, cerrando los ojos y entreabriendo la boca para dejar pasar la lengua inexperta de Shibuya, tampoco era como si Wolfram tuviese más experiencia, solo es que era un poco mayor y tenía una ligera noción de las cosas, además Wolfram sabía que dentro de poco partiría al colegio militar así que darle gusto al príncipe no estaba tan mal después de todo.
Y así paso aquel día, después de haberse estado tocando y besando casi todo el día ambos chicos estaban más que agotados, Wolfram regreso a duras penas a sus alcobas, los familiares del rubio pensaron que se la pasarían jugando hasta el cansancio, por parte de Yuuri y aunque no lo pareciera estaba muy feliz, se recostaba en la cama después de darse una ducha y se abrazaba a la almohada, se sentía contento de tener ese secreto con Wolf y quería seguir jugando a ese nuevo juego, por parte de Wolf después de la ducha se recostó boca arriba mirando el dosel y preguntándose qué demonios estaba pasando con ellos dos, la noche caía y el cansancio se hacía presente, por lo que el rubio cayo rendido al sueño, un oji negro no podía dormir, se daba vueltas y vueltas y vueltas en su cama, le hacía falta algo pero… ¿que sería?
Sin pensarlo mucho tomo su manta y colocándosela encima salió con sigilo de sus habitaciones un par de soldados se dieron cuenta de que el príncipe salía de su habitación, no hicieron escandalo solo le siguieron para ver que no se metiera en problemas, cuando llega a las habitaciones del rubio, gira con cuidado el pomo de la puerta y entra al cuarto, claro antes voltea a todos lados para no ser descubierto según el.
El rubio estaba tendido bocarriba con ambas piernas y brazos extendidas en toda la cama, Yuuri poco a poco va subiendo al colchón y se acorruca en el pecho de Bielefeld, abrazándolo del dorso y sabiendo una de sus piernas hasta su cadera, quedando muy cómodamente ajustado al cuerpo de Bielefeld, el cual ni se dio cuenta que Yuuri había entrado a hurtadillas a su habitación.
A la mañana siguiente Bielefeld iba abriendo lentamente sus ojos cuando siente como unos brazos lo rodeaban, Bielefeld estaba acostado de lado y tras del, un cuerpo estaba pegadito al suyo, sujetándolo férreamente a su cintura con una mano y la otra metida en sus pantaloncillos sujetando su ser, Bielefeld no sabe muy bien que deba hacer, además Yuuri le tiene sujeto por allí, ¿Cómo se le ocurre tomarle de esa parte? una venita punzaba en su sien, con molestia suspira hondamente y le pega un pellizcó en la mano a Shibuya haciendo que este despierte de un salto.
Yuuri
--- Au, Au, Au, Auuuu… ¡¡eso dolió Wolf!!---
Wolfram
--- ¿¡Me puedes explicar qué demonios estás haciendo Yuuri!?---
Yuuri
--- ¡¿Eh?!---
Wolfram
---¿¿¡¡Por que estas en mi cama y también porque me estabas agarrando allí abajo!!??---
Yuuri
--- Esto… hihihihi, bueno yo… pues veras, anoche, yo no podía dormir y me vine a tu cama, y bueno, esto… pues lo de allí abajo, creo que eso fue mientras dormirá hihihihi no recuerdo que te estuviera tocando, pero creo que necesitas ayuda---
Wolfram
---- ¿¡De que estás hablando!?---
Yuuri señala con su dedo asía la entrepierna de Bielefeld que estaba más que despierta, un carmín se presenta en el oji verde, al darse cuenta que su cuerpo reaccionaba de inmediato ante el contacto de Shibuya, se da una palmada en el rostro tapando su cara y con la otra mano se bajaba la camisola de sus pijamas tapando su erección.
Yuuri
--- No te preocupes yo te voy ayudar ----
Wolfram
--- ¡¡Espera, espera que estas haciendo!!---
Yuuri
--- ^__^ Me preguntaba a qué sabría y sabe muy bien---
Wolfram
--- ¡¡No hagas eso… ahhh… ahhh… oh por Shinou!!! Ahhh… ahhh… aahhh… Yuuri---
Yuuri sin pedir más el consentimiento de Bielefeld tomo entre sus manos la despierta virilidad del oji verde y la engullo por completo, al parecer Shibuya era un jovencito demasiado precoz, y su curiosidad e ingenuidad lo alentaban a ser demasiado atrevido poniendo en grandes dilemas a un rubio que se retorcía bajo Shibuya al experimentar sus primeros momentos íntimos y recibir por primera vez sexo oral, y lo que era aún mejor, mas no pensaba decírselo a nadie; de la persona que más quería.
Yuuri
--- ¿¡Te gusta!?---
Wolfram
--- I-Idiota… ahhh…ahhh… ¡¿Qué pregunta tan… más estúpida?! Ahhh… si, si, si me gusta mm…mucho ahhh….ahhhh… no pares. No te detengas Sigue, sigue Yuuri ahhh….ahhhh…..ahhhh----
Bielefeld gemía con fuerza, mientras se aferraba a las sabanas y elevaba su pelvis al ritmo que Yuuri seguía con su felación, esa escena se repetiría incontable de veces, pues Shibuya empezaba a gustar de ver de esa manera a Wolfram, el ver como se retorcía y se revolvía bajo su ser al ser estimulado monuelamente o por medio de sus lamidas y succiones.
El tiempo transcurrió y estaban a escasos días para que Wolf se fuera de palacio a su nuevo colegio, cuando Yuuri se enteró, se enfado muchísimo con Wolfram, tanto así que no le dirigía la palabra, esto ponía realmente triste a Wolfram, pues le dolía en el alma que su príncipe estuviera enojado con él, muy independiente de sus encuentros secretos en lo que llamaban su paraíso, era el último día que Wolfram estaba en palacio, terminaba de alistar sus cosas en sus equipajes, preparaba su nuevo traje militar que llevaría en el colegio y daba un pesado suspiro al pensar que todo lo que una vez fue entre él y Yuuri ya habría acabado, por parte del príncipe Shibuya estaba enterrado bajo sabanas y edredones, abrasado a su almohada con sus ojos llorosos y el ceño fruncido, le quitaban a su Honney, puesto que de un tiempo a la fecha así le empezaba a decir, pues decía que él era tan dulce como la miel.
Wolfram no le gustaba ese sobrenombre mas solo a su Hahaue y a Yuuri les permitía le llamaran así, eran las 11:34 pm, todos en palacio dormían, un rubio de ojos esmeralda no podía cerrar los ojos, su última noche y peleado con el príncipe no era como pensaba abandonar el castillo, se arma de valor y aun y en contra de sus propios principios sale de sus habitaciones, va con sigilo por los pasillos esquivando uno a uno a los guardias que patrullaban por palacio, llegando hasta las habitaciones del príncipe. El cual estaba tanto o más despierto de lo que quisiera, estaba acostado boca arriba, mirando asía el dosel, con el ceño fruncido los puños cerrados y apretando los dientes tratando de evitar gritar del coraje e impotencia, estaba enojado consigo mismo, puesto que por su estúpido berrinche el ultimo día y la última noche que estaría Wolfram a su lado la pasarían separados, un par de lágrimas escaparon de sus ojos, se frota fuertemente sus cuencas para evitar no llorar cuando se escucha como la puerta de su habitación se abre, Yuuri se sienta de golpe, mas al estar todo obscuro no ve nada, se vuelve a recostar en la cama pensando que fue seguramente el viento o algo así.
Coloca el brazo sobre su rostro pensando en que fue un estúpido y perdió el tiempo estando enojado y no disfrutando de la compañía de quien más quiere en todo Shin Makoku, cuando siente como suben a su cama, y se trepan en su regazo.
Una fragancia agradable a hierbas frescas y flores se hace presente, conoce ese dulce aroma, despacio se va retirando la mano de sus ojos y mira asía enfrente y allí se encuentra con ese par de ojos gatunos verde esmeralda, el rubio le miraba con tristeza en sus pupilas y casi al punto del llanto, Yuuri traga en seco, nunca pensó que vería a su amigo así, mas ya no sabe cómo deba llamarlo,¿ su cómplice, su víctima, su amante? su todo.
Wolfram
--- Yuuri… por favor, no estés enojado conmigo, perdóname, perdóname por favor---
Yuuri
---- Wolfram… yo…----
Wolfram
--- Esta… esta es la última vez que nos veremos, no quiero irme sabiendo que me odias Yuuri---
Yuuri
---- Wolfram, yo… yo…----
Wolfram
--- Yuuri…----
El oji negro no pudo con aquella mirada cargada de tristeza y angustia del oji verde y le tomo entre sus manos y le aproximo a sus labios, entregándose a un beso tan puro que gradualmente se fue intensificando, los labios de Shibuya aprisionaban a los de Bielefeld, una danza entre sus lenguas se llevaba acabo, a Wolf se le olvido cerrar de bien a bien la puerta de la alcoba del príncipe por lo que se quedó entre abierta, quien hacia guardia esa noche era Weller, quien escucho unos sonidos provenientes de las habitaciones del príncipe y al ver la puerta entre abierta decide asomarse, cuando allí se da por enterado de un suceso que jamás imagino pasaría y menos entre ese par, Yuuri despojaba de las prendas superiores a Wolfram y le besaba en los hombros mientras sus manos recorrían su suave piel hasta llagar a sus glúteos.
Wolfram estaba encima de Yuuri meciendo sus caderas de adelante asía atrás, mientras recibía del príncipe aquellos besos y caricias, besando también el cuello del príncipe, Weller se ha quedado estupefacto, para sus ojos ellos eran apenas unos niños, ¿Cuándo es que crecieron?¿cuándo es que ese par tenían esa clase de relación?¿quién más sabia de esto?
Wolfram se iba recostando asía atrás permitiendo así que Yuuri le besara el pecho, mientras el moreno introducía su mano en las prendas del rubio para sacar su falo erecto y le empezaba a estimular, Wolfram gemía muy leve, sabía que a unos cuantos paso estaba la habitación de los monarcas y no debía llamar la atención, ese era su secreto y debía permanecer así.
Yuuri lamia los pezones erectos de Bielefeld, su sabor era exquisito decía, con su mano empezaba a estimular la hombría del oji esmeralda y con la otra acariciaba su pecho, Bielefeld se mordía el labio inferior para evitar gemir más alto, mas Yuuri ansiaba por escucharlo gemir de placer, por lo que con algo de violencia le muerde el pezón sacando un fuerte gemido y haciendo que el rubio se excitara mas al elevar sus pelvis.
Wolfram
---- AAAAHHHH….AHHHH… ahhhmmm…. Yuuri… ahhh no, no me muerdas… tan fuerte…-----
Yuuri
--- Gomenasai… es que yo quería escucharte de esta manera, me vuelve loco escuchar así tu voz, gime y jadea para mí, quiero escucharte Honney… ahhmmmm….mmmhhhh!!!!---
Wolfram
---- Ahhh… Yuuri… pero, nos pueden descubrir…ahhh…..ahhh…..----
Yuuri
--- Que dilema…ahhhmmm… eres exquisito Honney….ahmmm…mmmhhh…. quiero devorarte, ahhh…. quiero estar siempre unido a ti ahhh…ahhh … Tócame, recorre con tus manos mi piel, siento que me muero si no me tocas---
Shibuya se retiraba sus pijamas por completo quedando desnudo ante Wolfram quien empezaba a lamer, besar y chupar cada parte de la anatomía del oji negro quien estaba de rodillas en la cama mientras disfrutaba de aquellas delicias que le ofrecía Bielefeld, Weller no puede creer que ante sus ojos, sus niños se estén convirtiendo en hombres, pues estas acciones ya son de Mazoku adultos para su ver, y el que este par se estén entregando uno al otro consumaba su unión; pues según las tradiciones del reino, si uno de los miembros de la realeza consuma su amor en el acto carnal, oficialmente se unían como si estos fuesen esposos.
Wolfram llegaba a la erección de Shibuya y empezaba a lamerle y chuparle, el moreno cerraba su s ojos y disfrutaba de aquel contacto mientras se inclinaba un poco y acariciaba la espalda de Wolfram, este seguía en su diligente acción, engullendo por completo el falo de Shibuya, Yuuri se siente tan bien al estar en la boca de Wolf que de buenas a primeras se corre con gran potencia llenando por completo la boca de Wolfram, derramando por las comisuras de esta aquel fluido tibio y blanquecino, Wolf se retiraba el falo de Yuuri para limpiar sus boca y expulsar la semilla de Shibuya, mira asía arriba y allí estaba Yuuri con esa expresión de satisfacción y placer tatuado en su rostro, era la primera vez que no le veía ya como a un niño sino más bien como a un chico que se convertía en hombre a su lado.
Weller ha decidido dejar que aquel par de chicos terminen su idilio, da media vuelta y se dirige a los demás pasillos dando la orden de dejar despejado el pasillo de la alcoba del príncipe y el de las habitaciones de Wolf, los guardas acatan la orden sin cuestionar, en la habitación de Shibuya su pasión seguía, Wolfram se recostaba en la cama boca abajo dejando su trasero expuesto, Yuuri pasa su falo entre los glúteos de Bielefeld, ambos lo desean pero aún no están preparados para esto.
Yuuri restregaba su ser en Wolfram y ambos se excitaban más y más, Wolf se auto complacía y Yuuri seguía con su movimiento rítmico y desenfrenado en las posaderas de Bielefeld, la desesperación y excitación es grande, mas no se siente capaz de adentrarse hasta lo más profundo en Wolf, por lo que solo frotaban sus cuerpos uno con el otro.
Wolfram
--- Ahhh…ahhh….ahhh… Yuuri… ahhh….ahhhh… cuando seamos uno será maravilloso, prométeme que esperaras por mí para hacerlo, dime que lo harás solo conmigo, que tu primera ves será conmigo Yuuri…---
Yuuri
--- ahhhhhhh….ahhhh… te lo juro, será solo contigo, solo contigo ahhh….ahhhh… quiero que todo sea solo a tu lado, solo tú y yo, siempre juntos ahhh…ahhmmmm… júrame que no te entregaras a nadie, ni dejaras que nadie más te vea de esta manera, solo yo puedo verte así, solo yo puedo hacerte sentir así de bien, solo míos son tus besos y caricias, eres mío, solo mío, júramelo…----
Wolfram
--- Si… solo tuyo, solo los dos, yo para ti y tu para mi… ahhh….ahhh… ahhh… bésame, te necesito Yuuri, bésame, bésame---
Shibuya besaba con desesperación Bielefeld, mientras este alcanzaba el orgasmo, Shibuya le robaba el liento con cada beso, con cada caricia incendiaba su alma, elevándola a niveles inhóspitos, Wolfram y Yuuri se prometieron esperar para ser uno con el otro, esa noche se la pasaron besándose y acariciándose, jurándose que serían uno para el otro. Los primeros rayos del sol despuntaban al alba y Bielefeld se despedía con un apasionado beso de Shibuya, quien con lágrimas en sus ojitos le decía adiós a su compañero fiel, su único amigo, su cómplice, su amante, su todo.
Wolf no quiso regresar a ver a Yuuri sabía que de verlo se aferraría a su ser y no lo dejaría nunca, por lo que se alisto y salió con sigilo de la habitación del príncipe, llego a sus habitaciones aun no era la hora para salir, mas Wolf se alisto, tomo la ducha y se puso el que sería de ahora en adelante su nuevo uniforme, un traje azul marino con galones dorados en los hombros con estoperoles en el borde externo del puño, una franja dorada y roja delineaban el estético atavió del soldado Mazoku, de botas altas hasta las rodillas, de espuelas plateadas en los tobillos, la casaca era corta, tenía dos grandes solapas al frente que se abrochaban a la chaqueta con tres botones a cada lado, una camisa blanca con el cuello lato y un dobladillo muy corto en la garganta, un pañuelo color rojo con azul y un fistol en el centro que se sujetaba con una cadenilla abrochada lado a lado del chaquetón. De guantes blancos y un sable tipo florete colgado a la cintura, una faja color ocre estaba sujeta de la cadera hasta un tercio medio superior del tórax.
A pesar de todo lucia despampanante sin contar que este es un chico realmente apuesto. Cuando por fin llegó la hora de salir y despedirse de todos Yuuri vestía uno de sus trajes favoritos negros con una capa roja alrededor de los hombros con un broche, con un ónix enorme que sujetaba esta, su padre vestía ceremonialmente, no es que Wolfram representara para el algo importante; mas era el tercer hijo de la duquesa y era el mejor amigo de su hijo, así que le despide con gran cariño, Yuuri le dedica una mirada que solo Wolf podría comprender, al igual el oji verde le dedica una mirada cómplice, solo quien se percata de esto es Weller quien aún no sabe cómo deba reaccionar ante este descubrimiento.
Yuuri ve marchar a su querido e inseparable soldado, su amante, su cómplice, su compañero, su amigo, su todo. Sin saber que será lo que el destino les deparara en un futuro, sin saber que personas conocerán cada quien y si este distanseamiento los unirá más o los separara por completo.
FIN DE FLASH BACK.
Conrad
--- Cuando eran niños también el destino los separo más supieron reunirse de nuevo, pero esta vez… este destino es cada vez más cruel, Wolfram, Yuuri. ¿No sé qué hacer para que permanezcan juntos?---
Weller está en los jardines contemplando las flores de s madre a las cuales les bautizara con nombres peculiares, Conrad sobrevive en la tierra, hermoso Wolfram, el secreto de Gwendal, mirada roja de Chery y Inocencia de Yuuri. El capitán de la guarda Mazoku está preocupado cuan cruel destino será este que les depare a estos dos chicos.
En las oficinas del Maou la discusión seguía cuando en eso se abren las puertas, Yuuri entra seguido de Wolfram, su semblante era sereno y relajado más al ver allí a Saralegui esa alegría y serenidad pasaron a mejor vida, un semblante de desprecio y repulsión se presentaron en el rostro de Shibuya, atrás del estaba Wolfram con un semblante de odio absoluto; se podía sentir el aire pesado, tan pesado que bien podría ser cortado con un cuchillo.
Yuuri
--- ¿¡Que está pasando aquí!?---
Saralegui
--- Nada Querido mío, solo le informo a vuestros padres que zarpamos en un par de horas, así que ve alistando tus cosas---
Aquella noticia le cayó como una cubetada de agua gélida, el Mazoku de ojos negros siente que pierde el piso, por un momento palideció y estuvo a punto de caer, mas como siempre tras del estaba su apoyo y remanso de paz, su amado Wolfram quien le sostuvo, adelantándose a cualquier otro, aun y hasta al mismo Saralegui, a este no le iban a engañar tan fácilmente se decían Gwendal y Gunter al ver el semblante del monarca.
Saralegui
--- ¡¡ ¿Qué ocurre amor?!! Te emociona tanto regresar conmigo a casa, a nuestra nación---
Yuuri
--- No digas estupideces, yo contigo ni a la puta esquina---
Wolfram
---- Su alteza, serénese por favor---
Yuuri
--- Pero este…---
Wolfram
---- Su majestad tiene razón, deberéis regresad a vuestro reino mi señor---
Yuuri
--- ¡¡Wolfram!!---
Wolfram
--- Dispensad a mi señor su majestad, aun no se encuentra restablecido del todo, así como no está acostumbrado a un trato directo con su excelencia, mi señor estará listo para partir cuando lo indique---
Yuuri
--- ¿Pero qué leches estas diciendo?---
Saralegui
--- ¡¡Vaya de quien menos pensé que estaría de mi parte era de este perro fiel que tienes a tu lado Yuuri!! Pero que comprensivo, me alegra que pienses de esa manera y sepas cuál es tu lugar y no como todos estos---
Wolfram
--- Mi lugar siempre será al lado de mi señor, por lo que en ningún momento he de dejarle solo, tampoco quiere decir que permitiré que usted vuelva a tocarle, mientras este con vida nunca jama socara a mi señor---
Saralegui
----¡¡¡Insolente!!!---
Saralegui hace despliegue de su poderío lanzando una ráfaga de energía, Gwendal y Gunter se refugian tras el escritorio y el Maou protege a Miko de aquel poder, por su parte el Mazoku de fuego simplemente concentra su Mayorku creando una onda de calor alrededor suyo y de Shibuya, protegiendo a ambos, Sara mira con molestia el que este joven de ojos verdes tiene bastantes aptitudes para ser un simple soldado.
Saralegui
----¿¡Quién eres tu muchacho!?---
Wolfram
---- Soy Wolfram Von Bielefeld heredero de a casa de los Bielefeld, hijo de William, descendiente directo del Gran Shinou.----
Yuuri no sabía sobre este hecho sin precedentes, los ojos de Wolfram eran azules, tan intensos como los de las imágenes del Shinou, Bielefeld avanzo un par de pasos quedando frente a frente con Saralegui y dedicándole la más fiera de las miradas.
Wolfram
--- Guarda y escolta del vigésimo séptimo Maou Yuuri Shibuya----
La energía que despedía en esos momentos Wolfram amedrento por un momento a Saralegui haciendo que el monarca retrocediera un poco, en ese momento entra al despacho el Sumo Sacerdote del Shinou, todos voltearon a verle, Wolfram hizo una mueca burlona al mirar a Murata quien se sorprendió de ver quien estaba habitando el cuerpo de Bielefeld.
Murata
--- Suficiente, creo que se ha dicho demasiado aquí, por favor su majestad, regrese a sus aposentos, Shibuya a de ir donde usted a vuestro reino, más me temo mucho que llevara consigo a su escolta personal y eso no lo podrá evitar---
Saralegui
--- Entiendo en ese caso nos vemos en un par de horas en el muelle, querido mío, con que Bielefeld, hum… lo tendré presente---
Saralegui sale del despacho del Maou y todos clavan su mirada en Wolfram quien tras irse Saralegui sus ojos se tornasen verdes como de costumbre y sintiese un pequeño malestar, un leve mareo y después voltea a ver a todos quienes siguen atentos al rubio
Wolfram
--- ¿Qué sucede porque me ven así? ¿¡Yuuri!?---
Yuuri
--- N-No, por nada amor---
Todos se ha quedado consternados, todos menos Murata que bien que sabe lo que ha acontecido delante de los ojos de todos los allí presentes, Wolfram resultase ser la reencarnación también de Shinou o más bien uno de sus recipientes donde puede depositar su alma o parte de esta.
Shibuya regresa a sus aposentos y prepara todo para que su viaje al lado de Saralegui, aunque este se realice aun y en contra de sus deseos, más el saber que Wolfram le acompañara en todo momento lo hace sentir tranquilo, el momento de partir llega y Yuuri junto a su amado esposo y el odioso de Saralegui parten; Conrad es otro que se ha unido a él sequito personal de Shibuya muy a pesar y disgusto de Saralegui, Barias no deja de vigilar de cercas a este sujeto que en más de una ocasión intento cobrar la vida de su amado señor.
Mientras tanto en el santuario dedicado al Shinou un niño de ojos azules jugaba divertido alrededor de una gran pileta de agua, subía y bajaba daba de saltitos mientras seguía viendo al interior de esta.
Murata
--- Shinou, ¿Qué es lo que le has hecho a Lord Von Bielefeld? Porque desde que yo recuerde él nunca había tenido sus ojos azul cielo como tú---
Avalón
--- ¿Quen eh Shibu?---
Murata
---¡¡No te hagas el tonto conmigo Shinou!!---
Murata perdía la paciencia y toma del brazo al pequeño niño, este le mira con un puchero enorme está a punto de pegar de alaridos y soltar un potente llanto, en eso llega corriendo Urilke y le detiene para que Murata suelte al niño, el pequeño Avalón se abraza a la sacerdotisa y Murata se queda contrariado.
Urilke
--- Shinou Heika dejo el templo en el mismo momento que zarpara el barco del reino de Saralegui---
Murata
----¡¡¡¿¿Pero qué estás diciendo??!!!---
Urilke
--- Que Shinou Heika se ha ido con el príncipe y su esposo---
Murata
--- ¿¡Pero que estás pensando hacer Shinou!?---
El pequeño Avalón tras las faldas de Urilke miraba a Murata y esboza una sonrisa burlona, sus ojitos destellan un poco y después regresan a su aspecto dulce eh inocente, Murata se sienta en el borde de la gran pileta y con gran desespero y angustia se frota sus sien, ¿Qué clase de travesuras tiene planeado Shinou para este par? ¿Por qué decide abandonar su santuario y por qué dejo a aquel niño en el mismo?
En el navío Saralegui está a una distancia considerable, lejos de su amado esposo, quien está custodiado por ahora por su querido padrino dado que el pobre Guarda leal de Shibuya resulta ser muy sensible para los viajes en barco, y se encuentra a babor devolviendo el estómago cada cinco minutos, el pelinegro está a su lado dándole su apoyo acariciando su espalda para confortar a su amado esposo, claro todo bajo el escrutinio de este monarca y su fiel perro guardián Barias.