“wólfram…. ¿embarazado? ¿De quién? ¿Desde Cuándo?” era las preguntas que rondaban la mente de las tres personas que estaban en shock delante de la enfermera, nadie podía creer lo que esta había dicho.
-¿q-que has dicho Gisela?- pregunto atónico conrad, tal vez había escuchado mal.
-su excelencia está esperando un bebe.-se limito aclarar la peli-verde. Sabía que todos estaban sorprendidos. Pero no permitiría que la vida de su excelencia corriera peligro.
-¡eso no cierto! Mi hermano nunca cometería un acto tan ruin menos engañaría a su majestad- cuestionaba gwendal enojado e indignado, era inconcebible pensar que su hermano hubiera intimado con alguien estando comprometido, conocía a wólfram este era el ser mas orgulloso y honorable.
-hoy mismo yo lo revise y le di la noticia, el se notaba muy feliz- objeto la peli-verde.
-…es imposible- musito Yuri saliendo del trance en que se encontraba -¡es un hombre! ¡El no puede--¡
-¿su majestad?- le llamo extrañado conrad,- wólfram es un doncel, puede concebir hijos es algo normal en nuestro país.
-¡es anormal! Deben estar equivocados- Yuri miraba a todos exigiendo que se retractaran. Tenía que ser una tonta broma.
-no es ningún error ¡mi hermano esta embarazado! Maldición ¡matare al desgraciado que se atrevió a tocar a mi hermano! – ni a conrad o gwendal les paso por la cabeza que ese bebe podía ser de Yuri al ver como estos dos se llevaban la idea quedaba descartada.
-… ¿e-es cierto Gisela? ¡¿Cuánto tiene de…. Gestión?!- pregunto Yuri llamando la atención de los presentes.
-dos semanas- concluyo la enfermera, ella sabia de quien era ese bebe pero por el momento no diría nada.
-“…dos semanas no, no es cierto, ese niño… es”
Flash back……..
-¡¡cállate!!... este compromiso se acabo
- no.. Yuri nosotros vamos a-
-¡¿Qué no lo entiendes?!... nunca podría amar a un hombre… es asqueroso
Fin del flash back
Los gritos de gwendal y conrad lo sacaron de sus pensamientos, ¿Qué había hecho? Solo una persona podía ser el padre de ese bebe.
-¡¿pero que no lo entiendes?! Wólfram nunca engañaría a su majestad
-¿entonces qué conrad? Se embarazo del aire
-algo tuvo que pasar, necesitamos encontrarlo, solo el nos puede decir quién es el padre.
-el padre soy yo – dijo aun sorprendido Yuri atrayendo las miradas atónitas y desconcertadas a su persona.
-¿Y-Yuri? ¿Tú y wólfram…? ¡Imposible!- conrad no procesaba las palabras de su ahijado, este siempre estuvo en contra de las relaciones entre hombres ¿Cómo? ¿Por qué?
-usted- cascareó el general con ira, tomándolo por las solapas, mas Yuri ni se inmuto- ¡¿Cómo pudo..?! Se atrevió a deshonrar a mi hermano, y después botarlo como una vulgar ramera - pocas veces se había visto a gwendal furioso y esa era una de ellas.
-gwendal cálmate. Es el maou le debemos respecto. Debe haber algún error ¿Verdad?-
- ¡me vale un comino! ¿Qué no estás molesto conrad? Este infeliz se aprovecho de los sentimientos de mi hermano para llevárselo a la cama.
-¡caro que lo estoy! Pero ahora necesitamos hallar a wólfram antes de que algo le pase, solo el nos puede aclarar las dudas que tenemos.
-¿ya acabaste de hacer tu escena?- pregunto Yuri con un tono aburrido al general, esperando que este lo soltara.
-desgraciado –
-¿vas a seguir buscando pelea O me dejaras ir a buscar a mi prometido e hijo?
Ante tales palabras al mayor no le quedo de otra que soltarlo. Ahora la prioridad encontrar a su hermano.
-solo le advierto una cosa, no me importa que sea el maou si mi hermano lo desea me lo llevare lejos de aquí. Y no dejare que ve a mi sobrino
- tú no puedes-
-claro que puedo, acá en shin mazuko en casos como este donde un niño nace fuera del matrimonio el bebe se deja en manos de la madre o doncel. Sin importar la autoridad no puede hacer nada.- las palabras de gwendal le helaron la sangre.
-dejen de pelear. Tenemos que encontrarlo primero.
- manda a todos los soldados que revisen cada rincón del castillo, eso incluye caballerizas y las torres cercanas.
-entendido- antes de que el castaño pudiera cumplir las órdenes de Yuri un soldado entro corriendo en la estancia causando desconcierto en los presente.
-¿Qué manera de entrar? ¿Qué pasa?- cuestiono gwendal
-s-s-su m-majestad… s-su e-excelencia – el pobre soldado no podía hablar bien después de correr un gran tramo para llegar a la sala, mas la mirada de los sujetos que estaban en esta era más intimidadora que nada.
-¡¿lo encontraron?! – el soldado negó con la cabeza ante la pregunta de Yuri.
-s-su caballo no está… preguntamos a algunos habitantes y afirmaron verlo salir de la cuidad, con este clima es peligro ya han habido 6 deslaves. – informo el soldado dejando a los tres presentes con una gran angustia en el pecho.
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En el muelle cercano a la costa de shin mazuko, un barco lidiaba con la tormenta presente. Para sorpresa de todos era chery-sama quien tomo el mando de la situación evitando que las olas del violento mar arrasara con la embarcación.
-¡tiren las velas! ¡wil amarra los cañones!
-sí, señora
-que los pasajeros sean evacuados a los camerinos.
-en eso estamos
-¡¡el timón!! Tómenlo rumbo fijo
-mi lady ¿no sería mejor regresar?
- no… necesito llegar a más tardar mañana en la mañana.
-entendido
-“que es este sentimiento en mi pecho… mis hijos ¿estarán bien?.... shinou protégelos por favor”
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En el templo del rey original, este mismo y su pareja se encontraban viendo la situación atreves de una esfera.
-¿Qué harás shinou?- preguntaba murata al verlo demasiado despreocupado.
-…nada
-¡¿Por qué?! ¿No eres tú el manipulador de personas?
- mi gran sabio, en esta ocasión es mejor que ellos mismo resuelvan sus problemas. Si su amor es fuerte sobrevivirán pero de ser lo contrario a Yuri no le quedara de otra que ver como otro hombre se lleva a su amado consorte.
-…. ¿estás seguro de esto shinou?
-¿qué pasa mi amado?, ¿no te parece divertido?
-estás loco.
-pero así me amas.
- no me queda de otra
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Volviendo al castillo. Yuri junto con los hermanos del rubio habían organizado un equipo de rescate. Aun con la tormenta saldrían a buscarlo, en el estado de wólfram no podría haber ido tan lejos. El moreno sentía como si en cada minuto su angustia crecía ¿Cómo pudo ser tan ciego? Por su egoísmo e ignorancia estaba por perder a su hijo y la persona que amaba.
-su majestad todo está listo para partir
- andando – un grupo de 15 soldados le seguían el mando a Yuri quien venía con conrad y gwendal.
Por dos horas estuvieron cabalgando, recorriendo calle por calle de la cuidad, mas nunca lo hallaron.
-¡tenemos que volver!- gritaba conrad para que lograran escucharlos debido a la tormenta apenas si se escuchaba un susurro
- no, vamos a las afueras. Tal vez salió del pueblo.
-¡es peligroso!
-¡he dado una orden!
Sin poder objetar la búsqueda se amplió hacia las fronteras de shin mazuko. El equipo se dividió en tres para ampliar territorio, Yuri venia acompañando de gwendal, conrad y otros dos soldados. Mas la búsqueda no dada resultados.
-¡su majestad!... ¡mire!- el hombre apunto a un lugar del bosque, provocando que todos voltearan la vista.
-¿ese es…?- musito gwendal sorprendido
- el caballo de wólfram- secundo el moreno, quien galopeo hasta el animal- ¿y wólfram?
-busquen en los alrededores ¡rápido!- ordeno el general alterado. Conocía a su hermano nunca abandonaría a su caballo además el animal tenía heridas y manchas de lodo por todo el lomo.
-¡vengan! – un grito de conrad lo saco de sus pensamientos, Yuri y el mayor corrieron cercas de donde estaban el castaño, más al llegar se detuvieron paralizados.
En el suelo estaban las ropas destrozadas de wólfram, desde sus pantalones, saco cinturón todo se encontraba desgarrado mostrando el abuso con el que fueron despojados. Un miedo nunca antes experimentado recorrió la espalda de los presentes. ¿Dónde estaba wólfram? ¿Qué significaba todo eso?
Gwendal ordeno movilizar las tropas alrededor de la zona, conrad seguía en un estado de desesperación nunca antes visto. Mataría al que se atrevió a tocar a su hermano, solo rogaba que nada le hubiera pasado a él o su sobrino. La idea de perderlos era desgarradora.
-¡W”LFRAM! ¡W”LFRAM! – el moreno se subió a su caballo y galopeando como poseído, busco a su prometido. Más todo intento fue en vano. Sintió que alguien se acercaba a donde él estaba, volteo encontrándose con la mirada fría del mayor –gwendal… ¿encontraron algo?
-… nada tenemos que regresar, mañana continuaremos.
-¿y wólfram? ¡No podemos dejarlo solo!
- no podemos hacer nada ahora, debemos volver al castillo- el general se dio vuelta dispuesto a marcharse no sin antes decir algo - ¿Esta contento? Ahora ya no tiene que soportar la molesta presencia de mi hermano.
-eso no…yo…
-majestad. Lo que paso en esta noche no es más que las consecuencias de sus decisiones. Viva con eso… andando.
No es que Yuri no tuviera algo que decir, sino que las palabras del mayor le llegaron profundo, sabía que él era el único culpable de que wólfram se encontrara desaparecido en medio de esa tempestad. Pero su culpa no acababa ahí, el solo recordar la cara del rubio lleno de lagrimas e implorándole era lo que le hacía sentirse como el ser más despreciable del mundo.
Sin poder hacer nada, todos regresaron al castillo, mañana por la mañana regresarían a buscarlo. Solo les queda pensar que estaba a salvo.
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A primeras horas de la madrugada un barco zarpo en el muelle de shin Mazoku, por fin la tormenta había terminando mostrando un nuevo amanecer, acompañado de un arcoíris. Pero a pesar de esto, la angustia de la ex maou se hacía cada vez más notoria. No pudo dormir en toda la noche, no solo por la tormenta sino también por el presentimiento de que algo ocurría. Una madre nunca se equivoca.
Apenas el barco se detuvo la rubia ordeno un carruaje rumbo al castillo. Tenía que quitarse esa desesperación que le oprimía el corazón. Cuando por fin estuvo enfrente de la entrada. Miro a su alrededor los soldados iban y venían de todas partes, al parecer se organizaban para una búsqueda.
Ignorando todo lo que sucedía a su alrededor chery-sama apresuro su paso hacia el despacho donde sabría que estarían sus hijos. Antes de abrir la puerta trato de tranquilizarse, seguramente eran suposiciones suyas, ahí adentro estarían sus tres hijos y todo marcharía bien.
Con cuidado giro la perilla de la puerta abriéndola, los presentes al verla frente a ellos se miraron aterrados ¿Qué le dirían?
-ahh – suspiro aliviada la mujer al ver a sus dos hijos. – conrad, gwendal – la rubia los asfixiaba en sus brazos con sumo afecto – que bueno que están bien, estaba preocupada
-madre ¿Qué hace aquí? Se suponía volvería dentro de una semana
-ohh conrad, ¿así recibes a tu bella madre? Por cierto, y mi wolfy… no lo veo – ante la pregunta la mujer pudo notar como los presentes se tensaron. Otra vez esa angustia en su corazón la molestaba –chicos ¿y wólfram?.... ¿Por qué se quedan callados? – esta vez el tono de la ex maou se denotaba cierta desesperación
-madre… wólfram – conrad pedía con la mirada ayuda a sus compañeros.
- wólfram esta desaparecido desde ayer en la tarde, al parecer salió en medio de la tormenta y desde entonces no se sabe nada de él-soltó el general. Viendo claramente reflejado en el rostro de su madre el miedo y horror ante sus palabras.
-m-mi wolfy ¡¿Dónde está?! ¿Por qué están aquí? Vallamos a buscarlo… ¿Qué paso? Wólfram no es imprudente, algo me están ocultando- una vez más noto esas miradas que le indicaba que algo pasaba.
-chery-sama- hablo Yuri – lo que le diré solo lo sabemos nosotros. Ayer tuve una pelea con wólfram y… rompí el compromiso
-¡¿Qué?! Pero…
-eso no es todo, después que desapareciera, nos enteramos de… que wólfram estaba esperando un hijo…. Mío
-...- esta vez no hubo palabras solamente la rubia se dio vuelta dejando a todos desconcertados - ¿Qué esperan? Vallamos a buscar a mi hijo.
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En un lugar no muy lejano conocido como Ascaban un pequeño pueblo humano, donde todos los habitantes se conocían entre sí. La tormenta había ocasionado leves daños pues al parecer el rio bajo se había desnivelado causando pequeñas inundaciones en los alrededores.
No muy lejos de Ascaban, en la orilla del rio Alto vivía un joven codiciado por las señoritas del pueblo, su nombre era Darck este contaba con apenas 13 años cuando su abuela falleció, desde entonces tuvo que sobrevivir solo en medio del bosque ahora contaba con 19 años.
Los habitantes del pueblo lo buscaban cuando necesitaban de sus servicios como curandero, pues su abuela que en paz descanse le había transmitido esos conocimientos, además de eso las jovencitas de Ascaban aprovechaban cada ocasión en la que se presentaba en el pueblo para tratar de conquistarlo y ¿Cómo no? Si era la misma tentación en persona.
Su porte seductor, esos cabellos bancos que le llegaban hasta los hombros esos ojos amarillos, esa piel blanca y sonrisa encantadora. ¿Quién no se enamoraría? Mas pese a sus intentos nadie había logrado despertar el deseo en los ojos de ese joven.
Esa mañana en especial. Darck tenía que ir a ver los desastres que había ocasionado la tormenta pues él vivía cercas del rio alto y lo último que necesitaba era una inundación. El joven se coloco una camisa blanca y unos yens. Una vez listo se dirigió a su destino.
Al llegar a la orilla del rio, se puso a recoger algunas hierbas que utilizaba para curar a los pueblerinos cuando estos venia, en eso estaba cuando algo llamo su atención.
-¿pero qué? … ¡un cadáver!- entre las piedras del arrollo un cuerpo sobresalía con varios moretones y sangre. Darck se acerco a donde el cuerpo. Con cuidado lo tomo y lo llevo al pasto cercano- maldición…
-gmm- un pequeño gemido salió de los labios resecos de la persona que yacía en el suelo boca abajo asustándolo, rápidamente tomo su pulso descubriendo que este seguía con vida.
-tengo que actuar rápido – con cuidado lo volteo llevándose la sorpresa de su vida, esos cabellos rubios, piel blanca y labios rozados llamaron totalmente su atención- ¿un ángel? – sacudió la cabeza y se dispuso a cargarlo con sumo cuidado llevándolo a su cabaña.
Al llegar recostó al rubio en su cama, tomo un traste con agua y un pañuelo para limpiarlo. Con algo de temblor en su mano desato la única prenda que cubría su preciado cuerpo. Un sonrojo descomunal se apodero de su rostro. Nunca había visto una criatura tan bella.
-¡concéntrate!- se dijo a sí mismo.
Paso el pañuelo por cada rincón de ese pecaminoso cuerpo, descubriendo los golpes y moretones que tenían. Más algo llamo su atención.
-¿el esta…? Pero… no hay error, es un doncel – musito sorprendido de sus propias palabras- eso significa que eres un mazuko. ¿Qué haces aquí?- pregunto al aire.
Acabando de limpiarlo le coloco una camisa suya y vendo su cabeza al parecer recibió un fuerte golpe en esa zona.
Ese día se dedico aplicarle hierbas medicinales, para bajarle la calentura. En ningún momento se separo de él a pesar de que ya era de noche. Sentía que en cualquier momento ese ángel despertaría.
-… wólfram- musito el nombre del rubio o por lo menos eso suponía pues la camisa que traía puesto venia con ese nombre grabado.
-mgmm – el ser que yacía en la cama, poco a poco fue abriendo sus hermosos ojos verdes dejando mas impactado a Darck quien ahora estaba seguro de que se trataba de un ángel –mfgg
-tranquilo – trato de calmarlo al verlo algo alterado, el rubio mirada a todos lados desesperándose- estas herido soy Darck… ¿Quién eres? ¿Tienes a alguien con quien comunicarte?
-..No sé yo… no sé quien soy – el rubio miraba al peli-blanco con algo de miedo.
-amnesia – concluyo el mayor.
Genial ahora tenía a un hermoso demonio en su casa y con amnesia, además de embarazado.
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