Capítulo II: La selección
Desde que amaneció no había hecho más que sentarse en frente de su computadora y clickear cientos de veces el botón de actualizar en su email. Apenas eran las 10 de la mañana pero es que estaba muy impaciente. Ya había pasado una semana desde que envío su información a Moshiba y no había recibido respuesta alguna. Se había desanimado un poco últimamente pero su buen amigo Kankuro lo reconforto diciéndole que una gran empresa recibía miles de postulaciones para prácticas, que no desesperara porque solo se querían quedar con lo mejor.
Soltó un bostezó aburrido y decidió que no debería traumarse tanto con el asunto; Tenía hambre, estaba sucio, su habitación hecha un caos y por si fuera poco, era día de realizar la compra de provisiones en el mercado.
Así que se quitó la ropa y se metió directo a la ducha; Se cambió de ropa y bajo dispuesto a realizar sus quehaceres y olvidarse-por un rato, ya que era muy obsesivo- del tema. Y mientras el regateaba zanahorias en el mercado, un mensaje de email parpadeaba en su computadora.
“Hola Naruto, gracias por participar…”
De: Shiranui, Genma.
Hola Naruto, gracias por participar en el proceso de selección de practicantes Moshiba 2015. Hemos revisado tu currículo a detalle y solicitado a tu universidad el avance de tus materias y encontramos gran potencial en ti para que formes parte de nuestra gran familia; Para continuar en el proceso de selección, por favor ingresa a las siguientes ligas y contesta las 2 pruebas psicométricas que tenemos para ti.
http ://moshiba.net.jp/rh/pract/ psico1
http ://moshiba.net.jp/rh/pract/ psico2
Tienes hasta el día de hoy a las 9:59 p.m. para remitir tus pruebas; En caso que tus pruebas sean exitosas y cumplan el perfil que buscamos, te haré llegar un correo posteriormente.
*Asegúrate de tomar tu tiempo para cada prueba, recomiendo un ambiente tranquilo donde puedas relajarte y evitar contratiempos.
Agradezco nuevamente tu interés en pertener a Moshiba; No te arrepentirás de nada.
Saludos,
Shiranui Genma
Especialista en reclutamiento y selección- Nuevos talentos
Después de ir al mercado, regresó al restaurante con la clara intención de sentarse frente a la pc hasta que amaneciera pero una llamada del pierde almas-como llamaba a Kankuro- lo hizo pensarlo mejor; Una invitación para ir a una pool party en casa de Rock Lee…no sonaba mal, de hecho necesitaba un poco de desestrés. Así que subió las escaleras rápidamente, tomó todo lo necesario para la albercada y salió pitando del restaurant, sin siquiera notar el parpadeo en su computadora del tan ansiado correo electrónico de Moshiba.
Cuando llegó a la fiesta, eran aproximadamente las 1 de la tarde. Saludó alegremente a Kankuro y a Temari, su hermana mayor. La rubia era despampanante, siempre le llamó la atención pero siquiera se atrevería a insinuarle algo ya que, era novia de Shikamaru Nara, un amigo del mismo pueblo de dónde provenía Naruto y que sin haberse graduado ya estaba posicionado en uno de los mejores bufetes de abogados de todo el continente.
Y junto con ellos, el siempre frío hermano menor de Kankuro, Gaara. Aún iba en la preparatoria pero aun así era considerado un matón. Naruto lo abrazó mientras este se removió, incomodo por la cercanía de ese rubio que lo hacía sonrojar por montones.
Juntos entraron a la fiesta la cual ya estaba bastante ambientada; Lee los saludó desde lejos y procedió a tirarse un clavado que puso efusivos a todos los invitados. Naruto bailaba alocado con Kankuro en medio de una improvisada pista de baile, mientras chicas bastante atractivas los miraban seductoramente. Kankuro de inmediato se dedicó a ligar dejando al rubio bailando al ritmo de “Lean On”. Gaara, bastante reservado para ese tipo de celebraciones, se acercó meneando su cuerpo de un lado a otro hasta que llegó al lado de Naruto; Este le sonrió encantadoramente y lo sacudió por los brazos, parodiando algún tipo de danza hindú.
Y en eso estaban hasta que, le cayó una mosca al pastel.
Sasuke Uchiha junto con Neji Hyuuga llegaron a la fiesta a la cual, no habían sido invitados. En lugar de causar desastre como planeaban hacerlo, el azabache fijó su mirada en aquel rubio marginal y supo lo que tenía que hacer.
Naruto aún no tenía traje de baño así que el Uchiha caminó rápido hacía él, lo jaló del brazo y lo arrastró a una velocidad tan impresionante que ni Gaara pudo detenerlo; Y entonces, lo arrojó a la piscina. El rubio estaba anonadado. ¿Cómo no pudo ni defenderse? Mientras tomaba aire después de aquel atropello, se decidió a salir de ahí y moles a golpes al Uchiha pero, la imagen frente a él lo detuvo en el acto.
El Hyuuga desabrochaba su camisa y bajaba sus pantalones. Acto seguido, se lanzó al agua cerca de Naruto y las chicas gritaban eufóricas. Por muy mal que le cayera el de ojos perla, tenía un cuerpo tan bien formado que incluso, le daba cierta envidia.
El rubio estaba tan absorto en aquella escena- y la mirada confundida del Uchiha- que no sintió cuando fue jalado por el tobillo hasta el fondo de la piscina. Intentó soltarse del agarre una vez en el fondo pero Neji lo sostuvo aún más fuerte. Lo jalo contra su cuerpo y pasó: Junto sus labios con los de Naruto en un beso unilateral, quería abrirse paso dentro de esa cavidad, absorber todo lo que pudiera de aquel rubio. Cinco segundos más tarde de ese contacto, ambos necesitaban salir a respirar así que soltó al rubio y subió a la superficie.
-¿Qué carajos Neji?- escuchó reñir al Uchiha furioso contra de su amigo.
Naruto estaba en shock.
Neji Hyuuga, uno de sus enemigos de la universidad lo acababa de besar a la fuerza bajo el agua, en una fiesta con mucha gente, ambos eran hombres, era el mejor amigo de Sasuke Uchiha, ¡él no era gay! ¡Hasta había tenido alguna especie de relación con su prima! Simplemente, eso no podía ser real.
Salió a toda prisa de la piscina, empujando a varias personas a su paso. Se despidió apenas de Gaara, tiritando por la frialdad que de repente se apoderaba de él. Huyó tan rápido que ni siquiera se dio cuenta que iba empapado de pies a cabeza a bordo de un taxi hasta que llegó al restaurant.
Llego a su habitación y proponía tomarse una ducha bien caliente pero el parpadeo en la pantalla de la computadora lo sacó de aquella maraña de ideas que azotaban su cabeza.
“Hola Naruto, gracias por participar…” De: Shiranui, Genma.
¡El mail! ¡EL BENDITO MAIL!
Quitó torpemente su ropa húmeda y la arrojó sobre el suelo. Solo en ropa interior- también húmeda- se sentó y releyó el mail una y otra vez. Revisó la hora: Eran las 7:30 de la noche. Y tenía 2 horas y medía para contestar las pruebas.
-¡LA PUTA QUE TE PARIÓ!- jaló sus cabellos desesperado y respiró hondo. No debía exaltarse, debía controlarse, tener la cabeza despejada- aunque los acontecimientos del día no ayudaban mucho- y se dispuso a contestar las benditas pruebas psicométricas.
Alrededor de las 9:52 de la noche termino ambas pruebas. Le dio click en “enviar” y ya estaba todo en manos de Dios.
Tendría que esperar nuevamente por la respuesta.
No sabía por qué, pero se sentía muy agotado. Así que se dio una rápida ducha caliente, se colocó el pijama y se dispuso a dormir.
Al día siguiente, despertó cuando el reloj de pared marcaba las 11:30 de la mañana.
-¡¿QUÉ?!- se levantó asustado, buscando su móvil por todas partes. Cuando lo encontró, dentro del pantalón que olía a humedad supo lo que pasaba. Estaba descompuesto por haber caído en la piscina. Resopló bien fuerte.- Y Ero-sennin siquiera pudo despertarme ‘ttebayo…- se quejó mientras se encaminaba al baño. Ya estando ahí y mientras cepillaba sus dientes frente al espejo, el recuerdo del beso bajo el agua que Neji Hyuuga le robó, lo azotó de repente. Talló frenéticamente sus dientes, enjuagó y salió del color de un tomate del sanitario.
Prendió la computadora para comunicarse con Kankuro vía Facebook y como autómata, también abrió el correo electrónico.
De: Shiranui Genma
“Has sido seleccionado para la etapa final”
El área de Reclutamiento y Selección, en el programa de Practicantes Moshiba 2015 agradece tu interés en pertenecer a nuestra organización como practicante. Debido a que aprobaste satisfactoriamente la primera etapa de evaluación, te invito formalmente al evento final de selección el cual se llevará a cabo dentro de 2 días en las oficinas corporativas de Moshiba Electronics (te anexo un mapa de la ubicación)
El objetivo de esta evaluación final, es el poder evaluar tus competencias (comportamientos que generan un desempeño exitoso), así como la selección respectiva de cada área en base a perfil y proyecto.
La dinámica de evaluación consistirá en la conformación de un grupo de jóvenes con la misma formación profesional, mismos que deberán realizar una presentación personal durante 5 minutos ante los futuros coordinadores (Te anexo las instrucciones para la presentación y criterios de evaluación). Al finalizar la evaluación, los jóvenes que hayan cubierto el perfil requerido participarán en una entrevista con los responsables de área que tiene un proyecto que ofrecerles.
Te esperamos y te deseo toda la suerte del mundo, Naruto.
Casi grita de la emoción.
Afortunadamente, todos los requisitos para la presentación los tenía listos. Uno de sus proyectos escolares en diapositivas, sus fortalezas y debilidades bien identificadas, su currículo vitae actualizado, había investigado a fondo la empresa- y no exageraba, se aprendió los nombres por departamento del organigrama de Moshiba- incluso había redactado ya su presentación inicial. Pero, aunque tuviera todo listo, lo revisaría y repasaría mil veces para asegurarse que el día de las entrevistas todo fuera perfecto.
Emocionado como estaba, corrió a su clóset a preparar su traje: Una camisa blanca, corbata naranja, saco y pantalón de color gris azulado. Planchó su ropa y la colocó en un gancho, separada del resto de lo demás; Sabía de antemano que la iba a planchar nuevamente el gran día pero estaba demasiado prendido para medir sus acciones.
Canturreó alegre y luego silbó como pajarito. Bajó al restaurant y realizó un sinfín de actividades hasta que entro la noche y quedó exhausto. Una cena ligera, un baño y una lectura de su proyecto a presentar, dieron fin a ese día puesto que quedo profundamente dormido.
El transcurso de los días pareció acelerarse pues ya era lunes, el gran día.
Y pasó.
No pudo pegar el ojo en toda la noche, tenía unas terribles ojeras. Y los retortijones en el estómago no lo dejaban en paz; Se puso su traje y peinó su cabello hasta esparció un poco de colonia sobre sus muñecas.
Que fuera lo que Dios dispusiera.
Tomó su maleta y salió del restaurant no sin recibir antes un fuerte abrazo de su tío.
-Te irá bien, Naruto. De veras…-desacomodó un poco el cabello del muchacho, pues parecía que lo había relamido una vaca. El rubio le devolvió el abrazo cariñosamente.
-Eso espero, Ero-sennin…-
Abordó el autobús. Cuando bajó cerca de su destino- El corporativo Moshiba- sintió como las piernas se le hacían gelatina. Toda la seguridad del fin de semana, los ensayos y los aplausos imaginarios se quedaron ahí, en su mente. Tragó un poco de saliva y se encaminó a la entrada. Al llegar ahí, la recepcionista después de confirmar su identidad le indicó pasar a un salón en el segundo piso. Al entrar al elevador, se dejó caer en el suelo.
¿Y si mejor se iba en ese momento? ¿Y si no lo hacía bien?
Todas sus cavilaciones fueron interrumpidas por un sujeto que entro al elevador en el segundo piso, un tipo de cabellos grises, seguido de una chica de cabellos rosas que lo miraron, curiosos.
La fuerte mano del tipo se cerró sobre su hombro, conciliador.
-Ánimo- le dijo, seguido de un asentimiento de cabeza por parte de la chica de cabellos rosas.
No supo por qué, pero recobró la fuerza del fin de semana y le sonrió a ambos. Se incorporó y salió de aquel elevador.
-Gracias, ‘ttebayo.- Su mano se agitó despidiéndose de aquellos desconocidos.
Al llegar a la sala designada para la presentación, los ánimos se le fueron al Inframundo. Frente a él, más de 100 candidatos separados por especialidad, repasaban, ensayaban y, cómo no, examinaban a su competencia.
Se acercó al grupo de administradores y los únicos rostros conocidos-por desgracia- fueron el de Sasuke y Neji. Al recordar lo de Neji, su cabeza revolucionó. Nervioso, los evitó a toda costa, no quería que lo vieran y echaran a perder todo ahí. Pero su plan falló y el azabache le llamó con su gruesa voz, en un tono bastante alto.
-¡Pero a quien tenemos aquí! ¡No puede ser! ¿Esta empresa es seria? Porque si lo es, no deberían aceptar a este tipo de perdedor…- señaló a Naruto con el dedo y se escucharon unas risitas de fondo.
Una mano bajo el brazo del Uchiha, firmemente.
-No es lugar para esto, Sasuke. Tenemos asuntos que atender…-clavó su mirada en Naruto, quien había quedado estático en medio del grupo de administradores.
Para suerte de Naruto, una persona se aparecía frente a ellos con un micrófono, junto con un grupo de personas que ingresaban en grupos repartidos en pequeños cubículos.
-¡Hola chicos! ¡Gracias por venir!- el hombre, castaño de cabello hasta los hombros les sonreía a todos- Mi nombre es Genma Shiranui, soy quien los citó esta tarde ¡bienvenidos!- se aclaró la garganta puesto que el ruido en la sala había incrementado- Como pueden notar, están divididos por carreras así que les pido ingresen a los cubículos de acuerdo a la información que está en los panfletos que les entregaron en recepción. Nuestro grupo de coordinadores está dividido por proyectos que tienen en sus departamentos, ellos los están esperando en los cubículos y girarán las instrucciones para el comienzo de sus presentaciones. Una vez finalizada esta etapa, serán llamados aquellos candidatos cuyo presentación, perfil, actitudes y aptitudes hayan resultado afín a los proyectos del área. Quienes no sean seleccionados como practicante de algún área o no sean llamados a la entrevista final, no se desanimen: Los tendremos en una bolsa especial de candidatos para los proveedores de nuestra compañía. ¿Tienen alguna duda? –no dejo siquiera que alguno hiciera sus preguntas entre la marea de brazos que se alzaron- ¡Ok! Entonces, pasen a los cubículos.
Naruto tembló como gelatina, nuevamente. Se encaminó al cubículo que tenía el #3 estampado en una bonita placa. Una vez dentro, procuro sentarse lejos de sus compañeros. Eran 8 candidatos en total y frente a ellos, 5 coordinadores de la empresa los miraban, divertidos.
-Hola chicos, mi nombre es Orochimaru y soy coordinador del área de Investigación. Les agradezco hayan venido hasta aquí a mostrar sus ánimos de entrar a Moshiba. Empecemos esto, de este lado ¿Cómo te llamas?-
-Na-Naruto…Uzumaki…- dijo con la voz entrecortada, arrugando los papeles entre sus dedos.
-Empezamos contigo…y no te pongas nervioso, Naruto-kun…-
Naruto podría estar más nervioso que nunca pero la manera en que el tipo llamado Orochimaru pronunció su nombre no le gusto para nada. Respiró hondo, se levantó de su asiento y caminó decidido, dispuesto a darles una paliza a todos en ese cubículo. Él iba a hacerlo genial.
Unas horas después.
Quizás decir “hacerlo genial” había sido muy exagerado. La presentación había sido un fiasco. Pronunció todo su discurso con la voz baja y entrecortada; Olvidó detalles importantes a resaltar como su manejo de dos idiomas aparte del natal, su excelente condición física y su habilidad lógica matemática. Pero enalteció sus áreas de oportunidad como “impuntualidad”, “procrastinar”, “manejo de la ira”. Comparado con los otros candidatos, él había sido el peor de toda la presentación.
Estuvo esperando a ser llamado alrededor de hora y media, pero eso parecía que no iba a suceder. El Uchiha y Neji habían sido los primeros en ser llamados- incluso por coordinadores que estaban en otros cubículos- y él, no podía sentirse más humillado con esta situación.
Mientras, en el lobby de aquella sala- con cristales que ocultaban la vista hacia dentro pero se podía visualizar claramente el exterior- un tipo peligris leía algún tipo de libro de bolsillo, mientras una chica de cabellos rosas le acercaba un té earl grey tan caliente que le quemaba las manos.
-Kakashi-san, ¿desea que le solicite a Genma algunos currículos?- preguntó la chica, depositando el té en una mesita al lado del mencionado.
-Uhm…- Kakashi, el sujeto peligris levantó la vista de su libro y observó a su asistente, apenas unos segundos- Los rechazados. Esos quiero.- hizo un ademán restándole importancia a la opinión que quería expresar la chica. Después de todo, este año sería el único que el presidente de la compañía necesitaría un practicante, para cubrirla por su ausencia. Ella era Sakura Haruno, asistente del Presidente de Moshiba, Kakashi Hatake.
-De-de acuerdo…- estaba a punto de salir, cuando Genma entró en el lobby- Genma-san, necesito…- el aludido le extendió un conjunto de aproximadamente 10 folders- ¿esto…son los que demostraron,- la chica odiaba estas palabras- un bajo desempeño en la entrevista?-
-Sip- contestó canturreando Genma- y todos fueron fichados por Orochimaru-san. ¿No es fabuloso? Es tan tétrico y aterrador que al primer minuto los detectó. Ni siquiera los escuchó hablar, solo puso una ¡bum! Equis enorme…- dijo el castaño bastante divertido de la situación. Se escuchó una risita pequeña proveniente del presidente de la compañía.
Antes de acercarle los papeles, Sakura examinó a una velocidad impresionante cada currículo: electrónica, sistemas computaciones, relaciones internacionales, administración, ingeniería industrial, mercadotecnia, diseño, contaduría, derecho, economía, comunicación. Suspiró y le acercó a Kakashi solo tres currículos.
El Hatake dejó su libro a un lado y tomó los folders. Leyó cada uno y asintió con la cabeza.
Sakura sabía que esa era la señal.- Genma, necesito al administrador, al ingeniero industrial y al de relaciones internacionales en el cubículo 1, 2 y 3 en ese orden. El presidente irá en un minuto.-
Genma afirmó con su pulgar levantado y salió del lobby en búsqueda de los mencionados. Al llegar a la sala, solo pudo visualizar al rubio administrador y al ingeniero castaño. Se acercó a ellos y les dio las indicaciones sin revelarles que, el mismísimo presidente de la compañía sería el filtro final- y su última opción- para poder ser seleccionados como practicantes.
Naruto sintió un tirón en su estómago, había creído que no iba a ser llamado. Era su última oportunidad para no cagarla.
Continuará...