Espero a Shunsui viendo que ya pasa de la hora acordada en la que siempre solemos vernos. Hoy es luna llena y Yhwach ha salido de la ciudad por lo que si no nos vemos ahora después no podremos ¿En dónde se ha metido Shunsui? ¿Algo malo le habrá pasado? Imposible, nadie podría ganarle. Suspiro derrotado decidiendo esperarlo un poco más, pero debo darme prisa.
No vaya a ser que a Yhwach le dé por regresar antes, me meta en problemas y toda la farsa que he armado se venga para abajo. Me desespero al ver que ha pasado otra media hora levantándome y yendo a prisa hacia el campamento. Apenas entro los pocos que permanecen despiertos corren hacia mí saludándome.
-Ukitake-sama está aquí ¿Será que por fin nos iremos de estas tierras?
Sonrío dándoles pequeñas palmadas. Pronto ¿Sí? Ya casi es tiempo, solo esperen un poco más.
-Jushiro-sama… ¿Qué hace usted aquí?
Miro a Kisuke que ha llegado hasta mí mirándome curioso. Shunsui…¿Dónde está? No llegó a nuestro encuentro. Se limita a señalarme su caravana a la cual rápidamente me dirijo. Toco la puerta un par de veces sin respuesta alguna. Shunsui soy yo Jushiro ¿Estás bien?
-Vete estoy cansado.
¿Qué? Sin esperar más entro mirándolo sentando sobre la orilla de su cama terminándose de beber una enorme botella de ron. Shunsui…
-¿Qué haces aquí Jushiro?
¿Qué hago aquí? Estaba preocupado por ti ¿Ya olvidaste que hoy nos veríamos? Es luna llena. Me mira fijamente arrojando la botella y levantándose, se tambalea un poco llegando hasta mí. Mete sus dedos entre mi cabello acercándose y oliéndolo.
-Que aroma tan dulce tienes Jushiro, es una lástima que ya no es únicamente mío.
¿Qué? ¿De qué hablas Shunsui?
-¿Jushiro no deberías estar en tu preciosa mansión con tu marido el millonario calentándole la cama?
¡¿Qué cosas dices?! ¡Yo odio a Yhwach, solo te amo a ti! Se ataca de la risa negando con la cabeza.
-Admite que amas a ese hombre y su gran fortuna, que solo me has utilizado. Nunca he sido nada más que tu amante ¿No es así? Yo soy el idiota que ocupas una que otra noche tan solo para regresar a las sabanas de seda con tu marido.
Siento como algunas lágrimas se acumulan en mis ojos sin comprender que pasa. Shunsui ¿Por qué me dices estas cosas tan horribles?
-Deja de hacerte la víctima Jushiro, te vi. Te he visto todos estos días por las calles, paseándote de su brazo, besándolo y abrazándolo. Diciéndole que lo amas, eres un mentiroso y quiero que te largues de aquí ahora mismo o haré que te saquen.
¡Shunsui no! Escúchame eso es porque…porque ¡Es necesario!
-Claro las apariencias, nunca te había importado pero ahora pareciera que no puedes vivir sin Yhwach. Además escuche algo que rompió mi corazón Jushiro. Oí a un par de hombre salir de un bar que frecuenta Yhwach diciendo que él había dicho que su preciosa esposa por fin quería darle un hijo ¡Qué maravilla! ¿Ya estás embarazado? Felicidades, ahora lárgate Jushiro.
No…no, Shunsui no…tú no comprendes. Lo hago por nosotros.
-¿Te revuelcas con él por nosotros? ¡No mientas!
¡No miento! Por favor confía en mí. Lloro desconsolado intentando encontrar las palabras para explicarle sin tener que revelarle toda la verdad. Por favor Shunsui solo espera un poco más por mí ¿Sí? Por favor… Me mira desesperado negando con la cabeza.
-Ya me canse de esperar Jushiro, creo que he llegado a mi límite. Pero a pesar de todo aun te amo y jamás dejaré de hacerlo y si tú me amas como dices hacerlo hoy mismo escaparemos con nuestra gente. Deja a Yhwach y vámonos ¿Qué dices Jushiro? ¿Vienes conmigo o te quedas con tu marido?
Shunsui… Lo miro aterrado sin poder creer lo que me acaba de decir. No hablas en serio, no te irás, no me abandonarías.
-Si lo haré. Contigo o sin ti hoy mismo parten las caravanas al medio día así que déjame de hacer que lo repita ¿Te quedas o te vas?
Tomo sus manos mirándolo fijamente sintiendo como me quemo por dentro al mismo tiempo que mi corazón se rompe y montones de lágrimas brotan de mis ojos. Tú no puedes esperarme y yo no puedo irme Shunsui. Me mira sorprendido derramando algunas lágrimas y soltándome.
-Bien, entonces este es el adiós. Ahora vete, tengo cosas que guardar.
Me lleva hasta la puerta abriéndola y dejándome salir, de inmediato me giro encarándolo. Rezaré porque su viaje sea exitoso y próspero y sobre todo porque nunca dejes de amarme. Te lo dije hace treinta años cuando éramos niños y te lo digo hoy Shunsui, te amaré por el resto de la eternidad y más allá de ella. Tal vez en esta vida no pudimos estar juntos pero con suerte…con suerte tal vez…en la siguiente podamos volver a reunirnos.
-Tal vez…
Me mira fijamente para luego darse la vuelta dándome la espalda, quisiera detenerlo pero no puedo, no puedo hacerlo. Extiendo mi mano tan solo palpando lo que me queda de él para luego irme. Salgo corriendo intentando soportar el dolor sin siquiera hablarle a nadie. Apenas llego al lugar al que vivo entro sin que nada me importe.
-Jushiro-sama ¿Está bien? ¿Salió a estas horas de la madrugada?
No quiero que me molesten. Estoy por subir las escalera cuando un fuerte mareo se apodera de mí haciéndome caer de rodillas. De inmediato los sirvientes corren en mi auxilio.
-¿Deberíamos llamar al doctor?
No…solo, solo estoy cansado.
-Jushiro-sama estás semanas se ha visto diferente, no es la primera vez que se marea, el otro día hasta se desmayó. A tenido antojos y todo ¿Será que por fin está esperando un hijo del amo?
Me quedo estático pensando las cosas. No puedo estar embarazado y menos de Yhwach, apenas si dejo que me bese y toque, no he tenido sexo con él desde hace años. El único hombre con él que he estado ha sido con…Shunsui. Abro los ojos cubriéndome la boca para no sollozar al recordar que aquella vez él terminó dentro de mí.
-¡El amo se pondrá tan feliz!
¡No! No…no, por favor no le digan.
-¿Pero por qué?
Porque…porque quiero darle una sorpresa, yo mismo se lo diré. Además aun no estamos seguros así que no hay que anticiparnos ¿Sí? No digan nada por favor. Los sirvientes rápidamente asienten sin poder dejar de sonreír mientras yo me levanto yéndome a mi habitación. Me tiro sobre mi cama llorando con el corazón roto, ahora que mi amor se va salgo embarazado, esto no puede ser posible ¿Ahora qué haré? Además de que la razón por la que me quedo es también por el hijo que tuve con Shunsui y que me fue arrebatado… Si tan solo pudiera contárselo, pero supongo que es mejor así… al menos por ahora.
--------------Grimmjow--------------------
Escucho el rechinido de los resortes del colchón por la forma en cómo se gira Kurosaki gruñendo desesperado. Tigre joder duérmete.
-¡No puedo carajo!
Si puedes duérmete ya.
-¡Odio esta puta cama y te odio a ti!
¿Ahora que te dio? ¿La rabia?
-¡Rabioso tú! ¡¿Quieres que te arranque la cabeza?! ¡Estoy enojado! Odio está maldita cama incómoda.
Sí, sí…
-Grimmjow idiota dime que me amas.
Te amo maldición ya duérmete, tengo que trabajar temprano.
-¡No me lo digas porque te lo pedí, dímelo de corazón!
Agg joder. Me giro encarándolo y chocando directamente con su enorme vientre mientras él me mira molesto con una ceja levantada. Andas de un humor de la mierda Kurosaki, ni tú te aguantas ¿Es por el embarazo?
-¡Es por ti! Tengo mucho sueño y no puedo dormir ¡Y es tu culpa!
¿Ahh? ¿Estás drogado? Kurosaki me mira molesto jaloneándome la cara hasta hacerme gritar. Basta joder ¡Basta! ¿Qué quieres que haga?
-Ocupas mucho espacio.
¿Yo ocupo mucho espacio? ¿Ya te viste? Me regala una mirada asesina que me hace temblar. Es broma tigre te ves precioso con un vientre enorme, gigantesco e inmenso pero lindo…sí, realmente sexy.
-¿Quieres morir idiota?
No carajo, bien me moveré ¿Contento? Asiente y rápidamente me separo dándole la espalda pegándome casi hasta la orilla ¿Mejor?
-No, aun estás muy junto.
Me separo un poco más quedando casi en el borde ¿Así está bien la reina?
-¡Que te jodan!
Me da una patada en la espalda que me tira al piso de cara ¡Joder Kurosaki! Vuelvo a levantarme viendo cómo se extiende en toda la cama. Claro toda para ti.
-Él bebé necesita espacio.
¡Bien duérmete con el bebé en la cama, yo dormiré en el sillón!
-Eres un llorón, pantera tonta pues vete si quieres pero la colcha se queda, solo tenemos una después de todo.
Sí lo que sea. Me voy hasta el sillón tirándome en el descansando tranquilo y cerrando los ojos escuchando silencio total. Por fin un poco de tranquilidad…
-Grimmjow…Grimmjow ¡¿Grimmjow ya te dormiste?! No ha pasado mucho así que aún no puedes estar dormido.
¿Ahora qué quieres carajo? Ya tienes toda la puta cama para ti solo. Deja de joder y duérmete. No me contesta por varios minutos hasta que empiezo a escuchar pequeños sollozos y como tose un poco. Maldición ¿Estás llorando?
-No…tonto.
Llora con más fuerza haciéndome reír. Joder que los gatos lloran como locos, parece que los están matando.
-¡No son los gatos!
Entonces será que el estirado ya vio el culo plano que tiene Starrk y sus lloriqueos se escuchan hasta acá.
-Que idiota eres…
Kurosaki comienza a reírse al igual que yo mientras miro hacia el techo suspirando tranquilo.
-Grimmjow…
¿Qué pasa tigre?
-Te extraño.
Tan solo nos separa una pared así que ya duérmete que aquí estoy.
-No nos gusta dormir solos, el bebé se pone triste sino estás con nosotros.
Bien, bien… Me levanto nuevamente entrando a la habitación viendo que ya me espera indicándome que me recueste a su lado. Me meto entre la colcha abrazándolo y viéndolo sonreír. Te amo Kurosaki.
-Y yo a ti pantera.
Por fin cierro los ojos relajado hasta que escucho como tose nuevamente a la vez siento como su mano se pasea por mi abdomen bajando hasta mi miembro el cual comienza a presionar ¿Qué carajo haces?
-Quiero que se te ponga dura.
¿Ahh?
-Hay que follar ¿No quieres?
Tigre son las dos de la mañana ¿Cuál es tu problema? Tengo sueño.
-Bien, solo cierra los ojos y duérmete yo haré lo demás.
Si claro, como puedo dormir contigo tallándote contra mi más tus manos masturbándome pervertido.
-¿Te la chupo en ese caso?
Lo miro viendo como me observa totalmente decidido haciéndome reír. Eres todo un pinche caso. Súbete ya. Me sonríe levantándose y sentándose con cuidado encima de mí dándome la espalda ¿Te preparo?
-No, solo métela estoy listo.
Eres un degenerado.
-No te muerdas la lengua pantera.
Sonrío masturbándome un poco a la vez que me deleito con la vista de su espalda suave y como los huesos de su columna resaltan tenuemente más su cabello largo que aparta dejándolo caer sobre sus piernas. Kurosaki talla sus trasero contra mi encendiéndome rápidamente, tomo mi erección tallándola entre sus nalgas escuchándolo gemir. Hahh…joder, apenas te toco me pongo caliente tigre.
-Métemela ya.
Andas realmente atrevido ¿No?
-Es por el bebé.
Aja… Kurosaki se limita a inclinarse un poco mientras yo abro su trasero lamiéndome los labios al mirar como su pequeña entrada ya se contrae ansiosa. Sin esperar más tomo mi erección comenzando a penetrarlo lentamente sonriendo de lo increíblemente caliente y estrecho que está más el placer que me brindan sus contracciones y gemidos eróticos y escandalosos.
-Hahh…se siente tan bien.
De inmediato le doy una dura nalgada que lo hace brincar. Venga ya, muévete. Gruño excitado sintiendo como comienza a mover sus caderas subiendo y bajando con fuerza clavándose en mi erección. Ahh...así…no te detengas Kurosaki.
-Grimm…ahhh, Grimmjow…Grimmjow. Duro, fóllame duro.
Aferro mis manos a su cintura comenzando a penetrarlo con más rudeza escuchando el sonido obsceno de nuestros cuerpos uniéndose sin descanso más los gemidos de Kurosaki. Se reclina un poco para recargarse en sus manos mientras yo continuo enterrándole las uñas a la vez que le doy bruscas estocadas.
-Hahh Sí…sí….haahhh…sí, Grimmjow sí, ahí me encanta, ahí…ahh.
Acaricio su vientre a la vez que disfruto el dulce aroma floral de su cabello sin dejar de deleitarme con su apretado y húmedo interior. Sonrío al ver pequeñas gotas de sudor recorrer su espalda bajando hasta caer sobre mi abdomen.
-Ahh…pantera…me corro…haahh.
Le doy una dura estocada que lo hace gritar y correrse haciéndome sonreír al sentir como me estruja aún más. Joder se siente tan rico. Intento soportar un poco más inútilmente terminando dentro de él sintiendo como cae rendido sobre mi pecho. Disfruto mi orgasmo haciendo que gire su rostro para besarlo. Siento como tiembla al sentir mi lengua entrar en su boca dejando que pequeños chorros de saliva escurran de por medio.
Kurosaki se baja con cuidado de encima de mí recostando su cabeza en mi pecho apenas si dándome un pequeño beso durmiéndose rápidamente. De haber sabido que solo tendría que follármelo me hubiera ahorrado varias horas de sueño. Observo como duerme tosiendo un poco, de inmediato lo tapo mirando que se ve un tanto decaído. A pesar de su embarazo independientemente de que el bebé no deja de crecer él se ve mucho más delgado.
Tiene ojeras y su piel luce bastante pálida, es como una hermosa flor que lentamente ha ido perdiendo vitalidad. Sé que él no nació para estar encerrado en una casa de ladrillos ni a comer de una lata pero no puedo ofrecerle nada más y la opción de dejarlo ir no existe para mí. Lo abrazo con fuerza escuchando como vuelve a toser a la vez que su respiración se escucha un tanto agitada. Tan solo beso su frente cerrando los ojos, te prometo que todo será mejor Kurosaki.
Abro los ojos al sentirme totalmente empapado y caliente incorporándome y encendiendo una vela mirando que Kurosaki tiembla sin control sudando muchísimo. De inmediato toco su frente mirando que está ardiendo, carajo. Hey tigre, despierta. Kurosaki despierta…Kurosaki abre los ojos. Al ver que no despierta tan solo temblando me levanto a prisa corriendo por agua fría y un paño para intentar bajar su temperatura elevada.
Tranquilo Kurosaki estarás bien ¿Sí? Continúo mojando el paño y pasándolo por su cuerpo sin notar resultado alguno preocupándome enormemente por él y nuestro hijo. Ha tenido temperatura estas últimas semanas pero siempre se le baja con un poco de agua fría y una buena noche de sueño pero ahora parece no dar resultado. Mi corazón comienza a latir agitado de la preocupación. Rápidamente me visto y hago lo mismo con él tomándolo entre mis brazos.
Tigre te llevaré al doctor, así que no tengas miedo que todo estará bien. Lo cubro con nuestra única colcha pegando su rostro contra mi pecho y tomando el poco dinero que tenemos saliendo al frío de la madrugada. Camino a prisa escuchando como tose sin descanso mientras yo acelero el paso llegando a un consultorio que también es casa del doctor que lo opera. Toco la puerta totalmente desesperado ¡¿Hay alguien?! ¡Necesito ayuda! ¡Abran por favor! ¡Por favor es urgente!
Algunos segundos después miro como se prenden las luces de la parte superior escuchando como bajan las escaleras abriéndome la puerta.
-¡¿Qué crees que haces?! Lárgate sino llamaré a la policía.
No, escuche, mire mi…él está enfermo y está embarazado por favor revíselo. El tipo levanta una ceja para luego intentar cerrar la puerta hasta que lo detengo ¿Qué haces? ¿No me oíste? ¡Está enfermo!
-Ese de ahí es un salvaje, y yo no me relaciono con los indios ni con los pobres.
¿Qué? Me cierra la puerta en la cara ¡Desgraciado! Pateo la madera saliendo a prisa a otro consultorio en el cual ni siquiera me abren yendo al último de la ciudad. Toco impaciente sintiendo mi pecho totalmente húmedo al igual que la colcha, Kurosaki luce realmente mal. En cuanto el doctor me abre lo miro desesperado. Por favor revíselo, está muy mal y podría pasarle algo al niño que lleva dentro. El doctor me observa sorprendido suspirando derrotado.
-Bien pero primero págame.
Sí…sí ¿Cuánto será?
-Por ser un indio y por la hora que es…una moneda de oro es lo justo.
¿Qué? ¿De oro? No…no tengo una moneda de oro, solo tengo una de plata y tres de bronce te las doy pero revísalo.
-Meter a un indio a mi consultorio por una vil moneda de plata y algunas de bronce no lo vale lo siento.
¡No, espera! Me cierra la puerta mientras yo siento algunas lágrimas deslizarse por mi rostro ¡Por favor! ¡Por favor el morirá! Por favor… Corrodesesperado encontrándome con algunas personas las cuales me ignoran apenas les pido ayuda ¿Qué hago? ¿Qué hago? ¡Maldición! Me tropiezo en el camino logrando sostenerme pero cayendo de rodillas sin dejar de abrazar a Kurosaki dándome cuenta que su respiración es casi imperceptible. Kurosaki…hey…Kurosaki. Kurosaki no…no me dejes tigre no podría vivir sin ti.
¡Ayuda! ¡Que alguien me ayude! ¡Por favor quien sea! ¡Por piedad ayúdenme! Grito sujetando a la gente que pasa la cual me mira con asco soltándose. Algunos pasan ignorando mis gritos de auxilio como si no fuera más que un animal callejero. Por favor…alguien…quien sea. Lloro desconsolado abrazando a Kurosaki mirando mis lágrimas gruesas y pesadas caer sobre su rostro pálido ¿Por qué nadie me ayuda? ¿Por qué? De repente escucho un pleito girando y viendo a dos hombres pelear y como uno saca un arma.
Rápidamente me seco las lágrimas volviendo a cargar a Kurosaki para dejarlo recargado contra un local. Aguanta un poco más tigre, conseguiré ayuda. Lo dejo solo para dirigirme a donde se encuentran peleando. Sin siquiera esperar le toco el hombro al tipo del arma haciendo que gire y dándole un fuerte puñetazo que lo tira, de inmediato tomo su arma viendo como el otro también saca una apuntándome tembloroso.
-Ma…maldito ¡¿Qué haces?!
Tan solo lo miro fijamente a la vez que le apunto.
-Ba…baja el arma o dis…disparo.
Sin dejar que me diga más simplemente le disparo en el hombro viéndolo caer al piso gritando y generando un charco de sangre mientras el otro huye. Regreso a donde esta Kurosaki cargándolo y yendo nuevamente al último consultorio tocando la puerta desesperado.
-¡Van! ¿Ahora quién es?
Dejo que abra viendo como me mira de mala gana.
-¿Ya traes la moneda de oro? Si no puedes largarte.
Traigo algo mejor. Saco el arma apuntándole y mirándolo temblar del miedo.
-No...no está cargada.
Rápidamente disparo justo alado de su rostro dejándolo estático. La próxima va entre tus ojos ¿O es que por fin lo revisaras? Asiente asustado indicándome que pase. Una vez dentro dejo a Kurosaki sobre la camilla mirando como el hombre comienza a revisarlo y demás.
-¿Po…podrías bajar el arma? Me pones nervioso.
Cuando este curado bajaré el arma. El tipo asiente siguiendo con sus deberes.
-¿Qué no come? Míralo nada más esta todo desnutrido, seguro que tiene anemia.
Le levanta una mano para luego dejarla caer mostrándome lo delgado que esta.
-Y por la ropa que trae han de vivir en un lugar horrible ¿El agua que beben está limpia o es siquiera potable?
Bebemos el agua del caudal cercano al bosque.
-Muchacho por dios esa agua está muy sucia y como los salvajes no están acostumbrados a esa clase de cosas ni a los antibióticos será difícil cuidarlo. Pero ese no es el único problema, tose como si tuviera bronquitis ¿Está expuesto a mucho humo ya sea de cigarrillo, de las fábricas o a polvo?
Tal vez.
-No me sorprende su condición. Muchacho los salvajes no personas normales, ellos están acostumbrados a otro ritmo de vida.
¿Eso quiere decir que no se curara?
-Puedo hacer algo pero si realmente quieres que este sano lo mejor será que el chico regrese a sus tierras. Si sigue aquí no durara mucho tiempo.
Lo miro sorprendido viendo como le inyecta algo ¿Qué es eso?
-Tranquilo es natural, no lastimara a los bebés.
¿Bebés? Solo es uno.
-¿Uno? ¿Ya viste el tamaño de su vientre y la forma? Son dos.
Me quedo estático tragando saliva. Tendré dos hijos…Sonrió inevitablemente cubriéndome la boca avergonzado pero a la vez sintiendo un pequeño dolor en mi pecho ¿Realmente no hay otra forma de que se quede?
-Podría quedarse pero su condición nunca será estable aunque lo trates. Hay personas que pueden acostumbrarse al cambio y otras que simplemente no. En el caso de este chico es más de lo que puede soportar.
El tiempo pasa mientras yo pienso en que hacer ¿Por cuánto tiempo habrá estado sufriendo y simplemente no me lo dijo para no incomodarme?
-Ya logre que se le bajara la temperatura y regule su respiración, ahora simplemente necesita dormir y comer bien por él y los bebés que lleva dentro.
Asiento dándole las monedas que tengo y cargando a Kurosaki.
-Creo que sobra mencionar que no vuelvas por aquí ¿Cierto?
Me limito a salir viendo como ha amanecido comenzando a caminar por las calles sin dejar de besar su rostro viendo como abre un poco los ojos.
-Grimm…Grimmjow ¿Dónde estamos? ¿Vamos a casa?
Lo miro fijamente asintiendo. Es tiempo de volver… Me sonríe volviendo a cerrar los ojos aferrándose a mi pecho.
-¡Grimmjow!
Giro viendo a Starrk correr hacia mí caminando a mi lado.
-Ahh, también es su sexy eminencia ¿Qué hacen? ¿Paseo matutino?
¿Qué quieres?
-¿De mal humor? Si bueno pues madrugue ya que le voy a llevar flores a Soujun mira ¿Verdad que son bonitas?
Me muestra un ramo todo feo el cual ignoro.
-Bueno las corte de un jardín…ajeno…sin permiso pero…¿Verdad que me dará el sí?
Púdrete.
-Joder que humor el tuyo. Ohh ¿Te cuento algo interesante?
Starrk muerte, largo de aquí.
-Idiota intento hacerte la plática vamos para el mismo rumbo. Bueno te cuento que ese indio que se está tirando al hijo de Soujun se supone que es mudo o una mierda así y el otro día lo escuche hablar ¿Te imaginas? Le está viendo la cara a Byakuya-tan ¿Debería decirle?
Solo que quieras que el indio te meta una flecha por el culo.
-Buen punto. Ahora que lo pienso ¿Él y su sensual eminencia no son amigos?
Idiota no porque sean salvajes quiere decir que sean amigos.
-Los dos le hablan a las plantas eso los hace amigos.
¿Eres imbécil? Aunque ahora que lo pienso cuando Kurosaki llegó al pueblo dijo que venía con un amigo suyo ¿Recuerdas?
-¡Ahh! Naah…bueno tal vez ¿Cuál era su nombre? ¿R…Ran? ¿Ron? ¿Rin?
¿Run no imbécil? No idiota era…Ren…
-¡Renshi!
¿Renshi?
-¿Renki? ¿Renmi? ¿Renli? El punto es que empieza con Ren y lo amenazaré. Le diré que o me enseñe a cazar un búfalo para impresionar a Soujun o lo delato con Byakuya-tan.
Un pendejo como tú no podría cazar a un búfalo ni aunque el animal estuviera amarrado y entre tus manos con un letrero en la frente de tu propiedad, eres idiota por naturaleza.
-Ja ja burlémonos del pendejo de Starrk. Jódete soy genial.
Sí, sí…mira ¿Qué ese no es tu indio?
-Cálmate yo no tengo indios.
Starrk gira viendo al salvaje pelirrojo que sale de la casa del estirado tirando una cubeta de agua a la tierra.
-Ya lo tengo ¡Hey Renmi soy yo Starrk!
El tipo gira sorprendido pero apenas me mira corre hacía mi empujando a Starrk llegando a donde me encuentro.
-Ichigo…Ichigo ¿Qué tiene? ¡¿Qué le hiciste?!
El tipo me mira molesto tomándome por el cuello, de inmediato me suelto sujetando a Kurosaki con fuerza.
-Ahh…Renmi te delataste, si hablas.
-Cierra la boca hombre inútil. Y tú pantera feroz escúchame, vine a estas tierras de blancos para asegurarme de que Ichigo no sufriera pero mira lo mal que se ve ¿Qué clase de marido eres? ¿Si quiera lo alimentas? ¿No te importan él ni tu hijo?
¿Ahh? ¿Quién mierda te crees que eres salvaje idiota?
-Soy su mejor amigo. Y si no te harás responsable ni lo cuidaras me lo llevaré de regreso a la tribu.
¡¿Qué dijiste?! ¡Kurosaki es mío! ¡Mío y de nadie más! Mataré a quién intente arrebatármelo. Me mira sorprendido sosteniéndome la mirada.
-Oigan, oigan esto se está saliendo de control no griten estamos a mitad de la calle.
-Que guardes silencio te digo hombre inútil.
-¿Hombre inútil? ¿Te refieres a mí? No por ser gitano soy inútil que quede claro.
-Pantera feroz ¿Por qué Ichigo está así? ¿Qué tiene?
El doctor dijo que es porque no come lo suficiente y bebe agua sucia más que el humo de la ciudad le afecta o algo así.
-Tú mismo lo has dicho, eso quiere decir que es tiempo de dejarlo ir.
¿Estás loco salvaje? ¿Dejarlo ir? ¡Nunca! ¡Él es mío!
-Pantera feroz escúchame con mucha atención. Nosotros los salvajes amamos recorrer las praderas, entonces nos sentimos libres y eso nos hace felices. Si tuviéramos que vivir en casas por el resto de nuestras vidas palideceríamos y moriríamos. Eso es lo que le está pasando a Ichigo. No existe otro clima o suelo como el de nuestra tribu. Es nuestra tierra, nuestra casa, la tierra de nuestros padres a la que ahora debemos volver. Estoy seguro que tanto Ichigo como yo queremos terminar nuestros días allí y ser enterrados entre aquellas montañas que nos vieron nacer. Si de verdad lo amas es tiempo de que lo dejes ir a su hogar, tu…hogar si así lo quieres.
Me quedo quieto mirándolo fijamente. Si lo llevo de regreso a su tribu ¿El sanara absolutamente? El salvaje asiente totalmente determinado sosteniéndome la mirada haciéndome suspirar derrotado. En ese caso supongo que es tiempo de conocer a “Mi nueva familia” Me sonríe dándome una palmada en el hombro.
-Es una sabia decisión pantera feroz.
Deja de decirme así idiota.
-Oye Grimmjow es broma ¿Cierto? No me digas que realmente piensas irte a vivir con los salvajes.
Los salvajes me importan una mierda el único que me interesa es Kurosaki.
-¿Estás loco? ¿Tú también te irás Renmi?
-¡Es Renji! Y sí, si Ichigo volverá yo también.
-Pero ¿Qué hay de Byakuya-tan? Creí que tenían algo especial.
-Para Byakuya no soy más que una vil mascota con la que se entretiene. Él jamás podría amar a un salvaje ni dejar sus bienes materiales por mí. Él no puede darme la familia que yo busco.
Starrk permanece en silencio sin saber que decir. Supongo que te las arreglaras solo en el trabajo Starrk.
-¿En serio te vas?
Sí, por el bien de Kurosaki y de mis hijos lo mejor será irnos. De todas formas nunca considere este lugar mi hogar, tan solo me trae malos recuerdos.
-Supongo que eso está bien, espera ¿Dijiste hijos?
Kurosaki tiene dentro dos bebés. Ambos me miran sorprendidos sonriendo al igual que yo.
-Bien, en ese caso ¿Te veo mañana al amanecer afuera de la ciudad? Tengo que despedirme y hacer unas cosas antes de que partamos.
No, me adelantaré quiero que nos vayamos hoy mismo. Creo saber para donde está su tribu.
-Está bien. De todas formas Ichigo podría indicarte el camino.
Asiento viendo al salvaje regresar a la casa de los estirados mientras Starrk permanece en silencio.
-Vaya así que todos se van…
Anímate idiota, no me tendrás cerca para estarte jodiendo por lo que probablemente podrás follarte al amargado ese sin problemas.
-Si supongo. Pues amigo mío, espero verte pronto sino es en esta vida será en la siguiente. Mira que nosotros los gitanos creemos en eso de las rencarnaciones.
Sí, sí…llorón. Starrk se ríe dándome una palmada en el brazo.
-Venga te acompaño.
¿Y el estirado?
-Su estirado y lindo trasero pueden esperarme.
Sonreímos caminando hacía mi hogar llegando y viendo sentado sobre el pórtico a un oficial de la caballería. De inmediato le paso a Kurosaki a Starrk haciendo que lo cargue. Quédense aquí, si las cosas se ponen mal esconde a Kurosaki. Starrk asiente alejándose un poco mientras yo avanzo encontrándome con el hombre que en cuanto me ve sonríe mientras yo lo reconozco.
-Así que realmente es usted…capitán Jaegerjaquez.
No sé de quién hablas. Me sonríe burlonamente quitándose su estúpido sombrero.
-Reportaron un incidente esta mañana, un robo y una pelea en la comisaría. Estaba por ahí y casualmente oí la descripción, todo coincidía perfecto supe que eras tú. Ojos azules, fríos, felinos y…asesinos. Sin miedo de jalar el gatillo, único en su especie. Realmente fue una perdida para la caballería cuando te perdimos.
Te repito que no conozco a la persona de la que hablas ¿Tienes pruebas? ¿Me estás acusando de algo?
-No las tengo pero estoy seguro de que te reconocerían las “víctimas” además aunque no fuera así hay rumores de que te relaciones con ciertos…salvajes.
Le dedica una mirada a Kurosaki que continua inconsciente rápidamente interponiéndome ¿Qué quieres?
-Quiero que vengas conmigo, a decir verdad los últimos reclutas son una basura. Inclusive ya ascienden a cualquier idiota a los puestos grandes. Necesitamos a alguien de tu calibre en la caballería joven capitán. Te he seguido el rastro por mucho tiempo y los generales están dispuestos a perdonar todas tus faltas si regresas a tu puesto claro con algunos privilegios menos.
Tú y esos pendejos pueden meterse sus privilegios por el culo, ahora largo de mi propiedad antes de que te meta tres balas por la puta boca. Me sonríe levantándose y encarándome.
-Eres un hueso difícil de roer ¿No es así? Sabría que dirías eso, por lo que decidí traer compañía.
Miro como comienzan a salir varios oficiales de menor rango por la parte trasera de mi casa, son cerca de diez los cuales me rodean a mí y a Starrk.
-Ahora capitán Jaegerjaquez espero tenga las suficientes balas y sea tan rápido como lo recuerdo por que de lo contrario le recomiendo que se entregue pacíficamente y tal vez no mate a ese salvaje que por lo que veo está embarazado. Sería una verdadera perdida para su…linaje.
De inmediato siento la furia apoderarse de mí, me abalanzo sobre el tipo sacando el arma que traigo apuntándole a la cabeza. Repite eso y el único linaje que se perderá será el tuyo.
-¿Por qué no volteas?
Miro de reojo como cinco tipos le apuntan con sus rifles a Starrk y a Kurosaki. Los miro enojado y totalmente desesperado sintiéndome impotente y molesto ¿Por qué justamente ahora? ¿Por qué? Simplemente suelto mi arma sintiendo como me dan un golpe en el estómago el cual no me hace ni siquiera palidecer.
-Tan fuerte como siempre, ahora camina.
Me empuja y de inmediato me acerco a Starrk susurrándole al oído. Llévatelo, yo iré por él a tu hogar, no dejes que nada le pase Starrk, cuídalo con tu vida si es necesario. Rápidamente asiente alejándose mientras yo continuo siendo empujado sin dejar de voltear viendo como Kurosaki entre despierta.
Encuentra su mirada con la mía levantando un poco su mano hacía mi volviendo a caer dormido. Una vez en el cuartel me sientan en una pequeña silla con varios hombres rodeándome mientras el tipo que me trajo se sienta en el borde de su escritorio mordiendo una manzana y abriendo un expediente.
-¿Recuerda mi nombre capitán Jaegerjaquez? Soy Tesla cuando nos conocimos yo era un mero teniente ahora tengo el mismo rango que usted. Bueno el que solía tener.
No lo sé, me suena a mierda o a basura. Me sonríe mientras yo siento como uno de los oficiales me da un golpe en el rostro con el mango de su rifle.
-Basura ¿Cómo te atreves a llamarle así al capitán?
-Basta no lo toques, este hombre es mortalmente peligroso, un golpe como ese no es más que cosquillas para él ¿No es así? ¿Por qué no les ilustro a todos quién eres? Bien empecemos.
El tipo saca unas hojas comenzando a leerlas.
-Grimmjow Jaegerjaquez, 25 años. Nacido el 31 de Julio de 1840 en el poblado de Kiev. También conocido como “El destello azul” debido a su agilidad y velocidad en combate. Prestó servicio al estado desde 1855 hasta hace apenas dos años. Fue ascendido al puesto de capitán de la primera legión de la caballería con tan solo 18 años debido a su sobresaliente avance. Un experto en táctica y combate libre y cuerpo a cuerpo.
Mira cuantas distinciones tienes. Medalla de honor como recompensa a la valentía e intrepidez con riesgo de la propia vida, más allá de la llamada del deber estando en combate. Tres medallas de heroísmo extraordinario, dos más al valor y valentía en la acción frente al enemigo. Cinco en heroísmo fuera de combate y un montón más. Un verdadero héroe ¿No es así? Todo era perfecto hasta que tu última misión salió mal, no solo la mayoría de tus tropas perecieron sino un par de civiles más, toda una pena ¿Tanto te dolió la muerte de esa mujer Grimmjow?
Lo miro fijamente tan solo sonriendo ¿Terminaste de hablar mierda? Aprovecho que nuevamente el oficial esta por golpearme para arrebatarle el rifle y comenzar a dispararles a todos. El fuego se desata pero rápidamente utilizo al idiota de Tesla como escudo. No querrán dispararle a su capitán ¿O sí?
-¡Suéltame ahora mismo! ¡Suéltame! Libérame y el trato seguirá en marcha.
Que te jodan. Salgo sin soltarlo llegando hasta donde se encuentran los caballos siendo seguido por los demás oficiales. Una vez ahí lo aviento tirándolo al piso disparándole en una pierna y un brazo escuchándolo gritar. No queremos que tengamos que volver a encontrarnos ¿O sí? Realmente tienes razón cuando dices que ahora a cualquier basura lo ascienden a puestos grandes.
-¡¿Cómo te atreves?! ¡Te mataré! ¿Me oíste? ¡Te asesinaré a ti y a ese salvaje!
Eso sí nos encuentras. Salgo tan rápido como puedo en un caballo sintiendo un ligero dolor en el brazo y otro en el costado descubriéndome y mirando que lograron darme ya que la sangre comienza a expandirse. No me duele demasiado por lo que probablemente tan solo me rozaron las balas. Llego de prisa al hogar de Starrk entrando y mirando a Kurosaki sentado en el sillón ya consiente. Apenas me ve brinca corriendo hasta mí abrazándome, lo estrecho entre mis brazos sintiendo que mi vida depende de ello.
-Grimmjow…Grimmjow estaba asustado, Starrk no me decía nada. Grimmjow ¿Qué te pasó? ¿Por qué estás golpeado?
No hay tiempo que perder ¡¿Starrk dónde estás?! Sale rápidamente con una enorme maleta.
-Toma, agarre algunas cosas de tu hogar y otras para el viaje ahora váyanse.
Asiento jalando a Kurosaki y colgándome la maleta para subirnos al caballo.
-Grimmjow ¿A dónde vamos? Tengo miedo.
Starrk, te buscaran a ti también. Deberías irte a refugiar con tu gente un tiempo, la caballería no se mete con los gitanos. Asiente dándome nuevamente la mano. Adiós.
-Hasta luego dirás, no olviden que yo seré el padrino de esos niños.
Tan solo sonrío asintiendo y comenzando a cabalgar rumbo al desierto abrazando con fuerza a Kurosaki sintiendo como se aferra a mí.
-Grimmjow no entiendo que está pasando, háblame.
Permanezco en silencio hasta que salimos de la ciudad entrando en las planicies de extenso desierto rocoso sintiendo la mirada de Kurosaki clavada en mí. Hey tigre creo que…creo que es tiempo de conocer a la familia.
-¿A la familia? ¿Mi familia?
¿Nuestra familia no? Kurosaki me mira emocionado y lloroso asintiendo rápidamente.
-Sí…¿Iremos a casa? ¿Me llevarás a la tribu de verdad?
Claro, creo que la vida en las praderas y un cuero amarrado a mi lindo trasero no suenan tan mal ahora que lo pienso. Kurosaki se ríe sin dejar de abrazarme y acariciar mi rostro.
-Papá y mis hermanos se pondrán muy felices. Con suerte el bebé nacerá ahí.
Dirás bebés, son dos.
-¡¿Qué?! ¡¿Cómo lo sabes?!
Joder, simplemente lo sé soy su padre después de todo. Me sonríe depositando montones de besos en mi rostro.
-Gracias, estoy realmente feliz Grimmjow.
Sonrío para él dándole un beso en la frente y quedándome cautivado por algunos segundos en sus ojos marrones. No sé cuánto tiempo pasó para encontrarme con Kurosaki, pero espero pase mucho más hasta perdernos…