Capítulo 2
PDV Narrador
Dos días más y Alexa estaba en mejores condiciones, pero se negó a hablar con Erza, quien estaba molesta por esto. Le gustaba tener claro lo que sucedía a su alrededor y Alexa era un completo secreto. De haber sido uno de sus compañeros de gremio habría sabido qué hacer para que le obedecieran, pero no tenía idea de cómo actuar con Alexa.
El mismo día que Alexa despertó el doctor preocupado se acercó a Erza para explicarle las cicatrices que tenía la joven. Al parecer hace años había recibido un gran impacto que dejó una marca en medio de la espalda, pero por más que le preguntaron Alexa tampoco quiso hablar de ello.
Erza pasó los días ayudando a los aldeanos mientras Alexa se recuperaba. El doctor y su hija se habían comprometido a ayudar a Alexa para que pudiera tener un mejor manejo de su cuerpo, aún sufría calambres al moverse, lo que le complicaría al viajar, pero Erza no pensaba dejarla atrás.
Alexa se sometió a una terapia agresiva para que su cuerpo mejorara pronto, resistiendo el dolor lo mejor posible, aunque tenía claro que para ser la misma de antes necesitaría entrenarse por un tiempo.
Lo primero que Alexa logró, fue recuperar el control de la parte superior de su cuerpo. Al anochecer del segundo día podía levantarse de la cama por sí misma, aunque seguía sintiendo su cuerpo entumecido y rigidez en sus articulaciones. A mediodía del tercer día por fin salió de la casa, podía caminar sin problemas, aunque de vez en cuando necesitaba detenerse. Podía viajar, pero un combate le era imposible.
Erza y Alexa se reunieron en la entrada de la mina, los hombres habían parado de trabajar a petición del alcalde para darles algo de privacidad a las chicas, el doctor creía que si volvía a la mina quizá recuperaría parte de su memoria. Erza lucía su ropa de siempre, mientras que Alexa había tomado prestada ropa de la hija del doctor, una falda larga, camisa y zapatos bajos. La primera vez que se pararon frente a frente, Erza notó que Alexa era unos centímetros más alta que ella, lo que la molesto un poco, no le gustaba tener que mirar a la chica hacia arriba.
- ¿Cómo estás? - preguntó Erza rompiendo el silencio que se había formado mientras se dirigían a la cámara
- Todavía me siento un poco entumecida, pero dentro de poco estaré bien
- ¿Me dirás por qué mentiste?
- Nunca me ha gustado que la gente que no conozco sepa de mí - dijo Alexa encogiéndose de hombros - soy una “loba solitaria”, o eso decía un amigo
- ¿Cómo se llama tu gremio?
- ¿Qué gremio? Creo haberte dicho soy independiente
- Creí que el lobo en tu armadura era una marca de gremio - murmuró Erza
- Esa marca es… algo complicado - rió con amargura, antes de detenerse cuando ya estaba en el interior de la cámara - ¿aquí me encontraste?
- Sí - Erza caminó al centro del lugar seguida de cerca por Alexa - estaban aquí - señaló - había una gran piedra gigante y entrabas en el interior ¿sabes cómo llegaste allí?
- No, lo último que recuerdo es que estaba en una misión
- ¿Misión? - esa palabra despertó el interés de Erza, Alexa solo pudo suspirar frente a su desliz
- Tenía que acabar con un… grupo - comenzó a explicar mientras se sentaba en una piedra jugaba con el dije del collar que llevaba, collar que Erza recién notó, pero al cual no le dio importancia - debía impedir que cierto mago se uniera a un gremio oscuro del Imperio Álvarez
- Nuevamente nombras al Imperio Álvarez - dijo Erza - de vez en cuando incluso olvido que existe ¿Cómo puedes tenerlo tan presente?
- Porque en el lugar del que vengo… ignorar al Imperio podía costarte la vida - susurró Alexa - ¿Cómo es el maestro de tu gremio?
- ¿En qué sentido?
- ¿Es alguien de confianza?
- Sí - respondió Erza con seguridad
- ¿Podrías llevarme frente con él? - el tono de Alexa era esperanzado, como si quizá hubiera encontrado la solución a sus problemas
- No
PDV Erza
Apenas le dije “no” noté la molestia de Alexa, pero no podía seguir así, no podía arriesgarme o a mi gremio, tenía que aprender de ella antes de entregarle mi confianza.
- ¿Por qué no? - preguntó mientras me miraba con el ceño fruncido
- Primero quiero respuestas, una vez que las tenga te llevaré con el maestro - nos quedamos mirando en silencio, era como una lucha de voluntades, ninguna quería rendirse y dar su brazo a torcer, yo no quiero rendirme hasta saber lo que necesito
- ¿Qué quieres sabes? - dijo resignada Alexa
- ¿Alexa Ross es tu verdadero nombre?
- Sí
- ¿Maga independiente?
- ¿Seguirás diciendo lo que te dije antes? - dijo con una ceja levantada, mostrando su confusión
- Solo quiero confirmarlo
- Ok, sí - dijo mientras se acomodaba en su silla improvisada - y antes de que preguntes no tengo conexión con ningún gremio
- ¿Qué magia utilizas? - cuando pregunté eso su ceño se frunció, como si no confiara lo suficiente en mí para responder a esa pregunta - mi magia principal es Re-Equipar, específicamente el caballero - nuevamente el ceño de Alexa se frunció, pero esta vez era por la confusión - Re-Equipar me permite cambiar de armas, armaduras o ropa a mi antojo
- Entendí la parte del Re-Equipar, no había escuchado lo del caballero
- Es porque la utilizo en batalla, cambio armaduras en cosa de segundos - dije orgullosa - también ocupo espadas mágicas y telequinesis como apoyo a mis armaduras
- Muy práctico, da muchas posibilidades - sonrió mirando al techo apoyando su mentón en el puño mientras pensaba
- Es muy conveniente para los combates
- Se parece en algo a la mía - la miré confundida, a lo que ella se rió - el nombre original de mi magia es Wu Xing
- ¿Wu qué?
- La traducción puede ser "teoría de los cinco elementos" - sonrió mostrándome su mano izquierda con los dedos estirados - esta magia se subdivide en cinco - mientras hablaba una luz apareció en la punta de cada uno de sus dedos, todas de diferentes colores: el meñique negro, el anular verde, el dedo medio rojo, el índice amarillo y el pulgar blanco - negro para agua, verde para madera, rojo para fuego, amarillo para tierra y blanco es metal, la teoría dice que estos son los elementos que forman el mundo a través de sus relaciones, mi magia me permite controlarlos
- ¿Utilizas cinco tipos de magia? - no sé si estar sorprendida, emocionada o asustada, con esas magias puede enfrentarse a todo tipo de situaciones
- Utilizo una: la Magia Elemental, que se subdivide en cinco
- Debes ser muy fuerte - admito que me emociona un poco su magia, un enfrentamiento contra un rival poderoso es emocionante, además de ser un gran entrenamiento.
- Creo que lo soy, mientras tenga presente los ciclos
- ¿Ciclos?
- Si - comenzó a dibujar ayudándose con la tierra del suelo - existen dos: el ciclo de generación y el ciclo de dominación - creo que a Alexa explicar le gusta, cada vez que habla se nota la emoción en su voz - también se conocen como Cheng y Ko, respectivamente… básicamente puedo utilizar cualquiera de los elementos, mientras obedezca las leyes, puede ser una magia poderosa, pero tiene muchas limitaciones
- ¿Son como los Tabú mágicos?
- No tan así… solo son normas que debo recordar para que mi magia funcione, si los desobedezco a lo más quedaré en vergüenza porque mi magia falle
- ¿Cuáles son? - ni siquiera pensé en esconder la curiosidad en mi voz
- Son leyes que rigen los Ciclos, pero no te las explicaré ya que es el secreto de mi magia, sin embargo, si eres una chica lista podrás deducirlo con facilidad
- ¿Cómo es tu magia para el combate?
- Me permite adaptarme a múltiples escenarios
- En ese sentido se parece a mí magia del Caballero - murmuré - ¿Tienes otra magia?
- Magia de dualidad, pero es principalmente de apoyo
- Tampoco he escuchado de ella
- De ella no pienso decirte nada - me guiñó mientras sonreía
- ¿Cómo no escuche algo de ti antes? - dije mirándola directo a los ojos - una maga como tú destacaría, con magia como esa ganarías fama
- Soy famosa - dijo sonriendo - o lo era… no quiero que pienses mal, pero creo… que estuve encerrada en esa gema más tiempo del que piensas
- ¿Cuánto tiempo?
- ¿Cuál es tu edad? - ¿está intentando desviar el tema?
- Diecinueve
- Soy mayor - debe estar bromeando - tengo veintiuno
- Pareces menor
- No eres la primera en mencionarlo - se burló - pero nos estamos desviando ¿en qué año naciste Erza?
- X765 - apenas el numero salió de mis labios sus ojos se abrieron de sorpresa, estoy comenzando a asustarme un poco
- Más de cien años - sentí mi mandíbula aflojarse cuando escuche su susurro, no puede ser verdad - necesitamos llegar rápido donde tu maestro.
PDV Narrador
Alexa y Erza no perdieron tiempo para dirigirse a Fairy Tail. Después de la conversación de la mina Alexa había permanecido en silencio sumida en sus pensamientos, Erza no actuaba muy diferente a ella, no sabía cómo reaccionar a lo que escuchó, pero creía que era mejor que su maestro escuchara la conversación, se notaba que era un tema doloroso para Alexa, entre menos veces tuviera que repetir la historia mejor.
Salieron de la aldea después de la fiesta de despedida que les dieron. Fiesta en que las dos chicas fingieron que nada había pasado.
Un minero se había ofrecido a llevarlas a una ciudad cercana donde había servicios de vehículos mágicos que viajaban hasta Crocus, la capital del reino de Fiore. Desde allí debían tomar un tren a Magnolia.
Entre los trenes y caminando Erza había tardado tres días en a la aldea, como utilizando un vehículo a Crocus y el tren ahorraría unas horas.
Cuando partieron Erza llevaba con ella un gran carro lleno de equipaje, donde también cargaron la armadura de Alexa y el cuerno del monstruo que Erza derrotó, las aldeanas lo habían decorado con gemas de la mina y se lo habían obsequiado como muestra de agradecimiento.
PDV Erza
Como partimos de la aldea, antes del amanecer, a media tarde ya estábamos en la ciudad Crocus, con la ayuda que recibimos habíamos ahorrado mucho tiempo, pero también sirvió para que Alexa no se cansara innecesariamente aún está demasiado débil, aunque no quiere demostrarlo.
- Recuerdo esta ciudad - la expresión de Alexa demostraba nostalgia, aunque le creí cuando dijo que paso cientos de años en la mina, aún resulta difícil - aunque era más pequeña
- ¿Mucho más pequeña?
- Algo… ¿Quién gobierna?
- El rey Thoma E. Fiore y su hija, la princesa Hisui - expliqué mientras caminábamos por la ciudad, quizá sea bueno pasar el resto del día en la ciudad y mañana regresar a Magnolia
- Definitivamente no es el nombre del rey que recuerdo.
Nos registramos en un hotel, en la misma habitación ya que una parte de mi teme que Alexa pueda intentar escapar. Pero también estoy preocupada por ella.
Pasamos la tarde caminando por la ciudad, las preguntas que Alexa me hacía, las cosas que desconocía y lo sorprendida que se mostraba, solo aportaba a que creyera cada vez más su historia.
- No puedo creer que este lugar aún exista - dijo sonriendo mientras caminaba hasta un gran almacén, yo la seguí mirándola con curiosidad.
- Bienvenidas a almacenes Padlock ¿en qué puedo ayudarlas? - nos preguntó una joven que estaba en el mostrador
- ¿Quién está a cargo de este lugar? - preguntó como si nada Alexa, consiguiendo que la mujer se colocara nerviosa
- El presidente está ocupado, se encarga de administrar, a nosotros nos corresponde tratar a los clientes
- Entiendo, pero a mí solo puede ayudarme alguien que conozca todo de este almacén
La mujer nos miró por unos minutos antes de disculparse y alejarse en dirección a unas oficinas.
- ¿Qué hacemos aquí?
- Un poco de paciencia - me sonrió mientras miraba en dirección en la que la mujer se había ido
- ¿Conoces este lugar?
- Creo, no puedo estar segura - se volteó a mirarme y nuevamente vi la falta de brillo en sus ojos - muchas cosas han cambiado.
- Buenas tardes damas - nos giramos para encontrarnos con un hombre detrás mostrador, era joven, de unos treinta años de edad, cabello castaño y piel con un ligero bronceado - Mi nombre es Will Padlock ¿en qué puedo ayudarles Srtas.?
- ¿Sus bodegas funcionan hace mucho? - tanto el encargado como yo quedamos mirando a Alexa, quien ni se inmutó esperando una respuesta
- Fueron creadas por mis tatarabuelo, soy la quinta generación de mi familia en este trabajo
- Parece una gran empresa - lo felicité intentando unirme a la conversación
- Tenemos muchos cliente de todos los niveles económicos, algunos también desde hace generaciones
- ¿Cuánto tiempo mantienen las cosas de sus clientes? - nuevamente los dos la miramos confundidos
- Depende del servicio que contraten
- Contrato ilimitado, se pagaba cada vez que viniera a revisar o depositar algo en la bodega - explicó Alexa mientras se movía un poco intranquila
- Los contratos de esas bodegas no tienen tiempo de vencimiento ¿Dónde está ubicada y qué cerradura tiene?
- Está en el sótano, la número 7 y se abre por medio de un sello mágico, pero hace muchos años que nadie ha venido, mi familia ha pasado generaciones fuera de Fiore
- Es común que eso suceda - dijo sonriendo el encargado mientras revisaba sus papeles - las bodegas del sótano y sub-sótano son familiares, algunas pertenecen a la misma familia desde que este lugar se creó - siguió revisando las hojas hasta que se detuvo sonriendo - ¡Aquí esta! Según los registros el encargado de ese tiempo dio orden de mantener su bóveda y que nadie tocara hasta que algún familiar viniera, pero ¿segura que quiere abrirla? Si lo hace tendrá que pagar la mantención y lleva años acumulándose
- ¿Por qué pidieron que cuidaran de mi bodega? - preguntó confundida Alexa
- Esa respuesta no la tengo, lo siento, los registros no lo explican
- Está bien - se limitó a sonreír, pero creo que quiere saber quién ordenó guardar sus cosas - además creo poder hacerme cargo de la mantención, si guarda las cosas que creo, no tendré problemas, pero por ahora tengo esto como garantía
De uno de sus bolsillos sacó una pequeña bolsa que dejó sobre el escritorio, para después abrirla dejando caer su contenido delante del encargado, quien miró sorprendido las gemas que parecían haber sido sacadas de la tierra hace poco, algunas incluso todavía tenían restos de tierra y piedras en ellas.
- Son diamantes, esmeraldas, zafiros y rubíes, entre otras… no están tallados, pero una vez que lo estén su valor será alto ¿es suficiente por ahora?
- Espéreme un momento
El hombre se alejó mientras Alexa guardaba las piedras.
- ¿De dónde sacaste eso?
- De la mina
- ¿Cuándo? - cuando fuimos no vi que hiciera nada
- No puedo dormir - se encogió de hombros - quizá ya dormí todo lo que necesitaba en esta vida - dijo con sarcasmo - salí las últimas dos noches y excavé, no es robo porque trabaje con mis manos
- Pero la aldea tiene los derechos sobre la mina
- Aún no - negó - tienen que comprar los derechos, por eso nos pidieron que no habláramos de ella, para que nadie se las robara - explicó mientras cerraba la bolsa
- Acompáñenme por favor - como estaba concentrada en Alexa no noté que Will regresó, es un hombre bastante sigiloso
PDV Alexa
- ¿Esta es su bóveda? - preguntó Will mientras se detenía frente a una puerta, yo en silencio me acerqué notando primero las bisagras oxidadas, había sido limpiada, pero se notaba que no fue abierta en años, desde la última vez que estuve aquí.
- Sí
- ¿Tiene el sello para abrirla?
- Sí - coloqué mi mano en la puerta liberando un poco de magia, solo debía dejar mi huella mágica en la puerta y listo. La puerta produjo un pequeño “quick” antes de comenzar a abrirse lentamente acompañadas por el chirriar de las bisagras - denme un momento a solas
Cuando entramos a la bóveda todo estaba igual que la última vez, cuando tenía quince la contraté ya que no podía seguir viajando con el dinero y mis pertenencias, sobre todo en las misiones “complicadas”.
Mis libros, ropa, trofeos… nada había cambiado, al igual que a mí el tiempo no había pasado por ellos, pero… claramente nuestro alrededor no siguió esa regla.
- ¿Estás bien? - no pude evitar reír al escuchar la voz de Erza, a pesar de que pedí tiempo no tardó en seguirme, no sé si es impaciente o se preocupa por mí
- Han pasado años… pero en mi cabeza parece que solo hace unas semanas estuve aquí - sentí la amargura en mi voz mientras me acercaba a un pequeño escritorio, además de los objetos yo había instalado una cama y escritorio, hace años, cuando pasaba por la ciudad, el dueño me permitía quedarme aquí, nunca vi la necesidad de comprarme una casa, nunca estaría en ella más de un par de días y podían entrar a robar sin nadie que la defendiera - recuerdo que el antiguo dueño me dejaba dormir aquí, eran simples bodegas, no un gran banco como ahora, dormía y pasaba horas aquí dentro, él me prestaba su baño y comía en una cafetería cercana, esto es lo más cercano a una casa que tuve después de cumplir quince
- ¿Y tu familia? - Erza se sentó en una silla sin dejar de mirarme, no sé si debería responder, pero no conozco nada en este lugar, es un mundo completamente nuevo, una nueva vida, mi segunda oportunidad… necesito alguien que sea mi guía en este mundo
- Cuando tenía seis, nuestro pueblo quedó en medio de una batalla entre gremios oscuros - a pesar del nudo en mi garganta me obligué a continuar, no siento tristeza por mi historia, todo me llevó a ser quien soy. No tengo claros recuerdos de mis padres, así que no tengo nada que extrañar, pero la frustración, no haber tenido la fuerza de hacer algo… era una niña, pero una parte de mi cabeza se… simplemente creo que es la culpa del sobreviviente - era una pelea por el territorio, recuerdo que fueron días y días de peleas y muerte… mis padres pertenecían a un pequeño gremio que intento defender nuestra ciudad, pero no pudieron hacer nada, comparado a sus enemigos parecían aprendices - tomé una pausa para ordenar mis pensamientos, creo que Erza hacia la mismo, ya que me miraba en silencio mientras parecía meditar - después de eso fui encontrada por un mago extranjero, él se hizo cargo de mí y me enseñó su magia, pero también murió, esa persona es la única que alguna vez consideré familia.
- Lo siento - creo que se siente culpable… alguien tan bueno, existen pocas personas así en el mundo, o puede que en el mundo en el que yo me movía ellos no podían sobrevivir
- Sé que quieres saber más, pero quiero tener a tu maestro con nosotros, no quiero repetir la misma historia, no me gusta sentirme nostálgica
- Está bien - me dio una pequeña sonrisa mientras se levantaba - por ahora
- Lo tengo claro - reí mientras ella asentía con orgullo - ¿Cómo es Magnolia? Según recuerdo es una ciudad comercial, de tamaño promedio, pero que prospera con rapidez
- Es muy tranquila, Fairy Tail es el gremio más importante, puedes encontrar todos los suministros necesarios para sobrevivir - vi como asentía mientras hablaba, era tan seria y formal, parecía un soldado de la guardia real - también venden la mejor tarta de fresa - de la nada sus ojos brillaron y su expresión se volvió infantil, creo que encontré su debilidad - vivo allí desde mi infancia, pero no quiero hablar de ello.
- Es algo injusto - intente sacarle más información, pero la tristeza en sus ojos me dijo no insistir - no tienes que decirme nada
- Pero es verdad, tú me has contado de tu pasado
- Desde mi punto de vista mi vida te pertenece Erza - cuando dije aquellas palabras noté la sorpresa en su expresión, luego un pequeño sonrojo apareció en sus mejillas, creo que alguien es un tanto pervertido, después movió la cabeza como si quisiera despejar sus ideas y me quedó mirando
- ¿A qué te refieres? Tu vida no puede pertenecerle a nadie, eres una persona libre
- De no ser por ti continuaría en aquella mina o algo peor - nuevamente la impotencia se apoderó de mí, no sé cómo llegué allí, pero prefiero eso a haber muerto en medio de las montañas - te serviré hasta que pague mi deuda, aunque no creo que eso suceda pronto
- Pero… - Erza intentó discutir conmigo, pero soy inflexible en eso, mi maestro salvó mi vida y fui leal a él hasta que me dejó, algo que recuerdo de mis padres es que un mago debe pagar siempre sus deudas.
- ¿Will? - apenas lo llamé el hombre ingresó, tenía unos papeles en sus manos que no recuerdo haber visto antes, quizá aprovechó el tiempo para ir por ellos, mis sentidos aún parecen adormecidos al igual que mi magia, tendré que comenzar un entrenamiento lo antes posible - ¿Qué debo hacer para llevarme mis cosas y terminar el contrato?
- Pagar la mantención, pero es demasiado dinero
- ¿Cuánto? - en silencio se acercó y me entregó una hoja en la que estaban los gastos detallados, al parecer el costo se fue reajustando con los años, pero la moneda sigue siendo la misma - sí, es mucho dinero, muchos ceros - caminé para sacar un cofre que estaba debajo de la cama, el fruto de mínimo cinco años de trabajo - ¿quiere efectivo? - el asintió mirando curioso el cofre, pero al notar mi mirada desvió la suya. Giré el cofre para que no pudiera ver su interior antes de abrirlo y saqué unos fajos de jewels que sumaran la cantidad que me pedía, miré por sobre mi hombro a Erza que tenía la mandíbula caída, riéndome de su expresión - aquí esta lo que me pidió, pero necesito que me ayude a conseguir una carreta para llegar mis cosas ¿podría ayudarme?
- Enviaré un trabajador a comprarle una, enseguida regreso - salió corriendo aferrándose del dinero como si de ellos dependiera su vida, por lo menos eso no ha cambiado, la ambición por el dinero continúa
- ¿E-eres mi-millonaria?
- Como pasé mi vida viajando y no tenía que mantener una casa simplemente fui guardando el dinero que gané, es una suerte que sigan utilizando jewels, hubiera sido una molestia tener que cambiarlos, además tendría que dar muchas explicaciones- mientras hablaba cerré el cofre, antes de mirar a mi alrededor haciendo una lista de las cosas que tenía y que llevaría conmigo - ¿Crees qué tendremos muchos problemas viajando con dos carretas?
- ¿Por qué te llevarás todo? Podrías regresar más tarde
- Decidí que viviré en Magnolia, si quiero pagar mi deuda contigo tengo que estar cerca de ti ¿cierto? - mostré mi mejor sonrisa mientras ella me miraba con el ceño fruncido, pero lo ignoré antes de seguir hablando - he perdido mucho tiempo, entre más rápido me instale, antes podré comenzar a recuperar mi vida, o creo que debo decir comenzar una nueva vida
PDV Erza
Anocheció mientras guardábamos y subíamos las pertenencias de Alexa en la carreta, tenía muchos cofres y bolsas mágicas, que redujeron el contenido de toda una habitación a unos cuantos bultos.
- ¿Eso es todo?- pregunté mirando a nuestro alrededor, en la bodega solo quedaban unas caja vacías, trozos de tela, hojas y la cama, que parecía bastante maltratada
- Dejaré la cama - dijo - el hechizo protector impidió que mis cosas se dañaran, menos mal lo hice - dijo colocándose en posición para comenzar a mover la carreta, pero suspiré antes de tomar su lugar
- Aún no estás en condiciones utilizar tanta fuerza - dije mientras comenzaba a moverme - yo llevaré esto
- Con esto solo aumentará mi deuda
- No me debes nada - dije mientras rodaba mis ojos
- Te debo mi vida Erza, aunque no lo quieras