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You Broken My Heart por Tsuki no Megami

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Notas del capitulo:

Espero que lo disfruten como yo al escribirlo. 

Buenos Amigos.


Al otro día de su encuentro amoroso, tanto Kagami como Kuroko regresaron a sus actividades normales, pidieron a los apuntes a sus amigos de clases aunque siendo el último periodo antes de concluir la licenciatura no había mucho que transcribir, pero si demasiado que explicar sobre todo a un par de personas.


— Tetsucchi tuvo un fin de semana muy entretenido, si hasta se ven las huellas del delito— mofandose de su compañero y amigo, Kise a ligero un poco el ambiente de preocupación por los exámenes finales. — No te preocupes por eso, saldremos bien de esta ya lo verán, nos graduaremos y tendremos a nuestros bebés.


— Habla por ti, yo debo entregar todo dentro de dos semanas, recibir mi diploma y empezar a practicar en un laboratorio hasta que mini Shin-chan decida salir— la alegría que caracterizaba al halcón, ahora era pura preocupación y nerviosismo. — De alguna forma me siento aliviado ya que Shin-chan estará conmigo en todo momento.


— Shintaro-Kun siempre ha sido bueno en la escuela, no me sorprende que terminará primero que nosotros— sorbiendo lo último de su batido, reflexionó un poco antes de continuar hablando. — Quién si me dio miedo fue Daiki, el que ingresara a la academia de policía, hasta tiene buenas referencias de sus superiores.


— Tetsucchi no te burles, el pobre no duerme mucho ya que esta esforzándose en las prácticas y entrenamientos además de cuidarme, imagínate como esta, si se le olvidó su apuesta con Kagamicchi.



— Ryo-kun a Taiga también se le borro ese detalle, ahora está enfocado en las prácticas y déjame decirte que las niñas de la escuela en la que fue a dar una clases de muestra, lo tienen en un pedestal.



— Si me di cuenta, hasta lo vienen a buscar y le gritan Kagami-sensei, desde lejos se puede ver que solo están de ofrecidas, pero no te preocupes Shin-chan se encarga de que no pierda el piso.


En lo profundo de su ser Kuroko sentía alivio por aplicar a la misma universidad de ciencias que sus tres amigos y novio, a fin de cuentas sus objetivos requerían de asistir a esas facultades, el tono de mensaje en sus respectivos teléfonos terminó por cortar la animada conversación.


— De casualidad recibieron la invitación para ir mañana al parque de diversiones— los otros dos asintieron con la cabeza, dejando a Takao pensativo.


— Debemos estar tranquilos, Seijicchi lo pidió por favor supongo que es buena señal ¿ O no?


— Tal vez sea para convivir un poco y no pensar tanto en los trabajos y tareas de las próximas semanas— quitándose toda mala idea, termino su bebida tirando el recipiente a la basura esperando que sus amigos terminaran de comer para poder irse a su casa. — De cualquier forma averiguaremos porque Seiji-kun nos reunirá, solo hay que esperar a mañana.


— Tienes razón Tetsucchi— llegando a la parada del autobús se despidió de ellos con un hasta mañana y una brillante sonrisa.


— Ryo-chan debería pensar en mudarse cerca de nosotros, la estación de policía está cerca, el hospital de los Midorima también además el puede practicar en ese nuevo centro comercial que esperan construir— caminando tranquilamente a sus hogares, ambos se quedaron de piedra al ver que cierto moreno salía de una casa acompañado por una mujer de figura exuberante, justo como a él le gustan, los vieron despedirse de beso, ocultándose para no ser vistos.


— Ese maldito negro como se atreve a engañarlo, me da tanta tristeza y rabia, pero me va a escuchar ya lo verás, le daré un buen escarmiento— el aura oscura que le rodeaba, amenazaba con derramar sangre.


Sus respectivas parejas sabiendo su rutina, les alcanzaron pero al notar lo denso del ambiente y las lágrimas de uno de ellos, decieron ir a casa del alto pelirrojo ya que esta mas cerca, que la del practicante de medicina. Por su propia salud Shintaro decidió mudarse con su halcón, como única condición para el cambio fue que estuviesen cerca del hospital. Dentro del hogar Kagami pidió una explicación de su actual estado de ánimo.


— Tetsu conejito, dime porque tienes esas ganas de matar a alguien, que paso para que ambos estén así— colocando sus manos en los hombros del peliceleste, trataba de hacerle reaccionar.


— Kazunari, cuéntame y deja de llorar, no le hará bien a nuestros hijos, recuerda lo que mamá dijo sobre el estrés.

Deteniendo su llanto lo miro con profunda tristeza y desaprobación. — Shin-chan arruinaste la sorpresa, ahora ya saben que no tendremos un bebé— limpiando sus lágrimas puso una tierna sonrisa a sus amigos. — En realidad aquí el boca floja y yo tendremos tres hijos, por ello parezco pelota de playa.


— Kazu-kun muchas felicidades, es asombroso aunque viniendo de Shintaro-kun no me sorprende el siempre va por los triples— rodeando con sus brazos al halcón, se relajo lo suficiente para contar lo sucedido minutos antes.


—En primer lugar muchas felicidades Takao y Midorima por sus bebés, entiendo que quieran guardarlo en secreto, nosotros no diremos nada y en segundo lugar Ahomine es un... un... no encuentro una palabra adecuada para describirlo— Kagami se revolvía la cabeza tratando de expresar sus emociones.


— Bastardo se queda corto, yo quiero a Kise como amigo y aunque tuvimos un pasado esperaba que Ahomine fuese mejor que yo a su lado, debo hablar con él, tal vez ya lo sepa y no encuentra una manera para desquitarse.


— Shin-chan tiene razón pero hay que pensar también en su bebé, quizá por eso no le ha dicho nada a ese infeliz y pensar que mañana lo veremos, abrazando a Ryo-chan como si nada, creo que me voy a enfermar.


Una vez que charlaron y se calmaron, el halcón junto a su adorado Shin-chan regresaron a su dulce morada, esperarían hasta después de la reunión con Akashi para hablar con Aomine sobre sus actividades sospechosas. — Tu si me quieres o solo estarás conmigo por los bebés.


— No seas tonto Bakao, estoy contigo por que quiero, es increíble que a estas alturas sigas preguntando lo mismo— metiéndose entre las cobijas, busco entrelazar sus manos con las de su pareja, juntando los labios en un tierno beso. — Dicen que es bueno para los niños en gestación que sus padres se muestren afecto.


—¡¡Shin-chan!! Que forma tan sutil de proponerlo, pero si quiero y no me importa si me dejas sin caminar— tirandole del cuello se preparo para recibir amor esa noche.


Por la mañana acudieron a clases como de costumbre, al atardecer se fueron reuniendo en la feria, esperando el motivo de esa asamblea. — Hola Seiji-kun, puedo saber a que se debe la urgencia por vernos a todos.


— Buenas tardes chicos, Tetsu en realidad fue él quien me pidió reunirlos con la obvia excepción de Atsushi y Himuro-san.


Levantándose del asiento, un joven de cabello y ojos oscuros, caminaba hasta ellos con su aura amenazante, el primero en reacciónar fue su rubio amigo saludando efusivamente a la persona frente a él. — Nijimuracchi-sempai, tantos años sin vernos, me da gusto que este aquí.


— Tanto gusto te da, que no respondes cuando te hablo y me doy cuenta que ya no haces ejercicio, mira la panza que traes— estaba por darle un golpe en el estómago, pero gracias a sus reflejos Aomine logró alejarlo, colocándose entre su ex capitán y Ryota.


—Nijimura idiota, no está gordo, es nuestro hijo que lo hace comer de más— poniendo una mano sobre el abultado vientre de su pareja dejando ver que hablaba en serio.


—¡Oh! Ese era tu presentimiento, vas a ser abuelo— acercándose con una bolsa llena de frituras, tomo parte de la conversación, el rival en varias ocasiones de Kise, Haizaki Shougo. — Ya decía yo que no debía faltar a esta junta de suma importancia.


— Cierra el pico Shougo, te obligue a venir y dame eso— arrebatandole la bolsa, se la entrego a Kise quien esperaba el mejor momento para robarle una probadita, agradeció el amable gesto con la mirada, compartiendo parte de la botana con un alegre Kazunari. — Tu puedes hacer fila y comprarte otros, antes que me reproches.


Sin más que hacer, se quedo callado esperando que terminaran las presentaciones, al enterarse que su siempre recto ex compañero de equipo también iba a ser padre, Haizaki lloró de la risa revolcándose en el suelo. — La zanahoria con patas tendrá un mini zanahorio, están gracioso— las carcajadas que lanzaba provocaron en él mayor un tic nervioso.


— No le hagan caso, descubrió que también puede dar a luz y eso perturbó un poco su sentido del humor— trato de disculparse pero solo consiguió que los presentes se interesarán más por el tipo rodando en el piso. — La noticia en sí es que mi padre ya está mejor de salud, en casa tiene una enfermera que lo cuida todo el día, por ello hemos decidido regresar a vivir en Tokio.


Ese anuncio hizo feliz a la generación milagrosa, el resto solo se alegro por sus parejas, sin embargo un fantasmita no se encontraba del todo contento, por ello fue separado del resto, pues su "padre arcoíris" y su amigo pelirrojo querían conocer el motivo de su disgusto. Cuando un muy enojado Kuroko les informó lo acontecido el día anterior, los tres planeaban una venganza para el negro ese.


— Estoy bastante seguro que ese aire de matar es porque Tetsuya les dijo lo de Ahomine, pero creo que el tiene derecho a explicar o bien defenderse de las acusaciones— ganándose una mirada de desaprobación, terminó por apoyar la idea de desollar al antes mencionado.


Mientras convivían y se divertían en los juegos mecánicos, concursos, eventos musicales y demás actividades, trataban de no pensar en otra cosa que no fuese disfrutar de la compañía que les rodeaba. A las diez en punto cada uno de ellos se despidió para irse con su respectiva pareja a descansar, algunos se verían de nuevo en la facultad otros deberán esperar al fin de semana para encontrarse de nuevo.


Los últimos días de la semana fueron ocupados para revisar los trabajos y dar a conocer el proyecto final de cada materia, ese viernes antes de regresar a sus hogares, Ryota pidió que lo acompañaran por un helado a lo que sus dos amigos accedieron, compraron un mantecado cada uno y se sentaron en las bancas cerca de la plaza, ahí el rubio confesó que su relación con el moreno estaba por terminar ya que desde varios días atrás, llegaba tarde con la camisa apestando a perfume de mujer y manchas de lápiz labial, pequeñas lágrimas caían por su rostro, al verlo tan decaído Kuroko le ofreció su casa para que descansará un poco antes de volver al departamento que compartía con Aomine y poner fin a su romance.


Sabían que no debían intervenir, pero tratándose de ellos y habiendo un niño de por medio, Kagami, Midorima, Akashi y Nijimura citaron a Daiki en los bolos el sábado en la tarde, ahí le harían una pequeña observación con respecto a la obvia ruptura. Dentro del lugar ocuparon una mesa pidieron algo de beber antes que empezarán a conversar.


— Tengo la sospecha que me pidieron venir por algo mas que el juego cierto— las miradas de sus compañeros le confirmaron todo, dos de ellos ardían en llamas igual que un volcán en erupción. — No tengo idea de que hice para merecer esa mirada, sin embargo viniendo de Midorima tiene que ver con Kise o me equivoco.


— Ahomine tienes razón, seré directo contigo— Kagami no era delicado al tratar temas del corazón y menos si es alguien cercano a él, con visible molestia expreso lo que las personas reunidas querían decir. — Sabemos que has estado engañando a Ryota con varias mujeres y necesitamos...


No consiguió terminar la oración ya que el peliazul le soltó un golpe en la mejilla sentandolo del impacto. — Esa estupidez no la vuelvas a repetir nunca en tu miserable vida, me escuchaste, aunque sea exasperante, llorón, inquieto, mal cocinero y un tanto infantil yo jamas le haría algo así.


Nijimura Shuzo se coloco en medio de ambos evitando que una pelea se llevase acabo, afortunadamente el local estaba semi vacio así que no llamaron tanto la atención. — Daiki, Taiga expresó lo que Kise les dijo a Tetsu-chan y Takao-kun, además ellos te vieron salir de una casa acompañado de una mujer, conociéndote esperabas que lo vieran con buenos ojos— quien hablaba tratando de calmar los ánimos, era el emperador buscando una respuesta convincente de su amigo.

— Hablaré con Ryota más tarde por ahora ustedes quiten la mirada asesina, yo amo al rubio idiota lo que vieron fue a mi inspeccionado la casa para comprarla, ese iba a ser un regalo por graduarse, vi muchos otros departamentos y residencias pero estaban retirados de los centros médicos además de saber que él preferiría estar cerca de sus amigos salvo por Furi los demás están a unas cuantas casas.


— Esperas que crea que las vendedoras te abrazan y dejan su labial en tu ropa sin querer, estoy seguro que a Kise esa explicación le será poco creíble, siendo razonables y así como conocemos tus gustos por las mujeres dotadas, estando en su lugar te mandaría muy lejos de aquí.


— Shintaro tiene razón, desde nuestros días en Teiko tu mostraste y dejaste muy claro que a ti lo que te atrae son las chicas con pechos grandes, Momoi fue la excepción por que tu la ves y la quieres como hermana, si no deseas perder a Kise busca una manera de explicar mejor esa situación y no llegues con flores o chocolates eso te hará parecer más culpable— lo voz junto a su expresión demostraban la diferencia de experiencia entre Nijimura y el resto de los milagros.


Una vez aclarado el asunto, se dedicaron a jugar conversando de otros temas, la llamada que recibió el emperador dio paso a la retirada del lugar, separándose para regresar a lado de la persona que aman. Aomine Daiki ingresaba a su hogar buscando al rubio que le robo la razón, encontrandolo en la cocina intentando hacer un panque de fresas, le pidió que lo acompañará a la sala un momento pues tenía algo importante que decirle.


Kise se dejó guiar hasta el sillón, su corazón ya estaba agrietado solo faltaba un pequeño roce para que se rompa en miles de pedazos y sabía que ese golpe llegaría en cualquier momento, solo esperaba tener la suficiente fuerza para salir adelante por el bien de su bebé.

Notas finales:

Gracias por leer 


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