Zoro.
-Habla del endemoniado juego de una maldita vez- Mi voz está temblando, maldición, no pensé que estos tipos llegarían a causarnos problemas, menos ahora, menos a él, estoy completamente aturdido pero ella no debe saberlo. Vivi cubrió su rostro con las manos para reír sonoramente pero con clase, siempre había sido así, sentía mi sangre hervir, necesitaba al cocinero y ahora.
-Bueno es algo relativamente simple, ya lo inicie hace… un par de horas- sus ojos se estrecharon, algo estaba tramando.
-Dilo de una jodida vez, antes de que pierda la cabeza- sentía todas las venas de mi cuerpo saltar por aquí y por allá mis músculos se tensaban, comenzaba a estar realmente molesto.
-Recupera a tu damisela- sonrió de oreja a oreja, maldición ¿de que hablaba?- Bueno ya sé que eres un poco lento, te lo explicare.
-----------------------------Flash Back -----------------------------------------
Sanji.
-Bueno señorita, aquí es el lugar.- Tome la mano de la delicada peliazul y le bese los dedos, por unos segundos me sentí mal, después de todo los únicos dedos que deseaba besar eran los de… alguien más, pero no deje que eso invadiera mi mente.
-Bueno, debo agradecerte como es debido, ¿Por qué no aceptas un café de mi parte?- La peliazul sonrió con una de las sonrisas más hermosas que había visto… de nuevo ese maldito marimo se cruza en mis pensamientos, maldición me he ablandado.
-¡Oh¡ No, no es necesario, yo debo volver a buscar a otra persona, suele perderse con facilidad.- Sé que estoy rechazando a una dama, sé que esto no va conmigo, pero por alguna razón necesito verlo.
-No puedo aceptar un no como respuesta.- Coloco sus brazos sobre la cintura resaltando sus curvas, sonrió coqueta y comenzó a caminar en círculos a mi alrededor.- Menos un no de un joven tan guapo- paso sus manos por mi pecho- Vamos, solo será un momento.
Dude un par de segundos, naturalmente caería redondo a los pies de la peliazul y mucho más después de semejante escena, pero solo podía pensar en Zoro, su imagen se paseaba una y otra vez por mi mente, necesitaba verlo… pero una hora no le haría daño a nadie.
Luces por todo el lugar.
Destellos y ruidos sonoros.
Sombras y voces desconocidas
…
No sé en donde estoy.
Todo estaba confuso en mi mente, estaba tranquilamente tomando el café que me ofrecía la bella peliazul y de un momento todo se había vuelto oscuro, recuerdo haber sentido mi cuerpo al caer antes de perder la conciencia, después de eso solo tengo una gran nube negra en mi pensamiento, había pensado que simplemente había trabajado mucho y había caído inconsciente al relajarme, pero no era así, la peliazul estaba delante de mi cuando comencé a abrir los ojos en un lugar completamente nuevo, era un pequeño cuarto de paredes grises, una pequeña puerta y ni una sola ventana, no tenía un buen presentimiento, mierda debí seguir mi instinto e ir a donde estaba Zoro.
-Vaya, vaya, ¿despertaste?- El tono de la peliazul ya no era el encantador que había escuchado antes.
-¿Dónde estoy?- Mi voz sonaba rasposa y a penas y lograba mantenerme despierto, algo andaba mal y no era exceso de trabajo.
-¿Quién es la persona que más quieres en el mundo?- Su sonrisa se ensancho, definitivamente no iba a responder mis preguntas.
-No te incumbe- No tenía tiempo para modales, y no planeaba decir su nombre, no podía permitir que le hicieran daño a él
-Ay que bonito, el pequeño cocinero está cuidando de su amado espadachín, que dulzura.- Sus gestos decían que era completamente sarcástica al decir eso, ella sabía quién era Zoro, por un momento tuve miedo.
Chasque la lengua impidiendo a mi labio inferior temblar por la preocupación de que le hiciera algo a Zoro, recordé el destello de miedo que vi en sus ojos al marcharme, el presentía algo y ambos lo ignoramos, mierda fui un imbécil.
-Bueno, ¿Sanji?, ese es tu nombre ¿no?, te explicare en que consiste el hecho de que te tenga aquí, realmente no es muy complicado y tu deberías entenderlo más rápido que Zoro, porque eventualmente él se va a enterar de este jueguito, es relativamente fácil:
1.- Estas drogado, creo que eso era evidente y es una droga un tanto… especial.
Con esta droga olvidaras aquello que más amas, cocinar, las “doncellas” como les llamas, tus amigos, tu familia… el amor de tu vida, lo olvidaras todo.
2.- Puedes recuperarlo todo o perderlo para siempre.
Debo darte algo para que te motives a jugar ¿no es así? Bueno, digamos que lo olvidas todo, pero no se borra de tu mente solo digamos que se va a esconder, entonces eventualmente puede regresar pero no es nada fácil, porque no solo olvidaras a todos ellos, los odiaras instintivamente, upss – hizo gesto de arrepentimiento para después soltar una carcajada- ellos son los únicos que te pueden devolver tu memoria, en especial… Él, tu amado espadachín, será la persona que más odies, no podrás verle sin sentir asco, ni hablarle sin sentir que odias cada instante más a esa persona… La cantidad de amor que les tengas en este momento será el odio que les tengas en unas horas.
3.- Yo voy a mandar a Zoro, así que le veras sufrir todo cuanto se me dé la gana.
Y esto en caso de que ganen mi juego y recuperes tu memoria, no lo podrás borrar.
Creo que son todos mis términos…
Ahora…
¿Quieres jugar?
Estaba pensando responderle a la peliazul cuando comencé a sentirme realmente mal, la droga estaba haciendo efecto, mierda, no lo quiero olvidar, lo acabo de ganar, acabo de poder estar con él, y con una mierda que si me lo van a quitar, solo pude dar un par de susurros antes de caer en ese oscuro mar de la inconciencia.
Zoro… sé que vendrás por mí.
Y mi conciencia desapareció.
Con ella mis recuerdos.
Con ella mi espíritu.
Con ella desapareciste tú… Zoro.
-------------- Fin del flash Back. ----------------------
Zoro.
-Y bueno, esas son mis condiciones- Vivi sonreía de la manera más horrible que había visto, tenía el estómago revuelto y un nudo en la garganta, no quería que él me olvidara, mucho menos que me odiara esto era demasiado… incluso para mí.
Cerré los ojos pesadamente, debía ayudarlo, lo traería de vuelta… definitivamente él volvería a mí.
-¿Qué es lo que tengo que hacer en tu juego?- Estaba completamente exhausto, debía seguir de pie un poco más.
Hizo una ligera señal a alguien que estaba atrás de ella, hicieron un par de movimientos y apareció ante mí, con su traje desordenado y la cabellera rubia con grandes tintes de sangre por cualquier lugar, tenía varios huesos rotos pero no le impedían estar de pie, parecía galante pese a estar tan lastimado, mi corazón dio tumbos de felicidad, él estaba bien, él estaba… ahí, quise correr y sostenerlo en mis brazos, decirle al oído cuanto me había preocupado, pero no podía y la luna estaba de testigo, yo no podía hacerlo…
-¿Por qué no te acercas un poco Zoro?- La voz de Vivi me saco de mis lamentaciones internas y abrí los ojos desmesuradamente, al parecer ella lo noto.- Recuerda que tienes que hacer lo que diga.- Sentencio.
Me acerque tímidamente, algo me decía que las cosas saldrían mal, cuando me acerque al cocinero lo abrace de la manera más delicada que pude, estaba por romper a llorar cuando…
-¿Qué mierda estás haciendo?- Su voz sonaba gélida, no era mi cocinero, esta persona era alguien más.
-De… de que estas hablando Sanji.- Sentí mi voz temblar y suplique a los cielos que solo yo lo notara, él seguía imperturbable.
-No te conozco, pero el simple hecho de verte me asquea, largo. – Su mirada fue inquebrantable, él realmente me odiaba… y nada podría hacer.
-Sanji, por favor, piensa un poco, recuerda nuestros momentos en el barco, las risas, las noches, las cenas, por favor, recuerda un poco.- Sabía lo lamentable que me veía implorando de esa manera, pero no podía hacer menos que intentar.
-Largo, eres repugnante.- Hizo mueca de asco y se recargo en un árbol cercano, esto me estaba destrozando, caí de rodillas, las lágrimas amenazaban con surcar mis ojos, esto no podía estar pasando, de nuevo escuche su risa, me pregunte cuantas veces se había reído de mí en cuestión de unas horas, lente la mirada para encararla, ella lo estaba disfrutando.
-Pobre de ti, parece que él no te quiere, después de tanto que te amo… bueno así es la vida, ahora recuerda algo importante: Tienes que hacer todo lo que yo diga ¿entendido?, te mandare las ordenes por carta con una paloma, estate pendiente de su llegada, antes de irte te daré una nueva orden, buscaras a alguien en especial, alguien a quien no puedes derrotar y le retaras a un pelea, si lograr salir de esto sobrevivirás y vendrás por tu siguiente misión, en ella podrás estar con tu amado Sanji, aunque él te odie claro está, no te voy a impedir que vayas a lloriquear con tus amigos, a ellos también los detesta, así que adelante, ve, busca tu muerte y deja de existir Roronoa Zoro, confió en que cumplirás tu misión.
…
Si quieres volver a ver al pelirrubio.
Sanji y Vivi desaparecieron de mi vista, mierda, esto estaba mal, me levante pesadamente y me dirigí a la posada, debía de decirles lo que paso… después iría a donde Mihawk, solo podría estar hablando de él, me aseguraría de volver…
Volveré por ti Sanji.
Solo…
Espera un poco más.