Pero al decir verdad lo dicho por Harry era cierto, ahora que lo volvía a vivir se daba cuenta que esa vez cuando Dumbledore le había otorgado los puntos a Gryffindor era injusto para as otras casas que habían trabajado duro por ganar, con ese acto solo lo habían dejado de lado a todos los demás le sacaron su merecida copa a Slytherin y pensándolo bien en ello los únicos que festejaron con más entusiasmo habían sido ellos, las otras casa no lo hicieron, no como ahora que de cierta manera parecían estar de acuerdo por primera vez en algo, festejando de esa manera todos juntos poniéndolo feliz por ello.
Al fin había llegado el momento de regresar a casa junto a su familia, antes de partir se despidió de su jefe de casa y aprovecho el momento para comunicarle que su padrino lo estaría esperando lo más pronto posible, luego de eso se reunió con sus amigos para partir a casa y así pensar en el verano como cumplir con el trato hecho con Voldemort, además que ahora podría hacer realidad el regalo dejado a él por su madre, al fin lo tendría junto a él luego de todo este tiempo que había pasado.
Capítulo 20: INESPERADOS DESCUBRIMIENTOS
Al fin había terminado las clases en Hogwarts y todos los alumnos partieron para sus respectivos hogares, pero no podía negar que ese año con la llegada de Potter y compañía, es decir, su ahijado junto con los otros lograron darle dolor de cabeza y preocupaciones por estar pendiente de ellos para que no se metieran en problemas, aun así en un instante pudieron desaparecer de su vista y meterse en un gran lio con lo de la piedra filosofal. Aunque no podía negar que por más preocupación que tuvo al principio por no saber cómo se encontraban todos, disfruto bastante al ver caer no una sino tres veces la máscara del viejo Director, la primera cuando el encontró a Harry por lo que Dumbledore no estuvo muy feliz de verlo allí, la segunda cuando los padres y tutores llegaron al saber lo sucedido a sus hijos, y por ultimo su rostro cuando llego el profeta unos días después de lo sucedido había sido todo un espectáculo el dejar caer totalmente su máscara mostrándose tal como es en realidad, por más que fue solo por un instante, aun así lo había disfrutado y nadie se lo quitaría.
Ahora que Hogwarts estaría cerrado por vacaciones debía de cumplir con el Sr. Malfoy como este le había pedido, antes de que los alumnos se fueran Potter había venido a su despacho a recordárselo antes de partir a casa (Despacho de Severus imagen en el face), aunque no era necesario lo recordaba perfectamente, como también decidió tomarse una semana para dejar todo en orden y así ir sin problemas a dicha reunión, de esa manera también evitaría que Albus, a quien a espaldas de este suele llamar por otros alias tales como: vejete, anciano manipulador, viejo ridículo entre otros, pero que se podía esperar de él no le agradaba el viejo, nunca le agrado siempre lo considero un hipócrita y el desagrado hacia el viejo aumento considerablemente durante estos años, todo desde que él fue un idiota por confiar en el viejo al pedirle ayuda, al parecer no había aprendido que el viejo no era de confianza ya que una vez ya le había dado la espalda cuando casi muere en el incidente del hombre lobo siendo a él a quien amenazaron con la expulsión en vez del grupo de Potter y compañía, pero era de esperar que no fuera imparcial y objetivo con sus decisiones el viejo siempre había mostrado su favoritismo hacia la casa de los leones, por lo cual cuando fue a buscarlo contándole sobre que había tomado la marca, el ataque a los Potter y Longbottom, lo cual no sirvió de nada ya que aun así las dos familias fueron atacadas, lo único que logro con ello fue la muerte y la tortura de las dos familias dejando sin padres a dos niños inocentes, también con eso gano otra marca, por más que esta no era visible como la marca oscura, esta se sentía peor ya que el vejete lo había obligado a firmar un contrato vinculante para unirse a la orden, además del juramento inquebrantable para proteger a Harry, aunque por más que fue obligado por el viejo a dicho juramente él lo hubiera hecho sin importar que o quien, ya que se sentía responsable por el hijo de su adorada Lily, a quien había amado tanto, tanto que tuvo que sacrificar su amistad para que estuviera a salvo, pero aun así había muerto.
Ya era suficiente de tantos pensamientos deprimentes, mejor se ponía a trabajar de una vez así terminaría pronto con todo y dejaría todo en orden, para así ir a la tan esperada reunión con el Sr. Malfoy, algo dentro suyo le decía que esa reunión era muy importante que muchas cosas cambiarían a partir de ese momento, solo esperaba que fuera para bien, además tampoco olvidaba que el Sr. Malfoy le había dicho que tenía una sorpresa para él, no podía negar que sentía mucha curiosidad por saber de qué se trataba, siempre había tenido gran curiosidad hacia lo desconocido y esta no sería la excepción, tenía un fuerte deseo por saber cuál era la sorpresa. Pero le tocaba esperar hasta dicho encuentro, también había tomado la decisión de ir sin dar aviso de su salida al Director no era su intención que el viejo supiera accidentalmente o por un descuido suyo que iría de cierta manera a reunirse con Potter, no quería que viera esa ocasión como una oportunidad de acercarse al niño y así ver como manipularlo, ya se había dado cuenta que el viejo estaba un poco por no decir muy desesperado por acercase al niño, pero tanto sus amigos como Potter y otras circunstancias externas había evitado tal acercamiento.
Lo cual era muy bueno, ya que dudaba de las buenas intenciones del viejo, por ese motivo era mejor que el vejete no supiera que iría a reunirse con el padrino de Potter y que era cercano a este, su deber como cabeza de casa de las serpientes era cuidar de sus niños y también de Potter tanto por su juramento como por ser hijo de su amiga Lily, lo protegería sin importar que aunque eso significara morir en el proceso.
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Todo lo que había planeado desde hace años no estaba yendo como él había deseado, se le estaba saliendo de las manos todo a causa del maldito niño Potter, o sería mejor decir que el causante de que sus planes iniciales se vinieran abajo era por el misterioso padrino del niño, él no tenía idea de la existencia de este por alguna razón James y Lily no le informaron de la existencia del otro padrino, además de los que ya sabía y de los cuales se había encargado que no interfirieran al quedar huérfano el niño, había hecho lo necesario para que Sirius fuera a prisión sacándolo así de su camino, como lo había hecho con Alice Longbottom quien era la madrina de Harry un secreto bien guardo por su parte, nadie sabía que era la madrina del niño a excepción de Lupin pero ese no diría nada por lo sucedido con Alice, ya que si alguien sabía hubieran buscado la manera de haberlo puesto con Augusta Longbottom si no existiera ese maldito padrino, y eso no le convenía a sus planes, pero aun así ya era tarde sus planes estaban arruinados por el maldito Battenberg.
Lo había planeado tan cuidadosamente todo desde la muerte de los Potter y con eso quería decir tanto los padres del mocoso como sus abuelos, tuvo que encargarse tanto de los abuelos paternos y maternos, dejándolo así como único familiar a la hermana de su madre, quien odiaba la magia y se encargaría de hacerle la vida miserable al niño solo por tener magia, además de contar con el marido de esa mujer que odiaba todo lo anormal y que no fuera lo normalmente aceptable a sus ojos o la sociedad, todo había sido planeado cuidadosamente.
Se encargó de que la profecía dicha por Trelawney (Imagen de Trelawney y la bola de cristal de dicha profecía en el face) se cumpliera por más falsa que esta fuera, por el siendo el gran mago que era sabía que esa profecía era falsa que la loca de Trelawney solo la invento para conseguir el puesto de profesora, como también se encargó que el idiota de Snape la escuchara y fuera a contárselo a su amo perfectamente pudo haber puesto un encantamiento de silencio pero no lo hizo y por lo cual Snape escucho lo que quería que escuchara, las personas eran tan estúpidas y fácil de manipular lo sucedido con dicha profecía era una prueba de ello. Por Merlín nadie en su sano juicio haría una entrevista de trabajo en un bar por la noche y mucho menos cuando estaban en guerra y dejando con ese acto que el enemigo ya sea podía atacarlo fácilmente u obteniendo de esa manera conocimiento de la cual no debería tener como la supuesta profecía, y de esa manera había logrado deshacerse de los Potter y dejar a Harry como único sobreviviente y así llevándolo directo a la casa de los Dursley, por cual no dejaría que Sirius pusiera sus manos en el niño, para su suerte este fue en busca de la rata, así claro que sabía que Sirius no era el guardián secreto de los Potter, como también sabía que tanto Sirius, James y Peter eran animagos ilegales, además de que él fue quien realizo el encantamiento Fidelius, por lo que sabía perfectamente quien era el traidor y también sabía que el muy cobarde se encontraba escondido como rata dentro de la familia Weasley, ya usaría eso cuando lo considerara necesario y lo considerara útil para sus planes y sobre todo que él fuera beneficiado con ello.
Y todo esto con el fin de tener a un niño necesitado de afecto, débil y sumiso seria fácilmente manipulado por él, además de estar agradecido con él por revelarle la verdad sobre su origen y que era un mago, pero no todo eso no había salido como él quería por culpa de ese padrino misterioso que había aparecido de la nada. Aun así con todo en contra suyo logro que el mocoso fuera tras la piedra y con ello esperaba acercarse al niño para así ver la manera de ir trabajando en ganar su confianza, para así tener la oportunidad de lograr con cada acercamiento el poder manipularlo a su antojo, pero tampoco funciono durante todo ese tiempo no tuvo la oportunidad de acercase o que el maldito niño se acercara a él pidiendo ayuda, tampoco tuvo la oportunidad de hablar con él luego de lo ocurrido con la piedra, durante todo ese tiempo no logro conseguir hablar o estar algún momento a solas con el niño, este siempre estaba acompañado. Aunque para ser sincero quizás era lo mejor por el momento, ya que nada le había salido bien desde la aparición de Malfoy y compañía en la enfermería, la reunión que tuvo con ellos no había salido nada bien y para males la noticia publicada en el Profeta no lo había ayudado maldita Rita Skeeter, no tenía idea de cómo se había enterado de dichos sucesos, no este año escolar que finalizaba no había sido bueno para él, más hacia el final tanto por la culpa de los padres del cuarteto de Slytherin y la odiosa entrometida reportera, era difícil de olvidar ese mal momento, más aun teniendo todavía en su escritorio la edición del profeta causante de su mal humor, además de Malfoy y compañía.
Flashblack
Jamás hubiese esperado ver a los padres y tutores de los alumnos involucrados con el asunto de la piedra filosofal, al verlos se había sorprendido y sentía mucha rabia e ira, tanto así que por un momento se había olvidado de su máscara de abuelo compresivo y dejo ver lo que realmente sentía, pero rápidamente volvió a colocarla, aun así no fue lo suficientemente rápido para los recién llegados que pudieron captar sus expresiones, sintiendo un gran placer al ver el disgusto causado por su presencia al Director, quien luego al poco de colocar nuevamente su máscara, había hablado. - Señores. - Saludo a los intrusos, digo invitados sus invitados inesperados. - ¿En qué puedo ayudarlos?
Al terminar de ingresar todos los inesperados visitantes para el Director en la enfermería, Lucius Malfoy fue el que tomo la palabra. - Dumbledore, ¿Puedo saber porque no fuimos informados de lo sucedido a nuestros respectivos hijos?
- Es mejor tratar este asunto en lugar más privado, si me acompañan a mi despacho. - Trato de hablar lo más amable posible, no le gustaba en nada verlos allí, como también que justo que tenía la posibilidad de estar a solas con el mocoso, lo que menos quería era que las cosas se complicaran. Lucius siguió al Director junto con los demás, sin que Dumbledore y los demás a excepción de su padre y Sirius que observaba todo atentamente, Lucius seguía al Director con una sonrisa maliciosa la cual daba la apariencia de que "El pobre Director" no pasaría un buen momento y el cual ni siquiera se había dado cuenta el Director, como tampoco el que Abraxas y los demás compartían el mismo pensamiento <>, lo cual significaba que pasaría un mal momento.
Los demás lo siguieron a excepción de Regulus quien se quedó para saber el estado de su niño, acompañado por su prima, quien también quería saber cómo se encontraba su sobrino y así saber que ocurrió en realidad, como el pedir a la Sra. Pomfrey sobre su hijo, que por cierto no veía en la enfermería como tampoco ninguno de los otros niños. De esa manera los demás siguieron al director dejando a Regulus y Narcissa solos con Harry. Mientras que Harry y los demás se encontraban en la enfermería, en el despacho del Director muchas cosas cambiarían para todos los presentes especialmente para nuestro querido y adorado Director sin que ninguno de los presentes supiera a excepción quizás de uno de los presentes que no tenía idea de lo que sus acciones repercutirían en gran medida en la opinión de la comunidad mágica, esta reunión sería una de las primeras piedras puestas para cimentar la futura caída del <>, después de esta reunión muchos magos y brujas aunque les cueste comenzarían a ver de otras maneras las acciones o manipulaciones de Dumbledore tal como eran.
Una vez que Dumbledore y compañía llegaron a la oficina de este, Dumbledore procedió a ocupar su lugar, en cuanto los otros cuatro hombres dos de ellos tomaron asiento el padrino de Harry, Sr. Scorpius Battenberg (Abraxas) y Lord Leandro* Piero* Zabini, en tanto Lord Lucius Malfoy y Lord Eleazar* Andru* Nott prefirieron permanecer de pie, los instintos de estos últimos le decían que era mejor permanecer parados, que esta visita o reunión como lo quieran llamar no sería nada agradable para ambas partes, por más que vinieran con intenciones de hacer pasar un mal rato al anciano Director por poner en peligro a los niños, eso no quería decir que el viejo no causara algún problema o que no estuvieran preocupados por los niños. Mientras tanto los pensamientos del Director eran muy parecidos al de sus invitados, debía de tener cuidado con lo que diría ya que se encontraba enfrente de cuatro magos muy poderosos e influyentes, por más que uno de ellos no era un Lord aún seguía siendo un Sr. Con un gran apellido que lo respaldaba, aún seguía sin entender como este hombre había logrado ser padrino del mocoso arruinando así sus planes.
En estos momentos no estaban muy felices Abraxas y Lord Zabini por todo lo sucedido y la posición en el que se encontraban no ayudaba para mejorar sus ánimos, tomaron asiento por la reunión que se llevaría a cabo no era agradable, por lo cual prefirieron ponerse cómodos de cierta manera para observar mejor el espectáculo, pero no les agradaba en nada las ubicaciones en las que se encontraban, es decir, el escritorio del Director no estaba en la misma altura que sus respectivos asientos, estas estaban más abajo que el escritorio y respectivo asiento del Director el cual se encontraba por encima de unos escalones (Imagen del despacho del Dumbledore en el Face), esto era una clara demostración de querer intimidar y demostrar con ello su superioridad y poder a los visitantes, por supuesto que no estarían feliz en esa posición ya que el anciano no era nada de lo que quería aparentar.
Dumbledore estaba enojado y con mucha rabia por la situación en la que se encontraba, el jamás había esperado que lo sucedió esa noche con lo de la piedra filosofal saliera fuera de las paredes de la escuela, esperaba que todo lo sucedido no le traiga ningún problema. Pero algo muy dentro suyo le decía que no se confiara de ello más al saber quiénes estaban involucrados en todo los sucedido, además de las personas que tenía enfrente suyo por lo que solo esperaba que las repercusiones no sean tan malas para él, por Merlín esperaba que así fuera. Se acomodó mejor en su asiento apoyando los codos sobre su escritorio entrelazando sus manos y de esa manera colorar su barbilla sobre ellas y al hacer aquello de cierta manera ocultar la profunda inhalación que había tomado para empezar con dicha reunión, era mejor terminar con todo esto lo más rápido posible. Los otros cuatros ocupantes estaban totalmente centrados en cada movimiento del Director y por ello no había pasado desapercibido la inhalación que había tomado, con ello dieron por sentado que el viejo Director sabía que esta reunión no le deparaba nada bueno y por lo cual debía preparase lo mejor posible para ello, además que con ello también le daba a los cuatro más ventaja de lo que habían esperado para forzar más al Director a mostrar su verdadero ser y si es posible lograr que pierda control, lograr eso sería una victoria para ellos ya que nadie ha podido lograr esa hazaña hasta ahora, sacar de su lugar confort al gran Albus Dumbledore.
- Bueno Señores, ¿En qué puedo ayudarlos? - Pregunto Dumbledore haciéndose el desentendido, como si no supiera del porque estaban allí, algo que no era una absoluta mentira, porque no tenía idea de qué forma se enteraron de lo sucedido con los niños, él no quería que lo ocurrido saliera de las paredes de Hogwarts, pero ahora ya era tarde para ello, por lo que le tocaba tratar de salir bien librado de dicha reunión y que todo lo ocurrido no le causara algún problema.
Lucius tomo la palabra, estaba un poco enojado de escuchar a Dumbledore y que este parecía no tomase enserio lo sucedido, por lo que parecía querer actuar como si no hubiese ocurrido nada. - Dumbledore, esa pregunta sale sobrando en estos momentos, sabe perfectamente a que vinimos y la pregunta es ¿Por qué no fuimos informados de lo sucedido con los niños?, ¿Y tuvimos que saberlo por otra fuente?. Cuando somos sus padres o tutores de ellos. Dijo calmadamente Lucius, ahora los cuatro esperaban una respuesta del Director que justifique tal acción, por lo que jamás esperaron la respuesta que venía a continuación, por lo que estaban un poco sorprendidos, encima que los trataba como simples niños el viejo ese.
- No creí que fuera necesario mis niños, fue solo un pequeño incidente que ocurre en cualquier escuela, mas con los niños más pequeños que tienen tanta energía y una gran curiosidad por lo desconocido. Y como este era su primer año en Hogwarts siendo un lugar que no conocían y como ya dije como todo niño curioso, quisieron explorar el castillo y durante dicha exploración salieron lastimados. Por ese motivo no se lo comunique a sus familias, a causa de un simple accidente que pudo haberle sucedido a cualquiera. - No podían creer lo que escuchaban, un simple accidente causado por niños curiosos, y para rematar todo lo dicho por Dumbledore es fue dicha con su ya conocida actitud de abuelo bondadoso, para así tratar de salir bien librado de dicha situación.
- Por favor Dumbledore, no nos venga con eso, lo sucedido no fue ningún accidente, ni causa por niños curiosos, esto es totalmente responsabilidad suya. O nos dirá que fue casualidad que a comienzos del año escolar prohibiera el ingreso al tercer piso de la escuela, algo que nunca ha sucedido en la historia de la escuela, y sobre todo que justo en dicho pasillo prohibido estuviera un cerbero, un animal tan peligroso en una escuela repleta de niños. - Todo esto dicho por el Señor Nott y con cada palabra dicha por él, Dumbledore se preguntaba que tanto sabían estos hombre con lo ocurrido esa noche, de ahora en adelante debía tener cuidado con lo que decía y sobre todo hacer todo lo posible de salir bien de esta reunión, porque hasta ahora parecía que todo apuntaba a un desenlace malo para él, por lo que estaba a punto de responder para tratar de salvar la situación pero el padrino del Potter se le adelanto, dando más razones para ser atacado por los otros presentes.
- Señor Nott, eso sin nombrar las otras tantas trampas que estaban esperando tras el cerbero y que este simple incidente como lo llama nuestro estimado Director. - Nótese el sarcasmo en la última frase. - Murió un Profesor y los niños salieron lastimados, y solo gracias a Merlín sus lesiones no fueron graves, pero aun así esto no debió suceder donde se supone que dichos niños deberían estar a salvo, eso sin contar del troll de la montaña que ingreso a la escuela en la noche de Samhain. – Abraxas solo quería ayudar un poco a su hijo en lo que estaba planeando, por eso puso un poco de su parte dando cierta información.
- El Señor Battenberg tiene razón en todo lo dicho, pero también todos debemos hacernos una pregunta. – Dijo Lucius observando a todos los presentes por un momento. - ¿Todo lo ocurrido tiene algo que ver con el ingreso de los primeros años, específicamente del heredero Harry Potter?, ¿Es esta una prueba hecha por Dumbledore, para ver sus capacidades?, siendo que el Señor Potter, fue quien derroto a Quien-No-Bebe-Ser-Nombrado, es decir, ¿Todo esto fue planeado por el Director aquí presente?. – Todo esto fue dicho por Lucius, con el fin de provocar a dicho Directo, pero había salido mejor que de lo planeado, porque los otros Señores presente se lanzaron con más preguntas y acusaciones a Dumbledore, pidiendo explicaciones, por lo que no pudo salir bien librado de esta reunión como era el deseo de Dumbledore.
Fin Flashblack
Después de esa desastrosa reunión según Dumbledore, nada había salido bien luego de que terminara con ellos había llegado Amelia Bones jefa del Departamento de Aplicación de la Ley Mágica “DMLE”, acompañada de varios aurores procediendo a clausurar y bloquear totalmente el tercer piso, para su posterior investigación luego de que finalizaran y los alumnos fueran a casa para poder investigar más tranquilos, para la desgracia de Dumbledore no pudo hacer nada para detenerlos y para finalizar el maldito artículo del Profeta que apareció durante la semana de lo ocurrido, revelando lo ocurrido dentro de Hogwarts al público en general, dejándolo como una persona poco confiable para decirlo menos, aun debía averiguar cómo esa maltita mujer sabia de lo ocurrido tras las paredes de Hogwarts, sin que Dumbledore supiera en la reunión que tuvo con los cuatros Señores había un pequeño invitado más en esa reunión escuchando todo, era un pequeño escarabajo con mucha curiosidad (Imagen en el Face).
Debía ver como solucionaba todo lo ocurrido, por Merlín él era el Gran Albus Dumbledore no tendría que ser difícil de encontrar una solución para salir bien librado de todo lo ocurrido sin contar que aún faltaba la investigación de la DMLE, con los resultados de dicha investigación sabría cuál sería la mejor forma de actuar para su beneficio propio. En eso Dumbledore escucha la red flu de su oficina, de donde luego de unos segundos salía una Molly Weasley un poco enojada, Dumbledore fue hacia ella para hablar y saber el porqué de su enojo y tratar de calmar a su socia en el crimen, es decir en sus planes para el bien común, dejando así el ejemplar del Diario El Profeta sobre su escritorio donde se podía leer en grandes letras y mayúsculas sobresaliendo en la página ¿ALBUS DUMBLEDORE UN GRAN MAGO O SOLO UN SIMPLE MAGO MANIPULADOR A QUIEN SE LE SUBIO EL PODER A LA CABEZA?.
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En Inglaterra, Devon una mujer se encontraba sola estos momentos en su casa la cual estaba ubicada a las afueras de un pueblo muggle llamado Ottery St. Catchpole, pero suficientemente alejada del pueblo, por lo cual no sospecharían que tenían a una familia de magos viviendo en el lugar, más al ver el hogar de dicha familia, porque de tan solo mirarla uno pensaría como podría estar aún de pie, ya que a simple vista no había manera de que eso sea posible. Y la única explicación era que la casa esta sostenida por la magia.
Si esta casa era hogar de los Weasley, a la cual habían nombrado La Madriguera (Imagen en el Face), y la mujer era nada más y nada menos que la matriarca de la familia Molly Weasley (Imagen en el Face), quien en estos momentos estaba sin poder creer lo que estaba sucediendo con ella y todos los planes bien trazados por Albus y cuales ella y dos de sus hijos tenían una gran participación, nada había salido como debería ser. Se había asociado con Albus con el fin de salir al fin de la miseria en que vivía, estaba harta de vivir así, esa no era la vida a la cual estaba acostumbrada ella había sido educada para cosas mejores, por Merlín ella era una Prewett una de las familias del Sagrados 28. Cuando conoció a su adorado y amado Arthur sabía que al casarse con él no tendría la vida a la cual estaba acostumbrada, pero jamás imagino que sería de esta forma, con tantas privaciones, estar ahorrando a todo momento para que no pasar necesidades. Esa no era su idea de una vida feliz y sin tantas preocupaciones al contraer matrimonio con su Arthur, el vivir en la pobreza, además de ser menospreciados, humillados y a veces maltratados por los sangre puras que lo llamaban traidores de la sangre, tampoco quería tener tantos hijos, pero debía hacerlo esa era la única manera de tener a su lado a su Arthur, por térnelo había sido capaz de todo, el tener que quedar embaraza de su primer hijo Bill aun estando en Hogwarts y así obligar a Arthur a casarse con ella, si fuese por ella hubiese tenido máximo dos niños, pero no tuvo que tener más con el fin de retener a su Arthur y por esa misma razón se había interpuesto en medio de la antigua relación que había tenido su esposo con otra bruja de cual tuvo que deshacerse para quedarse con Arthur por el gran amor que sentía por él, no dejaría que nadie se lo quitara y haría cualquier cosa por retenerlo y si eso significaba vivir en la miseria y tener tantos hijos de los cuales solo dos últimos quería y solo porque le servían para salir de la pobreza porque si no solo seguirían siendo una herramienta para tener junto a ella a Arthur.
Y solo por ello seguía soportando a sus llamados hijos, especialmente a esos gemelos a los cuales odiaba más que a todos los otros, ya que eran tan parecidos a sus hermanos Gideon y Fabian a quienes odiaba con tanta fuerza por haber sido los preferidos de la familia y por lo cual se había sentido desplazada y un cero a izquierda a lodo de ellos, tampoco ayudaba que en su juventud no era como otras brujas delgadas, esbeltas y una figura envidiable, ella no se sentía una chica hermosa capaz de atraer a los chicos (Imagen en el Face), por lo cual tuvo que luchar duro y con recursos nada éticos y morales para atrapar a Arthur y no se arrepentía de ello, ya que había obtenido lo que quería lo cual era tener a su Arthur para ella sola, solo faltaba salir de la pobreza y para ello la clave era el mocoso Potter, quien debía ser amigo de su hijo Ron y más adelante casarse con su Ginny, pero mientras eso sucedía podría ir quitándole algo de su dinero al niño idiota y así mejorar un poco su calidad de vida, pero no nada estaba saliendo como debía ser.
El maldito niño era tan idiota que no podía seguir los planes que ya se habían trazado para su vida, el muy maldito fue seleccionada en la casa de esas apestosas y viscosas serpientes y no en Gryffindor, y si el mocoso idiota no pudo quedar con los leones pudo ir y quedar en otra casa diferente, pero no en Slytherin, aun estando en otra casa pudieron tener alguna oportunidad de influir en el niño y que este siguierá los planes que ya tenían para él, pero estando con las serpientes esto sería más difícil y más ahora que el inútil de su hijo menor no tuvo la inteligencia de logra ser amigo del niño, por lo que su hijo le conto estaba difícil que lograr ser su amigo, más si este se pasaba en compañía del vástago de la familia Malfoy, quien era bien sabido el legendario odio que tenían las familias Malfoy y Weasley, ella no entendía porque su hijo no había heredado su inteligencia y astucia para obtener lo que quería como ella lo había hecho con su esposo.
Ahora le tocaba a ella planear calmadamente durante las estas vacaciones y así buscar una solución con ese problema de su hijo, con el fin de lograr que se acerque al Potter y sobre todo enseñarle como debía actuar e instruirlo adecuadamente a controlar su temperamento que no lo llevaría a ningún lugar cerca de conseguir la amistad del niño, pero tampoco había que perder la esperanza, aun le quedaba su hija para poder cumplir paso a paso con la parte del plan que le tocaba, ella había enseñado muy bien a su hija para ser la perfecta esposa para el salvador del mundo magico, su hija sabía que debía hacer para conseguir estar junto al niño, por fin el próximo año lectivo en Hogwarts será la oportunidad de su niña para comenzar con su parte del plan , solo esperaba que no resultara tan inútil como su hermano Ron, eso sería un fracaso para ella haber engendrado tantos hijos para nada y que resultaran uno más inútil que el otro, ella aun no podía explicarse cómo pudieron salir de esa manera siendo ella tan inteligente y su Arthur por más bondadoso que fuera tampoco era un idiota, será que las pasiones que le había dado a ingerir a su esposo tuvieron que ver con engendrar hijos que no tuvieran utilidad para ella, excepto quizás sus dos últimos hijos, aun no podía desecharlos de todo de los planes, total todo esto apenas comenzaba.
Aun así seguiría pensando en todo eso más adelante ahora debía aprovechar que nadie estaba en casa e ir a ver darle una visita al Director, luego de hablar con su hijo menor después de su regreso a casa y saber con más detalle lo sucedido durante todo ese año escolar, debía pedir explicaciones por lo que se había enterado sobre el niño, que no había sido criado por sus parientes muggles, como debía ser su caso por lo cual hubiese sido fácil obtener todo lo que deseaban. Bueno era hora de dejar perder el tiempo pensando e ir a ver a Albus, de esa manera Molly fue a la chimenea con el fin de ir directo a Hogwarts con el fin de exigir explicaciones a cierto Director manipulador.
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Harry se encontraba en el cuarto donde habían colocado el regalo que le había dejado su madre, ese cuarto había pertenecido a su padre durante su infancia y adolescencia de este antes que se casara con su madre, por ese motivo le pareció conveniente que estuviera en ese cuarto el mayor regalo y tesoro que le pudo haber dejado su madre a él, cada vez que lo veía en la cama no podía creer lo que su madre había hecho por amor a él, sacrificándose de esa manera por amor a él y a su padre, ya faltaba poco para que la tan ansiada espera terminara con la llegada de Snape.
Ya había pasado unos días de que Harry regreso de Hogwarts, también faltaba muy poco tiempo para la llegada de Severus Snape a la casa, así su padrino podría hablar con el profesor, Abraxas tendría la difícil tarea de contarle la verdad sobre muchos hechos entre ellos la verdad tras muerte de sus padres, lo de Sirius y Regulus además de pedir su ayuda con lo de la piedra filosofal, sin contar lo que descubrieron Abraxas y Harry a su regreso del Banco referente a Severus.
Harry había pedido a Abraxas que lo llevara al banco con el fin de hablar con Gringott referente a la piedra y así poder pedir un favor al duende con respecto a cierto profesor de pociones que tanto lo había ayudado, tanto así que había dado la vida por él en el ¿futuro, pasado o en su otra vida?, a Harry le seguía confundiendo un poco ese asunto y por lo cual aún no sabía cómo debía expresarse a lo que vivió, ya que de alguna manera se podría considerar como su futuro ya que ahora es solo un niño, como también puede ser su pasado por que todo lo ocurrido lo había vivido en verdad, así como también se lo podría llamar como otra vida, ya que ahora estaba viviendo nuevamente pero de manera diferente, la verdad era muy confuso de pensar en una definición de lo que estaba viviendo. Lo mejor era dejar de pensar en ello y así evitar un dolor de cabeza buscándole una definición a lo ocurrido, era mejor volver a recordar lo descubierto en su visita al Banco, aun le costaba creer lo descubierto, pero a su vez no debía de sorprenderse de ello y más al saber quién estaba detrás de todo lo sucedido, él mismo que había destruido su infancia y su antigua vida, como también el causante de la destrucción de la vida de otras personas como la de Snape, quien tuvo una vida oscura y triste muy parecida de cierta forma a la de su padrino Sirius, ya que ninguno de los dos pudo llegar a ser feliz realmente, ellos eran dos de las tantas víctimas de del viejo come chicle.
Flashblack
Al día siguiente de haber regresado a casa tanto Abraxas y Harry fueron a Gringotts, gracias a sus buenas relaciones con los duendes y que tenían el apoyo de estos con sus planes, ellos tenían el privilegio de utilizar la red flu de un salón privado o incluso el que se encontraba en oficina del mismísimo Presidente o Director del Banco Gringott, habían decido llegar al salón privado y de ahí pedir que le permitieran ver a Gringott, de esa manera tiempo después pasaron a la oficina de dicho duende, el cual esperaba averiguar el motivo de su visita, tenía una leve sospecha que se trataba sobre una cierta piedra, pero eso ya lo habían hablado anteriormente, por lo cual no creía que fuera necesaria su reunión en estos momentos, por lo que podrían reunirse más adelante luego que utilizaran la piedra como lo habían planeado.
- Señores, ¿A qué debo su visita?, ¿Y en que puedo ayudarlos?
- Al decir la verdad Director Gringott, solo vengo acompañando a mi ahijado por pedido suyo. - Había dicho Abraxas, al decir verdad él tampoco tenía idea de lo que deseaba Harry con esta visita. Al escuchar esa declaración Gringott giro a hacia Harry indicando que hablara. Por lo cual Harry procedió a hablar de manera respetuosa y a la vez clara para que no existiera ninguna confusión referente a lo que deseaba.
- Bueno Director Gringott, quisiera saber si podría ayudarme en dos asuntos muy importantes. El primero es referente a la piedra, me gustaría que investigara sobre ella con el Señor Flamel si en verdad se lo presto a Dumbledore y si ese es el caso, si estuvo de acuerdo con la manera en que supuestamente Dumbledore protegió la piedra. Y de acuerdo con los resultados de su investigación veremos como procederemos para nuestro beneficio y si lo descubierto nos ayudara a la caída del Albus Dumbledore. - Esto último, es decir el nombre del Director lo había dicho con una mescla de burla y desprecio por dicho hombre, por otro lado tanto Abraxas como Gringott estaban un poco sorprendidos con el pedido de Harry, la verdad no era mala idea, quien sabe lo que podrían terminar descubriendo hablando con Nicholas Flamel. - Y por último, mi segundo pedido de alguna manera es en parte algo personal, se trata del Profesor Severus Tobías Snape, me gustaría que buscara la manera de que pudiera librarse del juramento inquebrantable que fue obligado a realizar por Dumbledore, además de ver la posibilidad de que tenga más ingresos económicos y no solo el sueldo de profesor o lo poco que obtenga por la fabricación de pociones, con el fin de tener un poco más de independencia de Dumbledore. este último pedido que le hago Director Gringott es porque de esta forma quisiera agradecer un poco al Profesor Snape por todo lo que ha hecho por mí y sigue haciendo hasta el día de hoy.
El último pedido de Harry de cierta forma sorprendió a Abraxas, ya que no había esperado ese pedido de su ahijado, de mostrándole nuevamente ese corazón puro y bondadoso del cual era propietario Harry. Gringott al escuchar el último pedido de Harry, a su manera sonrió, ya que desde que conoció al niño con cada acto de este seguía confirmando lo diferente que era a otros magos y por lo cual en el fondo estaba feliz de tener el gusto de conocerlo y sobre todo de poder ayudarlo con sus planes, no había duda de que Lady Elpízo había elegido bien al encomendarle a este joven el cambio del mundo en que vivían, estaba seguro que él podría lograrlo, pero primero resolvería uno de sus pedidos del cual estaba un poco confundido y preocupado porque no entendía del todo porque el Maestro de Pociones necesitaría más ingreso económico, cuando no era necesario.
- Señor Potter, no tengo ningún problema en ayudar con su pedido, pero antes quisiera aclarar con usted un tema referente con el Maestro de Pociones, primero hablemos sobre el juramento inquebrantable, para encontrar una solución debemos saber palabra por palabra el juramento y con ese conocimiento podemos buscar alguna laguna en el para poder obtener un beneficio de ello. - Harry asintió a Gringott entendiendo perfectamente a que se refería, pero para ello necesitarían del profesor, por lo que solo tenían que esperar unos días para hablar con él. - Y por otro lado el tema de buscar algún otro ingreso económico para el Maestro de Pociones, para ser sincero me tiene un poco confundido, porque sé que uno de mis empleados se ha encargado de enviarle en repetidas veces desde que el Señor Snape sea vuelto un adulto para el mundo mágico una carta comunicándole que se acercara a nuestras oficinas, con el fin de comunicarle que debe tomar su lugar como el actual Lord Prince, el cual quedó vacante tras la muerte del antiguo Lord quien era su abuelo materno, pero es hasta el día de hoy no se ha acercado a nosotros.
Abraxas y Harry estaban muy sorprendidos por lo revelado por Gringott, les costaba creer lo que acaban de oír, no comprendían como el Profesor Snape no respondía a la convocación del Banco o es que el Profesor no estaba enterado de sobre esta situación y si ese era el caso alguien estaba interfiriendo con su correspondencia. En ese momento como si se leyeran la mente Abraxas y Harry decidieron comunicar sus sospechas a Gringott, el cual a escucharlos decidió averiguar exactamente que estaba sucediendo y luego de averiguarlo se comunicaría con ellos con el resultado de sus investigaciones, tanto lo de la piedra como lo del Profesor.
Fin Flashblack
Fue algo sorprendente lo descubierto ese día para los dos, ellos no tenían idea que el Profesor Snape era un Prince y mucho menos que él era quien debía tomar el puesto de Lord Prince, de tan solo pensar con todo lo que sabían y que debían informar al Profesor, sentía un poco de pena por su padrino que le tocaba la dura tarea de informarle, pero él estaría junto a él como toda la familia en especial su tío Reg, estaba muy feliz de que al fin estuvieran juntos, hacía tiempo que los veía mirándose, orbitando entre ellos, “Mmm… lo único malo de que fueran pareja era que ya no podía escabullirse por las noches cuando tenía pesadillas al dormitorio de uno de ellos, porque ahora compartían dormitorio y no quería ir a su dormitorio en esas noches que no podía dormir por el miedo de encontrarlos en otras actividades”, de tan solo imaginárselo se le subieron los colores, eso sería muy vergonzoso, mejor iba a lo de Siri o Moony, asintiendo para sí Harry estuvo de acuerdo con esa decisión “Si eso sería lo mejor”, pensó Harry de esa manera evitaba momentos vergonzosos de tan solo pensarlo estaba más rojo que antes, mejor buscaba algo que hacer y se olvidaba de eso.
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Por fin había llegado la hora de su reunión con el Señor Malfoy, estaba ansioso y nervioso como si fuera un adolecente nuevamente no entendía porque él no era así, pero como había dicho antes por alguna razón sentía que esta reunión además de que sentía curiosidad del motivo por el cual fue convocado, también algo dentro suyo le decía que su vida cambiaria a partir de esa reunión, era por ese motivo que se encontraba de esa manera debía respirar hondo y calmarse no solo era un Maestro de Pociones, también lo era de oclumancia por lo que debía utilizar esa disciplina para hacerse cargo de estos sentimientos. Solo había tomado unos minutos para llegar al lugar asignado para la reunión el cual era una mansión que nunca había visto, no sabía a quién pertenecía, pero su ignorancia no había durado mucho ya que había sido recibido por un elfo el cual tuvo la amabilidad de darle la bienvenida a Potter Menor (Óigase el sarcasmo al decir amabilidad de parte de él al escuchar donde se encontraba), no podía creer que en esos momentos estuviera en el hogar de uno de sus nemesís de su adolescencia, jamás lo hubiese imaginado, debía haber una explicación para ello y la única manera de entender lo que estaba sucediendo era reuniéndose al fin con el Señor Malfoy.
El elfo que lo había recibido lo había dirigido a los pisos de arriba, subiendo de esa manera por unas grandiosas escaleras que se encontraban en el recibidor (Imagen en el Face), lo siguiente que supo al seguirlo fue que se dirigía a uno de los tantos dormitorios de la mansión donde lo estarían esperando según el elfo, al doblar en una esquina se cruzó con el perro que le habían obsequiado, lo cual no podía ser ya que dicho perro se encontraba caminando a su lado en esos momentos, porque no podía dejarlo en Hogwarts por si algo malo le sucedía, quizás era hermano de Golfo, gemelo diría porque eran idénticos en todo, lo cual era imposible ningún animal podía ser idéntico a otro siempre existiría pequeños detalles que lo diferenciarían, la verdad eso era muy extraño, pero decidió no tomarle importancia por el momento, algo de lo cual más adelante se estaría arrepintiendo sin saberlo.
Al final de pasillo al fin se detuvieron enfrente de una puerta, el cual luego de unos segundos fue abierto por un muy vivo Regulus Black, a quien creía muerto y que al verlo se había arrojado a sus brazos dándole un fuerte abrazo el cual tardo en responder por el shock de ver vivo a su amigo y a quien consideraba su hermanito, aun tratando de procesar lo que acaba de suceder le pareció escuchar un gruñido, pero la verdad no le importaba del todo, en este momento solo importaba que había recuperado a uno de sus seres queridos su pequeño hermanito. Pero si Severus se hubiese tomado unos segundos en ver de dónde provenía dicho gruñido hubiera visto a “Golfo” gruñendo a Regulus, cuyo gruñido podría interpretarse de varias maneras como por ver a su hermano abrazando a su antiguo nemesís, el seguir enojado con Reg por nombrarlo de esa manera o el estar celoso al ver a Severus abrazado a otro hombre, por más que este sea su hermano, sea como sea Sirius había gruñido al verlos. Luego de que se le pasara un poco el shock Severus miro sobre los hombros de Reg y podía ver que se encontraba en un dormitorio con colores de Gryffindor, no le hacía falta pensar mucho a quien pertenecía dicho dormitorio debía ser de Potter padre, ya que el hijo era un Slytherin y no un Gryffindor, también pudo observar que dentro del dormitorio se encontraban el Señor Abraxas junto con Potter, quienes tenían una leve sonrisa al observarlos a él y Regulus.
- Me da gusto volver a verte Severus, espero te allá gusta la sorpresa de la cual te había hablado. - Abraxas lo había saludado y había dicho que la sorpresa que le esperaba era Regulus, Severus solo le asintió aún seguía un poco aturdido con lo que acaba de pasar, comprendiendo por lo que pasaba Abraxas decidió seguir hablando sobre el motivo de su reunión y lo mejor era ser directo e ir al grano en vez de darle vueltas al asunto según él. - Severus te pedí que vinieras para que nos ayudes con algo muy importante que nos encargó la madre de Harry, y tú eres el único que puede ayudarnos, no solo nosotros lo pensamos y confiamos en que tu podrás lograrlo, también lo hacía Lily, quien te dejo esta carta para que la leyeras. - Solo en ese momento Severus se daba cuenta de la carta que tenía en sus el Señor Malfoy y a su vez no entendía de lo que estaba hablando, “¿De qué encargo se refería?, pero a su vez estaba feliz de que aun tuviera la confianza de su querida Lily.
Regulus al ver que su amigo aun no reaccionaba del todo dejo de abrazarlo y se alejó un poco de Severus para así tomar su mano y metiéndolo dentro del dormitorio y ya estando dentro Regulus había hablado. - Allí se encuentra el encargo de Lily. - Dijo para luego señalar hacia la izquierda de Severus donde se encontraba la cama, volteando Severus fue totalmente sorprendido al ver lo que había sobre la cama estaba con los ojos bien abiertos y con la boca como pez, no sabía que decir sobre lo que veía en esos momentos, eso no era algo importante como lo había llamado el Señor Malfoy anteriormente, no era algo lo que yacía en la cama, sino que era una persona y no una persona cualquiera, al seguir viendo a dicha persona lo único que le venía a la cabeza era una sarta de maldiciones por no poderlo creer y sobre todo su amigo Lucius, pensando en que haría él al ver a esta persona “Oh Lucius, ¿Ahora qué harás?”.
Severus fue sacando de sus pensamientos por un pequeño crujido, al voltear hacia donde provenía el ruido pudo ver a su perro moviéndose de forma extraña, cada segundo que pasaba se movía mas y a su vez iba creciendo en altura, tomando la forma de un ser humano sorprendiendo más de lo que estaba a Severus, hasta que al fin termino el cambio Severus pudo reconocer al hombre se trataba del mismísimo Sirius Black, quien se suponía estaba encerrado tras las rejas de Azkaban, eso fue lo último que puso soportar el poder Severus, ya había pasado por muchas emociones una tras otra para un solo día por lo que solo le quedaba hacer una sola cosa, la cual si le preguntaban más adelante lo negaría “Él era Severus Snape y no hacia eso”, Severus solo se desmayó al no saber cómo lidiar en esos momentos con tantos descubrimientos, sorprendiendo a todos los presentes que no esperaban dicha reacción.
Y como siempre el primero en hablar fue Sirius, tratando de bromear luego de ver tal espectáculo y así tratar de aligerar el ambiente, uno no ve todos los días a un Severus Snape desmayado. - Creo que lo rompieron, no debieron decirle todo de una vez y eso que aún falta más. - Dijo Sirius distraídamente como si no lo tomara enserio. Al oír lo dicho por su hermano Regulus se enfadó por lo cual como casi siempre pasaba comenzaron a discutir.
- ¿Lo rompimos?, no habrás sido tú al transformarte enfrente de él, cuando aún no sabía de tu existencia. - Sirius solo agito un poco su mano cómo sino fuera de importancia, para luego responder a su hermano.
- Qué más da que me mostrara luego de la sorpresa que se llevó al ver la cama, mi presencia comparado con eso era insignificante, debía aprovechar ese momento para mi beneficio, quizás así se olvidaba que todo este tiempo su supuesta mascota era yo y no estaría tan enojado con mi engaño. - Regulus no podía creer lo que oía su hermano lo había hecho agrede, solo para su beneficio este no cambiaba más, Regulus se preparaba para responderle a su hermano cuando oyeron un pequeña risa proveniente de Harry, quien reía por todo lo sucedido. - ¿Por qué ríes bambi?. - Pregunto Sirius.
- Porque jamás imagine que llegaría el día que vería al más temido profesor de Hogwarts desmayarse. ¿Crees Siri que estaría mal tomarle unas fotos antes de que despierte?, solo para recordar este momento o quizás para futuros chantajes, uno nunca sabe si lo podríamos necesitar en un futuro. Dijo Harry a Sirius para al final de lo dicho inclinar su cabeza hacia un lado inocentemente luego de preguntar lo de la fotografía. Lo único que pudo pensar Sirius al escuchar y ver a su ahijado es que no era mala idea lo de la fotografía él quería unas cuantas para su colección, además Harry era tan lindo y malvado al mismo tiempo en esos momentos “oh James estaría tan orgulloso de él si lo viera”, pero a la vez quien no se desmayaría luego de ver que su mascota era uno de sus némesis y que el otro se encontraba tendido en la cama.
Continuara...
“En algún sitio algo increíble espera ser descubierto.”(Carl Sagan).
“Lo inevitable rara vez sucede, es lo inesperado lo que suele ocurrir.”(John Maynard Keynes).