-Llegas tarde.-
Pero Minho sólo metió su mano al saco que llevaba puesto, tomó el puñado de billetes sujetos con una liga de hule para sacarlos y lanzárselos al pecho, a Taemin.
Quien sólo exhaló el humo del cigarrillo que estaba fumando.
Sentado sobre el escritorio observó a Minho, su cabello largo y levemente ondulado estaba un poco mojado, seguro era sudor. Su labios parecían secos y en general, su traje seguía mirándolo pulcro.
-Creí que traerías más dinero.- dijo Taemin antes de darle una calada más a su cigarrillo.
-Es todo.- contestó Minho sin perder su postura erguida. –No tengo por qué quedarme con tu dinero.-
-¿Sabes qué sería gracioso?- preguntó Taemin bajando del escritorio para tomar los billetes.
-Qué.-
-Que toda la escuela se enterara de esto.- contestó reteniendo el cigarrillo en sus labios mientras contaba el dinero.
-¿De que eres gay?-
-De que eres mi esclavo sexual.- corrigió Taemin sonriendo. –Porque allá afuera creen que es al revés.-
-Sólo toma el dinero.-
-Espero que no te hayan dejado muy cansado, porque hoy en la noche también trabajas.- Taemin tomó la carpeta que revisaba antes de que el mayor entrara para tendérsela. –Es otra que podrás levantar muy fácil.- Minho tomó la carpeta para abrirla.
-Es un hombre.- dijo mientras veía las múltiples fotografías de ese chico.
-Mientras tengan ganas dinero, ¿cuál es la diferencia?- preguntó Taemin riendo, girándose sobre sus talones para mirar a Minho. –¿O tienes algún problema?- lo miró expectante, aunque sabía de antemano la respuesta.
-No.-
-¿Sabes?- preguntó Taemin sonriendo. -Hoy lo hiciste de maravilla, es más de lo que esperé pudieras conseguir. Además sé que no tuvo que ser fácil, venir hasta aquí con el sabor de esas en tu boca.- dejó su cigarrillo en el cenicero para caminar hacia Minho, tomarle por el cabello de la nuca tirando ligeramente de él para hacerlo mirar al techo. –Y como me siento muy bien te besaré.- susurró antes de tomar posesión de los labios de Minho.
Un beso rudo y amargo, con sabor a tabaco.
Sentía los labios de Taemin rozarse con los suyos, igual que sus lenguas creando pequeñas fricciones hasta que el menor tomó el labio inferior de Minho al separarse, tirando ligeramente de él.
-Para dar un mejor servicio y cobrar más tienes que saber besar.- dijo Taemin limpiando la comisura de su labio con el dorso de su mano. –Yo lo haría mejor que tú.- presumió orgulloso.
-Taemin, yo jamás seré tan puta como tú.-de repente el rostro de Minho estaba ligeramente inclinado hacia la derecha y el puño de Taemin en la misma dirección.
-Lo siento.- se disculpó. -Pude haber usado mejor esos dos segundos insultando a la zorra de tu madre.- dijo Taemin mirando Minho, sonriéndole levemente.
-No la llames así que también es tu madre.- contestó el mayor, aun sin tocar su mejilla que ya se estaba poniéndolo levemente rojiza.
-Eso sólo confirma mi tesis.- contestó Taemin volviendo a tomar su cigarrillo. –Porque no somos del mismo padre.-