UNA NUEVA GENERACIÓN parte 1
—Corre—
—Que no te alcance—
—respira, estas cerca, solo unos paso más, solo eso—
—Debes ser más rápido—
—Más fuerte, todos cuentan contigo para cuidarlo—
—Ellos cuentan con nosotros —
— ¿Algún día estaremos en paz?—
—Los odio con cada gota de mi sangre y haré todo lo posible para verlos llorar la misma —
— ¿Por qué debemos pelear para tener un pedazo de pan?
—Solo quiero paz, es tanto pedir—
—Si alguien en el cielo escucha ese ruego, solo deseo libertad—
— ¿Pudieron llegar todos, nadie se quedó atrás? —preguntó una preocupada Alex, viendo desde el balcón la muralla dónde un grupo de jóvenes salieron para buscar comida como único cómplice la oscuridad de la noche, sus orejas como nariz olfateaban al igual escuchaban todo su alrededor esperando cualquier situación.
—todavía no mi señora, pero debe tranquilizarse verá que pronto estarán aquí dando su aporte —contesto un anciano Inu al igual que su líder no podía estar tranquilo y más si se trataba de un grupo especial como el que estaba afuera buscando algo de comida.
—Sabia que era muy jóvenes para salir de la muralla, al menos debí ir yo con ellos por si las cosas se hubieran puesto peligrosas —contestó la híbrida, mordiendo su dedo tratando de no perder la compostura pero ella sólo estaría tranquila hasta que ese grupo estuviera seguro en su hogar.
—La gran Alex desconfías de las capacidades de sus discípulos —menciono arrogantemente un neko de peaje negro con la punta de la cola de blanco, al escucharlo la mencionada solo saco a relucir sus colmillos como erizarse su pelaje señal que estaba a punto de pelear con ese gato de su misma edad y al igual que ella el otro estaba preocupado por los adolescentes del escuadrón de búsqueda.
—Te voy a demostrar mis capacidades de pelea ahora —habló García con la guardia en alto pero al ver la preocupación en los ojos del gato supo qué estaba en las mismas solo guardo la calma.
—Yo sé de tus grandes capacidades, y sé que debo confiar en tu entrenamiento con ellos...pero Alex mi hijo, la razón de mi vida está con tus hijos los cuales tu también estas preocupada por su seguridad, lo único que nos queda es esperar pero es tan difícil de estar tranquilo cuando todos los que estamos reunidos conocemos ese mundo en donde nuestros hijos se están moviendo ahora —explicó el gato sentándose para que los presentes solo les quedo esperar.
EN OTRO LUGAR
Un grupo de jóvenes se movían con total sigilo tratando que el rumbo de sus pensamientos no fuera un impedimento al realizar su misión pero podía sentir la adrenalina recorrer sus cuerpos al ser su primera vez en salir detrás de la muralla que dividía el territorio Híbrido del resto de la humanidad.
Los líderes del escuadrón eran cinco que por sus habilidades están dónde estaban, eran lo mejor en la rebelión no sólo por su astucia, intelecto, perseverancia, dedicación, fuerza como una belleza tanto física como internamente sino por su inteligencia como don. 3 neko o gatos, 2 inu o perros como eran conocidos en la actualidad.
Primer líder: un neko alfa de cabellera rojiza, complexión alta y musculosa, ojos del mismo color que su cabello al igual que sus orejas y cola característicos de un gato y líder del escuadrón de ataque, siendo un joven de 19 años con un carácter agresivo, uno de los cuatro hijos adoptivos de Alex García; pero al igual que sus hermanos alfas sobreprotegían al único omega que tenia de hermano. Por eso y más habilidades Kagami Taiga era líder de su grupo.
Segundo líder: es un neko alfa de cabellos negros brillante que cubre su ojo izquierdo, como un lunar debajo del ojo derecho, sus ojos de color azul plateado, al igual que su hermano adoptivo Taiga es alto como musculoso como sus orejas y cola de gatos y líder del escuadrón de estrategia como ataque informativo, siendo de un carácter tranquilo pero peligroso si se le busca, teniendo 19 años Himuro Tatsuya solo tenía un pequeño defecto era un pervertido de primera y le encantaba disfrutar de los placeres de la cama con cualquier omega o beta que se le permitiera, pero jamás permitiría que alguien igual a él se acercará a su hermano menor.
Aunque por el momento se estaba reformando para poder conquistar al gato omega que le roba hasta el sueño pero por sus antecedentes Shun Izuki, un omega de cabellera negra, piel blanca y unos ojos que la misma noche envidiaría, teniendo una gran visión al igual que el quinto líder del grupo, teniendo el puesto de segundo al mando, un carácter tranquilo, entusiasta, al igual que un sello único por su manera de hablar y expresarse.
Izuki al sentir la mirada de Himuro solo trato de aparentar que no le afectaba sus sentidos el alfa, pero disimuladamente se ponía detrás de su líder para evitar mostrar sus mejillas ruborizadas, siendo el único testigo del comportamiento de ese par de enamorados la luna.
Saliendo de su pequeño letargo ambos rebeldes pusieron atención al entrar el quinto líder seguido de los últimos dos que con su mirada sabia que pronto iba a iniciar su primera misión y no debían fallar en ella.
Quinto líder: neko Un neko omega de cabello negro, orejas y cola de pelaje negro con las puntas de color blanco, ojos de color, pero blanca, con una figura estilizada, largas piernas y líder del escuadrón de observación por su gran capacidad de ver todo a su alrededor sin perder ningún detalle de la misma, actitud relajada, divertida, optimista, bromista a sus 17 años Takao Kazunari era uno de los prodigios de la rebelión junto a sus mejores amigos aunque los alfas del grupo de líderes fueran un poco sobreprotectores con los dos únicos omegas del mismo.
Cuarto líder: El único Inu alfa del grupo de líderes siendo el más alto, fuerte de cabellera morada al igual que sus ojos, orejas y cola algo esponjosas de pelaje morado un poco más fuerte que su cabello y ojos; respetado cómo algo temido en su hogar por su fuerza y no por nada era el jefe en el área de fuerza cómo defensa de la rebelión la única debilidad del tercer hijo adoptivo de Alex eran los dulces siendo fiel adicto a todo lo que tuviera dulce pero si alguien intentaba quitarle o tan siquiera escóndelos sería aplastado por el gigante al igual siquiera intentarán tocar un solo mechón de cabello de su hermano menor. De carácter aburrido, relajado y muchas veces actuaba como un niño en cuerpo de adulto.
Tercer líder: último hijo adoptivo de Alex y sobreprotegidos por todos aunque el Inu omega de cabellos rubios, piel blanca, ojos dorados, orejas y cola esponjosa de color de sus ojos, demostrará sus capacidades como líder natural y siendo el único capaz de copiar otros dones a la perfección y hacerlas mucho más fuerte, aunque siempre mostrará una gran sonrisa que ocultaba el dolor de ver a su pueblo privado de la libertad. Kise Ryota a sus 17 años era el sol de sus hermanos como esperanza de un mundo mejor.
—Todos están listos —hablo serio Taiga pasándole al grupo sus gorros pasamontañas, todos vestidos de negro asintieron para ver el mapa.
—Grupo uno: conformado por los líderes Himuro y Takao irán por él ala este del palacio para buscar medicamentos —hablo un subordinado, viendo como los mencionados asintieron tomando uno de los mapas con su grupo se dirigió a la bodega donde reguardaban los medicamentos que los ayudarían a pasar una temporada en su pequeño hospital.
—Grupo dos: conformado por el líder Taiga se encargara de buscar libros, como material químico para nuestros laboratorios —informó otro, observando a su líder prepararse para entrar y lo más seguro también buscaría armamento para poder defenderse por si algo sucedieran mal en su misión.
—Grupo tres: lo conformamos Murasakibaracchi y yo, nos encargaremos en buscar la comida y largarnos de aquí —dijo Kise, dejando relucir sus ojos dorados, para que todos asintieran recorrieron el castillo, si bien pudieron ir a la ciudad, él había decidido dar su primer golpe en ese lugar no solo porque esa gente rica que se encerraba en sus injustas leyes hacia ellos eran los que mejor vivían, entonces era justo que ellos dieran algo para la causa, Ryota podía ser dulce, tranquilo pero sobre todo bueno pero lo que nadie podía discutir que al igual que su madre era un espíritu libre, rebelde, un gran guerrero.
Porque cada hibrido había aprendido a defenderse por si algo salía mal ya que los humanos entraban a cazarlos como si fueran simples trofeos para venderlos al mejor postor. Por eso ese grupo iba a luchar con todo lo que tenían para crear una mejor muralla, una en la que los pequeños cachorros pudieran ser libres y sin temer en que cualquier momento entrarían a su territorio para arrancarlos del seguro seno del hogar, mintiendo descaradamente que ellos habían decidido ser esclavos y acatar las leyes en ser solo unos simples juguetes.
Con la noche como su cómplice, el grupo se interno dentro del castillo con un solo propósito y era llevar las provisiones, medicamentos como materiales para su uso diario.
CON EL GRUPO UNO
Tanto Shun como Takao con su visión trataban de buscar cualquier alarma, sabiendo que en donde iba a ser los alimentos como medicamentos estaba bien protegido con lo último en seguridad.
—Tatsuya-chan, deja de comerte con la mirada a Shun-chan —susurro Takao, viendo como su amigo solo le jaloneo un poco su mejilla para al verificar que habían desconectado cualquier alarma se dividieron ya que el lugar era enorme, Takao con una sonrisa noto como Himuro tomando la mano de Shun se dirigieron en una dirección dejándolo solo pero sabiendo del poco tiempo se encamino a su destino.
—Pero yo no tengo la culpa, es que esos pantalones le enmarca tan bien, el trasero de Izuki y yo no puedo negarme a darme una probadita —contesto él del lunar observando el pantalón negro que entallaba las caderas como trasero de los omegas.
En el ambiente se podía sentir la tranquilidad del lugar, pero no por ello Takao bajaría la guardia, quitándose el gorro pasamontaña, dejando ver sus orejas las cuales estaban tensas, evitando bajar la guardia.
Al acabar con su misión el líder estaba a punto de salir hasta que sus orejas quedándose quietas como paradas, haciendo que sus demás sentidos se agudizaran al sentir un intruso detrás de él rápidamente saco una daga para poder defenderse su mirada plateada solo estaba alerta por cualquier ataque…
SEGUNDO GRUPO
Taiga desde que entró en ese pasillo podía sentir una mirada detrás suyo, voltio varias veces como agudizo todos sus sentidos pero ninguno le indicaba alguien aparte de su grupo que lo siguiera, enojado por su actitud solo se saco sus ideas de ser vigilado para empezar con su misión.
Con una enorme sonrisa al ver lleno varios sacos colocándolos detrás de su espalda se dirigía al punto de encuentro.
— ¡Alerta de intrusos!—
— ¡Alerta de intrusos!—
— ¡Alerta de intrusos!—
Taiga solo se tenso al escuchar la alarma anunciar su presencia en el lugar sacando a relucir sus dientes dispuesto a pelear, hasta salir del castillo con la menor baja posible como reunirse con los demás líderes. Pero especialmente con su hermano omega.
—Atsushi, Ryota, Tatsuya, Kazunari contesto, maldición conteste, debemos salir de aquí —ordenó Kagami, escuchando detrás de la líneas forcejeos indicando que todos ellos estaban peleando con algo o alguien.
—Tranquilo Taiga-chan, ya estamos en eso —contestó Takao tratando de esquivar a su cazador y este por la oscuridad no mostraba su identidad pero para Kazunari se debía tratar de un soldado por sus habilidades en lucha.
—Estamos cerca del lugar para escapar, hermano —habló rápidamente Himuro, viendo que a su lado estaba Shun que colocaba algunas trampas rápidas para atrasar a sus enemigos.
—Solo voy aplastar algunos Taiga-chin —hablo aburrido Murasakibara, bostezando un poco pero estaba molesto de haber bajado la guardia por unos dulces.
Cuatro de los cinco líderes se había reportando, esperaron unos segundos más pero en la línea no contestaba Ryota.
— ¿Atsushi y Kise donde esta? —preguntó Taiga corriendo hasta que se topo en un pasillo sin salida su mirada rojiza buscaba alguna salida sintiendo los paso de sus perseguidores pero lo que realmente lo tenía preocupado era no recibir información del paradero del rubio omega.
Estaba seguro que una vez que en su cuadro de visión aparecieran sus enemigos, el lucharía sin compasión porque su prioridad era encontrar a Ryota.
— Ven, sígueme por favor, te ayudare a salir del palacio…—
CONTINUARA…