Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

"Me perdiste y ahora soy feliz sin ti." por Makaxd-

[Reviews - 126]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola, actualizo ahora porque hubieron dos personitas que quería que actualizara más seguido así que les traigo el capítulo 13 que espero que les guste y muchas gracias por sus comentarios!!!


Nos vemos en las notas finales. 

Una semana ha transcurrido desde el regreso de Demian a Italia. Desde que su padre le informo que se tenía que casar, el pelinegro no ha querido ir a la casa de él, evitando todo contacto con su supuesta familia.


En todo ese tiempo se ha estado hospedando en la residencia de Carlos; en compañía de su amigo Dylan, que hace tres días su salud ha decaído, llegando al extremo de desmayarse.


-Ya te dije que estoy bien Demian, solo fue un simple mareo- dice el castaño sentado en la cama que compartía con su pareja Mateo.


-Sí, no me digas- dice con ironía el pelinegro- ayer te desmayaste cuando estábamos en el jardín Dylan. No le quise decir a Mateo porque tú me lo pediste, pero hoy se lo diré si o si


-¿Decirme que cosa?- El oji verde estaba apoyado en el lumbral de la puerta mirando interrogante al pelinegro.


-De algo sin importancia Mateo- decía el castaño nervioso.


-A mí la cara de Demian me dice lo contrario- dice caminando hasta nosotros.


La habitación se llenó de un silencio que ninguno de los presente quiso romper. El pelinegro esperaba que su amigo le dijera lo que realmente le pasaba, pero en ningún momento mostro indicios de querer hablar, así que decidió ser el que le contaría todo al de ojos esmeralda.  


-Por lo visto no se lo quieres decir- suspira el pelinegro mira directamente a los ojos verdosos de Mateo- Desde que llegamos a Venecia la salud de Dylan ha decaído. Ha estado con vómitos, mareos y ayer se desmayó en el jardín.


-Es por eso que hace en días que actúas extraño. ¿Por qué no me lo dijiste?- le pregunta el oji verde a su pareja.


-No quería preocuparte y ser una molestia para ti- dice apenado el castaño.


-No eres una molestia para mí y es obvio que me preocupo por ti- el oji verde abraza protectoramente al castaño.


-Yo sugiero que lo lleves a un hospital- le comenta el oji azul.


-Eso es lo que voy hacer; así que Dylan arréglate que nos iremos al hospital. Iré a preparar el auto- Mateo se separa del castaño, yéndose de la habitación dejando solos a Demian y Dylan


-Bueno, es mejor que yo también me valla.


-Ahora te vas y me dejas solo maldito


-Tengo algunas cosas que hacer, además no estarás solo pronto Mateo llegara hacerte compañía, y no quiero tocar el violín- se dirige a la puerta del cuarto- adiós, llámame cuando te digan que tienes.


-Está bien.


Demian~


Estaba caminando solo por un parque que estaba cerca del centro comercial; observaba distraídamente a las parejas que estaban tomadas de las manos demostrándose el afecto que sentían el uno al otro. Me siento en unas de las bancas del lugar sin darme cuenta de la persona que estaba al lado mío.


-Hola- dice el extraño. Volteo a verle, llevándome una grata sorpresa.


-Hola- le respondo tajante.


-Sí que has cambiado Demian- dice mirándolo de reojo


-Ahora no me llamas rata, ¿será por qué estoy comprometido con tu hermano Joseph?- le encaro


-No es por eso- suspira- Me di cuenta de los errores que cometí en el pasado y quería pedirte perdón. Sé que estuvo mal lo que te hice, pero era tan inmaduro en ese tiempo.


-Me sorprende que el gran Joseph pida perdón, lo encuentro tan irónico. No espera, acaso tus amigos deben de estar escondidos grabando todo lo que conversamos.


-Estoy solo en estos momentos. Al parecer no me crees que haya cambiado.


-Así es. ¿A qué se debe tu supuesto cambio?


-Después de que los chicos te… golpearan. Me fui a mi casa sintiéndome culpable por lo que provoque. Al día siguiente quería disculparme contigo, ya que lo que te hice estuvo mal; pero cuando llego al colegio, los chicos estaban mostrando la grabación a todos, y eso que les pedí que no lo hicieran. Te busque por todo el recinto, pero no te encontré. Los días pasaron y no asistías a clases, después de un tiempo me entere que te cambiaste de colegio


-¿Acaso la culpa no te dejaba dormir? Jaja que patético. Enserio no creo ninguna palabra de lo que me dices. Es mejor que me vaya, siento que alguien arruino mi tarde.


-Está bien que no me creas, estas en todo tu derecho. Solo quiero decirte que tengas cuidado con mi hermanastro. Puede que creas que él es una buena persona, pero estas equivocado- se levanta y me mira para decirme- Antonio es peor que yo- se da la vuelta y empieza a caminar.


-Eso fue extraño- digo, para luego dirigirme a la residencia de Carlos


Carlos~


Me encontraba en mi despacho leyendo algos documentos que mi padre me dio. En eso tocan la puerta pidiendo permiso para entrar a lo que yo accedo. Por la puerta ingresa un hombre de unos 24 años vestido de ropa militar, dándome cuenta enseguida de quien es esa persona.


-William ¿qué te trae por aquí?


-Estoy aquí por la información que querías- me extiende una carpeta negra- te llevaras una sorpresa cuando leas su contenido, tiene mucho que ver con tu pareja- le miro extrañado y sin perder el tiempo me dispongo a leer la información que está en la carpeta.


Tal como dijo William, la información que tenía en mis manos me dejo sorprendido. No podía creer que la ambición de mi “suegra” llegara a tan lejos.


-Lo que puede ser el dinero. Transforma a las personas en unas hienas- digo aun con la vista en los papeles


-¿Qué harás? Sé que no te quedaras con los brazos cruzados.


-Quería que me investigaras a Antonio Giordano, pero con la información que me acabas de dar ahora no va hacer necesario- sonrió con maldad- con que el amante de mi suegra, eso sí que no me lo esperaba. Voy a tener que modificar un poco mis planes y para eso tú me ayudaras.


-¿En qué te ayudo?


-En esto…


Estuvimos hablando un largo rato hasta que se nos hizo tarde. William se retiró dejándome solo con una sonrisa retorcida, que se me borro enseguida cuando cierto azabache entra a mi despacho.


-Hola… ¿Qué haces?- pregunta curioso el pelinegro.


-Hola amor, estoy revisando algunas cosas sin importancia- guardo la carpeta en unos de los cajones, para luego levantarme de mi asiento y acercarme al oji azul- y a ti ¿Qué te trae por aquí?


-Pues, estaba aburrido. Dylan aun no llega con Mateo del hospital, y me siento algo solo.


-Perdóname por dejarte solo- le abrazo- ¿vamos a la habitación?


-Si tú quieres- sonríe coqueto.


Cuarto~


Los dos amantes estaban en la cama abrazados y besándose  como si no hubiera un mañana, pero por la falta de aire se tuvieron que separar. Azul oscuro con azul cielo se miraban con un deseo indescriptible.


-Me encanta el sabor de tus labios- susurra con voz ronca de lujuria en el oído del pelinegro


-Y a mí… esos ojos que me miras con tanto amor- le dice el pelinegro mirándole fijamente.


-Te amo tanto- dice mientras le saca la camiseta al azabache


-Al igual que yo a ti- empieza a desabrochar tímidamente la camisa del pelirrojo.


De un momento a otro las ropas de vestir se hallaban por todo el piso de la habitación. El pelirrojo y el azabache solo tenían sus ropas interior que cubrían sus partes íntimas.


Carlos lamia y succionaba los pezones rosados del pelinegro dejándoles erectos, provocándole placer a Demian que jadeaba y gemía por las atenciones que le daba su pareja


-Ngh no ah aguanto más- decía el azabache extasiado.


-¿Qué es lo que quieres?- pregunta el pelirrojo mientras que masajeaba el miembro del pelinegro por encima de la ropa interior.


-D-deja de jugar y ngh hazlo de una vez- le susurra en el oído.


-Como tú quieras- el pelirrojo retira la última prenda que portaba el azabache- que excitado estas, bebe


-No es j-justo que sea el único q-que esté completamente desnudo- hace un adorable puchero el pelinegro.


-Que atrevido estas, pequeño- suelta una risita- si tanto quieres verme desnudo. Entonces… ¿por qué no me desnudas tú mismo?


“no sería capaz de hacerlo; me da mucha vergüenza, pero él siempre lo hace por mí…” esos eran los pensamientos del pelinegro. Juntando todo el valor que tenía, empuja suavemente al pelirrojo así cambiando de posiciones quedando él arriba del cabello rojizo, dejando sorprendido a su pareja.


Con los nervios y la vergüenza latentes, el pelinegro baja lentamente por el cuerpo del mayor hasta quedar de frente al prominente miembro de Carlos.


-No tienes que esforzarte


-Quiero hacerlo, así que déjame intentarlo- Suspira resignado el pelirrojo


-Por lo menos déjame ayudarle- el azabache asiente con un movimiento de cabeza.


La ropa interior color negro de apoco se deslizaba por las caderas del pelirrojo, empezándose a mostrar el ya excitado falo de su amante. Una vez retirada la prenda, Demian no dejaba de ver el duro miembro de Carlos “no puedo creer que eso caiga en mi interior”. De pronto se le vino una idea en la mente, dejando mucho más sorprendido a su pareja.


-Espera mmg… no hagas eso- decía el pelirrojo tratando de detener al azabache, que ni caso le hacia


Con una mano el pelinegro masajeaba el falo de su amante y con la otra le acariciaba los testículos. Dejando de lado toda inseguridad, acerca sus labios a la punta del miembro probando el pre-semen de Carlos. “Es salado y un poco dulce”. Con más valentía, ingresa todo lo que podía el miembro a su cavidad bucal, escuchando un gruñido por parte del pelirrojo. Empieza a subir y a bajar, succionando el miembro que cada vez votaba más pre-semen salado.


A la vista de Carlos, el azabache se veía adorable intentando de tragar por completo su miembro. Con todo el autocontrol que poseía, se controlaba para no envestir esa cálida boquita que rodeaba su prominente miembro. Cuando ya no podía aguantar más el placer, aleja de inmediato a su pequeño antes de que se viniera en la boca de este.


-¿Lo hice mal?- pregunta apenado el azabache


-Lo hiciste perfecto que si seguías así, me podría haberme corrido y eso lo quiero hacer dentro tuyo- le dice jadeante- ahora ven, siéntate en mis caderas.


El pelinegro acata la petición del pelirrojo sentándose en sus caderas, quedando el miembro de su amante tocando su trasero.


Carlos se lleva tres de sus dedos a su boca ensalivándolos para así preparar la entrada del menor. Una vez listo dirige los dedos a la entrada, ingresando un dedo en ella.


-Ngh ah a-apúrate- decía un azabache extasiado.


-Te tengo que preparar bien, no quiero hacerte daño- le susurra. Ingresa su segundo dedo, haciendo un movimiento de tijeras para expandir la abertura; para luego ingresar su tercer dedo dando movimientos de envestidas.


Ya estando lo considerable dilatada, retira sus dedos para colocar su miembro en la entrada ingresando lentamente en el interior del menor.


-Ah! Dios- el pelinegro se aferraba al cuello del mayor.


-Relájate un poco… estas muy apretado- decía el pelirrojo mientras abrazaba por la cintura a su pequeño.


Estuvieron unos minutos quietos hasta que las lentas estocadas se hicieron presentes. Los dos jadeaban y gemía uno más que el otro, las envestidas se hicieron más fuertes. El pelinegro saltaba en la pelvis del pelirrojo, y este le agarraba morbosamente las nalgas. El clímax estaba por llegar tan solo faltaba unas cuantas envestidas y al fin se correrían.


El primero en venirse fue el azabache manchando el formado abdomen del mayor, luego con dos envestidas más el pelirrojo se vino en el interior del menor. Los dos amantes caen rendidos en la cama jadeando y sudados. Tanto fue el placer que sentían los dos que se olvidaron de un pequeño detalle… y era que no se protegieron.


Una vez normalizado la respiración, Carlos sale del interior del pelinegro; arropándolo con las sabanas de la cama el cuerpo ya dormido de su amante.  Abraza por la cintura a su pareja atrayéndolo a su cuerpo.


-Nadie te alejara de mi- dice en voz baja el pelirrojo, para luego besar la blanca y suave piel del hombro de su pequeño; quedándose a los minutos después dormido.  

Notas finales:

¿Les gusto? ¿Qué será lo que tiene planeado hacer Carlos? ¿Creen que Joseph haya cambiado? ¿Qué tendrá Dylan? Déjenme sus comentarios que yo se los responderé y nos vemos el domingo byee~


 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).