En el campo de entrenamiento n°7 de Konoha.
Un pelinegro está apoyado en la baranda de un puente mientras larga un suspiro y mira su reflejo en el agua.
¿Desde cuándo? Se pregunta ¿Desde cuándo empecé a fingir? ¿Hace cuánto que le vengo mintiendo a mi corazón? Sus ojos se fijan en el cielo limpio, sin rastro de nubes dando tranquilidad y paz al que lo vea igual que sus ojos…
El azabache vuelve a suspirar observa el bosque tal vez este sea mi castigo por todo lo que hice, tanto dolor y sufrimiento causado a las personas, a mi familia a…él. Cierra sus ojos tratando de desaparecer esos recuerdos dolorosos del pasado cuando siente algo cálido abrazándolo de la cintura, este se voltea y baja su cabeza encontrándose con una mata de cabellera rubia muy familiar.
-¿Bolt por qué…?-pregunto el mayor.
-Sasuke-sensei tenía de nuevo esa mirada-el joven afianza el agarre de forma posesiva mientras aun oculta su rostro en la espalda del mayor.
-¿Esa mirada?-observa al joven tratando de entender sus palabras.
-La mirada que tiene…al recordar al tonto de mí padre-ahora el rubio menor lo ve a los ojos frunciendo el ceño pero aun así notándose la preocupación que trasmitía en estos.
-Bolt…ya hablamos de esto- soltándose lentamente del agarre del menor, para luego arrodillarse hasta llegar a sus ojos- No debes enojarte con tu padre, él no tiene la culpa de nada.
-¡Si la tiene! ¡Tú eras su lazo más fuerte! ¡Tú eras su todo y te dejo de lado! ¡Ni siquiera se preguntó en donde estuviste luego de que se casara con mamá o lo que sentiste cuando te pidió ser su padrino en su boda! O también cua…-un dedo del mayor fue posado en los labios del niño indicándole que guardara silencio.
-Y jamás lo sabrá, Bolt él ya tiene una vida junto con tú madre y tu hermana. No lo culpes, no hizo nada malo-decía con voz tranquila.
-¡Claro que hizo algo malo! te volvió infeliz…Él te dejo a merced de los sabios de la aldea. Y créeme que si ellos no te hubiesen exigido ir a esa misión seguro hubieras tenido tu final feliz con mi padre aclarándole tus sentimientos y demostrando lo que valían-grito colérico el menor, en su mundo de niño se supone que las personas que han sacrificado y hecho actos heroicos deben tener su final feliz. ¿Dónde está el final feliz de su sensei? Todo es culpa del viejo pensaba enojado Bolt.
-Pero si no hubiese hecho eso tú no hubieras nacido, ni tu hermana o Sarada. A veces de los errores pueden surgir cosas buenos-sonrío Sasuke mientras revolvía la cabellera rubia de su alumno entretanto Bolt se sonrojaba levemente por aquel el contacto – Venga, será mejor que empecemos el entrenamiento, sé que en poco tiempo podrás hacer el Chidori.
-Hn está bien-aun con el sonrojo mira fijamente a su sensei- Sa..sasuke- sen…sei –tartamudea pero no desvía sus ojos de mayor.
-¿Mm? ¿Qué pasa Bolt?- su mano aún está apoyada en la cabeza del menor.
El rubio menor armándose de valor se inclina hasta estar centímetros del rostro del azabache.
-¿Qué estas…- pero fue interrumpido al sentir una leve presión apoyada en sus labios.
El ojinegro abrió los ojos como plato mientras su rostro se pintaba de carmín. No lograba razonar estaba en shock al sentir esos pequeños labios dulces que trasmitían cariño a su persona. Entretanto Bolt al notar que no era rechazo hizo un poco más de presión. Su corazón latía rápidamente mientras sentía los labios de su sensei. Su primer beso era con el rival de su padre y estos eran agradables al tacto como si estuviesen hechos de seda.
El inocente beso duro unos segundos más hasta que el joven se separó buscando oxígeno. Bolt estaba rojo por haber dado su primer beso, en cambio Sasuke se sentía avergonzado por haber disfrutado de esa pequeña muestra de cariño de parte de su alumno.
Estuvieron un buen rato en silencio, mirándose fijamente hasta que Sasuke soltó un suspiro y decidió romper el ambiente.
-Bolt yo no…-
-No, Sasuke-sensei –interrumpió - Usted me gusta, es más lo amo –el azabache se sonroja por la declaración del menor-y quisiera ser digno para tener su corazón-baja la cabeza -…pero eso lo obtuvo mi padre hace bastante tiempo y a pesar de no saber que lo tiene, a pesar de que le duela-lo mira a fijamente con los ojos acuosos- es feliz aunque sea viéndolo a lo lejos ¿cierto?- El azabache tan solo le sonríe con tristeza mientras asiente con la cabeza- Me gustaría ser el único que le produzca alegría-susurra el menor abrazando a su maestro del cual este le corresponde.
-Hay veces que quisiera seguir adelante pero mi corazón se detuvo por él hace mucho tiempo-se deshace del abrazo y lo mira a los ojos- Yo amo a tu padre Bolt, él es el único que ha logrado hacer latir de nuevo mi corazón después de estar tanto tiempo en la oscuridad, pueda que no lo entiendas ahora pero cuando crezcas sabrás que lo único que deseas es la felicidad del que amas a pesar que al final tu no estés en sus planes –le sonríe levemente-Bolt tu aun tienes tiempo de seguir adelante y buscar a ese alguien que te corresponda, no hagas como yo que decidió esperar a pesar de que jamás habrá nada- le revuelve el cabello-eres un buen chico, lograras grandes cosas y una de esas será el superar a tu padre.
-¿En serio lo cree Sasuke-sensei?-
-Si-
-Bueno, igualmente lo seguiré queriendo ¡y lo protegeré de todos!-dice en voz alta y muy animado
-Solo podrás protegerme si me superase- sonríe de lado.
-Y lo are ¡dattebasa!-salta decidido
-Bien, ahora si empecemos con el entrenamiento- empieza a caminar al campo.
-¡Si sensei!- lo sigue a la par
El dúo, maestro y alumno siguieron su camino sin darse cuenta que detrás de ellos los veía a escondida un adulto de rubia cabellera y ojos azules. Los había estado espiando desde que el mayor esperaba en el puente. Lo único que atino a preguntarse Naruto luego de lo toda esa conversación fue ¿Sasuke me ama?...