De pronto un sonido le hizo abrir los ojos de una manera brusca, al darse cuenta se había quedado dormido en aquella silla y su café ahora se encontraba frio. El actual Piru que ahora prefería llamarse Perú y dentro de un nombre humano Miguel se levantó de aquella silla para caminar hacia la puerta, que era de donde se escuchaba aquel sonido.
-Llevo más de una hora tratando de entrar hermano, por esta clase de cosas es que te pido que me des una llave-Resoplo molesto un moreno bajo de ojos marrones quien entro a la casa junto con una llama- Cool llama no ha comido nada al igual que yo-
-Perdona Julio me había quedado dormido y ..-sonrió nostálgico al ver como su hermano menor Bolivia había crecido tanto-Mejor me cambio rápido y te preparo algo-
-Al fin-el menor sonrió satisfecho ya que le encantaba la comida que hacia su hermano.
Fue hacia su habitación y se vistió rápidamente para llegar a la cocina. Cuando se disponía a hacer un pequeño desayuno su celular comenzó a sonar una y otra vez.
-Ese celular tuyo molesta hermano-
-Seguro con anuncios, mira mis mensajes quieres bro- Sonrió Miguel a Julio-Ya sabes la clave del celular-
Julio le devolvió la sonrisa en modo de complicidad e ingreso al celular y lo que vio lo hizo enojar…
-¡Te sigues texteando con el!-
-¿Qué?- Cuestiono Miguel para luego ser sorprendido por el nombre que aparecía en la pantalla-Antonio..-
-No otra vez hermano- Apretando sus puños tiro el celular del peruano a un lado y dejando la comida a medio preparar lo tomo de los hombros-Juro que hoy cambiaremos de ambiente
-Espera..¿qué? Bro tengo que terminar la comida y…-Pero sin ser escuchado Julio ya estaba saliendo y al parecer se disponía a llamar a alguien.
-¿Hola? Si soy yo..ajam..Llevare a mi hermano, esta será una de las pocas oportunidades que te daré así que aprovéchala-Y con ese corto mensaje colgó aquel desconocido numero –Hora de salir brother-
El de ojos dorados totalmente desconcertado por lo rápido que actuaba su hermano, simplemente lo siguió mientras estaba atontado por las acciones y todo lo que tenía en mente ¿Por qué Antonio le mandaría un mensaje? ¿Y qué habría contenido aquel mensaje? Todo aquello lo atormentaba y no le hicieron dar cuenta de que había llegado hasta un malecón en el cual había alguien esperándolos…
-Vamos Miguel-Julio saco a su hermano del auto en el que extrañamente había subido- Te dejo en manos de “la tortuga” –Dejo a su hermano en frente al contrario y antes de retirarse grito- ¡Más vale que pase algo!-
-¿Pero qué?- Perú salió de aquel enredo de pensamientos de tenia y se percató de quien estaba en frente de él. Era un hombre de alto un poco más alta que la suya, piel tostada, ojos color marrón claro que hacían destacar aquella dulce sonrisa que siempre lo caracterizaba.
-Cuanto tiempo Migue..-Sonrió el ecuatoriano
-Francisco..- Y al decir aquel nombre pequeñas lagrimas salieron de sus ojos al recordar aquel otro Francisco de sus sueños, el español de alguna vez lo salvo de joven- Perdona es solo que recordé a alguien-
-¿Estas bien?-El ecuatoriano se acercó para limpiar las lágrimas del rostro del peruano -¿Te quién te acordaste?-
-Son cosas del pasado..antes de conocerte-
-A mí me gustaría escuchar, tenemos mucho tiempo-Le sonrió con dulzura
-Bueno él era…-Así mientras caminaban por aquel malecón Perú le contaba todo lo que había vivido junto con su hermano Bolivia antes de conocer a Ecuador. Le conto cada detalle y cada sentimiento que había vivido.
Contarle todo aquello a Francisco..o mejor dicho Ecuador, había ayudo al peruano a quitarse un gran peso de los hombros.
O al menos eso creía.