Kise Ryota un joven de 17 años, de tez blanca y pelo rubio con ojos dorado pero similares a la miel. Conocido como la “copia perfecta” integrante de la kiseki no sedai y actual jugador del instituto Kaijo, famosos por ser un reconocido modelo juvenil y poseer un temperamento alegre pero siempre competitivo. Se encontraba en una de las peores situaciones que jamás haya vivido; sin entender como fue golpeado brutalmente y utilizado como colchón por lo que al principio creyó podían ser unas locas fanáticas suya pero para su sorpresa el causante de su caída fueron dos niños que surgieron de la nada y cayeron sobre él. Kise lo primero que pensó es que su carrera de basquetbolista terminaría por que dudaba mucho no tener mas de un hueso roto, también pensaba que hasta su carrera de modelo corría peligro por que dudaba mucho no haber quedado con algunos rasguños y moretones en su rostro. Aun con toda molestia y emociones confusas se levanto lentamente para ver si aquellos niños estaban bien y aun mas para saber de dónde habían aparecido pues claramente esto no era normal para él quien estaba seguro que nadie arroja a niños por la calle.
Lo primero que sintió al levantarse fue un terrible dolor de espalda y luego unos brazos pequeños brazos que lo rodeaban y lloraban sin control ocultando su rostro en su abdomen. Era una niña peliroja que lloraba al mismo tiempo que hablaba a gran velocidad provocando que el rubio no entendiera nada y se quedara perplejo más aun cuando el otro niño también se aferro a él; pero a diferencia de la niña era un niño de pelo y ojos violetas, Kise llego a creer que ese chiquillo podía pasar como la copia de Murasakibara en miniatura aunque su pelo era corto.
-Esto…he…ustedes… ¿Están bien?-Kise confundido no sabía ni que decir, nadie le enseño que hacer en caso como estos.
-Tio, tio…. Había…un remolino….y yo no pude alcanzar a mi hermano…y luego…. Y luego…todo se puso negro…tuve mucho miedo….y…- El pobre rubio no entendía nada de lo que la niña decía, puesto que aun no se despegaba de él y aun más no dejaba de llorar. Y para el colmo lo estaba confundiendo con otra persona por que estaba seguro que sus hermanas no tenían hijos, el no era tío de nadie.
-Oye tranquila, ya todo estará bien…si ya no llores… yo te llevare con tus padre solo díganme sus nombre- Kise creyó haber dominado la situación cuando ambos niños pararon sus llanto pero fue todo lo contrario solo provoco que lloraran mas fuerte gritándole enojados.
-No es gracioso tío se-chin llévame con papa, tu sabes quienes somos.- dijo el niño de pelo violeta.
-¡Es verdad, es verdad! Eres malo tío Ryota , ya no te tratare como mi tío si me haces burla…!llévame con otousan!...Por favor…- La niña comenzó a desesperase y daba de golpes a Kise con su manos, el pelirubio se sintió muy culpable nunca antes había hecho llorar a un niña pequeña; pero nada pudo hacer ni decir ya que de repente ambos niños cayeron inconscientes.
El pánico se apodero de Ryota quien solo se concentro en llamar un taxi y dirigirse al hospital, aun no tenía claro que hacer pero sin duda ayudaría a estos niños, aunque solo no podría y tampoco podía recurrir a sus sempai ya que hoy se había escapado de la practica estarían molesto, solo conocía alguien con recursos ilimitados para ayudarlo su ex capitán, Akashi Seijuro.
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Kagami Taiga de 17 años, ojos y pelo color rojo intenso es la actual estrella del equipo de Seirin y la luz de Kuroko Tetsuya un joven de 17 años, conocido como el jugador fantasma integrante de la kiseki no sedai y actual jugador de Seirin. Ambos jóvenes regresaban del Maiji burge cuando escucharon gritos de auxilio y para espanto de ellos provenían de un poste de luz en donde una niña rubia de tez blanca y ojos azules, se aferraba con todas sus fuerza para no caer y lloraba descontroladamente.
-Ha esto…esto… ¡No te preocupes te salvaremos! Llamaremos a alguien no mejor yo…yo…- Kagami al ver a la niña reacciona de forma exagerada y nervoso, por lo que habla de manera apresurada hasta que Kuroko lo golpea en la costilla para que se calme.
-Kagami-kun asustaras más a la niña. Si observas con intención no está muy alto de hecho tú la puedes atrapar sin problemas- Kuroko a pensar que también estaba asombrado trato de analizar la situación y logro notar que la niña no estaba a un gran altura pero si muy asustada aunque no se imaginaba una forma posible para que ella hubiera llegado hasta ahí.
-Tíos Kagamicchi son ustedes… gracias al cielo no saben lo asustada que estuve y…todo lo que paso…Por favor ayúdenme… aun tengo miedo- Ante las palabras de la niña tanto Kuroko como Kagamine se quedaron callados sin saber que responder, puesto que la niña hablaba como si los conociera o al menos a kagami pero este estaba seguro que nunca la había visto. Además ninguno pudo ignorar la extaña forma en que lo llamo viniendo a su mente la imagen de la única persona que hablaba así Kise Ryota.
-Kagami-kun-dijo kuroko quien volvió a la realidad y dejo sus dudas para después tratar de sacar de su confusión a Kagami.
-Kagami-kun tienes que ayudarla a bajar no es momento apara dudas después aclararemos todo- El peli celeste volvió a llamar al pelirrojo que al fin le hizo caso.
-¿He?... si es verdad. Escúchame por favor, salta con toda confianza te atrapare sin problemas-Kagami recupero la compostura y se coloco en la posición adecuada para atrapar a la niña que aun se veía indecisa de saltar- Te juro por mi vida que te atrapare tu solo salta y todo estará bien.
La niña finalmente confía en Kagami y salta desde el poste hacia sus brazos siendo atrapada sin problema para luego comenzar a llorar de nuevo contando cosas que ni kagami ni Kuroko entendía y que tampoco podían preguntar por qué la niña de la nada se durmió.
-¿Oye Kuroko es normal que duerma así?- Le pregunto Kagami al Peli celeste mientras observaba de cerca a la niña.
-No lo creo Kagami-kun será mejor llevarla a un hospital- Kuroko también se preocupo por la niña y quería asegurarse que se encontrara bien.
-Kuroko tienes alguna idea de cómo contactar a sus padres ya demás bueno creo que me confundió pero su forma de hablar pues…- Kagami no sabía cómo decir todo lo que cruzaba por su cabeza ya que de por si estaba hecha un lio.
-No lo sé Kagami-kun pero se quien nos puede ayudar y con lo otro pronto lo averiguaremos ahora vayamos rápido- Kuroko junto con kagami se fueron en taxi, de camino al hospital Kuroko mandaba mensaje a la única persona capaz de ayudarlo en esta situación o al menos para obtener información sobre la niña, y ese era Akashi Seijuro solo rogaba internamente que no estuviera ocupado.
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Akashi Seijuro un joven de 17 años de ojos y pelo rojo, de tez blanca y personalizada tranquila aunque durante mucho tiempo poseía una doble personalidad controladora y psicótica que ahora solo se presenta en casos extremo. Ex capitán de La kiseki no sedai y actual del equipo de Rakuzen. Acostumbrado y criado en las clases alta de Japón se encontraba viajando de imprevisto a Tokyo.
Akashi por primera vez en mucho tiempo se siente perdido, hace una horas tan solo encontró en uno de los arboles de su jardín un joven chico de pelo celeste y ojos rojo que al intentar bajarse se resbalo y cayo, por suerte Seijuro llego atraparlo y la caída no paso a mayores pero el niño parecía soñoliento y confundido.
-¿Tío Akashi…eres tú?- El niño en brazos de Seijuro lo miraba mientras le hablaba; pero el pelirrojo no respondió a causa del asombro.
-Soy Akashi Seijuro pero dime ¿estás herido?- Akashi pensó que el chico podría estar confundiéndolo y además en su mente habían surgido todo tipo de dudas e incertidumbres pero prefirió ignorarlas por el momento- ¿puedes decirme tu nombre?
-¿Que dices tío? Tú me conoces soy Toranosuke Kagami… por favor ayúdame me separe del resto y perdí a mi hermana- Luego de eso Toranosuke se desmayo y seijuro aunque aturdido en su interior por las palabras del chico, llamo rápidamente a sus empleado para que lo ayuden y sin más se dirigió al hospital.
Ahora Seijuro seguía viajando camino al hospital ante la opinión de un medico local de que no era nada serio decidió irse a Tokyo no solamente para a tender al chico allí, sino para hablara con Kagami taiga después de todo tenían al mismo apellido lo lógico era pensar que eran familiares aunque muy en el fondo Akashi tenía otra idea pero era imposible y se negaba a retomar con esa locura que tomaba mas forma a medida que recibía los distinto mensaje de sus amigo: Kise,Midorima,Kuroko y hasta Murasakibara y en todo ellos había relación con algún niño. Seijuro tenía un presentimiento y sin más les ordeno a todos ir al mismo hospital aunque seguramente se sorprendería al encontrarse en una situación similar; siguiendo su corazonada también le envió la orden a Aomine, si este llegara a pasar por algo similar su teoría cobraría más fuerza.
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En una pequeña habitación modesta un joven chico de pelo castaño recobraba poco a poco la conciencia, lo primero que noto fue que no reconocía el lugar lo segundo fue entender que seguramente se había desvanecido en la calle y algún extraño lo había ayudado. Intento levantarse de la cama en donde estaba tapado y con un trapo frio en la cabeza pero no pudo aun estaba muy cansado. En eso escuche que alguien entraba en la habitación.
-Que bueno ya despertarte ¿Cómo te sientes? …por favor no te asuste te encontré en la callea dos casas de aquí y te traje a mi casa va la casa de mi abuela que ahora es mía…es una larga historia- El niño quedo perplejo de la impresión sin duda debía saber que algo así podía pasarle pero eso no evito que su mente se nublara, mientras el joven castaño frente a él se ponía nervioso por el silencio creyó que tal vez había asustado al chico.
-He… mi nombre es Furiahata Kouki voy al instituto seirin y tengo 17 años… es tu eres Toshio Akashi ¿verdad? Es que vi entre tus bolsillos por favor no te lo tomes a mal buscaba algún numero al que llamar; Se que no me incube pero eres familiar de Akashi Seijuro verdad es que tiene el mismo apellido y te pareces bastante… yo lo conozco de vista y un compañero mío llamado Kuroko es su amigo si quieres puedo contactarlo para que te comuniques con él.-A pesar de que Kouki seguía hablando e intestaba hacer sentir cómodo a Toshio este no se quedaba más que con la vista fija e impresionado; hasta que finalmente hablo reaccionando en sí.
-Muchas… mucha gracias por todo…si soy Akashi Toshio es un placer conocerte-Toshio no sabía qué hacer no podía reverla quien era no quería espantar a kouki, sumado a que el mismo estaba impresionado jamás pensó vivir algo así, por ahora solo se concentraría en buscar a sus amigos sin levantar muchas sospechas por lo cual mentiría de quien era realmente aunque por su semejanzas era imposible negar que era familiar de Seijuro- Si soy familiar se Seijuro…el…es…es…mi medio hermano.
-Oh ya veo, si son muy parecido, pero dime ¿te sientes bien? ¿A quién quieres que llame? O ¿tal vez quieras comer algo primero?, lo que tu prefiera para mí no es molestia- Toshio sentía mucho sueño así que por ahora no tendría más opción que quedarse solo esperaba no provocar problemas futuros; luego trataría de buscar a sus amigos o escapara por que claramente no podría quedarse mucho tiempo con Furihata.
-Si no te molesta quisiera descansar un poco estoy muy cansado yo más tarde llamare para que me vengan a buscar-Toshio mistión pero esperaba que Kouki l e creyera.
-Entonces descansa yo cocinare algo para cuando despiertes comas, aunque no soy el mejor cocinero te aseguro que sabe bien- Furihata le sonrió al pequeño mientras lo dejaba solo en la habitación, sin duda para él fue un asombro ver un niño inconsciente en la calle pero ahora estaba más tranquilo al saber que estaba bien, la verdad es que al castaño le agradan mucho los niños pero no tenia hermanos pequeños aunque si uno mayor.
Al llegar a la cocina Kouki no pudo evitar pensar lo irresponsable que era Akashi Seijuro al dejar solo a su pequeño hermano, si bien no conocía bien al pelirrojo más que de vista y uno que otro cruce entre partidos y pocas ocasiones nunca le pareció alguien irresponsable sino todo lo contrario. Finalmente Furihata decidió que luego de cocinar llamaría a Kuroko para contactar con Seijuro.