CAPITULO 13. DESAPARECIDO
12:00 pm
El cielo se habia ya oscuresido, la lluvia no dejaba de caer con intensidad.
Ritsu sentia las gotas caer sobre cara.
Abria los ojos poco a poco muy aturdido, sentia unas enormes manos sujetandole.
Dirigio su mirada alrededor sin reconocer nada, solo veia oscuridad y las ramas de arboles, se sentia mareado preguntandose donde estaba.
Su ropa estaba completamente empapada por la lluvia, pero mas que nada se sentia muy cansado y mareado.
Creyo que era a causa de su aturdimiento o imaginacion, pero podria jurar que pudo ver las enormes figuras de unos lobos, incluso pudo ver la grande figura de quien fuera que los sostenia en brazos, solo que acusa de la oscuridad no pudo verle el rostro ni edintificar con exactitud, lo unico que si pudo ver de esa criatura fue unos castaños ojos que volteron a verle con curiosidad sin malas intensiones.
El pelicastaño no sabia que era lo que pasaba, pero se sentia muy cansado y con mucho sueño, que no pudo evitar perder de nuevo el conocimiento, no sin antes escuchar la gruesa voz de aquel extraño ser.
-No se preocupe...pronto estara en casa y asalvo-
* ~ * ~ *
Mientras que en el departamente de Onodera.
Takano estaba muy alterado.
Se habia despertado al escuchar un fuerte ruido justo al lado.
Rapidamente retiro las sabanas, levantandose corriendo para salir e ir al apartamento de su amado, presintiendo que algo no estaba bien.
Al salir vio que la puerta estaba abierta.
Sin pensarlo 2 veces entro llamando al ojiverde, sin obtener respuesta alguna, cosa que aumento mas su preocupacion, ni se molesto en encender las luces unicamente le preocupaba saber donde estaba Ritsu, lo volvio a llamar sin ser respondido, definitamente algo no estaba bien.
Al antrar al cuarto del castaño descubrio que las sabanas estaban movidas, pero no habia rastro del ojiverde.
Lo llamo de nuevo una y otra vez, hasta que llamo a las autoridades.
La policia Uchiha habia llegado en custiendo de minutos.
Obito intenta hacer que el editor se tranquilizara y le explicara que fue lo que sucedio.
Pero Takano estaba muy alterado, llorando rogaba una y otra vez que encontraran a Onodera.
* ~ * ~ *
En otro lugar lejano.
Ritsu se frotaba los ojos sentia la cabeza dandole vueltas.
Se encotraba acostado en una viejo y degastado colchon.
Con la mano en la cabeza se incorporo despacio y poco a poco, ya que con se barriguita le costaba ya que no queria lastimar a su bebe.
Observo con cuidado el sitio, no reconocio nada era evidente que estaba en un cuarto oscuro todo estaba destrozado, las paredes caidas, la madera podrida todo estaba cubierto de tierra y polvo, pero por alguna razon sentia que esa habitacion le encontraba un tanto acogedora apesar del lamentable estado en el que estaba.
De pronto la puerta se abrio.
El ojiverde se fue a arrinconar a la pared, temeroso de lo que le fuera a pasar, no sabia por que razon pasaba todo eso ni por que razon es que fue secuestrado.
Una enorme criatura entro a la habitacion, traia sujeta en sus gruezas y grandes manos una chalora con comida, sus ropas estaban ragadas y rotas, podia ver que tenia una que otra cicatriz en su rostro tenia la cabeza rapada y ojos marrones.
Ritsu dedujo que era algun tipo de ogro y sintio miedo al ver que esa criatura se acercaba a el.
-Comida...-dijo el ogro dejando la charola sobre la cama frente al castaño.
Pero Ritsu no se movio de donde estaba, tenia demaciado miedo.
-Comida...-repitio acercandole la charola.
Nego con la cabeza.
-Comida...para bebe-
Los ojos verdes de Onodera se abrieron de la sorpresa.
-Comida...-insistio el ogro acercando una vez mas la charola.
En ese instante se vio la sombra de alguien mas entrando.
-Edward...puedes retirarte-hablo una gruesa y suave voz masculina.
Le enorme ser agacho la cabeza, mirando una vez mas el pelicastaño antes de retirarse del lugar.
Ritsu vio atravez de esos ojos castaños claros inocencia y bondad, ni una pizca de maldad persivio en ningun momento.
Edward atraveso el humbral de la puerta desapareciendo de su vista.
-Onodera Ritsu, es un gusto el conocerte-dijo el hombre sentandose en el colchon.
-Quien es usted y como es que sabe mi nombre?!-cuestiono Onodera asustado.
-Mi nombre ya lo sabra a su devido tiempo...-
-¿Por que estoy en este lugar?-
-Eso tambien lo sabra a su tiempo...por lo pronto debe saber que usted se quedara a vivir aqui desde ahora en adelante-
-Que dice?!, esta usted loco, me secuestra y espera que yo me quede aqui!!-
-No tiene opcion señor Onodera, en la posicion en la que se encuentra no tiene alternativa-
-No entiendo por que esta haciendo esto...yo no lo conozco yo tengo una vida tengo familia-
-De que vida me esta hablando?, que yo sepa usted ya no tiene familia, su gente a decidido darle la espalda y si no me equivoco su amante lo abandono-
Esas palabras hicieron que Ritsu agachara la cabeza.
-Lo ve!, no tiene a nadie mas aquien recurrir, creame cuando le digo que usted va a estar mejor aqui!-sentencio levantandose caminando a la puerta.
-Espere...solo digame en donde estoy?...al menos merezco saber eso si voy a quedarme aqui?!-
-El unico nombre que puedo darle de este sitio es...la Ciudad Perdida-
Sin decir nada mas aquel hombre salio del cuarto dejando solo a Ritsu.
Continuara...