El sonido del aletear de un dragón se escuchaba al igual que su sonoro rugido en los cielos de lo que antes fuera el clan de las Nubes Acidas
Un jinete moreno junto con un pequeño grupo de dragones, no mayor a 4, exploraban todo aquel territorio en busca de algún rastro de vida
Al llegar se dieron cuenta de la gran masacre que se había suscitado en aquel lugar, pero aun el moreno tenía la esperanza de que hubiera algún sobreviviente, entre ellos que estuvieran Saralegui y Ziome
- ´´Mi señor`` – llamo uno de los dragones al moreno captando su atención – ´´no puedo percibir ningún aroma de seres vivos en kilómetros``
- Revisa nuevamente – dijo Yuuri señalando con su dedo un antiguo camino de tierra olvidado – tienen que haber vida en estas tierras, no pueden haber desaparecido de esa manera
- ´´Mi señor `` – esta vez llamo un dragón más antiguo al moreno – ´´he detectado la presencia de cuatro seres vivos al norte de este territorio``
- ¿tan solo cuatro? – pregunto el moreno cuestionando la ausencia de hombre en aquel lugar
- ´´siento a dos mujeres, un hombre y…….`` – el dragón antiguo al posar su vista en la otra persona no quiso decir quién era por temor a ser castigado, por lo que lo intento cambiar el tema rápidamente – ´´me pareció sentir solo a cuatro pero al parecer son cinco seres mi señor``
Yuuri al escuchar lo que le informo el antiguo dragón se dirigió rápidamente a ese lugar, mientras era seguido por los demás dragones, para inspeccionar aquel lugar que había mencionado el dragón antiguo
Media hora después habían logrado alcanzar al grupo de cinco personas, y grata fue la sorpresa del moreno al ver a Saralegui sobre los hombros de su hermana Haru
- ¡¡hermana!! – llamo el moreno bajando rápidamente del dragón al estar cerca del suelo – ¡¡¿Dónde se había metido?!!
- Yuuri – sonrió tenuemente la mujer al verlo en ese lugar – he tenido muchos asuntos que atender, no puedo decirte nada más que ello
- Entiendo – refunfuño el moreno sin estar contento con la respuesta de la mujer – ¿Qué paso con Sara?
El moreno se había dado cuenta de que el rubio platinado estaba inconsciente y también lo estaba Ziome sobre la espalda de Aik
- ¿Qué sucedió? – pregunto Yuuri al ver la gravedad del daño en el cuerpo de ambos – hermana, ¿Qué diablos está pasando?
El moreno ya no podía seguir ignorando la situación, esto era demasiado, ya que no habían muchos seres que pudieran oponerse a la fuerza de Saralegui y Ziome, los únicos que podrían hacer que su amigo cayera deberían de ser increíblemente, no monstruosamente fuertes, no serían humanos
Si fuera alguien que pudiera hacerlo tendría que ser igual de mousntrosa que su hermana Haru, quien ahora tenía que darle muchas explicaciones le gustase o no
- Sabes que no voy a dejar que te salgas con la tuya Hermana – se plantó firme Yuuri frente a la mujer – ¿Qué está sucediendo?
- Mi querido hermano – comenzó a hablar la mujer mientras miraba como los dragones tenían la cabeza inclinada mostrándole sus respetos – ¿nuestro clan ha sobrevivido?
Pregunto la mujer viendo las heridas en los cuerpos de los dragones y sintiendo como el cuerpo comenzaba a pesarle menos cada cierto tiempo
- ¿Cuántos han muerto? – volvió a interrogar la mujer al moreno el cual sintió como su pecho se oprimía por la culpa y el remordimiento – ¿Cuántos clanes han perecido?
- Son…….fueron….
Era doloroso, no podía decirlo, no a su hermana, no podía decirle a la Magnel de Kuroame que su amado pueblo ya casi se encontraba al borde de la extinción
- Yuuri – llamo la mujer – ahora no es momento de darte ninguna explicación, tampoco tengo de obligación de hacerlo
Haru se mostró fría ante el moreno que sintió como un balde de agua fría le callera encima, la mujer al verlo en ese estado cerro los ojos se dio la vuelta y llamo a uno de los dragones para que este los dejara subir en su espalda
- Ahora mismo mi único motivo para vivir es mi sangre y mi gente – dijo la mujer mientras subía al lomo del animal junto con el cuerpo de Saralegui – al único que le debo explicaciones es a este niño que tengo en brazos, tu solo céntrate en proteger a tu familia y sobrevivir todo esto, ya que no eres parte del pueblo de Kuroame, te quito tu derecho de sangre Yuuri
Esa fue puñalada en el pecho del moreno, aunque ciertamente comprendía todo aquello, al final esa tierra ya no podría ser su hogar nunca mas
- Regresemos, el ejercito de ambos ha sido aniquilado – le dijo Haru al moreno, y levantando una mano dio orden a los dragones de levantar vuelo – Kuroame aún no ha caído, tenemos que proteger a los pocos que quedan
- Entiendo hermana…
Ni bien se encontraron a buena altura los dragones, en los cuales también iban montadas Aik y aquella deidad junto con Ziome, se dirigían nuevamente hacia las tierras del castillo de Kuroame
Yuuri iba detrás de ellos pensando en la actitud de su hermana, y también en el estado de Saralegui como de Ziome, pero lo que más le preocupaba en ese momento era que ya no tenían más apoyo, todo el ejército de ambos había sido aniquilado
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- Mi señora Rosmare – llamaba un sirviente a la pelirroja que abría los ojos con calma – ¿puede oírme mi señora Rosmare?
La niña al tener más control de su visión y al reaccionar su cuerpo, giro su cabeza y vio que a su lado un joven la llamaba
Cuando volvió a girar su cabeza también vio como unos pasos más allá, se encontraban dos mujeres soldados del clan Vitalicia haciendo guardia
Al verlas recordó que Ziome la había salvado, pero después de ello no podía recordar nada más, pero aun así se sintió tranquila al ver a los soldados de su prometida con ella, seguramente el joven sirviente también era de Vitalicia
- Mi señora Rosmare – volvió a llamar el joven sirviente – ¿puede mover el cuerpo?
La niña negó con la cabeza, aun cuando había recuperado su movilidad apenas si podía hablar, su cuerpo se encontraba demasiado lastimado como para moverse adecuadamente, además de que ya casi no tenía sangre en las venas, hacer un movimiento seguramente le costaría caro
- Ket – llamo una de las mujeres soldado al joven sirviente – aun nos siguen, tenemos que movernos
- Entiendo – respondió el joven sirviente, para cargar luego con cuidado a Rosmare sobre su espalda
- Ket tendrás que correr – dijo la otra soldado mientras cargaba con las pocas provisiones que aun tenían – ¿podrás seguirnos el paso?
Pregunto la mujer al joven sirviente viendo que aquellas cosas se acercaban cada vez más, no tenían más opción que correr sin descanso hasta la ciudad de Kuroame sin parar a descansar
- Son más de 5 días hasta el castillo – comentaba la soldado al joven sirviente – si te detienes, te dejaremos atrás y nos llevaremos a las señora
- Puedo con el recorrido – afirmo el joven sirviente mientras comenzaba a correr – no voy a parar
- Entendido – dijeron ambas soldados mientras corrían detrás de Ket asegurándose de que ninguna de aquellas criaturas se acercara a su señora, no hasta ponerla a salvo y entregársela a su líder Ziome
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KUROAME
Habían pasado más de tres días desde que Yuuri y Haru partieran desde el clan de Nubes Acidas hasta el castillo, con la velocidad de los dragones los mencionados ya se encontraban cerca del mismo, estos ya podían ver las puertas
- Asegurar bien las cuerdas, reforzad el muro oeste, cargad de nuevo las armas del muro central, no dejen que esas plagas se adentren al castillo
En medio del castillo se encontraba Anissina dando órdenes a los soldados y voluntarios que se encargaban de defender el castillo, mientras que Rena lideraba a los dragones y jinetes, la castaña hacia todo lo posible por mantener las puertas norte y este protegidas, mientras que la pelirroja se encargaba de las puertas centrales y los muros del oeste
Mientras que los muros del este eran defendidos por Moumo, el jefe de los soldados del castillo, el cual había llegado dos días atrás junto con lo que quedaba del clan Agua de Fuego
Mientras ellos protegían el castillo, dentro Wolfram y Ken hacían cuanto podían para salvar a los últimos heridos que habían llegado con Moumo, muchos murieron irremediablemente pero eso era todo lo que podían hacer con la poca ayuda que tenían, además de que el cansancio cobraba factura en el cuerpo de los sanadores
- ¿puedo ayudar en algo? – pregunta Mest al ver como los sanadores apenas y se mantenían en pie
- Necesitamos algunos vendajes e hilos para suturar heridas – dijo uno de los aprendices que presentaba unas ojeras horribles debajo de los ojos – también algo de agua para beber
- Vuelvo enseguida – salió corriendo Mest, se apresuró a encontrar lo pedido y regreso rápidamente a donde estaba el aprendiz – aquí tienes
- Bien…..gracias…. – dijo el joven para adentrarse nuevamente en su labor de curar a los heridos, mientras que Mest salió chispando de aquel lugar para ir en busca de una nueva tarea
- ¡¡Mest!! – llamo Wolfram al verle corriendo de un lado para otro cargando a su bebe en su pecho y mantas en una mano
- ¿Qué pasa pequeño Wolfram? – Mest se acercó hasta el rubio que de igual manera se veía horrible, tenía ojeras y bolsas en los ojos por falta de sueño, su ropa estaba manchada con sangre y su hermosa cabellera se encontraba en un estado peor
- Te dije que tenías que descansar – dijo el rubio mientras le quitaba las mantas de la mano de su amigo – acabas de tener a un bebe tu herida aun no cierra
- Lo mismo va para ti – reprocho rápidamente Mest a su amigo – tu estas embarazado deberías de descansar también, pero sé que es imposible en esta situación
Ahora necesitamos de todos para sobreponernos, tus conocimientos médicos son necesarios por ello no te detengo, pero también es necesario que ayude, no voy a quedarme sin hacer nada
El rubio no pudo darle la contra a su amigo, y solo vio como las mantas de sus manos eran arrebatadas por Mest, el cual se fue corriendo a ayudar a quien lo necesitase
Eso deprimió un poco a Wolfram, pero al ver como su amigo tenía que agacharse para preguntar en que podía ayudar, puesto que este era más grande de lo normal, le causo gracia, ya que los demás no paraban de verlo asombrados por su estructura y poniéndose nerviosos de vez en vez
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Mientras en las puertas principales, un gran grupo de atacantes se aglomeraba intentando entrar en el castillo a la fuerza
Los soldados del mismo con las pocas fuerzas que aún les quedaban evitaban que estos seres avanzaran y los mantenían a raya con las armas que había creado Anissina
Mas el cansancio y la falta de descanso creo una abertura, la cual fue aprovechada por los atacantes siendo sobrepasados los soldados
En la puerta se escuchaban gritos de los hombres siendo devorados, se vio como la puerta comenzaba quebrarse y a caerse, en ese punto lo único que podía hacer Anissina era destruir el lugar junto con los hombres y los atacantes para impedir que se adentraran aún más en el lugar
Más eso no fue necesario
Al mirar hacia la puerta la pelirroja vio como los atacantes se daban vuelta y se abalanzaban contra alguien, a sus ojos se mostraba una mujer morena de ojos fríos que comenzaba a deshacerse de esos seres
A su lado también podía observar a Yuuri quien daba apoyo a la mujer, mientras esta se enfrentaba cuerpo a cuerpo al enemigo destruyéndolo rápidamente
Eso dio la oportunidad a Anissina de reagrupar a los solados y reforzar nuevamente la puerta
Al terminar de reparar los daños Anissina se dio cuenta de que en el lugar ya no había ningún atacante, todos habían sido eliminados con rapidez y eficacia, por lo que dejaron las puertas abiertas para que la mujer y Yuuri pasaran
Cuando ambos estuvieron dentro cerraron las puertas, la mujer levanto una mano e hiso una señal y a los pocos segundos bajaron del cielo los dragones que se había llevado el moreno
Al aterrizar estos los soldados horrorizados se dieron cuenta de que su Magnel se encontraba seriamente lastimado al igual que la líder Ziome
Rápidamente llamaron al jefe sanador de Vitalicia el cual se encargó de la curación de ambos, el corazón de Yuuri no podía estar más agitado que nunca
- Yuuri necesito que vengas conmigo – jalo Anissina al moreno llevándoselo junto con ella sin esperar su consentimiento
- Haru está peor de lo que imagine – hablo Aik mirando el estado de aquel lugar – me conforta saber que tome la decisión correcta al aislar mis tierras
- Ciertamente acertaste en tu decisión Aik – comentaba la mujer mientras se adentraba al castillo en dirección a donde trataban a Saralegui
Cuando entro al lugar vio a todos los heridos y decidió ir a donde se encontraba los dos que había salvado
En el lugar vio como atendían a Saralegui, inspecciono cada corte y sutura que realizaban en el cuerpo del rubio platinado, en cuanto terminaron con su curación rápidamente siguieron con el de Ziome bajo la supervisión de la mujer
Al terminar de curarla también, la mujer pidió que mantuvieran a ambos lejos de los demás, los sanadores obedecieron sin rechistar
Luego de eso la mujer fue en busca de Mest, cuando le encontró le llevo lejos de todos para que pudieran hablar sin interrupciones
Cuando estuvieron solos, la mujer invito a Mest a que se sentara luego ella se sentó de igual manera y comenzó a hablar
- Felicidades por tu bebe – felicito la mujer al ver al niño que tenia en brazos el cual dormía profundamente – es un bebe muy saludable
- Gracias Haru – Mest comenzó a acariciar el rostro del recién nacido con una sonrisa – me pregunto si este bebe podrá vivir una vida diferente a la mia
- Mest no puedo asegurarte eso – dijo la mujer mirando sus propias manos, como si estas tuvieran algo en ellas – pero si puedo asegurarte que una vez que termine todo lo que empezamos el podrá vivir
- Ya veo – dijo Mest mientras miraba el rostro dormido del bebe – ¿Sara está bien?
- Como te lo prometí está a salvo – dijo la mujer ahora levantando sus manos al cielo y tapando el sol con ellas – pero no te puedo prometer que podre salvar a los demás
- Está bien – dijo Mest levantándose – tú has cumplido por eso cumpliré también
- Gracias Mest – agradeció la mujer mientras bajaba ambas manos y las ponía sobre sus ojos
- Gracias a ti Haru – se despidió Mest de la mujer mientras se perdía en los pasillos del castillo
- Bien ahora del jaque mate – Haru se levantó y se dirigió hacia las puertas dimensionales del castillo
Al estar frente a ellas comenzó a abrirlas, cuando estuvieron estables vio como del otro lado salían más de 5 personas, las cuales se reunían a su alrededor
- Partirán enseguida – ordeno la mujer a los presentes – vamos a destruir este mundo
Los presentes al escuchar esa orden rápidamente salieron del castillo y se dirigieron a su nuevo destino, mas Haru se quedó, aún tenía que dejar en castillo en buenas manos
- Llamen a quien esté a cargo – ordeno Haru a los soldados que obedecieron inmediatamente
Después de un tiempo volvieron junto con Moumo el cual mostraba sus respetos a la mujer
- Mi señora es un placer tenerla de vuelta con nosotros – saludaba el hombre a Haru quien se acercó a él y lo envolvió en un abrazo
- Seas bienvenido de nuevo a mis alas querido hijo – dijo la mujer acariciando al hombre como una madre a su hijo – te encomiendo la protección de este castillo junto con la de mis hijos, protégelos hijo mío
- Así lo hare mi señora
Aquellas fueron las últimas palabras que le dedico Haru al hombre y después de soltarlo se dirigió hacia donde se encontraba Aik y la deidad de la desolación
- Es hora de partir Aik – dijo la mujer a lo que Aik la siguió sin decir nada, e igualmente lo hiso la deidad
Nadie cuestiono los motivos de la mujer, todos le tenían respeto y confiaban en ella, incluso Yuuri no pregunto absolutamente nada
Los presentes solo vieron como aquella mujer se montaba en el dragón más antiguo y partía junto con sus acompañantes nuevamente hacia la batalla
Horas después Saralegui recobro el conocimiento al igual que Ziome, ambos se levantaron y no esperaron a recuperarse por completo y se dirigieron hacia las murallas
Al estar en ellas vieron toda la destrucción del lugar, ambos se sintieron responsables por todo aquello
Mas no podían estar reprochándose y perder el tiempo, por lo que con la ayuda de Moumo retomaron el mando del castillo y lo defendieron, ellos creían en Haru
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- Totet Rotet – los llamaba una mujer mientras que estos la seguían sin rechistar – ¿Cómo va la situación en los clanes?
- Todos los clanes han sido invadidos y destruidos – respondieron ambos niños al mismo tiempo
- ¿Qué hay del clan Tempesta? – pregunto la mujer
- Todos los sobrevivientes han logrado llegar al castillo – dijeron mientras señalaban hacia donde se podía apreciar dicha estructura
- ¿se ha sabido algo del clan de Ana? – pregunto la mujer a los niños quienes se ponían a pensar
- Todo sus habitante han desaparecido, al igual que sus soldados y su líder – contestaron ambos – Ana sigue en paradero desconocido
- Comprendo – dijo la mujer cortándose un poco de su cabello – esto mantendrá nuestra presencia oculta, atárselo en sus muñecas
Ambos niños obedecieron y se las ataron
- ¿A dónde nos dirigimos Natlly? – preguntaron los niños al ver que se alejaban del castillo
- Al bosque de las almas – respondió la mujer – no podemos hacer esperar a aquella persona
Los niños no preguntaron nada más y siguieron a la mujer, mientras que ella seguía cortándose mechones de pelo para ocultar su rastro y presencia haciéndoles casi indetectables ante los enemigos
Cuando llegaron al bosque de las almas vieron que había una persona esperándoles en medio de las aguas del lago en donde descansaban su hermanos
- ¿eres Natlly? – pregunto quién les miraba con ojos serenos y hermosos
- En efecto – respondía la mujer – estos son Totet y Rotet
Los niños se acercaron y saludaron a aquella persona mostrándole sus respetos
- Entonces comenzaremos de inmediato – dijo aquella persona guiándolos hacia lo profundo del bosque, mientras cargaba algo en brazos
- ¿Qué es lo que sostiene con tanto cuidado? – pregunto Rotet al ver al bulto moverse
- Es mi bebe – dijo sonriente aquella persona – aún no tiene nombre fijo, lo decidiré cuando este de acuerdo con mi pareja
- ¿es madre? – pregunto esta vez Totet
- sipi – respondió aquella persona – y soy muy feliz de serlo
Los niños no preguntaron más, puesto que se le veía muy feliz
Cuando por fin llegaron a su destino aquella persona les invito a pasar a una especie de cascada, la cual era inmensa
Los tres entraron siguiéndola
Cuando estuvieron dentro vieron como pilares se levantaban alrededor de huesos y restos de animales, que aun estando putrefactos estos no emitían olores nauseabundos, aquella persona les guio hasta el centro del lugar y luego se sentó en medio de este
- Acérquense
Dijo aquella persona, a lo que los tres se acercaron hasta donde se encontraba
Esta les dijo que se sentaran rodeándola y asi lo hicieron
- Totet, Rotet necesito que creen una barrera alrededor mío – pidió aquella persona – por nada dejen que esta caiga, ¿entendieron?
Ambos niños asintieron e hicieron cuanto se les dijo, erigieron una gran barrare potente y se concentraron en mantenerla estable
- Natlly necesito que elimines la presencia de ustedes tres hasta que te diga lo contrario – dijo aquella persona, a lo que Natlly obedeció
Ella borro la presencia de los tres y se concentró en mantenerlos ocultos
Al poco rato, aquella persona comenzó a invocar a los seres antiquísimos de aquel lugar, los cuales acudieron a su llamado
- ¿Qué asuntos te traen de vuelta con nosotros? – preguntaron los seres
- He venido por lo aquello que siempre me perteneció – dijo aquella persona mientras que los seres la miraban como si estuvieran examinándole
- Te pertenece, puesto tu derecho heredado es – dijeron aquellos seres – se te será entregado entonces este
- Hare un buen uso de el – dijo aquella persona agradeciendo lo dado
- Así lo esperamos Mest
Dicho esto los seres desaparecieron y nuevamente se entregaron al descanso eterno
´´ábrete mundo, cierra llave
Congela fuego, quema agua
Extiéndete odio, extínganse sentimientos
Muerte dame la vida, vida niégame la muerte
Kuroame entrégate a mí, una vez más``
Dichas estas palabras el lugar comenzó a deformase, los pilares cambiaron de lugar, los restos tanto humanos como de bestias comenzaron a levantarse y caminar por todo el lugar
Este espectáculo ciertamente era desagradable
- Natlly – llamo Mest a la mujer que rápidamente presto atención – infórmale a Haru que las puertas están abiertas, tiene 113 horas, que no las desperdicie
La mujer obedeció y mediante un comunicador mental le informe de esto a Haru que junto con Aik y la deidad se encontraban en las puertas del refugio de los espectros y junto a ellos seguramente estarían aquellas criaturas