Una extraña brisa lo acariciaba mientras se resolvía al sentir esas gotitas de humedad golpeando suavemente en su mejilla, frunció el ceño por la molesta sensación y se acurrucó más en aquella agradable fuente de calor que lo envolvía, había un olor a hierba húmeda y tierra mojada a su alrededor, sabía que debía abrir los ojos ante esas extrañas fragancias pero prefería mantenerse como estaba y seguir aspirando el suave olor a brisa nocturna y chocolate que desprendía lo que fuera que había debajo de él.
Hubo una serie de ruiditos peculiares y Luhan de mala gana tuvo que abrir los ojos, había un pequeño objeto muy extraño frente a él a unos 47 cm de distancia, lo miró muy atentamente y ladeo su cabeza preguntándose que podía ser eso, un ruidito más y ese objeto comenzó a girar rápidamente comenzando a arrojar chorros de agua y sólo entonces Luhan se dio cuenta que estaban rodeados de aspersores.
-¡Sehun!-medio gritó incorporándose lo mejor que pudo mientras con sus manos intentaban inútilmente detener el agua que atacaba su cuerpo.
Sehun abrió los ojos de golpe al escuchar a Luhan llamarlo además de la sensación del agua por todo su cuerpo, se levantó tan rápidamente que su cabeza chocó con la de Luhan que se quejó, el agua no se detenía y entre eso además del golpe que se acababan de dar ninguno podía reaccionar a lo que estaba pasando, el primero en lograr reaccionar fue Sehun que se puso de pie rápidamente y tomó la mano de Luhan obligándolo a levantarse también.
Ambos corrieron fuera del lugar donde habían dormido sin dejar de ser atacados por los aspersores, Sehun comenzó a reír con ganas y Luhan término haciendo lo mismo mientras corrían hasta llegar al camino fuera de las áreas verdes.
Luhan llevó una de sus manos a su cuello sintiéndose aliviado al sentir su collar en su lugar, luego de la noche pasada sería muy cuidadoso con él, se miraron el uno al otro volviendo a reír con ganas, ambos estaban empapados además de manchados de lodo y con algo de pasto pegado a sus ropas.
-Supongo que dormir en el parque deja de ser buena idea cuando encienden los aspersores-bromeó Sehun y Luhan asintió todavía riendo.
-Creo que ahora sí debemos volver a casa-sugirió.
-Sí-asintió de acuerdo con él.
-Bueno, tú tendrás que ser el guía porque yo no tengo la más remota idea de donde estamos-Sehun sonrió nerviosamente entonces y Luhan tuvo un mal presentimiento.
-Veras...-comenzó-Yo poco tengo ni idea de donde estamos-confesó.
-¡¿Qué?!-exclamó alarmado.
-Lo siento-se disculpó rápidamente-Anoche solamente pensé que quería salir de ese lugar así que simplemente tomé tu mano y corrí tan lejos como quise hacerlo-explicó avergonzado.
Luhan lo miró seriamente pero término sonriendo, la verdad no le importaba porque hasta ese momento se estaba divirtiendo más de lo que alguna vez recordaba haberlo hecho además que mientras estuviera con el peli plata estaría bien.
-No estoy molesto-aseguró-Además, tenemos todo un fin de semana entero para encontrar el camino de vuelta-dijo haciendo sonreír.
-¡Que empiece la aventura entonces!-dijo un emocionado Sehun que volvió a tomar su mano para comenzar a caminar.
Ambos comenzaron a andar por un camino que desconocían por completo, seguían todos mojados y sucios por culpa del pasto y el lodo, las personas se quedaban mirándolos extraño lo cual hacia a Luhan sentirse nervioso e incómodo, a Sehun en cambio todo eso parecía darle igual y continuaba avanzando tranquilamente, era la primera vez que se perdía y era realmente emocionante para él.
-Sehun-llamó Luhan luego de un largo rato de andar sin rumbo.
-¿Qué pasa ratoncito?-preguntó girándose para verlo.
El rostro de Luhan se volvió rojo y su mirada se clavó en el suelo, Sehun seguía esperando que le hablara pero dudaba que algo saliera de su boca cuando se sentía tan avergonzado, que lo llamará de esa forma le gustaba tanto como lo hacía sonrojar.
-Q-quiero i-ir al ba-baño-tartamudeó despacio.
-Bueno...-Sehun miró a todos lados pero no había ninguno local ahí, solamente había casas, frunció el ceño ante el panorama hasta que una idea llegó a su mente-Tengo un plan-dijo antes de llevarlo hasta estar frente la puerta de una de las casas.
Luhan lo miró sin comprender hasta que el peli plata tocó el timbre, sus ojos se abrieron como platos y entonces intentó jalar a Sehun lejos de ahí para huir pero él no se movió y tan sólo lo miró confundido.
-¿Qué pasa?-preguntó confuso.
-No, ¿qué se supone que hacemos?-cuestionó nervioso.
-Le pediremos su baño a la persona que vive aquí-dijo como sí nada.
-N-no podemos hacer eso, va-vámonos por favor-suplicó.
-Pero tú quieres usar el baño-le recordó.
-Pe-pero no...
-¿En qué puedo ayudarlos?-preguntó una desconcertada mujer de edad avanzada frente a ellos.
-Y-yo...yo...-Luhan estaba en blanco.
-Lamentamos mucho importunarla señora, lo que pasa es que mi amigo y yo nos perdimos y también hemos tenido una serie de desafortunados percances y en verdad le agradeceríamos mucho si usted nos hiciera el enorme favor de permitirnos su baño-habló Sehun con una naturalidad que lo dejó boquiabierto, todo hubiese sido perfecto de no haber sido por esa sonrisa construida que Luhan odio en cuanto la vio, era como ver a un desconocido.
La anciana los miró con desconfianza, el deplorable aspecto de sus ropas hacia creíble la historia pero no estaba segura de dejarlos entrar a su casa, su mirada se fijó en el chico de cabello castaño y algo largo, él le sonrió débilmente y de alguna forma la dulce sonrisa del pequeño la convenció al final, nadie con una sonrisa tan bella podía ser malo, eso pensó ella.
-Adelante chicos, el baño está pasando las escaleras al fondo, la segunda puerta a la izquierda-indicó.
Ambos entraron no sin antes darle las gracias a la amable mujer, se quedaron más tiempo de lo esperado con la dulce anciana pero gracias a ello se libraron de algunos problemas que seguramente más adelante hubiesen sido un tanto preocupantes.
-Que mujer tan amable, no sólo nos prestó su baño sino que también nos dio algo de comer e incluso nos dio ropa de su nieto-dijo Luhan agitando sus manos con diversión.
El suéter que traía le quedaba grande y las mangas cubrían sus manos por completo, se veía tan adorable con eso puesto que Sehun quería pellizcar sus mejillas pero tenía que comportarse un poco porque estaban en la calle además que era él quien llevaba sus antiguos abrigos sucios.
-Lo sé-sonrió-También nos dio instrucciones para llegar a un centro comercial, ahí podremos tomar un taxi para que nos lleve a casa-Luhan asintió.
Pronto llegaron al centro comercial, el lugar estaba lleno de personas y ante eso Luhan no dudo en prendarse del brazo de Sehun, realmente odiaba los lugares llenos de personas, Sehun le dio una sonrisa alentadora y continuaron caminando, no tenían que irse tan pronto, podían curiosear un poco.
Miraron varias tiendas sin que ninguna llamará su atención hasta que terminaron en una tienda de mascotas, al entrar al local Sehun se sorprendió ante la expresión emocionada e infantil de Luhan que iba de un lado a otro mirándolo todo como un pequeño que acaba de descubrir un nuevo mundo, era tan tierno.
-¿Quiere ver algún animal en especial?-le preguntó la encargada.
-¿Puedo cargarlo?-dijo Luhan señalando al cachorro que daba vueltas de emoción luego de haberlo visto.
-Claro que sí-asintió la chica y tomó al pequeño animal entregándoselo a Luhan.
-Mira Hunnie-llamó demasiado feliz con el cachorro en brazos-¿No es la cosa más bonita del mundo?-preguntó frotando su nariz contra la del bonito cachorro en un beso esquimal.
Sehun lo miró atentamente con sólo una palabra en su cabeza repitiéndose miles de veces sin césar, adorable, Luhan realmente lucía demasiado tierno en ese momento y Sehun no pudo evitar preguntarse si él habría tenido una mascota alguna vez, tal vez que no la hubiese tenido explicaría su emoción.
-Te gustan mucho los animales, ¿verdad?-Luhan asintió varias veces a esa pregunta.
-Yo tenía un perro igual a este, se llamaba Título-sonrió al recordar a su amada mascota.
-¿Título?-¿ese era un nombre de mascota?, se preguntó a sí mismo.
-Sí, lo que pasa es...yo quería ponerle un nombre muy bonito y original así que pensé en buscarlo en internet pero había tantos que no me decidí por ninguno...hasta que mire donde decía "Título: 156 nombres lindos para su mascota"...de alguna forma Título parecía muy original-murmuró levemente sonrojado.
-Yo creo que es muy original, a mí me gusta-dijo obteniendo una sonrisa de Luhan-Entonces, ¿qué pasó con Título?-preguntó y entonces la sonrisa de Luhan se fue.
-A la esposa de mi padre no le gustaba Título y entonces ella...un día yo la vi poner algo en su comida...Título enfermo entonces y murió pocos días después...le dije a papá lo que ella hizo pero él le creyó a ella cuando dijo que yo mentía porque la odiaba-la voz rota de Luhan le partió el corazón y cuando lo abrazó decidió que aunque no conocía a esa mujer la odiaba por hacer sufrir a su pequeña estrella.
-Olvídate de ella Hannie, no vale la pena recordar a alguien así-Luhan asintió despacio cuando Sehun acaricio su mejilla y luego miró al cachorro que ladraba-Yo podría comprarlo para ti sí tú quieres.
-No pero gracias, es muy lindo por eso odiaría que ella le hiciera lo mismo que a Título-Sehun asintió comprensivo.
Luhan devolvió al lindo perrito y luego de que se despidiera del adorable pequeño ambos salieron de la tienda para continuar paseando, unos metros más adelante había un grupo compuesto de chicos y chicas bailando, se trataba de alguna especie de propaganda para una tienda, ambos se acercaron para ver un poco más de cerca y al verlos Luhan no pudo evitar no recordar a Lay y su dulce sonrisa mientras lo animaba a bailar-saltar, Sehun notó la ausencia de Luhan y al no saber en lo que pensaba supuso que era algo relacionado con el baile.
-¿Sabes bailar?-le preguntó Sehun sacándolo de sus pensamientos.
-No-negó-¿Y tú?
-No así-señaló a los chicos que bailaban-Podríamos aprender juntos si tú quieres-propuso.
-¿De verdad?-preguntó entusiasmado, la idea le gustaba.
-Sí-asintió Sehun.
-Me gustaría-sonrió-Pero...dijiste que no como ellos entonces... ¿tú si sabes bailar?-preguntó curioso.
-Algo así, ¿quieres una demostración?-Luhan asintió-Bien pero deberás ser mi pareja-solicitó, la expresión de Luhan se volvió una de pánico pero antes de que tuviera la oportunidad de negarse Sehun se adelantó-Entonces tu mano izquierda sobre mi hombro y la derecha estará sujetando la mía-indicó.
Luhan se sonrojó una vez más cuando Sehun tomó su mano izquierda y la guió hasta posarla sobre su hombro como había pedido, la mano izquierda de Sehun viajó hasta estar posada sobre su espalda y sus manos derechas se quedaron juntas.
-Y-yo no…no sé bailar... ¿qué si te pisó por accidente?-susurró avergonzado.
-Bueno...eso sería un problema, entonces...-parecía estar meditándolo y Luhan sólo deseo que decidiera no seguir con eso-¡Ya sé!-anunció.
Luhan lo miró confundido y cuando decidió preguntar únicamente logró chillar y abrazarse a Sehun cuando el peli plata lo levantó del suelo y lo cargó.
-Enreda tus piernas alrededor de mí-ordenó.
Luhan se sonrojó aún más, sus orejas estaban calientes pero aún así obedeció e hizo lo que Sehun le había dicho que hiciera, las manos de Sehun estaban sujetando sus piernas para no dejarlo caer y él aún tenía los brazos alrededor del cuello de Sehun, estaban tan cerca, únicamente necesitaba cerrar los ojos y acercarse a sus labios, sólo eso.
-No es lo correcto pero de esta forma podré mostrarte y no me pisaras-dijo Sehun y él únicamente logró asentir, lo tenía tan hipnotizado que seguramente si le pedía saltar de un avión sin paracaídas Luhan iba a hacerlo sin chistar.
Sehun comenzó a tararear una melodía que Luhan no pudo reconocer y simplemente se concentró en la forma en que Sehun se balanceaba al ritmo de esa melodía que solamente ellos escuchaban, las personas al rededor los observan, muy pocas con ternura, otras con extrañeza y la gran mayoría con desaprobación pero por primera vez a Luhan no le importaba.
Daba igual lo que los demás dijeran porque en ese momento era más importante estar ahí pedido en los ojos de Sehun que los hacía bailar a ambos, su corazón estaba palpitando tan a prisa que seguramente Sehun podía sentirlo, su estómago era un tornado de mariposas volando por todas direcciones y seguramente de no ser porque Sehun lo cargaba sus piernas ya habían cedido y estaría en el suelo.
-Eres un buen bailarín-halagó Sehun haciéndolo reír un poco.
-Tal vez eso no pero...debo estar pesado-susurró apenado.
-No lo estas, lo juro.
-Aún tenemos que ir a casa-le recordó.
-Cuando termine está canción.
Luhan volvió a reír, eso iba a tardar un poco pero a él no le importaba quedarse de esa forma un poco más, era la primera vez que bailaba pero ya podía decir que le gustaba hacerlo.
*****
-¡Myunnie hyung!
El pelinegro se giró al instante al reconocer la dulce voz del chico que hacía que todos sus días hubiera una sonrisa, Yixing era la persona de quien estaba enamorado pero no podía decirle, no cuando era un niño siete años menor que él además de ser el único hijo del director del hospital y también estaba ese problema que tenía.
-Hola mi ángel, ¿qué te trae aquí hoy?-preguntó con una sonrisa.
-Vine a visitar a papá y recordé que ya casi es tu hora de descanso y pensé que podía acompañarte-dijo con una brillante sonrisa, parecía más feliz de lo normal.
-Claro que sí, solo déjame entregar esto a la jefa de enfermeras y enseguida te alcanzo-el rubio asintió rápidamente y se fue dejándolo terminar con lo que hacía.
No demoró mucho y al entrar a la cafetería donde Yixing ya lo esperaba en una de las mesas con dos charolas, lo vio revisar atentamente lo que había en uno de los platos y luego hacer una adorable mueca mientras quitaba el tomate de la ensalada.
-Gracias-dijo sonriendo.
-Se que no te gusta pero creo que el chico que me atendió no me prestó mucha atención cuando le dije que no lo pusiera-un puchero se instalo en su angelical rostro y él pensó que no podía haber una imagen más bonita que esa.
-Hoy estamos muy felices ¿verdad?-el rubio asintió rápidamente-¿Puedo saber por qué?-preguntó curioso.
-Es…-lo vio sonrojarse y sintió algo comenzar a romperse en su interior-¡Yo lo encontré hyung, a mi primer amor, lo encontré anoche!-anunció emocionado.
-Eso es maravilloso-aseguro forzando una sonrisa, había una sensación de algo partiendo su corazón en dos además de ese sentimiento de sentirse dividido en dos, una parte de él estaba feliz porque su ángel podría llegar a ser feliz pero la otra, la otra quería gritar y destruir todo lo que tuviese a su alcance y más si era esa persona de la que él menor hablaba-¿C-cómo lo encontraste?-preguntó luchando porque su voz no lo abandonara en ese momento.
-Anoche, en una fiesta, es amigo de Baekkie y Channie, apenas pude creerlo cuando lo vi pero no había duda que era él, se llama Luhan-anunció recordando con alegría la noche que había pasado con él.
-Luhan-susurró, ese mocoso no dejaba de entrometerse en su vida pero era mejor de esa forma, si él era la felicidad de su ángel y si eso lo alejaría definitivamente de Sehun estaba bien para él o por lo menos para una parte de él.
-Es un nombre bonito ¿cierto?-él asintió de mala gana-Estoy tan feliz, ese día se fue repentinamente pero no me preocupa porque el lunes comenzare ir a la misma escuela, no estaba muy convencido de comenzar a asistir al instituto EXODUS pero ahora…
-¿El instituto EXODUS?-preguntó rápidamente y el rubio asintió confuso-Mi ángel acabo de recordé algo que debo hacer con urgencia, no vemos-se despidió apresurado.
-S-sí…adiós-dijo apenas mientras lo veía abandonar la cafetería.
Luego de abandonar la cafetería camino a toda prisa a la oficina de su supervisor para pedirle salir unos minutos antes, marcó rápidamente el número que necesitaba llevando el celular de Sehun a su oído, había perdido el suyo pero por suerte tenía el ese.
-Señor Kim que gusto que me llame-dijo la voz al otro lado.
-Déjese de inútiles formalidades, necesito verlo hoy en su oficina y también quiero toda la información de uno de sus alumnos, su nombre es Luhan, es urgente-dijo antes de colgar sin darle tiempo al hombre de responder.
Una sonrisa ladina se formo en sus labios, tenía a Luhan en sus manos y ahora si haría que se alejara de Sehun.