Despertar de aquella forma era en definitiva algo nuevo para él y no porque fuera raro o inusual despertar junto a Sehun con los brazos del peli plata rodeándolo, era diferente porque ahora no eran sólo amigos, Sehun era su novio, en verdad que lo era.
Sus mejillas se volvieron de color carmín al recordar eso y todo lo sucedido el día anterior, Sehun continuaba profundamente dormido mientras él estaba sentado a su lado observándolo atentamente, aquello era como un sueño pero era real.
Repentinamente se sintió nervioso al recordar que él nunca había tenido novio y que no sabía cómo debía comportarse a partir de ese momento, comenzó a jugar con sus dedos y empezó a mordisquear su labio inferior en un gesto nervioso mientras miraba fijamente al peli plata, no quería arruinarlo y sólo entonces había comenzado a pensar en todas esas cosas negativas que no había considerado antes.
Cerró los ojos con fuerza esperando conseguir que todos los malos pensamientos se fueran, comenzaba a sentir mucho miedo de lo que viniera y muy dentro de él rezaba para que todo fuera bien y nada destruyera eso que ahora tenían.
-No hagas eso-la voz de Sehun lo hizo abrir los ojos de forma inmediata y lo encontró frente a él mirándolo seriamente.
-Ho-hola-balbuceó, su rostro se sentía muy caliente y los latidos de su corazón habían ido de normales a sobrehumanos tan sólo con ver los ojos de él.
-Hola-sonrió de esa forma tan suya y Luhan pensó que iba a morir ahí mismo-¿No vas a sonreírme?-preguntó con falso enojo.
Luhan lo miró primero algo confundido pasando a divertido dejando ir una suave risita por lo graciosa que era la expresión de Sehun en ese preciso momento, lo escuchó gruñir y lo siguiente que supo fue que Sehun lo había abrazado llevándoselo con él cuando se dejó caer de vuelta en la cama.
-Tú vas a matarme, eres demasiado lindo-se quejó antes de suspirar dramáticamente.
Tardó un poco en asimilar lo dicho por Sehun y cuando finalmente lo hizo volvió a ser un manojo de nervios como llevaba siendo desde que abrió los ojos y se encontró con el rostro de Sehun frente al suyo.
-Pe-pero que dices-tartamudeó bajito-E-eres tú quien v-va a matarme...cada...cada vez que te veo o haces algo yo...mi...mi corazón se vuelve loco como si quisiera salirse de mi pecho-murmuró ocultado su rostro en el pecho de Sehun donde su voz quedó amortiguada.
-De verdad harás que muera...no puedes decirme algo así de la nada-se quejó.
Luhan alzó la mirada rápidamente listo para comenzar a disculparse, la sonrisa de Sehun dejó su mente en blanco, los labios ajenos se pensionaron contra su frente, su ojos se abrieron como platos, sus manos cubrieron su boca y por millonésima vez en menos de una hora su rostro se volvió totalmente rojo haciendo reír a Sehun.
-Eres demasiado tierno-aseguró divertido.
Luhan se sintió aún más avergonzado, los latidos de su corazón haciendo eco en sus oídos, Sehun sonrió enternecido decidiendo que había sido suficiente de molestar a su muy vergonzoso novio y se levantó de la cama.
-Tenemos que ir a buscar de comer así que debemos ponernos presentables, usa mi ropa-indicó y luego de tomar ropa para él salió de la habitación dejándolo avergonzado y solo.
Usar la ropa de Sehun siempre le resultaba tranquilizante, tenía su aroma impregnado por todos lados y eso siempre lo hacía sentir seguro ya que de alguna forma era como tenerlo cerca, volvieron a reunirse en la sala de estar donde Sehun lo esperaba con su radiante sonrisa.
Luhan sabía que ese día sería el día que recordaría como el día que más veces se había sonrojado en su vida, lo comprobó cuando Sehun no dejó de decirle lo bien que se veía y lo mucho que le gustaba como lucía con su ropa.
También cuando al caminar por la calle Sehun sostenía su mano luciendo la sonrisa más bonita del mundo, Sehun parecía casi orgulloso de poder sostener su mano en público y Luhan sentía que su cabeza podría sacar humo en ese preciso momento pero era innegable lo feliz que se sentía por poder caminar de la mano con Sehun.
Lo comprobó incluso cuando limpió cariñosamente de su mejilla un poco de jalea de fresas, se había sonrojado con cada acción, gesto o palabra de parte de Sehun, era demasiado tímido y lo sabía pero era inevitable cuando Sehun era tan dulce con él, sabía que eran pequeñas acciones que para muchos no tendrían ningún significado realmente pero para él eran algo invaluable que jamás iba a poder olvidar.
Al estar de vuelta en casa ambos se acomodaron en el sofá más grande para ver una película, eran sólo ellos dos solos, su cabeza estaba sobre el hombro de Sehun, nada espectacular pero para él ese pequeño momento era perfecto, incluso irreal, parecía un sueño.
-Luhan-llamó suavemente Sehun.
Alzó la mirada para verlo encontrándose con la intensa mirada de Sehun, era en momentos como esos cuando Luhan sentía como si lo estuviera hipnotizando y el tiempo no existiera para ellos, era en esos momentos donde eran ellos dos y nadie más en su pequeño mundo.
-Yo...es sólo que...tenemos que hablar de algo-Luhan notó que era algo importante y guardo silencio para permitirle continuar-Es que...te quiero, lo sabes ¿verdad?
-Sí...yo también te quiero-susurró sonrojado.
-Luhan no podemos decirle a nadie de lo nuestro-soltó rápidamente, estaba nervioso y le preocupaba que Luhan se enojara con él y decidiera dejarlo-No es porque yo no quiera sólo que...si Suho hyung llega a enterarse él...él no va aceptarlo y va a separarnos y si él hace eso yo no...
-Lo entiendo-aseguró interrumpiendo la explicación que era obvio le costaba darle-Está bien y no me importa, yo ya tuve la oportunidad de saber cómo es tu hermano mayor y por eso te doy la razón, no le diremos nada hasta que tú creas que podemos hacerlo-dijo con una radiante sonrisa.
¿Qué tan afortunado era para merecer a alguien como Luhan a su lado?, no sabía con exactitud pero debía ser demasiado para poder tener a alguien tan maravilloso a su lado, Luhan era simplemente perfecto y ahora era su novio, definitivamente él debía poseer la más grandes de las suertes del universo entero.
-Lo siento-susurró afligido.
-No importa, soy muy feliz ahora-aseguró con una radiante sonrisa que le robó el aliento al peli plata.
-¿Puedo besarte?-preguntó en un susurró.
Una vez más las mejillas de Luhan se colorearon de un intenso color rojo y se acomodó correctamente cubriendo su rostro con ambas manos tratando de ocultar su vergonzosa expresión.
-¿Dije algo malo?-preguntó preocupado el peli plata.
-Es...ta-tan sólo...no…no me preguntes y hazlo-dijo tan claramente cómo consiguió que saliera su voz.
Las manos de Sehun apartaron las suyas acunando entre ellas su rostro, sus pulgares rozaron con suavidad sus mejillas sonrojadas, su rostro se acercó lentamente hasta que sus labios se rozaron y lo único que Luhan quería era que la distancia desapareciera rápidamente.
-Hola niños-saludó alegremente Leeteuk y ambos se alejaron rápidamente mientras miraban con nerviosismo a direcciones diferentes-¿Chicos?-llamó confundido ante la nerviosa actitud de ambos.
-Ho-hola hyung-saludó Sehun, estaba sonrojado y eso hizo sonreír al mayor.
-¿Qué estaban haciendo?-preguntó con una sonrisa traviesa.
-Na-nada...yo...estábamos y-ya sabes...
-¡U-una película, v-veíamos una pe-película!-se apresuró a hablar Luhan.
El mayor los miró con los ojos entrecerrados antes de asentir con su radiante sonrisa yéndose directo a la cocina para acomodar las compras que llevaba con él dejando a los abochornados jóvenes reorganizar sus pensamientos.
Ambos permanecieron inmóviles mirando el pasillo por donde el mayor acababa de desaparece, ambos seguían sonrojados cuando se miraron a los ojos, Luhan fue el primero en hacer algún movimiento y se puso de pie torpemente captando la atención de su novio.
-Yo...tengo que irme...ya es tarde y todavía...todavía debo hablar con Lay por dejarlo solo-habló en voz tan baja que a Sehun le costó un poco entenderlo y al captar lo dicho su ceño se frunció por aquello.
-No tienes nada que explicarle a él-bufó con molestia.
-Lo dejé solo a mitad de nuestra cita-murmuró sintiéndose culpable.
-Eres mi novio ahora y ya no puedes continuar explicándole nada a nadie que no sea yo-le recordó enfurruñado.
-Xing es mi amigo y siempre ha sido muy amable conmigo.
-Es obvio que lo seria cuando su único propósito es poner sus manos sobre ti además yo soy más importante que él y tampoco me agrada que le llames Xing-Luhan no pudo evitar reírse un poco ante la infantil actitud del peli plata que acentuó más su ceño fruncido.
-No tienes que ponerte celoso-aseguró.
-Lo hago y seguiré haciéndolo hasta que él se aleje de ti-sentenció.
-Xing es únicamente mi amigo-dijo y recalcó la palabra amigo-Y tú lo dijiste hace un rato...tú eres mi novio-su voz bajó un poco su volumen y se sonrojó una vez más mientras tomaba una de sus manos para darle un poco de seguridad.
Sehun no borró su ceño fruncido, aprovechó lo cerca que estaba Luhan para cortar la distancia entre ambos y besar sus labios como había anhelado hacerlo durante todo el día, Luhan tembló bajo su tacto, su mano sujetó con más firmeza la de su adorable rubio, los suaves labios de Luhan se amoldaban perfectamente a los suyos y amaba las tímidas expresiones Luhan cada vez que lo besaba, la forma en que cerraba sus ojos, el cómo sus labios temblaban ligeramente y lo bonito que lucía con las mejillas ruborizadas, todo eso era simplemente perfecto.
Sus labios se alejaron de los contrarios y sus brazos rodearon el cuerpo de Luhan delicadamente mirando con adoración los brillantes ojos de su pequeña estrella.
-En verdad debo irme-Sehun volvió a fruncir el ceño dejándolo ir igual.
-Está bien pero no quiero ninguna cosa rara entre el unicornio y tú-advirtió y Luhan no pudo evitar reírse mientras asentía obediente-También debes volver mañana-pidió.
-Lo hare-prometió.
-Bien, hasta mañana mi pequeña estrella-Luhan asintió y con un beso torpe en la mejilla de Sehun marcó su despedida y finalmente salió de ahí, las ganas de gritar y saltar de alegría parecían una idea seductora en ese momento pero se contuvo, lo único que no pudo contener fue la sonrisa imborrable que deseaba mantener siempre pero él ya debería saber que no podía actuar tan extrañamente frente a todos.
-¿Dónde estabas?-preguntó un enojado Baekhyun que ya lo esperaba en la habitación con el ceño fruncido y los brazos cruzados.
-Yo...lo que pasa es...
-Lay ha estado muy preocupado porque desapareciste de la nada y nosotros también estábamos muy asustados, no puedes tan sólo desaparecer así como así-Luhan permanecía callado ante la severa reprimenda intentando pensar una buena excusa para lo que había hecho.
-Lo...siento yo no...
-¿Sabes cuan asustados estábamos cuando Lay nos llamó para decirnos que no estabas?, te he llamado desde ayer sin parar, Lay y Chanyeol han estado buscándote por todos lados pero es obvio por la sonrisa con la que llegaste que eso a ti no te preocupa en lo más mínimo, ¿dónde te metiste toda la noche de ayer y el día de hoy?-exigió saber.
-Yo...
-Y ni se te ocurra mentirme-advirtió seriamente.
-Estaba...estaba con Sehun-confesó a regañadientes.
-¿Sehun, quien demonios es Sehun?-preguntó aún más irritado, por alguna extraña razón creía saber la respuesta y también sabía que no iba a gustarle en lo absoluto.
-Es...-Sehun había dicho que no podía decirle a nadie-Es un amigo-murmuró débilmente.
-¿Un amigo?-Luhan asintió-¿La persona que vive en la propiedad de junto?-Luhan volvió a asentir y Baekhyun sintió que iba a explotar.
La idea de estrangular a su amigo parecía algo muy bueno en ese momento, vio a Luhan encogerse en sí mismo y supo entonces que él había notado ya lo furioso que estaba y no le importaba porque era lo que quería, que Luhan supiera lo mal que había actuado.
-Baekhyun-llamó Chanyeol deteniéndolo justo antes de que comenzara a gritarle a Luhan que parecía asustado-Tranquilo.
Baekhyun asintió de mala gana sin despegar ni un sólo instante su mirada de Luhan que miraba a Chanyeol como si fuera un ángel.
-Luhan nos has tenido muy preocupados, ve a hablar ahora mismo con Lay-ordenó y el rubio salió corriendo de ahí, su mirada fue hacia su novio que todavía tenía el ceño fruncido y parecía a segundos de matar a alguien-¿Qué pasó?-preguntó.
-¡Su jodido amigo imaginario, eso pasa!-soltó exasperado.
-¿Otra vez?-preguntó preocupado.
-Sí, dijo que ha estado con él todo este tiempo-Chanyeol lo vio mirarlo con angustia y no supo cómo actuar, él también estaba preocupado por Luhan.
Hacia unos días atrás que Baekhyun le había contado sobre sus preocupaciones por Luhan y el supuesto amigo que el chino decía tener, lo había ayudado a averiguar más antes de decidir que algo andaba mal con Luhan pero por más que habían preguntado a los alumnos, profesores e incluso al personal de limpieza del campus la respuesta era siempre la misma, la mansión estaba deshabitada.
Tuvieron un golpe de suerte cuando un día vieron salir de aquel lugar a una mujer, cuando la llamaron y le preguntaron ella les dijo que ella era la persona que hacia la limpieza cada tres días en aquel lugar y al hacer la pregunta que más les interesaba fue igual que con los demás, ella corroboró que el lugar estaba deshabitado aunque tenía dueño y además les dijo que el lugar estaba perfectamente cerrado y únicamente ella podía entrar para hacer la limpieza, la información que la chica les había dado los alarmó pero no habían tenido nada muy grave de que preocuparse hasta la noche anterior que Lay los había llamado para decirles de la desaparición de Luhan y ahora que aparecía finalmente su explicación era más que absurda.
-Ese lugar está vacío además de cerrado por lo que no pudo haber estado ahí, ¿donde crees que pudo haber estado?-preguntó seriamente.
-No lo sé-respondió revolviéndose el cabello debido a lo estresado que se sentía.
-Tuvimos suerte de que no le pasará nada-suspiró agobiado.
-Pero puede que no la tengamos la próxima vez, es obvio que Luhan tiene problemas y debe ir con un especialista-Chanyeol asintió de acuerdo con él-Mi tío es psicólogo y él podría atenderlo sin problemas únicamente tenemos que...
-No podemos llevarlo a la fuerza-interrumpió las palabras y planes se Baekhyun.
-Pero...
-Luhan debe ir por su propio pie o no funcionara, lo primero que debemos hacer es ponernos en contacto con tu tío para presentarle el caso de Luhan y dependiendo de lo que él nos diga podremos actuar-explicó con calma, se plantó frente a Baekhyun acariciando suavemente su rostro mostrándole una sonrisa amorosa-¿De acuerdo?
-Bien-aceptó de mala gana sin borrar su expresión de disgusto.
-Todo estará bien-aseguró.
-Eso espero porque en verdad estoy preocupado-dijo por lo bajo.
Chanyeol rió suavemente antes de rodear la cintura de su novio con sus brazos y cortar la distancia para besarlo rápidamente en los labios.
-Realmente pareces una madre preocupada-se burló.
-No soy su madre-bufó malhumorado.
-Pero actúas como una-lo molestó un poco más escuchándolo bufar una vez más-¿Ya le dijiste a nuestro adorable hijo que planeas irte a mi habitación y que tendrá que quedarse con Lay?-preguntó divertido.
-No es nuestro hijo y sí, ya lo sabe y está bien con eso-aclaró.
-Eso es bueno, ¿cierto?-susurró con un expresión sugerente.
-Claro que sí-sonrió de la misma manera antes de tomar a Chanyeol de las muñecas deshaciendo el abrazo que lo aprisionaba-Pero hasta entonces quieto-ordenó para luego irse al baño encerrándose ante la imagen de su descolocado novio.
-¡Baekhyun!-lo escuchó lloriquear desde afuera.
-No, sería malo si traumamos otra vez a nuestro hijo-respondió divertido escuchándolo gimotear en respuesta, se rió abiertamente del otro pero no salió, eso le enseñaría a Chanyeol a no molestarlo nunca más.