-Hola, soy la reportera Rousse que les llevara en vivo y en directo el conmovedor, apasionante y hermoso enlace matrimonial entre Minmin y Chen el troll, síganme para que podamos averiguar más de esta hermosa historia de amor-dijo con muchas expresiones extrañas y una enorme sonrisa.
-Y…corte-dijo Juliet que cargaba la cámara-Lo ha hecho muy bien señorita Rousse-la felicitó.
-Lo sé, a mí todo me sale bien-afirmó orgullosa de sí misma ignorando la mirada rara que Suho le enviaba, seguramente era porque ese día se veía especialmente bonita-Lo único malo es que afuera está lloviendo y así no puedo grabar bellas escenas de Lulu en contacto con la naturaleza-murmuró con un puchero-Por cierto, ¿dónde está él?, no lo he visto y necesito grabar cada hermoso momento entre mi couple favorita, ya hasta la bauticé, son el Hunhan, impresionante ¿verdad?-le dijo a Juliet que empezó a aplaudir al instante.
-Sorprendente como siempre señorita Rousse-halagó su empelada.
-Lo sé-sonrió con arrogancia-Bueno como nuestro hermoso Hunhan no está aquí vayamos a buscar al Chenmin porque después de todo esta es su boda, ¡sígueme Juliet!-ordenó y ambas salieron corriendo rápidamente ante la mirada sorprendida de Suho.
-¿Amigas tuyas?-preguntó un hombre pelirrojo que había estado ahí junto a él mientras Rousse hacia sus locuras.
-Algo así-murmuró.
-Hola Junmyun hyung-saludó Lay.
-¡Hey tú!-llamó Rousse reapareciendo en la sala de estar.
-¿Y-yo?-inquirió Lay señalándose a sí mismo.
-Sí, tienes que venir conmigo para hacerte una entrevista de carácter urgente-dijo tomando la mano de Lay para comenzar a arrastrarlo lejos ante la horrorizada mirada de Suho.
-¡Oye no puedes…!
-¿Alguna objeción?-preguntó la peli azul apuntándole en el rostro con un arma y él negó al instante-Eso pensé-sonrió de lado guardando el arma y siguiendo a Rousse que ya había desaparecido junto con Lay.
Lay fue llevado a la que suponía era la habitación de la chica pues estaba llena de vestidos y muchas otras cosas que una persona normal seguramente no llevaría consigo, la bella joven lo hizo sentarse en una silla que estaba puesta cerca de la cama y le hizo una señal a la mujer de cabello azul que rápidamente encendió su cámara.
-Di tu nombre completo y edad a la cámara-ordenó la castaña.
-Z-Zhang Yixing, 17 años-murmuró nerviosamente-Mmm… ¿e-esto es como esos videos donde les dices palabras a los novios y luego lo proyectan frente a todos?-preguntó desconcertado.
-Algo así-respondió ella mostrándole una bella sonrisa que por alguna extraña razón lo estaba asustando.
-Bu-bueno entonces...
-¿Por qué te interpones entre el Hunhan?-preguntó interrumpiendo a Lay que intentaba decir algo bonito para Minseok y Jongdae.
-¿El Hun...han?-inquirió confuso.
-Sí-asintió y rodó los ojos por la falta de comprensión del otro-Sehun y Luhan, el Hunhan-explicó-¿Por qué no quieres que estén juntos?
-Porque Sehun no merece a Lulu, únicamente va a hacerlo sufrir-respondió con el ceño fruncido.
-¿Disculpa?-bufó-¿Qué acaso no te has dado cuenta lo mucho que Sehunnie adora a Lulu?-cuestionó cruzándose de brazos lanzándole una mirada reprobatoria al chico frente a ella.
-Sehun no lo merece-sentenció.
-Por supuesto que sí, Sehun se ha esforzado por el amor de Luhan e incluso ahora continúa enfrentándose a todos por poder quedarse con Luhan-aseguró en defensa de su amigo.
-Pero...-susurró, Rousse notó el tono de tristeza de su voz y fue por ello que suavizó su expresión mientras continuaba con su mirada fija en Lay-Luhan no debería estar con él cuando yo estoy enamorado de él desde la primera vez que lo vi...han sido más de dos años y...simplemente no es justo cuando yo lo busque por todos lados-murmuró con un hilo de voz.
-¿Más de dos años?, eso es mucho-comentó.
-Yo...mi familia es amiga de la familia de Sehun desde que tengo memoria...la primera vez que biné a Corea fue cuando tenía cuatro y se suponía que vendría a ser el amigo de Sehun pero...Sehun y yo nunca nos llevamos bien, él se ocultaba de mí cuando venía a quedarme a su casa por las vacaciones y yo prefería estar con Junmyun hyung porque él era muy bueno conmigo...nuestra relación nunca fue buena y empeoro luego de eso-musitó.
-¿Eso?-preguntó la confusa chica.
-Yo...no recuerdo nada de cuando tenía diez hasta los once y de la época donde tenía doce recuerdo apenas pequeños fragmentos...tengo un trastorno de personalidad disociativo...eso quiere decir que tengo una doble personalidad por lo cual soy incapaz de recordar porque mi otro yo es quién tiene los recuerdos que me faltan...los médicos nunca me dijeron que pasó pero todo es resultado de algo muy malo que me pasó, es algo postraumático y fue por eso que mis padres y yo nos mudamos aquí a Corea para que yo pudiese comenzar un tratamiento con el doctor Kangin...empecé una nueva vida aquí, nueva escuela y nuevos amigos, fue precisamente por mis amigos que conocí a Luhan cuando tenía catorce...nunca salía de casa y esa fue la primera vez pero soy muy malo con las direcciones y terminé por perderme, intenté pedir ayuda con las personas que pasaban pero yo aún no hablaba bien el coreano y por ello nadie se detenía por más que lo pedía y cuando estaba por rendirme Luhan apareció...
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-¿Necesitas ayuda?-el familiar idioma hizo que Lay se girara encontrándose con un chico más bajo que él.
Tenía el cabello castaño que le llegaba a los hombros, usaba ropa que para su pequeño cuerpo lucía inmensa, una pequeña sonrisa estaba sobre sus labios rosas y aunque usaba una enormes gafas no fueron un impedimento para que Lay pudiese ver los más hermosos ojos que jamás había visto, perdió el aliento únicamente con mirarlos logrando apenas asentir hacia él.
-Tranquilo yo puedo ayudarte, visitamos mucho está zona y la conozco, ¿que lugar buscas?-preguntó sin dejar de sonreírle dulcemente cuando le mostró la dirección-No está lejos de aquí, ve de frente y justo en la esquina está la cafetería-indicó.
-Mu-muchas gracias-susurró como pudo.
-De nada-dijo girándose en dirección contaría cuando una mujer lo llamó, lo vio fruncir el ceño antes de volver a mirarlo con la misma sonrisa con la que la que se había acercado-Me llaman, debo irme, mucha suerte y no te pierdas de nuevo-dijo antes de alejarse por completo.
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-Cuando me di cuenta que él se había ido y que me había olvidado de preguntarle su nombre me propuse regresar a diario a ese lugar con la esperanza de volver a encontrarlo pero nunca pasó...cuando lo volví a encontrar en aquella fiesta yo estaba tan feliz porque pensé que finalmente podría...yo de verdad podría estar con él y que no sería nada más un sueño imposible pero...pero ahora Luhan...-sollozó mordiéndose el labio inferior cuando más sollozos quisieron escapársele.
Rousse lo miró con pesar, se puso a su altura y con suavidad limpió las lágrimas que se escapaban de los bonitos ojos del chino, lo entendía de alguna forma porque a ella también le habían bastado unos segundos con Luhan para quedar flechada pero no era masoquista ni tonta y a diferencia de Lay, ella se había convencido al instante que no tendría oportunidad alguna por mucho que quisiera.
-Supongo entonces que nuestra historia es parecida...yo también vine aquí por Sehun aunque yo iba a ser su prometida y no su amiga-comentó riendo ligeramente-Hay que ver a esos dos que destruyen la vida amorosa de los demás-suspiró.
-No es justo-repitió Lay.
-¿Y quién dijo que el amor lo era?-cuestionó-El amor realmente es más como...como una visita indeseada, llega sin previo aviso, invade cada aspecto de tu vida sin tu permiso y así como llega puede irse, eso es lo que yo creo-dijo con una pequeña sonrisa.
-Pero...
-No sigas, sé que es difícil y que no quieres rendirte sin luchar pero no puedes ganar una pelea que estaba pérdida desde antes de comenzar, seguir con esto te hará más daño a ti de lo que dañara su relación y al final, ellos tendrán algo mucho más hermoso y fuerte de lo que ya tienen y tú...tú solo tendrás lágrimas, por eso lo mejor es desistir ya-aconsejó.
-No…yo no...
-¡Chicos, algo muy malo pasó!-exclamó Donghae irrumpiendo en la habitación.
-¿Le pasó algo malo a Luhan?-preguntaron alarmados ambos menores.
-A él y a Sehun, ambos desaparecieron y nadie logra encontrarlos-respondió preocupado.
Rousse miró rápidamente hacia la ventana que era golpeada por la lluvia afuera ya era de noche y eso únicamente anunciaba problemas, aquello era malo y ella rezaba internamente para que Luhan y Sehun estuvieran sanos y salvos.
*****
-¡Nos perdiste en medio del bosque, es de noche y ahora llueve!-reclamó Luhan apuntando su dedo amenazadoramente hacia Sehun.
-Luhannie, mi amor por favor tan sólo...
-¡Nada de Luhannie ni mi amor, en este momento no soy tu amor y quiero matarte!-exclamó furioso.
-Únicamente escúchame Hannie, estoy seguro de que ya casi encontramos el camino de vuelta-aseguró.
-¡Llevas diciendo eso hace horas!-casi gritó histérico.
-Pero...
-¡Sí algún animal salvaje decide atacarnos voy a ofrecerte a ti como sacrificio!-advirtió el mojado y furioso rubio comenzado a andar.
-Luhannie-lloriqueó Sehun.
-¡Esperó que un oso te devore!
Sehun frunció el ceño al escuchar aquello pero al verlo cada vez más lejos se apresuró a seguirlo antes que terminara por perderlo en medio del oscuro y peligroso bosque, cuando le dio alcance pudo escucharlo maldecir por lo bajo y de no ser por lo grave de la situación lo más probable era que era que ya estuviera besando esa dulce boca porque Luhan enojado era demasiado irresistible.
-Espera-dijo tomando la mano de Luhan para detenerlo al lograr ver algo a lo lejos.
-¿Ahora qué?-masculló el enojado rubio.
-Creo que hay algo de ese lado-dijo señalando hacia la izquierda.
-¿Y eso qué?, lo que importa realmente es encontrar una forma de salir de aquí-le recordó con fastidio.
Sehun rodó los ojos antes de sujetar un poco más fuerte la mano de Luhan comenzando a llevarlo hacia el lugar que había señalado con anterioridad, sí lo que había visto en verdad era lo que él creía que era seguramente ahí habría alguien y podrían preguntar el camino de vuelta o por lo menos conseguir posada.
-¡Sehun ya déjame, ya de por sí estamos lo suficientemente perdidos como para que tú me sigas arrastrando más lejos!-se quejó liberándose bruscamente del agarre ajeno.
-Una cabaña-habló el peli plata ignorando las quejas de Luhan.
Luhan miró sorprendido la pequeña cabaña, Sehun fue hasta la puerta y él permaneció en su lugar observándolo atentamente mientras llamaba a la puerta pero esta no se movió, Sehun volvió a golpear la puerta obteniendo el mismo resultado.
-No hay nadie, vámonos-ordenó.
Sehun continuó ignorándolo y sacó de uno de los bolsillos de sus jeans su billetera de donde extrajo un clip que utilizó para abrir la puerta.
-Sehun, ¿qué haces?-preguntó alarmado Luhan.
-Ya es de noche, está lloviendo y es peligroso seguir, necesitamos un lugar y aquí hay uno así que vamos a usarlo-sentenció.
Luhan estaba por negarse nuevamente pero fue inútil porque al final Sehun lo metió a la fuerza a la cabaña, el peli plata prendió las luces revelando el interior del lugar, era pequeño consistía tan sólo en una habitación con una cama de frente a la puerta, a su lado derecho había un pequeño armario y muy cerca de este otra puerta, a un costado algo lejos de puerta principal estaba una pequeña estufa, había un pequeño refrigerador en la esquina contraria y al costado de este un largo estante mientras que cerca de este estaba una pequeña mesa para dos.
-Será suficiente por hoy- habló Sehun encogiéndose de hombros.
Luhan lo miró mal pero no tenía otra opción que entrar quedándose de pie cerca de la puerta a diferencia de Sehun qué comenzó a hurgar por todos lados.
-Encontré el baño-anunció luego de abrir la otra puerta, lo vio ir hasta el armario y lo vio sacar de ahí una enorme camiseta-Toma, date una ducha y ponte esto-pidió entregándole aquella prenda.
-¿Sabes que estamos cometiendo un delito, cierto?-inquirió con el ceño fruncido.
-Yo me encargare de todo sí alguien viene así que ve a hacer lo que dije-ordenó.
Luhan le lanzó una mirada de disgusto antes de arrebatarle la ropa y encerrarse en el baño con un fuerte portazo, Sehun suspiró fuertemente antes también buscar algo para deshacerse de la ropa mojada, se cambió rápidamente poniéndose únicamente la ropa interior y una de esas holgadas camisetas.
Una vez con ropa seca revisó bien el estante que aunque tenía una sola puerta por dentro estaba dividido en tres partes, la inferior tenía todos los instrumentos para cocinar, en la de en medio había platos, vasos y cubiertos y en la superior había comida enlatada y varias especias.
Sacó un poco de sopa del estante, además de algo donde cocinar, consiguió agua y algunos vegetales del pequeño refrigerador poniéndose a cocinar, no sabía cocinar pero por lo menos una sopa y té no eran un problema para él.
Cuando Luhan salió del baño con la ropa seca puesta seguía mirándolo con enojo, Sehun intentó ignorarlo lo más que pudo mientras comían pero no pudo continuar con eso y le frunció el ceño a Luhan que no dejaba de mirarlo como si fuese alguien muy malo realmente.
-Sí tienes algo que decir dilo y ya-pidió.
-Todo esto es tu culpa, te dije que era una pésima idea salir a pasear por el bosque pero no me escuchaste e hiciste lo que quisiste como siempre y ahora mira donde estamos, allanamos una cabaña-soltó molesto.
-No te quejaste mucho cuando estábamos paseando tranquilamente y hasta recuerdo que dijiste que era genial poder hacerlo-le recordó igual de molesto.
-Eso fue antes de saber que tú ni siquiera tenías idea de donde estábamos-masculló.
-Te traje a un lugar cálido y seco, ¿qué más quieres?-cuestionó.
-¡Qué dejes de ser así de irresponsable, tú no me escuchas cuando intento decirte que algo es mala idea, tú nunca me escuchas en realidad!
-¡Pudiste haberte quedado que yo no te puse un arma en la cabeza para que me siguieras!
-¡¿Para qué?, para que te perdieras igual sólo que en lugar de conmigo anduvieras solo por el bosque!
-¡Sería preferible a escuchar tus fastidiosas quejas!
-¡¿Acaso te esperabas que te diera las gracias por perderme en medio del bosque de noche con una tormenta cayendo?! ¡No pues, gracias por casi conseguir matarme!
-¡Nada malo te pasó!
-¡Es que eso sería el colmo después de esto, por lo menos admite que hiciste mal!
-¡Claro pero primero tú admite que por lo menos yo sé que puedo hacer algo útil en una situación como esta no como tú que hasta ahora únicamente estas actuando como si fuese el fin del mundo!
Esas fueron las palabras que terminaron con aquella discusión, Luhan no dijo nada más y simplemente se metió a la cama cubriéndose de pies a cabeza para no tener que ver a Sehun, estaba molesto y dolido aunque bien podría ser su culpa por iniciar la pelea en primer lugar.
Sehun no intentó hablarle tampoco y aunque estaba escondido bajo las sábanas Luhan pudo verlo acomodar unas mantas en el suelo donde se acostó dándole la espalda, ellos realmente nunca habían peleado, era la primera vez que peleaban de verdad y en verdad había sido una estupidez porque sí Luhan era honesto realmente únicamente se había descargado con Sehun por lo estresante que había sido el día por los constantes acosos de Lay y Rousse sumados a su tío que no dejaba de decirle que dejar a Sehun seguía pareciéndole la mejor decisión.
Porque eso no era culpa de Sehun en absoluto y ahora que veía su error no tenía ni idea de cómo pedir perdón, se descubrió el rostro para mirar a Sehun que le daba la espalda, intentó estirar su mano terminando por arrepentirse al final, sus labios se abrieron para llamarlo.
Un trueno decidió entonces que era el mejor momento para imitar el ensordecedor sonido de una explosión haciéndolo soltar un quejido angustiado que alarmó a Sehun que en tan sólo unos segundos ya lo tenía resguardado entre sus brazos para alejar el miedo y cualquiera cosa que lo amenazara.
-Shhh, todo está bien, nada malo va a pasar mi preciosa estrella-prometió acunando su rostro con cuidado.
-Y-yo...
-Yo estoy aquí Hannie, no temas-susurró depositando un dulce beso sobre sus temblorosos labios.
-Lo siento-musitó apenado-Esto no es tu culpa y yo no debí descargarme contigo porque...
-No importa porque en verdad fui muy descuidado por arrastrarte a todo esto, lo lamento-murmuró.
-Pero tus intenciones eran buenas por eso...
-Olvídalo-pidió-No importa ya-aseguró.
-¿No estás enojado?
-No me puedo enojar contigo.
-Pero tú estabas...
-Te dije algo que no debí hace un rato y al pensar que te había herido creí que no me querías cerca-explicó.
-No lo hiciste, además yo también dije cosas que no debí, lo lamento-repitió abrazándolo con más fuerza-Ven a la cama, no me gusta dormir sin ti-confesó tímidamente ocultando su rostro en el pecho de Sehun.
Sehun rió ligeramente echándose hacia tras para terminar acostado con Luhan abrazando a él, no intento hacerlo alejarse porque con lo avergonzado que debía está no iba a conseguir nada y también porque le gustaba dormir abrazando de esa forma a Luhan.