Ninguno de los dos podía responder, si fuera alucinación de solo uno de ellos seria aceptable pero no era el caso, tanto Squalo como Xanxus sabían que esas palabras habían sido pronunciadas antes y eso solo causaba mas estragos en sus ya confundidas mentes.
-¿Que has dicho basura?, por lo visto además de travesti también eres pederasta- era el único modo que podía cambiar el aura que les rodeaba, incluso para el tener que estar en un total silencio por un estúpido sueño y coincidencia era desagradable, prefería dejar el tema ya que algo en su pequeño corazón comenzaba a causarle dolor y no dejaría que lo vieran en esa condición.
-Vooooi no soy un jodido travesti y menos un pederasta, no soy tan estúpido como para enamorarme de un mocoso bastardo y para colmo con mal genio- no funcionaba del todo pero por lo menos la carga que sentía su cuerpo entero era mil veces mas liviana ahora.
No volvieron a mirarse ni dirigirse la palabra durante el resto de la noche, no hubo sueño solo una sensación de vacío, sus pensamientos estaban repartidos en cientos de pedazos y ahora temían que todo aquello que habían vivido no fuera realidad.
En lo alto de las nubes y las estrellas ese par era observado, no por un ser, cientos de ojos se posaron en la imagen que mostraba ese gigantesco espejo, ninguno hablaba y el silencio era terrorífico, y en esos pálidos rostros no existía una sonrisa si no fuera por ese par de alas que sobresalían.
-No cometeremos el mismo error, no de nuevo- al fondo de la habitación se escucho esa una gruesa voz zanjando el asunto y con ello poniendo en marcha un nuevo plan.
En la tierra el sol acaricio las mejillas pálidas del albino quien se había mantenido a una distancia prudente de ese mocoso que solo le causaba dolor de cabeza, y al levantarse se vio solo en ese conjunto de tejados pero a su lado descansaba una única manzana, no había nada mas, las cosas estaban cada vez mas extrañas pero no tenia tiempo que perder necesitaba saber que significaba ese sueño que había tenido en caso de haber sido suyo.
Aunque le importara una mierda lo que las basuras humanas pensaran de el, pasear por las calles usando solo su túnica le hacia parecer extraño, mas no tenia aquello que escucho que se llamaba dinero, por el estaría así todo el día pero no era algo factible para el ya que algunas personas habían intentado meter mano bajo su atuendo.
-¡Vooooooi! como demonios he podido terminar en esta posición, con mi estomago haciendo ruido y mi trasero en puto peligro, Dino tenia...-por primera vez desde la noche pasado recordó que no estaba solo, había ido con ese Pony amigo suyo, no podía dejarlo tirado en el mundo humano por lo que comenzó su búsqueda preguntando por su rubio amigo mas no daba fruto hasta que a lo lejos escucho una especie de conflicto y atraído por el ruido se mezclo entre las personas. Entre lo que parecía un grupo de puestos de comida estaba un par de comerciantes tirados en el suelo aparentemente inconscientes con algunos moretones en sus rostros, deseaba saber quien había causado eso, con la vista escaneo la zona de combate hasta que vio la causa, por un momento pensó que era una broma pero frente a el estaba ese mocoso que le había jodido el la tarde pasada; pero ya no era aquel mocoso de 12 años, ese pequeño cuerpo ahora era mas alto y musculoso su rostro mostraba mayor madurez y su voz tenia un tono mucho mas ronco, se quejaba de que las esposas de esos hombres le habían estado acosando todo el día, ahora entendía por que había desaparecido.
El moreno en cierto momento se giro para encarar a la multitud encontrándose con la mirada del albino, su cuerpo entero dio una sacudida y con su mirada fija en dirección a Squalo se acerco quitando a todos a su paso, de ese modo el albino había podido ver que ese atractivo hombre solo vestía un pantalón negro y en su pecho se podían ver algunas cicatrices que antes no había podido identificar, esas cicatrices no eran de fuego...ahora podía identificarlo bien esas eran marcas que solo dejaban los sellos celestiales.
-¡Tú! serás una basura maldita, por tu culpa estoy así- el moreno había sujetado de la ropa al albino y le había acercado peligrosamente a su cuerpo, ambos al instante captaron algo diferente, sus cuerpos reaccionaban al tacto si bien su memoria estaba fallando su cuerpo distinguía al contrario de ese modo y sin decir mayor palabra desaparecieron de ese lugar tan habitado.
Se escondieron en una especie de tienda abandonada, la luz se mezclaba por las rendijas que había en las paredes, ambos pudieron verse tras recuperar la respiración, ante sus ojos podían ver no ese polvoriento lugar, por momentos el fondo era el de un majestuoso salón color marfil, ahora estaban seguros, aquel sueño no era alguna mierda de su imaginación, sus recuerdos comenzaban a cambiar y a mezclarse con unos de los cuales no tenían idea.
-¿Quien eres en verdad basura?- Xanxus ya no podía confiar en lo que sabia, sus recuerdos de la infancia estaban desapareciendo en lugar de un niño amado estaba la imagen de una especie de prisión, lo tenia encerrado, aun se preguntaba como podía estar vivo, sus padres desaparecían y en su lugar hacían acto de presencia unos cuerpos encapuchados, seres sin un rostro quienes solo estaban ahí como guardias, no podía entender que estaba pasando.
-Yo...Yo soy...- ni el mismo lo podía decir ahora, sus recuerdos de su infancia con Dino comenzaba a mezclarse algo no estaba bien con su mente y sabia que todo tenia que ver con ese ahora hombre frente a el.
Obscuridad y Luz atrapados en un conflicto de miradas, querían respuesta y ninguno podía dárselas al otro, el primero en dar un paso mas allá fue el moreno, estiro su mano para tocar la fría mejilla del hombre frente a el; calor y frio encontrándose y casando un agradable confort en el cuerpo de los involucrados, ese cuerpo se movía por cuenta propia hasta que estaba a escasos centímetros del contrario, cada uno estaba perdido en la mirada de su opuesto y poco a poco el ángel también tomo confianza y deslizo sus dedos por los hombros ajenos, ambos estaban en una burbuja color rosa hasta que una punzada en el pecho del pelinegro le hizo soltar a su acompañante y arquearse un poco, Squalo por reacción le sujeto firme para evitar callera y gracias a eso pudo verla, aquella asesina marca que había aprendido en clase, en la parte posterior del cuello contrario se podía ver una especie de tatuaje de una pluma, "La Marca de los Angeles", aquellos que se habían enfrentado al clero celestial la traía en su cuerpo y estaba condenado a que su alma no pudiera descansar.
-Xanxus...tu, ¿lo sabias?- con algo de esfuerzo volvió a clavar su mirada, rojo en plata.
-No...pero mi cuerpo lo sabe...esa marca esta ahí por la culpa de una basura como tu
De nuevo las imágenes del "sueño" volvían a atacar a los presentes, Xanxus no había muerto en batalla, había pasado algo mas y ambos querían saberlo, deseaban descifrar el enigma de su pasado.
-Basura...bésame.
El albino por el impacto soltó el cuerpo del mayor haciendo que callera sobre sus piernas, ¿ese hombre estaba loco?, estaban en un dilema existencial y se le ocurría pedir una mierda así, pero no tuvo ni modo de negarse, cuando menos lo imagino esos sensuales labios se apoderaban de los suyos, un contacto que por lo visto ambos cuerpos habían estado esperando, no fue nada agresivo, parecía un beso de aquellos que los niños dan y ven como lo mas prohibido del mundo, pero con ese simple contacto lo aclararon, todo estaba siendo preparado para que ellos volvieran a conocerse.
-...Squalo...lávate los dientes.
-¡Vooooooi! no jodas ahora.