Coming Home
Previamente
Soltó una pequeña risa, y su grande y pálida mano descansó sobre la rodilla de Harry.
– Te garantizo que soy el mismo hombre. Esto es, sin embargo, un lado de ese hombre que nunca se te permitió ver, ni acercarte lo suficiente para ser permitido en mi círculo más íntimo –. Quitó la mano, se puso de pie y rodeó la mesa al tiempo que Snape entró en la habitación.
– Severus, es bueno que estés de vuelta. Estás a cargo de mi tarjeta. Por favor, ve que consiga lo que necesite. Si piensas que está dudando de una compra, o que realmente quiere algo pero le da miedo, ya que podría ser demasiado caro, cómpralo de todos modos –. Con esas palabras, vio la mandíbula de Harry caer abierta, como si fuera a protestar, pero luego la cerró de nuevo.
Harry sólo iba a tener que acostumbrarse a eso.
Capítulo VII
¿Por qué Snape tiene que seguir las instrucciones de Malfoy al pie de la letra? Sí, habían cosas que me gustaban, ¡Pero eso no quiere decir que realmente quiera tenerlas! ¡Idiota! ¡Y Snape es realmente cortés! Por supuesto, tenemos sólo unas pocas horas para realizar las compras, ya que comenzamos tan entrada la tarde, pero ninguno me dijo en algún momento que no podía tener algo. Al menos que fuera realmente estúpido…incluso confesaré eso.
La cena fue agradable también. Ahora que lo pienso, me encontré a mi mismo hablando más a Snape que a Charlie… Huh. Era extraño, pero se sentía bien… tan natural. Tal vez mi Dracken realmente sabía lo que estaba haciendo.
No es que yo vaya a llegar a admitir eso en voz alta.
Pero, por el momento… tengo un hombre a cada uno de mis lados mientras caminamos luego de la cena… me encanta la forma en que sus manos se sienten. Son cómodas y cálidas.
Un pequeño ronroneo escapó de mi garganta.
– ¡Maldita sea! ¡Me gustaría tener algún tipo de advertencia cuando el ruido saldrá!
– Harry, - Severus habló primero. – Sólo significa que estás cómodo y feliz. También significa que hemos hecho nuestro trabajo como dominantes. Nos permite saber que lo hemos hecho bien.
– Lo sé, Charlie me lo dijo en la resonancia –. Continuó. – Sólo me gustaría una pequeña advertencia, ¡Ya sabes!
– Muy bien, aquí estamos. ¿Quieres ir junto a uno de nosotros o irás por tu cuenta a la Mansión Malfoy? – Severus preguntó con curiosidad. Harry pensó en ello por un momento.
– En realidad, si no te importa, me gustaría ir contigo –. Respondió. Charlie, comprendiendo, asintió con la cabeza y se fue.
– Me estás otorgando una gran confianza –. Severus pasó un brazo por la cintura de Harry, asegurando su posición al lado de él. – Cierra los ojos, sé que no te gusta aparecerte.
Al sentir ese familiar movimiento, que su cuerpo reconoció a regañadientes, Harry sabía que llegarían en un momento a la Mansión Malfoy.
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~xXxXxXxXx~
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Volver a Hogwarts en una sola pieza, tan satisfecho y contento, fue inesperado para Harry. La conexión entre sus aposentos privados y la Mansión Malfoy sin duda era una ventaja conveniente. Mirando alrededor la nueva decoración de su residencia, se dio cuenta de que su baúl estaba allí, junto con algunos de sus objetos personales.
Los elfos domésticos deben de haber embalado y trasladado mis cosas mientras yo estaba fuera…
Haciendo su camino de regreso a su nueva habitación, vio un nuevo paquete inocentemente acostado sobre la cama.
Creí que los regalos del día ya estaban hechos…
Cuando Harry se acercó a la cama, vio que el pequeño paquete tenía una carta adjunta a la parte superior. Con cuidado, desplegó la carta, leyó su contenido.
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Harry:
Sé que esta es una situación extraña para ti, especialmente al ser atosigado tan abruptamente. Sin embargo, te estoy dando un regalo extra, como forma de cerrar la brecha entre nosotros. Este es uno de dos diarios compañeros. Lo que escribas será transferido al mío, así podré responder en él y serás capaz de ver lo que he escrito en el tuyo. Esta será una gran oportunidad para que lleguemos a conocernos mejor, cuando estés listo, por supuesto. Ni un momento antes.
Tuyo,
Severus.
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¿Diarios… compañeros? ¿Llegar a conocernos mejor? ¿Cuándo estés listo? Él realmente es sincero. Creo que me gusta este método, de todas formas. No es tan intimidante…
Abriendo el papel de color marrón que envolvía el diario, vio el libro encuadernado en un maravilloso beige con correas de cuero a juego que lo mantendrían cerrado mientras no era usado. Al abrir el libro, allí en la primera página Severus ya habían escrito.
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Cuando estés listo, estaré esperando pacientemente. –Severus
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Llevó su nuevo diario al escritorio que se encontraba en una de las habitaciones de al lado, que supuso era un estudio, y se sentó en la silla. Tomando la tinta y la pluma, comenzó a escribir bajo la nota anterior.
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Sev:
Espero me dejes llamarte así. Quería darte las gracias por el muy considerado regalo. Esta realmente es una idea muy maravillosa. Espero que funcione de la manera en que deseas, y poder ser capaces de formar una relación más estrecha.
También quería darte las gracias por haber ido con Charlie y conmigo esta noche. Sé que comprar no es realmente tu “cosa”, pero me sentí cómodo al tener a los dos conmigo.
Si no eres reacio a las compras, me gustaría que me acompañes por otros artículos de primera necesidad para mis aposentos.
~ Harry
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Harry cerró el libro y lo dejó sobre el escritorio. Salió de la habitación para ducharse y colocarse la ropa de cama. El día de mañana traería más regalos y más compras.
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~xXxXxXxXx~
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Harry se encontraba recostado en un jardín en una resonancia, de nuevo. No llamé a nadie, ¿Tal vez me llamaron?
– ¿Harry? – era Lucius. Se acercó a Harry desde el lado que consideró mejor. – te llamé para preguntar cómo fue tu experiencia con las compras –. Estaba sentado en el borde de la manta, quería estar cerca de su pequeño sumiso, pero no quería precipitarse con las cosas.
– ¿Honestamente? Había cosas que me gustaban, pero no eran necesarias. Esas cosas deben ser devueltas, pero, en lo general, fue agradable.
– Bueno –. Lucius aclaró su garganta, – Harry, tengo algo que decirte.
– Y este es el mejor lugar, ya que no podemos lastimarnos físicamente entre nosotros.
– Sí, supongo que tienes razón. ¿Quieres a Charlie aquí? ¿Eso te haría sentir mejor al escuchar lo que tengo que decirte?
Harry pensó en eso por un momento.
– No, estoy seguro de que ellos ya saben lo que quieres decirme, así que… ¿Qué tienes en la cabeza?
– Estoy pensando en apelar ante el Wizengamot. Me gustaría que me permitas estar contigo, Charlie y Severus durante los fines de semanas que te encuentres enseñando en Hogwarts –. Lucius esperó un momento, – de acuerdo con Severus, habrá momentos en que no serás capaz de salir de la escuela por largos períodos de tiempo, especialmente cuando prepares a tus estudiantes para sus T.I.M.O.S. y E.X.T.A.S.I.S.
– Eso es razonable. ¿Qué parte de eso me molestaría?
– Esa parte no lo haría, pero…esto podría. ¿Seguro que no quieres a Charlie aquí?
– Adivinando, ya que me has preguntado por él dos veces, tiene que ser malo…muy bien, traeré a Charlie –. Tomando un momento para cerrar los ojos, pensó en lo bien que se sentiría el tener a Charlie frotando su espalda de nuevo. Cuando abrió los ojos, junto a él estaba sentado su pelirrojo dominante. – te traje aquí porque tiene que decir algo, y al parecer es bastante malo.
– ¿No se lo has dicho? – Charlie alargó la mano y entrelazó sus dedos con los de Harry. – pensé que le dirías antes de que él se marchara esta tarde.
– Tenía toda la intención, pero pensé que sería mejor para él si le informo de los próximos eventos en la resonancia. De esta manera sabemos que se encuentra seguro y en su lecho.
- Harry, necesitamos a Severus –. Charlie le informó. – ¿Podrías llamarlo, por favor? – los dos hombres vieron como Harry cerró los ojos y pensó en el último miembro de su clan. Luego, entre las sombras, apareció.
– ¿Qué precipitó esta espontánea reunión? – Severus preguntó.
Con las manos aun entrelazadas, Charlie tomó la palabra.
– Lucius no le ha dicho a Harry por qué está apelando ante el Wizengamot.
Inusualmente, el alto y melancólico hombre, se sentó al otro lado de Harry y alcanzó su otra mano para enredar sus dedos juntos.
– Bueno, ahora que todo el mundo está aquí… Harry, sabes que eres muy valioso para nosotros. Lo hemos tratado de demostrar en casi todos los sentidos que podemos. Incluso después de escuchar esta noticia, habrá tres regalos más esperando por ti cuando te despiertes.
Mirando a los otros dos dominantes, supo que era ahora o nunca.
– El día que cumplas los dieciocho años tu Dracken despertará. La noche de tu cumpleaños se activará tu lado sumiso.
Buscó el rostro de Harry, parecía que su sumiso todavía estaba aceptando lo que había dicho, pero no comprendiendo totalmente.
– Eso significa que entrarás en tu primer ciclo de calor.
– ¿Cómo si mi cuerpo subiera de temperatura…?
– No. Ahora mismo, mientras duermes, tu cuerpo comienza a prepararse. Comienzas a sentir algo parecido a calambres en la parte inferior del abdomen. Ese es tu Dracken interior produciendo una matriz.
La expresión del rostro de Harry registró la comprensión.
– ¿Una matriz?... ¿Cómo la de una mujer? ¿Dónde lleva los bebés? – Observar el asentimiento de la rubia cabeza lo llevó cerca de la histeria. Fue la presencia de los dominantes a sus lados lo que lo mantenía en tierra. – Y me estás diciendo esto porque voy a tener mi primer ciclo de calor… ¡¿Y los tres tratarán de fecundarme?! – Los tres hombres asintieron. – ¡Oh, demonios no! ¡Los tres pueden largarse e irse derecho al infierno ahora!
Charlie y Severus se miraron entre sí y ambos usaron sus manos libres para acariciar su cuello y espalda.
– Harry, no tendrás el control. Tu Dracken se hará cargo.
– Oh, ¡Y se supone que ESO me haga sentir mejor! ¿Qué diablos están pensando ustedes tres?
Continuará…