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Bienvenida a casa. por ROOM

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Notas del capitulo:

Hola, ya regresé con otro cap, espero les guste, besoooo

POV Autor:

Los mato, maldito Trafalgar, maldita enana de mierda….respira, Kid, es una niña….solo es una niña…..

Un cabreadísimo pelirrojo apretaba los dientes y puños para controlarse mientras que sus dos amigos rezaban porque las venas de su frente no estallaran y armara una masacre ahí mismo. Penguin y Sachi intercambiaban miradas nerviosas con Killer y Heat hasta que las más chicas reaccionaron.

-          Erza, no seas maleducada.

-          Tsk, joder, Mavis, solo me estaba divirtiendo un poco- la rubia tomó por el hombro a su amiga y la peliazul estaba cruzada de brazos, ambas observaron a los jóvenes de arriba abajo, Mavis decidió tomar cartas en el asunto.

-          Lo siento, a veces se comporta como idiota.

-          ¿¡QUÉ MIERDA, MAVIS?!- la rubia le dio un capón en la nuca y el pelirrojo comenzó a burlase.

-          JAJAJA buena es….. ¿¡PERO QUÉ COJONES, KILLER?!- su amigo imitó a la niña, estaba comprobado que era la mejor forma de hacer que se callaran de una vez.

-          Aaaahhhh….son niñas, Kid, por el amor de Dios. Lo siento, pequeñas, él también se comporta como un idiota. Soy Killer, él es Heat y de este ya saben el nombre.

-          Soy Mavis, ella es Levy y la problemática es Erza- la niña se volteó a ver a Penguin y señaló a los invitados- Supongo que son los otros - todo se quedó en silencio, eran padres e hijas pero no tenían relación ninguna y el comienzo no había sido nada bueno gracias a ciertos pelirrojos de los cojones…. Levy se acercó a Heat y sonrió.

-          Heat-san- el joven se estremeció- Sachi-kun me dijo que mientras estuviésemos en una isla podíamos hacer una barbacoa, pero con este clima no será posible ¿Qué les parece si hacemos una fogata esta noche? Veeengaaa será divertido.

Todos miraban a la peliazul, tan sonriente y dulce que no había manera de decirle que no a esa cara, Heat solo atinó a asentir con la cabeza y miró a Sachi, éste estaba rojo hasta las orejas por el comentario….mierda que con eso ahora le verían de blando….Mavis y Killer rieron un poco ante la escena.

-          Me parece bien, nos veremos cuando comience a atardecer- dijo el moreno, se volteó hacia su tripulación- Regresemos.

-          Sí, capitán- todos saltaron hacia el submarino y se adentraron en él, los que quedaron en el otro barco aún no creían la situación.

Eusstas Kid estaba molesto, puta mocosa, si es igualita a Trafalgar, tocapelotas, socarrona, burlona…….sin embargo sentía una emoción extraña. Killer y Heat estaban ansiosos porque llegara la hora de verlas de nuevo, eran tan parecidas a ellos, parecían más unos clones que sus hijas.

Finalmente cayó la tarde y se encontraron los nueve, Levy con toda la emoción del mundo se adelantó a un montón de madera que Bepo le había dejado hacía unas horas atrás, tomó aire y soltó una bocanada de fuego. Heat le miraba incrédulo.

-          ¿Lo viste, lo viste, Sachi-kun? He mejorado mucho ¿verdad?- el castaño le sonrió con la misma dulzura que ella poseía.

-          Ha estado genial, Levy, ya pronto podrás hacer fuegos más grandes- la niña se volteó hacia el peliazul y ladeó la cabeza con duda.

-          ¿Heat-san, pasa algo?- Sachi miró al aludido y notó que estaba embelesado con la niña, no pudo evitar sonreír ante esa cara y al ver que no iba a responder decidió hacerlo él.

-          Heat-san está bien- el chico finalmente reaccionó y miró al castaño sorprendido- Solo está muy impresionado por lo que hiciste ¿Sabes? Él también escupe fuego.

-          ¿En serio?- Heat asintió algo temeroso, los ojos de Levy brillaron y agarró al peliazul con fuerza- ¿Me ayudarás?

-          ¿Ah?

-          Que si me ayudarás a mejorar mi técnica, por favor, Heat-san- no pudo evitar sonreír un poco ante esa cara tan tierna.

-          Claro, te ayudaré- la pequeña le arrastró carca de la fogata y comenzaron a entrenar mientras Sachi se sentaba en una roca a observarlos.

Al estar más cerca del fuego pudo observarla mejor, su cabello era igual al de él y al parecer también le gustaba muchísimo el fuego, no pudo evitar sentirse importante por ello, se fijó en que era muy pequeña y delgada, sus ojos eran de un tono almendrado que brillaban aún más ante la luz de la fogata, sus facciones delicadas y lo que más le sorprendía: la dulzura y calidez que desprendía en cada gesto, sonrisa o solo al hablar, eso no lo había heredado de él, él era callado, alto, musculado y con aspecto de cadáver, nada que ver…..volteó a ver al castaño ¿acaso él también era así? ¿Los mismos ojos? ¿El carácter tan amable que poseía la niña? Quería saber qué se escondía debajo de ese gorro y esas gafas ¿Por qué taparse tanto? Si él estaba lleno de cicatrices y las mostraba como si nada…..estaba tan ensimismado qué la peliazul le habló.

-          ¿Heat-san?

-          ¿Si?

-          Estás mirando mucho a Sachi-kun ¿Pasa algo?

-          ¿Eh? N-no, no es nada- notó que la niña jadeaba un poco- ¿Estás cansada?

-          Un poco, pero puedo seguir- el chico sonrió, ella tenía una voluntad fuerte.

-          Sigamos mañana, eres muy pequeña aun, tenemos mucho tiempo para mejorar.

-          Vale, entonces vamos, Sachi-kun siempre me lee libros en las noches- tomó al joven y llegaron junto al castaño, la niña se acurrucó sobre él y le sacó un libro de un bolso que había traído- Sachi- kun este es nuevo- el chico sonrió, tomó el libro y cuando la niña se acomodó comenzó a leerle.

No pasó mucho tiempo hasta que se quedara dormida, entre el paseo y el entrenamiento debía estar agotada, el castaño cerró el libro y se quedó en silencio, no sabía que hablar con el peliazul o si él quería hablar de algo, estaba tenso, el otro lo notó y para tratar de relajarle comenzó a hablar.

-          Le pusiste un bonito nombre- Sachi le miró con sorpresa, no esperaba que rompiera el silencio, además, esperaba una voz tosca y vulgar, todo lo contrario a lo que escuchaba, el chico era calmado y amable.

-          Me pareció perfecto para ella, es muy dulce y alegre.

-          Sí, lo hace notar.

-          Jeje, le has cogido tranquila, normalmente siempre está incendiando algo.

-          ¿Por eso la idea de la fogata?

-          Aaahhhh…..sí, un día entrenando me quemó por accidente y decidí que era mejor que quemara todo lo que quisiese fuera del submarino.

-          ¿Le entrenas?

-          Sí, artes marciales, lo del fuego está muy bien pero necesita saber defenderse de otra manera ¿Heat-san?- el aludido desvió su mirada de la niña hacia el castaño- N-no tengo problemas con que entrenen juntos, e-es más, me parece buena idea que le enseñes sobre su habilidad y que os conozcáis, eres s-su…..padre también y ha pasado mucho tiempo conmigo, así que en lo que estamos aquí podéis seguir entrenando o lo que quieran hacer- - el peliazul no lo pudo evitar y sonrió un poco, definitivamente Levy había heredado el carácter de él, joder, le parecía tan tímido y dulce, asintió con la cabeza y siguieron hablando.

A Mavis le escurría una gota de la nuca. Genial, ya me bastaba con que uno se llamara Penguin y se cubriera con esa jodida gorra….ahora el otro Killer y lleva una máscara horrible….. ¿Es en serio? ¿Acaso tienen algún complejo o qué? Ya he visto el rostro de Pen-chan y es muy lindo, no entiendo por qué demonios usa esa cosa…… algo llamó su atención en el rubio, sus cuchillas, eran muy parecidas a las de ella.

Killer se dio cuenta y sacó sus cuchillas, las hizo girar sobre sus muñecas y se las enseñó, la niña sonrió e hizo lo mismo, sacó sus armas y las hizo girar, dejando al rubio impresionado.

-          Vaya, lo hace igual- Je, nos parecemos mucho ¿Quién te enseñó a usarlas así?

-          Pen-chan me ha estado entrenado, él es espadachín, ha sido de mucha ayuda- Killer miró al aludido y volvió a fijarse en la niña.

-          Podemos practicar si quieres- Mavis se alegró ante la idea y Penguin no pudo evitar sonreír al verla así, Killer no dejó pasar la escena, conocía solo de vista al chico desde aquella vez en la subasta y al saber que tenían una hija juntos no podía dejar de pensar en qué clase de persona era.

-          Pero será mañana, es algo tarde para practicar ¿qué te parece si hablamos?

-          Vale- se sentaron los tres con Mavis en el centro de ambos, la duda le carcomía y no pudo evitar preguntar- ¿Killer-kun? ¿Por qué la máscara?- el rubio saltó en su lugar, no se lo esperaba, sin embargo Penguin lo sacó del apuro.

-          Mavis, apenas le acabas de conocer, además, tendrá sus razones para tenerla.

-          Pero tú también te cubres sin razones he visto…..- el chico le interrumpió.

-          Si las tengo, Mavis, al igual que Sachi, ambos nos cubrimos por….cosas….no debes hacer ese tipo de preguntas ¿De acuerdo?- la niña asintió con decepción en los ojos, Penguin suspiró y le revolvió el cabello- Regreso en un momento- se levantó y entró en el submarino, Killer le observó irse algo sorprendido, era la primera vez que conocía a alguien que pensara como él y que no criticara su máscara.

-          No lo entiendo.

-          ¿Qué no entiendes?

-          Pen-chan no tiene nada de malo en su rostro, tiene unos ojos hermosos, su color es impresionante.

-          ¿Impresionante? ¿A qué te refieres?-  tenía curiosidad, es cierto que no lograba ver bien su cara, la gorra ocultaba la mitad.

-          A que son muy brillantes, su color es….son como dos luces- no pudieron seguir hablando porque el joven ya estaba regresando del submarino- Sssshhhh….mañana te sigo contando…..aunque…..- puso una cara que no presagiaba nada bueno- Si me dejas ver tu rostro, puede que te ayude a ver el de Pen-chan.

-          Hay que ver lo descarada que es……aaahhhh…..en algún momento se la tendré que enseñar….pero…. ahora quiero saber cómo son esos ojos- Penguin mostraba algo en sus manos, parecían unos potes de…¿comida?- Ese aroma…. yo lo conozco…..

-          ¡¡¡PAAASTAAAAA!!! ¡PEN-CHAN, ERES EL MEJOR!- Mavis devoraba sus espaguetis como si no hubiese un mañana, Killer aún no reaccionaba hasta que Penguin le tendió el otro pote.

-          Toma, debes tener hambre, si no te gusta no tienes que comerlo, es que Mavis solo come pasta y bueno, ya me adapté a hacerla todo el tiempo- el rubio tomo el pote por inercia y observaba al de la gorra como si fuese algo inaudito pero el rico olor fue demasiado para él y comenzó a comer igual que la niña.

-          ¿También es adicto a los espaguetis? Si es que son iguales jeje- Penguin solo sonreía ante la imagen que tenía en frente, al parecer no iba a ser tan complicado llevarse bien con el Guerrero Masacre.

Todo parecía estar de maravilla, para ser el primer día no había salido nada mal, ecepto para ciertos pelirrojos que no hacían más que pelear….cof cof…..corrección…..el pelirrojo gruñía como perro mientras que la otra se burlaba de él como si fuera lo más divertido del mundo. Para Law la primera hora fue bastante entretenida, pero si seguían así sería un problema, no le quedaba más remedio que intervenir.

-          Erza, deja de molestar a Eusstas-ya, se le reventarán las venas.

-          Pero es divertido, fufufu, si está hasta rojo, fufufu- Kid no aguantaba más, estaba a punto de mandarlos a la mierda cuando el moreno volvió a hablar.

-          ¿Por qué no le enseñas lo que puedes hacer?- el taheño le miró curioso, el moreno se estaba comportando, es más, no le había picado en toda la tarde.

-          ¿Ah, por qué habría de hacerlo?- el moreno sonrió socarronamente.

-          ¿Qué pasa, Erza? ¿No dijiste que eras buena arreglando cosas?- la niña chasqueó la lengua y frunció el ceño, levantó un poco su mano e hizo aparecer un pequeño muñeco de hierro.

Kid estaba sorprendido, muy sorprendido, eso era la habilidad de Trafalgar ¿Y qué era eso, un robot? Él también construía robots cuando era niño, le fascinaba ¿Acaso eso lo heredó de él? ¿También podía controlar el metal? Law sabía lo que pasaba por su mente.

-          Vamos, enséñale.

-          Tsk…no me des órdenes, Trafalgar.

-          ¡¿QUÉ COÑO FUE ESO?! La madre que me parió…..- el pelirrojo se llevó una mano a sus sienes y las masajeó, de puta madre si tenía que aguantarse a dos Trafalgar, sin embargo el estrés desapareció cuando vio al robot caminar en el suelo.

El muñeco se movía con algo de dificultad, pero se movía, incluso subía y bajaba los bracitos, el pelirrojo no pudo evitar tener una punzada de orgullo, la niña había sacado de él mucho más que el parecido físico, y hablando de ello, se fijó en sus ojos, eran plateados y brillantes, jodidamente hermosos, tan transparentes que podía saber lo que sentía solo con mirarle sus orbes, no pudo evitar pensarlo ¿Así son los ojos de Trafalgar? Nunca los pudo ver bien por el puto sombrero que siempre llevaba. Levantó su mano e hizo que el muñeco se elevara en el aire, ganándose la atención de la taheña y una expresión sorprendida y curiosa.

-          ¿También te gusta reparar cosas?- preguntó la niña.

-          Sí, lo hago muy seguido.

-          Mmmmm…ya veo- no se lo iba a decir, apenas se conocían y no había hecho otra cosa que tocarle las narices, Kid negó con la cabeza, era tan obvio lo que quería pedirle.

-          Puedo hacerte mejorar, aún no controlas bien el metal, te falta práctica- la niña frunció el ceño, sin embargo sabía que era cierto, las únicas veces que controlaba bien su habilidad era en circunstancias extremas, tenía que mejorar para proteger a su familia.

-          Bien, pero más te vale que seas bueno, Eusstas.

-          ¿Eh? ¿Ya no me dices el “ya”?

-          Solo lo decía porque noté que te molestaba, pero ya me aburrí de hacerlo- alzó los hombros con indiferencia, el moreno negó con la cabeza con una media sonrisa, hay que ver cómo era la mocosa….

-          Tsk….jodida enana.

-          Al menos no parezco un payaso con ese maquillaje.

Y ahí iban de nuevo, Law solo pudo suspirar, esto iba a ser muy complicado, observó a los demás, Levy dormía en el regazo de Sachi que conversaba amenamente con Heat al igual que Penguin y Killer con una emocionada Mavis revoloteando alrededor de ellos, al menos los demás le ayudarían a evitar una hecatombe si los taheños decidían matarse entre ellos. Finalmente la madrugada llegó, ya era muy tarde, los chicos Heart se despidieron y llevaron a las niñas a sus camas, Kid intentó burlarse de Erza diciendo que las enanas tenían que dormir temprano o no crecerían, como respuesta solo obtuvo un lindo panorama del dedo corazón de la pelirroja, Trafalgar casi se ahoga de la risa.

Erza caminaba hacia la habitación del moreno y entró como siempre, Law le hizo un lado en la cama y ella se recostó a su lado.

-          Fue divertido molestar a Eusstas.

-          Fufufu ¿te agradó entonces?

-          Mmmm….sí, pero no voy a dejar de tocarle las narices, da mucha gracia fufufu.

-          Lo sé, también me gusta hacerlo.

En el otro barco Killer y Heat hablaban emocionados mientras que Kid solo pensaba en lo mucho que se parecía la mocosa al moreno, sus ojos le dejaron hipnotizado, estaba orgulloso, esperaba una cría llorona o muerta de miedo, pero era todo lo contrario, era fuerte, inteligente, un carácter de los cojones pero bueno….sonrió llamando la atención de los otros dos.

-          ¿Te fue bien con Erza, Kid?

-          Creo que fue bastante bien ¿y ustedes qué?

-          ¡Es perfecta! ¡Incluso le fascina la pasta como a mí!- a Kid le escurrió una gota de la nuca por ese comentario, se volteó a ver a Heat y este le devolvió una sonrisa suave.

-          Levy es adorable, se parece a mí en algunas cosas pero es más como Sachi.

-          Ya veo, parece que os lleváis bien con los otros.

-          No son lo que parecen, pensaba que eran unos sádicos de mierda como Trafalgar pero me equivoqué, incluso son hasta tímidos. Quedé mañana con Penguin para vernos de nuevo, imagino que ustedes también- respondió Killer, los demás asintieron- Bueno pues voy a dormir, nos vemos.

Heat también se retiró de la habitación dejando a Kid solo con sus pensamientos. Ninguno se imaginaba que este sería el comienzo de una nueva vida, tanto para ellos como para la otra tripulación.


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