POV Autor:
Todos habían decidido salir por separado, Sachi, Heat y Levy fueron a la parte más alejada del pueblo, si los dos peliazules iban a “jugar con fuego” lo mejor era estar bien lejos de todo…. Mavis arrastraba a Killer y a Penguin a una feria que había en el pueblo, la música se escuchaba desde el puerto al igual que las voces alegres de las personas. Kid esperaba por el moreno y la pelirroja en su barco, no tenía ganas de pasear y sus visitas no eran precisamente muy activos.
Erza esperaba que su otro padre le ayudara a mejorar sus habilidades con el metal, de todo el grupo ella siempre fue la más fuerte y la líder, tenía que proteger a los suyos, especialmente cuando se convirtiera en la capitana de su propio barco. Con esa idea en mente subió con el moreno al barco contrario.
El pelirrojo esperaba algún saludo burlón de su parte, sin embargo la cosa fue muy diferente, dijo un simple “hola” y comenzaron a practicar, pasando así varias horas entre levantar metal o manipularlo a su antojo. Law solo leía un libro sentado en la cubierta levantando la vista de vez en cuando.
Kid le llamaba mucho la atención, especialmente por su brazo mecánico, no quería ser indiscreta y preguntar, pero su sentido común era igual al de Trafalgar.
- ¿Eusstas, qué le pasó a tu brazo?- el moreno dejó de leer y prestó atención a la charla, el taheño se sorprendió un poco por la pregunta.
- Lo perdí en el Nuevo Mundo en una pelea.
- ¿Lo hiciste tú mismo?- el pelirrojo puso su mejor sonrisa de tiburón.
- ¿Qué tú crees?- la niña le acompañó en la sonrisa, aunque la de ella era más como la del moreno.
- Fufufu, lo siento, fue una pregunta tonta. Eso quiere decir que eres muy bueno en lo que haces- Kid se extrañó ante el comentario ¿eso fue un elogio?
- Es muy obvio, enana, soy el mejor.
- Lo que digas, Eusstas, pero ahora deja de alardear y sigamos- el otro chasqueó la lengua pero igual le hizo caso, era divertido jugar con ella.
Había caído la tarde y Law debía ir a recoger su pedido, se levantó de su sitio y aprovechar que los pelirrojos estaban entretenidos, para su mala suerte la niña nuca le perdía de vista.
- ¿Adónde vas, Law?- Kid no dejó pasar por alto que le llamó por su nombre, nunca pensó que alguien pudiese acercarse tanto al moreno.
- Regreso pronto- usó su SHAMBLES y desapareció antes de que la pequeña pudiese replicarle algo.
- Tsk…...Trafalgar, idiota, dejemos esto para mañana, Eusstas, adiós- la pelirroja saltó al submarino y entró, dejando a Kid solo en la cubierta.
- Hay que joderse, bueno, me voy al pueblo.
El taheño caminaba por las calles, como la otra noche no fue al bar hoy se emborracharía el doble, localizó el local y entró tranquilamente echando una ojeada a todo el sitio. En una mesa apartada encontró algo que le llamó la atención, con su fila de dientes esbozó su típica “sonrisa” y se adelantó hacia la mesa.
- No sabía que te gustaba beber solo, Trafalgar- el moreno alzó la vista divertido.
- Bueno, Eusstas-ya, llevo unos días ajetreados, descansar un poco no me vendría mal.
- Je, lo he notado- Kid se sentó frente al moreno y pidió una botella de sake- ¿Así que Erza eh?- el otro le miró con duda.
- En realidad es Erza Scarlet- Kid hizo el gesto de alzar una ceja, aunque no las tuviera.
- ¿Scarlet? ¿De dónde mierda sacaste ese nombre?
- Fufufu, sabía que no te darías cuenta, Eusstas-ya…- Solo se me ocurrió aunque a ella le gusta y quiso conservar los dos, no le veo problema.
- Está muy compartida- dijo el pelirrojo.
- ¿Mmmmm? ¿Compartida?
- Sí, es igual a mí excepto por los ojos, en el carácter tiene mucho de ti, aunque cuando se molesta parece un puto perro.
- Fufufu…me pregunto de quien habrá sacado eso- Law se había controlado desde ayer, ya le tocaba su dosis de putadas con el pelirrojo, éste chasqueo la lengua ante el comentario pero luego rio un poco.
- Y es una tocapelotas como tú.
- Eso es bueno, a mí me ha ido bien siendo así.
- ¿Le diste los goggles?
- Oh, sí, una vez casi se saca un ojo por estar desarmando cosas, pensé que sería bueno que los tuviera.
- Yo también pasé por eso, al final me adapté tanto a usarlos que los llevo siempre- Kid se fijó en que el moreno tenía, además de su nodachi, algo envuelto con una forma larga y delgada- ¿Qué llevas ahí, Trafalgar?- el moreno volteó hacia el objeto, dio un sorbo terminando su trago y respondió.
- Es una espada para Erza.
- ¿Una espada? ¿Para qué quiere una?
- Un día le pregunté si quería usar armas, me dijo que le gustaban las espadas, especialmente las nodachis, así que mandé a hacerle una.
- ¿Ah? ¿Y por qué simplemente no la compraste?
- ¿Has visto su tamaño? Es muy pequeña para usar una como la mía, por eso la mandé a hacer más chica- el pelirrojo no pudo evitar reírse un poco.
- Vaya, Trafalgar, no pensé que fueses tan tierno- el moreno frunció el ceño algo sonrojado por el comentario, era un rubor muy leve pero el pelirrojo lo notó e igual sus mejillas tomaron un color rosado, pero al ser pálido era notable, el moreno sonrió socarronamente.
- ¿Qué pasa, Eusstas-ya? ¿La bebida te ha calentado tanto como para sonrojarte? Fufufu, creí que aguantabas mejor el alcohol.
- Tsk….que te den, Trafalgar.
Conversaron durante horas, con piques y burlas de por medio pero de una forma amena y agradable, se sentían a gusto en esos momentos y entre más bebían más reían y se tocaban las narices. Kid estaba algo mareado igual que el moreno, estaban bastante lúcidos pero tenían la felicidad del que está casi borracho.
- Eh, Trafalgar, me fijé en que Erza tiene tus ojos.
- Oh, lo notaste, pero es igualita a ti hasta en la forma de vestir ¿viste su abrigo?
- Jajaja, sí, se ve intimidante, jajaja. Oye, Trafalgar.
- ¿Qué pasa?
- Déjame ver tus ojos…..- el moreno le miró incrédulo.
- …..¿qué?.....
- Que me dejes ver tus ojos, con ese puto sombrero no puedo verlos bien.
- Pero si ya viste los de Erza, son iguales a los míos ¿Por qué tanto interés?
- Porque quiero ver los tuyos, imbécil, así que quítate esa cosa de una vez.
- No me des órdenes, Eusstas-ya.
- Aaaahhhhh…….si hasta eso sacó de ti, si le digo algo suelta tu “no me des órdenes, Eusstas-ya” y lo del dedo corazón también lo hace igual a ti.
- Fufufu, y eso que no la has visto cuando se cabrea, recuerdo el primer día que le dije enana comenzó a chillar y a insultarme, incluso se le hinchan las venas como a ti, fufufu.
- Si serás cabrón, Trafalgar.
- Fufufu, esa es la frase que más me dice- quedaron en silencio, no uno incómodo, sino tranquilo y agradable- Deberíamos regresar, los demás seguro ya están de vuelta.
- Sí, vamos.
Ambos salieron del bar, caminado por las calles que se encontraban vacías por el frío que había en ese momento. Kid quería seguir pasando tiempo con el moreno pero sabía que seguramente la pelirroja lo esperaba, vivía con él al final.
- Eusstas-ya- el chico le miró- Nuestro log pose ya está listo para zarpar, al ser la primera vez que ellas pasan por clima frío no quiero abusar de sus cuerpos, así que saldremos mañana a la próxima isla que debe ser cálida- guardó silencio un momento- Si quieren pueden venir con nosotros, imagino que Killer-ya y Heat-ya quieren seguir pasando tiempo con las niñas.
- ¿Me está proponiendo irnos juntos? ¿En serio?- el pelirrojo no pudo evitar sonrojarse un poco ante la propuesta, no se miraron en ningún momento, esto era vergonzoso…..
- ¿Eusstas-ya?
- Me parece bien, Trafalgar, si los idiotas de mi tripulación se tuvieran que separar de las enanas armarían un drama de la ostia.
- Fufufu, de acuerdo, nos vemos mañana entonces, buenas noches, Eusstas-ya.
- Hasta mañana, Trafalgar.
Kid subió a su barco sonriente y sus amigos le esperaban como cosa buena, Killer al ver esa cara tan extraña en su capitán no pudo evitar preguntar.
- ¿Te fue bien con la niña…..o con cierto moreno?- Heat soltó una risilla por el comentario y Kid frunció el ceño.
- Tsk…que te den Killer….mañana zarpamos.
- ¿Qué? P-pero…..- el rubio no terminó de hablar cuando Kid le interrumpió.
- Trafalgar dice que hace demasiado frío para las enanas, la próxima isla parece cálida y ya tienen su log pose listo, nos iremos con ellos- los otros dos guardaron silencio y analizaban lo que dijo su capitán.
- ¿Capitán, está diciendo que Trafalgar nos invitó a irnos con ellos?- Heat no pudo evitar preguntar.
- ¿Estáis sordos o qué? Zarpamos mañana temprano, voy a dormir así que no me molesten- el pelirrojo fue a su camarote dejando a sus compañeros con cara de no creérselo aún.
- Heat, escuchaste lo mismo que yo…. ¿cierto?
- Sí, Killer, al parecer las cosas van bien.
- Vaya…..están llenos de sorpresas…..
- Supongo que no lo dices solo por Trafalgar- Killer dio un brinco en su sitio por el comentario del peliazul, era cierto que no pensaba solo en el moreno en ese instante.
- B-bueno, hoy fue divertido con Penguin y Mavis…. ¿Y a ti cómo te fue?
- Levy tiene mucho entusiasmo por mejorar y Sachi le alienta a hacerlo, al parecer no le importa que sea un lanzallamas como yo….. Bien, mañana nos espera trabajo, nos vemos.
- Sí, buenas noches.
Trafalgar entró en su camarote, ni se inmutó ante la presencia de la pelirroja, ya sabía que le estaba esperando y seguramente molesta por haberse ido, suspiró, se quitó su abrigo y sombrero con parsimonia ignorando la mirada fulminante hacia su nuca.
- ¿No deberías estar durmiendo ya?
- Debería, pero ya vez que no lo hago- el moreno sonrió un poco, era cierto que las pesadillas habían disminuido pero igual la niña se colaba en su cama como si fuera un gatito en busca de mimos y atención.
- Erza- la niña le miró con duda, Law no se estaba burlando de ella, ni siquiera el tono de su voz sonaba socarrón, era un tono claro y hasta dulce, haciendo que su curiosidad creciera mucho más.
- Estás extraño ¿Qué pasa?- el otro rio, tomó el objeto y se lo tendió.
La pelirroja por inercia lo tomó con sus manos, sus ojos se posaron en los del moreno y notó un ligero temblor en ellos, estaba nervioso. Con las manos algo temblorosas rompió el papel que envolvía el objeto y cuando lo sacó sus ojos se abrieron como platos.
Era una espada, una nodachi para ser exactos, la sacó de su funda y la observó meticulosamente, la empuñadura era negra con una fila de rombos rojos que terminaba con una base dorada, la hoja estaba dividida en dos colores: una parte era plateada y brillante mientras que la otra era un acero tan oscuro que se confundiría con el negro, era larga, al menos le pasaba un buen tramo a su altura. La volvió a poner en su funda y notó que esta tenía algo diferente, era oscura, en uno de los extremos tenía el jolly roger de la tripulación en amarillo y justo al lado, con el mismo color, tenía una inscripción: “Trafalgar D. Erza Scarlet”.
Habían pasado al menos quince minutos y la pelirroja no decía nada, el moreno ya estaba tenso, no sabía si le había gustado la espada o si el detalle de la funda era demasiado, estaba en medio de un debate mental cuando se dio cuenta que la niña estaba justo frente a él y se aferraba la espada a su pecho, estaba sonrojada hasta las orejas y tenía los ojos brillosos.
- ¿Erza?- ella no respondió, el moreno se hincó para verla mejor - ¿Erza, estás bien?
- Por eso desapareciste aquella noche, fuiste a la herrería y hoy la recogiste- Law no dijo nada, solo le miraba con atención pero en unos segundos terminó tirado en el suelo con una pelirroja eufórica abrazándole por el cuello con una sonrisa tan amplia que no parecía de ella, él solo pudo atinar a rodearle con los brazos y acariciar su cabello con suavidad.
- ¿Entonces, te gustó?- la niña levantó la cabeza y le miró.
- ¿Bromeas?........ ¡ME ENCANTA! ¡ES PERFECTA, LAW!
- Fufufu, me alegro, pero si sigues gritando así despertarás a todos en el submarino.
- Vale, vale- Erza solo seguía aferrándose a su nodachi.
- Las espadas tienen que tener un nombre.
- ¿Ah?
- Por ejemplo, la mía se llama Kikoku, tienes que ponerle uno a la tuya, no tiene que ser ahora, puedes….
- Estaba pensando…..Benisakura….
- ¿Benisakura? Eso significa sakura carmesí.
- Me gusta la flor de sakura y bueno…..para que combine conmigo lo del carmesí, ya sabes…por mi cabello- el moreno sonrió ante la idea, le parecía un nombre perfecto.
- Suena muy tú- le revolvió los cabellos- Venga, vamos a dormir, mañana zarpamos.
- ¿Eh? ¿Y qué pasa con los otros?
- Vendrán con nosotros.
Law se dio un baño y se cambió de ropa, se acomodó en su cama con Erza a su lado, pero esta vez la niña le abrazó el torso, el moreno le pasó su brazo por debajo de los hombros hasta llegar a su nuca y hacer círculos en ella, ya casi estaba dormida pero tenía que decírselo.
- Law
- ¿Qué pasa?
- Gracias
- ¿Lo dices por la espada?
- No……. por estar aquí conmigo- y finalmente se quedó dormida. El moreno abrió los ojos con sorpresa y le miró, le apretó aún más en el abrazo y le besó la frente.
- Eso debería decirlo yo, descansa, Erza.