-Misaki-Me llama Usagi-san, despertándome de mis pensamientos- La salsa se está quemando.
-Oh-Miro la olla y veo que efectivamente, la salsa ya está pegada a la olla- Lo siento, la hare de nuevo.
Me apresuro a tomar la olla y llevarla al fregadero. Allí le hecho agua caliente y la dejo remojando para que salga lo pegado. Me doy vuelta y lo veo mirándome. Me quede paralizado, es primera vez en varios dias que me mira, tan directamente.
Mi mirada trato de mantenerla, pero me sentí intimidado y la aparte y me voy a hacer una salsa nueva.
Me siento como si fuera la primera vez que me mira, aquellos días donde me sonrojaba por todo. ¿Sera que me esta mandando señales? ¿Quiere que haga algo? ¿Quiere algo de mi?
Seguí cocinando, tratando con todas mis fuerzas que no se me pegue nada ni se queme. Usagi solo iba de una habitación a otra ¿Está nervioso? ¿Porque? ¿Será por la visita que viene? ¿Quien viene?
Poco a poco siento como mis celos empiezan a aflorar, siento que no quiero que venga nadie a quitarme a usagi-san, no quiero
Termine la cena, empiezo a poner la mesa. Aun me falta cambiarme de ropa y estaré listo. Veo que Usagi-san baja y está muy bien vestido, con traje y corbata roja. Está recién bañado y en su pelo aun se ven gotas, trae el saco del traje en el hombro y veo que está hablando con alguien por celular.
Termino de poner la cena y me dirigí a las escaleras para vestirme. Veo que el se rie y escucho
“si, ya está todo listo.. Si.. ya tengo ganas de que estes aca”
Me detengo de golpe, me quedo paralizado… ¿Usagi-san me está engañando? Me giro a ver a Usagi-san y él me mira con sorpresa y se aparta para que ya no pueda escuchar. Me siento herido y traicionado.
Me dirigí a mi habitacion (que despues de tanto tiempo es la misma que la de Usagi-san), me quité mi ropa y me dirigí a la bañera. Dejó que el agua me reconforte, pero siento que me duele mucho.. ¿Que tengo que hacer? ¿Tengo que esperar a que llegue quien sea que llegue? ¿Tengo que irme y dejarlo ser feliz?.. Yo solo quiero que sea feliz, solo quiero eso y si no soy yo quien le hace feliz, tengo que ser lo suficientemente valiente para irme a un lado… Irme del lado de Usagi-san.
Mis lágrimas empiezan a traicionarme, me llenan mi cara, mezclados con el agua de la ducha. Me abrazo a mi mismo, tratando de no perder las fuerzas y no perder el calor. Cierro la ducha y mi corazón se siente destrozado.
Me coloca la toalla en la cintura y salgo del baño, voy a mi habitación y veo que Usagi está ahí, buscando algo. Cuando me ve, veo que sus ojos me recorren y se detienen en mis ojos. Frunce el ceño y me mira. Me coloco nervioso, por su mirada y mi poca ropa.
El abre la boca para decirme algo y luego la cierra. Empieza a avanzar hacia mi y me da un casto beso en los labios. Veo en sus ojos algo que no puedo reconocer, algo como.. Melancolía.
-Lo siento-Me dice antes de abandonar la habitación.
Me quedé una vez más, paralizado. Es verdad.. El me esta engañando, él ya no me ama, él ya no quiere estar conmigo.
Me volví una molestia a Usagi-san.
¿Que hago? ¿Me quedo en la cena? O ¿Me voy a un lugar donde no tenga que ver como Usagi-san es feliz sin mi?
No quiero irme, no quiero quedarme.
¿Que hago?
Cuando termine de vestirme, ya tome una decisión, me miro al espejo y veo que mis mejillas y mis ojos están rojos por las lágrimas. Me termino de limpiar la cara y me enfrento a esta nueva situación.