Al otro lado del lago pude notar la presencia de alguien, era una silueta de color negro, esta desapareció frente a mis ojos y cuando volvió a aparecer se encontraba a un lado mío, que de paralizado de la impresión, aquella silueta me miraba fijamente con sus penetrantes ojos azules, una capa lo cubría de pies a cabeza y tenía una especie de velo que le cubría el rostro dejando al descubierto esos ojos, algunos mechones rubios se colaban por debajo de la capucha hasta su rostro, tenía unos guantes negros y en una mano sostenía una esfera.
-Su majestad, disculpe si lo he asustado-hablo aquella persona e hizo una leve reverencia- es un honor estar en su presencia.
-Di-diría lo mismo-le conteste temeroso- pero como puede ver usted me conoce, pero yo no a usted.
-Eso es cierto, mis disculpas mi nombre es Yoka y magia, permítame mostrarle mi hospitalidad, venga conmigo-se dio la vuelta camino unos cuantos paso y se detuvo para girarse a mí, le tengo una sorpresa que sé que le gustara-siguió caminando-.
Tome las riendas de Whiteness y lo seguí, hasta el claro del bosque donde con una mano movió la escena como si fuera una cortina, él la hizo a un lado para dejarme pasar ahora me encontraba en un área con muchos árboles de gran tamaño tanto de altura como de grosor, fue a uno de ellos y lo abrió, yo no vi ninguna puerta dibujada en este o al menos no la percibía.
-Él se puede quedar aquí, no le pasara nada-me indico antes de entrar-
Amarre a Whiteness y entre al árbol, por dentro era una pequeña cabaña, daba algo de miedo su aspecto pero al igual que lo que me trasmitía el bosque lo hacia esta, lúgubre pero hermosa.
-Su majestad desea algo de comer?-me pregunto-
-no, gracias estoy bien.
-Bien, entonces creo que podemos pasar a ver mi sorpresa.
Con las manos me indico que lo siguiera y lo hice hasta a una habitación, abrió la puerta y en cuanto se apartó del frente para que pudiera ver el interior, me llene de sorpresa y corrí hasta la cama, ahí se encontraba Asagi, dormía y vestía un traje color negro. Grite su nombre esperando que despertara, pero al final recordé lo que me había contado mi madre, él estaba en un sueño eterno y comencé a llorar.
-Le dije que a su majestad le gustaría mi sorpresa, pero me temo que hay un inconveniente en esta y no me refiero al estado en el que se encuentra, el sueño eterno tiene solución y ese es el menor de nuestros problemas.
-No entiendo, a que te refieres?-pregunte confundió y fue ahí cuando corrió una cortina, detrás d esta estaba otra cama, había una persona vestida de blanco con algunas flores, tenía el mismo rostro que Asagi-
-Su nombre real es Usagi, mientras que Asagi es el señor “noche” Usagi él es señor “naturaleza” su hermano menor.
-Asagi nunca menciono eso.
-Es por que desde hace mucho tiempo son una sola persona, dos almas en un mismo cuerpo. Le explicare. Hace muchos años Asagi se enamoró del fuego, eso usted ya lo sabía, sus padres eran humanos normales, pero Asagi y Usagi se habían dado cuenta desde muy pequeños eran diferentes, Usagi tenía gran empatía con los animales, hasta el más salvaje junto a él se volvía el mas mansito, las plantas que se marchitaban solo con un roce de sus dedos volvían a la vida, en cambio Asagi podía ver hasta en la más grande oscuridad, como si fuera de día, si él quería podía hacer que la noche fuera oscura con solo desearlo o tan hermosas y claras, podía hacer que en la habitación más iluminada reinara la oscuridad, sabían que no podrían obtener respuestas de sus padres, así que, investigaron el libros y en las noches salían para saber más, y ya que Usagi poseía cierto poder en los animales salían con algunos lobos o panteras para que los cuidaran, hasta que me encontraron, yo les conté sobe todo aquello que me preguntaron, pero una tarde Usagi corrió en mi ayuda, el lloraba desesperado, no quería que su hermano, después de recibir demasiados golpes de parte de su padre a causa de su relación con fuego, estuviera en el sueño eterno y como había leído acerca de la unión de almas, me pidió que lo ayudara a unir sus almas y así poder vivir. Aunque en un principio eran totalmente diferentes, después de ser tantos años una sola persona Usagi adquirió la forma de Asagi, cuando la mujer que creías que era tu hermana quiso matarte pero en lugar de eso, enterró la espada en el corazón Asagi lo que ocasiono que se separaran, yo me lleve los cuerpos sin que nadie me viera y los he mantenido ocultos en este lugar. Ellos pueden regresar del sueño eterno, pero esto no durara para siempre puesto que si no volvemos o más bien vuelves a unir sus almas ellos volverán a ese sueño pero de manera permanente.
-Pero mi madre dijo no se podía volver del sueño.
-Es por que no se puede, pero tú eres diferente, eres dos entidades en una y es por eso que tú y solo tu si puedes hacer eso posible, Dale motivos por cual volver, se sinceró con él, dile cuanto lo amas, cuanto lloraste por él, cuanto lo extrañas y también cuéntale de tu traición, de cómo creyéndolo muerto te volviste el amante del rayo. Yo solo puedo prestarte algo de mí, de magia para traerlo devuelta y cuando unas sus almas, cuando despierten les contares a los tres sobre una vieja historia que muy pocos conocen y que ayudara a la unión de las almas, por ahora tiene que volver su majestad, su madre lo busca, usted debe de terminar su relación con el rayo, además nadie puede saber que Asagi sigue vivo y que se encuentra en Krazaaj.
Con ayuda de la magia de Yoka volví en un segundo al palacio, fui a dejar a Whiteness a las caballerizas y al regresar a mí a mi habitación me encontré con Hizaki y Teru.
-Al fin sabes la verdad-dijo Hizaki-
-Si…al parecer. Porque sigo sin entender por qué seria yo enemigo de Teru.
-Eso fue lo que te dijo en aquella ocasión?-volteo a ver a su hermano muy serio-
-eso ya no importa, solo quiero saber por qué.
-Sabes por qué nuestra madre no quiere saber nada acerca de Asagi?-dijo ahora Teru-
-Su pongo que es por la misma razón que crecí creyendo que soy un bastardo.
-En parte, y no solo a ti te cuida demasiado también lo hace con Teru.
-Como te dije, tu eres el día y yo la luna, existen entidades que se pueden enamorar entre si y otras que lo tienen que hacer con humanos normales, pero también hay entidades que tienen prohibido enamorarse de otra y más si esta es su contra parte.
-Nuestra madre oculta el hecho de que Teru es la luna, muy pocos lo saben, en cambio dice que es las estrellas. Si el cielo nocturno, es decir Asagi se encuentra con Teru formarían la noche, aunque él ya se autoproclamo así, que en parte es cierto, pero para ser más poderoso necesita de Teru, tu eres poderoso por ser ambos en una sola persona y él quería matarte de bebe porque así lo ha dicho la historia, el día y la noche son enemigos, Teru al formar parte de lo que conforma la noche lo es, según los antiguos escritos, la luna y el cielo nocturno deben de enamorarse, el sol lo hará del cielo azul, mas nunca la noche del día, fuego es enemigo del agua aunque prefieren que lo llamen lluvia, ahora lo entiendes?-me pregunto al final Hizaki-
-Sí, ahora me queda claro algunas cosas.
-Madre te fue a buscar, no tardará en llegar-continuo Teru-
- Lo sé, cuando llegue díganle que no me busqué a mi habitación, quiero estar solo y no quiero hablar con ella o con Yohio.
-Se lo diremos-contestaron ambos-
-Ustedes… ya es muy tarde para que sigan despiertos?
-De hecho para Hizaki lo es, para mi no-dijo Teru-
-Cierto, luna.