Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Destino por shipa-chan

[Reviews - 12]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Muchas gracias por su apoyo. Aqui la segunda parte disfruten.

Detestaba por completo días como estos, no podía comer demasiado, las hormonas me hacían tener cambios de humor, sin mencionar el líquido de silck que resbalaba por mi trasero, ver un alfa me ponía los pelos de punta y tenía la necesidad de colgarme de sus cuellos en busca de protección. Eracierto que los supresores ayudaban para ocultar mi identidad omega y estabilizaba mi celo pero no podía evitar sentirme irritado. El simple hecho de tener que levantarme para ir a trabajar requería de mucha energía y voluntad.


-Te ves del asco-saludo Lovinocon su sin igualencanto, aun vistiendo su ropa de dormir


-¿Estás seguro dequerer salir en este estado?-pregunto un poco preocupado Roma


-Estaré bien, duplique la dosis para evitar accidentes- comente mientras intentaba digerir los huevos verdes


-No olvides llevar “eso” para calmar un poco la ansiedad-dijo mi padre un poco avergonzado


Casi me atraganto con el vaso de leche, Lovino se  volteo e ignoro aquel comentario mientras Roma soltaba una risita burlona. Una vez termine, subí a mi habitación y aun avergonzado saque un pequeño estuche de el cajón del ropero., lo oculte  en el morral que siempre cargaba  y me marche, una vez más me topé con Roderich, al responder a su saludo me di cuenta que alguien le acompañaba, dejándomeestático.


-kesesese nos vemos más tarde señorito, el asombroso yo vuelve a trabajar-


Gilberthabía tomado en sus brazos a Roderich y le besaba de manera salvaje y extravagante. Fue justo cuando se inclinaron un poco que lo note, un poco arriba de su clavícula  una muy notable marca de sumisión. Me di vuelta de inmediato completamente abochornado, el corazón me latía como si no hubiera un mañana, seguí caminando sin fijarme en quien empujaba, fue solo cuando alce  la vista que me topé con una espalda enorme, si hubiera estado en condiciones normales no habría ocurrido nada, lo habría esquivado para seguir mi camino, pero debido a mi celo mis caderas se volvían gelatina y al intentar retroceder resbale cayendo en el duro suelo.


-Hey¿estás bien?-


-Auch, bloodyhell,- gemí e dolor al resentir el golpe, alce mi mirada molesta


Y nuevamente me topé con aquellos ojos azules, no sécuánto tiempo estuve perdido en su mirada pero al parpadear un poco ya me encontraba de pie  y con el corazón aun acelerado, sentía mis mejillas calientes, el olor de un alfa sin acoplar me incitaba demasiado, tanto que no me di cuenta de mis manos en su pecho, el traje del ejercito le hacía ver más varonil, con solo pasar mis dedos sobre la gruesa tela podía sentir los bien formados músculos, instintivamente incline  mi cabeza rozando su mentón y exponiendo el hueco entre mi cuello y hombro, no pude evitar soltar un ligero ronroneo, cuando su cálido aliento choco contra mi oído


-O-oi estas bien?...se te han pasado las copas de nuevo?-comento nervioso


Sentí las agudas vibraciones de su voz retumbar en mis oídos, un cosquilleo en mis dedos y electricidad recorriendo mi espalda solo lograron entumecerme más, era tan embriagador su olor, una mezcla de café y almizcle. Sus brazos me rodearon presionando mis cansadas caderas, solté un ligero  gemido, nuevamente el silck se escurría por mi trasero y mi interior comenzó a retorcerse.


-mmm…hueles muy bien-sentí su lengua rozar mi cuello y su mano bajar a mi trasero-tan delicioso como el chocolate…me encanta el chocolate-


Fue entonces que dentro de mi nublada mente algo hizo clic, inmediatamente me aleje de él, sus mejillas completamente sonrojadas y aquellos ojos azules se habían oscurecido de una profunda lujuria.


-L-lo siento…- el parecía aun atontado, por lo que aproveche para salir de ahí, el silck comenzó a escurrir por mis muslos, voltee de un lado a otro verificando que nadie me viera.


-gracias a dios siempre llego más temprano que los demás,- murmure un poco aliviado


A unas calles note la gran pared que protegía el centro de recrió, como pude me las arregle para quitarme el suéter negro que traía y lo amarre a mi cintura, intente actuar normalmente al saludar a Vash lo cual fue fácil, ni siquiera me tomo atención, pero no logre convencer a  Emma


-De verdad estoy bien-dije con una sonrisa forzada


-No lose Arthur…te noto un poco diferente de lo usual- se inclinó un poco haciéndome retroceder un paso- tienes un aura…sensual y atractiva


-Pero que tonterías dices…podrías darme las llaves por favor-


Me miro aun desconfiada, pero termino dándome las llaves, al llegar al pasillo que conectaba con el departamento de embriología me topé con los dos guardias betas, los ignore como era costumbre y entre un poco nervioso. Una vez dentro deje escapar un suspiro de alivio, rápidamente corrí al baño de la oficina y me encerré, debía darme prisa antes de que Francis llegara.


-Muy bien ahora solo debo calmarme y que “eso” hagasu magia-


Tome el estuche que saque de mi ropero y lo abrí, nuevamente como cada tres meses tenía que hacer uso de aquel bendito vibrador, era de color rosa, cortesía de Roma hace años,  me baje los pantalones junto con mi ropa interior y amarre en mi muslo izquierdo aquel cordón que unía el vibrador, tome papel y limpie mi pegajoso trasero, lentamente deje como ese aparato frio me penetrara.


Encendí el vibrador y toda tensión desapareció, las débiles vibraciones calmaron mi caliente cuerpo,  una vez más tranquilo saque de mi morral un cambio de ropa interior,  afortunadamente mi pantalón no se manchó con el silck. Justo al salir del baño Francis entro con su fastidiosa voz y la misma ropa del día de ayer.


-Oh petitcejon me siento tan lleno de amor este día, eh pasado la mejor noch..—


-No me interesa saber lo que haces con o que con tu vida privada.-


-joo tan desagradable como siempre…si sigues de esa manera terminaras solo  toda tu vida- dijo mientras tomaba su lugar en el escritorio.


-Habla lo que quieras no me importa- tome mi bata del escritorio


Una vez más seria un largo día


.-..-.-.--.-.-.-.-.-.-.-.-.----..-.-.-..-----


-Maldición pensar que tengo que salir tan temprano a comprar comida-


Desde que había vuelto se me negó ir al maldito centro de recrió para ver a mi tonto fratello, el abuelo había dicho que solo tenía que esperar a que el malhumorado de Arthur sacara información para el escape.


-Jovencito no te interesaría unos tomates- baje la mirada a decir verdad se veían apetitosos,


-¿Qué precio tiene?-tome uno para comprobar su estado, sin dejar de mirar al comerciante


-Dos monedas de cobre  el kilo-dijo sonriente el viejo beta


-¿Es una broma? Es demasiado caro


-Bien si no te agrada el precio podemos intercambiar- aquel beta se acercó demasiado y me giño el ojo


-D-disculpa???-dije molesto, como se atrevía ese idiota


-Eres pequeño como un omega para ser beta, asíque…,¿qué tal un poco de atención para este viejo, a cambio de comida?, para mi es algo aceptable-


Y ahí se había ido mi autocontrol, no es que me controlara con mucha frecuencia, pero este tipo se había pasado dela raya por completo, como se atrevía a cambiar sexo por unos simples tomates por más apetitosos que se vieran.


-Maldito bastardo degenerado, como te atreves a intentar negociar con mi cuerpo-


-Este es el mundo actual, tómalo o déjalo niñato-


- Primero muerto-  estuve por darle un golpe, pero la presencia de guardias alfa rondando me hizo tener que tragarme mi orgullo


Me marche de ahí, no me importo el haber llamado la atención, mejor para ellos al saber los tratos sucios que hacia aquel hombre.


Finalmente encontré un puesto donde obtuve algunas verduras a buen precio. Me senté cerca de la plaza principal, ese era el único lugar donde podía ver el centro de recrió sin tener que acercarme demasiado, poseía una gruesa pared con alambrado electrificado, alfas custodiando cada esquina del lugar tanto por dentro como por fuera.


-Definitivamente una cárcel, con diferente nombre-murmure


-No dejes que te escuchen o podrían encarcelarte-


-CHIGIIII-grite molesto cuando una figura alta, morena y cabello oscuro se paró a mi lado


-Lo siento, no quería asustarte-dijo mientras sonreía de manera tonta, a leguas se veía que era un alfa


-¿Qué demonios quieres? Y porque me acosas maldito degenerado-


Lo recordaba perfectamente, después de salir de la prisión el abuelo y yo caminamos a hurtadillas por las oscuras calles, fue cuando pasamos por un bar que un alfa se me acerco, parecía conocer a mi estúpido fratello ya que  al tenerme de frente me llamo Feliciano una y otra vez mientras me abrazaba, obviamente el abuelo  al ver que llamaba demasiado la atención lo alejo de un puñetazo y seguimos nuestro camino.


-Siento haberte confundido antes, debí dar una mala imagen así que quiero remediarlo-coloco una de sus bolsas a unlado y me ofreció su mano para levantarme, de mala gana acepte-mi nombre es Antonio un placer conocerte-termino diciendo mientras me besaba los nudillos.


-L-lovino-Sentí mi cara enrojecer por aquel acto.


-¿Lovino?- contesto un poco pensativo mientras me veía fijamente- así que eres el gemelo de Feliciano ¿cierto?-


Me di vuelta un poco tembloroso, tome mis compras y  lo enfrente


-Tienesalgún problema con eso bastardo-


-¿E-eh?...no claro que no, me topé con Feli cuando huía del ejército de reclutamiento-


Me congele ante eso, recuerdos tan dolorosos y angustiantes, intente proteger a mi gemelo con análisis falsos pero en aquel tiempo cometí un grave error con el que no contaba.


-Ese día- murmure – no debí dejar que realizara el examen físico-


-Siento lo que paso- no respondí solamente me di vuelta para regresar a casa


-Espera-de una de sus bolsas saco otra, y me la ofreció.


-T-tomates-dije como si se tratara de un sueño. Pero de inmediato me neguéa tomarlos- si planeas que te de sexo por ellos será mejor que te largues- dije molesto.


-Pero por quien me tomas Lovi- sentí mis mejillas arder de ira por el apodo- vi lo que paso en el mercado, no todos somos así, además supuse que al igual que Feliciano te gustaban los tomates-


-Deja de hacer eso-conteste molesto


-¿El qué?-


-Compararme con mi fratello idiota-dije furico, siempre era lo mismo desde niños no parabande compararme con Feliciano y siempre me cabreaba.


-Lo siento, solo fue un comentario, además no eres el único al que le gustan los tomates- sus ojos brillaron mientras frotaba la bolsa de los tomates en su rostro- Digo, es solo que quien no los querría, son blandos, suaves,  de buen tamaño y rico sabor, puede usarse para preparar, paella, pizza, pasta, caldos, salsas, y entre otras cosas, simplemente es perfecto-dios sí que estaba loco ese tipo- Es por eso que te doy esto como un regalo, solo pido a cambio el poder verte en mi bar-dijo mientras colocaba la bolsa en mi mano y me guiñaba de manera coqueta.


Me quede a  un poco aturdido por lo ocurrido, una vez caí en cuenta de lo que sucedió, no me pareció tan mala idea visitar su bar, claro solo para beber un poco de vino, después de todo estuve  encerado por cuatro años en una prisión donde te alimentaban con capsulas de vitaminas y placebos, de ninguna manera tenía pensado ir solo para ver nuevamente a al idiota de los tomates.


---.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.


-…Pero vamos quien no querría estar con tan buen partido como yo, en fin Salí de su casa cuando se duchaba, realmente es una pena que algo tan hermoso tuviera que acabar ¿túqué opinas Arthur?-


-No entiendo cómo puedes ser tan insensible  y descarado como para aprovecharte de los sentimientos y estupidez de una mujer ebria-murmure molesto mientras veo en el microscopio algunas muestras recientes


-ja, no quiero escuchar eso de alguien que grita ser un caballero pero en cuanto sus labios rozan el licor se manosea con el primer alfa que pasa frente a el-


-Qué demonios...¿quién te dijo eso?-


-Oh bueno un pequeño pajarito melo conto-


-Oh y supongo que ese pajarito es un español idiota que maneja un bar a seis cuadras de aquí-


-Como sea, no me juzgues por mi forma de amar, si ni siquiera puedes tener una relación estable-


-Si piensas que tener un revolcón con un completo desconocido que además se encuentra con su juicio nublado por el alcohol, es sinónimo de amar pues entonces estas muy equivocado, eso es “violación”-


-Pero que grosero, para tu información no era una desconocida, su nombre era Helena…no espera…Jennifer…Mari?...el punto es que ella estaba completamente consiente cuando realizamos tan bello arte-


-Si claro, pero un delito sigue siendo un delito- dije mientras terminaba de llenar mi informe


-Cretin- farfullo molesto mientras me pasaba la  última bandeja d muestras


-Ten cuidado, podrías morderte y arrancarte la lengua- murmure seco


Hubo un pequeño silencio seguido de un gruñido molesto. Seguimos de esta manera hasta que una pequeña idea cruzo mi mente, “Francis conoce perfectamente el tercer piso, sin mencionar que tiene acceso a la planta de dormitorios, estoy seguro que él podría ayudarme” voltee a mirarle mientras trataba de formular las preguntas correctas.


-¿Qué sucede cejon?...será acaso que mi gran belleza te ha cautivado-menciono narcisista mientras ondeaba su cabello y me miraba de manera morbosa


-No te creas con tanta suerte-


-Bastardo-


-Como sea, escuche algunos rumores en el bar, sobre algunas fuerzas rebeldes ¿sabes algo acerca de ello?- pregunte como si de el clima se tratara


-¿Por qué lo preguntas?-su semblante cambio radicalmente, me miraba de manera seria y un poco desafiante


-Simple curiosidad-baje mi mirada mientras escribía en  el último registro los resultados


-Sé que no eres estúpido cejon, las cosas ya no son como antes desde el comienzo del régimen de Iván,- bajo un poco su voz mientras ahora miraba fijamente la puerta- Tal vez no lo sepas por ser nuevo, pero últimamente han estado ocurriendo cosas extrañas haya arriba


-¿Cómo qué?-


-Yaoha estado trabajando con algunos científicos con un grupo de omegas, no séqué rayos es lo que les hacen pero tiene algo que ver con las mutaciones.-


-¿Las mutaciones? Pero  nosotros solo nos encargamos de la reproducción, el centro de investigación y armas es quien debe hacerse cargo de eso-


-Ya lo sé, es por eso que intente recolectar valiosa información de una buen a amiga…-


-Tu amante-


-Silencio, no juzgues si no sabes…como decía ella es encargada del área de maternidad, durante su turno nocturno, dos guardias aparecieron y se llevaron a tres omegas que se encontraban bajo su cuidado, en cuanto quiso intervenir la amenazaron con enviarla a prisión por traición a la colonia.-


-Bastardos-


-Lose, en todo caso esa noche no fueron los únicos que se llevaron, también a otros tres omegas del área preparada para el nuevo ciclo y tres infantes –


-¿¿Niños??..Pero qué demonios quieren con ellos ¿porque harían eso?


-No lose, solo sé que al día siguiente cuando ella reviso los expedientes de sus pacientes estos ya no estaban, era como si nunca hubieran existido-


-Debemos hacer algo al respecto, no podemos simplemente aparentar que no sabemos nad…-lleve mis manos a mi boca, me maldije por lo que había dicho. Francis me miro de manera sospechosa, como si evaluara cada parte de mí


-¿Dime Arthur donde está tu lealtad?-


Realmente había metido la pata, un montón de escenarios pasaron frente a mis ojos, la mayor parte terminaban conmigo en una de las salas de reproducción esperando a ser montado por algún alfa sediento de sexo


-umm…bueno yo...-una vez más maldije a mis malditas hormonas.

Notas finales:

Espero les guste la continuacion nos vemos pronto.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).