El llanto desgarrador de Naruto acababa lentamente con sus almas, destrozándolas como si fueran un fino cristal, sumiéndolas en un empatizado sufrimiento.
Ninja: Capitán ¿Cómo puede sufrir tanto?
Ninja x: Yoshio, Naruto desde que tiene memoria ha sido huérfano y ha estado solo, sin nadie que lo cuidase, por eso se aferra tanto a las personas. Cualquiera en su misma situación habría cuidado como un tesoro a quién le abriese su corazón.
Yoshio: Se que no debo decirlo, pero la visita de los Kages lo único que ha hecho es causarle dolor.
Ishao: Lo sé, pero espero que pronto pueda volver a sonreír. Además, Uchiha es el culpable de que todo esto pase.
Naruto yacía en la cama, tumbado entre los protectores brazos de Sasuke, que lo reconfortaban poco a poco, pero aun sus lágrimas seguían deslizándose por su faz bronceada, como el caudal de un riachuelo.
Sasuke: ¿Ya estas más calmado dobe?.
El pelinegro hablo con una voz suave, mientras acariciaba sus rubios cabellos, intentando mimarlo. Naruto se escondió en su fuerte pecho desnudo, a pesar de que sabía que no se podía librar de todos los males huyendo a ese lugar, también era consciente que solo él lo podía ocupar, y que allí no lo encontrarían, como si de una profunda cueva se tratase.
Sasuke empezó a notar su pecho húmedo, conociendo que era consecuencia de las lágrimas de Naruto, que aún no paraban de brotar, pero que estaban más apaciguadas, junto con su respiración.
Sasuke: Nos podemos ir de aquí cuando quieras, no les debes nada.
Naruto: Les prometí ayudarlos, no nos podemos ir.
Sasuke: Si es a cambio de que sufras ninguna promesa debería valer.
Naruto: ¡Yo quiero ayudarlos de verdad dattebayo!
Sasuke: ¡Porque los ayudas si te hacen llorar!
Naruto se alejó un poco de Sasuke, sentándose, mirándolo fijamente, Sasuke lo siguió y también se incorporó.
Naruto: También me hicieron sonreír Sasuke, pero... tú los atacaste, y eso es lo que me hace daño ahora.
Se quedó un silencio extraño en el ambiente.
Sasuke: Entonces me voy.
La voz del pelinegro reflejaba el enfado en su interior. Se levanto de la cama, dejando a Naruto atrás.
Naruto: ¡¡¡NO!!!
Sasuke miró fijamente a Naruto antes de irse, de forma intensa y furiosa, sus ojos carmesís se clavaban en el cuerpo del rubio.
Sasuke: No me quedare para que me eches en cara mi pasado.
Naruto: No lo haré dattebayo te lo prometo.
Sasuke: Esto es lo que pasa cuando te pones en mi contra.
El Uchiha se dio la vuelta, dándole la espalda a Naruto.
Naruto: Te he echado mucho de menos Sasuke, no te vayas, no me dejes solo otra vez... ¡Te perseguiré, aunque mi pierna se rompa!
Dijo al final de forma decidida, con una mirada llena de valentía, que no pretendía echarse atrás.
Sasuke: Sabes que eso no te servirá de nada. "Suplica un poco más pequeño, no te lo dejare tan fácil".
Naruto: ¡También te obedeceré! ¡No volveré a hablar de tu lado malo del pasado, pero no me dejes solo!
Sasuke: Hmm, no estás solo, tienes muchos amigos a tu alrededor, no me necesitas.
El pelinegro seguía hablando con un aire de superioridad y enojo, mirándole por encima del hombro.
Naruto: ¡Tú eres la persona más importante en mi vida Sasuke! ¡Cuando tu no estas es como estar solo dattebayo! ¡Me prometiste que no te irías de nuevo!
Sasuke dejó de darle la espalda a Naru y con paso firme fue directo hacia él, encarándolo. El pequeño lo viro con ojos llenos de ilusión, en los que revoloteaban estrellitas brillantes.
Naruto: ¿¡Te vas a quedar!?
Sasuke: Sí.
El Uchiha agarro bruscamente la barbilla de Naruto y mirándolo directamente con sus ojos negros, acercándose a él hasta estar a escasos centímetros de distancia.
Sasuke: Pero antes debo castigar a esta sucia boca tuya.
El pequeño rubio no entendía nada, y de pronto la distancia que los separaba a ambos, fue nula. Sus labios se habían conectado como una corriente eléctrica. Sasuke con su otra mano lo agarró de la nuca, siendo sus dedos rodeados por sus dorados cabellos, impidiéndole echarse atrás. Mordió con sus colmillos ligeramente el labio inferior de su rubio, sus labios lo envolvían completamente moviéndolos al compás, mientras los del otro, estaban paralizados. Sasuke abrió los ojos, chocándose con aquellos azules tan estupefactos, se separó un poco, notando como aquellas mejillas habían tornado al mismo color que un delicioso tomate, y eso le encantaba.
Naruto: Sa-sasuke...esto...
Sasuke: Cállate y abre la boca, aún no he terminado con tu castigo.
Naruto iba a decir algo, pero Sasuke aprovecho esto, para con su mano en la barbilla, abrir más su boca y abalanzarse hacia ella. Metió su lengua haciendo movimientos salvajes, Naruto se empezaba a sentir aturdido y su cuerpo comenzaba a arder, se sentía tan extraño.
Naruto: (-////-) Mmmnn "No puedo escapar, se siente bien, no lo entiendo".
Sasuke: "Esto es mucho mejor de lo había imaginado, es tan suave, su lengua, sus labios y sentir como tiembla a mi merced. Te daré tanto que no podrás escapar, en tus pensamientos solo estaré yo".
El mayor llevaba las riendas de aquel provocador contacto, devorando a su zorrito sin ningún miramiento. Apenas se separaba para respirar, cuando ya lo volvía a atacar desesperadamente, hambriento por más de ese provocador y sensual cuerpo. Naruto comenzó a dejarse llevar por aquellas sensaciones totalmente inexploradas para él, intentando seguir el ritmo. Su cabeza se puso en blanco, tan solo sentía el movimiento de los labios de ambos, y la profundidad de sus besos, no le dio tiempo a pensar la razón de todo.
Se separaron lentamente y abrieron los ojos, chocando ambas miradas de forma penetrante, como si un campo magnético les atrajera. Naru desvió la mirada hacia el suelo, sonrojándose debido al íntimo contacto que tuvieron. Sasuke al ver esta linda reacción se llenó de ternura y orgullo, por haber sido el culpable, sonriendo de lado divertido, se acercó a su oído susurrándole.
Sasuke: (susurro) ¿Te ha gustado tu castigo?
Cada parte del cuerpo del rubio se erizó temblando al sentir la grave voz de Sasuke en su oído.
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Despacho de la Hokage:
Raikage: Hemos ganado dos fuertes aliados, aunque uno no es nada de fiar.
Sakura: A cambio de una triste sonrisa.
Gaara: El Uchiha nunca cambiara, no sé cómo Naruto puede soportarlo.
Kakashi: Porque la historia de Sasuke está llena de sufrimiento, dolor, que fue transformado en odio. Ha pasado por demasiadas cosas malas.
Hokage: Muchos de nosotros lo hemos tenido muy difícil, en cambio Naruto nos encontró y nos dio esperanza. Una manera de luchar donde nunca debes rendirte, por mucho que la vida te haya hecho caer.
Los ninjas del ambu aparecieron en escena.
Hokage: Capitán.
Ishao: En cuanto se fueron todos ustedes Naruto empezó a llorar, tuvo un ataque de pánico, hiperventilaba y se ahogaba, no podía respirar.
Yoshio: Casi intervenimos en varias ocasiones creyendo que se desmayaría por falta de aire.
Ishao: Cuando Sasuke pudo calmarlo vinimos, pero seguía llorando.
Yoshio: Quizás no debería decirlo... pero Sasuke hizo un buen trabajo tranquilizándolo.
Kakashi: Tal vez Sasuke realmente haya cambiado, su venganza principal ya se ha completado. Nunca ha dudado a la hora de matar a nadie, excepto a Naruto, incluso cuando ha tenido varias veces la oportunidad, no lo ha hecho. Quizás ahora quiera protegerlo, ya que Naruto nunca lo dejó atrás y siempre creyó en él.
Tsuchikage: Eso nos conviene, si tenemos a Naruto, tenemos al Uchiha, y los problemas con él se habrán acabado, estará en la palma de nuestra mano.
Gaara: No todo es tan fácil, Naruto es impredecible.
Sakura: Y Sasuke no se deja engañar, es muy listo, no creo que lo pudierais someter.
Mizukage: Pero Naruto es alguien ingenuo y quiere que el Uchiha se adapte, utilizar eso para conocer sus intenciones. Es mejor estar cerca de tus enemigos.
Los Kages y el equipo 7 se pasaron el día intentando llevar el barco a buen puerto, divisando los pros y los contras, para anteponerse a las diversas situaciones que pudieran ocurrir.
Los dos ambus volvieron a su vigilancia habitual, encontrándose con un Naruto que ya no estaba deprimido, pero sí algo tímido, y con algo de fiebre debido a la curación de su pierna, o al menos eso consiguieron deducir ellos. Observaban como siempre a Sasuke preparar todas las comidas y cuidar del rubio, el único cambio apreciable era su cercanía, que había crecido.
Sasuke tenía todo más o menos bien planeado, aunque lo del beso fue totalmente improvisado, aprovecho la situación de que los ambus que solían tenerlos en la mira, no se encontraban por el momento. Planeaba ir lento con su dobe, pero no sabía si su autocontrol se lo permitiría, pero de lo que si se mantenía plenamente seguro era que no quería que los ambus y los demás descubrieran la relación que realmente tendría con su Naru. Haría parecer todo como una posesividad debido a un complejo de hermano mayor por cuidar al rubio, en vez de algo pasional. Si los demás sabían lo que empezaba a sentir por el rubio, lo utilizarían en su contra, y no los dejarían vivir bajo el mismo techo, quitándole oportunidades únicas.
Naruto se encontraba tumbado en la cama, como casi todos los días desde que se torció el tobillo, pero esta vez había dos diferencias. Por lo general observaba curioso lo que hacía Sasuke, pero esta vez miraba de forma fija la pared, dándole la espalda al pelinegro; su mente que suele estar en blanco, ahora no podía parar de dar vueltas a sus cavilaciones. Con sus brazos rodeaba fuertemente a una almohada, intentando relajar su nerviosismo.
Naruto: "Hoy Sasuke ha sido realmente amable conmigo, pero actuaba de forma..., c-como si lo que... lo que me hizo fuera n-normal, (7///7) s-si no fuera por esa estúpida sonrisa arrogante... y sus ojos negros que no paran de o-observarme. ¡Waaaaaa! ¡Si ese maldito teme no me hubiese besado! E-encima se sentía tan bien... ¡estúpido!".
Sasuke:(sonrisa Uchiha) ¿En qué estás pensando dobe?
El Uchiha se había sentado en la cama, ya con el pijama que habitualmente solía usar, unos pantalones largos de color negro, y con su fuerte musculatura al descubierto. Naruto no se dio la vuelta ni a mirarlo.
Naruto: En nada. "Como si te fuera a decir que estaba pensando en ese beso estúpido teme, ni lo sueñes".
Sasuke: Pues si esa cabecita sigue vacía, cámbiate.
El pelinegro dejó caer suavemente su pijama naranja encima de la cara del menor, impidiéndole por un momento la visión. Naruto apartó las pendas, y se incorporó en la cama. Le resultaba sencillo cambiar la parte de arriba de su pijama, pues no le suponía mayor tarea, en cambio otra historia eran los pantalones, estos le ponían más de un impedimento, no se podía levantar para sacarlos o meterlos, por lo que se tenía que tumbar en la cama, levantar su culito mientras solo se podía apoyar con una pierna y hacer lo que tocaba, le era realmente complicado, y a veces percibía como si Sasuke se estuviera riendo de él.
Cuando terminó, deshizo la cama y se introdujo rápidamente bajo sus mantas, sin parar de mirar las paredes, intentando evitar los oscuros ojos. A los pocos segundos supo que Sasuke se había tumbado a su lado y su corazón empezó a tamborilear como loco dentro de su pecho, provocando que se pusiera aún más nervioso. Notaba como el cálido cuerpo del pelinegro se acercó al suyo, pegando el pecho con su espalda y como sus fuertes brazos rodearon su cuerpo, arrimándolo hacia él, haciéndolo sentir pequeño y protegido, pero a la vez inquieto como nunca.
Sasuke: (susurro) Naru.
Naruto: "¿¡Porqué susurra en mi oído!? ¿¡Y desde cuando me ha llamado Naru!?" ¿Q-que-e?
Sasuke se puso sin previo aviso a cuatro patas encima del menor, los tapó enteramente a los dos con la manta, dejándoles sin visibilidad apenas y puso sus musculosos brazos a cada lado de su cabeza. Naruto seguía tumbado de lado abrazando a su almohada, pero por inercia y curiosidad giró su rostro para hallarse con el de Sasuke.
Sasuke: Estaré a tu lado, pase lo que pase ¿entiendes?
Naruto cabeceo ligeramente, indicando una leve afirmación. Sus ojos que estaban abiertos como platos, se sepultaron rápidamente bajo sus párpados al notar como el cuerpo y el rostro de Sasuke se acercaban más a él, provocando que sus mejillas tornaran a un tono carmín. El rubio en cualquier momento pudo apartar la cara, pero no lo hizo, aunque ni él mismo sabía la razón exacta. Los labios del Uchiha rozaron apenas los suyos, siendo suave y sutil, mientras sus respiraciones chocaban en tormenta. Sasuke unió sus labios, dándole un delicado y casto beso. Con cada beso volvía a ver el rostro de Naru entre las penumbras bajo aquella sabana que les cubría. Los besos que empezaron siendo tiernos, se volvían profundos. Sasuke introdujo su lengua en la boca de Naruto, invadiéndola por completo a su antojo, su animal interior salió a flote, devorándolo.
Naruto: Mmmm....hmm...
Naruto soltó la almohada y se puso boca arriba, sus muñecas enseguida fueron retenidas por las grandes manos del pelinegro, dejándolo aprisionado y aún más vulnerable. Sasuke susurro su nombre en su oído, con una voz grave, casi como un gruñido, estaba llena de excitación.
Sasuke: Naruto.
Al oír aquella voz llena de lujuria cada célula del cuerpo de Naruto se estremeció, nunca había experimentado una sensación igual, con Sasuke todo estaba siendo nuevo.
Naruto: Sasuke.
En su oído escucho como la voz de su Naru era quebradiza, pero no por el miedo, si no por placer, pero sin llegar a ser un gemido lujurioso, sino algo inocente, con total incertidumbre de lo que le sucedería. Sasuke se estaba poniendo demasiado duro, tenía que calmarse, era demasiado pronto para ir hasta el final con Naruto, esto solo lo asustaría. Dejo salir su último instinto animal, a pesar de que no se quería detener. Apartó de forma brusca el cuello de la camiseta del pijama y calvó sus dientes entre el cuello y la clavícula. Naruto hizo un pequeño gemido, su respiración rápida hacía que no pudiera evitar dejar de jadear fuerte. Sasuke dejó de morderle, la marca ya estaba en su delicioso cuello. El pelinegro trató de tranquilizarse, y se tumbó a un lado en la cama, bajó la manta que los cubría hasta su cuello, dejándoles respirar a ambos el aire fresco. Naruto no dejaba de ver a Sasuke, mientras su pecho subía y bajaba rápidamente, y seguía jadeando. Sasuke acarició su rubio cabello, y habló como si fuera una orden.
Sasuke: Duérmete.
Naruto cerró los ojos y dejó que Sasuke acercara su delgado cuerpo hacia el de él, quedándose nuevamente dormido en sus brazos.