---Santa mierda--- Exclamó Draco a punto de escupir bilis de puro malestar. Su espalda tensa dolía a más no poder. Con todas las fuerzas que tuvo en ese momento cerró los ojos para contener el dolor. Sus ojos estaban empañados en lágrimas no derramadas, las cuales orgullosamente se negaban a caer. Era doloroso, podía sentirlo, sentir como su piel Escocia dolorosamente, su sangre estaba hirviendo. Intento gritar, pero solo salio de su desgarrada garganta un lamento lastimero.
---Draco--- Escucho como lo llamaba una dulce voz. Sus ojos estaban desorbitados, a pesar del dolor intentaba con todas sus fuerzas aguantar ---¡Despierta por favor! --- La voz preocupada de Harry lo saco de su letardo de dolor. Al abrir los ojos al fin se encontraba en su habitación. Snape lo miraba con preocupación justo frente a el, un olor nauseabundo lo hizo querer retroceder, pero tan pronto como comprendió que ese olor venia de Snape y el mismo se quedo quieto. Sentía sus huesos dolorosos.
--- ¡Esta ardiendo Severus! ---La voz preocupada de Narcissa Malfoy lo aturdio por un segundo. Se sentía mal, las náuseas no había desaparecido y con un movimiento desesperado volvió a derramar todo el contenido de su estómago. Sólo bilis esta vez, signo de que no había sido la primera vez en la noche que vomitaba.
Faltaban 8 dias para volver a Hogwarts. Draco estaba desorientado, sin saber realmente que pasaba, se sentía desfallecer.
---Harry--- Susurro como pudo con los ojos a punto de cerrarse. Vio a Harry tratando de acercarse pero fue apartado bruscamente por Snape.
--- Ve por Orion y dile lo que está pasando--- Exclamó en tono irritable. Orion era el alias de Sirius, desde que Severus había sido nombrado como el tutor de Harry hace unos meses, Orion se había vuelto el que acompañó a Harry su última semana en casa y ahora era uno de sus mejores amigo. Después de todo Orion era el primo de James Potter para Harry, visitaba la mansión malfoy cuando el estaba alli todos los dias para ver a Harry y hasta se había colado a la última salida familiar de los Malfoy y había arrastrado a Severus con el.
Draco había enfermado repentinamente desde el almuerzo. Se había retirado temprano para poder descansar, pero tan pronto como lo hizo durmió, hasta que a media noche comenzó esta pesadilla. Harry lo noto así que llamo a los señores Malfoy, ya que mientras el se quedaba en la mansión dormía allá.
---¿Una maldición? --- Logro escuchar a su padre hablar. Su voz se escuchaba al borde de un colapso, seguramente estaba agarrando su varita.
---Sí. Una muy poderosa, es obvio que alguien a maldecido a Draco con magia demasiado avezada, pero bastante mal ejecutada --- La voz de Snape se hizo lejana. Draco poco a poco comenzó a sentirse mejor. Seguramente Snape estaba haciendo algo para disminuir la maldición --- Esto bastará para eliminarla, parece bastante mal pero era solo esto--- Draco sintió una fría mano acariciando su frente --- Esto no quitará la fiebre o el malestar, pero eso se controlará con facilidad. Me llevare a Potter esta noche. El estúpido podrá controlarlo esta noche mientras Draco descansa--- Draco sintió como era desvestido, seguramente su pijama estaba llena de vómito. Por el dulce y delicado tacto con el que era tratado el supuso que esa era su madre. Draco no podía abrir los ojos, pero escuchaba todo lo que estaban hablando los preocupados adultos a su alrededor.
Fue cargado en unos fuertes brazos. Era su padre, podía sentir su masculina colonia ser empañada por el olor a vomito. El hombre temblaba, pero no era miedo lo que Draco percibía en el, lo cargaba con fuerza y dulzura.
Lo metieron en la tina y comenzaron a lavarlo con agua fría. Tan pronto como el silencio se hizo presente un sonido sorprendió a Draco, era llanto, uno muy silencioso. Incomodo y algo avergonzado, Draco abrió los ojos con mucha dificultad, tan pronto como lo hizo la sorpresa lo invadió por un segundo. !Su padre estaba llorando! Silenciosas lágrimas melancólicas corrían por su rostro, la tristeza en sus facciones golpeó a Draco aun más fuerte que cualquier dolor fisico, los ojos de un hombre normalmente sereno y frío se veía desolados y tan triste que Draco sintió como su estómago se revolvía . Draco abrió la boca pero ni un sonido salio de sus labios agrietados, su garganta se sentía rasgada. Quizás sin saberlo había comenzado a gritar cuando había estado inconciente.
---Draco --- Susurro su nombre con dulzura, el miedo inpregnaba su voz algo temblorosa pero tambien notaba el tono de alivio en su voz. Se veia la felicidad al verlo conciente, sus ojos recuperaron un poco su brillo sin dejar de lucir preocupados.
---Pa.... p-p --- Intento llamarlo, pero su voz se escuchaba como un lamento.
--- No intentes hablar Draco --- Draco asintió como pudo. Luego de un baño de agua fría, un caldo que básicamente su madre casi se lo mete por la garganta y un vial asqueroso de parte de Snape, Draco pudo dormir al fin.
Draco despertó el día después con un dolor terrible de cabeza. Pero a pesar del mareo, el dolor en el cuerpo, el malestar y la fiebre el solo podían sentir una rabia y un odio increíble. Deseaba venganza.
---Draco, tienes una visita --- La dulce voz de su madre le llego a la lejanía. Los ojos de Draco se iluminaron.
---¿Harry? --- Pregunto en tono alegría mal disfrazada . Su madre negó lentamente, su rostro se veía tenso y cansado. No se veía feliz para nada, debía ser alguien que no le caía bien del todo.
---Hola Draco---- La persona que entro a la habitación era alguien muy conocido por ese joven. De ojos azules eléctricos y brillantes que solo mostraban diversion, el cabello largo y blanco en juego con una túnica púrpura y un sobrero eran incondunfibles. Draco se notaba perplejo al ver al visitante.
---Lo siento Draco pero Harry no vendrá hoy. Estaba tan preocupado por ti el día de ayer que apenas pudo dormir. Orion no lo dejará salir para que puedas descansar ---- Respondió su madre al ver el rápido cambio de semblante de su pequeño. La mujer le sonrió ---Quedate allí, iré por tu desayuno. Tienes que alimentarte antes de tomar el vial de hoy --- Salio de la habitación dejándolo solo con el viejo director.
---Veo que sigues vivo. Eso me pone feliz--- Canturreando alegramente mientras se sentaba a su lado. Draco lo miro con sorpresa.
---¡Usted! --- Grito dejando salir todo su enojo. A pesar del dolor de su garganta desgarrada y su cuerpo a dolorido, hizo lo que pudo para mirarlo directamente a los ojos. El vértigo por el movimiento brusco le produjo malestar, aumektando su deseo de hechizar al viejo, pero no podía hacerlo en sus condiciones precarias.
---Sí. Fui yo el que te hechizo--- Su sonrisa tranquila perturba a Draco.
---¿Por qué? -
---Quería probar algo. Ahora lo se, gracias a este pequeño hechizo lo comprobé --- El sonrió de forma encantado, Draco sintió odio dentro de él.
---¿Comprobar algo matandome ? --- Escupió enojado. El viejo bonachón negó.
---No era mi intención lastimarte. Pero no imagine que fuera a tener ese efecto --- Su mano delgada acarició sus claros cabellos. Draco quería apartarlo de un manotazo, pero no tuvo la fuerza para mover ni un músculo. Su espalda estaba tensa y dolía, apenas podía moverse
---Es obvio que yo tendré que decirles esto a mis padres --- Exclamó en tono venenoso. La sonrisa del anciano no se borro ni por un segundo de rostro.
---¿Es así? --- Exclamó de forma jovial. Sus ojos azules brillaban como estrellas en el firmamento. Draco se puso nervioso al ver esa mirada ---Sabes Draco. Hace poco encontré una cueva muy peculiar --- Se sentó en la silla junto a su cama para mirarlo mejor. Draco se sentía inquieto, movió los pies incomodo pero estos dolían tal como el resto de su cuerpo ---Este lugar tenia una extraña secuencia de tiempo y poseía un manantial justo en el centro que permanecía en tiempo suspendido. En otras palabras, dentro de sus aguas el tiempo estaba detenido. ¿sabes que fue lo más raro? Su tendencia a volver a su fuente una vez es removida. En otras palabras esta agua era atraída por cueva, la cual tenía una fuente magica temporal que nunca había visto ---Draco abrió la boca, pero la cerró de inmediato al no tener nada que decir ---Veras, me lleve un poco de agua de este a pesar de las tendencias mágicas de esta ligada por la cueva, pero tan pronto como llego al castillo comenzó a actuar extraño. Pensé que quizás hubiera otra fuente de esa magica en el castillo que lo estaba atrayendo, así que convoque una madicion parásito con el agua --- Su sonrisa se ensanchó de forma aterradora. Draco comenzó a sudar frio, sus manos temblaban levemente por el nerviosismo ---El parásito fue atraído directamente hacia ti. Entonces comprendí por que tu eras esa fuente de magica extraña que llevaba molestandome por día --- Draco trago.
---¿Hace cuanto tenia ese parásito conmigo? ---
---Desde que entraste en la enfermería luego de tu última aventura. Espere demasiado para ver que pasaría y pudo comprobar gracias a esta experiencia que ocurre ----
---Yo ... no puedo decirle nada ----
---Soy viejo Draco. De verdad no tengo la intención de meter mis narices más de lo que es necesario en este asunto. Lo único de lo que soy conciente es que de verdad quieres ayudar a Harry ---El viejo sacó y varita y la movió el círculos. Del pecho de Draco salio una masa negra que se evaporó en el aire tan pronto cuando fue alcansada por la varita.
---Es una maldición parasitaria --- Trago en seco al notar lo cerca que estuvo de la muerte. Con nerviosismo acarició su rostro. Aunque todo el dolor y el malestar de su cuerpo había desaparecido casi por completo, las ganas de vomitar volvieron solo por el simple echo de lo que había experimentado hace poco.
---Lo siento por eso. Creo que tarde mucho en sacarlo de tu organismo. Pero fue interesante verlo en desarrollo. Cualquier niño de 12 años hubiera muerto en 4 semanas. Tu soportaste casi todas las vacaciones y viviste. Eso es digno de una felicitación ---Sonrió jovial mente y Draco fue consiente del enojo que comenzaba a florecer dentro de su pecho.
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Draco quería morir, de verdad quería hacerlo. Podía ver a la lejanía, en medio de la oscuridad a los ojos de cachorro de Harry mirando con súplica. Estaba al borde de las lágrimas, sus ojitos verdes encogieron su corazón.
¿que había pasado? Harry se había salvado por los pelos de ser expulsado, solo por que Sirius había amenazado a Severus con hacer su vida un infierno si Harry volvía a casa. Sólo era el primer día de clases y ya Harry habia echo algo potencialmente peligroso que había crispados los nervios del rubio jovencito. Después de llegar volando en el carcacho volador de los Weasleys con Ron Weasley en el asiento del piloto, había recibido una fuerte reprimenda.
Draco estaba enojado por 3 razones que iban más allá de casi matarse contra el sauce boxeador. La primera razon era que no había ido a visitarlo ni una sola vez desde que enfermo, la segundo había sido que había ignorado sus cartas haciendolo que tuviera que abordar el expreso solo y la tercera, ser tan estúpido e imprudente para subirse en la cosa voladora esa, en lugar de decirle a Snape que lo llevará al castillo a través de la chimenea o al mismo Orion y enviar su equipaje reducido por lechuza. Draco estaba molesto, demasiado molesto incluso para hablarle. Neville había huido del mal humor de otro rubio, el cual había decidido esperarlo sentado sobre su cama. Estúpido Weasley.
----Draco ---Exclamó en tono triste Harry. Sólo eso fue necesario para que Draco se volviera una nube de azúcar. Se arrojó encima de Harry para abrazarlo con fuerza, sin despegar su sonrisa enorme al verlo. ¿Por qué tenia que amarlo tanto?.
---¿Cómo has podido pasar tanto tiempo sin venir a verme?. Eres el peor --- Su lamento infantiles hicieron reír a Harry
---Todo fue culpa de un elfo raro --- Suspiro pesadamente. Draco se despegó de el para mirarlo ceñudo.
---Te escuchas como un sangre pura tratando de evadir responsabilidades ¿Un elfo? --- Se burló en voz desdeñada, se apartó bruscamente de el para volver a su faceta ceñuda. Harry se veía triste al verlo retroceder.
---¡Pero fue así! No sólo arruinó una poción de Snape que me castigo sin poder salir, sino que intervino todas mis cartas. Además de que la entrada a la estación se cerró justo cuando me encontré con el idiota de Weasley así que tuvimos que encontrar otra forma de venir. Además Orion no a dejado de arrastrar me a todos lados para que pasáramos tiempo de calidad. Lo siento. Lo siento ---Se disculpa con voz temblorosa. Draco suspiro pesadamente.
---Eres un tonto Harry--- Volvió a abrazarlo y comenzó a acariciar sus cabellos con dulzura
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