Había logrado escribir más palabras de las que acostumbraba y hasta cierto punto se sentía satisfecha de lo que logró, quizá había sido la nostalgia o que su inspiración había vuelto tras media caja de cigarrillos y diez latas de cerveza pero realmente había logrado terminar el capítulo final de esa obra que tenía pausada desde hace tanto.
-Ahora sólo queda llamar a Carolina para que recoja esta cosa, edite y reenvíe las correcciones; me haga repetir todo antes de medio año y cuando este libro se posiciones entre los primeros lugares de popularidad venga de nuevo con otra oferta de la editorial para la secuela…-dejó caer los restos de su último cigarrillo encendido dentro del cenicero mientras suspiraba pesadamente-¿Por qué no entienden de una buena vez que estoy harta de esta historia? Ni siquiera sigue la línea que llevaba en un principio.
Esos eran los pensamientos que rondaban su mente y llenaban el vacío del estudio mientras redactaba el mensaje para su editora y esta vez no con sus acostumbradas bromas, sino con un tono totalmente serio pues estaba dispuesta a enfrentarla y decir todo lo que estaba pensando. Estaba por salir del estudio cuando el sonido de su celular la interrumpió.
-¿A qué se debe este repentino cambio en tu manera de comunicarte conmigo?-cuestionó de manera irónica esperando la respuesta de la escritora-¿O es que acaso es otra de tus bromas donde pretendes decirme que vas a dejar esto? Al menos hasta que el contrato con la editorial termine no puedes hacerlo, sólo por si lo olvidabas.
-No lo olvido, créeme que tengo muy presente que no es tan fácil liberarme de esto… Además no es por eso, sólo tengo algo que darte así que será mejor que vengas a recogerlo, lo dejaré sobre la mesa-y fue así como dio por terminada la llamada con un tono algo cansado antes de apagar su celular y salir de su casa rumbo al departamento en que podía aislarse del mundo.
Una vez llegó fue directamente hacia el parque a descansar sobre una de las bancas mirando hacia la nada mientras pensaba una manera de retomar el curso de su historia, volver a su idea original de mostrar la parte más trágica de los romances adolescentes sin alterar la secuencia que había tenido que generar para complacer a la editorial.
-La próxima vez que alguien te intente convencer de que todo será color de rosa no vuelvas a caer, por favor-se dijo a si misma mientras apoyaba su rostro sobre la palma de su mano sin despegar de la vista de unas cuantas hojas que habían comenzado a moverse al ritmo del viento.
Siguió contemplando su movimiento recordando algunos sucesos de su adolescencia, algo que no le gustaba hacer pero que tras conocer a la chica en ese mismo lugar habían comenzado a presentarse constantemente aún en contra de su voluntad, haciendo que de vez en cuando sintiera autocompasión por aquella chica que tres años atrás saliera de casa buscando su sueño y que, desde su punto de vista, no había hecho más que toparse de frente con la cruda realidad.
-Pero esto era lo que querías ¿O no? Siempre terminas aferrándote a cosas que no van a funcionar por más que lo sepas…-soltó un largo y profundo suspiro tras decirlo mientras cerraba un momento los ojos sin cambiar de posición-Bien, estar así no sirve de nada, será mejor que haga algo-y sin decir más se levantó caminando sin rumbo fijo.
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-Pensé que habías muerto, no es tu costumbre despertar tan tarde-fue el saludo que dedico la más pequeña mientras mantenía su vista clavada en el celular frente a sus ojos-Hola Sergio…-sonrió de manera tierna dándole un rápido vistazo al chico quien aún se frotaba los ojos.
-Buenos días Angi-saludó mientras pasaba al lado de su pareja caminando hacia el baño-¿Quieren desayunar ya? Podemos ordenar algo o salir, como quieran-entró al lugar antes de dejarlas solas.
-No quiero detalles, gracias. Sé de buena fuente lo que hacen las parejas luego de tanto tiempo sin verse y nunca me ha hecho gracia pensar que de esa manera es como llegué a este mundo-mantuvo su mirada clavada en el aparato hasta que una almohada cayó sobre su rostro-¡Oye! Déjame ya, mejor ponme al corriente de lo que me perdí desde el viernes-aún sin verla se encogió sobre el sillón cubierta con las cobijas haciendo un pequeño espacio para que se sentara.
-¿Fuiste a embriagarte al bar de siempre? No encuentro otra explicación para tenerte un fin de semana desaparecida.
-No en realidad, no recuerdo si te lo dije o no pero me pidió que la ayudara con la organización y las invitaciones. Obvio no iba a negarme así que le dije que en cuanto pudieran me avisara para reunirnos los tres y empezar a revisar eso.
-Y decidiste que era mejor verlos el fin de semana para librarte de tus compromisos… En fin, fuiste a verlos ¿Y?
-Lo obvio, los felicité, le pedí que la cuidara porque aunque sea una tonta es una gran chica, que estaba dejando en sus manos a mi hermanita…-sonrió de manera irónica bajando el aparato mientras abrazaba sus rodillas y apoyaba su rostro sobre ellas-Ya sabes, ese tipo de cosas que no hubiera querido pero debía hacer.… Además hablamos de la fiesta de compromiso, está pensando cuando es el mejor momento para hacerla y están buscando un lugar para la recepción y todo ese asunto. Ya sabes, cosas de boda.
-Claro, y como seguro vas a ser dama de honor o madrina o alguna de esas cosas tienes que estar al pendiente de lo que deciden los novios.
-Así es.… De hecho ese fin de semana ni siquiera fui a casa para ver a mi hermana. Y antes de que empieces a decirme lo cruel que soy con ella se lo dije directamente, hablé con ella y le conté todo, desde que Araceli me aviso que se casaba.
-Bueno, de vez en cuando actúas de manera menos infantil y eso, en tu caso, es un gran progreso-se estiró un poco antes de levantarse del sillón-Pero bueno, seguro tendremos largas noches estos días así que será mejor ir a desayunar antes de empezar con ello. Ve con Sergio y pregunta en que le ayudas para prepararlo.
-Seguro me dirá que como invitada no puede ponerme a hacer nada, no tiene caso hacerlo-restó importancia a lo que la chica le decía mientras volvía a tomar su celular y seguir con lo que hacía.
-Será mejor que cuando vuelva estés haciendo algo más que eso o no te daré ni un solo descanso por varios meses aún si no hay trabajo por hacer-dijo en tono amenazante antes de entrar a su habitación mientras su pareja regresaba al lado de la chica viéndola un poco confundido.
-¿Todo bien?
-Por supuesto… Ahora vayamos a hacer el desayuno o mamá no me dejará salir en varios días-suspiró mientras se ponía de pie ignorando la confusión del más alto.
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Tenía sólo unos minutos de haber entrado al departamento de la escritora aún confundida por el mensaje y por haber recibido el trabajo que desde tantos meses atrás esperaba. Sabía a la perfección que cambios así significaban que algo no andaba bien y no podía dejarlo pasar y menos aún tras terminar de leer el último capítulo.
Se encontraba en la sala esperando que la menor saliera del baño y por lo que veía faltaba un buen rato para que lo hiciera pues llevaba ya casi media hora dentro sin siquiera escuchar sus quejas o alguna señal de que estuviera lista.
-Verónica, por favor, deja de comportarte como la niña que eres y sal de una buena vez-se acercó a la puerta apoyándose sobre ella intentando escuchar hasta sentir como se abría lentamente.
-No estoy actuando como niña, para tu información, sólo estaba terminando de bañarme así que deja de actuar como si estuviera haciendo algo mal.
La mayor se quedó en silencio mientras la miraba sacudir su cabello para quitar el exceso de humedad, su cabello tenía un nuevo corte, un poco más corto y las capas habían sido sustituidas por un corte en diagonal que crecía hacia el lado derecho y los ligeros rizos habían desaparecido por completo además de que ahora era de color rojo.
-No me mires así, no es como si de verdad te sorprendiera este cambio ¿O sí? Si no lo sospecharas no habrías venido tan rápido.
-No es que me sorprende, supuse que algo estaba por pasar pero no precisamente esto. Aunque no es esto lo que realmente me preocupa-guardó silencio unos segundos antes de sacudir el manuscrito, con algunas marcas en color rojo, frente a sus ojos-¿Es lo que estoy pensando? Porque sabes que va a vender muy bien y que si es así la editorial no te dejará renunciar al proyecto y probablemente quiera que lo prolongues al menos un par de libros más.
-Ese es el otro tema que quiero tratar. Sabes a la perfección de donde surgió la idea para el primero y desde hace más de tres años que eso quedó en el pasado y he querido dejarlo luego del segundo libro.
-Y no quiero obligarte a nada, pero en el contrato está establecido que la saga tendría al menos tres libros y en caso de que la popularidad aumentara tendrías que darle continuación o al menos escribir un par de historias extras.
-Y me estoy cansando de ello-dijo en tono retador dejando la toalla alrededor de su cuello-De verdad quiero dejar atrás todo ese asunto, ya estoy cansada de seguir sumida en él y lo único que quiero es cerrar este ciclo y poder pensar en el futuro.
-¿Sabes que me vas a meter en el mayor problema de mi vida?-presionó el puente de su nariz con los ojos cerrados-Haré lo que pueda para convencerlos pero no aseguró nada. Espero que al menos tener el final de la historia haga que lo consideren o no sé que va a pasar.
-Eres la mejor ¿Lo sabías?-la menor rio un poco antes de abrazar a su editora con fuerza antes de seguir el camino hacia su habitación con una enorme sonrisa mientras sacudía un poco más su cabello contra la toalla.
-Aún es una niña, después de todo...-negó con la cabeza antes de buscar su bolso en la estancia dispuesta a ir hacia la editorial para entregar el manuscrito y pedir una reunión para avisar sobre la decisión de la chica.
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-De verdad fue un día pesado, hace mucho no trabaja así-se estiró mientras soltaba un gran bostezo dejándose caer sobre el sillón-No creo poder pasar de los treinta si sigo así.
-¡Por favor! Este es el día que menos has trabajado en toda tu vida, Sergio siempre te consiente demasiado y de verdad estaba muy preocupado por ti luego de verte llorar. Por más que ayer intenté convencerlo de que lo que de verdad necesitas es trabajar para despejarte y pensar en otra cosa insistió en que te lleváramos a comer y te dejara estar tranquila un poco más.
-¿No es de lo más adorable? De verdad es como ese papá que te ve como su princesa y que haría de todo por verte feliz... ¡Ya cásate con él, por favor! Y luego me adoptan aunque sea un ratito ¿Sí?
-Deja de decir estupideces y prepárate para dormir, mañana volverás a tu casa, me imagino, y seguro tendrás que hablar seriamente con tu mamá por no haber regresado.
-Quizá piense que me quede a dormir con alguno de mis amigos o algo así-suspiró profundamente mientras se enrollaba en las cobijas-O en el mejor de los casos no notó mi ausencia y no necesito aclarar nada.
-Angélica, de verdad no le veo caso a que sigas deprimida por eso-se sentó a su lado mientras la más baja se cubría hasta la cabeza-¿Sabes? Llevo tiempo pensado que se está saliendo de control la situación con Araceli, tú sabías desde el principio que ella no te iba a ver de la misma manera en que lo haces tú y habías dicho que lo aceptabas y que lo que menos esperabas es que pasara en algún momento. Y antes de que se te ocurra empezar a decirme que no te entiendo y que eso se sale de tu control quiero que sepas que no es un regaño ni un reclamo y nada de lo que sea que estés pensando-hizo una larga pausa mientras la miraba intentando demostrarle su preocupación.
-Sandra, de verdad agradezco que te preocupes tanto por mí, quizá no lo diga o no te lo demuestre pero no sé qué habría sido de mi vida sin ti. Quiero decir, desde mi hermana no tenía a nadie con quien hablar de este tema hasta que apareciste y realmente has sido de gran ayuda porque no sólo me dejas desahogar...
-¿Y el pero?-su amiga la miró seriamente interrumpiendo por completo sus palabras-Vamos, si me estás diciendo todo esto es porque hay un pero, mejor deja de darle vueltas y dímelo.
-No es sólo ella, ya no se trata sólo de estar enamorada hasta ahora pues tengo más que claro desde el principio que no hay manera en que me vea como yo a ella. Ya ni siquiera estoy segura de si me duele no haber tenido oportunidad-soltó un largo suspiro antes de descubrirse para poder verla-He cometido muchos errores hasta ahora y de verdad estoy cansada de todo ello. De seguir necesitando de mis padres aunque ellos mismos intenten convencerse de lo contrario, de depender de ti o mi hermana cada que paso por una crisis, de seguir dudando tanto de mí y no ser capaz de mirar al frente-suspiró profundo antes de mirarla-Ya no quiero esto Sandra...
La mayor la abrazó con fuerza, sabía de sobra lo frágil que podía ser su amiga pero simplemente no podía soportar seguir viéndola tan destrozada aunque tampoco sabía si podía ayudarla a solucionarlo pues, aunque ella es una de las personas a quien más deja entrar en su vida, sigue guardando muchos temores y resentimientos que no la dejan avanzar.
-Anda ya, aunque no hayas hecho mucho has tenido días muy pesados. Lo mejor será que descanses pronto ¿Bien?-tras unos minutos se separó de ella mientras la observaba.
-Bien, probablemente con eso mañana esté más entusiasmada para los mangas...-rio un poco para molestar a su amiga antes de acomodarse en el sillón-Debo cambiar, no puedo seguir siendo tan débil-suspiró profundo antes de acurrucarse con la esperanza de dormir.
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-Debe ser una broma, conoces mejor que nadie el contrato que tiene y la cantidad de problemas en los que podría meterse en caso de que se rehúse-la voz de la vicepresidente de la editorial era muy seria y se escuchaba un poco molesta tras recibir la noticia por parte de la escritora.
-Entiendo a la perfección la cantidad de problemas que podría causar el ir contra el contrato y en realidad lo que ella quiere no es terminar con el contrato-pudo escuchar la confusión que sus palabras causaban en la contraria-No puedo darte muchos detalles de lo que quiere discutir porque ni siquiera a mí me lo ha dicho pero quiere que sea lo más pronto posible. Incluso me entregó el manuscrito y ya hice las correcciones que noté.
-Así que algo grande va a ocurrir ¿No?-un largo suspiro escapó de sus labios sin poder ocultarlo, llevaba suficiente tiempo conociendo a la autora que comenzaba a hacer conclusiones sobre lo que ocurriría.
-Creo que sí, será mejor escucharlo de ella antes de preocuparnos por cualquier cosa. Sólo espero que no se le ocurra hacer una locura-hizo presión sobre el puente de su nariz mientras terminaba de acordar el día y la hora para la reunión que la escritora pedía-Por favor Verónica, no me metas en otro de tus acostumbrados desastres.
Y sin más siguió conduciendo hasta el departamento de la escritora para comunicarle la decisión que habían tomado entre ella y la vicepresidente de la editorial sobre el día en que realizarían la reunión y los preparativos para dar su anuncio.
-¿Y?-fueron las palabras de la menor mientras sostenía su tercer cóctel mirando a la recién llegada durante unos instantes-¿Hice arder Troya sólo por querer terminar con esto?
-No me hagas hablar de eso. Resultó menos pesado de lo que pensé pero de cualquier manera se notaba molesta aunque también entiende que está a punto de suceder un gran cambio ¡Y ni siquiera te ha visto! Seguro le dará un infarto en cuanto se de cuenta de que volviste a teñirte el cabello.
-No fue tan grave la vez anterior, sólo me rizé un poco el cabello y lo dejé rubio. Además, el único cambio que hubo en la historia fue que terminé aceptando lo que pedían.
-Pero esta vez cambiaste radicalmente el curso de la historia ¿De verdad vas a terminar con una relación que te costó tanto justificar de manera natural para no afectar a tus lectores?-se sentó a su lado antes de tomar el cóctel y dar un largo sorbo provocando una mueca por parte de la escritora.
-Bueno, que me dedique a escribir romance no significa que todo el tiempo deba darles finales felices a los personajes. Después de todo también tengo relatos de misterio y para todos mis lectores será un misterio porque su relación no pudo florecer pese a todo su esfuerzo ¿O no?
-Vamos, de verdad no puedes dejar que termine así. ¿Qué es lo que de verdad quieres hacer?-giró un poco para poder verla de frente-¿Piensas en una historia alterna? ¿En hacer una nueva historia? No entiendo que quieres lograr...
-Estás equivocada, nada de lo que te puedas imaginar es lo que realmente quiero-la interrumpió levantándose del sillón para tomar otro vaso y preparar otro cóctel mientras la seguía con la mirada-No lo quieres creer pero este es el fin de esta historia, pensé que sería claro cuando me viste.
-Entiendo que quieras cerrar ciclos y en realidad apoyo esa decisión pero pensé que tu libro y tu motivación para hacerlo ya eran temas separados.
-Estabas equivocada, lo único que hice fue plasmar lo que hubiera querido que pasara. De verdad quiero deshacerme de todo eso, ya no quiero seguir fantaseando como pudieron ser las cosas porque sólo me hace daño. Quiero crecer, salir adelante y dejar a esa chica ilusa que se enamoró de quien no debía por estúpida.
-Ya, ya. Tampoco tienes que exaltarte y armar un escándalo por esto-suspiró pesadamente antes de terminar lo que había en el vaso que le quitó antes-Sólo espero que las cosas resulten bien con la editorial, sería de no creer librarme de los juzgados por tu acoso a menores y tener que ir por incumplimiento de contrato.
-¿Por cuánto tiempo seguirás con eso? Te dije que nada de lo que estás pensando es lo que ocurre y no creo que de verdad haya algún problema con la editorial. Simplemente te gusta complicarte y armar escándalo por ello.
-Sí, sí. Ya sé que le estoy dando demasiadas vueltas-presionó el puente de su nariz evitando verla-Y será mejor que llegues temprano porque ni siquiera podría empezar a darles tu mensaje.
-Podrían conversar sobre cualquier cosa, no es como que de verdad necesiten que yo esté ahí para hacerlo. Además, ni siquiera tengo intenciones de dar explicaciones así que sólo les diré lo que voy a hacer y espero que lo entiendan-tomó de un sólo sorbo lo que restaba de su bebida antes de levantarse con rumbo a su habitación-Aunque sólo como precaución deberías llevar al abogado-rio un poco antes de dejarla en la estancia sin decir más.
-Esta niña de verdad va a acabar conmigo-suspiró de manera profunda antes de recoger las cosas sobre la mesa y llevarlas a la cocina para después tomar sus cosas-No olvides la cita y de verdad será mejor que llegues temprano.
-Sí, sí, como digas...-se tiró sobre la cama viendo hacia el techo mientras suspiraba-Bien, creo que al menos esta vez tendré que hacerme responsable por lo que suceda...