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ESPECTRO ....DE AMOR L1 por Lory Backon

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Notas del capitulo:

Hola a todos!!!

Mil mil gracias a todos los que leen el fic y a los que comentan me encanta leer sus comentarios me motivan muchisisimo y ademas asi me premiten conocerlos un poco mas, en verdad gracias!

Les mando un abrazo  enooorme!

Lory B.

 

-Quiero que me lo expliques!

El rubio miro su reloj y luego devolvió la mirada hacia enfrente; para encontrarse con la mía.

-Bien Steph; cuando tú le des la carta a la señora Yecum, y esta a su vez se la dé al maestro K. Veraz! Veraz que sucederán cosas maravillosas! Cuando el maestro lea tu carta explicándole tu verdad, anulara tu trato y entonces podrás ser libre!

-Pero, yo solo quiero ver a Sid una vez más y decirle....

-Espera Steph, a eso voy! Cuando el amo Sid se dé cuenta de que tu hiciste todo eso por amor, oh dios! Las cosas seguramente serán muy diferentes, serán magnificas!

-Tú crees?

-Seguro que sí!

-No crees que esta carta cause el efecto contrario? Después de todo ahí viene escrito bajo qué condiciones nos conocimos Sid y yo!

-Por eso mismo, ambos tendrán la oportunidad de volver a comenzar. Lo importante es que cuando eso suceda tú le digas al amo Sid tus sentimientos.

Mire el sobre blanco donde había metido aquella carta. Era una carta de más de 4 páginas, yo nunca había escrito tanto, la verdad no sabía si entregarla a Yecum o no, aun me encontraba dudoso.

Ese sábado de marzo, justo para el equinoccio, se daría a conocer la herencia de Sid. Yo no entendía que iba a heredar si iba a volver...Porque volvería no es así? Yo no sabía nada de nada ni me importaba solo sabía que tenía que ir de nuevo a la mansión en Land´s End para que pudiera enterarme del asunto, la verdad no quería otra cosa de Sid más que volviera y poder saber si tenía una oportunidad o me iría por donde vine. Era todo; un sí o un no!

Layla me había citado en el aeropuerto de Heathrow a las diez de la mañana, Theobald se había ofrecido muy amablemente a acompañarme a pesar de tener escuela sabatina y mucho que estudiar y todos sus deberes en Blackmoon; en definitiva Theobald era una de mis queridos pocos amigos con los que podía contar. Este estudiaba y hacia deberes durante el viaje. No entendía por qué querían que fuera? Entendía mis razones y las de Theobald pero... Acaso Yecum me escucharía?

-Theobald?

El rubio dejo su lectura para mirarme y preguntar.

-Si Steph?

-Por qué crees que me hayan hecho venir?

-Acaso no lo sabes?

-No-Negué mirando por la ventanilla del avión.

-Pues por varias razones. La primera es que seguro el amo Sid te dejo algo de dinero, otra es que seguro quieren que sepas para quien vas a trabajar ahora, quizás sea el amo Ephy el que recupere Moonlight o el amo Eliyahu...

-Quuien?!

-Eliya....El amo Elliot!-Dijo Theobald sonriéndome.

-Como le dijiste?

-Eliyahu.

-Sí, creo que una vez escuche a Ephy decirle de esa manera pero...

- Eliyahu es el nombre con el que el amo Elliot vivió en la antigüedad, significa el señor es mi Dios, que irónico no? Pero conforme este se mudó a Inglaterra cambio su nombre por Elliot, quizás ahora detesta ese nombre.

-Suena muy lindo e incluso tiene un bello significado-Dije meditando- Pero entonces.... Eso quiere decir que si cambia Moonlight de dueño Sid no va a volver verdad?

-Por eso es importante la carta Steph. Esa carta es la vuelta del amo Sid. Y quizás eso tenga que ver y sea la razón más importante del por qué te trajeron aquí.

-Ah? Que quieres decir?

-Bueno es obvio que los amos harían hasta la imposible porque tu carta no llegue a manos de la señora Yecum. Por eso es importante que cuando se la vayas a entregar a la señora Yecum pienses solo en tener una audiencia privada con ella; es más desde que esta se haga presente piensa en ella, mas no en la carta u el objetivo.

-Pero no lo entiendo, a ellos les agrada Sid, acaso no quieren que vuelva?

-Claro que si les agrada el amo Sid, Steph, pero no olvides que ellos son espectros, y la bondad, la amistad y el amor no son más que conceptos, palabras bonitas pero solo funcionan como adornos. Eso además de que imagínate que pensaran que un humano se libere de un contrato con el diablo. Incluso no se supone que te diga esto pero mi amada señorita Layla se opuso rotundamente a que vinieras, fue mi amo Samael quien la convenció.

-Layla? Pero por qué?

-Porque ella piensa que no es bueno que interfieras en los asuntos de la asamblea.

-Pero si el asunto es referente a mí...

-La señorita Layla es muy sobreprotectora con lo que ama, no la juzgues duramente.

-Bueno... Supongo eso es cierto.

-Entonces entendiste lo de como entregarle la carta a la Sra. Yecum, Steph?

-Si-dije asintiendo-Solo debo pensar en que deseo tener una audiencia con ella.

-Recuerda, solo en cuanto esta aparezca.

-Si.-Dije mirando el sobre que estaba entre mis manos, lo manosee nerviosamente y Theobald me sonrió.

-Si deseas Steph, puedo guardarla por ti hasta la tarde, así no estarás inquieto por ella.

-Sí, bueno muchas gracias Theobald.

El rubio de ojos verdes tomo la carta de entre mis manos y de cierta manera sentí una especie de alivio, era como dejar de cargar con nuestra historia por un momento, me imagine el de antes... Pero eso quizás era algo que no había sucedido y solo me imagine.

Mire de nueva cuenta a la ventana, un paisaje verde se iba abriendo paso bajo nosotros, en tanto el rubio guardaba mi historia y volvía a su lectura...Sid...En serio no vas a regresar? Tengo cosas importantes que decirte, tantas palabras que no pude decirte y no escucharas quizás nunca.

Cuando arribamos a Land´s End un Mercedes Benz color plata nos llevó a la mansión, mi habitación de nueva cuenta en uno de los pisos más altos, era el mismo de la vez anterior. Descanse durante toda la mañana, trate de dormir lo más posible ya que no quería pensar; haría lo que el buen Theobald me había aconsejado ya que si me ponía a analizar las cosas seguro terminaría haciendo una tontería como meterme al mar desnudo a buscar a Sid o peor aún quemar la carta que era mi salvación. Esa carta me hacía demasiado ruido, quizás porque era lo único que lo traería a casa o no lo sé pero en serio me volvía loco saber que mi salvación o mi perdición estaba resguardada en el libro de Theobald.

Después de la comida, la cual tome solo, porque Theobald estuvo en la biblioteca toda la tarde me retire a mi habitación, intente dormir de nueva cuenta pero me fue imposible, decidid tomar un baño y llame a la maid para que lo preparase. Burbujas de frutillas de la toscana y sales del caribe, nada mejor.

Durante ese tiempo no hice más que pensar en la carta, en Sid y en mí. Estaría haciendo mal al no dejar que Sid se marchase con Glenn? Yo ya no tenía miedo de Sid, al contrario él se había vuelto mi vida en estos dos años. Entonces estaría siendo tan egoísta que Sid si volviese no me lo perdonaría?

Salí del baño y apenas eran las cuatro y media de la tarde! El colmo cuando uno quería que las horas pasasen rápido era todo lo contrario. Comenzaba a desesperarme, intente salir a vagar por la mansión pero sufrí de una especie de pánico de perderme en esta y no llegar a ver que había preparado Sid. Quizás... Quizás el volvería hoy y por eso me habían traído?

Me sentí feliz de tan solo pensar en que le volvería a ver, por ahora vivía de los recuerdos de este que se habían quedado aquí conmigo, pero estos se consumían cada día y pronto se agotarían de mi mente.

Me tumbe en la cama y comencé a pensar en que sucedería si Sid volviera y me aceptara. Seriamos pareja? Un color carmín me ruborizo completamente el rostro , como podía pensar esas cosas tan vergonzosas? Apenas hacia unos meses me decía strike y ahora.... Agite la cabeza de un lado a otro para que esas ideas se esfumaran pero en lugar de irse comenzaron a flotar como nubes a mi alrededor y comencé a soñar despierto.

Sueños donde no existía Glenn, donde yo era el primero, porque no podía ser yo el primero? Aquí estaba yo no era así? Aquí estaba yo para Sid. Eso debería contar, y Sid debería estar para mí, y sobre esas dos premisas deberíamos estar nosotros y sobre el nosotros nada... Sentí entonces una especie de exaltación, era como agujas en mi interior, nadie sabía ni veía todo lo que había dentro de mí por culpa de Sid, nadie excepto yo mismo.

La puerta se abrió y esa voz tan cándida y femenina se escuchó por mi aposento.

-Steph?

Me levante de inmediato y la mire, su vestido era una cosa excepcional, era moda del periodo de la regencia eso era seguro. Un diseño sencillo con la cintura alta anudada bajo el pecho pequeño de Layla y de un largo hasta los tobillos pero que dejaba ver sus pequeños pies . Este tenía unas mangas cortas tipo farol, todo de muselina azul con bordes dorados. Al cuello llevaba una gargantilla de oro con un enorme zafiro azul que combinaba a la perfección con su vestido. Sus cabellos iban recogidos en un chongo cubierto por una chonguera de hilos de oro, que espectáculo tan magnifico era verla.

-Vamos Steph, que cosas piensas eh? Eres tan lindo!

Dijo ella quitándome un mechón de cabello que tenía en el rostro.

-Layla...Y Sid?

-Ah?

-Donde esta?

-Steph te sientes bien?

Recordé de golpe todo lo que había pasado y el por qué estaba ahí y termine asintiendo.

-sí, perdona!

-No hay nada que perdonar ahora ve a bañarte en lo que yo preparo tu atuendo.

Estaba a una de protestar que ya me había bañado pero entonces unas gotas de sudor recorrieron mi frente, así que obedecí a la hermosa mujer. Para cuando salí del baño un traje negro estaba ya dispuesto para mí. Era de un negro soberbio y la tela era seguro una de las mejores tiendas del distrito de Savile Road, otra excentricidad!

Me lo puse y cuando me miraba al espejo entro Layla.

-estás listo?

-Porque he venido?

-No hay mucho tiempo de explicártelo Steph, pero solo debes saber que estas aquí por orden de Sid, él es tu prestamista y por lo tanto tú debes de...

-Espera, espera, Layla! Dices que estoy aquí por Sid no es así?

-Sí.

-Y donde está el?

-Steph.... Es complicado.

-Seguro que no-Dije encogiéndome de hombros-Que complicado tiene que Sid desee irse con Glenn Allen.

-Steph, pero...

Esta mostro por un momento un gesto particular de incredulidad y justo en ese momento entro Theobald en mi auxilio.

-Señorita Layla, mi amo Samael dice que está todo listo.

-Bien Theobald-dijo Layla respondiéndole con pocas ganas.

-No deseo molestarla pero el amo esta impaciente.

-Bien, bien!-Dijo Layla y luego se dirigió a mí- No pienses esas tontería Steph, lo que sucederá hoy será muy importante para ti, de acuerdo? Ahora baja cuando estés listo!

Asentí y Layla me beso en la frente de prisa y salió por la puerta donde Theobald seguía aun en pie.

-Steph, aquí está la carta, no debes darles indicios a los amos, ya que entonces el plan fallará y el amo Sid no regresara quizás nunca! Recuerda yo estoy contigo siempre, te considero como mi hermano Steph y quiero que seas feliz y si el amo es tu felicidad yo te apoyo! De acuerdo?

-gracias Theobald!

Sus ojos verdes eran tan intensos que me sentí un poco más valiente.

-En serio agradezco todo lo que has hecho por mí, yo también te considero un hermano y no sé qué es lo que hubiera hecho sin ti, sin tus palabras o tu ayuda. Seguro hubiera destruido la carta en el mero instante.

- Bien, aun estas a tiempo si deseas pero...

-no! No se diga más! Quiero verle una vez más!

- Entonces sé que no es muy propio decir esto pero.... Que Dios este contigo hermano mío!

Theobald me abrazo con ternura y yo le correspondí, él se había vuelto como mi hermano menor y mi única fuente de consuelo humano.

-Gracias hermano!-Dije en respuesta.

A las ocho de la noche baje hasta el recibidor, escoltado por Theobald , no me sentía muy valiente pero el solo estar acompañado del ojiverde me daba esperanza. Al pie de la escalera estaban los gemelos, lucían al igual que yo trajes negros costosos.

-Hola Steph, vaya sí que te ves lindisisismo en ese traje!

-Hola Kuri!

-Hola Steph, como estas?

-Hola Yuri, bien y tú?

-Bien-Este se dirigió a mi acompañante y le hizo una pequeña reverencia- Theobald...

Theobald contesto la reverencia pero más formalmente, luego estos me abrazaron uno de cada lado haciendo caso omiso de la presencia de Theobald al cual desplazaron de lugar y me condujeron hasta el jardín, pero esta vez era un jardín completamente diferente al de la vez pasada que había estado ahí.

Un camino de pequeños faroles trazaba el sendero por donde había uno de pasar, hasta donde un pórtico de madera que semejaba los templos iluminados con luces en serie y cuatro focos que colgaban en cada viga que sostenía el techo daba cobijo a una mesa para ocho personas bien dispuesta con motivos de primavera, rosas blancas, geranios blancos y jazmines blancos perfumaban la cristalería de manufactura cortada.

Samael y Ephy conversaban en sus respectivos lugares cuando se dieron cuenta de mi presencia. Ninguno de los dos dijo nada así que Kuri se adelantó a estos.

-Ha llegado el chico por el que hoy estamos aquí!

-Kuri-Le espete.

-Qué? Acaso dije algo mal?

Ephy me dirigió una mirada molesto y volteo a ver hacia otra parte. Noté entonces que todos parecíamos llevar el mismo traje negro, solo en diferentes tallas.

-Pues claro que todos llevamos el mismo Steph, esta reunión es extraoficial, no se tenía contemplada!

-Extra..Oficial?

-Sí, Steph esta reunión no estaba planeada para ninguno de nosotros!-Dijo Yuri apretándome contra el con suavidad-Pero vamos ven a sentarte tu ocuparas el lugar de Sid.

-Osh como eres aguafiestas Yuri, yo quería sentar a Steph en mis piernas.

Yo mire a Kuri con enfado y supuse que si sería capaz de un acto tan vergonzoso. Así que hice caso a la voz sabia y prudente de Yuri y me acomode en el lugar de Sid, los demás tomaron su lugar como siempre la cabeza principal de la mesa estaba vacía y a su derecha estaba Ephy, luego continuaba el lugar de Elliot que aún no había llegado y le seguía el lugar de Kanon, después de este que tampoco estaba presente seguía Kuri. Por el otro lado a la izquierda estaba yo a mi lado Samael y luego Layla , después de ella estaba Yuri y Theobald hasta el final.

Como aún era temprano Layla y Samael pidieron se sirviera la cena para los dos únicos humanos presentes, el menú como siempre era exquisito, crema de calabaza , una ensalada con un nombre rarísimo que me pareció italiano pero no logre captar bien y lomo de cerdo bañado en vino y salsa de especias, de postre había trufas de queso con chocolate. La verdad , no sabía que esperar de esa reunión pero la incertidumbre no mermo mi apetito para nada así que supuse que estaría bien comer a mis anchas después de todo el no comer no me devolvería a Sid, aunque si Sid regresaba seguro me pondría tan contento que comería más postres por mera felicidad aunque el espectro se burlase de mí.

Cuando dieron las diez y media de la noche Layla mando retirar todo el servicio y pidió a los empleados se retirasen en lo más pronto posible, pretextando que no deseaban ser molestados. Luego Samael se dirigió a Theobald con un cariño que incluso a mí se me erizo la piel de la envidia.

-Vamos Theobald es tiempo de que tú también te retires a descansar.

-Pero maestro, por favor!

-No!-dijo pasando su pálida mano por las mejillas de Theobald con suavidad- Lo que va a suceder aquí no es asunto de un niño como tú.

-Pero...

-Oh Theobald no seas insolente conmigo quieres? No será que Stephan te ha influenciado en su terrible comportamiento verdad?

Layla le dirigió una mirada dura a Samael y yo me quedé asombrado en la manera de como este trataba a Theobald y de lo que había dicho, bueno no negaba ser algo de mala influencia pero no tan severamente.

Theobald beso la mano de su amo y después vino a mí me abrazo y dijo en mi oído.

-Mucha suerte hermano mío y que dios bendiga tu camino- Me dio un beso en ambas mejillas mientras en secreto metía en mi bolsillo aquella carta que era mi deber entregar.

En ese tiempo nos dieron las once y cuarto de la noche, tuvimos que esperar tres cuartos de hora en lo que llegaban Elliot y Kanon que eran los únicos que al parecer se les había hecho tarde esta vez! Yo me sentía nervioso pero intentaba no pensar más que en canciones de comerciales y cosas de ese tipo.

-Steph...-Dijo su dulce voz

-Ah?

-No estés nervioso, todos estamos contigo!

-Layla....emhh bueno gracias! Oye crees que Sid regrese hoy?

Ella me miro con cierta tristeza y después en un ademán apenas perceptible negó con la cabeza.

Me recargue en la meza y cruce los brazos... Sid ven, vuelve que estoy dándome por vencido.

En punto de la media noche sonaron esas campanas tan graves y aterradoras y la piel se me enchino, no podía creer que vería de nuevo a esa mujer, pero sin tardanza las luces se apagaron por completo, el agua del estanque comenzó a perturbarse y de ahí emergió aquella figura de capa negra con la capucha que le cubría el rostro por completo. Camino de nuevo hasta el lugar central y se posó ahí delante de nosotros, todos hicieron la reverencia solemne y yo les imite, sabía que esa persona era sumamente importante. Después todos volvimos a nuestros lugares y la encapuchada miro hacia los lugares vacíos al lado de Ephy.

-Sentimos la tardanza mi amada señora.

Todos volvimos la mirada y nos encontramos con las figuras de Elliot y Kanon que estaban en la entrada del jardín y que en un parpadeo tomaron su lugar no sin antes hacerle la reverencia a la de la capa negra.

-Llegan tarde Asmodeo y Belfegor, acaso ahora han suplantado al Leviatan en su costumbre de hacerme esperar.

-Lo lamento mi amada señora pero la pereza me ha engatusado-dijo Elliot con una mirada de complicidad a Kanon que no le respondió en lo más mínimo.

-Muy buenas noches principitos de la asamblea de Londres-Dijo la mujer descubriéndose el rostro , había olvidado la negrura de sus cabellos, era hechizante y hacia juego perfecto con su blanca y pálida tez; así mismo sus ojos color sangre no dejaron de tomarme por sorpresa y causarme un escalofrió.

-Todos saben el por qué he venido aquí esta noche, y más porque no he rechazado la presencia del humano. Esta noche daré fe de las disposiciones que el Leviatan dejo dichas como herencia en caso de que pierda la pelea o algo más se presente- Dijo esto y poso su mirada en cada uno de los presentes.

-Ahora bien leeré las disposiciones del Leviatan en este momento

La hermosa morena saco una carta que por el sello de pez supe que era de Sid, mi corazón dio de tumbos, no podía refrenarse, un escalofrió recorrió mi espalda y las manos me chorreaban en sudor. Ella rompió sin dificultad el sello y lentamente ; más de lo que me hubiera gustado a mi comenzó a leer.

Yo, tercer príncipe Leviatan en causa de que he sido retado por mi hermano menor, príncipe cuarto he dejado dispuesto de mis asuntos oficiales los siguientes puntos:

Primero:

En cuanto a las empresas Moonlight y con el consentimiento de la santa sede así mismo de la asamblea de Londres y su líder, deseo que Belcebu tome posesión de estas mismas y complete mi tarea por el tiempo que yo no esté presente , ya que si acepta en el acto entrego la empresa en las mejores condiciones solo con la conclusión de no despedir a mi tan valiosa secretaria la cual ha sido vital en el crecimiento de estas.

Segundo:

Toda la fortuna que he acumulado como espectro es mi más grande ambición hacerla crecer y por eso con el consentimiento de la asamblea de Londres, de su líder y de los mismos, deseo que sea llevada por los codiciosos gemelos de Mammon, teniendo en cuenta un apartado especial que más adelante mencionare. Deseo que esta se triplique o de a mas, durante el tiempo de mi ausencia y que en dada posibilidad mínima de que caiga ante mi hermano sea puesta en definitiva en su poder por completo.

Tercero:

En cuanto a las propiedades terrenales que poseo es mi más grande ambición que estas se conserven en el mejor estado posible y sin ningún tipo de cambio en ellas; por eso con el consentimiento de la asamblea de Londres, de su líder y de la misma deseo legarlas a Lilu hija de la primera mujer, teniendo en cuenta un apartado especial que más adelante mencionare. En caso de que caiga ante mi hermano es mi más expreso deseo que sean derrumbadas una a una todas y cada una de ellas y su contenido sea quemado hasta que no queden ceniza o rastro alguno de ello.

Cuarto:

Para mi estimado príncipe Amon deseo que todo lo que esta con llave en el cajón principal de mi escritorio lo posea.

Quinto:

Deseo que todo lo anterior sea puesto en marcha de inmediato en cuanto se haga oficial la lectura de mis deseos expresados en papel y justificados ante la santa sede. Así mismo deseo que sean respetados de cualquier manera existente y sin ningún tipo de sentencia que los contrarié.

...........................

La morena dejo de leer y yo me quede anonadado, parecía que Sid se había olvidado de mí y al parecer de Elliot y de Kanon también, al menos no había sido solo yo, pase la mirada por todos y cada uno de los espectros que estaban sentados y todos se miraban tranquilos. Luego de esto ella retomo.

Sexto:

Es mi más íntimo y expreso deseo el legar a mi única propiedad contratista, la cantidad de 77 millones de libras además de la casa en Cornwall conocida como Norfolk. Así mismo todo lo que está dentro de esta y sus títulos nobiliarios, también deseo que su protector y albacea el cual ha consentido fungir de ahora en adelante y siempre como mi suplente para resguardar a mi propiedad contratista, para cuidar y protegerle de cualquier peligro o mal que se presente salvaguardando su vida antes que todo y de velar por su bienestar y sus intereses vele representando en todo momento a mis deseos .

En caso de que caiga ante mi hermano o ante cualquier otra circunstancia deseo que este sea por siempre su espectro a cargo así mismo legándole su alma a la albacea designada, sin motivos de poder impugnar esto bajo ninguna circunstancia nunca jamás.

Estos seis puntos son en total mi más fervientes ordenes expeditas en completa función de mi esencia demoniaca y las cuales ya han sido aceptadas por la santa sede y por su representante en la tierra.

Agradezco a la asamblea de Londres y a su líder sus atenciones conmigo durante el tiempo que estuve ahí y espero que tengan el mejor centenario de sus existencias.

Firmado.

Leviatan príncipe tercero del mar Atlántico.

Un silencio espectral reinó en ese jardín, no pude evitarlo, Sid...Sid me había regalado a alguien. Me aferre de la mesa para no caer al suelo, me sentía tan pequeño e insignificante y mis ojos se nublaron, Sid había estado jugando conmigo todo el tiempo justo en mis narices y yo no sabía nada? Yo que me estaba derrumbando y cayendo de amor por él y este me había regalado como a cualquier cosa. Nuevamente mi debilidad se mostró ante mis ojos, agache la mirada y vi una gota caer a la mesa.

-Steph, cálmate-susurro Layla.

-Yo hubiera sido el único si el así lo hubiera querido... Yo le hubiera seguido a cualquier lugar...

-Steph...Aun no termina por favor cálmate un poco, ya después...

La mire con rabia, ella no entendía, era la primera vez que comenzaba a amar a alguien y este me había regalado, así nada más! Sé que con el puño de la camisa mis lágrimas y voltee a ver a cada uno de los comensales que me miraban apenados todos excepto Elliot y Kanon que no había quitado su expresión durante toda la reunión.

-A continuación y como último acto final de esta reunión les hare notificación de quien es la albacea y representante así como nuevo custodio del humano, el cual ya ha firmado con anticipación y ha aceptado el cargo.

Mi corazón latía tan deprisa que creí que se me iba a salir del pecho.

-La albacea y custodio de que todas y cada una de las disposiciones de Leviatan se cumplan es ......

Sid...él era el único al que yo amaba y este se había marchado...Sid vuelve.

-Belfegor-Pronuncio ella, haciendo que las palabras hicieran eco en ese lugar abierto, un jardín en algún lugar del mundo.

 

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