-Este chico aquí a mi lado se llama Deak, será el baterista temporal de nuestra banda Quod Cordis, por favor llévense bien con él-dijo el albino con una sonrisa.
El pelirrojo, ahora castaño, no salía de su asombro y esas palabras se repetían constantemente mientras el albino con tranquilidad iba presentando a las personas allí presentes, Lavi no estaba prestando atención a nada de lo que Allen decía o a las personas frente a él, en ese momento su cerebro solo estaba enfocado en asimilar la situación en la que se encontraba, si su abuelo llegaba a enterarse de eso estaba seguro que varias de sus libertades se acabarían, el problema que tendría con él no sería nada agradable, por más que fuera su único nieto seguía siendo bastante estricto y firme respecto a muchas cosas.
-Allen, ven un momento-el oji verde, en esos momentos oji ámbar, dijo aquello apenas el menor hubo terminado de presentarle a todo el personal, lo tomo de brazo y lo llevo un poco lejos de las personas tratando de que no escucharan lo que iban conversar, dejo libre su brazo cuando considero que estaban lo suficientemente lejos, suspiro antes de hablar-¿no crees que debiste comentarme antes que este favor se trataba de ser el baterista temporal de la banda?-hablo en voz baja tratando de ser precavido.
-Lo sé Lavi, por eso justamente le pedí a Link que preparará ese disfraz para ti, la peluca incluso está hecha con cabello real y te presente como Deak, para no implicar tu verdadera identidad lo máximo posible-comento mientras observaba al chico frente a él.
-Sabes perfectamente lo que pasaría si el viejo se llega a enterar de esto-
Al escuchar eso el albino bajo la mirada, asintió-si, lo sé-después de pronunciar aquello el tono de voz del contrario se escucho desanimado, el mayor soltó un suspiro y acarició los blancos cabellos antes de hablar.
-Pero también sé que no me lo pedirías si no fuera necesario, así que no diré nada más y te ayudaré con esto-el contrario dirigió su mirada azul grisácea al rostro del, en aquellos instantes, oji ámbar donde encontró una sonrisa-además debería disfrutar esto también, no todos los días eres baterista de una banda famosa-Allen rió levemente por sus palabras.
-Supongo que tienes razón…entonces hagamos esto juntos, bienvenido al equipo-extendió su mano la cual fue tomada por el contrario culminando en un apretón de manos y un pequeño abrazo de parte del mayor-ven debo presentarte al último integrante de la banda antes de la sesión de fotos-
Lavi asintió comenzando a seguirlo, se acercaron a un chico rubio de cabello corto, tez clara y ojos grises, vestía con una camisa blanca manga larga, una chaqueta sin mangas negra con algunos detalles en dorado, pantalones negros al igual que los botines, una cinta amarilla a modo de cinturón y una cadena plateada en su cuello que tenía el dije de una cruz, se encontraba afinando un bajo que tenía en sus manos con tranquilidad, mientras estaba sentado en una silla no muy lejos del lugar donde se tomarían las fotografías.
-Bak-hablo Allen llamando la atención del mencionado, que alzo su vista del instrumento para poder observarlos-el es Deak, será nuestro baterista-luego miro al castaño-Deak el es Bak Chang, nuestro bajista-
-Es un gusto conocerte Deak-el rubio extendió su mano al contrario con una sonrisa cordial.
-El gusto es mío Bak-respondió el oji ámbar con una de sus típicas sonrisas.
Casi al instante de terminar con sus presentaciones se escucho la voz del fotógrafo mandando a los artistas que se alistaran, las maquillistas se acercaron llevando a cada miembro de la banda para hacerle los últimos retoques, luego de que estuvieron listos se posicionaron donde indico el fotógrafo, que para el castaño estaba extrañamente decorado, comenzando con la sesión. Fue un trabajo largo y tendido, se tomaron muchas fotos en poses diferentes, con instrumentos, sin ellos, tuvieron que cambiar de vestuario varias veces mientras cambiaban a la vez la escenografía donde se harían las fotos, retocar el maquillaje, al final el castaño no sabía porque necesitaban tantas fotografías, eran unas simples imágenes de las cuales solo unas pocas, a comparación de la gran cantidad que seguro habría, serian elegidas; la verdad todo eso lo había abrumado un poco, a diferencia de Allen, Kanda y Bak, él no se encontraba para nada acostumbrado a eso, aunque si planeaba ayudar a sus amigos sería mejor acostumbrarse a ello pronto. Luego de un rato, varios cambios de vestimenta, retoques en el maquillaje y muchas fotos después el fotógrafo volvió a hablar, pero esta vez no para dictaminar una orden o sugerir una pose, sino para decir una frase que Lavi llevaba anhelando hacia un tiempo ya.
-Bien hecho chicos, pueden tomar un descanso antes de que procedamos con las últimas fotografías-
Lavi dejo escapar un suspiro aliviado, estiro su cuerpo y unos segundos después se unió a los demás donde recibió un vaso de agua amablemente de parte de una de las chicas que se encontraban trabajando en el lugar, se posó al lado del azabache quien lo miro de rejo y lo ignoro para tomar su vaso de agua al igual que él había hecho hace unos momento.
-Esto es agotador… ¿Cómo lo soportas?-pregunto mirando al contrario-te conozco desde hace tiempo, por lo que sé que te estresas rápido, así que me estaba preguntando ¿cómo es posible que no hayas soltado ni una queja a estas alturas?-
Kanda le miro por unos momentos antes de contestar-es simple conejo idiota, es mi trabajo y ya me he acostumbrado, tu deberías hacer lo mismo, sino solo serás un estorbo-le dedico una sonrisa de superioridad antes de caminar a otro lado apartándose del castaño. Se escucho un suspiro que al buscar con la mirada quien era el dueño de aquello, se encontró con un albino que negaba suavemente.
-No le prestes atención, cuando estábamos en nuestro inicios él era el primero en estresarse y querer matar al fotógrafo alegando que a él nadie le daba órdenes, al final terminábamos discutiendo porque yo defendía al pobre hombre que no tenia culpa de nada-aquello hizo reír al oji ámbar cosa que contagio al albino-le costó mucho acostumbrarse a estas cosas…además, aunque no lo hayas notado, si se ha quejado aunque en voz baja o cuando se aparta de nosotros como hizo ahora, también lo hace-dijo un poco bajo después de calmar su risa-así que tomate el tiempo que necesites-claro que el albino no le dijo que su “desgracia”, por llamarlo de alguna manera, había mejorado un poco el humor del contrario.
Cierto rubio al escuchar la conversación también se acerco-Allen tiene razón Deak-hablo esta vez recordando cómo había sido él cuando entro en la banda-en mi caso, al inicio, cuando teníamos mucha carga de trabajo también me provocaba estrés, pero al contrario que a otros en mi se muestra de manera diferente-bajo la mirada sombrío-me da urticaria, y créeme que eso es peor que el estrés ocasionado por el trabajo-dijo con un ligero temblor al recordarlo, realmente odiaba cuando es urticaria aprecia-preferiría que simplemente me diera dolor de cabeza o algo por el estilo…a eso-confeso con un leve suspiro.
Lavi le sonrió en agradecimiento, la historia de Bak le había dado un poco de risa pero no se burlo, después de todo el rubio le había contado aquello para hacerlo sentir mejor, no para que se burlara de él, aunque sería algo útil cuando quisiera bromear con oji gris.
-Gracias chicos, realmente lo necesitaba-los contrarios le sonrieron amablemente.
-No tienes que agradecernos ¿cierto Bak?-el de ojos azul grisáceo miro al rubio el cual asintió afirmando las palabras del contrario
-Así es Allen-
Siguieron hablando un poco más entre ellos, los chicos le contaban anécdotas de como habían sido sus inicios como banda, algunas hicieron reír al castaño, y en un momento no pudo evitar burlarse abiertamente cuando la urticaria de Bak salió a relucir en una de sus historias.
-Creo que voy a salir un rato a tomar aire fresco… ¿quieren acompañarme?-pregunto el oji ámbar, luego de unos minutos.
-Prefiero no salir, no creo que falte demasiado para que empecemos la última ronda de fotos-comento Bak mirando en dirección al fotógrafo, Allen también se negó.
-Yo tampoco, Bak tiene razón y creo que debería de ir a ver qué está haciendo Kanda, aunque hace rato lucia calmado no creo que su mal humor se haya esfumado por completo-el albino se encontraba mirando en la dirección donde se encontraba el mencionado mientras hablaba.
-Entonces iré solo, no creo que sea necesario pero si la sesión empieza y yo aun no he vuelto llama a mi celular Allen-
-Está bien Deak-dijo con una amble sonrisa antes de ir rumbo donde estaba el azabache, sentado un poco apartado de todos en el lugar, aunque normalmente hacia eso, nunca había sido muy sociable que digamos, Allen estaba consciente que su mal humor ese día no se debía a nada de lo que estaba sucediendo con la banda y por más que preguntaba no quería decírselo, así que mientras esperaban el llamado del fotógrafo le sacaría la verdad a Kanda a la fuerza si era necesario.
El pelinegro al verlo acercarse soltó un chasquido, sabía perfectamente porque ese mocoso se acercaba y la verdad no quería aguantar su interrogatorio, cuando el menor estuvo frente a él bufo mientras desviaba la mirada a un lado y se cruzaba de brazos, con la esperanza de que quizás de esa manera entendería que no quería estar con nadie en esos momentos, pero se equivoco.
-Te dije que Lavi si vendría a ayudarnos-le escucho decir aquello mientras se sentaba a su lado, al ver que no hubo respuesta de su parte se quedo unos momentos callado antes de hablar nuevamente-Kanda ¿Qué es lo que te tiene de tan mal humor?-El de orbes oscuros le lanzo una mirada de advertencia para que no siguiera preguntando, aunque el contrario ignoro olímpicamente este hecho-desde temprano estas estresado y no entiendo porqué… ¿es algo malo?-observó cómo se acomodaba en el asiento y luego intentaba tomar sus manos, pero el mayor las retiro impidiendo que el contacto se efectuara y simplemente siguió sin contestarle-Kanda, si hay algún problema te ayudare en lo que pueda a resolverlo, ya sabes dos cabezas piensan mejor que una-dijo dedicándole una sonrisa al contrario-pero si no me dices lo que sucede…-sus palabras se vieron interrumpidas a casusa del contrario.
-Deja la maldita insistencia con el tema moyashi-contesto de tosca manera mientras se levantaba de su asiento para posarse esta vez frente al menor-todo el día te has pasado preguntado lo mismo ¿no tienes nada mejor que hacer?-pregunto un poco exasperado-no he pedido tu ayuda, y tampoco la necesito-se cruzo de brazos sin dejar de observarlo- sea algo malo o no, no es tu problema.
Aquellas palabras le dolieron, pero de la misma forma en que apareció aquel sentimiento lo borro de su rostro en segundos, no le iba a dar el gusto al azabache de verlo de esa forma
-Muy bien Kanda, no volveré a preguntarte nada…resuelve tus problemas solo-Se levanto de su lugar y paso a su lado sin volver a dirigirle la mirada.
El mayor lo observo alejarse y luego se dejo caer de vuelta en la silla que ocupaba anteriormente-¡mierda!-apretó los puños con fuerza antes de dejarlos caer a los lados de su cuerpo, él había visto ese atisbo de dolor que se mostraron en esos ojos azul grisáceos por unos pocos momentos, no le gustaba verlo de esa manera pero al final siempre terminaba siendo causante de esa mirada. Suspiró mientras observaba al albino hablar con el rubio manager-aun no puedo decírtelo-
Salió de aquel lugar, quería despejar su mente un poco y no observar nada relacionado a ese set por unos momentos, es cierto que los chicos habían logrado animarlo pero ese espacio cerrado no era precisamente alentador si tu estrés se debe a él. Luego de deambular por el lugar encontró una salida, al percibir la brisa en su rostro se sintió un poco mejor, era eso lo que necesitaba, camino un poco mas fuera de aquella edificación parecida a un gran galpón y exploro mirando las diversas instalaciones en aquel gran terreno, que la verdad constaban de muchos galpones parecidos y otro par de pequeños edificios más. Después de unos minutos de andar caminando por ese lugar escucho su celular sonar, suspiro al pensar que ya se había terminado su tiempo, así que mientras revisaba su teléfono encamino sus pasos de regreso al set donde debía terminar el trabajo que fue a realizar en ese lugar.
Era solo un mensaje que tenia por remitente “Viejo”, se quedo mirando extrañado el aparato unos momentos antes de leer el texto “Mantente despierto hasta que vuelva a casa, debemos discutir un asunto”, se tenso al leerlo pero luego negó con suavidad.
“Es imposible que lo sepa, a menos que tenga a alguien siguiéndome, no podría enterarse tan rápido de lo que estoy haciendo”
Con aquello en mente respondió más tranquilo “Entendido, estaré esperándote viejo, pero si llegas muy tarde no garantizo nada” después de aquello una contestación no tardo en llegar “Deja de llamarme viejo, chico irrespetuoso…y no te preocupes, si te quedas dormido simplemente buscare la manera de despertaré”, al leer lo ultimo sintió un escalofrío recorrer su espalda, definitivamente no quería eso.
Revisó su teléfono unos momentos más antes de guardarlo nuevamente sin detener su curso, estaba bien que regresara al set, ya había despejado su mente y explorado un poco el lugar. Al llegar a su destino se dispuso a entrar, pero se detuvo bruscamente al reconocer a alguien dentro de ese lugar, un hombre alto, de tez pálida, con el cabello de dos colores, vestía un traje café y tenía una especie de sobre en la mano, sabía perfectamente de quien se trataba, un empleado de la editorial que llevaba por nombre Krory.
Y solo preguntas llegaron a su mente.
¡¿Qué hace el ahí?!
¡¿Que buscaba?!
¿Se había equivocado y su abuelo si se había enterado de sus andanzas, mandando al pobre hombre a buscarlo y adelantar la charla que le había comentado por mensaje?
No pudo seguir divagando pues observo casi con una especie de pánico, aunque no era un sentimiento tan fuerte como para considerarse tal, como Krory se dirigía a la puerta del lugar justo donde él se encontraba en esos momentos, aunque suene cobarde solo se le ocurrió una solución, huir del lugar y esconderse mientras el de cabello bicolor desaparecía; podría estar disfrazado, pero no estaba seguro de si ese disfraz engañaría a alguien que lo reconoce fácilmente.
Salió corriendo lejos de la puerta, pero su recorrido no duró mucho ya que al estar pendiente del lugar, que probablemente no tardaría mucho en cruzar aquel hombre, no presto atención a lo que se encontraba frente a él, por lo que había terminado chocando con alguien; en consecuencia la peluca cayo de su lugar al igual que el dueño de esta, el mismo destino corrió su billetera aunque no logro percatarse de esto último, miro a la persona frente a él, se trataba de un hombre moreno alto, con el cabello negro ligeramente largo junto a suaves ondas, ojos dorados, bajo la orbe izquierda un pequeño lunar, vestía un elegante y sobrio traje negro que hacían juego con su corbata y zapatos, y bajo este se notaba el chaleco del mismo color del traje seguido de la camisa blanca.
-¿Te encuentras bien?-pregunto el moreno extendiendo su mano para ayudarlo.
Aquella voz le hizo estremecer, pero mantuvo esa reacción solo en sus adentros, no se permitió en ningún momento exteriorizarla, asintió con suavidad a la pregunta del contrario e iba a tomar su mano, pero todas sus alarmas internas se activaron al recordar algo…no llevaba puesta la peluca y se supone estaba huyendo para que no lo reconocieran, se levanto casi de un brinco del suelo y con peluca en mano se dispuso a escapar de la escena-Disculpe-y luego de solo aquellas palabras retomó su carrera mientras nuevamente ponía el falso cabello en su lugar e iba acomodándolo lo mejor que podía entre las prisas.
El hombre que había quedado solo en el lugar observo la billetera en el suelo, la recogió y sonrió un poco mientras la miraba-te encontré, conejo escurridizo-dijo observando la dirección en la que se había marchado el pelirrojo, era él, aunque su color de ojos, o más bien ojo, en ese momento fuera diferente en definitiva era el chico que estuvo buscando, además por lo que notó el menor estaba disfrazado, así que seguramente estaría usando una lentilla para cambiar el color de su iris. No pudo seguir concentrado en sus pensamientos al escuchar una voz llamándole.
-Señor Tyki, al fin lo encuentro-un suspiro de alivio salió del hombre frente a él-…señor Tyki ¿sucede algo?-pregunto al notar que no le prestaba atención.
Al escuchar la pregunta el pelinegro rió levemente-nada…simplemente acabo de ver a un dulce conejo que iba tarde a tomar el té-
-¿Qué?-el contrario no había entendido para nada lo que quiso decir el de ojos dorados.
-No importa ¿para qué me buscabas Krory?-pregunto esta vez el moreno mientras guardaba el objeto perdido del menor y volvía a retomar su camino.
Apenas logro encontrar un lugar para esconderse no lo dudo dos veces, respiraba un poco agitado por la carrera, esperaba realmente haber logrado que Krory no lo viera. Ya con su respiración normalizada asomo un poco su cabeza desde su escondite y suspiro aliviado al ver que el de cabello bicolor no había ido en su dirección, ya un poco más calmado la imagen de aquel hombre regreso a su cabeza, sentía que lo conocía pero no recordaba exactamente de donde, ni la más remota idea cruzaba en esos momentos su cabeza, tampoco comprendió porqué su cuerpo reacciono de esa manera cuando lo escucho hablar, pero ese no era realmente el problema, la verdadera complicación era el hecho de que ese hombre lo había visto sin peluca…solo esperaba que nada malo sucediera debido a ello. No pudo permanecer por más tiempo en sus cavilaciones ya que el sonido de su celular lo interrumpió, esta vez con el tono de llamada, contesto con rapidez, se trataba de Allen.
-Ya el fotógrafo nos está mandando a llamar, vuelve rápido-dijo la voz del albino a través del celular.
-Está bien…pero ¿podrías hacerme un favor primero?-el oji ámbar realmente esperaba que el menor aceptara, sería más seguro de esa manera.
-Por supuesto ¿de qué se trata?-se escucho la pregunta un tanto extrañada al otro lado del teléfono.
-Revisa si no hay moros en la costa-al escuchar solo silencio del otro lado lo dijo nuevamente esta vez un poco más especifico-Verifica que no haya nadie fuera del set-esta vez se oyó una afirmación y luego de unos momentos escucho la respuesta.
-El pasillo está vacío, puedes venir con tranquilidad-
-Gracias, estaré allá en unos momentos-después de eso colgó la llamada, y antes de salir de su escondite se cercioró que su peluca estuviera bien puesta, no quería que se volviera a caer pero esta vez frente a más personas, aquel pensamiento trajo nuevamente la imagen del moreno a su mente, negó con suavidad para olvidarlo, las probabilidades de encontrarlo nuevamente no debían ser altas, por lo que decidió dirigirse con rapidez al lugar de la sesión y restarle importancia a lo acontecido.
Cuando terminaron con el trabajo Lavi suspiro aliviado, no quería saber nada de bandas o ser baterista sustituto por ese día, se acerco al albino con un semblante feliz pero al estar cerca de él noto que no se encontraba igual a como estaba antes de que se fuera del set, le había parecido un poco extraña su actitud durante lo que resto de la sesión, pero ahora que no estaba el trabajo de por medio pudo notarlo con más claridad, algo le sucedía a Allen y creía saber quién era el causante del comportamiento del menor, miro esta vez en dirección a donde se encontraba cierto azabache y al ver esa expresión de molestia ligada a la vez con un aura asesina pudo confirmar sus suposiciones, esos dos habían tenido una pelea, pero no de esas completamente tontas que muchas veces había presenciado, sino una más seria.
Mientras se debatía entre preguntarle a Allen o molestar a Kanda por lo que seguramente había hecho, alguien llamó su atención tocándole el hombro, volteo a mirarlo y se encontró con el oji gris que al parecer se había percatado también de la tensión que había entre esos dos, porque era evidente, ni siquiera se dirigían la mirada.
-¿Tienes alguna idea de que sucedió entre ellos?-pregunto el rubio mientras señalaba discretamente al albino y luego al pelinegro-claramente están molestos-
-Pensé que tú podrías saberlo, después de todo cuando me fui todo estaba bien y cuando regrese ya ambos estaban actuando extraño…más raro de lo normal-
-No lo sé, cuando te fuiste me dedique a afinar mi bajo y limpiarlo debidamente, sinceramente no le preste atención a esos dos-dijo encogiéndose de hombros.
-Ya veo-se quedo pensativo unos momentos antes de sonreír-iré a preguntarle a Kanda-el rubio intento detenerlo pero fue en vano, el castaño llego a un lado del de ojos oscuros, el cual le dedico una mirada asesina cuando paso su mano tras sus hombros-supongo que ahora tengo el camino libre para llevarme al moyashi-se separó del contrario con rapidez esquivando un golpe que seguramente hubiera terminado en su cara sino lo hacía.
-Ni se te ocurra poner una sola de tus mugrientas manos en él conejo bastardo-la aura amenazante que emitía el azabache seguramente podría apreciarse a kilómetros, pero esto no pareció inmutar al castaño.
-Solo era una pequeña broma Yuu-dijo con una pequeña risita.
-No me llames por mi nombre-volvió a lazar un golpe en dirección del contrario el cual logro detener parando el puño con su mano, intento con la otra obteniendo el mismo resultado, ya se estaba cansando y eso era claramente perceptible en el ambiente.
-Vamos, simplemente quiero saber que le hiciste a Allen-luego de pronunciar aquello sintió como el pelinegro lograba tumbarlo al desestabilizar sus piernas con una de la suyas, instantáneamente lo soltó para amortiguar su caída con las manos.
-No metas tu maldita nariz donde no te han llamado-siguió su camino fuera del lugar después de eso.
Cierto albino se acercó para ayudarle a levantarse del suelo-¿estás bien?-pregunto un poco preocupado extendiendo su mano hacia el mayor, la cual tomo el oji ámbar para poder levantarse.
-No te preocupes, logre parar sus golpe esto no fue nada-respondió con una de sus típicas sonrisas, Allen solo suspiro-por cierto, supongo que ya puedo irme ¿no? El trabajo acabo-el menor lo miro unos momentos antes de negar.
-No, ahora vamos a la agencia, iremos a ensayar algunas canciones, necesitas aprenderlas correctamente antes que tengamos que tocar en vivo o algo por el estilo-
-No puede ser… ¿cuánto durará eso?-preguntó, temiendo a la respuesta del albino.
Busco la hora en teléfono antes de responder-por hoy será suficiente con que aprendas tres canciones…al menos creo que podemos lograrlo con el tiempo que tenemos-luego de aquello guardo su teléfono-vamos, no hay tiempo que perder-
No sabía cuánto tiempo había medido Allen que él podría quedarse con ellos, pero de algo estaba seguro no se liberaría tan temprano de todo ese embrollo como creía, soltó un suspiro resignado mientras le seguía
“Lo suponía…tendré que sacrificar el tiempo de mi siesta” pensó un poco desanimado, aunque podía ser alguien enérgico pero eso no quitaba el hecho de que le encantara descansar plácidamente en su cama.
Bajo del auto vistiendo la misma ropa con la que había salido esa mañana de su hogar junto a una pequeña bolsa en sus manos-gracias por traerme Link-dijo tranquilamente antes de mirar a cierto albino que había estado extrañamente poco conversador en todo el camino, aunque sabía perfectamente la razón-hasta luego Allen, avisa cuando me necesiten…incluso si no son por cosas de la banda-antes irse le susurro unas pocas palabras al de ojos azul grisáceo-espero solucionen las cosas entre ustedes rápido-comento con un guiño y una pequeña sonrisa tratando de animarlo un poco.
El de cabellos blancos suspiro antes de darle una suave sonrisa-gracias Lavi-luego de aquello se separo del auto y este arranco.
Ya encontrándose solo, miro en dirección a su hogar, ya había oscurecido así que sin más que hacer allí entro en el lugar, como se imagino la casa estaba totalmente vacía y en penumbras, encendió algunas luces en el lugar antes de ir a su cuarto, necesitaba un baño. Ya en esta miro la bolsa donde tenía lo esencial de su disfraz como Deak, la peluca, lentillas y el parche, serían cosas fáciles de ocultar, busco una caja de zapatos vacía para luego esconderla en lo más alto de su closet detrás de algunas cosas que tenía en este; luego de aquello simplemente se dirigió al baño donde tomo una ducha rápida, al salir de esta se sentía más relajado y tranquilo, en definitiva necesitaba eso. Se vistió con una camiseta y unas bermudas antes de salir descalzo de su habitación e ir a la cocina sintiendo la frialdad del suelo, todo lo que había sucedido ese día le había abierto el apetito, se preparo unos sándwich y preparó un poco de jugo de naranja para después caminar con tranquilidad a la sala y sentarse cómodamente en uno de los sofás que se encontraban en esa habitación, analizando un poco todo lo acontecido.
“Aunque fue bastante extraño, no puedo negar también fue divertido” una nostálgica sonrisa se poso en sus labios.
-Hacia bastante tiempo que no tocaba la batería…aunque Allen sigue igual de estricto cuando se trata de música-sintió un leve escalofrió al recordar la el ensayo en el estudio de la agencia-es igual a los tiempos de escuela, si estuviera Lena estaríamos completos-
Flash Back
-¡Paren!-dijo un chico de cabello blanco dejando de tocar la guitarra en sus manos-aun no sale bien esa parte-suspiro suavemente antes de mirar al oji verde en la sala-Lavi te estás quedando atrás, y debes tocar un poco más fuerte para que el ritmo se escuche y siga corriendo-
-Comprendo Allen, lo intentare-respondió con una sonrisa mientras hacía girar las baquetas, tendría que practicar más si quería que el ritmo fluyera correctamente en sus manos y con la rapidez que necesitaba.
-Lenalee, revisa la afinación del bajo, me parece que hay algo fallando en la melodía-comento amablemente a lo que la chica asintió.
-Está bien-se sentó en una de las sillas que se encontraba en el salón comenzando inmediatamente con lo que le había indicado el contrario.
-Kanda-esta vez miro al pelinegro-tú por el contrario de Lavi, vas muy rápido, necesitas ajustar tu ritmo o la melodía sonara totalmente descoordinada-
El susodicho bufo mirando a otro lado-no tengo por qué seguir tus órdenes-dejo la guitarra a un lado mientras se cruzaba de brazos-moyashi idiota-
-¡¿Qué dijiste Bakanda?!-grito enojado mientras dejaba igualmente su guitarra a un lado, y pese a su altura, se acercó a él mayor tomándolo de la camisa-repítelo-dijo desafiante.
-Lo que escuchaste moyashi-respondió de igual manera tomándolo igualmente de la camisa-no sigo tus ordenes-
Luego de eso una intensa batalla de miradas comenzó entre ambos hasta que la de ojos violetas intervino separándolos.
-Vamos chicos, dejen de comportarse como niños, recuerden que esto es para un evento de la escuela-comento más tranquila luego de lograr separarlos posándose en el medio.
-Es cierto o ¿acaso quieres perder Yuu? Aunque en cuanto a talento Allen te supera-la provocación se escuchaba en cada palabra del pelirrojo y como esperaba el carácter impulsivo del azabache no tardo en responder.
-Conejo bastardo-
Eso fue todo lo que pronuncio antes de irse a los golpes contra el de ojos verdes, y el ensayo que estaban teniendo se viera interrumpido totalmente.
Fin Flash Back
En aquel tiempo eran realmente inmaduros aunque tampoco habían cambiado tanto, Allen aun no podía mantener siquiera una pequeña conversación con pelinegro sin irse a los golpes, Lenalee seguía siendo pese a todo la más madura entre ellos, y a él le divertía molestar a Kanda igual que en esos tiempos.
-Era divertido…lástima que todo acabara-bajo la mirada por unos momentos-bueno, ya no se puede volver atrás, así que aprovechare esta oportunidad para divertirme por el tiempo que dure-se dijo así mismo para animarse.
Termino de comer en poco tiempo, se dirigió a la cocina organizando y limpiando el pequeño desorden que había causado en esta con rapidez, al finalizar miró el reloj en él lugar, faltaba poco para que se hicieran las diez de la noche, ya le estaba entrando sueño pero prefería esperar a quedarse dormido y que su abuelo lo despertara probablemente de una patada, con un balde de agua fría o quien sabe que otro método. Para mantenerse despierto busco un libro en la biblioteca que tenían en casa antes de dirigirse a la sala nuevamente y acomodarse en el sofá que había ocupado anteriormente, subiendo los pies esta vez evitando el contacto con el piso frio.
El libro cumplió su cometido, mantenerlo enfocado en la lectura evitando que cayera dormido. Su abuelo llegó pasadas las once de la noche, el sonido de la puerta fue lo que desprendió la mirada del pelirrojo del libro que sostenía en sus manos para dirigirla esta vez a la entrada de la habitación, dejo el texto que antes tenía su atención sobre un mesa que estaba en el lugar antes de salir de ahí, encontró a su abuelo, que no tenía mucho tiempo de haber entrado en la residencia, aflojando la corbata de su traje, este le miro al notar su presencia.
-Así que ya llegaste panda ¿qué es lo que quieres hablar conmigo?-pregunto recostándose contra la pared, en respuesta solo recibió el golpe de una carpeta que el mayor le había estampado en la cara-eso duele-recogió el objeto que había terminado en el piso mientras se quejaba.
-No me llames panda-dijo antes de recobrar la compostura y dirigirse a las escalera-espera en la sala mientras me cambio-luego de aquello siguió su camino con calma, aunque corto su recorrido por unos momentos-si quieres hacerte una idea de lo que quiero discutir contigo deberías leer los papeles de esa carpeta-no volvió a detenerse, esta vez siguió su camino sin decir más.
Cuando no hubo más nadie en el lugar miro intrigado la carpeta unos momentos sin comprender.
¿Qué rayos quería el viejo?
¿De qué trataba todo eso?
Sin perder tiempo volvió a la sala mientras leía con atención la información contenida en cada hoja de la carpeta que tenía en manos, al poco tiempo regreso el de cabellos canos con una ropa más ligera y se sentó frente al chico, el cual no apartaba todavía la mirada de los papeles que tenía en las manos.
-¿Qué significa esto?-pregunto al momento de dejar la carpeta sobre la mesa que se encontraba entre ellos, a un lado del libro.
-Significa justo lo que has leído-contesto el contrario con seriedad-estamos teniendo problemas por falta de personal en algunos departamentos de la editorial…pero más importante, parece que alguien dentro de la empresa ha estado robando dinero, hay cuentas que no calzan en los libros contables y revisando algunas cosas pude encontrar que hay dinero que se ha estado perdiendo poco a poco-suspiro recostándose al espaldar del sillón.
-En resumen alguien está cometiendo desfalco en la empresa…pero ¿Quién?-
-creo tener una idea de quién podría ser, pero aun me falta confirmarlo y conseguir pruebas-su tono volvió a la seriedad de antes luego de eso-por eso voy hacerte trabajar en la editorial realizando trabajos de poca importancia pero que te permitan moverte libremente hasta cierto punto, sé que muchos conocen el hecho de que eres mi nieto y probablemente los que están haciendo el desfalco también lo sepan por lo que seguramente serán cautelosos contigo, aun así debes tratar de conseguir pruebas o descubrir quién o quiénes son-
El menor se le quedo mirando unos momentos antes de cruzarse de brazos-no soy un policía, tampoco un detective, por lo que ellos podrían despistarme, más aun sabiendo que soy tu nieto…no será que en realidad ¿solo quieres hacerme trabajar de gratis por la falta de personal? Y si supongo bien, también quieres ponerme de carnada ¿no?-comento con una sonrisa-si me colocas en medio llamare más la atención y se pondrán alerta respecto a mí, por lo que probablemente otros hombres que hayas contratado pasaran desapercibidos a las personas que están cometiendo este delito ¿no es así?-
El hombre sonrió-es cierto, mataría dos pájaros de un tiro…pero no quita el hecho de que tendría a alguien de mi entera confianza dentro, además de que eres astuto en estos asuntos, así que también sería una ventaja para mí-luego de aquello se levantó-habiendo dicho esto solo me queda aclararte algunas cosas, primero, no puedes negarte; segundo, serás tratado como a otro trabajador, es cierto que tendrás un horario más flexible, pero eso se debe al hecho de ser estudiante todavía, por lo tanto no necesitaras estar metido en la empresa todos los días, aun así debes ir lo más pronto posible si se te llama…me retiro a mi habitación, que descanses nieto idiota-dijo a modo de despedida el mayor.
-Hasta mañana viejo-uno de los cojines termino sobre la cara del pelirrojo, cuando se lo quito el mayor ya se había retirado del lugar, suspiro antes de dejarse caer acostado sobre el sofá-esto no puede estar sucediendo-llevo las manos a su cara cubriéndola.
“Definitivamente es como dicen…los problemas siempre vienen acompañados”