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Saliendo de la oscuridad. por OsaEnanaLove

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Notas del capitulo:

Bueno gente hace realmente una eternidad que no subo nada, asi que pense en terminar de actualizar lo que tengo pendiente (tal vez) por ahora espero que les guste y disfruten este cap rapido

(/-w-)/

-Tienes un momento?- la pregunta formulada hizo que el cerebro del joven rubio se desconectara por una decima de segundo antes de poder responder adecuadamente, su rostro aun ardía por el sonrojo pero mantuvo hasta donde pudo su compostura.

-Para usted el tiempo que sea necesario Sensei- una pequeña risa escapo de los labios del héroe haciendo que Genos por primera vez en sus 17 años de vida se olvidara de todo y hasta llego a sentir que no había nada más en su cabeza o a su alrededor que la voz y la presencia del calvo.

//Ya que estaban en el instituto fueron directo a la cafetería y Saitama le ofreció café al rubio quien lo acepto con una tímida sonrisa.//

-De que quería hablar Sensei?- Genos sostenía la bebida caliente mientras observaba con mucha atención al despreocupado hombre frente a él.

-Bueno, imagino que sabes que soy locutor en un modesto programa de radio... Y a los productores les pareció bueno que tu abuelo fuera entrevistado, pero como es una persona tan ocupada, no hubo manera para comunicarse- toma un sorbo de café –Por eso me acerque hoy y así poder hablar contigo, pero si no te parece…-

-Por supuesto que mi abuelo ira!- Genos respondió lleno de energía, el sensei quería entrevistar a su abuelo, a SU ABUELO, era increíble, haría todo lo que estuviera en sus manos para lograr que su abuelo fuera y de paso lo llevara, eso significaría que podría volver a ver al sensei a parte de ese día, esta era una oportunidad única.

-De verdad? Gracias- Saitama le dedico una pequeña sonrisa al rubio haciendo que sus jóvenes hormonas se volvieran alborotar.

-S-sensei, estaría bien si yo acompaño a mi abuelo? Puede que se sienta incomodo ya que no le agradan las entrevistas…- Genos bajo la mirada sonrojado mientras hacia la pregunta, era demasiado descaro de su parte pedir tanto.

-Eh? Claro, no es problema- esa sencilla y despreocupada respuesta hizo que el corazón de Genos se hinchara de felicidad, podría ver al sensei trabajar, pero que carajos estaba pensando?! Ya lo tenía en frente y le estaba hablando como si fueran iguales, acaso ya no era suficientemente bueno? Se pregunto a si mismo mientras jugaba un poco con el vaso ya sin ningún contenido entre sus manos.

-Programemos la entrevista para la comodidad de tu abuelo… Podrías darme tu número de teléfono? Así podemos estar en contacto- Genos con toda la calma que pudo reunir le dio su número personal a Saitama haciéndolo ver como si no fuera nada importante, terminado el intercambio de información el mayor se despidió con un “Hasta luego” dejando al pobre rubio mirando la pantalla de su celular con un nuevo contacto.

De repente todo volvió a seguir su curso, el mundo volvió a sonar y a moverse con rapidez, el adolescente embobado se dio cuenta de que había perdido la hora de la clase que más le gustaba… Y no le importaba.

Con una expresión un poco confusa al principio Genos tomo sus cosas y se dirigió al siguiente periodo, en silencio pero con una notoria sonrisa asistió a todo el horario de clases de ese día y al terminar sin decir palabra se retiro dejando a más de uno sorprendido por su comportamiento, entre esos a un joven pelinaranja que no reconocía al rubio sonriente en frente de él.

-Genos, estas bien?- Charanko solía ser muy impulsivo y escandaloso, pero al ver la expresión tan feliz del rubio (cosa que era como un cometa, solo podías verlo una vez en la vida) no sabía si hablar o no para no arruinar el momento.

-Por supuesto- Sonríe aun mas -Porque? Pasa algo Charanko?- el mencionado negó con la cabeza y dejo seguir a su amigo sin más, no podía ni imaginarse que podía ser tan bueno que Genos “el chico más serio del instituto” se paseara por los salones como un niño soñador.

//En la entrada lo esperaba el chofer que al ver su sonrisa solo pudo atinar a sonreírle de regreso mientras colocaba la emisora que el joven rubio escuchaba pues el programa del sensei estaba por empezar.//

Luego de unos minutos de música para la apertura del programa se escucho la voz del sensei hablando del clima y de que si tuviera cabello le encantaría que la brisa de ese día lo sacudiera y refrescara mientras paseaba por el parque  a modo de broma con un toque de verdad.

Genos cerró sus ojos y repitió en su mente miles de veces la imagen del sensei mientras escuchaba su vos en la radio, una y otra vez sintiendo sus mejillas arder de nuevo, era increíble el efecto que podía tener esa voz ahora que le daba un rostro y no solo eso, también había visto parte de su personalidad, era como un sueño, más que un sueño una realidad y eso le asustaba, tenía miedo de dejar que en el floreciera una esperanza, no se lo iba a negar después de lo sucedido esa mañana, adoraba al sensei y en definitiva, eso significaba peligro.

Era contradictorio, lo sabía, el tener miedo de que desarrollara un sentimiento más fuerte del que ya tenía y al mismo tiempo desesperarse por tener la oportunidad de acercarse una vez más a esa persona. Podía incluso pensar que se estaba volviendo loco; querer avanzar y al mismo tiempo quedarse en el mismo sitio, era frustrante el terminar en un callejón sin salida donde el mismo se quiso meter.

Al llegar a su casa Genos se fue a su habitación, termino de escuchar el programa del sensei y se quedo mirando el techo intentando dar orden al revoltijo de pensamientos que ahora le hacían doler la cabeza, durante varios minutos su mente armo y desarmo muchas situaciones pero ninguna fue favorable, muchas incluso eran imposibles y ninguna le permitía estar al lado de sensei, hubiera seguido atormentándose de no ser porque su querido abuelo entro a la habitación.

-Hijo ya termino el programa?- el menor asintió ligeramente sin decir más –Estas bien? Paso algo?- el anciano hacia sus preguntas con calma pero se notaba la preocupación en su voz.

-Hoy vi a Saitama-sensei…- comento sonriendo de manera poco descifrable, sus labios estaban poco curvados pero sus ojos brillaban y eso no lo pudo pasar por alto su abuelo.

-Y bien?- una pequeña mueca de resignación y alegría cruzo el rostro del hombre con peinado de hongo pero el rubio no lo noto puesto que no estaba usando sus lentes.

-Fue entretenido…- Genos se incorporo sentándose en la cama sin mirar a su abuelo –El quiere entrevistarte… Iras a su programa abuelo?- el joven chico estaba preparado para dar muchas razones y convencer a su abuelo de que fuera en el momento en que comenzara a negarse, pero la respuesta lo sorprendió.

-Por supuesto, yo también quiero conocer a ese Sensei que puede hacer que mí adorado nieto sonría de la forma en la que lo haces ahora- entonces fue cuando Genos noto que hasta ese momento y aun después de atormentarse con muchos pensamientos negativos seguía sonriendo a causa de Saitama sensei.

//Esa noche Genos ya estaba preparado para dormir así que envió un mensaje a Saitama avisándole que en el transcurso de esa semana podían realizar la entrevista y justo después de recibir el aviso de entrega una llama entro al teléfono del Rubio…//

G: A-Alo? –Apenas podía reaccionar a la repentina llamada-

S: Genos estás seguro de que podemos hacer eso? –la voz del sensei sonaba algo ronca, más profunda que en la mañana, tal vez por haber trabajado hasta hace unas horas atrás pero ese tono de voz causo un escalofrió en la columna del rubio-

G: S-Si sensei, está bien si usted es quien lo hace –repentinamente el rostro del menor se coloro de tal manera que sentía que hasta sus orejas ardían, su voz sonaba… Erotica-

S: Eres un buen chico Genos hay algo que pueda hacer por ti a cambio?  -Saitama sonaba de algún modo alegre y a la vez tranquilo aun con esa ronca y profunda voz-

G: Lo que sea sensei? –el adolescente se estremeció al sentir nuevamente ese extraño escalofrió y miro hacia abajo, entre sus piernas comenzaba a crecer su hombría a causa de la vergüenza y excitación-

S: lo que sea… -contesto sin mucho miramiento el calvo escuchando a lo lejos en el teléfono a Genos pasar saliva grueso preparándose para la petición-

G: Siga hablando conmigo sensei… -Genos no dudo mas y comenzó a consentir su miembro urgido de atención en silencio escuchando la voz del sensei-

S: Eso es todo?

G: Eso es todo… Cuénteme de usted… Saitama sensei…

S: Esta bien… Genos

G: … -el rubio sintió por un segundo como si la voz del sensei se hubiera vuelto más erótica, más profunda y juguetona al decir su nombre; eso le alentó a seguir- Jamás pensé que mi nombre podía sonar tan bien en la boca de alguien…

S: tienes un lindo nombre Genos, nunca te lo habían dicho? –Al decir esto el despreocupado hombre calvo logro escuchar un pequeño suspiro ahogado por parte del menor y dejando escapar una sonrisa comento- eres un chico apuesto y tienes una mirada profunda.

G: Cr-Crei que hablaríamos de usted… Sensei... –el rubio temblaba ligeramente con cada movimiento de sus manos, masturbarse con la voz de la persona que admiraba y con la cual estaba teniendo una conversación en ese momento, era una locura, una muy excitante locura.

S: Te molesta que hable de ti… Genos? –la voz del sensei cada vez se acentuaba mas al decir el nombre del rubio, esto era algo que no había pasado desapercibido por el menor, la voz se había vuelto más lenta, pausada y mantenía su profundidad, era casi como si se acompasara al ritmo de la mano de adolescente- Genos…?

G: Se-Sensei… Sabe los que estoy haciendo verdad? –el rostro del menor ardía en vergüenza y excitación mientras sentía que estaba llegando a su clímax-

S: Lo se… –ronroneo con esa ronca voz el locutor con un tono entre divertido y excitado- tranquilo Genos… No se lo diré a nadie… -Saitama pudo escuchar un gemido ahogado sonriendo con satisfacción-

G: Saitama sensei… -Esas palabras, solo esas palabras fueron suficientes para hacer que el rubio llegara al orgasmo jadeando y mordiendo sus labios sin importarle nada mas-

S: Parece que lo disfrutaste…

G: Sen-sensei yo… -realmente no sabía ya que hacer-

S: considéralo un regalo, Genos –dijo con su tono despreocupado el hombre calvo-

G: Me gusta su voz sensei…

S: Lo pude notar –risita- que tengas buenas noches –voz ronca- espero poder volver a llamarte, Genos... –y con esto termino su llamada dejando al rubio mas avergonzado que al comienzo-

Genos miraba sus manos con la prueba de su delito, sentía su rostro arder y un leve cosquilleo en la parte baja de su ombligo, era la primera vez que se tocaba con tanta intensidad y había sido una experiencia fantástica, aunque era totalmente eclipsada por la realidad de que no solo se había masturbado mientras hablaba con el sensei, el lo supo y lo dejo seguir; definitivamente estaba loco pero a pesar de que estaba mal, de que había hecho algo que no estaba bien visto, le había gustado.

Luego de darse otro baño y despejar su mente Genos se recostó en su cama rodeado por la total oscuridad de la noche y sonriendo susurro al vacio -Yo también esperare su llamada, Saitama sensei-

El pasado y vergonzoso momento de la noche anterior, calo en el rubio haciéndole casi imposible dormir, termino tocándose varias veces más en la madrugada sin dejar de pensar en la voz de aquel hombre calvo, no había nada mas en lo que pensar mientras lo hacía y en medio de esto repitió muchas veces el nombre de Saitama, inclusive con los ojos cerrados y en completa oscuridad no tenía miedo, la oscuridad ya no era tan terrible y atemorizante. ¿O sí?

La falta de sueño hizo de Genos un somnoliento y fatigado adolescente esa mañana, aunque no se arrepentía de nada, si fue bastante agotador.

-Genos que mala cara traes…- comento Charanko encontrándose con el joven rubio.

-Lo crees?- dijo Genos algo divertido y con un suspiro siguió caminando junto al pelinaranja.

-Has estado raro los últimos días… Ya ni hablas de ese programa de radio donde está el tipo calvo que…- Charanko quería seguir hablando pero al notar que a su lado pasaba el sensei de salud se quedo callado observándolo.

-Le harás un hoyo en la espalda a Zombieman con esa mirada Charanko- Genos al notar el embobamiento de su compañero solo pudo atinar a jugarle una broma con ese comentario haciendo al pelinaranja sonrojar de golpe, aunque estaba seguro que si fuera el sensei Saitama el haría lo mismo.

-N-no cambies de tema…- Charanko estaba avergonzado pero también preocupado por su amigo, sabiendo su condición era mejor preguntar antes de llevarse una sorpresa.

Genos estaba por contestar pero un repentino mensaje le hizo callar, al leer el remitente su corazón se acelero.

__________

Re: Saitama sensei.

Buenos días Genos. Espero pasaras buenas noches tambien. Podemos hacer la entrevista el Viernes, ya hable en la emisora y están de acuerdo, qué opinas?

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Re: Genos    

Estaría bien sensei, mi abuelo no tiene problemas con eso, buenos días.

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Re: Saitama sensei

De acuerdo, nos vemos el viernes, Genos.

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Con ese pequeño intercambio de mensajes Genos quería saltar de la alegría y al mismo tiempo lo avergonzaba la idea de ver al sensei de nuevo después de lo sucedido. Solo faltaban 2 días para el viernes.

Charanko pensaba preguntar al ver la extraña expresión entre vergüenza y felicidad (si era posible) que tenia Genos en ese momento pero inmediatamente su expresión cambio a una de intenso dolor.

-Cha-Charanko… Enfermería…- fue todo lo que pudo decir el rubio antes de caer al piso siendo rápidamente sostenido por su amigo.

-A-Aguanta Genos!- y llevando en brazos a su amigo Charanko corrió por los pasillos con un solo rumbo: la enfermería.

Con la mirada preocupada de Charanko en su cabeza el joven rubio se desvaneció en un sueño profundo y todo lo demás fue oscuridad.                                        

Notas finales:

Espero les gustara y espero que aun mis fics se lean, perdon por desaparecer, sin mas que decir.

Besos, Nana :*


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