Ah, bueno… ¿Qué puedo pensar? Las cosas no han ido bien. O no como yo esperaba. Salir con Glenn… no es diferente y no tengo la menor idea de que esperar.
O sea, todos los días le espero “discretamente” en la entrada para saludarle. Hablamos un poco en la sala de profesores y algunos días, solo algunos, vamos juntos al restaurant por comida para llevar. No nos hemos quedado a comer, no me ha invitado a otro lado tampoco. No he ido a su casa. Por las noches solo le mando mensajes de buenas noches, o preguntando como fue la tarde. A veces me responde.
— Jacey ¿Qué pasa? Tienes una cara…
— Nada— aunque mi nada suena como a todo. Había esperado muchas cosas de lo que pudiera pasar entre Glenn y yo, pero no esto. Esto es casi como nada. La única diferencia es que ahora tengo su teléfono, nada más.
— ¿seguro?
— Si— aun es muy pronto para pensar cualquier cosa. Y he aprendido que debo preguntar primero antes de ponerme a quebrarme la cabeza yo solo con teorías locas. Bien puede ser que Glenn solo sea tímido, también dijo que era la primera vez que se le confesaba un chico, eso puede ser también. Arg, ¿lo ven? Ya estoy de nuevo pensando cosas innecesarias— ¿sabes donde esta Sean?— acabamos de salir de la escuela, hoy se que Glenn sale tarde, así que dejare que Allan me lleve a casa hoy.
— tenía una cita.
— ¿¡Una cita?! ¿En serio?— Allan suelta una risa.
— hice la misma cara que tu.
— Wow, no me lo esperaba— no es justo, incluso Sean tiene una cita. Yo quiero tener una cita. Creo que puedo hacer eso, pedirle a Glenn que salga conmigo, si ya le grite que le amo, entonces esto no es nada— ¿Te había dicho algo?
— no hasta esta mañana.
— pues si que se lo tenía bien guardado— o tal vez estamos más distraídos en nuestros asuntos. Uh, creo que solo he pensado en mi mismo últimamente. No pueden culparme. Umm ¿Qué debiera planear entonces? No quiero solo una salida a comer, algo diferente…— ¿tú no saldrás con lo mismo?
— Naa, por el momento no estoy interesado en nadie. Aunque quien sabe, me da envidia que los dos me dejen como el único soltero.
— Técnicamente seguimos siendo solteros Allan, no estamos casados— no puedo evitar sonreír. Pensar en casarse es algo que nunca he hecho, y no porque salga con otros chicos.
—Jacey, no seas así— comienza a quejarse— solo para que lo sepas me conseguiré una novia. Una novia más linda que la de Sean.
— ¿La conoces?— ¿Por qué yo no la conozco? Se supone que somos amigos ¿no?
— La chica con la que estaba en el festival— recuerdo vagamente que estaba con alguien, pero no recuerdo más. Me encojo de hombros.
— bueno, ¿Qué tal si esta noche lo interrogamos?
— es una buena idea, pero dejémoslo para mañana. Veré si Glenn quiere cenar conmigo.
— ¿lo ves? Me están dejando de lado. No es justo— sonrió. No sé si Glenn va aceptar pero vale la pena intentarlo. Quisiera hablar con él en un lugar donde no tengamos interrupciones.
¿Lo llamo o no lo llamo? Quiero ir a su casa, pero si me dice que no será más vergonzoso. Arg ¿¡Porque tiene que ser tan complicado!? Vamos, no pasa nada si me dice que no. Así que solo lo llamo y ya.
—…— el tono de llamada. No, no… debo colgar mejor— ¿sí?
— ah… emm…— Aaahh no esperaba que contestara tan pronto. ¿Qué iba a decirle?— yo…me ¿me preguntaba si querías ir a cenar?— que diablos ¿acaso tengo quince o qué? No tengo que avergonzarme por invitar a alguien a salir. Se supone que soy un adulto ¿no?
— ¿hoy?
— emm… si. Si no puedes lo entenderé.
—… ¿eso quieres?
— me gustaría mucho salir contigo— murmuro. ¿Me escucho? No escucho nada por unos momentos. Que mal, en serio quería ir con él, me cansa esto de no poder hablar con él en la escuela. Ahora entiendo porque no es recomendable tener una relación con alguien del trabajo.
— está bien.
— ¿En serio?— sueno demasiado ridículo, pero ¿a quién le importa? Glenn dijo que si y eso es todo lo que importa.
— si, no tengo nada que hacer por la tarde.
— ¡qué bien! ¿A qué hora te parece bien?— ya que fui yo quien invito al menos tendré la cortesía de dejarle decidir la hora.
— ¿a las siete?
— a las siete está perfecto— no hay nada de ruido, ¿debo decir algo más?— Bu-bueno, entonces… ¿paso a tu casa?
— si quieres. Podemos vernos en algún lugar también.
— iré a tu casa. Nos vemos a las siete— le digo, sigo sonriendo y finalmente cuelgo. No tengo nada más que decir por el momento. Decirle “te quiero” no sonara tan bien por el teléfono si no hemos hablado mucho en persona.
Pero… ¡Tengo una cita con Glenn! Por fin… una cita de verdad, no una no cita, no una salida de amigos, una cita de verdad. Tengo que organizarme, ¿Qué voy a ponerme? Claro, y también pensar en qué lugar…
No. eso es lo mismo que hacía antes, cuando mis relaciones terminaban mal. ¿Qué puedo hacer entonces? no planear. Ser espontaneo diría Allan.
Así que pasare la tarde relajándome y solo me pondré lo primero que vea en el armario. Si, suena un plan excelente. A las seis y media estoy en la parada del camión. Vaya, creo que al final de cuenta si necesito con urgencia un auto. Ya no estoy nervioso… bien, quizá un poco pero es normal estar un poco ansioso por una cita ¿no? no es que piense en hacer algo más que salir a cenar, no más... por ahora.
— Jacey— Glenn me abre la puerta. También ya está cambiado.
— Lamento llegar tarde— murmuro— había un accidente en la avenida y el autobús se retrasó— pasan quince minutos de las seis.
— Entiendo— Glenn sale, cerrando la puerta— ¿A dónde vamos?
— umm, pensé que sería buena idea dar una vuelta por ahí y ver que hay, ya sabes, ser impredecibles.
— no entiendo.
— ¿Qué no entiendes?
— Porque haríamos eso, no entiendo el objetivo— sonrió, jalándole del brazo para que comience a caminar.
— no hay nada que entender, no hay un objetivo. Solo dar un paseo con la persona que te gusta, disfrutar su compañía y esas cosas.
— ¿es eso?
—ah, lo siento. No quería incomodarte.
— está bien. Creo que lo entiendo— pero Glenn sí parece un poco incómodo cuando nos ponemos a buscar un lugar para cenar. Hemos estado hablando sobre el trabajo, o más bien yo he estado hablando más y dejado que Glenn responda. Ah, parece que no se la está pasando también como yo ¿estoy hablando mucho?
— ¿Qué pasa?— pregunto, cuando entramos al tercer local para ver si hay algo que queramos.
— no me gustan los lugares nuevos. No conozco si lo que tiene esta bueno, si tienen un buen servicio o no— ¿eso es lo que le preocupa? Me llevo la mano a la boca para reír.
— pero si esto es divertido. No saber, la curiosidad por ver que es lo que hay. Es parte del encanto, no lo pienses.
— ¿tú lo haces seguido?
— claro, es la mejor manera de encontrar nuevos lugares. Hace tiempo fui con Allan y Sean a un restaurant de comida tailandesa, y luego fui contigo a ese lugar de comida japonesa.
— pero conocía el lugar antes.
— yo no. no te preocupes. Si no te gusta, solo no lo comemos y ya— después de todo yo también tengo que tener cuidado con las cosas que como, por lo de la alergia. Parece que Glenn todavía no está convencido, pero al final logro encontrar un pequeño restaurant.
— ¿estás seguro de querer comer aquí?
— si, ¿tú no?
— si lo estas tu, no hay problema— así que entramos. No hay nadie más en el lugar, ¿eso es una mala señal? Aun es temprano, creo. No había ido antes por estas calles. Nos atienden rápido, y el ambiente es agradable.
— pareces incomodo— comento mientras esperamos.
— No sé si me gusta esto o no— ¿a qué se refiere? No a que estamos saliendo ¿verdad?
— ¿a-a que te refieres?
— a elegir un lugar de esta manera— ah, suspiro reclinándome en la silla.
— no te gusta hacer cosas nuevas, interesante. A mí me encanta hacer cosas nuevas ¿sabes? Estoy yendo a clases de manejo los sábados— me hace feliz estar aquí, conocerle más.
— Entonces compraras un auto.
— si ¿quisieras acompañarme? A elegirlo— lo digo sin pensar. Glenn me observa, puedo ver una leve confusión en el rostro.
— si quieres.
— Me gustaría— le sonrió— ¿sabes? Cuando era más pequeño siempre me imagine conduciendo. No sé por qué no lo he hecho antes.
— ya veo.
—… Glenn, cuéntame algo de ti— el me observa. ¿No dije nada mal? No creo que sea tan mal para que me vea de esa manera, tampoco le pedí que me dijera los misterios del mundo— lamento si es algo indiscreto, pero me gustaría conocerte más.
— ¿hablar sobre eso ayudara?
— Eso creo…— y yo he hablado mucho entre nosotros. Glenn me sigue observando raro, no sé cómo describir su mirada.
— pues… no hay mucho que decir. Muchas personas viven con familiares, como yo. Mis abuelos son como otros, todo fue normal. No tengo muchas amistades, Arashi ha sido mi amigo desde entonces.
— oh, entonces es un viejo amigo— recuerdo un poco a esa persona, y me pareció un poco hostil.
— si.
— ¿Qué paso con tus padres?— oh. Aprieto los labios, no debí hacer esa pregunta. La comida llega en ese momento, guisado de carne y verduras. Le doy las gracias a la mesera.
— mi madre se volvió a casar. Mis abuelos no lo aprobaron, no la vi desde entonces, de mi padre no sé nada.
— lo siento, no debí preguntar eso.
— ¿Por qué? eso fue lo que pasó— dice, ni siquiera me ve, está acomodando la servilleta para comenzar a comer.
— mi familia fue normal… bueno, no tanto. La mayoría de las personas no obtiene todo lo que quiere, a veces me avergüenzo un poco de eso.
— ¿de tener una familia adinerada?
— si… no me gusta que los demás sepan que puedo tener todo lo que quiero con pedirlo. Por eso decidí estar por mi cuenta, desde que vine aquí no he tenido ayuda de ellos y eso me hace sentir bien. Hasta yo sé que a veces actuó mucho como un niño mimado.
— eso no está mal.
— ¿Actuar como niño mimado?— sonrió, aguantando las ganas de reír. La comida está caliente, y no tan mal como esperaba.
— tu familia. Que tu familia te apoye está bien, también hacer las cosas por tu cuenta.
— Gracias— otra vez estamos en silencio, pero ahora no siento la necesidad de llenarlo con mi plática, estoy cómodo con el silencio de ahora mismo. Comenzamos a comer, solo de vez en cuando hacemos uno que otro comentario sobre la comida.
— No estuvo tan mal— comenta cuando salimos. Suelto una risa, porque a penas y hemos salido del lugar, parece que se lo ha estado guardando toda la comida.
— si, no tan mal ¿quieres hacer algo más? ¿Dar una vuelta o ir a otro lugar?
— no se ¿y tú?
— creo que deberíamos volver ya, mañana hay clases— que mal, quisiera quedarme más tiempo pero no estamos en una zona adecuada para citas, ni hay muchas cosas que hacer.
— Tienes razón— caminamos de regreso a la estación. Esto está bien, me agrada pero no parece una cita. Una cita real… alcanzo a ver su mano de reojo. ¿Podría tomarla? Caminar tomados de la mano… solo tengo que mover un poco la mano y…— ah, lo siento— murmuro, cuando choco mi mano con la suya. Rayos, no la pude tomar.
— Descuida— no puedo hacerlo de nuevo. Siento la cara caliente, pero Glenn no voltea a verme. Ah, es un alivio. Llegamos a la parada. Si tuviera un auto, podría llevarle hasta su casa. En realidad, yo soy quien tiene que usar el autobús, la casa de Glenn queda cerca.
— bueno… gracias por aceptar la cena— le sonrió. El autobús está por detenerse. Esta es mi última oportunidad de hacer de la cita algo diferente. Vamos, solo algo más… ¡Ya se! De adelanto, y me estiro para poder darle un beso en la mejilla, cerca de la boca— a… hasta mañana— balbuceo. Si no corro al autobús es porque las personas me verán raro. Como si besar a un chico en la calle no fuera tan raro.
Aaahh no puedo creer que lo hice, en serio lo hice. En el autobús, a pesar de la vergüenza y de sentir la cara roja, no puedo dejar de sonreír.
Otro fin de semana, el último fin de semana antes de las vacaciones. Ya se puede notar el ambiente mucho más relajado en la escuela.
— Allan, ya te dije que no tengo que decirte nada mas— Sean suena cansado, pero no voy a defenderle. Allan intenta sacarle toda la información que puede sobre la chica con la que sale, a pesar de que el mismo Sean nos explicó que tiene poco de estar saliendo con ella.
— Ah, Allan ¿Por qué no mejor sigues buscando tú a alguien?— comento. No puedo dejar a Sean así después de todo.
— eso hago.
— ¿ah sí?— comentamos los dos, Sean y yo. Ninguno le cree.
— he estado trabajando en eso. ¿Tienen libre el sábado?— ¿ahora que está planeando? Allan y sus ideas locas.
— yo tengo escuela de manejo, salgo a las cuatro.
— bueno, entonces no tendrán problemas en acompáñame aquí ¿cierto?— me dice, pasando un folleto. Yo lo tomo primero. Es de una feria cercana, un festival en homenaje a algo que no termino de leer— salgamos por ahí.
— oye, es una buena idea. Puedo invitarla— Sean se inclina a leer el folleto.
— hey, esa no es…
— ¿entonces puedo invitar a Glenn?
— Arg, entonces será una salida grupal. Entre más personas vayan mejor. Igual y encuentro a alguien— Sean responde algo, pero yo ya he salido casi corriendo en dirección a la secundaria. Glenn no está en la sala de profesores así que se que esta haya.
— Glenn— le llamo. Esta con un par de alumnos, al parecer explicando algo.
— ¿Qué pasa?
— el sábado iremos a una feria, Sean, Allan y la novia de Sean. Allan invitara a otras personas, pensé que podrías ir también, incluso invitar a tu amigo— hablo bajo y rápido.
— ¿una feria?
— sí. Suena bien ¿no?
— supongo.
— ¿iras?
— sí, porque no— le sonrió, casi le salto encima para abrazarle. Lástima que estamos en la escuela— tengo que volver— aun sonriendo, le digo que si con la cabeza. Otra cita, otra salida con Glenn.
El sábado, soy el primero en llegar a la entrada de la feria donde nos quedamos de ver. ¿No ha llegado nadie más? Qué raro, Sean es muy puntual. Esto no me gusta, no me gusta. Saco mi teléfono, no tengo mensajes ni llamadas.
— Jacey— me giro, aliviado. Glenn está aquí… y también su amigo— ¿no ha llegado nadie más?
— no. acabo de llegar. Apenas es la hora, quizá se les hizo tarde— no nos queda más que esperar. Pero esperamos cinco, diez y luego quince minutos— llamare a Sean— murmuro, alejándome un poco. Ese chico, el amigo de Glenn parece molesto.
— ah, Jacey…
— nada de Jacey ¿Dónde estás?
— Cindy tuvo un accidente, no es grave pero estoy con ella en urgencias, no podré ir.
— oh, bueno…— me cuelga. No puede ser…. Casi con desesperación marco el número de Allan— dime que ya vienes y que solo se te hizo tarde.
— me encantaría decir eso, créeme. Mis padres vinieron de visita, no puedo ir— su tono es más serio que de costumbre. Esto está mal, muy mal.
— al menos dime a quien invitaste.
— lo siento, no pude invitar a nadie más, algunos tenían otras cosas que hacer.
— ¿¡Entonces voy a quedarme aquí con…!?
— lo siento, tengo que dejarte— y termina la llamada. No quiero girarme a decir que esto es un completo desastre.
— ¿todo está bien, Jacey?
— Pues… parece que no va a venir nadie mas ¿damos una vuelta?— el otro chico resopla y pone los ojos en blanco. ¿Y que mas puedo hacer? Decirle que mejor no ya no es una opción, ya estamos aquí de cualquier modo. Glenn se encoje de hombros pero es el otro chico, Arashi, quien da la vuelta y entra.
Esto es realmente incomodo.
El lugar es… bueno, es una feria, hay mucho ruido, gente vendiendo todo tipo de cosas, comida, niños corriendo, gente caminando en todas direcciones. Todo es muy pintoresco porque es más que nada una especie de feria cultural. Pero las cosas no están bien, me hubiera gustado que solo estuviéramos Glenn y yo.
Ha pasado como media hora… y quiero irme ya. Volteo a ver por quien-sabe-que-vez a Glenn. Casi inmediatamente Arashi le lleva hasta un puesto. Eso ha pasado todo el rato, Arashi ve algo y se lleva a Glenn. No en un plan romántico, pero… ¡Yo debería estar haciendo eso!
— Glenn…— le llamo, el voltea a verme, y antes de poder decir algo mas, Arashi exclama algo en japonés. Porque ahora sé que no es chino. Glenn voltea, y de nuevo me quedo atrás mientras les veo apresurarse hacia un puesto de camisetas. Eso se repite muchas veces, tantas que ya no me quedaron ganas de hablar. Arashi y Glenn hablan en japonés, me siento tan excluido.
¿Cuándo se convirtió esto en una salida entre Glenn y Arashi?
Estoy… molesto, triste, y muy celoso. Sé que ellos son amigos, pero la forma en que Arashi llama la atención de Glenn simplemente no termina de gustarme. ¿Qué no acaso yo soy quien está saliendo con él? No debo tener buena cara ahora mismo, quiero irme ya, no tiene ningún sentido quedarme para ser ignorado. No puedo irme hasta que no recorremos TODA la feria. ¿Qué eso fue malo? Lo peor es aguantar sin decir nada, solo caminar con los brazos cruzados y mirando de mala manera a todo mundo, en especial a Arashi.
— ¿Jacey?
— Me iré en taxi— refunfuño en la salida.
— Está bien, hasta mañana— me giro el tiempo suficiente para ver a Arashi sonreír con expresión algo soñadora. Pone su mano en el brazo de Glenn y señala el camino contrario. Ellos se van juntos, viven al lado…
Nunca había estado tan celoso.