Los ojos me arden por estar tanto tiempo delante de la computadora. No debí salir a la calle después de terminar, pero estoy cansado y solo quiero dormir. Es muy tarde, y ni siquiera pude cenar con Glenn. Es muy tarde como para llegar a su casa, ya iré por la mañana. Después de todo, Glenn tiene vacaciones, ahora podremos hacer más cosas. Podría sugerirle ir a la playa. Dejo las llaves en el sofá y me voy directo a la cama.
Las vacaciones siempre han sido lo mismo desde que recuerdo, Glenn no sale mucho, claro. No entiende el fin de tomarse un descanso. Así que siempre soy yo quien le saca, vamos de paseo a algunos de los lugares que le gustan o solo me quedo todo el día con él. Arg, este año al parecer será diferente, me sorprende que Glenn este saliendo tanto con Jacey, normalmente Glenn no accedía andar por ahí en citas. Espero que no sea demasiado problemático esta vez. Hoy no pongo mi alarma, Glenn no saldrá temprano en sábado.
Como pensé, en la mañana, Glenn sigue en casa.
— buenos días.
— es casi la una— me dice, hojeando un libro— ¿acabas de levantarte?— como si no fuera muy obvio. No me molesto mucho en arreglarme cuando vengo aquí.
— trabaje hasta tarde. Quería venir a cenar, pero no pude. ¿Tienes algo de comer?— pregunto, asomándome al refrigerador.
— hice compras el jueves. Los supermercados se llenan los viernes.
— Claro— aún es temprano para comer, pero qué más da, tengo hambre. Me pongo a sacar cosas y a ordenar lo que voy a ocupar mientras me como una manzana. Enciendo la televisión, la programación de los sábados es un asco, pero bueno…— ¿Por qué esta el canal de programas infantiles?
— Jacey le puso ahí.
— ¿En serio?— ¿caricaturas? Creía que ya era mayor para eso. Le cambio, pasando rápido los canales para dejarle en uno que me interese y volver a cocinar. Esa película se ve interesante— ¿vas a comer?
— si.
— Bien— umm le miro unos momentos, para disimular tanteo en busca de las verduras que saque del refrigerador. Algo esta… extraño. Conozco a Glenn lo suficiente para saber que paso algo con él. Normalmente me preguntaría que voy a hacer o me pediría que haga algo en especial. Claro que su expresión no cambia, esto es solo porque le conozco de hace demasiados años. El ruido de un teléfono me distrae.
— ah, otra vez.
— ¿otra vez qué? Ese no es tu teléfono— le digo al ver un teléfono moderno y de color blanco. Glenn usa un modelo bastante viejo, nunca ha cambiado su número. Tampoco es que muchas personas le llamen.
— No, es de Jacey, lo olvido— otra vez Jacey, resoplo, cortando el repollo con más fuerza. Genial, entonces es casi un hecho de que él va a venir. Casi puedo imaginar que lo dejo aquí a propósito. Si, sería algo que una persona como él haría.
— Genial— murmuro. ¿Aún no es tarde para decirle que si vamos a algún lugar a comer? No tengo demasiados ánimos de estar con alguien tan asquerosamente feliz— ¿a qué hora va a venir por él?— al menos así sé a qué hora no debo irme.
—… no se— el teléfono vuelve a sonar. Hecho todo a un sartén y lo revuelvo. Glenn solo está mirando la pantalla del teléfono.
— ¿Por qué no contestas?
— No es mío— bueno, eso tiene mucha lógica. En los veinte minutos que siguen, siguen entrando llamadas, no para de sonar el dichoso teléfono.
— suficiente, dame eso— le digo, tomándolo. Tiene la pantalla bloqueada, pero me basta con bajar el volumen y dejarlo por ahí— la comida esta lista— Glenn se levanta y me sigue a la barra— ¿sabes que harás en las vacaciones?
— no.
— estaba pensando en hacer un viaje ¿no crees? conocer otro lugar— tengo que iniciar de algún modo esto. Si quiero que Glenn me acompañe tengo que convencerle de algún modo.
— suena bien.
— si, ¿verdad? ¿A ti te gustaría ir a algún lugar?— Glenn se encoje de hombros.
— Siempre quise ir a Egipto— se me escapa una risa. Cuando éramos niños, a veces jugábamos a que éramos exploradores. Claro que el juego terminaba cuando Glenn se ponía a decir textualmente lo que decía su enciclopedia sobre el antiguo Egipto. Entonces me molestaba y me iba a casa.
— Es algo complicado ir a Egipto sin planearlo— es por eso que Glenn nunca ha ido. ¿Cómo puede planear algo tan grande? le cuesta mucho pensar a futuro.
— si.
— si quieres, un día lo planeo por ti. Puedo acompañarte si quieres también— Glenn se encoje de hombros. Sé que no me va pedir que lo haga, es poco probable que realmente vaya hacer ese viaje— deberíamos ir a Japón también— nunca he ido a Japón con Glenn, a decir verdad tampoco recuerdo la última vez que fui.
— Umm— Glenn siempre quiere hablar de Japón, hoy no. le observo unos momentos ¿Qué está pasando ahora? Le preguntaría, pero no es la primera vez que algo va mal. Si es muy insoportable para él, me va contar. Muchas veces no lo hace y todo vuelve a la normalidad.
Pero las cosas siguen raras el domingo, y el lunes por la mañana. Glenn esta mucho mas callado, ni siquiera parece notar que ando por su casa. Solo se la pasa viendo su teléfono cada pocos minutos. ¿Está esperando algo?
— Glenn ¿esperas llamada?
—…No— no me convence. Mientras comemos le veo sacar el teléfono varias veces más. En la tarde, me he dado cuenta de algo más. Algo que de no haber estado tan al pendiente de Glenn no hubiera notado. Cada que se escucha los pasos de alguien por la calle, Glenn voltea a la puerta. De nuevo, escucho que alguien camina afuera, miro a Glenn y no tarda en voltear. No es coincidencia. Glenn está esperando algo, pero ¿Qué?
¿Qué es lo que está esperando Glenn?
— ¿Te sientes bien?— pregunto, cuando suspira al dejarse de escuchar los pasos.
— no.
—…— me quedo esperando el porqué no se siente bien. Glenn solo sigue revolviendo la comida del plato. No ha comido nada. Un zumbido me distrae. Sobre la mesa de la televisión esta un teléfono blanco. El teléfono de esa persona— ¿No han venido por eso?— se lo señalo. Glenn sigue despacio a donde señalo.
— no.
— qué raro. La mayoría de las personas regresa por su teléfono lo más rápido que puede.
— Creo que no va venir— ¿Qué? ¿Qué fue ese tono de ahora? No es el mismo tono que usa siempre. Su voz fue ¿Estrangulada? ¿Triste?
— ¿Por qué?— mas que preguntar por qué no va a venir, no me interesa en realidad, me pregunto porque ese tono.
— terminamos—… espera…— Ya no estoy saliendo con Jacey.
— ¿Cómo? ¿Desde cuándo?— ¿y porque yo no me entere? Tengo que morderme el labio para no sonreír. ¡Al final parece que lo que pase con Jacey si me interesa! Admito que duro mucho más de lo que había pensado, vamos o sea ¿Cuánto fue? ¿Dos meses? Yo no llevo la cuenta obviamente. Sabía que esto pasaría, solo tenía que ser paciente.
— El viernes— no estoy feliz por Glenn, es lo único malo de esto. No hay forma de que las cosas salgan bien del todo, porque ahora entiendo porque Glenn esta diferente. Aunque no lo sepa, Glenn posiblemente se sienta mal. Un poco mal por lo de Jacey.
— Ya veo— No me molesta estar feliz, aunque parezca una mala persona. En unos días, Glenn olvidara como se sentía y todo seguirá como siempre— ¿Qué paso?
— Lo de siempre— murmura— se marcho molesto. No entiendo porque se molesto tanto— umm…. No debería hacer esto, claro que solo es por curiosidad.
— ¿Qué fue lo que hiciste?— Glenn niega unos momentos.
— No sé si deba decírtelo— “Podría ayudarte” eso es lo que debería decir, pero sé que me diga lo que me diga no voy a decirle nada que pueda ayudarle. Soy demasiado egoísta para eso.
— ¿También te dijo que eres frio?
— Me llamo idiota insensible— vaya, aunque me desagrade admito que tiene estilo. Suspiro, dándole unas palmadas en el hombro. No puedo abrazarle como quiero, Glenn no recibe muy bien las muestras de afecto como estas.
— No le dijiste lo de Alexitimia— si lo hubiera hecho, nadie jamás llamaría a Glenn insensible.
— no. ¿Serviría de algo?
— No lo sé— ¿sería diferente si Glenn le dijera a los demás? Glenn seguiría siendo el mismo. Ahora no importa mucho, el daño ya está hecho. Jacey no va a volver. Por fin las cosas se arreglaron y todo seguirá como siempre, o en unos días. Creo que por ahora es muy reciente lo que paso, Glenn esta pasándola mal. Quizá no sepa que está sintiendo, pero está sintiendo algo. Él se siente mal por herir a las personas, porque no lo hace con intención.
Como sea, esta no es la primera vez que pasa esto. Sé que Glenn estará decaído varios días. Me preguntara cosas sobre los sentimientos de los demás, no querrá salir o ir a comer. Me quedare con él, y yo tendré que obligarle a comer. Finalmente, Glenn dejara pasar esto, volverá a trabajar y todo seguirá como antes.
Eso tiene que pasar ahora también.
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El teléfono de Jacey está recibiendo otra llamada. El primer día que lo dejo aquí, estuvo sonando casi todo el día. No sabía que Jacey usaba tanto su teléfono. En cualquier caso, no vino por él. Para el domingo en la mañana, las llamadas cesaron.
— ¿Estás bien?— Arashi pregunta mucho eso últimamente. No sé si estoy bien o no. No era mi intención hacer que Jacey se molestara, nunca ha sido mi intención herir a los demás. Pero también es común que las personas terminen, que rompan relaciones ¿no? todos los días cientos de personas terminan con otros, no es nada raro.
— Eso creo— ¿lo que hice estuvo tan mal? realmente me causa mucho malestar dormir en compañía de otra persona. No me gustan las sensaciones que tengo. No sé qué debería hacer ahora.
— ¿aún no vienen por esa cosa? Es mas ¿Cuánta carga puede tener un teléfono? Ya son varios días.
— No ha venido— no tiene caso llamarle si yo tengo el teléfono. Es lo único que quedo de Jacey aquí. ¿Debería llevárselo? Un teléfono es importante, no es cualquier objeto olvidado.
— Quizá sigue molesto— Arashi lo dice con facilidad. ¿Aun molesto? ¿Cuánto puede durar molesta una persona?
— ¿Cuánto tiempo?— pregunto, porque no sé cuánto tiempo sea.
— no se…— Arashi se gira, de nuevo viendo el refrigerador. Pasa mucho tiempo aquí cuando son vacaciones. ¿Por qué no me siento raro cuando estoy con Arashi?
— Arashi— él voltea a verme— ¿tú no te molestas conmigo?— ah, no es eso lo que quiero preguntar. Arashi pone una expresión rara. No la entiendo— espera…— es difícil expresar correctamente la idea que tengo.
— ¿Glenn?
— ¿te molestaste alguna vez conmigo? ¿Antes?
— Ammm… la verdad, sí. Algunas veces me parecías muy desesperante. Claro que fue cuando no sabía que lo que te pasaba. Todo tiene sentido cuando conoces lo de la Alexitimia.
— Ya veo— no recuerdo cómo fue que deje que Arashi se quedara aquí de tal forma. Quizá con el tiempo me acostumbre a verlo por aquí.
— ¿Por qué me preguntas eso?
— no sé. Estaba pensando en eso— Arashi se va temprano. El teléfono de Jacey no ha sonado en un buen rato. Pensar en Jacey me produce cansancio. Sé que le hice enojar, fue muy obvio que estaba enojado.
Lo malo de hacer enojar o hacer sentir mal a alguien, no solo a Jacey, es que no siento realmente que deba disculparme. Mis disculpas son falsas, no lamento lo que hice porque es algo que me hace sentir mejor. Me siento mal por hacerle enojar, yo no quería que se fuera así. No quiero disculparme, pero creo que en esta ocasión si debería hacerlo. No me gusto la expresión que puso cuando se marchó. Sentí el estómago revuelto, y también el pecho apretado.
Debí haberle dicho sobre la Alexitimia.
Supongo que puedo llevarle el teléfono a su casa. ¿Por qué no vino? Creí que vendría al otro día por él, después de todo, es su teléfono, y aunque ya no estemos saliendo no tiene porque no venir. No creo que no se haya dado cuenta que lo olvido.
Su casa está cerrada, de todos modos llego y llamo. Espero un rato, sigo llamando. No hay nadie al parecer. Sigo tocando un rato más. Quizá salió hoy.
— ¿A dónde fuiste?— Arashi me observa, está sentando en mi sofá.
— fui a llevar el teléfono de Jacey. Pero no estaba— explico. Arashi parece molestarse ¿si? no, quizá solo esta serio o aburrido.
— ya veo. Oye, ahora que lo recuerdo ¿piensas salir con chicos otra vez?— ¿Por qué hace esa pregunta? Es obvio que seguiré saliendo con personas, me da lo mismo si es un hombre o una mujer, aunque aún me siento extraño desde que Jacey me termino. No tengo mucha hambre, ni quiero hacer cosas, tampoco se quita esta sensación en el pecho. Quizá me enferme esa noche, fue una noche fría.
— no entiendo porque no saldría con alguien. Pero no por ahora— No es agradable tener dolor de estomago y de pecho cuando suceden cosas como estas.
— ah, bien. ¿Volverás a llevar el teléfono?
— supongo.
— ¿quieres que vaya contigo?
— No es necesario— no es difícil pasar por casa de Jacey. Solo le dejare el teléfono y ya, no sé si quiera hablar conmigo, y aunque quisiera hacerlo no se qué voy a decirle. Creo que si hablo con Jacey solo voy a empeorar las cosas, por eso siempre espero a que los demás dejen de estar molestos. La mayoría de las veces no vuelvo a ver a esas personas.
No encuentro a Jacey en su casa al otro día tampoco. Qué raro. Debería estar por aquí, ya he esperado dos horas. ¿Estará haciendo algo por las mañanas? No me dijo que haría en vacaciones. Vendré en la tarde.
Pero la casa sigue cerrada, con las luces apagadas. Jacey no está. El teléfono se ha apagado esta tarde.
— ¿Glenn? ¿Vienes llegando?— Arashi está saliendo de su casa. Hace mucho que ha oscurecido.
— si.
— ¿Dónde estabas?— Arashi no me sonríe, parece serio ¿preocupado quizá? No sé, no parece estar preocupado.
— lleve el teléfono, pero no está otra vez.
— vaya. Tengo que ir a trabajar, llegare a desayunar— ¿otra vez? No me siento cómodo estando con alguien, quiero estar a solas.
— no. Está bien si no vienes.
— ¿Qué?— ah, sí. Eso es lo que recuerdo como expresión sorprendida. Aunque no entiendo porque se sorprende, las personas necesitan estar solas a veces.
— me gustaría estar solo.
— b-bueno, si es así…— sigo caminando a mi propia puerta. Mi casa está sola, pero me gusta estar solo, me siento muy bien estando solo, no buscando la forma de no decir algo incorrecto, intentando que las personas no se ofendan y haciendo lo que se supone que debe hacerse aunque no lo entienda. Más de una vez me han dicho en terapia que no debo quedarme solo mucho tiempo, pero es cansado estar siempre cuidando lo que hago. No me interesan mucho las personas.
Dejo el teléfono de Jacey sobre el sofá. Jacey es una persona realmente fácil de entender la mayoría de las veces, siempre dice lo que piensa.
Ah, ¿Qué fue lo que hice mal esta vez? Jacey quería quedarse aquí ¿no? ¿O quizá fue lo que le dije? Solo le dije que tenía que irse. Quería preguntarle a Arashi sobre esto, pero no sé si a Jacey le hubiera gustado que lo comentara, recuerdo cuando me pidió que no dijera nada sobre cuando intentaron abusar de él. ¿Y si no quiere que diga nada sobre esto tampoco? Sería mejor preguntárselo. No encuentro a Jacey cada que voy a su casa, siempre está sola, cerrada. ¿Me está evitando? Algunas personas lo hacen, no sería raro.
— ¿Glenn?
— ¿Si?— ah, es uno de los amigos de Jacey. Es al que llama Allan.
— ¿Qué haces por aquí?
—…traía el teléfono de Jacey
— ah, Jacey está de vacaciones con su familia. ¿No te lo dijo?
— No— eso explica por qué no le encuentro en casa cada que vengo. No sé qué más hablar con esta persona, no me siento cómodo con él.
— pasara las vacaciones en casa de sus padres, me dijo que no estaría disponible en su teléfono, pero no me dijo que lo había olvidado.
— lo dejo.
— ¿Tuvieron una pelea?— ¿pelea? No, eso no fue una pelea. Ni siquiera creo que haya sido una discusión. Me encojo de hombros, no sé qué fue lo que paso— Jacey hubiera ido por su teléfono, no dejaría pasar la oportunidad— ¿de qué oportunidad está hablando?
— No entiendo, tengo que irme— comienzo a caminar, no tiene caso que este aquí más tiempo si no está.
— claro… Jacey no regresara hasta las clases— me detengo, y luego sigo caminando. Siento el estómago vacío, helado. Mi respiración esta agitada, pero no he hecho mucho esfuerzo. ¿Ahora que está pasando? no me gusto lo que me dijo, que Jacey no iba a estar aquí. No entiendo, él tiene toda la libertad de pasar las vacaciones donde quiera. Quiero hablar con él, eso es lo que pasa. Él siempre viene a hablar conmigo, llama o manda mensajes. Me gusta verle sonreír, no le veré sonreír en muchos días.
— ¿Glenn? ¿Qué pasa?
— nada.
— ¿seguro?
— si ¿Por qué?
— No, por nada— Arashi me observa unos segundos más. Ah, supongo que ya hablare con Jacey cuando regrese. No sé si podré explicar y decir lo que quiero, normalmente nunca puedo hacerlo. Ahora si quisiera poder.