Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

¿Mi Corazón Cambio Por Ti? por Kurosaki Myu

[Reviews - 13]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Ya lo sé, es ya un año de mi última actualización, la verdad me merezco la horca o algo por el estilo, pero en fin, lo había comentado meses atrás, estaba muy ocupada y pues no fue distinto, después de terminar ese semestre, y pues ahora que pude inspirarme y dejar un poquito mis problemas de lado, actualizo, al fin, espero y todavía haya personas que esperaran este capítulo, bueno lo dividí en dos partes porque es muy largo, ahí aclaro algunas cosas, sin más, a leer.


Disfruten la historia, todos los derechos para Tadatoshi Fujimaki y Haruichi Furudate creadores de estos animes tan fabulosos, solo utilizo a los personajes para hacer mis locas historias sin ánimos de lucro ni nada por el estilo.

A la mañana siguiente Kenma se levantó temprano, se arregló, solo que había un pequeño inconveniente el único pans que metió a la hora de escapar de casa fue el del equipo de vóley, muy a su pesar tuvo que ponérselo y así salió del edificio, una vez más vio a Kagami parado fuera de su edificio, saludo como creyó conveniente, Kagami se sorprendió con lo silencioso que podía llegar a ser Kenma, aun así estaba acostumbrado a las llegadas silenciosas, regreso el saludo y los dos emprendieron camino directo a la cafetería donde habían desayunado el día anterior, ambos ordenaron (claro en esta ocasión Kenma si estaba atento), Kagami empezó la plática y Kenma solo se limitó a responder, cuando ambos terminaron se dispusieron a pagar, cada quien por lo que habían consumido, claro,  esto a petición de Kenma, porque si hubiera sido por Kagami, el invitaría el desayuno, pero comprendía bien que Kenma quisiera causarle el mínimo de problemas que pudiera, ambos jóvenes salieron del establecimiento con algo de pereza y aun con sueño.


- ¿Ese pans es de tu escuela? - De pronto Kagami pregunto.


- Si, bien, a la hora de huir de mi casa fue lo primero que metí en mi maleta, es el pans que usaba en el equipo de vóley de mi preparatoria- Trato de sonar lo más desinteresado en la plática.


- Así que eres el chico fugitivo- Kagami vio un deje de tristeza en los ojos de Kenma y supo que había metido la pata de nuevo- Bueno... ¿entonces practicas vóleibol?


- Si, cuando aspiré a esta escuela también elegí el club de vóley como opción, así que ahora solo me queda esperar a que empiecen las clases para conocer a los miembros del equipo- Kenma había dicho esto con las peores ganas que pudo.


- ¿Que no quieres entrar al equipo?, ¿o te forzaron a entrar?, lo dices con unas ganas que se contagian- Esto último lo dijo con sarcasmo y de nuevo viendo que había metido la pata.


- Bueno la verdad, lo había hecho por otra razón, pero ahora no sé si sea la mejor idea- Kenma trataba de que no doliera tanto.


- Si quieres puedes cambiar de club, si la razón por la cual elegiste ese club ya no te convence- Kagami trataba de desviar un poco el tema.


- Es el único deporte que se jugar, además es donde tengo algunos conocidos- Era verdad, pero no le causaba la mínima alegría de ver a Kuroo.


- El básquetbol también es bueno, quizá quieras integrarte a ese club...bueno yo te dejo, nos vemos a la hora de la comida, pasare por ti, así que no olvides que debes esperarme- Kenma hasta ese momento se dio cuenta que estaba frente al edificio donde hacia su curso.


Kagami siempre le decía que es lo que harían en el día, esa ocasión no había sido diferente, pero la mala costumbre que Kagami tenía es que solo le decía a Kenma, pero siempre lo dejaba con la palabra en la boca, no esperaba a que le dijera si podía o no, era algo que se tenía que hacer, Kenma tendría que acostumbrarse a esa forma de ser de Kagami.


El curso paso tan lento que Kenma se estaba durmiendo en el salón, había optado en salir al baño cada hora, por lo menos para estirar las piernas y refrescarse un poco en el baño, por fin cuando el curso termino, salió lo más rápido del salón, encontrándose con Kagami que ya lo esperaba afuera del aula.


- Pobres chicos los dejas sin clase- Fue el comentario por parte de Kenma.


- Más bien tu tutor los explota más de la cuenta, se ha pasado por cinco minutos- Kagami veía el reloj que traía.


- Si bien, sácame de aquí, tengo hambre y mucha aburrición- Kenma quería salir corriendo de ese "infierno" lo más pronto posible.


- Como digas jajaja- Kagami parecía tranquilo y no le perturbaba el cambio de humor de Kenma.


Ambos chicos se dirigieron a la cafetería de la escuela, la cual estaba atascada de gente, esperaron a que su turno llegara para poder ordenar lo que comerían, luego pasaron a recoger sus alimentos y por ultimo buscaron un lugar donde sentarse, era común ver ocupadas mesas de varios ocupantes, por grupos de "amigos", ellos optaron por sentarse en la barra que daba frente al ventanal de la cafetería, se dispusieron en comer entre risas de algunas personas cercanas a ellos y la propia conversación que ellos estaban entablando, cuando terminaron cada quien pago lo consumido y se dispusieron a salir del establecimiento, caminaron alrededor de media hora, claro Kagami se había ofrecido como guía para enseñarle a Kenma un poco más de cómo estaba distribuida la escuela, cuando se acercaron al área donde estaban los gimnasios y todo lo que implicaba un área deportiva, Kagami guio a Kenma a un gimnasio, ambos ingresaron encontrándose con varias personas dentro, Kenma pensó que era inoportuno entrar si ya había alguien ocupando el sitio, pero vio que Kagami se dirigía hacia el grupo de chicos que estaban frente a ellos, así que decidió ir a su lado, esperaba y no se metieran en un lio, pronto se dio cuenta que Kagami saludaba a los chicos que estaban ahí.


- Chicos, ¿qué tal la están pasando en sus vacaciones? - Empezó a estrechar las manos de los chicos presentes- Quiero que conozcan a alguien, él es...- Y antes de que Kagami digiera algo Kenma se adelantó.


- Soy Kenma Kozume, gusto en conocerles- Kenma tenía nervios de estar ahí, pero creía que ellos eran los amigos que Kagami quería que conociera.


- Mucho gusto Kozume- Fue el saludo a coro que lanzaron los chicos.


- Bueno, bueno, he conocido a este chico el día de antier y tiene un problema al igual que todos nosotros, así que creo que sería bueno apoyarle y hacerle saber que no está solo, que tal si hacemos una dinámica, con esta pelota- Kagami había sacado una pelota de plástico de quien sabe dónde- La iremos pasando a la persona que queramos, no se vale repetir, iremos contando nuestro problema y el ultimo que le toque la pelota se salva de decir su problema.


Todos asintieron, era como si supieran que hacer desde un principio, pues todos sin rechistar se acomodaron en un pequeño círculo, y a todo esto, Kenma pensó que estaba pasando algo que no le gustaría, pero ya estaba involucrado en esto, como Kagami traía la pelota su víctima fue el chico de cabello verde oliva que estaba frente a él.


- ¿Porque yo Kagami? - Tras un sonoro suspiro el chico comenzó a hablar- Me llamo Makoto Tachibana, estoy en segundo año de mi carrera y estoy aquí porque fui engañado por mi pareja- Kenma abrió los ojos al oír esta última frase- Él va en esta escuela, va en otro salón en mi misma carrera, cuando entramos el año pasado, al parecer íbamos bien, la relación había sido como cuando aún éramos amigos, salíamos, conversábamos y por su puesto el tiempo a solas era bueno- Esto último lo dijo con un tono carmín adornando su rostro- Bueno, eso era lo que pensaba, hasta tres meses después de entrar a la universidad, siempre salíamos juntos a comer, estudiábamos juntos, la rutina era que yo fuera por él a su departamento, el vivía dos pisos arriba del edificio donde ambos vivíamos, Haru...Haruka Nanase, así se llama el que fue mi novio, empezó a distanciarse de mi repentinamente, lo atribuí a que era por los distintos horarios, además de que nunca fuimos iguales en gustos, un día un profesor me comento que había escuchado que era un buen instructor con los niños a la hora de nadar, le dije que no era para tanto y que para eso estaba estudiando, que el sueño que buscaba con terminar mi carrera era que yo pudiera ayudar a los pequeños a amar el agua, a mí me aterra nadar en el mar, sin embargo creo que el nadar en las piscinas me hace creer que tengo cierto control, bueno aquel profesor me pidió algunas clases particulares para su pequeño, me dijo que me pagaría y pues acepte, el dinero siempre es bien recibido y pensé en ahorrar algo para algunos imprevistos, la clase iba a ser en un establecimiento cerca de la casa del profesor, así que me trasladaba hasta haya una vez por semana, en uno de esos días llegue temprano al edificio, me dirigí de inmediato al departamento de Haruka y me lleve la peor sorpresa del mundo, desde la escalera vi a Haruka con un amigo de ambos que se llama Rin Matsuoka, ellos estaban besándose en la entrada del departamento, ninguno de los dos me vio, así que baje a mi departamento y desde ahí llame a Haruka era obvio que no me diría que estuvo con él, en ese momento no le reclame pensando que había sido un desliz, pero los estuve observando por un mes, ese mismo día que impartía clases era lo mismo, Rin saliendo del departamento de Haruka, ese último día de aquel mes termine temprano la clase del hijo de mi profesor, además de que era la última clase también, ya no había porque seguir espiando, sabía que estaba pasando en ese momento, me dirigí a un bar y me puse a tomar, quizá no era la mejor forma de afrontar las cosas, pero era lo que me evitaba pensar en ese momento la traición de la persona que amaba, en aquel bar me encontró el que era él novio de Rin, él se llama Sousuke, Sousuke Yamazaki, me pregunto que por qué estaba en ese lugar, le pedí que saliéramos un momento, deje mis cosas dentro del bar y me dirigí a la entrada con él, comencé a decirle lo que "nuestros novios" hacían, el obviamente no me creyó y me propino un golpe, me caí y eso no hizo más que ironizar mi hablar, le dije que si tan seguro estaba de su "Rincito" fuera en ese preciso instante al departamento de Haruka, después de eso se fue y yo volví adentro del bar, tenía un sabor a sangre en la boca pero poco me importo, volví a tomar, lo siguiente fue lo que Sousuke me conto, él se dirigió al departamento de Haruka, fue el mismo escenario que vi yo, Rin saliendo del departamento a la vez que Haruka le ayudaba a acomodarse la ropa, pero a comparación de mí, él no se quedó callado, les dijo algunas cosas y se marchó de inmediato seguido por Rin, tomo un taxi y se dirigió al bar donde estaba, pago la cuenta de lo que había consumido y me saco de aquel lugar, después de eso me llevo a su departamento, vagamente me acuerdo de que Rin me vio en aquel lugar y que Sousuke lo echaba de su departamento, aquella noche Haruka trataba de localizarme, al día siguiente desperté bastante mareado y había perdido un día de clase, Sousuke me pidió una disculpa por el golpe, después de aquel día corte contacto con Rin y Haruka, era obvio que le dejamos hablar a cada uno, pero el daño estaba hecho, preferimos dejar eso en el pasado y hacer como si no nos conociéramos, Sousuke y yo comenzamos a hablar de lo sucedido, luego fueron salidas y llamadas continuas y hace como cuatro meses por fin nos dimos la oportunidad de volver amar, ahora soy novio de Sousuke.


Kenma estaba atento a lo que había dicho Makoto además de que se le hacía un nudo en la garganta, Makoto había terminado, así que le paso la pelota al chico pelirrojo frente a él.


- Soy Gaara no Sabaku, voy a entrar a mi segundo año en esta escuela y mi pareja me engaño, bueno la verdad creo que desde un principio pude ver lo que me esperaba, cuando estas en preparatoria todo es tan emocionante y nuevo, pero aún más, es el hecho de que salgas con un chico mayor que tú, su nombre es Itachi Uchiha, al principio me pareció desesperante pues ni lo conocía ni nada, sin embargo con el paso del tiempo comenzó a conquistarme, era lo máximo, además de que era la envidia de mis amigos, cuando formalmente me pidió ser su novio empezó el verdadero tormento, comenzó con peleas pequeñas y le siguieron los celos, ya no podía ver a mis amigos, sin embargo, él se la pasaba siempre al lado de otros chicos, mis amigos me decían que siempre lo veían con otros chicos en situaciones comprometedoras, mas sin embargo jamás les creí, pensé que era la envidia que me tenían por tener a un novio bastante apuesto, así que comencé a alejarme mucho mas de ellos, básicamente iba de mi casa a la escuela y de la escuela a mi casa, bueno salvo que Itachi me invitará a algún lado, creía en el sin dudar, pero un día lo vi con mis propios ojos, se besaba con un chico de mi salón, en ese momento vi cuánta razón tenían mis amigos, le hice frente a los dos y di por terminada la relación, días después, él me buscaba y era obvia mi reacción, no lo quería ver, ni tener conexión con él, le pedí a mis padres que me cambiaran a otra escuela, pero fue lo mismo, cuando salí de la preparatoria me entere que se había casado, me entere por el novio de mi mejor amigo, Naruto...Naruto Uzumaki, él es el novio de Sasuke Uchiha, el hermano de Itachi Uchiha, bueno por el me entere, que Itachi se casó por que había embarazado a su aventura en turno, sus padres no quieren ningún escándalo así que lo maquillaron haciéndole creer a todos que se habían casado por el gran amor que se tenían, y yo por otro lado hace algunas semanas encontré al que espero se mi pareja de por vida, se llama Sai.


Kenma creía que en cualquier momento seria el siguiente, pero Gaara lanzo la pelota al chico de cabello castaño frente a él.


- Bueno, soy Mamoru Endou voy en mi segundo año de universidad y mi novio me dejo por otro, la verdad cuando iba a la secundaria todo giraba en torno al futbol, pero cuando entre a la preparatoria eso cambio, cuando entre al primer año comencé a darme cuenta que me gustaba mi mejor amigo, Ichirouta Kazemaru, así que durante todo ese año trate de no dar señales de que me gustaba, sin embargo fue lo contrario, todos sabían a la perfección quien me gustaba, pero me lleve una gran sorpresa cuando el mismo Kazemaru fue quien se me declaro a principios del segundo año de preparatoria, la verdad estaba feliz, feliz por saber que era correspondido y de saber que estaría con la persona que creí...-Hasta ese momento Endou había conservado una sonrisa, pero de inmediato cambio su expresión a una triste- Seis meses después me había enterado por Kazemaru y Gouenji, Shuuya Gouenji era un buen amigo también y nunca espere lo que me iban a decir, Kazemaru y Gouenji habían tenido un desliz, Kazemaru estaba embarazado de Gouenji, recuerdo que Kazemaru rogaba por qué lo perdonara, pero lo único que pude hacer es romper toda unión con ellos, me fui al extranjero, me habían invitado a ser parte de la selección  juvenil de futbol nacional y estaba pensando la posibilidad de ir y unirme, pero después de eso no dude en irme, el viajar y seguir con mis estudios me hizo conocer y entender muchas cosas, también  me hizo conocer muchas personas, después de esa aventura regrese, pero no regrese con las manos vacías, llevo medio año saliendo con una increíble persona,  se llama Natsumi Raimon y a pesar de cómo fue nuestra relación en el pasado, después del incidente con Kazemaru siempre estuvo apoyándome, aunque fuera de lejos, no es agradecimiento lo que siento por ella, sé que es lo que sentía por Kazemaru y es amor.


En las reacciones de los chicos se plasmaba una profunda tristeza y comprensión, cuando Endou acabo de hablar le paso la pelota a un chico pelinegro que estaba junto a un chico rubio.


- Bueno, en esta ocasión vamos a ser dos personas que digan su historia- El chico rubio movió la cabeza de forma afirmativa- Yo me llamo Yuuri Shibuya, entrare a mi segundo año de universidad y he tenido una complicada vida amorosa, cuando estaba en mi último año de preparatoria quede enamorado de un chico de mi clase, comenzamos a salir por decisión de él, estaba muy contento y a gusto con él, pero comenzamos a tener bastantes problemas, su familia se enteró de mi relación con él y le pidió que terminara conmigo, dijo que era el primogénito de una familia bastante importante y tenía el deber de conservar la descendencia de forma correcta, eso significaba casarse con una mujer, él me quería demasiado pero acordó conmigo que tendría una relación con una chica mientras estaba conmigo, a los ojos de su familia él había terminado conmigo y pensaba mantener nuestra relación a escondidas con la finta de tener una novia, sin embargo esto causo más problemas, era obvio que toda la vida me la pasaría siendo el otro y eso no era lo que quería, termine con él y vine a esta escuela así conocí a una persona que pone mi mundo de cabeza- Termino de hablar y de inmediato le paso la pelota al rubio que tenía a un lado.


- Yo me llamo Wolfram von Bielefeld y entre a mi segundo año de Universidad, también fui engañado por mi pareja, cuando estaba en mi último año de preparatoria era el chico más cotizado de mi escuela, tanto por hombres como mujeres, sin embargo yo ya tenía a alguien a quien amar, ese chico era tímido y bastante torpe, pero era lo que buscaba en alguien, sincero y sencillo, con la torpeza que caracterizaba a aquel chico me pidió que fuera su novio, todo iba relativamente bien hasta que me entere que solo había sido una apuesta, la apuesta era que quien me llevara a la cama, se llevaría una gran suma de dinero, ese chico no era lo que aparentaba, era sínico y altanero, nada que ver con lo que me había mostrado, por suerte deje a ese tipo antes de que tal apuesta la llevara a cabo, sin embargo trato de forzarme a estar con él, en aquella ocasión termino dándome una paliza, por eso mi madre y mis hermanos optaron por que terminara la escuela en otra parte, después de eso llegue aquí y conocí a un chico que me hace enfadar cada que hace una tontería- Wolfram tenía  una expresión bastante chistosa, los cachetes inflados y un puchero.


- No es cierto, te enojas por qué quieres- Se defendió Yuuri- Bueno yo y Wolfram estamos saliendo, nos conocimos aquí y la verdad la relación entre ambos es bastante extraña, aún más el hecho que nos unió, fue raro.


- Yo te di la oportunidad de retractarte y tú no quisiste.


- La verdad, el hecho de que hubieras ofendido a mi madre no era para nada de lo que pudieras retractarte- Se defendió.


- El hecho de que me abofetearas no era tampoco bueno- Recordaba Wolfram.


- Si, pero quien iba a saber que en tu familia se llevaba a cabo tal rito- Estaban frente a frente- Si, pero podías decirme que esa acción significaba que quería comprometerme contigo- Aun recordaba el hecho.


- Bueno en conclusión ambos estamos comprometidos, en mi familia se tiene la costumbre que al abofetear a la persona que amas quedas automáticamente comprometido, la persona aquí a mi lado no quiso retractarse de ese hecho así que le termine diciendo lo que significaba y que no se había retractado de lo que había hecho, lo que provoco que empezáramos a salir, más a la fuerza que porque él quisiera, pero esa acción desembocó en que ambos nos enamoráramos verdaderamente del otro, hace seis meses le dijimos a nuestras familias del compromiso y de cómo había pasado las cosas, la verdad nosotros estábamos seguros que no lo aceptarían, pero quedaron maravillados con la noticia, mi madre era gran amiga del padre de Yuuri así que, que más daba ya, desde ese momento hemos tenido altos y bajos, a veces decimos que fue un error este compromiso y que deberíamos terminar pero...- Fue interrumpido por Yuuri.


- Pero la verdad es que no dejaría a esta persona tan celosa y preocupona por nada del mundo, he aprendido que quizá no tenemos los mismos gustos, pero le amo tanto que ya no podría alejarme de él- Yuuri tomo la pelota y la arrojo al chico pelinegro al lado de él.


- Soy Ryoma Echizen y acabo de entrar a mi segundo año de universidad, fui engañado por mi pareja...creo, bueno no quiero sonar arrogante ni pretensioso, pero desde los doce años he sido un genio en el tenis, cuando entre a la preparatoria conocí al que hasta hace un año era mi persona especial, en aquel tiempo era mi capitán del club de tenis- Ante esta mención Kenma abrió los ojos enormemente y contuvo el llanto- Yo iba en primero, mientras él estaba en tercero, se llama Kunimitsu Tezuka, al principio trate de no prestarle mucha atención, pero era más una acción para no hacer que los demás se dieran cuenta de mis sentimientos; con él, al igual que todo el club pasamos por varios momentos buenos, él tuvo que seguir su formación escolar además de su sueño y carrera como tenista profesional, cuando entre a preparatoria volví a encontrarme con él, y bueno ahí volvió a surgir el amor que tenía por él,  la sorpresa aquí fue que el confeso que me amaba y que quería una relación conmigo, estaba tan emocionado y confundido a la vez, pero decidí aceptar ser su novio, la diferencia de edad no era mucha, pero mientras yo tenía quince él ya tenía dieciocho, dijo que por esto nadie se podía enterar, nuestra relación fue clandestina y así siguió hasta cuando cumplí dieciocho, sin embargo yo creí que por ser mayor de edad podría por fin reconocerme ante la sociedad como su novio, más sin embargo fue distinta la situación, decidió dejarme, terminar y así cada quien podía enfocarse en el tenis, que si en verdad sentíamos algo por el otro el tiempo nos juntaría de nuevo, pensé que era una buena idea, pronto serían los campeonatos y el estar ligado al otro quizá estropearía el rendimiento del otro, pues habíamos tenido peleas sobre que era hora de que me nombrara como su novio, él pensaba que era mejor no decirlo para no estropear mi carrera, trate de aceptar de la mejor manera, pero, ¿cuál fue mi sorpresa que me lleve al día siguiente?, lo habían captado a él saliendo de un restaurante con un compañero que era del antiguo club de tenis de la secundaria, el chico se llama Syusuke Fuji, le habían preguntado a Tezuka que quien era y él le dijo que su actual pareja, la excusa que me dio era quizá solo para que por fin lo dejara y pudiera seguir su relación con Fuji, después de eso no quise saber nada de él, he tenido contiendas con él y solo lo veo como un rival más, actualmente solo quiero dedicarme al tenis y mi carrera.


El chico parecía bastante afectado a pesar de hacerse el fuerte; solo faltaba Kagami y Kenma para decir su "problema" y solo uno se salvaría de contarles a todos, Ryoma arrojo la pelota hacia Kenma, mas sin embargo no llego a él, Kagami la había interceptado y había comenzado a hablar de inmediato, así que no dio tiempo a replicas por parte de los demás.


- Soy Taiga Kagami, entrare próximo a mi segundo año y fui engañado por mi pareja, cuando llegue aquí tenia quince años de edad, había elegido la preparatoria Seirin para comenzar a estudiar, fui la segunda generación, ahí conocí a los que fueran mis mayores amigos y apoyo en el básquet, encontré otra forma de ver aquel deporte, siempre creí que tenía que ser el mejor y perdí la verdadera motivación, pero hubo una persona que con lo que vivió cerca de sus compañeros de secundaria en su club de básquet, que me hizo cambiar completamente, aquel año conocí a Tetsuya Kuroko, un chico inexpresivo y bastante sigiloso, se hacía llamar sombra, poco a poco comencé a sentir más que una amistad por él, cuando comenzamos nuestro segundo año le pedí que fuera mi novio, el acepto y las cosas comenzaron a ir mejor en todos los sentidos, aquel año también ganamos Winter Cup como lo habíamos hecho un año antes, cuando entramos a tercero cambio todo, pasamos menos tiempo juntos, bueno me refiero a salidas y esas cosas, pues al nombrarme capitán tenía un mayor papel dentro del equipo, así que las cosas iban bien, bueno así lo creí, el día en el que entregue el equipo al próximo capitán fue mismo día que ganamos la Winter Cup por tercera vez, ya estando en la escuela me lleve la sorpresa de que al buscar a Kuroko para hacer el cambio oficial ante todos los miembros del grupo, lo encontré con un chico llamado Aomine Daiki, yo sabía que él, como Kuroko tenían su historia desde antes, supe por Kuroko que ellos habían sido novios, pero que después del comportamiento que tuvo en secundaria él se había alejado tanto del club como de él, pero el verlos así de nuevo me hizo ver que esa relación nunca debió terminar, me dirigí sin él a ver a los chicos, ellos me preguntaron que si no lo esperaría, les dije que estaba ocupado con otras cosas y mejor le dedique unas palabras al club entero, cedí mi lugar y me fui de ahí, esa misma noche viaje a América y regrese el mismo día de mi graduación, vi a Kuroko solo para decirle que quedaba libre y me marche, desde ese día no he vuelto a verlo, actualmente estoy solo, aun me recupero de eso...bueno chicos creo que hemos termin..- No pudo terminar pues Kenma tomo la pelota.


- Quizá se había quedado que el ultimo no diría nada, pero no puedo quedarme así, ustedes abrieron su corazón y dijeron lo que les había pasado, así que yo también quiero hacerlo- Tomo bastante aire y comenzó a hablar- Soy Kenma Kozume, acabo de entrar a esta universidad y a diferencia de todos ustedes que han tenido tiempo de poder sanar sus heridas yo no he corrido con esa suerte, no han sido meses ni semanas el tiempo que he tenido que cargar con este dolor, el día de antier había sido el día que me graduaría, me despediría de todo lo relacionado con mi época en la preparatoria, al fin me reuniría aquí con la persona que amaba, pero antes tenía que retirarme y dejar todas las cosas en mi preparatoria, él había prometido que estaría ahí, acompañándome tanto en la ceremonia de clausura como en la despedida que habían organizado los chicos del club de vóley, creí que estaría ahí para ver a sus antiguos compañeros de equipo, que fuera una vez más a ver a los que lo consideraban un buen capitán, sin embargo él no asistió, me había dicho un día antes que no podría porque tenía que pasar un examen para poder aprobar una materia, deje pasar el hecho, pues era más importante su carrera que el que fuera a verme, pensé en arreglármelas solo, así que cuando salí del convivio con los chicos del club me dirigí de inmediato a su casa, pensaba en subir un poco de intensidad la relación, pues en el año que llevábamos de salir no habíamos pasado de los besos y caricias, así que me arme de valor y pensé en darle la sorpresa de esperarlo en su casa y pasar la noche con él, pero el sorprendido fui yo, cuando llegue a su casa y empecé a subir las escaleras empecé a escuchar ruidos, en un principio pensé que se trataría de él haciendo un desastre en su habitación, conforme avance comencé a oír gemidos, quiero pensar que ninguno de ustedes llego a ver a su pareja haciéndolo con la persona con que lo engañaban- Todos asintieron- En mi caso no fue así, abrí la puerta de la habitación...y ahí...ahí vi a mi novio con un chico que conocía muy bien, ese chico estaba en el club de vóley donde mi amigo jugaba también; ese chico se llama Kei Tsukishima, en aquel momento se quedaron sorprendidos de mi presencia, la verdad creo que siempre supe que esos dos salían, quizá…quise creerme el ciego y dejar pasar eso de lado, se habían conocido en un campamento de entrenamiento y creí que solo tenían una relación amistosa, Tsukishima es un chico alto, rubio y de lentes, creí que mi novio no se fijaría en él, pensé que solo le gustaba fastidiarlo, pero creo que la verdad siempre me golpeo la cara y solo lo supe cuando los vi en la habitación de Kuroo...Tetsurou Kuroo- Todos los presentes abrieron enormes los ojos, si bien sabían que pertenecía al equipo de vóley y que era cotizado por hombres y mujeres, pero no podían creer que fuera ese tipo de persona que describía Kenma- Los vi en pleno acto y cuando los descubrí Kuroo quería hacerme creer que no era lo que parecía, salí corriendo de su casa no sin antes decirle que todo había terminado y me encerré en mi casa, lo demás en resumen es que tome mis cosas y llegue aquí, el problema es cómo enfrentarme a él, vine aquí para estar más cerca de él, pero ahora que ya no somos nada no sé cómo seguir.


Se hizo un gran silencio en el gimnasio sin embargo todos los presentes comenzaron a darle su apoyo a Kenma, hablaron un rato y luego Kagami tomo la palabra.


- Bueno chicos ya fueron bastantes sorpresas y emociones por hoy, es mejor descansar y vernos mañana, es miércoles y aun nos faltan dos días antes de que se acabe esta primera semana de cursos, así que hay que ponernos de acuerdo que vamos a hacer mañana, nos ponemos de acuerdo por mensaje al rato y mañana nos vemos en el área adecuada, hasta mañana a todos.


Kenma hizo lo mismo y se despidió, todos se despidieron a coro y fueron saliendo de a poco.


- ¿Kagami dónde puedo comprar algunos pans?, porque el único que empaque fue este y con lo que dijiste creo que jugaremos o algo así, ¿no? - Kenma trataba de no dejar reflejar tristeza en su semblante pues a pesar de haberse quitado un peso de encima con la confesión de hace unos instantes aun le dolía el hecho.


- Bueno creo que sería bueno ir al centro comercial, no esta tan lejos, yo creo que también deberías de comprar un traje de baño, son las cuatro y treinta así que todavía podemos ir y quizá cenar antes de regresar a la universidad, ven sígueme- Había emprendido camino hacia la entrada de la universidad.


En el camino estaban hablando cosas sobre los alrededores, si bien ahora habían llegado más lejos de donde la cafetería, donde habían ido a desayunar la primera vez y Kagami se había ofrecido para enseñarle a Kenma a andar en Tokio, recorrieron unas cuadras más y por fin vieron el centro comercial, ya dentro Kagami guio a Kenma a una tienda de ropa, luego irían a la tienda de deportes para ver el traje de baño, en la tienda de ropa para hombres comenzaron a buscar el área de los pans, cuando por fin los encontraron Kenma comenzó a buscar la talla adecuada, cuando por fin la encontró, comenzó a buscar colores que le agradaran, como estaban a buen precio decidió comprar cinco, pues ese sería el primer y último día que usaría el de Nekoma, Kenma se disponía ir a pagar los pans cuando Kagami llamo su atención.


- Deberías de ir a probártelos antes de que los pagues, puede ser una lata si no te quedan y luego quieres cambiarlos- Trato de disuadir a Kenma.


- Es de mi talla así que no creo que sea necesario- Kenma había puesto un pequeño puchero.


- Bueno las tallas a veces pueden venir más pequeñas o más grandes, bueno digo, pero si no quieres...- Fue interrumpido por Kenma.


- Esta bien, pareces mi mamá- Se dirigió a regañadientes hacia los probadores y solo se mediría uno.


Cuando entro se percató de un pequeño detalle, era la primera vez que entraba a un probador sin que su madre estuviera insistiendo que lo hiciera, pues cada vez que iba a comprar ropa con Kuroo, este no le decía que se lo probara ni nada, espabilo sus pensamientos y se probó el pans de arriba, como era de esperarse era la talla correcta, salió del vestidor con los pans y se dirigió a la caja, una vez pagados ambos se dirigieron a la tienda de deportes, ahí Kenma busco un traje de baño completo, Kagami de nueva cuenta insistió que se lo probara, era negro con detalles rojos y amarillos, a Kagami se le hacía similar al que Makoto usaba, solo que con la diferencia que el de Makoto tenía verde y azul, ambos creyeron que era el indicado, así que Kenma solo busco unos googles y un gorro a juego, pago y por indicación de Kagami fueron a cenar dentro del centro comercial, fueron en busca de Ramen, cuando terminaron se pusieron en marcha directo a la universidad, el silencio le comenzó a molestar un poco a Kagami, así que comenzó a hablar.


- Has gastado bastante dinero en estos días, ¿crees que te sea suficiente para tu estancia en Tokio? - Kagami pensaba que podía prestarle dinero si lo necesitaba.


- Si, había ahorrado bastante por si tenía una emergencia, así que tengo algo más de dinero, sin embargo, mis padres han abierto una cuenta de banco para que me transfieran dinero a esa cuenta, por el momento podre sobrevivir a la perfección con el dinero que tengo aquí- Refiriéndose a todo el mes que estuviera fuera de casa- Ya cuando regrese a casa, mis padres me darán la tarjeta que deba usar, sin embargo, tendré que pagar un hotel los fines de semana.


- Los fines de semana, ¿por qué? - Kagami no entendía, pues podía quedarse en el campus.


- Nos dijeron que por el momento no podemos estar en los dormitorios los fines de semana, bueno al menos hasta que entremos a clases normalmente, así que tendré que buscar un hotel cerca- Kenma parecía bastante pensativo ante este hecho.


- Bueno quizá sea un atrevimiento de mi parte, pero si quieres puedes venir conmigo a casa- Kagami tenía teñidas las mejillas de un rosa pálido- Bueno, si tú quieres, no gastarías dinero como en un hotel y yo no me sentiría solo.


- No creo, no quiero causar molestias, ni tampoco quiero que tus padres se enojen- Kenma ahora era quien tenía teñidas las mejillas.


- No va a ser ninguna molestia, vivo en un departamento, se suponía que mi padre viviría conmigo, pero no paso, además no me molestaría tener compañía, siempre he vivido solo desde que llegue aquí, bueno salvo que mi profesora llegue de visita, te ofrezco mi departamento de todo corazón para que pases el fin de semana, bueno los fines de semana que vayas a necesitar un lugar donde quedarte- La verdad no le caería mal un poco de compañía, bueno alguien que no fuera Himuro, pues se la pasaba vigilándolo todo el tiempo que estaba fuera de la universidad.


- Muchas gracias, pero...- Kenma fue interrumpido por Kagami antes de que pudiera denegar la invitación.


- No digas nada, piénsalo, de verdad no hay problema de que vayas a mi casa, además no pienso hacerte nada, ya quedo claro que no soy un asesino ni un acosador- Esto último lo dijo con unas pequeñas carcajadas.


- Voy a pensarlo, pues lo último no me ha dejado tan convencido- Al igual que Kagami trato de no darle importancia, así que sonrió un poco, provocando en Kagami un pequeño sonrojo.


Es así que ambos siguieron su camino de vuelta hacia la universidad, al día siguiente fue la misma rutina, fueron a desayunar, Kagami fue al salón donde le tocaba hacerla de tutor y Kenma fue directo a su salón donde tomaba su curso, al salir como era de esperarse Kagami estaba esperando a Kenma afuera de su salón, fueron a comer y se dirigieron hacia las canchas de tenis, si no mal recordaba Kenma ese era la especialidad de Ryoma, así que creía que ese día harían ahí la actividad, cuando ellos llegaron Ryoma ya los esperaba con raquetas, además de que ya estaban todos, Ryoma comenzó a dar algunas instrucciones, sabía que si empezaba a dar toda la teoría se llevaría todo el tiempo y no jugarían, es así que cada uno tomo una raqueta y se emparejaron con alguno de los presentes, no era de sorprender que los primeros fueran Yuuri y Wolfram, le siguieron Kagami y Kenma, Gaara y Endou, por ultimo Ryoma y Makoto que eran los únicos que faltaban por emparejarse, Ryoma pregunto que si querían juegos individuales o por parejas, optaron por un juego por parejas y otra ronda individuales, se rifaron los turnos, las primeras parejas en pasar fueron Ryoma/Makoto y Gaara/Endou, el partido fue muy entretenido pues Endou al principio chocaba constantemente con Gaara, pero las cosas no fueron distintas con Ryoma, pues Makoto veía hacia donde se dirigía la pelota sin percatarse que Ryoma venía a su encuentro, todos estaban conteniendo la risa, sabían que si se reían, Ryoma los regañaría, pues para él, el tenis representaba algo muy importante, no era de esperarse que Ryoma y Makoto ganaran, por otro lado sabían que Gaara no le hablaría a Endou en un largo rato, además de los choques lo había tirado dos veces; al fin era el turno de las siguientes parejas, Wolfram y Yuuri no eran distintos de las otras parejas, empezaron a chocar entre si haciendo que perdieran varios puntos, por otro lado la sorpresa que causo la pareja de Kagami y Kenma, fue porque tan solo en los primeros cinco minutos habían chocado varias veces, sin embargo también fue motivo para que se acoplaran perfectamente, es por eso que terminaron ganándole a Wolfram y Yuuri, al final Kenma y Kagami se enfrentaron a Ryoma y Makoto, está por demás decir que Ryoma y Makoto ganarían, pero Kenma y Kagami solo quedaron abajo por un par de puntos.


Las siguientes rondas fueron rifadas nuevamente, primero fue Gaara y Endou, en esta ocasión Gaara le dio una paliza a Endou, que incluía, no solo el haber ganado sino que también varias pelotas en la cabeza y estómago, los siguientes fueron Makoto y Ryoma, es obvio que aunque Makoto dio su mejor esfuerzo no pudo hacerle frente a Ryoma, luego fue el turno de Yuuri y Wolfram, a pesar de ser pareja se notaba bastante el espíritu de pelea en ambos, termino con la derrota de Yuuri y eso solo a un punto de Wolfram, Yuuri tropezó y no había podido golpear la pelota, la última pareja fue la de Kenma y Kagami, en este caso la contienda fue bastante reñida, pues Kenma tenía unos reflejos excelentes, por otro lado Kagami era bastante alto esto hacia que las pelotas que fueran en dirección hacia su cabeza las podía regresar fácilmente, sin embargo el ganador fue Kenma, por ultimo volvieron a rifar los lugares entre los que habían ganado, en esta ocasión Wolfram se enfrentó a Ryoma, dando como vencedor a Ryoma, por otro lado la pelea entre Kenma y Gaara no fue bastante fácil, la flexibilidad que Gaara poseía gracias a los años de entrenamiento de taekwondo lo hacía más flexible y un tanto más rápido, sin embargo Kenma no se dejó ganar, por primera vez estaba disfrutando de estar cerca de otras personas, además de que se sentía muy bien el estar ganando cada juego, fue por lo mismo que derroto a Gaara, era la hora de enfrentarse a Ryoma, en un principio Kenma temió demasiado el enfrentarse a Ryoma, pero conforme el juego pasaba, la confianza y la seguridad de Kenma aumentaba más, los de afuera de la cancha percibían cierta desesperación por parte de Ryoma, a la opinión de Ryoma, Kenma quizá no les había dicho que jugó tenis en su infancia, porque para él, tenía un muy buen nivel de juego, contra todo pronóstico Ryoma termino ganando por los pelos, pero una cosa paso ese día, Ryoma sabía que Kenma era un muy buen oponente.


Después de que todos descansaron, comenzaron a recoger todo y limpiar, Ryoma había pedido la cancha prestada gracias a que era parte del club de tenis, pero no por eso le iban a dejar todo a él, es así que se apresuraron a arreglar todo para que fueran a descansar, pues muchos de ellos estaban seguros que no se podrían levantar al día siguiente, decidieron despedirse y todos se fueron en parejas o simplemente solos, por otro lado Kenma y Kagami aún se dieron el lujo de ir a cenar, a pesar de todo y de que no lo demostrara, Kenma se había divertido bastante, también podía asegurar que no se levantaría de la cama al día siguiente.


Ya que habían cenado, se dirigieron de nueva cuenta a la universidad, Kagami acompaño a Kenma hasta su edificio y se despidió de él, por otro lado Kenma decidió darse un baño rápido e ir a dormir inmediatamente, al día siguiente fue la misma rutina, levantarse ir con Kagami a desayunar, entrar a curso, salir de curso he ir a comer, luego irían al parecer al gimnasio, parecía ser que en esa ocasión le tocaba impartir la  "clase" a Gaara, no fue mucho esperar a que se formaran las parejas, se emparejaron como el día anterior y en este caso, el compañero de Gaara recibiría una buena golpiza, pues Endou había sido un poco torpe el día anterior con Gaara, en esta ocasión, Gaara se las cobraría, es así que empezó la inducción a lo que en sí, era el taekwondo, se pusieron las protecciones debidas y empezaron a entrenar con lo que les decía Gaara, algunos tenían mas destreza que otros a pesar de todos practicar deportes no les fue sencillo el movilizarse tan rápido, así estuvieron por un largo rato, pararon cuando todos estuvieron cansados, una vez más decidieron ayudar a recoger todo para irse más rápido, cada quien se despidió y se fue por su rumbo, solo había una cosa en la que Kenma pensara en ese momento y no se hizo esperar salir a la luz dicho asunto.


- Oye Kozume, ¿has pensado en lo que te dije?, ¿o vas a irte a un hotel? - Kagami preguntaba, por qué él se iría esa misma tarde, no le había propuesto ir a cenar a Kenma porque si lo convencía era mejor una cena en casa.


- No lo había tomado en cuenta hasta ahora, la verdad no sé- Kenma sabía que Kagami le insistiría, pero él no quería ser una molestia, por otro lado, no podía gastar más dinero del que tenía, así que tenía que racionarlo, estaba en una encrucijada grande.


- Ya te dije que no es molestia, primera estoy solo en casa todo el fin de semana y me vendría bien compañía y segunda mis padres no están así que no creo que les moleste que vengas a pasar el fin de semana, es más, aunque estuvieran no creo que les molestaría que vinieras- Kagami iba a empezar a convencerlo, sabia en la situación en la que Kenma estaba y no quería dejarlo a su suerte, no es como que no tuviera dinero, sino que el ser nuevo en la ciudad era bastante peligroso y por otro lado si estuviera en la escuela se quedaría tranquilo, pero no era el caso.


- Ummm, no lo sé, no quiero ser u...- Kenma no termino de decir su frase pues Kagami lo interrumpió.


- Ya te dije que no es ninguna molestia, para pronto, me sentiría más tranquilo que vinieras conmigo, aun no sabes andar por Tokio tu solo y me da pendiente que andes solo- Kagami demostraba genuina preocupación por Kenma, era un amigo que acababa de hacer y no quería que le pasara algo.


- Esta bien, pero con algunas condiciones, yo comprare mis cosas, ya sea para aseo personal como de mi ropa y te ayudare con los gastos de las comidas, quizá no sea el mismo pago que haría en un hotel, pero no quiero estar de gratis en tu casa, ¿estamos de acuerdo? - Kenma le extendió la mano a Kagami para cerrar el trato.


- Hay Kozume, eres un caso especial, pero si eso te hace estar más cómodo, pues no se diga más, te espero en la entrada de la universidad en media hora, estamos a tiempo de tomar el tren así que apresúrate, nos vemos- Con esto salió en dirección a su edificio para empacar sus cosas.


Kenma imito la acción de Kagami, solo que él estaba más cerca de su edificio, cuando llego estaba indeciso, podía decirle a Kagami que siempre no iría, pero sabía que la culpa lo iba a matar así que se armó de valor y empaco todo lo que tenía en su habitación, bueno no es como si la tuviera llena, aun así tomo su maleta y se dirigió a aprisa hacia la entrada, ahí se encontraba su decano así que firmo y se fue sin decirle nada, empezaba a caerle mal, pensó que lo que le decía Kagami eran bromas pero al tratarlo esa semana, sabia porque a Kagami y a muchos otros no les caía bien, al salir de su edificio se dirigió corriendo hacia la entrada de la universidad, ya iba tarde y pensaba en lo que Kagami le había dicho de que estaban a tiempo de tomar el tren, así que si era cierto irían corriendo por su culpa, cuando llego se notaba muy agitado, así que Kagami lo vio un tanto extraño.


- ¿Que te paso? - Le pregunto de forma divertida.


- Lo siento, se me hizo tarde, espero no sea tarde para irnos- Kenma decía algo apenado.


- No te preocupes vamos bien de tiempo, así que no era tan necesario que corrieras- Esto hizo sentir a Kenma un tanto tonto, pues en verdad pensaba que ya iban tarde.


Ambos se encaminaron directo a la estación del tren, Kenma por lo menos reconocía el camino, estando a punto de llegar Kenma paro en seco, recordó por lo que estaba en Tokio y una vez más se le aguaron los ojos, esto no pasó desapercibido por Kagami.


- ¿Que tienes?, ¿te pasa algo? - Decía un Kagami bastante preocupado.


- Ah nada, solo recordé algo, lo siento- Kenma había vuelto a la realidad, esperaba que Kagami no lo cuestionara más, no tenía ánimos de hablar de eso.


Kagami dejo pasar el tema, a pesar de que quería ayudar a Kenma, prefirió darle su espacio y no indagar, y cuestionar lo ocurrido; cuando estuvieron frente a la taquilla Kagami fue a comprar los boletos y Kenma espero cerca de ahí, cuando Kagami le entrego el boleto a Kenma, el vio el costo, así que inmediatamente le pago a Kagami, por el contrario Kagami le lanzo una mirada de disgusto, pero cambio su semblante inmediatamente, sabía que no lo haría de cambiar de opinión, así que si eso lo hacía estar cómodo no le diría nada; el transcurso en el tren fue silencioso y rápido, bajaron en la estación que Kagami había indicado y al parecer de Kenma se dirigían al apartamento de Kagami.


Después de caminar un poco pararon en una tienda donde compraron lo necesario para una cena sencilla, caminaron un poco más, ya se encontraban enfrente de un edificio grande, Kenma lo identifico como una unidad habitacional, Kagami le indico que ahí vivía y se dirigieron a la entrada de la edificación, al entrar había una pequeña recepción donde se encontraba en ese momento una joven que saludo animadamente a Kagami, por otro lado Kenma solo dijo un buenas noches y se limitó a seguir a Kagami, pararon en frente del ascensor, Kagami comenzó a apretar el botón para que bajara, mas sin embargo no hizo nada el dispositivo.


- Jaja otra vez se descompuso el ascensor, tendremos que ocupar las escaleras, yo opino que deberían de cancelarlo, se ahorrarían mas si ya no le dan mantenimiento al ascensor- Kagami había empezado un monologo, pues Kenma solo se limitó a oír a Kagami y seguirlo.


Ambos se dirigieron al tercer piso Kagami busco en su bolsillo las llaves, después de ubicar la entrada de su departamento, abrió la puerta dándole paso a Kenma.


- Bienvenido a mi pequeña morada, espero y te sientas cómodo- Espero hasta que Kenma pasara para hacer lo mismo él.


- Gracias, con permiso-  Kenma paso y se comenzó a quitar los zapatos en la entrada.


- Yo no soy mucho de decir "estoy en casa", "he vuelto" o cosas por el estilo, no hay alguien del que pueda esperar respuesta- Después de cerrar la puerta imito la acción de Kenma.


Kenma se sintió mal con las palabras que Kagami le había comentado, él no se consideraría capaz de vivir solo; Kenma se limitó a estar ahí esperando a que Kagami pasara primero, cuando por fin lo hizo vio un lugar bastante amplio, en la sala se encontraba una repisa con varios libros, una sala pequeña, una mesa de centro y algunas plantas, más al fondo había un comedor y algunos otros muebles, una televisión y a la vista también se identificaba el lugar donde estaba la cocina, un lugar a simple vista amplio.


- Bueno Kozume esperó y te sientas en casa, ven- Kagami lo guio por un pasillo cerca de la sala, lo recorrieron y se encontraron con las habitaciones- Este departamento cuenta con dos habitaciones así que tú te quedaras en esta- Le abrió la puerta que estaba frente a ellos- Si necesitas algo por la noche o algo así la mía es esa- Le señalo la de al lado- Y este es el baño- Ahora le indicaba la puerta de enfrente de donde Kenma dormiría.


- Gracias, espero no ser una molestia- Kenma se inclinó un poco en forma de agradecimiento.


- No agradezcas, te lo dije es un gusto poder ayudarte, instálate- En ese momento se adentró junto a Kenma a la habitación.


Kagami empezó a sacar algunas sabanas y cobijas que le sirvieran a Kenma en su estancia ahí, Kenma sentía pena, pues Kagami era el anfitrión, pero ahí estaba Kagami ayudándole a tender la cama, después de eso se dirigieron a la cocina.


- Creo que me daré un baño- Kenma le advirtió a Kagami- ¿Puedo usar tu baño?


- Claro, adelante, mientras haces eso yo preparare la cena- Kagami revisaba los ingredientes que habían comprado y que utilizarían ese día.


- Me iré a bañar, pero antes de eso te ayudare a hacer la cena, quizá no sepa de como calcular los ingredientes, o medir la cantidad de especias, pero puedo ayudarte a picar, al ser hijo único le ayudaba siempre a mi mamá a cocinar, bueno a picar lo que se podía picar, así que dime en que te ayudo y me pondré a hacerlo- Kenma se dirigió a la tarja e inmediatamente se lavó las manos.


Enseguida Kagami le paso lo que tenía que picar y lavar, como cenarían curry las papas y zanahorias fueron los ingredientes elegidos, Kenma los lavo y seco, inmediatamente comenzó a picarlos.


- Vaya, así que no me mentiste, sabes picar muy bien- Kagami le había dado un cumplido.


- Gracias, pero no creo que sea gran cosa, yo solo te ayudare a picar y a pagar parte de la cena, tu eres el que hará gran parte del trabajo, y dime, ¿quién te enseño a cocinar? - Kenma empezó a hablar de más.


- Bien...bueno...la verdad mis padres nunca estaban en casa, cuando era pequeño me cuidaban las niñeras, en estados unidos es muy común en familias donde los padres son profesionistas y eso, cuando me pude valer por mí mismo, más o menos a la edad de ocho años, fue cuando comencé a cocinar, en un principio eran cosas sencillas para no complicarme tanto, luego le perdí el miedo a cocinar y me volví mas ágil en la cocina, desde entonces se cocinar, nadie me enseño para pronto- Kagami realmente no podía estar enojado con sus padres por no estar con él, ellos hacían lo que les gustaba y él entendía la situación, pues sus padres trabajaban en lo que les apasionaba y a él nuca le falto nada, eran unos padres amorosos y preocupados por su bienestar, así que no podía decir que los culpaba de algo.


- No quise que recordaras momentos difíciles- Kenma se sentía apenado de nuevo.


- No te preocupes, realmente no son momentos tristes, ellos quizá no han estado mucho conmigo, pero cuando lo están siempre aprovechan el mayor tiempo que se pueda para estar conmigo- Kagami le dijo todo esto en un tono tan cálido que Kenma solo atino a estar contento.


- Yo iré a bañarme, permiso- Dejo los utensilios en la tarja y se dirigía hacia el baño, cuando Kagami lo detuvo.


- Hay champú y jabón en el baño que puedes utilizar- Le dijo.


- Gracias, pero traje mis cosas- Kenma se limitó a contestar y a ver la cara de Kagami que parecía molesta.


- Contigo no se puede jajaja- Kagami dejo escapar un resoplido.


Kenma se encamino hacia donde se encontraba el baño, después de un rato salió y se encontró con un aroma bastante rico, pero antes de ir a la cocina junto a Kagami, paso al cuarto que se le asignó a arreglarse un poco, cuando por fin lo hizo, se fue directamente hacia la cocina, llevaba un pans y una playera, además de una sudadera y una toalla sobre sus hombros, cuando entro a la cocina, vio a Kagami frente a la estufa y vio como le movía a la cacerola que tenía enfrente, cuando Kagami se dio cuenta de la presencia de Kenma comenzó a hablar.


- La cena ya está casi lista, es bueno que ya hayas salido del baño- Seguía muy atento a lo que estaba haciendo.


- Si, pero tú no te has bañado y debes también de estar cansado, ¿porque no me dejas terminar la cena y tú te vas a bañar?, cuando salgas ya estará un poco fría y estará lista, ¿qué te parece? - Kenma veía fijamente a Kagami para que volteara a verlo.


- ¿Estás seguro? - Solo vio un asentimiento de parte de Kenma cuando se giró a verlo- Esta bien, deja que hierva un poco más, muévelo un par de veces y espera 5 minutos después de que haya empezado a hervir, lo apagas y ahora que terminé emplatamos y comemos, ok- Después de eso dejo a cargo a Kenma.


Kenma por su parte se limitó a seguir las instrucciones de Kagami, cuando por fin ocurrió todo lo que le dijo Kagami apago todo y se sentó en un sillón de la sala, espero a que Kagami apareciera, lo cual no tardó mucho en pasar.


- Quedo lista la cena- Fue más una afirmación que pregunta- ¿Y por qué no te pusiste a ver tv? - Kagami pregunto a Kenma que estaba sentado en el sillón frente a la tele.


- Porque no es mi casa y no tengo permiso- Kenma solo escucho unas carcajadas por parte de Kagami.


- Pareces niño pequeño, te lo dije, todo lo que hay dentro del departamento está a tu disposición, con toda confianza- Kagami le mando una pequeña sonrisa que hizo que Kenma se sonrojara esto lo oculto rápido pues había agarrado el control de la tv y había empezado a cambiar canales en cuanto prendió el aparato.


Después de ese momento Kagami le pidió ayuda para servir los platos con el curry, fue una cena bastante amena, pasaron al comedor donde había otra tv y la prendieron, comenzaron a ver basquetbol y luego vieron vóley, y terminaron viendo un documental sobre los volcanes, después de eso levantaron los platos y los lavaron, estaban cansados, pero aun así por idea de Kenma se pusieron a jugar videojuegos.


- ¿Cuáles tienes? - Pregunto Kenma.


- Puedes buscar en la estantería de haya mientras yo conecto la consola- Kenma se dirigió a donde Kagami le dijo.


- ¿Este videojuego es tuyo? - Había tomado un videojuego sobre futbol.


- Si...bien...pues ese videojuego me lo regalo Kuroko cuando éramos novios- Trato de recomponerse pues su mirada reflejaba tristeza, pero en cuanto cruzo miradas con Kenma trato de restarle importancia al asunto.


- Bien que tal si jugamos este- Había tomado un videojuego sobre carreras de autos así le restó importancia al asunto.


Habían jugado una hora y ambos estaban ya muy cansados así que optaron por irse a dormir.


- Deja todo, ya mañana recogeré....recogeremos- Corrigió pues Kenma lo estaba viendo mal- Solo hay que desconectar todo y listo, adelántate yo enseguida voy.


Kenma se fue directo a su "cuarto" a buscar su cepillo de dientes, su pasta y su vaso, se dirigió al baño y cuando salió se encontró con Kagami en la puerta, le dijo buenas noches y se fue al cuarto, en cuanto se metió a la cama tomo su celular y le hablo a sus padres.


- Hola mamá, ¿cómo han estado? - A pesar de que le hablaba todas las noches no sabía ni como comenzar con la conversación.


- [Hola hijo, nosotros estamos bien, ¿y tú como has estado?]- Escuchaba a su mamá bastante relajada a comparación de otras veces.


- Yo estoy bien mamá, estoy en casa de un amigo, como no nos podemos quedar en los dormitorios de la universidad, el me invito a quedarme con él el fin de semana- Kenma lo dijo despreocupadamente.


- [A si, ¿quién es?, ¿lo conociste en la escuela?, ¿seguro que estas bien?]- Kenma comenzaba a sentirse temeroso de lo que iba a decir y preocupar a su mamá.


- Se llama Taiga Kagami, es de la universidad y lo conocí el día que llegué a la universidad, es de segundo año y está en la carrera de derecho y él me estuvo apoyando esta semana, me ofreció también su casa para que me quedara- Trataba de decirlo lo más casual que podía.


- [Kenma cariño, ¿y estas seguro que es de confianza?, digo ¿no le temes que solo te haya llevado a su casa para hacerte algo? - El tono de voz de su mamá se estaba alterando.


- Mamá...mamá, es un chico bueno, si me quisiera hacer algo ya lo hubiera hecho, la diferencia de fuerza es muy dispareja, además no creo que quiera hacerme algo, él le paso lo mismo que a mí, también fue engañado y sabe que es lo que se siente, además dice que a él le hubiera gustado que alguien lo ayudara en su situación- Kenma sentía un nudo en la garganta al recordar todo lo sucedido con Kuroo.


- [Confiare en lo que me dices Kenma, pero si pasa algo no dudes en llamarnos, tampoco quiero que andes incomodando a los padres de tu amigo]- Sonaba un poco más tranquila.


- Bueno ahí si no te prometo nada...- Kenma iba a empezar a decir el por qué cuando su madre lo regaño.


- [Kenma Kozume, nosotros no te hemos enseñado a ser grosero en una casa ajena, así que no es momento de empezar a...]- En ese momento fue interrumpida por Kenma.


- Mamá no es que no quiera respetarlos, más bien mi compañero vive solo, dice él que su padre debería de vivir con él, pero pues por una u otra razón no se queda con él- Kenma trataba de sonar convincente.


- [Ya lo vez, más a mi favor, están solos, no hay supervisión...]- Fue interrumpida una vez más por Kenma.


- Mamá eso no importa, él es muy respetuoso, me ofreció su departamento de todo corazón- Kenma había quizá pasado la prueba más difícil.


- [Bueno Kenma, confiaré en que estarás bien y que tu "amigo" se quedara al margen, ¿tienes dinero aun?]- De un tema paso a otro la madre de Kenma.


- Si mamá, también por eso me invito, esta semana he gastado bastante dinero y si me quedaba en un hotel hubiera gastado aún más, Kagami me dijo que no me preocupara y me invito a su departamento, y quiera o no, la verdad me ha dado una gran ayuda- Kenma ahora estaba un poco más tranquilo.


- [Procura no causarle molestias, trata de ayudar en lo que puedas y trata de hacer tus cosas rápido, cuando vuelvas vamos a darte la cuenta que abrimos y la tarjeta, te fuiste antes de que pudiéramos decirte sobre la cuenta]- Kenma sentía mas como si no fuera a regresar.


- La verdad le he ayudado a hacer algunas cosas, le ayude a preparar la cena, también he comprado mis cosas para aseo personal y para lavar mi ropa, ya que no me quiere cobrar algo así como renta, le he ayudado a comprar las cosas para la cena, mañana pienso ayudarle a hacer el aseo del departamento y pienso pedir prestado su cuarto de lavado, por el dinero no te preocupes, traje bastante y no te preocupes en reponérmelo, de una u otra forma lo iba a gastar- Aunque pensaba gastarlo en una escapada con Kuroo- Si es necesario traje algunas cosas que puedo vender, aquí en Tokio hay varios compradores de estos artículos- Era verdad, cuando Kenma vendía alguna de sus pertenencias, como videojuegos o figuras de colección, la mayoría de sus clientes vivían en Tokio, así que le quedaría más cerca.


- [Esta muy bien Kenma, debes de estar cansado y yo aquí con mi interrogatorio, por cierto, ¿cómo te fue con tu actividad deportiva hoy?]- Todos los días Kenma les hablaba a sus padres y en cada ocasión le comunicaba lo que había hecho ese día y lo que quizá haría al siguiente día.


- Me fue bien mamá, estuvimos practicando taekwondo, fue bastante entretenido y también cansado- En eso soltó un bostezo y su madre entendió solo una cosa.


- [Es mejor que descanses cariño, te dejo para que puedas descansar, espero verte pronto, pórtate bien]- Extrañaba mucho a su niño, pero no haría que regresara para que sufriera de nuevo.


- Adiós mamá, despídeme de papá- Lo dijo ya un tanto dormitando.


- [No te preocupes, tu papá ya te escucho, estábamos en altavoz]- Kenma escucho un adiós con la voz inconfundible de su padre, luego de eso solo escucho un pitido que significa que la llamada estaba finalizada.

Notas finales:

Espero les esté gustando, nos seguimos leyendo en el cap que sigue.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).