Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

No es un sueño (yuri on ice) por laraila

[Reviews - 20]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Bueno gente, adivinen… logré decidirme por un punto intermedio… sumando las rv de aquí y de la otra página (fanfiction y amoryaoi) daban casi 50/50 así que bajé un poco la cantidad de drama de la primera opción, e incorporé partes de la segunda… espero que les guste el mix medio raro que quedó, ustedes me dicen que opinan :D

También, debí decirlo antes, pero en este AU Rusia no es un país tan homofóbico, en cambio Japón sí que lo es

 

Yuuri 15 años.

- me gusta patinar, pero no me dedicaría a eso competitivamente

- ¿no? ¿Y qué quieres hacer?

- mi mayor sueño en poder hacerle clases a niños, tal vez alguno de ellos ame este deporte tanto como yo, y si pudiera transmitir este sentimiento aunque sea a uno de ellos, sería inmensamente feliz.

- es un lindo sueño Yuuri, pero no me gusta ver tanto talento desperdiciándose.

- gracias, Akihiko, pero no me agrada el ambiente competitivo

- te amo omega mío, te apoyo en todo

- yo igual

Solo se habían conocido hacía unos meses, pero así es el amor adolescente. Hoy era el día en que Yuuri les diría a sus padres que había encontrado a su destinado, estaba algo nervioso, ya que Akihiko era hombre, y Japón no era un país precisamente tolerante, a pesar de estar en el maldito siglo XXI.

- Yuuri, yo no apruebo esto – dijo su padre, un alfa potente, emitía un aura de rey a su alrededor – tú te vas de mi casa y te alejas de mi hijo – le dijo a Akihiko – y tú, o vuelves a casa o te vas con él, pero si te vas no vuelves – le dijo a Yuuri con una mirada seria.

- yo me voy por hoy – dijo Akihiko antes de que Yuuri tomara alguna decisión apresurada – hablamos luego

El joven alfa de 17 años, cabellos castaños, ojos verdes, piel algo morena, manos fuertes y sonrisa tranquila, había llegado a la vida de Yuuri diciéndole que era su destinado en un cálido día de primavera, en poco tiempo, se enamoraron el uno del otro, y no querían separarse.

La reacción de la familia de Akihiko no había sido mucho mejor.

- vámonos a Rusia – le dijo al día siguiente por teléfono

- ¡no podemos hacer eso!

- sí que podemos, tú ya tienes 15 años y ganaste beca allá para poder patinar, mientras estás en eso y con las clases a los niños, yo puedo trabajar.

Discutieron un poco, y finalmente, el joven Yuuri ciego de amor, fue con él. Con los ahorros de ambos, pudieron quedarse en una habitación de estudiantes, en el piso de abajo vivía un tailandés del que se hicieron amigo rápidamente, se llamaba Pitchit, pero algo incomodaba a Yuuri

- akihiko… ya estamos viviendo juntos, y dijiste que somos destinados ¿por qué no me marcas? Soy omega, no puedo saber realmente si somos destinados o no hasta que me marques.

- es muy pronto, prefiero hacerlo cuando seamos ambos mayores, cuando estemos más cerca del día de nuestra boda ¿no confías en mí?– le dijo mientras lo atraía hacia él y se acurrucaban en el sofá como cucharitas

- ¿boda?

- sí, será hermosa, nuestras familias probablemente no quieran ir, pero tus amigos de la pista sí, y los míos del trabajo también. Nos pondremos trajes blancos hermosos, y te compraré un ramo para que vayas hasta mí. Pitchit será el padrino.

- y vicchan llevará los anillos – le respondió Yuuri imaginándose la escena al lado de la persona que amaba. Se dio media vuelta para quedar frente a frente, y lo besó. Por mucho que pasaban las semanas, Yuuri no aprendía a besar bien, y nunca habían pasado más allá de masturbarse el uno al otro, aunque Yuuri tenía claros sus sentimientos, Akihiko no quería dar “el siguiente paso”.

Un día, ESE DÍA, fueron juntos a dar un paseo al parque forestal, eran hectáreas y hectáreas de belleza natural, pero como esto era Rusia, si bien no eran los meses más fríos, igualmente había que tener cuidado con la ropa que llevarían, y buenos zapatos para la nieve y el barro.

Yuuri había hablado con su mejor amigo Pitchit acerca de sus inseguridades en su relación, pero este le insistía en que estaba todo bien, que seguro cuando tuvieran más confianza el uno con el otro avanzarían más.

- es hermoso, gracias por traerme – le dijo Yuuri a su novio mirando el hermoso paisaje del lago congelado, con los árboles blancos por la nieve del día anterior. La zona de picnic era relajante y silenciosa, a pesar de estar en uno de los momentos con más visitas al lugar.

No hubo respuesta, lo miró para ver en que se fijaba akihiko ya que su actitud era bastante extraña, y vio a una chica, omega, de cabellos rubios y ojos verdes, piel pálida con un abrigo rosa claro. Akihiko la veía como si se la fuera a comer en ese mismo instante.

- ¿akihiko? – le preguntó algo temeroso

- la encontré – fue todo lo que dijo

Yuuri empezó a correr, no sabía exactamente a dónde, pero una pisada en falso, y cayó sobre el hielo, si bien hacía muchísimo frío, la capa de hielo era algo frágil, el agua fría empezó a inundarlo, tragó muchísima agua, y unos pedazos de hielo que hicieron estragos en su garganta. No podía respirar, no sabía qué era arriba y qué era abajo. Poco a poco, el frío dejó de molestarlo, sintió una fuerza que lo arrastraba fuera de ese lugar, pero no recordaba más. Su cuello dolía, tosió sangre y hielo, y luego todo era obscuridad.

Bip

Bip

Bip

Sus párpados pesaba, su cuerpo dolía, su cabeza lo mataba, y su garganta estaba seca.

- Yuuri, ¡despertaste! – le dijo su amigo pitchit, tenía grandes ojeras, sospechaba que había estado ahí varias horas. Intentó levantarse pero Pitchit lo detuvo.

- no te levantes todavía, voy a llamar al doctor, fue un feo accidente.

Yuuri intentó llamarlo, pero ningún sonido salía de su garganta, como si la fuerza que usaba en su garganta simplemente no hiciese sonido alguno.

- bueno Yuuri, ha estado varios días inconsciente, pequeños pedazos de hielo entraron por su vía respiratoria y bucal, tuvimos que sacarlos, pudimos salvar los pulmones y bronquios por completo pero sus cuerdas vocales…

Pequeñas lágrimas empezaron a salir, ¿se quedaría así para siempre?

- Yuuri, no hay nada que hacer, pero pudo ser peor.

El doctor le dio una libreta y un lápiz, sería la primera vez que usaría ese nuevo método de comunicación para él, y haría una pregunta que afectaría su corazón y mente de ahora en más.

- ¿dónde está akihiko?

Pitchit pensó por un minuto en no decirle la verdad, pero no iba a ser capaz de hacer algo así

- la chica que conoció era su destinada, fue con ella a Japón a presentársela a sus padres, al parecer la había visto en redes sociales, pero necesitaba ayuda para venir y buscarla.

Yuuri miró por la ventana, su padre había sido claro, si se iba con Akihiko, no podría volver.

- yuuri – le dijo animadamente Pitchit – de ahora en más somos tú y yo, te apoyaré en todo, aprendamos a hablar nuevamente ¿sí? ¡Los niños de la academia están esperando por ti! Ya han estado una semana sin clases

Pitchit tenía razón, si era por el patinaje, y por su amistad. Podía intentarlo otra vez, ahora con más cuidado.

OOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO

“debí darme cuenta de que mi omega interior no había despertado cuando estaba cerca suyo” se regañó Yuuri a sí mismo

- no es tu culpa para nada, los omegas no tienen manera de saber quién es su destinado

“ahora es tu turno” le dijo esta vez con señas también, cada día era más fácil para el ruso entender el lenguaje de Yuuri, y solo necesito ayuda en tres partes de la historia. Como estaba lesionado y solo podía hacer ejercicios básicos, tenía mucho tiempo libre para aprender.

Se encontraban en un café, habían pasado un par de días desde su última conversación en el parque, decidieron que para evitar nuevos malentendidos, se reunirían a hacer exactamente esto, hablar acerca de ellos.

OOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO

Víctor Nikiforov, 5 años

Por primera vez había tocado una pista de hielo, apenas lo hiso, se cayó hacia atrás, fue tan patético que su amigo no pudo evitar una pequeña risita

- ¡no te rías!

- es que fue divertido – le respondió Cris, quien ya era capaz de patinar con fluidez

Se paró tambaleante, y logró mantener el equilibrio. Con un par de minutos de práctica, logró lo más básico… deslizarse sin caerse.

7 años

Le pidió a su madre que lo inscribiera a clases de patinaje, iba allí una vez por semana.

- hoy logré hacer un doble Axel, y también…

- espérame un segundo – le dijo su madre, quien prestaba atención a su computadora. Víctor se quedó mirando su plato de carne y arroz. Pasaban las 10 de la noche, y su padre no volvía. Casi nunca volvía antes de las 1 de la mañana.

8 años

“si gano una competencia, entonces mis padres me felicitarán. De seguro harán mi plato favorito. Yakov también estará feliz por mí”

12 años

Victor Nikiforov, ganador de las nacionales rusas junior. Joven promesa del patinaje artístico.

- felicitaciones mi amor – le dijo su madre mientras le entregaba un regalo

- estamos orgullosos de ti – dijo su padre

- en dos meses empiezan las eliminatorias a la copa Asia, la primera es en china, cuando estemos allá

- no podremos acompañarte hijo

- mamá y papá tienen cosas que hacer, pero te llamaremos, además de que Yakov, Yuri plisetsky y Cristopher estarán contigo.

- hace años que no veo a Cris, volvió a su país hace mucho

- ¿de veras? Entonces irán con ambos, en una de esas te reencuentras con tu amigo de la infancia.

- eso espero – dijo desanimado

“tal vez si llego a competencias más importantes”

Un mensaje interrumpió sus pensamientos

“soy yakov, ¿vamos con Lilia a celebrar tu medalla? Te daré un descanso de unos días antes de empezar a entrenar otra vez” eso lo reanimó

15 años

Ya había entendido que sus padres jamás le prestarían atención, a pesar de haber ganado el grand prix Junior. También había entendido por qué su padre siempre llegaba tarde en la noche, no era difícil adivinar que tenía una amante. El aire en esa casa era cada vez más pesado, y con 15 años, decidió irse.

¿Su mejor refugio? El patinaje, obvio, lo amaba con su vida. pero no puede vivir allí

¿Entonces a dónde? Yuri plisetsky estaba en una situación similar, por lo que ambos fueron recibidos por Yakov y Lilia.

¿La razón? Conocían la historia de ambos, y Lilia jamás podría tener hijos, por lo que decidieron hacerse cargo de esos chicos de 15 y 8 años.

Víctor no guardaba rencor al patinaje, se notaba que a pesar de las dificultades amaba ese deporte, y Yakov, a pesar de su mal genio, compartía su amor, lo animaba y apoyaba en todo.

Durante su adolescencia, ese amor crecía cada día más. A pesar de tener poca experiencia en la vida, era capaz de transmitir sentimientos hermosos a todos sus espectadores, sin embargo, nunca compartió esos sentimientos con nadie. No es que no confiara en las personas. Yakov, Lila, Yuri siempre habían estado con él, y estarían dispuestos a escucharlo, pero si por casualidades de la vida, justo cuando él se acercara, ellos se iban, él no sabría cómo lidiar con eso.

“no sabría qué hacer si me ignoraran una vez más”

18 años

Los padres de Víctor finalmente se separaron, cada uno tenía su propio amante, y se fueron por su lado, Víctor era mayor de edad, por lo que ambos le dieron algo de dinero para que se comprara un buen departamento y se marcharon. De vez en cuando le mandan un mensaje:

“feliz cumpleaños” “buen año nuevo” “felicidades por tu nueva medalla”

Víctor decía con confianza que su verdadera familia estaba en la pista, pero no se abría a nadie por completo. Amaba estar con todos ellos. Pero todos esos sentimientos que solo expresaba bailando en el hielo empezaban a agobiarlo ¿qué podía hacer si patinar no era suficiente para descargarse?.

Dicen que la soledad es un buen lugar para reflexionar, encontrar respuestas y caminos, pero muy malo para quedarse.

Con el tiempo, el patinaje no era suficiente, y cada vez se encontraba menos sentido a su vida. Entrenar, hacer coreografías, sorprender a todos con un truco bueno, y así llegó el día en que conoció a Yuri, cuando se preguntaba ¿hay algo en mi vida además del patinaje?

OOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO

- soy el tipo de persona que sabe salvarse sola, pero no soy nada de bueno con los sentimientos de los demás, por eso, por favor esforcémonos juntos en esto ¿sí?

Yuuri miró a los ojos azules de Víctor, asintiendo feliz por lo que le decía.

- Te llevo a tu casa

Durante el camino ambos estaban pensando acerca del otro. Víctor no podía creer que alguien se haya aprovechado así de Yuuri, siendo que era tan dulce y lindo, con justa razón se le hacía tan difícil entrar en su pequeño y cálido corazoncito. Yuuri por su parte, no podía creer que los padres de Víctor no se dieran cuenta de lo increíblemente talentoso que era en el deporte, cuando patinaba Yuuri no podía apartar sus ojos de la pantalla de lo increíble que era, quería abrirse a Víctor, y que él lo hiciera también.

- Yuuri

Y este lo miró para dar a entender que estaba prestando atención. Víctor se armó de valor, para finalmente decir:

- te amo – yuuri no lo podía creer, es decir, estaba bien porque él también lo amaba, pero… y si… - así que por favor…

.

.

.

“Yo también te amo Víctor” señas que no pasaron inadvertidas por el alfa

OOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO

- estoy seguro de que Víctor si es tu destinado, solo hace falta recordar su mirada asesina cuando te fui hablar hace unas semanas en medio de su cita

“creo que sí, tal vez…”

- ¿pasó algo?

Yuuri se avergonzó frente a su amigo, y tímidamente le dijo con sus manos temblorosas

“Me dijo que cuando empiece el verano, me llevaría de vacaciones, y que entonces me…”

- ¿¡te va a marcar?! ¡Estoy feliz por ti Yuuri!

“yo igual” – le dijo con una tímida sonrisa “pero no dejo de estar nervioso”

OOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO

Víctor caminaba nervioso por las calles frías “tal vez me adelanté demasiado en pedírselo… ¡es que es tan hermoso! Y si pasa otro celo solo, y un alfa ve que no está marcado ¡podría pasar lo peor! Quiero que sea mío cuanto antes pero, cuando se lo pedí, más que feliz, se veía asustado, aunque al final aceptó. Entiendo que desconfíe, lo que pasó con ese tal akihiko… maldito akihiko, lo golpeó muy fuerte”.

Mientras cruzaba una calle, justo al frente suyo se detuvo el amigo alfa de yuuri… “ese tal… ¿cómo se llamaba? ¡Pitchit!”

- hola, soy pitchit, amigo de Yuuri, nos conocimos hace un par de semanas

- si me acuerdo – respondió de mala manera, no es que quisiera serlo, es que simplemente era un alfa que vivía con su omega no reclamado, y si bien Yuuri le había dicho que solo era amistad y confiaba en él, ¿quién le decía que no hayan pasado aunque sea un celo de Yuuri juntos? Pero debía detener esos pensamientos. Detenerlos y confiar.

- voy a ser breve – le dijo sin ser agresivo, pero firme – Yuuri lo pasó mal suficiente tiempo si no vas en serio…

- voy en serio con él

- eso espero, pero hay una cosa que creo que no sabes, es su grave complejo de inferioridad, dale la seguridad que necesita, porque si vuelve llorando por tu culpa, despídete de él.

- acaso…?

- sé lo que estás pensando y no, nunca nos hemos acostado, pero encontré a mi destinado, y me tendré que ir de donde vivo con Yuuri pronto, por lo que tendré que confiártelo, y advertirte. A pesar de lo que pasó, el corazón de Yuuri sigue siendo cálido, y si tú lo enfrías, no te lo voy a perdonar.

El tailandés empezó a retirarse del lugar, pero Víctor, más que enfadado por haber sido desafiado, estaba feliz de que en su ausencia, alguien bueno haya cuidado de su amor.

- no te preocupes – le dijo a unos pasos de distancia, y retomó su camino.

Notas finales:

inserte en las revies candidato a omega para pitchit XD


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).