La recuperación de sus heridas tardó algunas pocas semanas, pero Black ya no fue a visitarlo y eso lo puso muy triste, en cambio el que si fue era su vecino Katana, a quien ahora veía más atractivo que antes
Casi eran amigos, conversaban y pasaban las horas juntos, cuando Hajiki recuperó la movilidad completa del brazo se pusieron a jugar videojuegos, pero el siempre perdía y eso ponía muy contento a Katana.
Un día llegó Black por fin a visitarlo, Hajiki se puso todo contento, su amigo lucía radiante y feliz y eso lo tenia de buenas
—Perdona que no viniera pero salí de viaje
—No te preocupes amigo —sonrió feliz de verlo ahí.
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Katana llegó a casa de Hajiki y lo recibió su mamá toda contenta porque ya lo consideraba como muy amigo de su hijo
—Hola señora
—Hola Katana —saludo amable
—Vine a visitar a Hajiki de nuevo —dijo sonriendo un poco
—Muy bien, pero mi hijo tiene visita, sube de una vez si quieres
—Una visita —repitió —Y ¿de quién se trata?
—Es Black
Oír apenas ese nombre le hizo hervir la sangre, pero fingió frente a la señora
—Subiré de una vez
—Está bien —dijo y se alejó a la cocina
Katana subió con cuidado, no quería que se dieran cuenta que él estaba ahí, se colocó junto a la puerta del lado del pasillo
—Te ves muy contento ¿a qué se debe? —preguntó Hajiki a su amigo que estaba sentado en la cama junto a él
—Estuve pensando mucho desde tu accidente —dijo serio —Y me di cuenta de algo muy interesante amigo
—Dime ¿de qué se trata?
—De esto —dijo con voz dulce y se acercó a él, lo agarró de la barbilla y juntó los labios con los de él
Al otro lado Katana miró con los ojos bien abiertos, pero más abiertos los tenía Hajiki, súper sonrojado y todo tímido no fue capaz de corresponder el beso, a pesar de que tuvo tantos años aquella fantasía
Para Katana fue demasiado y no aguantó aquello, así que se alejó con cuidado, pero cuando salió de la casa se agarró corriendo desesperado, con las lágrimas a punto de salir. Black se dio cuenta que no recibía respuesta y se alejó, preocupado
—Hajiki ¿Qué sucede? —preguntó angustiado —Creí que yo te gustaba —dijo confundido, eso lo sorprendió más al otro
—Tú ¿Tú lo sabías?
Avergonzado Black bajó la cabeza y dijo que si con ella, Hajiki se sonrojó por completo
—Eso creí, que estaba enamorado de ti, pero ahora que me has besado, ya no lo sé
—No entiendo cómo es eso posible —dijo enojado, se sentía ofendido
—Es que
Se detuvo porque no encontraba las palabras, pero es que ahora se sentía más atraído por Katana que por su mejor amigo, él era ahora solo como su amor infantil
—Hay alguien más que me gusta y creo que lo que siento por él es mucho más fuerte —confesó determinado, Black sintió mucha tristeza y se levantó de la cama
—Creo que me tardé demasiado —dijo triste
—Perdóname, si esto hubiera pasado hace dos meses
—Tú no tienes la culpa, es mía por perder el tiempo con mujeres que solo me aportaban vanidad, debí darme cuenta antes —lamentó a punto de llorar
—Black
—Te amo Hajiki, espero seas feliz con esa otra persona —Adiós
—Espera
Black salió corriendo de ahí con las lágrimas mojándole todo el rostro, Hajiki también lloró por haberlo provocado, pero su corazón ahora pertenecía a Katana y tenía que decírselo
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Hajiki estaba recuperado completamente, pero hace días que no sabía nada de Katana, lo intentó llamar por celular pero nunca contestó, su mamá tampoco sabía nada porque la última vez que lo vio fue aquel día. Hajiki supuso que de alguna forma se enteró de lo que pasó porque fue ese mismo día y su mamá le dijo que él estuvo ahí pero jamás fue visto por él
—Estoy seguro que me vio con Black, debió malinterpretar todo
Triste por todo lo que pasó se deprimió mucho, ya no quiso volver a la escuela y comía poco, su mamá y su hermana estaban muy preocupadas.
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Una semana después
Hajiki salió por fin de su casa y fue a la escuela, aunque estuvo todo triste y serio, no habló con sus amigos de siempre, ni siquiera con Black que ahora lo evadía, solo apenas lo veía cerca, lo saludaba con la mano y se largaba, aun lleno de dolor por el rechazo del hombre que amaba
Cuando acabaron las clases y volvió a casa pasó por el parque, ahí se detuvo al ver a Katana, estaba en un árbol, acorralando a un chico con el que se besaba. Aturdido Hajiki soltó su mochila y esta cayó en el suelo llamando la atención de los dos que se besaban
Katana se giró y se miraron a los ojos, Hajiki temblaba de ira y dolor
—Katana —suspiro angustiado
—Ah, eres tú —dijo sin emoción, el otro lo agarró del cuello de la camisa y lo jaló para que volvieran a besarse
— ¡Idiota! —gritó adolorido y se fue corriendo
Katana apartó al otro chico aunque protestó y se giró para ver la espalda de Hajiki, la mochila quedó en el suelo y la miró fijo
—Oye, continuemos —dijo con sonrisa morbosa, pero Katana lo empujó
—Ya me aburriste —insultó mirándolo feo, el otro chico se ofendió mucho más
—Canalla —abofeteó a Katana y se marchó
—Hajiki —suspiró acercándose a la mochila para juntarla
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La casa estaba sola y Hajiki se tiró en la cama a llorar con fuerza, nadie iba a oírlo llorar así por alguien que no valía la pena
—Soy un tonto, rechacé a Black por lo que sentía por Katana y me arrepiento —gritó amargamente, las lágrimas caían fuerte sobre su rostro
El timbre de la casa no le importó y lo dejo sonar y sonar, mientras las lágrimas le cubrían la cara y le inundaban el corazón
En la ventana se oyó un ruido, unas piedritas, Hajiki miró y se enojó porque no lo dejaban sufrir a gusto esos vagos de la colonia
—Ya ¡Dejen de joder! —gritó asomándose por la ventana, pero quien estaba abajo era Katana, eso lo sorprendió
— ¡Ábreme! —gritó serio
—Vete de aquí bastardo —respondió enojado, cerrando la puerta fuerte
— ¡No me iré hasta que hablemos!
Hajiki meditó un poco y se decidió, así que bajó y abrió la puerta, Katana tenía la mochila en la mano y la dejó caer al suelo
—Así que solo veniste a traer eso —dijo con tristeza
—No —contestó sin emoción
Pero Katana estaba decidido, se acercó a Hajiki atrevido y sujetándole el rostro lo besó en la boca, al principio Hajiki se sorprendió, pero luego poco a poco sus manos se agarraron a la cintura de Katana y le respondió el beso
Se estaban besando suave y los dos entregados, lo que sentían era mutuo, no como cuando Black lo quiso besar y él se quedó paralizado
Terminaron su beso y se miraron a los ojos, los dos estaban sonrojados
—Te quiero —confesó Katana y eso puso muy feliz a Hajiki, ahora las lágrimas eran de total felicidad
—Yo también te quiero
Sonriendo felices por haberse confesado volvieron después a abrazarse. Hajiki ya no tenía duda alguna, le gustaba Katana mucho más de lo que alguna vez le gustó Black, a él sí lo quería y deseaba estar con él por siempre, seguro a eso llamaban verdadero amor. Katana siempre gustó de Hajiki pero ahora aquello se volvió un sentimiento verdadero de amor y estaba seguro de que así sería para siempre.
FIN