CAPÍTULO 19: “CITA PERFECTA (Parte 1)”
PARA TODO EL MUNDO ese era un día más, pero no para él, no para Ryeo Wook. Cada Lunes él tenía una cita con el traumatólogo y posteriormente con un terapeuta para sus ejercicios. Así habían sido durante los últimos 2 meses de su vida, mismos meses que habían pasado desde su accidente. Él siempre trataba de evadir sus terapias bajo cualquier pretexto posible, pero nunca daban resultado.
DR –“¿Ryeo Wook?” – habló el hombre con bata, pero Ryeo Wook parecía ensimismado en su propio mundo –“Ryeo Wook, ¿puedes escucharme?” – tocó su hombro un par de veces y sólo así logró que Ryeo Wook lo mirara.
R –“¿Sí?”
DR –“No estás poniendo atención, ¿estás bien?”
R –“Estoy bien, ¿ya puedo irme a casa?” – preguntó esperanzado.
DR –“No hemos terminado aún”
R –“Da lo mismo, nada ha cambiado de cualquier forma, ¿puedo irme?”
SR. KIM –“Hijo, no seas insolente” – reprimió el padre del joven, pero sólo rodó los ojos y dirigió su vista hacia la ventana.
DR –“Ryeo Wook, esto es importante. Necesito que me digas si puedes sentir esto” – el médico pasó una varita metálica sobre la planta de su pie, él esperaba que hubiera alguna respuesta, pero Ryeo Wook no se inmutó –“¿Sentiste eso?” – el joven miró al médico fijamente.
R –“¡No!” – gritó –“¡No puedo sentir absolutamente nada!” – sus ojos empezaron a arderle y a brillar por las lágrimas –“¿Por qué si quiera sigue haciendo eso? ¡Nada ha cambiado, no puedo sentir nada y tampoco puedo caminar! ¡¿Por qué no sólo me dice que jamás volveré a caminar?!”
SR. KIM –“¡Basta ya Ryeo Wook! El médico está tratando de ayudarte”
R –“Pues no está haciendo un buen trabajo”
SR. KIM –“¡Kim Ryeo Wook!” – gruñó el padre del chico –“No te comportes como un chiquillo malcriado”
R –“¡Quiero irme! ¡No quiero estar aquí! Este maldito lugar sólo me recuerda que me he convertido en un inútil y que nunca más volveré a caminar”
DR –“No he dicho eso” – agregó el médico, paciente y tranquilo –“Tu accidente fue serio, y tus lesiones bastante graves; es lógico que tu recuperación se lleve tiempo”
R –“Han pasado 2 meses, y ni siquiera puedo sentir dolor. ¿Cuánto más debo esperar?”
DR –“Tanto como sea necesario” – respondió sin titubear –“Ryeo Wook, tu situación es reversible, pero necesito que también pongas de tu parte y asistas a tus terapias y sigas mis indicaciones. ¿Cómo planeas recuperarte si ni siquiera quieres venir a terapia?” – Ryeo Wook secó sus lágrimas y miró el médico.
R –“Está bien, está bien. Haré lo que me pide, pero, ¿podríamos terminarlo aquí por hoy?”
DR –“De acuerdo, vamos a detenernos aquí, ¿prometes que la próxima semana vas a traer otra actitud?”
R –“Sí, lo que sea” – dijo no muy convencido.
DR –“Muy bien, terminamos entonces” – giró hacia un par de enfermeros –“Por favor, ayúdenlo para que pueda irse” – enseguida escribió algo en su expediente –“Señor Kim, ¿puedo hablarle un momento?” – ambos hombres se alejaron unos cuantos metros, lo suficiente para que Ryeo Wook no pudiera escucharlos.
SR. KIM –“¿Pasa algo?”
DR –“En realidad sí, pasa algo muy serio” – su rostro mostró pánico, pero intentó mantener una postura neutral –“Clínicamente no hay una explicación por la cuál Ryeo Wook aún no haya recuperado la sensibilidad en sus piernas. Si bien su lesión fue seria, él ya debería ser capaz de sentir algo, cualquier cosa”
SR. KIM –“¿Eso qué significa?”
DR –“El propio Ryeo Wook es quien no desea recuperarse, creo que está en una profunda depresión y eso bloquea cualquier progreso que podamos tener. La depresión es una enfermedad muy peligrosa porque clínicamente no hay síntomas como tos o dolor, es algo que a veces ni siquiera el propio paciente sabe que padece”
SR. KIM –“¿Qué sugiere?”
DR –“Sugiero que busque ayuda profesional pronto, conozco un buen psiquiatra que puede ayudar a su hijo”
SR. KIM –“¿Psiquiatra dice? ¡Mi hijo no está loco!” – gruñó bajito, pero con los dientes apretados.
DR –“Señor, no dije eso. La situación de su hijo es bastante delicada, y le sugiero que no tire por la borda lo que le acabo de decir, la depresión puede llevar incluso a un suicidio si no se atiende a tiempo”
R –“Ya estoy listo, ¿podemos irnos?” – agregó Ryeo Wook desde su silla de ruedas.
SR. KIM –“Dame un segundo, hijo” – el hombre mayor se acercó al médico –“¿Podría pasarme ese contacto, por favor?” – el medico asintió comprensivo y rodeó su escritorio.
DR –“Él es buen amigo mío, sólo dígale que consiguió su número conmigo y él lo ayudará” – el padre de Ryeo Wook tomó la tarjeta que le ofrecía y la guardó rápidamente en su bolsillo.
SR. KIM –“Gracias, doctor”
DR –“No hay problema. Hasta pronto Ryeo Wook” – el joven sólo le dedicó una mueca.
SR. KIM –“Vamos, hijo” – cuando ambos estuvieron fuera del consultorio, Ryeo Wook suspiró aliviado.
R –“Al fin” – murmuró. Avanzaron por el pasillo hasta llegar al vestíbulo del hospital, donde se detuvieron –“¿Por qué te detienes? Vamos a casa ahora, por favor”
SR. KIM –“Espera un momento Wook, debo agendar una cita” – Ryeo Wook rodó los ojos y cruzó los brazos, pues lo último que quería era permanecer más tiempo del que era necesario. Esperó lo que para él fueron horas y decidió que ya no podía seguir ahí. Desesperado, él mismo manejó su silla de ruedas rumbo a la salida; ahí podría esperar a su padre hasta que terminara lo que sea que fue a hacer.
R –“En dos meses ya soy un experto en manejar esta horrenda silla” – gruñó. Hábilmente maniobraba y la silla de ruedas avanzaba, aunque un poco lento para su gusto –“Sólo un poco más” – se dijo a sí mismo. Aplicó un poco más de fuerza y la velocidad aumentó. Finalmente logró salir del hospital, entonces notó que de igual manera había demasiadas personas para su gusto, así que decidió continuar hacia el auto de su padre. Había avanzado un par de metros más, cuando muchas personas empezaron a atravesarse frente a él bloqueando un poco su camino –“¡Genial!” – gruñó. Decidió tomar otro rumbo y maniobró su silla de ruedas, pero no contaba con que también había personas detrás de él.
YS –“¡Cuidado!”
R –“¡Ah!” – gritó Ryeo Wook cuando sintió un leve tirón de su silla. Giró el rostro encontrándose con un chico delgado, alto y muy guapo sosteniendo su silla. Al principio quedó impresionado por ese chico, pero después frunció el ceño.
YS –“¿Te encuentras bien?” – preguntó el chico, pero sólo recibió un leve movimiento de cabeza como respuesta.
HC –“Lo lamento, no te vi”
R –“Está bien” – dijo sin mostrar mucho interés –“Debo irme, ¿podrías soltar mi silla?”
YS –“¿Quieres que te ayude a llegar a algún lado?”
R –“No, yo puedo llegar solo, simplemente necesito que sueltes mi silla”
YS –“De acuerdo” – Ye Sung soltó la silla, sonrió y extendió su mano –“Yo soy Ye Sung, ¿cuál es tu nombre?” – Ryeo Wook miró la mano, pero no la tomó; en su lugar frunció el ceño, tomó las ruedas de su silla y empezó a avanzar para alejarse. Había avanzado muy poco cuando, sin saber exactamente por qué, decidió detenerse y mirar sobre su hombro.
R –“Mi nombre es Ryeo Wook” – gritó y entonces siguió avanzando.
-DÍAS DESPUÉS-
EL RELOJ MARCABA las 3 de la tarde cuando Hyun Joong entró a su casa. Su madre lo estaba esperando ansiosa y con una enorme sonrisa en el rostro. Le hizo señas de que no hiciera ruido y señaló las escaleras.
SRA. KIM –“Hice todo tal como pediste y Saeng no debe tardar en bajar, por supuesto no sabe que estás aquí” – ella guiñó un ojo y después se acercó para besar en la mejilla a su hijo –“Bienvenido, hijo” – la mujer trató de quitarle la maleta que Hyun Joong llevaba en las manos.
L –“Está pesada, yo la llevaré”
SRA. KIM –“Saeng no debe tardar, así que yo lo haré” – Hyun Joong accedió y le dio su equipaje –“¿Quieres sorprenderlo? Puedes ocultarte en el estudio y yo te avisaré cuando Saeng este aquí”
L –“Gracias por ayudarme, mamá”
SRA. KIM –“Cuando quieras, cariño” – respondió emocionada. Hyun Joong se dirigió al estudio mientras su madre escondía su equipaje. Poco después Young Saeng bajaba las escaleras vestido con un traje ajustado y una corbata a juego. Su cabello lo dejó un poco alborotado, pero eso no le quitó elegancia a su atuendo.
S –“Tía Kim, estoy listo” – la mujer apareció y abrió la boca en cuanto lo vio.
SRA. KIM –“¡Dios mío, pero qué guapo estás!” – exclamó mientras se acercaba.
S –“Gracias tía” – respondió apenado –“¿Ahora sí puede decirme a dónde vamos?”
SRA. KIM –“Pronto lo sabrás. Espera aquí, voy al estudio por mi celular que olvidé y enseguida nos vamos”
S –“De acuerdo” – Young Saeng se sentó en uno de los sillones mientras la observaba alejarse. Casi enseguida su celular empezó a sonar y sonrió cuando leyó en la pantalla que era un mensaje de su esposo.
‘Luces muy bien en ese traje’
Young Saeng frunció el ceño y tecleó de vuelta.
‘¿Cómo lo sabes? Ni siquiera puedes verme’
Un nuevo mensaje llegó casi enseguida.
‘Aunque no necesito verte para saber que luces hermoso, ahora mismo mis ojos me confirman lo hermoso que luces con ese traje. ¿Por qué no miras detrás de tí?’
Y así lo hizo. Cuando Young Saeng vio a Hyun Joong no podía creerlo, así que saltó del sillón y corrió hacia él para abrazarlo y de esa forma asegurarse de que no estuviera alucinando con su esposo.
S –“¡Ay por Dios, Hyun! ¡En verdad estás aquí!” – exclamó mientras se colgaba de su cuello y lo besaba en la mejilla.
L –“Hola, mi amor” – Hyun Joong envolvió con sus brazos a Young Saeng.
S –“Hola. Creí que llegarías en la noche, ¿por qué no me avisaste que llegarías antes?”
L –“Quería darte una sorpresa”
S –“Me alegra que estés aquí, y que ese congreso terminara más pronto de lo planeado” – Hyun Joong hizo una mueca y se encogió de hombros inocentemente.
L –“Bueno, en realidad decidí salir de ahí y regresar un poco antes. Resulta que te extrañaba demasiado y pedí permiso para regresar por mi cuenta apenas terminaran todas las exposiciones, y aquí estoy”
S –“¡Oh, Hyun! Yo también te extrañe mucho”
L –“¿Y sabes algo? También regresé porque quiero cumplir esa promesa que te hice. Hoy vamos a tener esa cita que tanto habías deseado” – Young Saeng mordió su labio.
S –“Entonces, ¿el evento importante del que me habló tu madre era esta cita?”
L –“Sí, y de hecho debes estar preparado. Ya que yo estaba de viaje y no tuve tiempo de prepararlo todo, fue ella quien se encargó de organizar la cita, así que sólo Dios sabe que ideas se le hayan ocurrido a esa mujer” – Young Saeng echó a reír divertido, a Hyun Joong en realidad no le pareció nada divertido.
S –“Estoy ansioso por averiguarlo”
LA SEÑORA KIM observaba atenta cómo la parejita se marchaba feliz hacia su cita. Si bien ella había sido la encargada de todos los preparativos, Hyun Joong había sido el autor intelectual de cada paso del itinerario; aún así estaba demasiado emocionada imaginando cuán contento estaría Young Saeng.
SR. KIM –“Cariño, ¿qué observas tan detenidamente?” – preguntó su esposo.
SRA. KIM –“Mira eso, nuestros bellos hijos” – dijo enternecida. Junto en ese momento Hyun Joong había abierto la puerta del auto para que Young Saeng entrara, no sin antes darle un beso fugaz sobre sus labios por supuesto.
SR. KIM –“¿Sabes a dónde van?”
SRA. KIM –“Hyun preparó una sorpresa para Saengie, yo le ayudé a organizarlo todo”
SR. KIM –“¿Tú? ¿Hyun Joong permitió que tú te involucraras en esto?”
SRA. KIM –“¡Claro! Incluso él mismo me pidió ayuda” – respondió con orgullo.
SR. KIM –“¡Dios mío! ¿Qué se le habrá ocurrido a esa cabecita tuya, mujer”
SRA. KIM –“A mí nada, todo fue idea de nuestro querido hijo”
TRAS UNA HORA de conducir, la pareja al fin llegó a su destino, un teatro ubicado a las afueras de Seúl. No era muy conocido, o muy grande, pero ese fue el teatro donde estaba exhibiendo ‘esa’ obra especial. Young Saeng estaba ansioso, pero estaba demasiado feliz como para arruinar el momento con preguntas. Cuando el auto se detuvo observó alrededor y notó las luces del teatro, algo que le extrañó un poco.
S –“¿Vamos a ver una obra? No tenías que manejar tanto, pudimos ir al teatro de Seúl”
L –“Bueno, sí, pero en Seúl no están presentando la obra que yo quería ver contigo”
S –“¿Cuál?” – Hyun Joong señaló el letrero más grande, el cual exhibía la obra estelar del teatro –“¿Goong?”
L –“Así es, Goong” – a Young Saeng le tomó un par de segundos comprenderlo.
S –“¡Oh! Esa es la obra que vimos juntos hace un tiempo”
L –“Así es, y sé que querías verla de nuevo”
S –“¡Oh Hyun! Esa obra es muy especial para mí porque fue la primera ‘cita’ que tuvimos; quiero decir, la primera vez que salimos juntos… solos”
L –“Lo sé” – Hyun Joong se acercó y rozó los labios de su esposo –“Y sólo para que lo sepas, yo también considero ese día como nuestra primera cita, por eso no me importaría verla cien veces si es contigo”
S –“¿Cómo supiste que quería verla?”
L –“Eso es un secreto que te revelaré esta noche, cuando todas las sorpresas que tengo para ti se hayan revelado”
S –“¿Quieres decir que hay más?”
L –“Mi amor, no tienes idea”