Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

El Ángel Malvado por RozenDark

[Reviews - 49]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

¡Hasta que por fin pude lograr terminar de escribir el capítulo!

 

En verdad, lamento muchísimo haberme tardado, cuando se supone que debí de haber terminado la historia en diciembre xD

 

Pero bueno, he aquí el antepenúltimo capítulo, y créame que al final del capítulo, muy probablemente me quieran matar xD

 

En fin, los personajes de Naruto son propiedad de Masashi Kishimoto y los demás de mi propia autoría. La historia es basada en la película del mismo nombre, con un buen toque de RozenDark

 

Y sin más que decir, les invito a leer ^3^/

"La Maldad De El Ángel"

 

~.°.~.ღ.~.°.~

 

Naruto miraba con completo reproche a su novio. Se cruzo de brazos y sus mejillas se inflaron con gracia. Luego miró a su querida nana y esta solamente lanzó una risa divertida ante su actual situación.

 

—Teme, yo quiero ir a dar un paseo —, le dijo con indignación.

—Y yo te dije que no. Tu abuela dijo que necesitas reposo absoluto y eso es lo que vas a tener —, sentenció el varón Uchiha con seriedad, mientras cubría a su Dobe novio con una cálida y suave colcha.

 

Naruto giró su cabeza hacia un lado para dejar de mirar a ese sobre protector que tenía por novio. Si algo que el doncel rubio detestaba, era que le impidieran moverse como loco, y es que para alguien tan movido como lo era él, aquella orden médica era un total martirio.

La situación de ahora era un tanto más difícil para él. Justo después de que salieran del despacho del Hatake, Sasuke lo llevó directamente hasta el hogar de los Uchiha.

Pero no fue precisamente para que ambos se quedarán. Sasuke ya había hablado con sus padres y claro, amenazó a su padre para que le prestará la casa que tenía situada en un lugar demasiado secreto para el mundo o en este caso, secreto para todo conocido cercano y lejano a la familia. Cabe decir que el patriarca Uchiha aceptó con mucho gusto con la única condición de que lo dejaran enmendar su error.

Claro que, desde entonces, o en este caso, desde hacía ya mes y medio, Naruto, vivía con Sasuke y su nana en aquella gran casa situada en un pequeño, pero tranquilo poblado cerca de la ciudad.

 

—Pequeño, Sasuke-kun solo se preocupa por tu bienestar y por el bebé. Además de que allá afuera hace mucho frío como para que salgas —, Chiyo trato de persuadir a su muy terco niño adorado.

—Pero solo quiero ver la vista al mar, no es como si me fuera a alejar —, reclamó el rubio.

 

A Naruto lo que le interesaba en esos momentos era ver aquella panorámica vista que tenía el lugar. Después de todo, aquella casa estaba no solo bien escondida, también tenía una esplendorosa vista. Claro que el Uchiha mayor había mandado hacer todo el lugar seguro.

La gran casa no solo tenía máxima seguridad, también poseía todo lo necesario para trabajo en casa, como lo era el teléfono y el Internet, y ¿por qué no?, cable. También poseía calentador, para aquellas épocas de invierno y aire acondicionado para las épocas de calor.

Claro que a Naruto solo le interesaba ir directamente hacia el gran acantilado y observar con lujo y detalle la vista que se le otorgaba, pero Sasuke como siempre, se lo impedía, ya que era no solo peligroso, también irresponsable. Aunque quizás, el Uchiha no era tan rudo y demandante como lo hacía pensar, más cuando Naruto lo veía de aquella manera.

 

—Tú ganas Dobe, pero será mañana y solo cuando el sol esté dando calor —, respondió el azabache con seriedad.

—Naruto sonrió de manera que mostró toda su dentadura –. Trato hecho Teme.

 

Chiyo solamente se dedicaba a observar a aquella joven pareja. Ciertamente le dolió dejar aquella casa donde su niño adorado creció, pero ella misma sabía que era por el bien de Naruto y el bebé, además, así se vengaba del maldito que tanto daño le causo a su niño.

Como si hubiera sido ayer, la anciana mujer no pudo evitar recordar la cara que Minato puso cuando vio que Naruto iba en serio y había comenzado a mudar sus objetos más valiosos. Claro que en verdad le sorprendió ver que Minato había echado a Kurohi del lugar. Aunque muy dentro de ella, sabía que aquel doncel no se quedaría con los brazos cruzados, así que debía de estar muy atenta para evitar que Kurohi Uzumaki llegara uno de esos días para vengarse.

 

~.o0o.~

 

Kurohi veía con tremendo odio a aquel hombre que le había quitado todo. Para el pelirrojo, Minato solamente gustaba de restregarle la miseria en la que ahora vivía.

Con enojo y de manera cuidadosa, cerró la holgada chamarra que traía puesta, cubriendo así su abultado vientre. Lo que menos quería ahora, era que alguien supiera de su embarazo, más cuando tenía las claras intenciones de obtener aquello que Naruto le había arrebatado, al menos por el bienestar de su hijo.  

 

—Bueno Kurohi, ya cumplí con traerte la despensa mensual —, Minato se acercó con completa seriedad a su sobrino —. Aquí tienes dinero para que pases el mes, pero en caso de que necesites más, puedes llamarme al celular —, le dio un sobre blanco.

—Kurohi lo miro con odio —. Claro, solamente me das migajas de lo que en verdad merezco —, le dijo furioso.

—Minato suspiro resignado —. No voy a pelear contigo Kurohi. Esto es todo lo que tú has cosechado, además de que esta casa te pertenece por ley y derecho, y no está en mal estado, debido a que me he encargado de arreglarla como se debe en todo este tiempo, es cuestión tuya conservarla limpia y arreglada —, explicó seriamente —. Bueno, me voy. Cualquier cosa que te haga falta o que necesites, no dudes en llamarme al celular, más tienes prohibido ir a mi propiedad.

 

Kurohi apretó con fuerza las orillas de su chamarra. Maldiciendo en todos los sentidos a Minato y a Naruto por aquello a lo que le obligaban vivir.

Al ver que el rubio emprendía marcha a su auto, no dudo ni un segundo en cerrar la puerta de su ahora hogar. Pateando al final, la puerta de entrada.

 

—Me vengare… Juro que lo haré.

 

~.o0o.~

 

El resto del día pasó rapidísimo. Con ello se vino la mañana y para suerte de Naruto, aquel día estaba por demás cálido y agradable como para una salida.

Claro, se había pospuesto el paseo para ver el panorama de aquel acantilado, debido a que Itachi había llamado la noche anterior, para invitarlos a pasar el día en el lago del parque central.

Cabe decir, que, aunque Sasuke estaba renuente a aceptar, la visita de Tsunade horas antes, le había convencido de que estaba siendo demasiado paranoico y que eso solo podría enfermar y debilitar a Naruto.

Y por esa razón, ahora Naruto estaba situado frente al lago congelado del parque, lugar que la gente utilizaba en la época de invierno para patinaje sobre hielo.

 

—¡Vaya!, pensé que no vendrían —, Itachi se acercó divertido a su futuro cuñadito y a su hermano menor —. Ya saben, con eso de que mi Ototo se volvió un desquiciado paranoico que solo se dedica a decirle no a su pobre futuro esposo —, dijo con burla.

—Sasuke lo miro con odio e indignación —. Muy gracioso hermano —, murmuró molesto —. Y no soy paranoico, es solo que me preocupo por él.

—Si, si —, Itachi le restó importancia, mientras se acercaba a Naruto —. Bueno, en vista de que no puedes patinar, espero que te entretengas viendo a Daiki —, le dijo con una pequeña sonrisa, mientras le señalaba a su esposo e hijo.

 

Naruto asintió sonriente, mientras veía al esposo de Itachi y al pequeño hijo que tenían. Al doncel Uzumaki siempre le había agradado Itachi y cuando conoció a su ahora esposo, Deidara, rápidamente congeniaron.

Aunque admitiéndolo, nunca imaginó siquiera que Itachi terminará casado con un artista como Deidara, más cuando ambos parecían odiar los gustos del otro, pero bien dicen que los polos opuestos se atraen, no por nada él estaba con alguien como Sasuke.

 

—Dai-chan, ¿cómo estás? —, Naruto llamó la atención del infante. Todo con una enorme sonrisa.

—Tío Naruto —, el pequeño se acercó de manera rápida al rubio doncel Uzumaki —Yo estoy bien. Y muy feliz, porque mi papá y mi papi me van a enseñar a patinar.

 

Naruto solamente asentía alegre. Ese niño siempre le alegraba el día cuando lo veía.

El pequeño Daiki Uchiha era parecido a Itachi, desde la inteligencia y apariencia, hasta en la manera de ser. Claro, había heredado rasgos de Deidara, como el color de ojos y piel, hasta los gustos artísticos. Y eso le hacía preguntarse, ¿cómo sería su hijo o hija?, ¿se parecería a él o a Sasuke?

 

—Pues pequeño, apresúrate a aprender, porque seré un juez muy estricto y duro de convencer —, le dijo a la par que le revolvía los negros cabellos.

—Eso tenlo por seguro tío —, dijo el niño con orgullo, para después ir donde su papi ya lo esperaba con los patines.

 

Naruto solo se divertía, aun cuando no podía caminar, debido a los riesgos que su hijo podría correr, a pesar de que no estaba jugando en el hielo con su pequeño sobrino. El doncel era feliz con solo mirar a su sobrino reír junto a sus padres, o al ver como Sasuke le dedicaba toda la seguridad que un día le pidió a su padre. Pero lo que más alegraba a Naruto, era poder compartir aquella salida con su hijo, quien aguardaba de manera segura en su vientre. Lugar que de manera repentina comenzó a gruñir al sentir un dulce aroma, que causo que se le haga agua la boca.

Desesperado, miro por todos lados, hasta dar con el lugar proveniente de aquel dulce aroma. Un puesto de deliciosas y recién hechas crepas.

 

—Sasuke, quiero una crepa —, le pidió con los ojos brillosos y suplicantes, mientras señalaba el puesto algo alejado del lugar donde se encontraban.

—Sasuke miro el lugar y luego a Naruto —. Tardare un poco en regresar —, le dijo rendido.

—No te preocupes Sasuke-kun, iré yo. Tu quédate con mi niño —, le dijo Chiyo con diversión. En verdad le gustaba que Sasuke fuera así con su niño adorado.

 

Sasuke por su parte, estaba completamente apenado por dejar a la amable señora ir a comprar lo que su pareja le había pedido, pero al ver la mirada de advertencia de la mujer, suspiro con derrota y mejor se quedó a lado de Naruto, quien solo se reía de la cara de espanto que Sasuke había puesto.

 

~.o0o.~

 

Kurohi caminaba a paso rápido. Sabía que se le hacía tarde para llegar a su chequeo mensual, pero le fue imposible despegar su rostro del excusado. Maldecía las náuseas matutinas, pero agradecía en demasía que su hijo estuviera creciendo bien.

Sin proponérselo, terminó justo en el parque. Y aunque le sorprendía ver a su odioso primo en el lugar, lo odio aún más al ver como Sasuke se encargaba de cuidarlo con lujo y detalle.

Miro su vientre y no pudo evitar morder su labio inferior al recordar como el padre varón de su hijo, lo rechazo con todo y paquete.

 

—¿Por qué tiene que restregarme lo feliz que es? —, se preguntó furioso —¡Maldito seas Naruto!... ¡Ojalá tú y tu maldito engendro mueran! —, externó rencoroso aquel oscuro deseo.

 

Iba a dar marcha a su caminar, cuando vio a lo lejos a la señora Chiyo. Se fijó muy bien en el camino que ella había tomado. Tal parecía que la señora se desvío un poco de su destino y todo para ayudar a un mocoso a recuperar su pelota.

Sonrió con maldad al ver que la señora había ido a parar cerca de hielo quebradizo, y eso lo supo al ver el letrero de advertencia.

Nadie sospecharía si ella cayera por accidente, después de todo, cualquier cosa podría ocurrir y no había nadie cerca de aquella zona.

Para cuando se dio cuenta, ya estaba caminando justo hacia aquel lugar. Todo mientras sobaba su vientre. Su mirada estaba opacada por el odio y la maldad. Recordando una y otra vez como aquella señora lo trataba y en como se metía en su camino, pero el recuerdo que más sobresalía era el de ella, mostrando aquel vídeo que fue su perdición.

Llego sin ser visto por nadie, ni siquiera el niño dueño de la pelota lo vio, pues una vez recuperó su juguete, agradeció y se fue sin ver nada más que su pelota.

Se acercó hasta quedar en la orilla, sonriendo aún más al ver a la señora tratando de regresar a la orilla, todo con mucho cuidado.

Kurohi chasqueó lengua con molestia, al ver que el hielo no se había rajado ni un poco, así que decidió darle una ayuda.

 

—¡Vaya!, ¡qué mujer más amable y bondadosa! —, exclamó con sarcasmo, mientras aplaudía un par de veces.

 

La mujer viró a ver al que había hablado, y aunque al principio se sorprendió, su expresión denotaba molestia al ver a aquel doncel mal habido, justo en aquel lugar.

 

—Bueno, así soy yo, pero tú no eres alguien que me interese como para contarle nada, ni mucho menos alguien con quien quisiera convivir —, le dijo con odio —. Pero mejor ya ni hablo con gente indeseada.

 

Kurohi frunció el ceño con furia, mientras se agachaba lo más que su condición le permitía. Tomo entre sus manos cubiertas por guantes, una gran roca y la alzó lo más que pudo.

 

—¡Estas embarazado! —, exclamó Chiyo sorprendida de ver aquel gran vientre, sin tomar en cuenta aquella roca.

—Así es… Y por culpa suya mi hijo está condenado a la miseria —, le afirmo con odio, mientras alzaba por encima de su cabeza la roca.

—Chiyo se espantó al ver las intenciones del doncel, tratando de llegar a la orilla —¡NO LO HAGAS KUROHI! —, le pidió con terror.

 

Chiyo lo vio. Vio que el doncel estaba dispuesto a causar su caída al agua congelada. Lo supo cuando vio la mirada llorosa y cegada por el odio y la venganza. No sabiendo con exactitud si debía odiarlo o sentir lástima, debido a aquel vientre abultado.

Pero había algo de lo que estaba segura, si Kurohi se atrevía a asesinarla, era más que obvio que su niño corría un gran peligro.

 

—¡No te atrevas Kurohi! —, le pidió lo más calmada que pudo —. Si lo haces nada cambiará para bien y tu hijo correrá el peligro de ser separado de ti, si llegan a descubrirte.

—Kurohi sonrió sin sentir alegría alguna —¡No se atreva a meter a mi hijo!, ¡usted pagará caro por todo lo que me hizo perder! —, al decir aquello, tiro con fuerza la roca, ensanchando aún más su sonrisa, al ver como se partía el hielo.

 

Chiyo trato de llegar a la orilla, pero justo antes de llegar, el hielo a su alrededor se rompió y ella cayó al agua helada.

Kurohi sonrió al verla hundirse, pero al ver como la mujer logró nadar y agarrarse de la orilla, atino a patear su rostro, cuando está asomo. La vio con una sonrisa, hundirse de apoco y lanzó una risotada al ver que, por las bajas temperaturas, el agua comenzaba a congelarse de nueva cuenta.

Decidió que mejor se iba, y con cuidado de que nadie lo viera, siguió su camino, con dirección hacia el médico. Sobo su vientre con amor, sintiendo una enorme felicidad por el crimen que había cometido.

 

—Tranquilo mi pequeño, muy pronto me vengare de los que me faltan —, murmuró con alegría.

 

~.o0o.~

 

Naruto se estaba impacientando. Por alguna razón estaba inquieto. Miro su celular y se preocupó aún más, después de todo, la señora Chiyo ya había tardado demasiado en regresar.

 

—Sasuke, mi nana Chiyo no ha regresado —, le dijo a su novio de manera preocupada.

 

Sasuke miro la hora en su celular y asintió preocupado. La señora se había tardado casi veinte minutos.

Viró a ver hacia el puesto y se preocupó al no ver a la mujer por ningún lado. Pero algo lo alarmó demasiado, al ver a varias personas reunidas en la zona del hielo quebradizo.

 

—¿Qué habrá pasado allá? —, preguntó al aire, alarmando a Naruto sin darse cuenta.

 

Iba a ir a buscar a la mujer, pues algo dentro de él, le decía que algo malo había ocurrido y al ver la mirada de su novio, supo que Naruto también pensaba lo mismo.

Justo iba a comenzar a caminar, cuando un par de mujeres que estaba en aquel lugar, pasaba y decía algo que le confirmó lo que más temía.

 

—Escuche que la pobre mujer cayó al hielo después de ayudar a un niño a recuperar su pelota.

—Pobre señora, espero que se recupere, porque en verdad se le ve en muy mal estado.

 

Sasuke viró a ver a Naruto y se preocupó al ver la ansiedad reflejada en los azules ojos de su doncel. Como pudo llamo a Itachi para pedirle de favor que cuide de Naruto, en lo que él iba a verificar que no fuera Chiyo la mujer de la que hablaban aquellas mujeres.

Y para cuando llegó, no pudo evitar acercarse totalmente alarmado, a los paramédicos que atendían a la inconsciente mujer.

 

—¿Es usted su familiar? —, le preguntó el hombre con seriedad.

—Sasuke asintió como pudo —. Algo así —, respondió —. ¿Estará bien? —, inquirió preocupado.

—No lo sabremos con certeza, al menos no hasta llegar al hospital —, respondió el otro paramédico, mientras le colocaba una manta térmica a la mujer.

 

Todo paso demasiado rápido. Sasuke fue rápidamente por Naruto. Ambos iban en auto detrás de la ambulancia que trasladaba a la mujer, mientras que Itachi y Deidara daban aviso, no solo a los padres del Uchiha, también a la doctora Namikaze.

El día había iniciado tan bien, que ninguno podía creer como habían acabado las cosas.

 

~.o0o.~

 

—¡Felicidades!, ¡será papi de un saludable doncel! —, le dijo sonriente el doctor.

 

Kurohi sonrió con mucha alegría, mientras veía aquel monitor que le confirmaba, no solo que su bebé estaba en perfecto estado, sino que además le mostraba el género de su preciado hijo.

Después de varios días sufriendo en la inmundicia, al fin la vida le sonreía.

 

—¡Un doncel!, ¡tendré a un preciado y hermoso doncel! —, exclamó, mientras lloraba de alegría y emoción.

 

El doctor sonreía gustoso con lo que veía. Esperando que aquel doncel mejorará en la vida, pues a su ignorante mirar, un varón aprovechado había desechado a un luchador doncel al saber que venía un niño en camino.

Pero la realidad era otra. Aquel doncel no era bueno, porque mientras el disfrutaba no solo de la dicha de saber de su hijo, en otro lugar alguien sufría por su culpa.

 

—¡Prometo darte todo lo que te mereces!, mi dulce y pequeño Sora —, murmuró sonriente a su hijo no nato.

 

 

Continuará

Notas finales:

¿Qué cosas no?, tengo las malas mañas de dejar en lo mejor la historia, justo después de haber tardado en actualizar xD

 

Pero bueno, odien a Kurohi, porque se viene algo peor por su culpa Dx

 

Y bueno, aquí les voy a dejar algunos puntos de lo que va a pasar en el penúltimo capítulo…

 

. - Kurohi logra dar con la ubicación del nuevo hogar de Naruto

 

. - Chiyo queda en coma

 

. - Minato tiene que decidir entre la vida de Naruto o la de Kurohi…

 

Creo que, con lo último, las personas que ya vieron la película se imaginarán que es lo que se viene xD

 

Todo eso y más en… “La Venganza De El Ángel”

 

En fin, espero que les haya gustado y si es así y me lo hacen saber con sus hermosos comentarios, se los voy a agradecer muchísimo ;)

 

Nos leemos pronto

 

Chau chau (*_-)/


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).