Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

The Time por Ash_Ashford

[Reviews - 37]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Pensé en poner esta pequeña historia aparte de forma que se pudiera leer sin leer The Time y viceversa, pero no se puede jajaja están muy compenetrados así que aquí lo puse mejor. 

Esta historia está escrita desde el punto de vista de Monet por lo que no habrá romances geis, bueno, al menos no geis entre hombres, ya veremos si le sale parejita a Monet o no. 

A pesar de que no se vean cómo tal claro que habrá referencias y guiños a las parejas de The Time.

Los capítulos de Out of Time serán cortos y no se publicaran tan seguido, para aquellas personas que no les interese tanto. 

Espero les guste <3

Notas: “esto es un flashback”

“esto es un pensamiento”

Esto es un mensaje de texto, o algo impreso

Esto es texto normal xdxddx qué loco no?

PASEN CONTEXTO ay amo ese meme

 

Out of Time.

Capítulo 1. Contexto.

Hacía 40 años un imperio de horror había comenzado a nacer en su país.

De un lado, una profesional de la trata de personas había llegado para quedarse y del otro un prófugo de una nación al otro lado del mundo arribaba al país.

Lunes 06. Mañana.

“Se nos acaba el tiempo Monet, tenemos que apurarnos.”

Necesitaba un cigarrillo. Miles de pensamientos inconclusos y desordenados pasaban por su mente. Podía sentir el estrés haciendo que temblaran sus manos.

—Cálmate Monet, el primer paso a la derrota es el pánico. —Dijo mientras salía por la puerta trasera de su escuela. Casi ninguno de sus compañeros salía por ahí, todos eran demasiado pomposos, extraordinarios y de alta alcurnia para salir por la puerta trasera de ningún lado; mucho menos la puerta trasera de New World que daba a un estrecho, pero largo callejón donde todas las residencias y negocios vecinos (incluido el mismo New World) colocaban sus basureros.

Iba a doblar a la derecha como siempre, para seguir el largo callejón hasta salir a la calle lateral, pero escuchó ruidos a su izquierda. Paradise, claro que sí, si había algo que era esa escuela era ruidosa. No tenía ni ganas ni tiempo de inmiscuirse en problemas que no le incumbían, pero su curiosidad pudo más, siempre podía más.

Al acercarse lentamente vio que una disputa se estaba llevando a cabo. Scratchman Apoo, Kamazu Killer, dos buenos para nada hijos de buenos para nada, ninguno tenía algo que le llamara la atención. Eutass Kidd era un caso diferente: Hijo de un empresario de otro país: había llegado a la nación hacía 10 años para mantenerlo fuera del ojo público pues era hijo de una amante, sin embargo, era el único hijo de dicho empresario y por ende heredero a la corona de Eustgas, una de las empresas más grandes del mundo en el ámbito de los hidrocarburos. Los tres eran lo más cercano que Law tenía a amigos. Y eso era raro, porque Law no solía tolerar idiotas como esos. En más de una ocasión la peliverde preguntó sus motivos al ojeroso, pero nunca obtuvo respuesta.

Del otro bando de la pelea se encontraban una peliazul con lentes y un simpático niño hiperactivo, ambos de Paradise. Monkey D. Luffy, hijo del político Monkey D. Dragon y nieto de uno de los altos mandos de la marina Monkey D. Garp. Su padre era la cabeza del partido político anticorrupción más grande que se había visto en el país desde hacía 50 años, era apodado “Dragon el revolucionario” considerado como un idiota iluso por unos, o como un valiente guerrero por otros lo cierto es que Dragon era una de las personas más importantes de la nación. El hecho de que tuviera un hijo era un secreto que muy pocas personas conocían.

“Tal vez si lo ayudo, pueda acercarme a su padre” —pensó la peliverde. Tener a alguien como Dragon de su lado facilitaría las cosas.

De la peliazul no conocía el nombre todavía, pero sabía quién era. Solía acompañar a todos lados a Smoker, antes de que falleciera. Probablemente se habría convertido en la nueva presidenta del consejo estudiantil después del accidente de Smoker.

La pelea había comenzado a tener un tono desafortunado para los de Paradise: Tanto el monito como la peliazul se encontraban en el suelo.

Ayudarlos le traería problemas, pero nada que no pudiese manejar.

“Supongo que es el momento de mi gran entrada”

—¡Basta! —gritó. El pelirrojo paro en seco y se giró para ver quién era, al verla la reconoció de inmediato.

—¿Monet? ¡No te metas en esto! –Contestó el Pelirrojo, a punto de seguir con la paliza.

—No los toques –prosiguió Monet, mientras veía a ambos chicos — Yo los conozco. Son amigos míos.

—¿Y eso a mí qué?

—Que si les pones un dedo encima –dijo Monet viendo fijamente al pelirrojo mientras emitía un aura amenazante —Me encargaré de hacer tu vida más miserable de lo que ya es, Kidd.

Monet sabía que el pelirrojo estaba perdidamente enamorado de su primo. Enamorado como pocas veces había visto a alguien estarlo. Una de las contadas veces que Law lo invitó al departamento, Monet lo descubrió en la alcoba de su primo oliendo su almohada. Demasiado creepy para su gusto. El pelirrojo sabía que ella lo había visto y sabía que una palabra suya bastaría para que Law dejara de hablarle.

—Tsk, como sea. Apoo, Killer, ¡vámonos!, Law debe de estar esperándonos –dijo finalmente Kidd.

El odio entre ambas escuelas era algo tan estúpido si lo veías desde fuera: Dos escuelas odiándose sin ningún motivo, patético. Pero si lo veías más a detalle, con la cantidad de información que Monet poseía, todo tenía sentido: Dos negocios donde lavar dinero pertenecientes a los dos líderes del mercado negro del país: Kaido y Big Mom. Tenía sentido que siempre riñeran, intentando llenar de un vacío sentido de pertenencia a próximas generaciones que, si se quedaban en el país, probablemente terminarían trabajando para alguno de los dos sin darse cuenta.

Los dos adolescentes, aun en el suelo no sabían bien que hacer. Nunca jamás pensaron que alguien de New World iba a salvarlos. Monet se quedó observándolos unos segundos más y, finalmente siguió su camino como si no estuvieran.

“Sospecharan si alguien de New World es tan amable con ellos de buenas a primeras” —pensó.

—Ah, gracias –dijo Luffy torpemente mientras se levantaba. La peli-verde paró, se giró y observó detenidamente a ambos jóvenes ahora de pie.

—Casi lo olvido, se supone que los conozco, ¿Cuáles son sus nombres? –preguntó más que nada para saber el nombre de la peli-azul. Tal vez le interesaría saber que le había pasado a su noviecito en realidad.

—Soy Monkey D. Luffy.

—Y yo soy Shigure Tashigi. —Contestó segura de sí misma la peli-azul.

—Soy Monet. Harpy Monet –dijo con una sonrisa en sus labios. —Nos veremos luego, amigos ♥.

Volvió a entrar a New World. Crocodile seguramente la buscaría en cuanto se enterase.

“Fufufu veamos que tiene que decir Mr. Zero” —Pensó curiosa.

Lunes. Tarde.

—¿Qué estás planeando? —Preguntó Crocodile mientras tomaba un sorbo de su wisky.

—Ya le dije que nada señor, sólo me pareció divertido ayudarlos.

—Harpy, sabes bien que la rivalidad entre las escuelas no es sólo por las escuelas. Hay mucho en juego, si Big Mom se entera…

—Sólo tire una rosa bajo la ventana de Doflamingo mi señor. Si ayudo a algunos de sus niños de vez en cuando pensará con gratitud que estoy de su lado.

—¡¿Te crees que la estúpida Ave es tonta?!

—Fufufufu —Monet rio en voz baja al escuchar la contradicción.

—¡NO ME ESTÉS JODIENDO SABES A LO QUE ME REFIERO! —Crocodile enojado por sus propios errores era algo realmente divertido: Las venas de su frente se marcaban un poco, comenzaba a sudar, su cabello se despeinaba un poco y un leve sonrojo invadía sus mejillas. Si no fuese una mierda de persona, Monet incluso pensaría que era lindo.

—Lo entiendo a la perfección. Sé que Doflamingo no es idiota, pero no le he dado motivos para desconfiar de mí. Esto no afectará en nada, se lo aseguro.

—Más te vale. Llevas aquí tres años Monet, pero sigo sin confiar en ti. Si haces algo estúpido de nuevo te mato.

—No se preocupe, le aseguro que no se decepcionará de mí.

—Bien, necesito que hagas un par de entregas mañana, también quiero que sepas el plan para esta semana.

Ser un agente triple era cansado como el demonio. Tener que lidiar con Crocodile, Doflamingo y Sword era completamente demandante. Recordar a la perfección que dijiste a quien, cuando, donde, todas las coartas, las mentiras, además tener calificaciones lo más perfectas posibles, que Vergo ni Law supieran nada, que Aokiji siguiera confiando en ella, no cualquiera podría con esa presión. Pero ella sí. Tenía que poder. Se lo debía a Sugar.

Después de un par de horas de hablar con Crocodile el pelinegro al fin la dejo salir a comer.  Se dirigió a la puerta trasera de la escuela, quería fumar el cigarrillo que no había podido antes. Era realmente tarde para los estándares de New World, la escuela estaba prácticamente vacía.

Al lado de la puerta trasera se encontró una figura alta, esbelta, sobria y solitaria fumando un cigarrillo.

—Law ¿qué haces aquí?

—Dijiste que invitabas la comida —Monet recordó que esa mañana había obligado a Law a prometer que comerían juntos. Se sintió algo culpable por dejarlo esperar tanto.

—Bueno, a puesto a que tiene hambre. —Dijo con una sonrisa mientras sacaba la cajetilla de cigarros de su bolsillo.

—Vete al diablo —Maldijo el menor mientras botaba al piso la colilla de su cigarrillo y la pisaba. Ambos bajaron los escalones y siguieron por el amplio callejón.  —Tsk, maldición, Monet-ya, no puedo creer que Crocodile-ya te haya entretenido tanto.

—Y yo no puedo creer que tú me hayas esperado. Como sea, no entiendo porque tanto alboroto sólo por ayudar a alguien de Paradise.

De pronto escucharon el ruido de una puerta abrirse, preocupados porque fuese un profesor quien pudiera reprimirlos por estar fumando voltearon al mismo tiempo: Era la puerta trasera de Paradise, por la que salió un pequeño chico de cabello negro con una gran bolsa de basura. El chico los vio también y dejando la basura en su lugar corrió a su encuentro.

—¡Hola Moda!

—Es Monet. Hola Luffy, ¿qué haces por aquí a estas horas? —Law parecía estar observando con detalle al nuevo. Probablemente Kidd le diría de su pelea más temprano.

—Estaba cumpliendo mi castigo. ¿Quién es él?

—Es mi primo, Trafalgar Law. Law –dijo ahora refiriéndose al susodicho —este es el chico por el que Crocodile me hecho la bronca. —Law lo miró por un par de segundos. Parecía estar analizándolo muy en serio.

—Hola, Luffy-ya

—¿Luffy-ya?

—Es su forma de llamar a las personas. Mejor dime, ¿a ti también te castigaron por la pelea?

—No, que va. Me castigaron por reírme del chico nuevo cuando lo llamaron cara de chulo Shishishi, y después descubrieron que me salté la valla Shishishi.

“Saltarse la vaya… bueno ciertamente Doflamingo me dijo que algunos espías de Big Mom lo había llegado a hacer, pero no esperaba que los propios estudiantes lo hiciesen”

—Fufufufu –río Monet- tú sí que eres una cajita de sorpresas. ¿Quieres ir a cenar con nosotros? —Pudo sentir de inmediato los ojos de su primo justo en su cara, al ojeroso le ponía bastante nervioso comer con alguien que no conocía.

“Vamos Law hacer amigos no es tan malo” —pensó

Lunes. Tarde - noche.

Las horas pasaban y pasaban. El menor contaba anécdotas graciosas y Monet se reía. Su primo se limitaba a escuchar. Sabía muy bien que le echaría la bronca también cuando llegaran a casa, pero también sabía que más de una de las anécdotas de Luffy le habían hecho gracia.

Eran las 8:30 p.m. cuando el teléfono de la peli-verde sonó. Se disculpó un momento y salió del restaurant a contestar. Era Aokiji, probablemente no eran buenas noticias entonces.

—¿Qué pasa?

—Monet, te necesito lo más rápido posible, en Castaña.

—¿Estás bromeando? —La peliverde subió un poco la voz, pero al percatarse volvió a su tono normal —Estoy a hora y media de castaña y además estoy con Law. Seguramente alguien esté observándonos, sabes cómo tiene vigilado a Law.

—Dile a Doflamingo que irás a ver a Rebecca si llega a preguntarte, a Crocodile dile que fuiste a informar a Doflamingo.

—¿Y Law?

—¿Qué importa Law? No le importa lo que hagas después de comer.

—Estamos con alguien, si lo dejo sólo porque sí, sospechará algo.

—Dile que irás con Vergo entonces.

Vergo cumplía legalmente como padre de Monet y cómo tutor de Law. Se encargaba de darles el dinero para que pudieran vivir cómodamente, además de ver por su salud y con el cumplimiento de sus obligaciones. Law no solía tratar mucho con él, pero sabía que si Vergo llamaba a Monet ella tendría que ir de inmediato sin importar que. A pesar de que no hablaran mucho, cabía la mínima posibilidad de que Law llegara algún día a hablar con Vergo sobre esa repentina llamada, y entonces todo estaría jodido.

—Monet, rápido…

—Está bien. Iré a casa de Rebecca y después a Castaña.

—Enviaré a una motoneta por ti. No tardes. —Acto seguido el mayor colgó.

—Supongo que de nuevo haré la tarea en la noche. —Dijo resignada la peliverde.

Volvió al restaurant para despedirse de los chicos y después tomó un taxi a la casa de Rebecca.

La familia Riku era una muy aferrada enemiga de Doflamingo y sus negocios. Hacía 10 años el rubio había hecho caer en la ruina al patriarca Riku Dold por un contrato muy enmarañado provocando la muerte de la madre de Rebecca y el aprisionamiento de su padre. Su tía y su abuelo lograron conseguir buenos trabajos y así lograron que Rebecca entrara a New World. A pesar de en apariencia haberse resignado la familia seguía luchando por acabar con el reinado de terror de Doflamingo y así se pusieron en contacto con Aokiji.

Dos años atrás, cuando le contó a Doflamingo que se acostaba ocasionalmente con Rebecca el rubio casi cae de su escritorio de lo mucho que se carcajeó.

—Fufufufufhehehehehahhahaha —Rio ya casi sin aire —Pero cómo da vueltas la vida. Quien diría que la sucesora de la familia saldría con la antena volteada Fufufhehahaha y tan temprano. Ah, cómo pagaría porque Kyros viera como profanas a su inocente niña Fufufufufufuhehehehehahahahaha. De todas formas —Dijo componiéndose un poco— De todas formas, quiero que le pongas un ojo encima a esa familia, las pequeñas hormigas son poderosas cuando están juntas, ¿sabes eso verdad Monet? Por eso es importante aplastarlas antes.

“Aplastarlas antes ¿no? Joven amo” —Pensó mientras tocaba el timbre de la casa Riku.

Rebecca no tardó mucho en abrir la puerta.

—Hola mi amor —Bromeó cuando la menor abrió la puerta

—Hola señorita —Contestó sensualmente siguiéndole el juego.

Cuando se conocieron, Rebecca tenía 11 casi 12 y Monet 15. Si Doflamingo tuviese algo de moral le hubiera prohibido verse con alguien tan joven, pero claro que al rubio no le importaba en lo más mínimo. Así ir de cuando en cuando a casa de los Riku como tapadera se había convertido en su moneda de oro. Ahora Rebecca tenía 16 y ella 18, Rebecca realmente era hermosa, si la peliverde no la viese cómo una hermana menor seguramente intentaría algo con ella.

Ambas entraron a la casa y fueron a la habitación de la menor. Ahí guardaba varios cambios de ropa, pelucas, y demás cosas útiles para poder desaparecer un momento. Monet comenzó a quitarse el uniforme de New World para ponerse ropa de civil.

—Aokiji llamó muy de pronto. ¿Todo estará bien?

—No lo sé. Espero que nada haya pasado. Ah oye, necesito que busques información útil sobre Tashigi —La peliverde trató de recordar el apellido, pero fue imposible— Ah, mierda, olvide su apellido, pero va en Paradise, es la chica que seguía a Smoker a todos lados.

—Shigure Tashigi, sí, sé quien es. ¿Por qué importa ahora?

—Tal vez, pueda sernos de utilidad. Seguramente sigue buscando pistas sobre que le pasó a Smoker.

—Pero, no creo que sepa algo. Si lo supiese estaría muerta.

—No nos interesa su conocimiento, sino su voluntad.

La peliverde había terminado de ponerse ropa más cómoda y comenzaba a maquillarse un poco.

—Lo que le pasó a Smoker… fue horrible. —Dijo tristemente la menor mientras veía al suelo.

Hakuryo Smoker, un joven respetable con calificaciones impecables y un amplio sentido de la moral y la justicia, presidente del consejo estudiantil de Paradise y un miembro querido de la comunidad por su constante ayuda y apoyo: Había sido encontrado ahorcado en su habitación un año antes. Doflamingo no quiso decir mucho el respecto “Metió sus narices donde no debía” fue todo lo que comentó. Pero si el despiadado hombre había tomado una decisión tan drástica, a sabiendas que atraería la atención a Paradise, seguramente Smoker había descubierto algo muy gordo. Además, a partir de dicho incidente Doflamingo había cambiado su modus operandi, por lo que la investigación de Sword quedó destruida parcialmente.

—Sí, lo fue. Pero nosotros tenemos más cuidado y nos protegemos la espalda. No vamos a caer Rebecca —Dijo viendo a los ojos a la menor. Rebecca asintió con miedo.

Monet se puso una peluca negra con cabello hasta los hombros y se miró al espejo. Seguía siendo ella, pero no sería tan fácil de reconocer. Ambas chicas fueron a la sala de la casa y con esfuerzo movieron un librero; al moverlo un agujero mediano, perfecto para que una persona  pudiera atravesar quedó descubierto.

—Bueno, me voy. Recuerda si llaman me llamas de inmediato para contestar.

—Claro. Cuídate. Le llamas a Viola cuando acabe la reunión.

—Lo haré.

Al lado de la casa Riku había un edificio abandonado. Iba a ser una especie de bodega de varios pisos, pero al final por una razón u otra terminaron abandonándolo cuando terminaron la primera planta. El agujero en la sala de Rebecca conectaba a un cuarto que sería para utensilios de aseo o algo por el estilo. Una pequeña guarida con puerta que muy inteligentemente los Riku habían conseguido asegurar. Monet usaba el escondrijo para salir de la casa sin ser vista. Los teléfonos que tanto Doflamingo como Crocodile monitoreaban se quedaban en casa de Rebecca mientras ella salía a las reuniones de Sword. Aunque podía tardar más, Monet siempre intentaba no durar más de dos horas pues no le gustaba arriesgarse tanto.

Salir de la pequeña habitación era un poco riesgoso pues la puerta hacía mucho ruido y nunca se sabía cuando habría algún vagabundo merodeando el edificio. Monet quitó el seguro de la puerta y lentamente salió. Parecía no haber nadie. Volvió a cerrar la puerta y después salió a la calle que estaba a espaldas de la casa Riku y corrió calle abajo, al acercarse a un cruce con otra calle pudo ver a la motoneta esperándola.

Lunes. Noche.

Castaña olía horrible, cómo col hervida y vomito de perro, pero una vez dentro te acostumbrabas al hedor o al menos no lo mencionaban mucho para intentar ignorar su presencia.

Castaña era una horrible casa que utilizaban como depósito de diversas cosas a las afueras de la ciudad, Aokiji logró comprarla a un bajo costo sin mucho papeleo por medio de un confiable intermediario extranjero así que en lo que Big Mom y Kaido acontecía, esa casa apestosa era propiedad de un fantasma.

—Mierda Aokji, deberías limpiar esto.

—Na, sospecharían. Además, el olor le da ese toque hogareño.

—Ajá.

Caminaban por un amplio pasillo hasta que finalmente llegaron a una puerta. Se podía observar por la parte de abajo una pequeña línea de Luz.

“¿Quién estará dentro?” —Pensó la peliverde con curiosidad. Y con algo de miedo también.

Aokiji abrió la puerta y una luz más fuerte hizo presencia. Monet quedó un poco deslumbrada.

—Ararara —Dijo Aokiji para llamar la atención—Bien, ella es Harpy Monet, es nuestra espía y nuestra mejor carta. —Dijo con voz fuerte y autoritaria.

Los ojos de Monet finalmente se acostumbraron a la luz. Dentro de la sala vio a muchas más personas de las que esperaba.

—Monet, estás personas son algunos aliados con los que he estado en contacto por un tiempo. Son de fiar y nos ayudarán con nuestro cometido. Hace un año la misión se atrasó bastante, nos quedamos sin nada prácticamente pero también nos ayudó a visibilizar la causa. El joven Smoker no era parte de Sword, pero compartía nuestra sed de justicia, su muerte así cómo la muerte de muchos otros no será olvidada.

Todos los presentes eran bastante diferentes. Pero compartían la misma mirada de determinación en su rostro.

—No hay tiempo para presentaciones muy extensas, así que comencemos rápidamente —de izquierda a derecha son: Bellemere —La mujer lucía de unos treinta y tantos, tenía un extraño y pelirrojo mohicano y fumaba un cigarrillo con una sonrisa.

—Hola

—Ace —El chico se veía bastante joven, tal vez un par de años mayor que ella, cabello negro y largo y muchas pecas en el rostro.

—¿Qué hay? —Dijo despreocupadamente el pecoso.

—Drake —A él lo conocía, Drake, parte del equipo de básquetbol de New World. El pelirrojo no dijo nada, sólo la observó en silencio. —Gin — Un ojeroso con mal aspecto, quien también fumaba un cigarrillo

—Hola —Dijo secamente.

—Brook —A él también lo reconocía, era la estrella principal en una de las obras del Groove 41. Diamante había hablado bastante de él, alardeando que tenía una nueva estrella lista para exprimirle todo el dinero posible.

—Yohohoho es un gusto —Dijo sonriendo.

—Dr. Kureha —La señora parecía tener cuerpo de veinteañera, pero lo desbalanceaba con su cara llena de arrugas. También fumaba un cigarrillo.

—Hehehehehe Es un honor, mocosa.

— Saul —Un hombre grande, obeso y moreno, con una simpática sonrisa en el rostro.

—Hola señorita.

—Y finalmente, Coby. —Dijo señalando al último en la sala, un niño de unos 12 años, bajito con cabello rosa.

—Ho-hola.

Monet volteó a mirar a Aokiji confusa.

—Luego te explico. —Dijo en un susurro. —Bien, una vez todos presentados, queda concluida la nueva formación de Sword. Nosotros nos encargaremos de derrocar el terror que hace 40 años Madre Caramel y Rocks D. Xebec trajeron a esta ciudad y posteriormente Big Mom y Kaido continuaron. Comencemos entonces con la planeación.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Notas finales:

Se esperaban esos miembros en Sword? Yo tampoco.

Espero les haya gustado

Nos leemos el siguiente cap que volveremos a la normalidad


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).