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¿amor?¿es enserio? estas loco por Time Assault

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Notas del capitulo:

otro capitulo bieeeen

Llegamos casi corriendo a mi cita con el doctor, Papa, no temió acelerar un poco demás y yo de verdad sentí que iba en un rally o en una competencia de fórmula uno por que no había forma que fuera legal ir a casi 100 en plena ciudad y tampoco entendía como logro hacer que un trayecto de media hora de conducción normal fueran reducidos a solo quince, pero prefiero no saberlo, nos bajamos del auto y llegamos casi corriendo a la recepción donde la enfermera me saludo pero no tengo la energía y las ganas de recordar su nombre.

-Venimos… por el… chequeo de Amber…- Papa estaba agitado… ¿y él era el que recorrería la muralla china?

-Amber Garrido tengo cita- logre no sonar peor que mi padre y creo que mi voz sono mejor de lo esperado.

-Oh si, el doctor te llamara en breve vayan a la sala de espera- Camine hasta la sala de espera y no paso demasiado para que el doctor saliera y al ver a mi padre se sorprendió.

-Vaya, pensé que vendrías con tu querida pareja- Me sonroje, pero en eso papá hablo.

- ¿Qué pareja? – Oh verdad que Papá no sabe nada en absoluto.

- ¡No es nada! -

-Aun no lo hacen oficial, pensé que el psicólogo había hablado contigo sobre ello- ¿Ahora el doctor también es chismoso?

-Hablamos de otras cosas- ¿Por qué todos parecen querer saber sobre mi relación con Angie?

- ¿Qué psicólogo? -

-Papa luego te explico ahora podemos pasar a mi chequeo para que pueda ir y decirle a mi abuelo que puedo unirme a su rutina infernal- El doctor enarco una ceja y suspiro.

-Acompáñame Amber-

-Entonces… ¿qué tendré que hacer? -

- ¿Sabes lo que es un test de esfuerzo? -

- ¿Hay un examen que se llama así? - mire al doctor confusa.

-Si, pero primero debo hacerte una resonancia para ver si tu cerebro esta bien y que no haya rastro de la conmoción-

-Bien vamos-

Me cambie a la ropa del hospital y me subí a la máquina de resonancias magnéticas y me relaje, veía todo blanco y si tuviera que decirlo en una palabra se siente como un ataúd blanco con muchas luces y que te da una pequeña sensación de encierro, pero fuera de eso no es nada demasiado espectacular.

No era un examen demasiado largo por suerte en unos minutos estaba listo y el doctor me dijo que podía cambiarme pero que en lo posible me quedara solo en mi brasier y si había traído ropa deportiva que me la pusiera ya que debían ponerme unos sensores para detectar los cambios de mi cuerpo, así como una pequeña maquinita que debía ajustármela en el cuerpo.

Papa me entrego una bolsa con ropa deportiva que había traído de casa y yo me fui a cambiar al baño, salí solo con el buso las zapatillas y el brasier, una enfermera se me acerco y empezó a colocarme cosas se sentía rarísimo, la doctora me puso un montón de ¿parches? En el pecho en el estómago, así como una banda en el brazo, Papa se veía serio y estaba junto al doctor.

-Entonces… ¿qué es esto? – Mire al doctor algo curiosa.

-Si te refieres al examen, bueno, serás llevada al límite, te hare hacer ejercicios en su mayoría cardiovasculares, con el objetivo de medir tu resistencia y para ver si tu corazón y órganos responden bien a un nivel elevado de ejercicio, si vas a entrenar con Raúl Garrido necesito saber que condición física actual tienes y cuál es tu limite.

-Ya veo…- Suena aterrador.

-Bien, ¿enfermera Susy, están bien colocados los sensores? - La enfermera reviso todos los parches en mi cuerpo y asintió.

-Todo listo-

-Perfecto, Amber sube a la cita de correr que está aquí, empezaremos con caminata de trecientos metros, luego un Kilómetro de trote y finalizaremos carrera hasta que ya no puedas más- Mire al doctor algo sorprendida.

-No correré directamente- El doctor negó.

-Necesito ver la progresión, además no has calentado, la caminata sirve para que calientes, el trote te ayudara a no esforzar tu cuerpo y acabara de calentar tu cuerpo y la carrera me dirá cuanta resistencia tienes, necesito ver los cambios por etapas además no busco lastimar tu cuerpo-

-Comprendo- tenía mucho sentido, después de todo empezar a correr sin calentamiento alguno podía acabar en lesiones lo sabía de sobra.

-Si llegas a sentir mareo, náuseas, algún dolor en el pecho o algo fuera de lo normal, necesito que me lo informes, tu cuerpo está siendo monitoreado en todo momento por lo que reaccionaremos a tiempo- Asentí, en pocas palabras esto está hecho para que se te salga el corazón.

- ¿Algo más? -

-Si, una vez llegues a la parte de carrera la velocidad se irá aumentando a medida que llegues a un cierto kilometraje, otro punto y esto es importante cuando sientas que ya no puedes más levanta la mano derecha hacia arriba y ese será el final, los resultados estarán después de media hora y te diremos si puedes volver a hacer deporte de manera normal- olvídalo no solo se te sale el corazón, se me saldrán los pulmones y el estómago también…

-Estoy lista- Bien Amber hora de mentalizarme.

Me subí a la cinta y la enfermera me puso una máscara de oxígeno, wow que intensas se pondrán las cosas, El doctor dio la instrucción de inicio y la cinta empezó a moverse, empecé así con la caminata es decir con el calentamiento, de algún modo me siento nerviosa, no soy tan atlética como Angie o como Diego… probablemente Angie en este punto sea mucho más capaz de entrenar con mi abuelo que yo… oh empecé a trotar.

La cinta acelero el ritmo y yo empecé a trotar y supe que era momento de replicar lo que mi abuelo siempre me decía cuando hacia deporte, controla tu respiración, aprende a conocer tu cuerpo, no solo muevas tu cuerpo por moverlo, mantén un equilibrio… nunca entendí bien a que se refería, pero se cómo hacer que mi respiración no se descontrole, di unas respiraciones suaves y controladas, y trate de hacer más controlados mis movimientos, aunque no me dio demasiado tiempo por que cuando menos me lo espere ya estaba corriendo y aquí empezaba el verdadero reto.

Vi la pantalla de la máquina que marcaba la velocidad, ponía doce kilómetros por hora, no es tan rápido, pero sé que la velocidad media de una persona adulta es de cerca de 15-16  kilómetros por hora, aun me queda, vi la distancia recorrida y ponía 3, 5 imagino que el numero aumentara mientras más dure, en eso vi como los doce Kilómetros por hora ahora eran catorce y mi velocidad aumento así como empezaba a sentir los primeros efectos, mis piernas no están acostumbradas a esto y ya empiezo a sentir las primeras muestras de esfuerzo, no tengo que enfocarme debo dar lo mejor de mi… vi a la enfermera viendo la pantalla y al doctor junto a mi padre los dos mirándome seriamente, tal vez debería haberle pedido a Angie que viniera después de todo, ella me daría ánimos… o eso creo… No Amber estás haciendo esto por ella, para poder cuidarla, para poder hacerte más fuerte, para que ella no tenga que volver a llorar, la cinta volvió a aumentar la velocidad ahora en 16 kilómetros, mi cuerpo empezaba a resentirlo, pero debo seguir, debo seguir…

Mi mente estaba enfocada, mi respiración luchaba por mantenerla constante y no empezar a jadear, necesito enfocar mi mente, si la mantengo enfocada en un objetivo no decaeré, la cinta volvió a aumentar ahora en 18 kilómetros por hora y ya empezaba a sentir mi pecho enfriarse, era como si mi sudor en vez de ser cálido se hubiera enfriado, es una sensación extraña así como mis piernas empiezan a hormiguear pero no parare, no hasta que llegue a los veinte, necesito aguantar solo un poco más… solo un poco… veo la distancia y marca 6,1 kilómetros, son números pequeños pero sé que es más distancia de la que parece, finalmente la cinta está a veinte y empiezo a sentir que mi estomago se aprieta y mis piernas pronto dejaran de seguir el ritmo, siento el sudor frio recorrer mi cuerpo y sé que estoy en mi limite por  lo que con gran esfuerzo más del que creí posible levanto mi brazo derecho, el doctor da la señal y se pone detrás de mí para afirmarme la cinta disminuye la velocidad y empiezo a jadear, finalmente la maquina se detiene y yo bajo temblando de la cinta, mi cuerpo hormiguea y mi padre me tiene que sujetar para que las piernas no me fallen.

-Vaya debo decir que no lo hiciste nada mal, si puedes correr así no creo que tengas problemas para seguir el paso de tu abuelo, ahora, mírame, ¿sientes la mirada borrosa o algo que no esté bien? -

-No… siento el cuerpo frio…-

- ¿Si es normal, tienes mareos? -

-No-

- ¿te duele el pecho? -

-No, un poco el abdomen-

-Si también es normal-

- ¿Entonces? -

-Mandaremos lo que los sensores marcaron a que los analice, Enfermera retire los parches y la máquina, Amber ve a descansar e hidratarte un poco, te avisaremos cuando estén los resultados- Asentí y mi papá me dio una toalla para secarme el sudor, así como mi camiseta la cual me coloque casi al momento.

- ¿Qué tal tu primera experiencia con el test de esfuerzo Amber? – Mi padre me miraba con una sonrisa suave.

-Honestamente… aterradora- no pensé que sería tan duro.

-Si yo también me sentí así la primera vez-

-Angie y Diego harán esto mañana-

-Si eso supe, pero lo harán bien-

-Voy a venir con ellos-

-Si eso quieres adelante- Papá me sonrió.

-Gracias por estar aquí hoy- le di una sonrisa a mi padre y este pareció un poco sorprendido.

-N… no hay problema- no sé porque su mirada se ve algo triste, pero lo dejare pasar.

El momento fue cortado por una llamada de mi abuelo y en este punto no se si deba sorprenderme.

-Dime abuelo- Conteste de manera tranquila.

- ¿Ya acabaste? – Realmente empiezo a pensar que mi abuelo tiene poderes.

-Si dijeron que nos darían los resultados en unos minutos-

- ¿Como te sientes? – Al menos se preocupa.

-No lo sé con exactitud fue bastante intenso-

-Bueno por algo se llama test de esfuerzo Amber-

-Si lo sé-

-Llama a Angie estoy seguro de que esta nerviosa-

-Planeaba hacerlo no te preocupes, pero lo hare cuando me den los resultados-

-Está bien, le diré a tu abuela que todo salió bien-

-Pero aún no me dan los resultados-

-Amber… ¿realmente crees que hay alguna posibilidad de que te haya ido mal? - Suspire.

-Bien ya entendí, dile que logré no desmayarme y quedar en una pieza-

-Se lo diré, te dejo hablamos después- El abuelo me colgó y yo solo suspire.

- ¿Tu abuelo diciéndote que ya te espera para entrenar? - Mire a mi padre que tenía una sonrisa.

-Algo así supongo- Por supuesto que es eso.

- ¿Oye ahora que recuerdo que fue lo que el doctor estaba diciendo sobre una pareja y un psicólogo? - Suspire con desgano.

-Olvida lo de la pareja que no tengo ninguna- Aun no por lo menos – y con respecto a lo del psicólogo, bueno cuando peleamos me quede toda la noche en el hospital y bueno el doctor me presento a un psicólogo el cual me hizo comprender algunas cosas- Papá suspiro.

-Comprendiste que somos unos padres ausentes, ¿verdad? -

-Si-

-Lo siento-

-Lo sé-

Ninguno dijo nada ambos no podíamos decir mucho, yo aun trataba de lidiar con lo que paso ese día y mi padre, bueno aun lidia con lo que paso cuando yo los enfrente a todos, ambos sabíamos que había aun una herida sin cerrar y mucho de lo que hablar pero no estábamos listos para eso, yo no me sentía lista, pero la realidad era que en unos días mi realidad volvería a ser la de regresar a una casa vacía y solitaria, Angie no tenía razones para quedarse conmigo, mi madre no me ha hablado y mi padre se marcharía nuevamente por unos meses, probablemente mi abuelo y su entrenamientos sean lo único que me mantendrá distraída de mi realidad.

El doctor llego rompiendo el ambiente pesado que se había puesto entre nosotros y el doctor nos quedó mirando como detectando que algo había pasado, pero no dijo nada.

-Señorita Garrido, los resultados están listos, venga conmigo- Tanto mi padre como yo nos levantamos y seguimos al doctor hasta la consulta donde nos entregó un sobre y mientras lo revisábamos el doctor nos explicaba.

- Para ser su primer test y haber estado varios días sin ningún ejercicio sus resultados son bastante aceptables por lo que le daré mi aprobación a tu abuelo para que sepa que puede acondicionarte durante el primer mes y medio, Angie y tu amigo vendrán mañana probablemente sea lo mismo para los dos, una vez acabado el mes y medio de acondicionamiento hare que vuelvan los tres a dar otro test de esfuerzo y si los resultados mejoran, empezaran el entrenamiento real- El doctor me miro serio y yo asentí.

-Comprendo, gracias-

-Por otro lado, los resultados de tu resonancia indican que todo está normal y no hay ningún problema en tu cerebro, así que eso sería todo, nos vemos en un mes y medio y asegúrate de mantener el contacto con el psicólogo- El medico miro a mi padre con seriedad que parecía incluso algo fría- Señor Garrido espero contar con su colaboración- Mi padre suspiro.

-No podré cumplir con ello, tengo un viaje en unos días por lo que no estaré aquí- si las miradas pudieran congelar estoy segura de que mi padre sería un glaciar ahora mismo.

-Comprendo, el trabajo es importante, pero déjeme recordarle que su hija Amber aun es menor de edad y ya ha estado dos veces en este hospital por lesiones una por una puñalada demasiado cerca del corazón y hace unas semanas por caer desde una altura considerable, ¿entiende que su hija ha podido morir dos veces en un periodo muy corto de tiempo verdad? - Mi padre le devolvió la mirada al doctor.

-Lo comprendo y créame que planeo empezar a cambiar eso, pero no es algo tan fácil de hacer-

-Lo comprendo señor Garrido, pero si yo estuviera en su posición no tardaría tanto, después de todo ella ya tiene 16 años y con lo poco que la he conocido sé que es una chica que se puede valer por ella misma, que si quisiera podría emanciparse y que probablemente es más inteligente y madura que muchos chicos de su edad, pero no considero que eso la haga más feliz que tener a su padre junto a ella mientras aun es joven- Mire al doctor y a mi padre ambos tenían miradas serias y frías en sus rostros pero finalmente mi padre cedió.

-Gracias por sus concejos y por haber cuidado de Amber cuando yo no lo hice- Era tan extraño ver a mi padre así, era como si lo hubieran derrotado.

-Pueden retirarse- El doctor no se veía feliz ni victorioso, parecía incluso tener una expresión amarga.

Me levante, tome los resultados de mis exámenes y con mi padre nos marchamos del consultorio, el ambiente era tan incomodo y no quería regresar a casa, por lo que solo murmure.

- ¿Te importa dejarme en casa de Angie? -

-Claro- Mi padre hablo con una voz apagada pero suave.

Notas finales:

Nos vemos en el proximo capitulo :)


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