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Amante inocente por Haruka Eastwood

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Notas del capitulo:

Hola!! Ojalá les guste y pues ya se viene lo bueno (? Sin más que decir, yo los dejo leer :3

Título: Amante inocente 

Resumen: Él y solo él, era la persona que tanto había buscado... 

Categoría: Naruto 

Clasificación: Mayores de 16 años. 

Género: AU. Romance. Drama. 

Advertencias: Lemon. Mpreg. 

Autor: Haruka Eastwood 

~ * o0O0o ♦ o0O0o * ~ 

Amante inocente 

Capítulo 8: Ámame siempre

Con aparente calma, Ino abrió la puerta de la habitación de Sakura, extrañada al verla recostada en su chaise longue vistiendo únicamente una delgada bata de satén roja, sujetando una copa de vino mientras cubría sus ojos con el antebrazo, intentando cubrir sus lagrimas sin mucho éxito.

—Sakura…

—No sé qué hacer —exclamó con voz ahogada—. No puedo verlo sin pensar en él, no sé si quiero verlo. Todos estos años me dije que no era amor, y creí que era fácil, cuidaba de Naruto con mucho empeño porque inconscientemente quería que él me notara, cuando llegaba a casa lo atendía y le serbia la cena en una falsa ilusión, comportándome como una esposa ejemplar cuando solo era una prostituta con mal disfraz —se incorporó, viendo a Ino a los ojos—. Entonces me encariñe con Naruto y lo use para sobrellevar la situación pero nunca tuve la intensión de olvidar a Minato.

—No es la persona indicada, sé que lo olvidaras… tienes que hacerlo —susurró para sí misma lo último, desviando la mirada.

—Después de aquella noche me dije lo mismo.

—¿De qué hablas?

—Fue hace diez años —se puse de pie, tomando la cajetilla de cigarros que mantenía junto a su mesita de noche, prendiendo uno y dándole una larga calada—. Minato llegó en la madrugada completamente ebrio, me había despertado por un vaso de agua y cuando me vio no dudo en besarme… él creía que estaba con su esposa muerta. Muchas veces me han llamado con otro nombre pero esa vez fue diferente, al día siguiente el no recordó nada y yo no tenía porque desmentirlo, no podía hacerlo.

—Espera… ¿te acostaste con Minato?

—Te acabo de decir que me besó, Ino puerca, en que parte del relato dije «folle toda la noche con él, aprovechando que estaba ebrio».

—Conociéndote…

—He estado con tantos hombres que ya perdí la cuenta —sonrió con tristeza—. Si alguna vez hacia el amor quería que fuera con él, que lo recordara… que me amara. Ahora solo quiero huir, irme como cuando tenía doce y hui de casa, empezar una nueva vida, ser diferente… ya no quiero esto —sollozó.

—Yo podría ayudarte —se escuchó una cantarina voz masculina desde el alfeizar de la puerta, haciendo que ambas féminas se sobresaltaran, volteando a ver al recién llegado, un atractivo varón de piel canela, cabello castaño y ojos color chocolate—. Yo… en realidad no era mi intensión escuchar —sonrió con nerviosismo—, lo que pasa es que olvide mi reloj y…

—No importa —Sakura le regaló una sonrisa, viendo atentamente cada grácil movimiento.

—Es verdad lo de la ayuda —su voz risueña cambio por una seria, volteando a ver a Sakura e Ino con expresión decidida—, y no lo digo solo por ti, Sakura.

•••

—¿Me dejarías hacerte el amor... ?

Contuvo el aliento por lo que pareció ser una eternidad, aferrándose a la ancha espalda de Sasuke como si aquella fuera a ser la última vez que podría estar entre sus cálidos brazos. Y sin desearlo, meditó la pregunta, conteniendo a duras penas las terribles ganas de llorar, de pedirle que lo amara siempre y por sobre todas las cosas, manteniendo el anhelo de una vida juntos por un poco más de tiempo. Sabía que de negarse y seguir en una relación con él, llegaría a un punto sin retorno en donde desearía fundirse con Sasuke en una intimidad abrumadora, entregándose en cuerpo y alma, sin límites ni preocupaciones. 

Pero estaba claro que posponer lo inevitable no le serviría de nada y aceptar solo aceleraría las cosas, actualmente era consciente de que Sasuke era más que su vida, perderlo significaba que una parte de él moriría en el proceso, lo peor de todo era su incapacidad para decirle la verdad, de confesarle la cruda realidad sobre los amantes que habían compartido su lecho varias veces desde hace un par de años.

Lo único cierto es que aquel varón frente a él lo iba a odiar con toda el alma le dijera o no su más grande secreto, no importaba cuál fuera su respuesta, si al final lo sabría porque el cuerpo no miente. Lo único que le quedó por hacer fue suspirar para tranquilizarse, hundir la cara en su pecho para inhalar su embriagador aroma almizcleño y asentir mientras temblaba, siendo consciente de que cuando Sasuke se marchara no solo lo haría de su casa, sino que también de su vida, llevándose se corazón con él.

—No quiero que dejes de amarme ttebayo —su voz se quebró ante aquella súplica llena de nostalgia, mientras pequeñas lágrimas descendieron por sus mejillas—. No soportaría perderte… no quiero perderte.

Naruto se veía frágil y tan vulnerable que Sasuke tuvo miedo de dañarlo en un nivel que iba más allá del físico, siendo incapaz de reconfortarlo con palabras. Tan solo el agarre que tenía sobre la cintura del doncel perdió toda fuerza y con delicadeza, tomó su rostro, acunando sus mejillas entre sus manos para unir sus labios con los contrarios en un beso cálido, dulce y lleno de devoción hacia ese pequeño rubio que le había robado el corazón con una sola mirada de esos magníficos ojos azules. Naruto era su todo, y sin proponérselo había caído a sus pies ofreciendo no solo su amor a ese hermoso doncel, sino también su vida y corazón, jurando que sin importar nada, él permanecería a su lado.

—Jamás podría dejar de amarte —y era más que cierto.

Aquel susurro fue todo lo que necesito para confiar una vez más en un varón y con los nervios a flor de piel, llevó a Sasuke hasta su habitación en un cómodo silencio, tan envolvente y expectante que aceleraba los latidos de su corazón hasta doler. Cuando finalmente entraron, vio con sorpresa como cerraba la puerta con demasiada calma, colocando el seguro y sin decir nada, cubrió las ventanas con la delgada cortina de gaza en agiles y contados movimientos, dejando el lugar sumergido en una intimidad abrumadora.

—S-Sasuke… 

—Shh, tranquilo —su voz mantenía el tono áspero del deseo pero sus ojos contenían un brillo extraño que Naruto interpretó rápidamente—, todo estará bien.

Quiso sonreír porque Sasuke mentía muy mal, lo sabía por el leve temblor en su voz que intentaba camuflarse tras el intenso deseo, el hambre descarnada y primitiva que poco faltaba para consumirlo en su totalidad, pero por primera vez, Naruto comprendió aquellas palabras y le creyó pese a que seguía temblando en su lugar, incapaz de controlar el acelerado latir de su corazón, el miedo atroz y los nervios que comenzaban a traicionarlo. 

Necesitaba llorar, desahogarse y hacerse un ovillo, pero esa idea se esfumó cuando en un un silencio misteriosamente sensual, Sasuke volvió a unir sus labios con los de Naruto, y a diferencia de otras veces, era un contacto vacilante y temeroso, tan propio de alguien que no tiene idea de lo que va a hacer a continuación. Simplemente tomó cada sutil movimiento de su doncel, disfrutando estar con él de una forma tan especial y mágica. No había manual que pudiera guiarlo ni consejos suficientes, estaba solo con su instinto y sus deseos descarnados que arañaban dentro de él, luchando por liberarse para tomar a Naruto de una vez por todas.

Y haciendo uso de toda su fuerza de voluntad, lo guió hasta la cama, recostándolo sin separar sus labios de la dulce boca de Naruto, disfrutando su estremecimiento y contemplando cada expresión que se formaba en ese infantil rostro temeroso que tanto amaba. Estaba mal, pero de solo verlo así se sentía caliente, duro y más que listo, por lo que llevó sus labios hasta el acanelado cuello, dejando un reguero de besos y sutiles mordidas mientras hábilmente despojaba a Naruto de los pantalones y bóxers, arrojándolos para poder posicionarse entre esas perfectas y torneadas piernas que estaba seguro, se volverían su perdición.

—E-Espera —susurró temeroso, siendo rodeado por el abrasador calor de Sasuke que parecía traspasarle la piel en oleadas interminables.

—¿Quieres que me detenga? —cuestionó en cuanto logró desnudar a Naruto, perdiéndose en su suave piel y en sus tentadoras curvas, las justas para volver loco a cualquiera—. No podría… —se corrigió— soy incapaz de obligarte a nada…

—No… —titubeó, cubriéndose con las manos su intimidad—, es que… tengo un poco de miedo ttebayo.

¡Dios! Sasuke estaba seguro que no se podía ser más adorable. Naruto temblaba bajo su cuerpo pero no era por miedo a entregarse, mucho menos era el clásico miedo a «la primera vez». Era pavor de que lo odiara, de que se alejara como todos los demás, miedo a descubrir que sus palabras de amor fueron una mentira que acabaría cuando lograra poseerlo pese a ser consciente de que él, era diferente. Sin embargo, los labios de Sasuke buscaron los suyos, borrando esos pensamientos e iniciando una danza lenta y erótica que le dejó con una sensación cálida en el pecho que lentamente se iba extendiendo.

Las palabras sobraron en aquel instante en donde fue rodeado por los fuertes brazos de su novio que intensificó aquel sutil  e inocente contacto, lamiendo su labio inferior en busca de un permiso que no pensaba negarle, sintiendo como la húmeda lengua se adentraba en su boca, buscando la suya de manera apremiante e iniciando una lucha que gustoso perdió, refrenando un gemido cuando lo acaricio con posesiva intimidad. Era demasiado aporte sensorial, demasiadas emociones que se negaba a sentir, y un sinfín de dudas que hacían mella en su embotado cerebro, dejando que el miedo lo gobernara.

Entonces lo sintió, Sasuke se hundió con brusquedad y un salvajismo atroz en su apretado y húmedo calor con un único y potente embate que le quitó el aliento, y se estremeció de dolor, incapaz de gritar. Tan solo le clavó con fuerza las uñas en la espalda mientras sus ojos se llenaban de lágrimas, al tiempo que sus piernas apretaban la cintura de aquel idiota varón sobre él, intentando contener el grito que se formó en su garganta. ¡No estaba preparado!

—N-Naru…

—Duele —sollozó empujándolo con fuerza. Jamás se había sentido de aquella manera y nunca pensó que tener sexo pudiera resultar tan doloroso—. ¡Sácalo!

—Shh tranquilo, pronto pasará.

Y sin darle tiempo a acostumbrarse a la intromisión, arremetió con fuerza y torpeza, aferrándose al pequeño cuerpo de su doncel. Su necesidad de poseerlo había resultado tan dolorosa que no midió la fuerza de sus embestidas, dejando que el placer nublara su razón, olvido su idea de ser delicado con Naruto por ser la primera vez de ambos, pero tenerlo así, bajo su cuerpo logró sacar lo peor de él, ignorado completamente las quejas y sollozos para que se detuviera.

Estaba en el cielo y antes de que se diera cuenta, gimió roncamente, apretó el pequeño cuerpo y se corrió en lo que hasta ese momento, consideró el mejor orgasmo de su vida, sin embargo, bastó una fracción de segundo para que la realidad le azotara de frente dejándolo caer en picada, estrellándose contra el duro pavimento de su culpa.

Naruto lo contemplaba con odio, dolor y cientos de emociones que no alcanzaba a procesar, tenía los ojos inundados en lagrimas, estaba tembloroso y asustado de él, dándose cuenta que había actuado como el mayor bastardo de la historia con alguien que no lo merecía, con alguien que realmente era demasiado frágil y endeble pese a su actitud rebelde.

—Vete…

—Naruto… yo….

—¡Vete! —lo empujó, cubriéndose con sus brazos—. Si todo lo que querías era usarme, ya te puedes ir ttebayo.

—Yo no…

—He dicho que te vayas —se abrazó a sí mismo, haciéndose un ovillo en la cama—. Creí que eras diferente, creí que me amabas pero eres el peor de todos, eres un…

Su mirada ébano recorrió el tembloroso cuerpo de Naruto, notando la mancha de sangre en las sabanas. La garganta se le secó y las lágrimas comenzaron a empapar sus mejillas, él jamás deseó hacerle daño, jamás quiso lastimarlo ni ser el causante de su dolor. Todo lo que quería era demostrarle cuanto lo amaba, quererlo, mimarlo y decirle sin palabras que le pertenecía hoy, mañana y siempre.

—Perdóname —balbuceó aferrándose al aun tembloroso cuerpo—. Yo no quería, yo… yo jamás te usaría, sería incapaz de aprovecharme así de ti, te amo pese a que no me creas y si me odias me lo merezco…

—Suéltame ttebayo —pidió con un hilo de voz, observando al siempre serio e intimidante Sasuke Uchiha sollozar con la cabeza gacha—. ¿Por qué?

—No lo sé…

Sasuke balbuceabas frases inconexas que pretendían ser disculpas sin sentido ni forma, temblaba manteniendo un pequeño agarre sobre su muñeca y entonces se dio cuenta que por más que lo deseara no podría odiarlo, no era capaz de seguir molesto y aquel miedo que sintió cuando lo estaba poseyendo se esfumo dando paso a la tristeza, Sasuke era un teme apasionado y demasiado inocente para su propio bien.

—No te entiendo —tomó dulcemente el rostro del varón entre sus manos y limpio sus lágrimas con los pulgares—, tampoco me entiendo a mi… no puedo enrojarme contigo, mucho menos si te pones a llorar después del sexo.

—No es sexo —murmuró con el rostro sonrojado, mientras recargaba su frente en el hombro de Naruto—. Hice algo imperdonable.

—¿Me amas?

—Dobe… soy yo quien debe preguntar eso.

—Solo responde ttebayo.

—Te amo más que a mi vida —levantó el rostro, observando finamente aquellas maravillosas gemas de azul adamantino—. Jamás podía dejar de hacerlo.

Entonces sintió los cálidos y reconfortantes labios de Naruto sobre los suyos en una caricia tierna que le estremeció de pies a cabeza, teniendo que sujetarse al pequeño doncel que le dedico la más dulce mirada, logrando que se olvidara de sus pesares.

—Sasuke… ¿me abrazarías? —su voz tembló y por una vez en la vida fue egoísta, porque ya nada importaba, Sasuke estaría con él… y jamás sabría su oscuro pasado.

 

~ * o0O0o ♦ o0O0o * ~ 

Continuará

Notas finales:

Y si creyeron que ya no saldra Sakura, pues tal vez tengan razón.

Naruto: y he aquí un claro ejemplo de que no todo sale bien a la primera 7u7r ¡Te falló teme! No eres perfecto en todo ttebayo jajaja

Sasuke: Callate dobe, que tu tuviste la culpa ¬///¬

Yo creo que morire de diabetes si sigo escribiendo esto, en fin. Haruka los ama y si les gusto no se olviden de dejar su sexy rw que os prometo que pronto escribire un lemon sensualon (? 

Haruka Eastwood


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