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AHORA SI ME VEN!!!! por Angel90

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Afrodita se derritió en el momento que los labios de Death Mask tocaron los suyos. Eran tan suaves, sin embargo masculinos al mismo tiempo y oh-tan-cálidos. Eran todo lo que Afrodita podría querer y mucho más.

Con un gemido, rodeó el cuello de Death Mask en sus brazos y abrió la boca para que Death Mask pudiera profundizar el beso. La lengua de Death Mask se adentró para lamer y saborear. A Death Mask debió gustarle lo que encontró, porque dejó salir un murmullo de placer.

Se separaron del beso, pero siguieron abrazados. Por un momento se quedaron de esa forma, sus miradas enganchadas, su aliento mezclándose.

Eso fue increíble —dijo Death Mask.

Si, lo fue —coincidió Afrodita.

No estaba mintiendo tampoco. Había sido el beso de su vida. No es que tuviera muchos con los que comparar, pero no veía cómo podía ser mejor que este. Como fuera, su polla estaba dura como roca y su cuerpo tan lleno de deseo que se sentía listo para arder.

Death Mask pasó sus manos por el cabello de Afrodita. —Odio romper el ambiente, pero vi algo en el itinerario sobre un coctel de bienvenida que empieza en cinco minutos. Ya que venimos a ver a nuestros antiguos compañeros, realmente deberíamos bajar.

Maldición, el itinerario —se quejó Afrodita —. Voy a quemarlo, solo por despecho.

Hablando de eso, deberíamos bajar a conseguir tu identificación antes de que la cabeza de Marin explote por el enojo.

Afrodita se carcajeó. —Eso es algo que pagaría por ver – lazándole una mirada de complicidad.

Y se supone que yo soy el sangriento. – negando con la cabeza.

Death Mask tomó la mano de Afrodita y lo llevó fuera del cuarto hacia los elevadores. Cuando llegaron al lobby y Death Mask no soltó su mano, Afrodita sintió una corriente de orgullo a través de él. A este hombre apuesto no le importaba que el mundo supiera que estaban juntos.

«Aun si es solo un fin de semana. ¿Quién sabe qué pasará una vez que lleguemos a casa?»

Afrodita le dijo a su parte negativa que se callara y solo permitiera ser guiado a Marin. Death Mask le dio golpecitos en el hombro. — Afrodita necesita su identificación y papeles.

Se dio la vuelta y sus ojos inmediatamente se posaron en sus dedos entrelazados. —Bueno, no te tomó mucho tiempo, Afrodita. El único hombre gay en el área y te lo llevas enseguida.

Afrodita tomó varios respiros profundos y se dijo a si mismo que no haría nada bueno haciendo una escena. Afortunadamente, tenía a Death Mask de apoyo. —Bueno, dijiste que todos deberían tener un mejor amigo gay. Tan solo decidimos serlo el uno del otro. De esa manera es más fácil, podemos compartir la ropa.  

Mrin parpadeó unos momentos antes de que sus ojos se entrecerraran. —Como sea. Le traeré sus papeles a Afrodita.

Se fue pisoteando tan rápido como sus zapatos altos y falda ajustada se lo permitieron. Minutos después, regresó con los papeles. Prácticamente los aventó a los brazos de Afrodita. — Aquí tienes. Tu identificación está allí. Asegúrate de usarla todo el tiempo, o la gente no sabrá quién eres. 

Eso sería trágico —dijo Death Mask

Se dio la vuelta y se fue. Death Mask ladeó la cabeza. —No creo que le gustemos mucho.

No te sientas mal. Es a mí a quien desprecia. Tan solo te odia por asociación.

—Bueno, eso me hace sentir mucho mejor. — Death Mask arrastró las palabras, luego hizo un gesto hacia el ya lleno salón—. ¿Quieres entrar y ver a nuestros viejos compañeros?

Afrodita tomó su identificación de entre los papeles y se la puso, pero no hizo movimiento alguno por tomar la mano de Death Mask de nuevo. Si Death Mask lo notó, no dijo nada. No era que Afrodita se avergonzara ni nada. Solo que no sabía qué clase de mierda estaría enfrentando, y no quería arrastrar a Death Mask con él.

Tomando una respiración profunda, Afrodita caminó hacia el salón, con Death Mask a su lado. Algunas de las caras, Afrodita las reconoció inmediatamente, pero otras eran extrañas para él. Debían ser parejas y gente que no eran de su círculo cuando estaba en la escuela.

Mierda —murmuró Death Mask —. ¿No es ese Aioria el deportista?

Si, era él. También fue uno de los amigos de Afrodita. Fue uno de los primeros que lo despreció cuando Afrodita “salió”. Aioria se dio la vuelta y se mofó antes de caminar hacia ellos.

Bueno, pero si es Afrodita. No pensé que tuvieras las agallas para mostrar tu cara aquí.

—¿Por qué no? Me gradué en la escuela igual que tú — dijo Afrodita irritado.

Dios. Esperaba que las cosas no pasaran a lo físico.  No se la pasaría a Aioria. Lo único bueno es que parecía que Aioria había ganado cincuenta libras de grasa en los últimos diez años. Oh, y también había perdido una gran cantidad de pelo y había ganado una barbilla extra.

¿A quién trajiste contigo? ¿Tu novia? —preguntó Aioria, su mirada fija en la identificación de Death Mask y luego sus ojos se agrandaron—. ¡Mierda santa, eres tú!

Si, la última vez que revisé, todavía era yo —contestó Death Mask con una alta dosis de sarcasmo.

Vi esa entrevista que hiciste. ¿Haces el maquillaje para esa serie?.

En realidad, soy maquillador de efectos especiales, pero si, a eso me dedico.

Aioria aplaudió. —Eso es increíble, amigo.

—¿Amigo? Pensé que era la novia de Afrodita.

Aioria hizo un gesto despectivo. —Eso fue antes de que supiera que eras tú, Death Mask, viejo amigo.

Death Mask asintió. —Sí, éramos grandes amigos en la escuela. ¿Recuerdas la vez que golpeaste mi cabeza tan fuerte en el casillero que requirió suturas? Eso fue un alboroto. Buenos tiempos.

Oh, vamos, no seas así. Éramos chicos siendo chicos.

Seguro, las contusiones son una parte normal de la vida diaria. ¿En que estaba pensando? — Death Mask se encogió de hombros exageradamente.

Afrodita tuvo que cubrir su boca para reprimir la carcajada. Death Mask tenía una agudeza que nadie era capaz de seguir. Al menos ninguno de sus viejos compañeros. Afrodita hizo una nota mental de no enojar nunca a Death Mask, porque no había manera de que le ganara en una discusión.

Entonces Afrodita vio a Shaka acercándose y gruñó, justo cuando pensaba que las cosas no podrían estar peores. Shaka era el peor idiota de la escuela. Había sido el capitán del equipo de football y el instigador detrás de todos los acosos. Mientras Afrodita nunca estaba alrededor cuando molestaban a Death Mask, Afrodita sabía sin duda alguna que probablemente era quien peor trató a Death Mask.

Bueno, pero si es Death Mask —dijo Shaka —. Has cambiado mucho. Aunque sé que sigues tan tonto y marica como siempre.

Su mirada se dirigió rápidamente a Afrodita, pero la desvío igual de rápido. Afrodita supuso que lo estaba dejando para después.

Death Mask sonrío. —Sip, sigo siendo gay, aunque lo tonto depende de a quién preguntes.

Aioria sacudió la cabeza. —¿No sabes en qué trabaja Death Mask ahora?

Shaka se mofo. —Si, le pone maquillaje a la gente. Me suena bastante gay.

No, es maquillaje de efectos especiales, así que es completamente diferente —dijo Aioria —. Convierte a la gente en zombis y esa mierda. Deberías ver su trabajo. Es asombroso.

¿Qué, estás enamorado de él ahora? — Shaka sonrió satisfecho.

Aioria se sonrojó. —Claro que no. Soy fan del programa. Esos es todo. Deberías verlo alguna vez.

Tengo mejores cosas que hacer con mi tiempo.

Oí que tú y Marin estuvieron casados —dijo Death Mask.

Estuvieron es la palabra clave —dijo Shaka, la tormenta creciendo en sus ojos.

¿Qué sucedió? —preguntó Death Mask, inocentemente.

La perra me dejó por un idiota que hace más dinero. Es como veinte años más joven que ella.

Shaka tomó un trago de la bebida que traía en la mano. Juzgando por lo rojo de su nariz, había estado tomando mucho. —No es gran cosa. No es como si necesitara a la puta de todas maneras. No es una pérdida para mí.

Wow, sin embargo todavía debe doler. ¿No salieron y rompieron durante toda la escuela? —preguntó Death Mask.

Afrodita miró hacia otro lado para que Shaka no pudiera ver la sonrisa en su cara. La única vez que Marin no salió con Shaka había sido porque estaba saliendo con Afrodita. Justo antes de que se confesara.

Como sea. — Shaka tomo otra bebida—. Nunca me gustó la perra de verdad. Solo jodía con ella porque estaba ahí.

Liiiiiiindo…… Shaka siempre había sido una verdadera gema. Parecía que no había madurado en absoluto. Su cabello rubio seguía con el mismo corte que tenía en la escuela y su cuerpo probablemente era más músculos que cerebro.

Así que… ¿qué has hecho estos días? —le preguntó Afrodita.

Shaka lo observó con cara de desprecio. —Manejo el negocio de autos de mi padre. ¿Qué hay de ti? ¿Tienes una tienda de vinos o algún otro lugar gay?

No, tengo una cafetería en Tokio. De hecho, es la misma ciudad donde vive Death Mask.

Shaka e bufó. —Recuérdame nunca ir a Tokio.

—Está bien —le respondió Death Mask con rapidez.

Afrodita echó una mirada y vio a dos mujeres acercándose. Aunque había pasado una década desde que las había visto, reconoció rápidamente a las dos ex animadoras. Juno y Pandora. Como habían sido menos que agradables con él en la escuela, le hubiera gustado decir que el tiempo no fue bueno con ellas, pero eso no era cierto. Juno tenía su rubio cabello levantado en un moño, y su figura era tan delgada como siempre en su vestido negro. Pandora usaba un vestido azul muy ajustado, y tenía su largo cabello negro suelto, cayéndole por un hombro.

Llegaron y Pandora se colgó del brazo de Afrodita por el codo, mientras que Juno hacía lo mismo con Death Mask.

Siento interrumpir, pero la cena está por comenzar y estos caballeros han acordado ser nuestras citas esta noche — dijo Juno suavemente.

Afrodita intercambió miradas de sorpresa con Death Mask, pero decidió seguir el juego. —Bueno, no debemos hacer esperar a las damas. Dirijan el camino.

Mientras se alejaban, Juno susurró: —Lo siento, no pudimos pensar en otra forma de alejarlos de esos imbéciles.

Gracias.

Encontraron una mesa vacía y se sentaron. Pandora se giró hacia ellos y dijo: —Primero, queremos disculparnos por las cosas horribles que les dijimos e hicimos durante la secundaria. Fuimos realmente malas con ustedes.

Lo fuimos —aceptó Juno —. Entenderemos si no quieren perdonarnos. Si fuéramos ustedes, chicos, sé que no lo haría. Pero teníamos que intentarlo al menos.

Death Mask tomó su mano. —Por supuesto que las perdono. Fue hace diez años. Eran solo niñas en ese entonces.

Por mucho que Afrodita quisiera guardarles rencor, porque lo lastimaron mucho en ese entonces, sintió su corazón derretirse bajo las miradas ansiosas. —Las perdono también. ¿Cómo no hacerlo después de rescatarnos de Shaka?

Todos compartieron una risa y la tensión se esfumó mientras se ponían al día. Las dos mujeres estaban casadas, pero sus maridos se quedaron en casa a cuidar a sus hijos. Death Mask y Afrodita prometieron tomar sus lugares por el fin de semana y ser sus parejas.

Pronto la mesa comenzó a llenarse y Death Mask y Afrodita estaban cada vez más sorprendidos cuando más y más gente comenzó a disculparse por su comportamiento en la secundaria. Claro, muchos estaban impresionados con Death Mask y lo lejos que había llegado, pero la mayoría parecía genuinamente arrepentida por lo que habían hecho.

Wow, parece que hay muchos menos Shakas de lo que pensaba —dijo Afrodita.

Casi no podía creerlo. Había venido para probar un punto y, en cambio, aprendió algo diferente. Sus antiguos compañeros habían crecido y ya no les importaba que fuera gay. Solo les importaba él como persona. Nunca se imaginó este resultado ni en un millón de años.

Se estiró bajo la mesa y alcanzó la mano de Death Mask, dándole un apretón. Mantuvieron sus dedos enlazados hasta que la comida estuvo servida. Un plato de pollo que era apenas comestible. Afrodita lo picó unos pocos minutos antes de rendirse y bajar su tenedor.

Supongo que llamaremos al servicio a la habitación más tarde —murmuró Death Mask.

Afrodita rio. —Me parece buena idea. – concluyo con una sonrisa.

Así que… ¿cuál es la agenda mañana? —preguntó Pandora.

Bueno, hay una salida de golf —dijo Juno.

No me incluyan en ella —dijo Death Mask rápidamente —. Intenté jugar una vez y me aburrí a muerte.

También hay un tour de cata de vinos —intervino Pandora.

Todos en la mesa voltearon para mirar a Death Mask y Afrodita.

No somos tan gays —dijo Afrodita arrastrando las palabras, contagiado de un poco de la agudeza de Death Mask.

Todos en la mesa estallaron en carcajadas.

Bueno, entonces, ¿qué deberíamos hacer? —preguntó Juno.

¿Qué les parece si salimos a visitar todos los lugares a los que solíamos ir? —sugirió Death Mask.

¿Cómo cuál? —Pandora puso su mano bajo su mentón y se apoyó en la mesa.

Death Mask se encogió de hombros. —No sé. Los juegos de video, la pizzería, el viejo cine… ustedes conocen todos los sitios divertidos.

¿Creen que sigan abiertos? —preguntó Pandora, sus ojos brillando con emoción.

Solo hay una manera de averiguarlo —dijo Afrodita, uniéndose a la idea.

Sonaba divertido para él. No había estado en casa en mucho tiempo, sería genial ver algunos de los viejos lugares. Mucho mejor verlos con Death Mask a su lado.

Juno rebotaba en su asiento. —Me pregunto si la tienda de stickers sigue abierta. Podría conseguir algunos para mis niñas.

Por favor. Sabemos que son para ti —bromeó Death Mask.

Ella lo golpeó con su servilleta. —Mejor cuídate. Haré que te sientes junto a Shaka en el desayuno.

Death Mask levantó las manos. —Seré bueno. Lo prometo.

Alguien de la mesa llamó. —Así que, Death Mask. Si voy a Tokio, ¿me convertirías en un extra zombi? Me encantaría ser asesinado.

Death Mask se rio. —Lo dices ahora, pero lo odiarás una vez que tengas que sentarte en una silla por hora y media para pegarte silicón y suciedad. Luce más divertido de lo que es, créeme.

¿Quién hubiera pensado que nuestro pequeño Death Mask se volvería famoso y muy guapo? —dijo alguien con voz femenina.

Death Mask se sonrojó y bajo la mirada con timidez reflejada en sus ojos, acción que hizo que Afrodita pensara que no podía verse más lindo. —No soy famoso. Estoy detrás de escena.

¿Cómo puedes decir eso? —intervino Juno —. Trabajas en uno de los mejores shows de la TV. Para mí eso te hace famoso.

Por primera vez en su vida, Afrodita pudo haber besado a una chica. Gesticuló un “Gracias” a Juno. Ella asintió.

Bueno, parece que la cena acabó —dijo Pandora —. ¿Los veremos en la mañana, chicos?

Claro. Las veremos en la cafetería y podemos sentarnos juntos de nuevo —dijo Death Mask.

Todos se levantaron y fueron a sus habitaciones. Death Mask sentía mariposas en el estómago. Algo le dijo que iba a haber algo más que servicio a la habitación esa noche.   

Notas finales:

GRACIAS... por leerlo.

Nos estaremos leyendo en el siguiente capitulo.


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