Era un día especial. Kise se apresuró hacia el baño de la habitación para ducharse y vestirse mientras gritaba el nombre de la persona que se hallaba dormida sobre la cama para por supuesto, despertarlo de su pesado sueño.
-¡Aominecchi! ¡No podemos llegar tarde, levanta de una vez!
-mmm... -el moreno solo se removía sin ninguna intención de dejar la comodidad de la cama- pero tengo sueño, Kise
-¡Te dije que no debíamos hacerlo, pero no me hiciste caso!
Se escuchó el sonido del agua golpear contra el suelo y Aomine se reincorporó de la cama, su pareja tenía razón, no debió insistirle la noche anterior para hacerlo, pero es que nadie podía culparlo ¡Kise lo ponía a cada maldito segundo!
-Lo sé, iré a ducharme a la otra habitación
-Apresúrate, tonto
Tomó el traje color negro que había comprado junto al del rubio hace unos días y se dirigió rápidamente al segundo cuarto de la suite que los dos habían rentado.
Luego de unos treinta minutos, la pareja se encontraba ya vestida y arreglada. Era hora de partir hacia la iglesia donde sus amigos unirían sus vidas ese día.
Había pasado ya un año desde que Aomine y Kise habían comenzado a salir. El modelo no podía estar más feliz junto a Daiki, este había sido desde el inicio muy dulce con él. Salían a divertirse a menudo, jugaban baloncesto en sus ratos libres, lo apoyaba en lo que pudiese con la Universidad, le daba un presente al igual que él cada mes... simplemente perfecto.
Cuando cumplieron seis meses, Aomine lo llevó a un hotel del amor en el cual había preparado cosas muy cursis, desde una cena en el balcón de la habitación a la luz de la luna hasta pétalos de rosa en la cama. Kise se enamoró de nuevo del moreno al verlo con el rostro sonrojado diciéndole que si le permitía hacerle el amor. Por supuesto que esa noche no durmieron ni un minuto... lo hicieron de todas las formas posibles, demostrándose el gran amor que se tenían el uno al otro.
Sería mentira decir que nunca hubo peleas e inseguridades por parte de ambos. Kise en ocasiones pensaba que quizá Aomine estaba con él solo porque no pudo tener al peliceleste y eso lo deprimía. El moreno siempre se encargó de disipar sus dudas con acciones y palabras que solo le había dicho a él, comportándose de una manera tan vergonzosa solo porque lo amaba.
Por su lado, estaban Daiki y sus celos. Kise siempre se enojaba con él por esa razón. Que su novio lo siguiera o le prohibiera salir con amigos solo porque pensaba que tenían "malas intenciones" con él no era algo que iba a permitir.
Flash Back
-No me puede prohibir cosas como esas Aomine, entiéndelo de una vez
- ¡No me gusta que te reúnas con esos hombres ¡ellos podrían hacerte algo idiota!
- Eres mi novio, no mi padre, así que solo te lo diré una vez ¡Te amo pero no haré lo que tú quieras!
-Tsk...- el moreno abrazó fuertemente al rubio- ¡maldición! Yo te amo, por eso no soporto verte con otros tipos, perdóname por ser tan estúpidamente celoso
-No deberías serlo- Kise tomó con sus manos el rostro de su novio- ¿no confías en mí?
-Sí, claro que lo hago, pero...
-Shhh...- colocó un dedo sobre los labios de Daiki- no seas inseguro, en todo este tiempo ¿no te he demostrado que no existe otra persona más que tú en mi corazón y mente? Baka... Eres mi único amor
-Tsk... no seas tan malditamente lindo idiota- el peliazul con el rostro sumamente sonrojado tomó de la cintura al rubio y lo atrajo hacia él para besarlo dulcemente, haciendo que Kise rodeara su cuello con sus brazos.
-Te ves adorable, Aominecchi- el modelo sonrió y rozó su nariz junto a la del moreno
-Tú lo eres más- se separó un poco de su novio y tomó una de sus manos – escucha, trataré de controlar mis celos, no volveré a exigirte nada ¿me perdonas?
-Solo exígeme atención, al igual que lo hago yo cuando me abandonas al estar ocupado- Kise sonrió dulcemente y besó al moreno- Mi Daiki
-¿Te gusta provocarme verdad?- Aomine apretó el trasero del modelo y se acercó aún más a él
-¿Yo?- Kise se hizo el desentendido- tú eres el pervertido
-¿Ah sí?- el moreno se acercó hacia el oído del rubio y susurró- ¿Quieres descubrir lo que este pervertido puede hacerte?
-mmm...- gimió el modelo- me gustaría averiguarlo
Así los dos se dirigieron a la habitación que compartían desde su sétimo mes de novios. Sí, ellos habían decidido vivir juntos y a pesar de que pareciera que eran muy distintos, se acoplaban perfectamente.
Fin del Flash Back
En fin... tras cumplir un año de pareja y terminar sus carreras en la Universidad, cada uno decidió comenzar los planes que se habían trazado. Kise estaba en proyecto para fundar una compañía de modelaje y Aomine logró conseguir trabajo en una financiera como jefe de gestión.
Todo iba de maravilla en su relación, sin duda el darse la oportunidad para poder amarse como ahora lo hacían había sido lo mejor que les pudo pasar.
Por otro lado, así como ellos eran muy felices en su relación, sus amigos también se encontraban en etapas muy hermosas junto a sus respectivas parejas.
Midorima y Takao trabajaban juntos y tenían planes de boda. Akashi y Furihata se mudaron a otro país, pero siempre regresaban a Japón para poder visitarlos. Mitobe y Koganei habían adoptado un bebe y lo criaban con todo el amor que podían, sin lugar a duda Mitobe era un excelente padre, su comida era deliciosa y el chico neko, una adorable mamá. Murasakibara y Tatsuya ya se habían casado. Ninguno olvidaría jamás la boda excéntrica y llena de dulces que había sido. Kiyoshi y Hyuga se habían mudado juntos, un gran pasó al saber la personalidad del excapitán de Seirin. Kagami y Kuroko... esos dos eran los responsables de que estuvieran en Nueva York en ese momento.
El tigre y su sombra apenas terminaron la universidad se mudaron a América aunque siempre mandaban postales y los visitaban muy seguido.
Todos sus amigos se sintieron muy felices cuando en una de sus tantos viajes a Japón la pareja llegó con invitaciones para su boda. Kise se emocionó mucho al imaginarse a Kuroko con un vestido blanco de novia, definitivamente se vería hermoso.
Pasaron unas semanas y el día tan esperado había llegado. Por supuesto, todos sus amigos cercanos habían viajado para acompañarlos en esa fecha tan especial. Aomine y el rubio habían rentado una suite en un hotel cercano a la iglesia donde se llevaría a cabo la ceremonia. Los demás habían hecho algo parecido, aunque por lo que se sabía Akashi había rentado un hotel entero... bien lo decían, el que podía... podía.
-Estoy muy feliz por Kurokocchi, sé que será muy feliz formando una familia con Kagamicchi- Kise sonrió mirando por la ventana del auto que los llevaba hacia la iglesia a él y a su novio. Por lo que su amigo peliceleste le había contado, Kagami y él habían decidido que luego de un año de casados adoptarían un hijo. Tetsuya quería criar junto al grandote a un bebé y darle todo el amor que pudiese.
-Sí, aunque sea Bakagami... sé qué hará muy feliz a Tetsu
El rubio observó la expresión en los ojos de su pareja y sintió su corazón estrujarse. Había nostalgia y algo más que no pudo descifrar. Las dudas que antes lo habían agobiado lo golpearon de pronto y trató de calmarse como pudo. No debía dudar de Aomine, él le había demostrado desde que estaban juntos que lo amaba; todo lo que habían vivido no había sido mentira así que tenía que dejar de pensar tonterías. Negó con su cabeza para sí y se recostó sobre el hombro del moreno. Aomine lo recibió gustoso y acarició sus cabellos. Gestos como ese eran lo que le hacían pensar que su novio era la persona más tierna en el mundo aunque no lo demostrase a otros.
....
....
-Acepto
-Kuroko Tetsuya, acepta a Kagami Taiga como su esposo, jura serle fiel en la salud y en la enfermedad así como en la riqueza y en la pobreza, hasta que la muerte los separe
-Sí, acepto
Los declaro aquí y ahora esposos, pueden unir su unión con un beso.
Kagami y Kuroko unieron sus labios dulcemente para luego escuchar los aplausos y felicitaciones de todos sus amigos y familiares. Estaban de lo más felices ¡Ese día al fin habían cumplido su deseo de unir sus vidas para siempre!
Pasaron algunas horas luego de la ceremonia y todos se hallaban disfrutando del banquete en la recepción de un hotel muy elegante.
-Kurokocchi- Kise hizo un puchero- quería verte con vestido, no es justo- el rubio recriminaba el hermoso traje blanco que Tetsuya había usado en su boda- aunque te veías hermoso de todas formas
-Kise-kun, te dije que no usaría un vestido
-Lo sé, pero...
-Ya Kise, te prometo que yo si lo usaré- Takao abrazó al rubio por el cuello y le sonrió
-Te verás hermoso, Takaocchi
-También lo creo
-Será una sorpresa para Shin-chan, así que shhh- el pelinegro colocó su dedo índice sobre su boca y guiñó uno de sus ojos
-Entendemos- respondieron los otros dos al unísono
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-Seijuro, ¿porque estás tan pensativo?- preguntó un chico castaño mientras trataba de adivinar que pasaba por la mente de su novio
-En sí deberíamos casarnos en un crucero o en una isla tropical
-¡¿Q-Qué?! P-Pero si tú no...
-Es obvio que es lo que más anhelo, tonto, te lo pediré después apropiadamente- el pelirrojo se acercó a Furihata y le robó un dulce beso
...
...
-Mitobe dice que si sabes cuándo será masomenos la fecha de tu boda, Midorima-kun
-mmm... dentro de un par de meses quizá, aún no lo he hablado con Takao
-Entiendo– el chico cara de gato tomó un sorbo de champan
-¿Ustedes no piensan casarse en un futuro, Teppei?
-Claro que sí, aunque aún no se lo he propuesto a Hyuga ¿nee?- Kiyoshi miró a su pareja sonriente
-Tsk, no lo haré
-Pero sí ni siquiera te lo he propuesto aún, Hyuga- el castaño hizo un puchero
-¡Eso te pasa por demorarte tanto, idiota!
-¡¿Ehh?!
-Tan solo pídeselo con un dulce y seguro que acepta, Kiyoshi-chin
-¿Un dulce?
-Así se lo pedí a Muro-chin y él aceptó, es más, después tuvimos una buena sesión de...
-¡Atsushi!
-Está bien, me callo, Muro-chin
...
...
-Bakagami ¿puedo hablar contigo un momento?
El pelirrojo al ver la expresión del moreno supo que había llegado el momento. Él siempre se había dado cuenta de todo desde el inicio. Por lo mismo, se sorprendió cuando el moreno y Kise anunciaron su relación.
-Claro, Ahomine- devolvió la mirada seria y se alejó de sus familiares con una disculpa para luego ir junto al peliazul hacia un lugar algo apartado donde pudieran conversar.
Ya cuando se relajaron un poco el primero en comenzar a hablar fue el moreno.
-Por tu expresión puedo decir que sabes todo ¿no?
-Así es, pudo pasar desapercibido para Kuroko pero no para mí... nunca ignoraría un rival
-Jaja... lo dices como si aún compitieses conmigo por el amor de Tetsu
-Tienes razón, hoy se puede decir que Kuroko y yo por fin nos unimos por completo, no hay nada que puedas hacer, nos amamos y eso no podrás cambiarlo
-Te sigues equivocando, Kagami
-¿En qué lo hago?
-Yo no estoy aquí para decirte un "ganaste" idiota, solo un "más te vale hacerlo feliz"
-No tengas duda de que lo haré, amo a Kuroko más que a mi vida, si algún día le hago daño puedes matarme si quieres
-Me alegra oír eso, aunque creo que Akashi sería el más indicado para hacerlo, sus métodos están en otro nivel
-Jaja... es verdad
-Bien, también no quiero que sigas teniendo una idea equivocada grandulón
-...
-Tú piensas que aún amo a Tetsu y solo estoy con Kise porque me siento bien y amado a su lado ¿cierto?
- Seré sincero y te diré que sí
-No puedes imaginarte cuanto pude amar a Tetsu, Bakagami, ni sabes cuánto sufrí cuando me enteré de que era tu novio. Pensé que jamás podría recuperarme y dejarlo ir a pesar de que sabía que él ya tenía a alguien. Te odie mucho, hubo tantas veces que te maté en mi memoria que no podría contarlas jaja - rio divertido- había tocado fondo.
-Entonces...
-Entonces, Kise llegó a mi vida. Primero fuimos amigos, él hizo que me olvidara poco a poco del dolor que sentía por amar a alguien que amaba a otro, él me compuso, él llenó de felicidad mi vida... y es de él de quién ahora estoy perdidamente enamorado. Es difícil de creer, lo sé, pero hoy me di cuenta de que todo lo que mi mente y corazón me repetían a diario no eran una mentira. Cuando Tetsu te dio el sí, no sentí dolor ni tristeza, tan solo un profundo sentimiento de paz al saber que él quedaba en buenas manos y era feliz. Nostalgia del amor que un día le tuve y ya no siento más. Alegría por saber que todo este tiempo las palabras de amor que le dediqué a Ryota no fueron mentira ¿me comprendes?
-Tsk... Parece que lo sentimental se te ha pegado de Kise
-Creo que sí- sonrió
-Te creo- habló Kagami- me alegra saberlo, estimo mucho a Kise y me dolía pensar que solo lo utilizabas
-Puedes matarme si algún día hiciera algo como eso
-Lo tendré muy en cuenta
-Bueno, es hora de que regresemos, sean muy felices- Aomine tendió su mano
-Tú igual, Kise es alguien muy lindo y especial- Kagami hizo lo mismo y tras un apretón de manos fueron junto a los demás
...
...
Luego de unas horas más, la fiesta se dio por finalizada. Kise y Aomine se dirigieron a su hotel y en el camino no pudieron evitar reírse al recordar lo que había sucedido.
Enumerando, Kise y Takao se habían jaloneado el ramo que Kuroko había tirado, al final este salió volando y cayó en manos de Hyuga, quien luego de la mirada de perrito que Kiyoshi le dedicó, solo pudo sonrojarse y abrazar el ramo como indicándole a su novio que aceptaba ser su esposo.
Midorima y Himuro habían estado bebiendo mientras conversaban, cuando no supieron cómo Murasakibara tomó una copa de champan y se la bebió. Cabe resaltar que tuvieron que detener entre Midorima y Kiyoshi al grandulón cuando este quiso abalanzarse contra los adornos del hotel, según él, porque se veían deliciosos, definitivamente estaba alucinando.
Kagami y Kuroko se perdieron un rato durante la fiesta, seguro a darse mimos como cualquier pareja, pero al regresar encontraron a Akashi sentado junto a Mitobe mientras le enseñaba un par de tijeras muy filudas. Los ahora esposos pensaron lo peor y fueron inmediatamente a detener a Akashi de "cometer un asesinato" pero se llevaron la sorpresa de que Mitobe le había pedido un consejo al pelirrojo acerca de Koganei (por increíble que pareciera) ya que este estaba siendo acosado en su empleo. Akashi al escucharlo inmediatamente sacó sus tijeras (las llevaba a donde fuese) y le comenzó a explicar que solo debía amenazar al maldecido de arrancarle las bolas con estas y vería cómo jamás volvería a molestar a su pareja.
Kagami y Kuroko solo se rieron, aunque lo que no sabía el peliceleste era que el grandote ya había anotado lo dicho por Akashi para cualquier emergencia.
...
...
-¿Fue muy divertido verdad Kise?
-Sí, en verdad fue algo inolvidable
-¿Sucede algo? En el camino de regreso te noté pensativo- el moreno estaba preocupado
-Ehh... no es nada, Aominecchi
Tomó el rostro de su novio y obligó a este mirarlo, acarició sus mejillas y le dio un beso en la punta de la nariz.
-No me engañas ni un poco ¿me dirás?
-Yo- hizo una larga pausa- vi la expresión que tenías cuando nos dirigíamos a la boda de Kurokocchi y Kagamicchi, me sentí inseguro al instante de que tú... de que te sintieras triste porque él... En pocas palabras que aún lo amaras
-Que otros duden de lo que siento por ti me vale una mierda, pero el que tú lo hagas, me hiere en verdad, Kise
Aomine se separó del rubio y lo miró dolido, sentía que comenzaría a llorar en cualquier momento y luchaba por tratar de evitarlo.
-¿Aominecchi?- verlo de esa manera hizo que el modelo se sintiera la peor persona del mundo por dudar de él- perdóname ¡lo siento de verdad!- se lanzó hacia su novio abrazándolo fuertemente- soy un idiota por dudar de ti solo por una expresión tuya, soy de lo peor
-No digas eso- Daiki separó un poco a Kise de su cuerpo- me basta con que digas que eres un idiota
-A-Aomin...
El moreno tomó los labios de Kise y los dos se fundieron en un apasionado ósculo. La unión duró prolongados minutos mientras se abrazaban fuertemente y transmitían a través de ese gesto todo el amor que se tenían.
-Al igual que como le dije a Kagami, cuando Tetsu dio el sí, no sentí dolor ni nada parecido, solo un sentimiento de paz al saber que iba a ser feliz junto a la persona que amaba. Un poco de nostalgia del amor que un día le tuve y que obviamente ya no siento porque la persona que amo ahora por sobre todo eres tú
-Te creo, juro que no volveré a dudar de ti, lo siento de verdad- los ojos de Kise se llenaron de lágrimas, las que por supuesto fueron limpiadas por el moreno.
-Ya pasó, olvidémoslo ¿sí?- Daiki besó castamente los labios del rubio- Te amo
-Yo también te amo
Un beso más lujurioso dio inicio. Sus lenguas danzaban como una mientras se acariciaban mutuamente. Los sacos y corbatas desaparecieron en un instante, y es que cuando sus cuerpos pedían estar más cerca las ropas eran el mayor estorbo que pudiera existir.
-A-Aominecchi
-Vamos a estrenar la bañera, Kise, quiero todo de ti esta noche
-También yo, te necesito... nngh- continuo besando a su novio mientras se dejaba arrastrar por este al baño gigante que había en la suite
...
...
Ocho años después...
-¡Oto-chan!- un niño de cabellos castaños cruzaba los brazos haciendo un puchero- Oto-san no quiere llevarme a su trabajo
-Kazuki-chan, no debes enojarte con Oto-san- Kise miraba el ceño fruncido de su esposo mientras sonreía divertido- y sabes que no debes pelear con él
-Pero no quiere llevarme
-Kazuki-chan- Kise se puso de cuclillas y acarició el cabello de su hijo- sabes que no se puede, si por tu padre fuera te llevaría siempre ¿entiendes?
-... Sí, perdón Oto-chan
-No es conmigo con quién tienes que disculparte por haberle dado un puntapié ¿o sí?
-Ehhh- el niño se acercó un poco a Daiki, quien se encontraba con el ceño fruncido haciendo una expresión de enfado- .... mmmm... ¡Oto-san feo!
Kise se sorprendió con lo dicho por su hijo. No pudo evitar reír al notar la cara de su esposo, quien ahora miraba reprobatoriamente a Kazuki.
-Tú, como te atreves a decirle eso a tu padre pequeño renacuajo
-¡Es que tu cara da miedo!
-¡Basta los dos! Dejen de comportarse así... Aomine- Kise miró serio a su esposo- Kazuki- miró serio a su hijo- hagan las pases ya- se cruzó de brazos y esperó
-P-Perdón, Oto-san, es solo que quería ir contigo, quería conocer el lugar donde trabaja Oto-san- los ojos del niño de cinco años se llenaron de lágrimas
-Tsk... no llores Kazuki- Aomine corrió con su hijo y lo abrazó dulcemente- prometo un día llevarte, ya veré como lo hago ¿ok? pero no llores
-S-Sí... te quiero, Oto-san- el niño abrazó fuertemente a Daiki
-Igual yo- Aomine correspondió el gesto y besó la frente del menor
"Son tan lindos"- Kise tomaba fotografías sin que su esposo se diese cuenta, no podía desaprovechar esa oportunidad
...
...
-No puede ser, sin duda mataré al hijo de Midorima, Kise
-Cálmate Aominecchi, piensa en los sentimientos de Kazuki-chan
-Tsk... ¡estaba sobre él en el sofá! De solo recordarlo quiero cortarlo en pedazos, le pediré sus tijeras a Akashi
-Ya hablé con él, Daiki- Kise lo miró con una sonrisa cálida- no tienes de que preocuparte ahora, solo acepta que esos dos se quieren
-Pero solo tiene dieciséis años, me rehúso a...
El puchero adorable de su pareja lo hizo flaquear en su decisión, no podía decirle no a esa expresión tan hermosa
-No puedo negarte nada, pero te advierto que los vigilaré bien de cerca
-Sí- Kise sonrió ampliamente
Aomine tomó su boca en un beso, introdujo su lengua y saboreó cada rincón de esta con la suya.
-nngh... A-Aominecchi
-Eres tan adorable, Kise
-No seas mentiroso ¿cómo un hombre de cuarenta años puede parecerte lindo? ¡Estoy viejo y feo!- Ryota se giró y se cruzó de brazos
-Claro que no, además ¿Qué yo no tengo la misma edad?- Aomine abrazó por la espalda al rubio y luego repartió besos delicados por su cuello
-Sí nngh... p-pero
-Kise- el moreno giró a su esposo y lo obligó a mirarlo- para mí eres la persona más hermosa del universo, pareciese que los casi veinte años que llevamos juntos no hubiesen pasado, sigues siendo igual de lindo y adorable
-¿En serio?
-Sí
Comenzaron un largo beso y poco a poco fueron cayendo sobre la cama de su habitación.
-Haré que gimas mi nombre, Kise
-Daikicchi...
-Te amo, Kise
-También te amo
Y así se fundieron como miles de veces lo habían hecho, en cuerpo y alma, y es que a pesar de los años el amor que se tenían se mantenía intacto, si eso no era amor verdadero, no sabrían ponerle nombre. Solo estaban seguros que no podrían concebir la vida sin el otro y que por supuesto, a pesar de las palabras dichas cuando se casaron... ni la misma muerte podría separarlos.
"El amor es la apoteosis del cuerpo y alma, triunfando sobre la muerte, sobre la soledad, en el exilio de la tierra."
...