Harry al despertar se dio cuenta que se sentia mal, por algun lado tenia que explotar, todo lo que estaban pasando con Hermione era demasiado para asimilar.
-Buenos dias amo Potter, el amo Draco lo esta esperando abajo, ha dicho que hace 25 minutos esta esperando, quiere saber si usted ira o se va el solo.
-Dunky me has asustado, dile que en 5 minutos bajo-Le dijo el morocho a una elfina muy bonita que habia conocido la noche anterior cuando a la madrugada bajò por algo dulce.
-Disculpe amo, enseguida le digo.-Con un plop desaparecio.
Harry miro la hora en su reloj Muggle y no podia creer que habia pasado el mediodia.
-Harry, ¿puedo entrar?-Dijo la castaña al otro lado de la puerta, cuando Harry le dijo que pasara ella entro.
-Por Merlin, luces horrible, y eso que has dormido bastante.
-Si estabas despierta ¿por que rayos no me has despertado?
-Es que estuve con la señora Malfoy toda la mañana hablando y recorriendo la mansion, realmente es impresionante es muy grande, y hay cuartos que tienen sus historias, claramente, algunas muy oscuras...
-Mione me duele la cabeza, por cierto, me voy con Malfoy al Callejon Diagon, ¿quieres ir?
-No, paso. Con la señora Malfoy iremos a los jardines a ver si crecen bien todas las plantas, ademas no tengo ganas de encontrarme con nadie.
Harry asintio y salio de la habitacion dejandola a Hermione, y bajo apresuradamente las escaleras.
-Potter me estaba haciendo viejo esperando por ti.
-Disculpame Malfoy, es que me he dormido, no se porque estos dias estoy durmiendo muchisimo.
-¿Te encuentras bien? Tienes cara de que vas a vomitar babosas en cualquier momento.
Harry se sentia muy mal, pero ya le habia dicho al rubio que iria con el, no eran amigos, no le debia nada, pero sentia la necesidad de ir con el otro.
-Si, vamos.
-No iremos con la pocion multijugos.
-¿Que? y ¿si nos ven?
-Mis padres han dicho que es mejor, asi saben que no estas solo, mas si volveremos al colegio.
-Umm esta bien.
Dicho esto se fueron con los polvos flu.
Al llegar se dirigieron al banco, Harry tenia que ir a sacar galeones. Despues de eso se dirigian a la Heladeria.
-Ese es Harry Potter con Draco Malfoy.-Escucharon los dos y se giraron y habia un grupo de chicas que rondaban los 16 años.
Asi, muchos murmullos, cuando ya habian comprado suficiente ropa para Harry y el rubio libros y pequeñas cosas que el queria, estaban por entrar a Florean Fortescue y Harry empezo a ver todo nublado.
-Malfoy...-No llego a pedirle ayuda al rubio cuando este cayo al suelo, haciendo que le sangre el lado contrario a la cicatriz.
-Potter, Potter reacciona.-Decia el rubio mientras lo intentaba levantar.
-Mhhmm, me siento mal Draco, creo que tengo fiebre.-Al tocar la frente del morocho, Draco se dio cuenta que estaba hirviendo.
-Vamos Potter, intenta levantarte, te llevare a la mansion.
Sacando una cadena con dos anillos del bolsillo, el rubio se pùso uno y le puso uno a Harry, pasado menos de 1 minuto estaban en la mansion.
-HARRY, ¿QUE HA PASADO?.-Decia la castaña acercandose mientras el rubio recostaba a Harry en uno de los sillones gigantes que tenian en la sala de estar.
-No se, pero tiene temperatura, ¿Donde esta mi madre?
-Fue a la biblioteca a buscar un libro, ve, yo me quedo con el.
El rubio salio corriendo, hacia tanto tiempo no corria por aquellos pasillos enormes de la mansion, se sentia como cuando jugaba con Pansy y Blaise, pero esto era otra situacion muy diferente, esos recuerdos le causaban alegria, esto una angustia que no sabia a que se debia.
-Madre, Potter se ha desmayado en el callejon, nos trasladamos aqui, pero tiene mucha fiebre, Esta con Granger en la sala principal.
-Draco tranquilo, vamos y cuentame que ha pasado.
Mientras iban a donde estaban Harry y Hermione, Draco le iba contando.
-Todo iba bien, ibamos bromeando de las cosas que decian la gente, que Potter se habia pasado al lado oscuro y cosas asi. Y cuando me di cuenta estaba en el piso con la frente con sangre.
La madre sonrio, no por la situacion, sino porque nunca habia visto asi de preocupado a su hijo, sospechaba que acojar a Harry y Hermione, con ellos habia sido una buena idea.
-Calmate hijo, estara bien.
Despues de 1 hora Harry se desperto y se encontro con Hermione agarrando su mano, Los Malfoy sentados en un sofa que estaba al frente mirandolo, y el profesor Snape con un libro en la mano leyendo.
-Auch me duele la cabeza, ¿que ha pasado?
-Señor Potter, le aconsejaria no hablar y descansar, pero como siempre, hara lo que usted quiera, le explico, ha sufrido un desmayo, provocado por lo que dicen los muggles, un pico de stress, ya le deje 3 pociones y 1 que es antigripe, bebalas y se encontrara bien, adios.-Dijo el profesor guardando su libro y retirandose.
-¿Por que siempre es tan raro?
-No lo se, Harry, me alegra que estes bien.
-Bueno Potter, le ha dado un buen susto a mi hijo, pero esta perdonado, si ustedes quieren pueden cenar aqui, ordenare a los elfos que le traigan la cena en bandeja. Vamos Cissy.-Decia un Lucius Malfoy con voz sincera, cosa que nunca habia escuchado.
-Enseguida voy padre...
-No, hijo, cena aqui con ellos, por hoy pueden hacerlo aca.
Cuando los mayores se retiraron, Draco se acerco un poco mas y se sento en un sofa al lado de donde estaban los otros.
-¿Como estas Potter?
-Bien Malfoy, ya me siento mejor, gracias, Mione ¿podrias traerme la tunica que tenia hoy puesta?
-Si, eh Draco, ¿Donde la has dejado?-Decia la castaña naturalmente, como que siempre habia llamado al rubio por su nombre
El rubio no lo tomo mal, le contesto lo mejor que pudo.
-En su habitacion, puedes mandar a un elfo a buscarla.
-No, no es necesario si puedo hacerlo yo.-Dijo Hermione saliendo de la sala dejando a los dos solos.
-No le gusta que los elfos sean nuestros ''sirvientes'', dice que tienen que ser libres y eso.
-Debe ser porque no esta acostumbrada, estupido cara rajada me hubieras dicho que te sentias mal.
-Pero Dunky me habia dicho que hacia tiempo estabas esperandome, y como no queria cancelar y que esta tregua que hemos hecho se arruine, y volvamos a odiarnos, preferi ir...
-Nunca te odie Potter, parecia, lo se. Pero nunca llegue a odiarte, ni a ti ni a Granger, a la comadreja si, aun sigo sin creer que le llamen Madriguera a su casa.-Dijo el rubio comenzando a reir.
Harry sonrio, aunque estaba agradecido con la familia Malfoy, extrañaba la madriguera.
-Ya suelta Potter, ha pasado poco tiempo, pero Padre siempre dice que debemos soltar rapido, aquello que nos hace mal, y quedarnos con los que nos siembra buen presentimiento.
-Wow, nunca crei que Draco Malfoy fuera una persona positiva.
El rubio lo miro mal y le lanzo un almohadon que tenia al lado suyo, los reflejos buenos de Harry hicieron que este lo pueda agarrar con facilidad.
-Draco, Harry recien se està recuperando, no deberian arrojarse nada.-Decia Narcissa entrando a la sala de estar.
Los dos quedaron sonrojados hasta que Harry hablò.
-Disculpe señora Malfoy, Draco me ha dicho que es posible que volvamos al colegio, ¿es eso cierto?
Draco observò al pelinegro, era la primera vez que lo llamaba por su nombre.
-Eso estamos decidiendo con Lucius, todavia estàs bajo tutela de tus tios, mañana iremos y les pedirè que me firmen un papel que Lucius ha conseguido, es como un permiso, para que nosotros nos hagamos cargo de ti en el mundo magico.
-Mis tios no aceptaràn, ellos detestan la magia, y todo lo que eso lleva.
-Potter, mi madre podrà, ademas, ¿como pueden odiar la magia si son familia del niño que viviò?
-Bueno, nunca tuve una buena relaciòn con ellos, por eso casi siempre me quedaba en el castillo o iba con los Weasleys.
Justo volviò Hermione y fue a sentarse al lado de Harry preguntandole como estaba. Empezaron a cenar, cuando Narcissa se fue y vinieron los elfos.
Draco notò como Hermione acariciaba el pelo de Harry, y quedo mirandolos fijamente.
-Amo Draco ha llegado una carta para usted.
-Dejala en mi habitacion.-Le respondio Draco al elfo.
Comieron en silencio hasta que Hermione hablò, diciendo cosas que le gustaba y cosas que odiaba de Hogwarts. Los 3 se encontraron charlando sin ningun resentimiento sobre las cosas que habia pasado, habian dejado claro que habian sido cosas inmaduras de niños, ahora habian crecido y estaba por empezar una guerra en el mundo magico, que quitaba importancia a pequeñas peleas que podrian haber llegado a tener. Draco se despidio y se fue.
Al subir a su habitaciòn se sentò en su cama y se dispuso a leer la carta de Blaise, lo sabia porque era su letra.
''Draco, te escribo para decirte que la proxima semana vendras conmigo a mi mansion, pasare por ti el Lunes. Para que tus jodidos padres no molesten, diles que iremos con Pansy y Crabble, a la cabaña del tio de Goyle.
Te amo y te extraño, Blaise.''
Vaya, esta carta era muy corta, tendria que convencer a sus padres de que no hagan ninguna locura al ver a Blaise pasar por el.
-----------------------------5 DIAS DESPUES------------------------------------
-Hoy es sabado, podriamos ir a Londres Muggle.-Decia Harry comiendo una tostada.
-Si van, ten cuidado de que no se desmaye.-Le dijo Draco a Hermione.
-Ja, que chistoso, maldito rubio oxigenado.
-Rubio ¿que?-Decia Draco curioso, mas haya de que Harry lo deberia estar insultando queria saber que era.
Harry y Hermione reian.
-Draco, no le hagas caso, en el mundo muggle, la gente que quiere tener un color de cabello parecido al tuyo, usa un liquido que se llama, agua oxigenada.
Aunque suene raro, habia costado poco tiempo que entre estos 3 surga una quìmica que ninguno se lo creìa.
-Pero aunque sea les debe dejar pelo lacio y que se pueda peinar, no como su pelo.-Le decia Draco a Hermione, mientras reia.
-Podrian tener esta charla cuando este Severus, el les gana en cabello extraño.-Dijo Narcissa entrando a donde estaban los jovenes desayunando.
-Buenos dias señora Malfoy.-Dijeron Harry y Hermione al unisono y ella le sonrio a ambos.
-Madre, ¿como has dormido?
-Bien, ¿Ustedes?
-Muy bien, justo nos decia Harry para irnos a Londres Muggle.
Draco la mirò extrañado, claramente la invitacion era solo para ella, el no irìa nunca.
-Exacto, volveriamos antes de cenar, le avisamos por si no nos encuentra.-Dijo Harry, le parecia correcto avisarle a quien era dueño de la casa, que se ausentarian unas horas.
-Draco, ¿tu iras?
-No, tengo que empezar a empacar mis cosas, para irme...
-Puedes hacerlo cuando volvemos, ademas los elfos te podrian ayudar.-Dijo Harry tratando de convencer al rubio.
-O nosotros, y dejar que los elfos descansen.-Contestaba una indignada Hermione.
-Està bien, irè pero solo porque necesito salir un poco de la mansion.
Narcissa sonreìa, no entendia porque decian que habia rivalidad entre ellos en el colegio, si parecia que se estaban empezando a llevar excelente.
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-¿Siempre tienes que tardar tanto Potter?.-Le decia el rubio que llevaba esperando como 20 minutos con la castaña.
-Bueno es que no encontraba mi llave de la boveda.
-Ya es pasado mediodia, podriamos ir a comer a ese lugar donde ibamos siempre Harry.
-Despues deberiamos ir por helado.
-No es mala idea Malfoy.-Contesto el morocho, antes de que los 3 toquen el traslador al callejon Diagon.
Primero fueron por galeones, los suficientes como para comprar ropa para 10 personas, Harry nunca habia sido de gastar mucho, pero ahora que habia comenzado una vida nueva, queria empezar comprandose ropa, mas que la del otro dia, y que mejor que hacerlo en Londres Muggle.
Al salir del banco iban los 3 hablando de lo que les gustaria comprarse, habian convencido al rubio de ir a un lugar donde habia toda clase de cosas para comprar, pero mas que nada ropa.
Estaban por entrar a un callejon donde usarian el otro traslador hacia Londres Muggle, cuando escucharon aquellas voces. Hermione se puso palida, Harry se tensò y Draco agarro su varita y estaba listo para sacarla en cualquier momento.
-Harry, Hermione. ¿Malfoy?
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